-ESTO ES UN TRABAJO DE FICCIÓN. CUALQUIER SEMEJANZA A LA PERSONALIDAD, ACTITUD O SITUACIÓN DE ALGUNA PERSONA ACTUAL, SI ESTÁ VIVA O MUERTA, ES MERA COINCIDENCIA-
*Hola a todos, hoy les traigo un fic que apenas realice (lo culminé hace dos dias). Tal vez no sea la quinta maravilla del mundo, pero di mi mayor esfuerzo y dedicación para crearlo. La verdad que tiene muchísimo tiempo en que no elaboro uno (es decir, casi un año, posterior al último que publique en este sitio) y como que si se pierde un poquito la práctica. Por ahora, los dejo, ya que me quiero tomar un periodo de descanso y ausentarme un rato de este sitio por, ya saben, cuestiones laborales (necesito vacaciones), porque escolares, pffff, ahora tengo problemas con los trámites administrativos (¿Por qué dios, por qué?), pero de que ya culminé todo y estoy como la Reina Elsa: "Libre soy", claro que sí. Sin más, los dejo para que se deleiten con mi escrito. Como dije, no es el mejor, tal vez tenga errores y muchísimas incongruencias, pero, hice mi mayor esfuerzo y espero puedan apreciarlo, por favor. Muchas gracias. Saludos a todos. *
-Un año después del Campeonato Mundial de Beyblade y posteriores sucesos ocurridos, ganando el equipo G-Revolution-
Era una noche fresca de primavera, en la Ciudad de Verona, al norte de Italia, en Europa, en el edificio departamental llamado Giulietta. Me encontraba en mi cuarto, acostada en mi cama, boca arriba, descalza, escuchaba música en mi disman con mis audífonos colocados en mis oídos durante altas horas de la noche, simplemente por pensar en ti, solamente en ti.
Vestida con mi conjunto de pijama de color amarillo pastel, que consistía en una camiseta y short, peinada con una trenza para que mí cabello color malva, no se estropeara.
En verdad siempre quise saber algo más de ti, pero… solo lo sabía mientras estabas participando en el campeonato, ya que lo transmitían en los medios de comunicación, pero de tu vida actual, no sabía nada. Lo único personal que supe de ti es que te fuiste a Francia a estudiar la secundaria y que al mismo tiempo entrenabas para entrar al campeonato local de beyblade, pero eso fue hace mucho tiempo, cuando fui una niña.
Al darme la vuelta y, acostarme de lado, colocando mi cabeza en la almohada, recordaba tu cabello verde esmeralda y tus hermosos ojos grandes color gris.
En serio que no había día en que dejara de hacerlo, estaba profundamente enamorada de ti.
Cuando te vi finalmente en la TV, que lograste entrar al campeonato mundial de beyblade el año pasado, ganando el nacional a lado de tu equipo llamado "El Batallón Barthez", supe que tu cumpliste tu sueño más anhelado, pese a que decaíste por 2 años en el campeonato regional de beyblade.
Eso me hizo darme cuenta que aun continuaba tu promesa en pie, aquella que me hiciste en tu presencia… que nos hicimos cuando éramos unos niños: yo tenía 10 años y tú, en ese tiempo, tenías 12.
El mundo de los sueños me invadió por completo, recordando una pequeña memoria en este hermoso Morfeo.
Estábamos en la primaria, en la hora del recreo, varios niños se divertían jugando beyblade en el patio de la escuela, esto, hacía que sus vínculos con sus amistades fueran únicos y especiales, convirtiéndose en lazos eternos y amores puros, y Claude, no quería ser la excepción conmigo.
Un día, me mostró su beyblade verde oscuro, y me explicaba en qué consistía ese juego:
Claude (feliz):- … Cada uno lanza su Beyblade sobre un plato de batalla de forma cóncava. El objetivo del juego es derribar a tu rival, es decir, a la persona contraria, y sacar su Blade fuera del espacio que se compite.
Miró a Claude un poco confusa.
Stella (temerosa):- Pero no le encuentro sentido a nada de lo que me estás diciendo. ¿En serio tiene algo?
Claude (feliz):- Por supuesto que lo tiene, Stella, es muy fácil y lo entenderás rápido, no es complicado, ya verás que te gustara mucho practicar este hermoso y divertido deporte…
Suspiro tras llenarme de melancolía el recuerdo de aquel ayer.
Sacando de entre su sudadera, otro beyblade de color verde esmeralda, muy parecido al del color de su cabello, me lo presta para que juegue con él.
Claude (feliz):- ¿Estás lista?
Lo miro un tanto dudosa.
Stella (miedosa):- ¿No te hare daño, Claude?
Claude (sonriendo):- Para nada, Stella.
Le sonrío un poco y agarro el blade prestado, un tanto temerosa.
Claude me explico cómo debía lanzarlo. Me preparo y, sin pensarlo, al soltar nuestros lanzadores, ambos Blades salen súbitamente y caen al beyestadio. Al contacto, sacan muchas chispas de la poderosa fricción del metal de ambos artefactos.
Claude (enojado):- ¡Vamos, ataca!
Ambos Blades chocan aspas justo en el centro del plato de batalla, generando gran cantidad de chispas como fuegos artificiales.
Stella (nerviosa):- ¡Ah! ¿Qué le pasa a mi Blade, Claude? ¿Se está quemando? ¡Si! ¡Se está quemando! Le está saliendo mucho fuego.
Claude comienza a reír.
Claude (sonriendo):- No, no es fuego, es juego, es diversión.
Lo miro muy confundida al rostro.
Stella:- ¿Diversión? ¿Y desde cuando al fuego se le llama diversión?
Mi amigo ríe, ya que no comprendía el significado de sus palabras.
Claude (feliz):- No, Stella, el beyblade es un juego, el cual, debe ser tratado como tal, y siempre, hay que hacerlo y verle el lado divertido.
Claude me sonríe de forma linda. Confundida, le sonrió también y, tratando de concentrarme para entenderle a este asunto, hice que mi Blade saltara encima de él, con una fuerza increíble, tambaleándose, perdiendo un poco el equilibrio, eso le impresiono a mi amigo, muchísimo, pero como apenas estaba aprendiendo, no pude concentrarme lo suficiente, saliendo disparada fuera del plato de batalla.
Claude (feliz):- ¡Gane!
En ese momento, me asusté mucho que comencé a llorar. Claude se acerca a mi para consolarme. Me entrega en mis manos el blade que me prestó.
Claude (sonriendo):- ¡Vamos! ¡Hagámoslo de nuevo! ¡Esta vez, a lo mejor me ganas!
Stella (solloza):- ¿Estás seguro?
Claude (sonriendo):- La respuesta se dará cuando lo volvamos a intentar.
Al verme con ese rostro tan hermoso y puro, lleno de bondad e inocencia. Sentía que su aura me generaba paz y amor, como cual ángel de Dios protege al ente misericordioso.
Stella (sonriendo):- Esta bien.
Aquello que realizaba conmigo, hacia enamorarme más y más de él.
Realizando un segundo intento, los 2 blades caen en el beyestadio, persiguiéndose uno al otro, hasta que dan el primer choque de las aspas de combate en ambos ¡Era increíble! Estos artilugios se repelen hacia lados contrarios con cada embestida.
Stella (pensando):- Vamos, tú puedes
Pero duró pocos segundos. Claude, volvió a ganar, haciendo que su Blade se impulsara y me embistiera fuerte, volviendo a salir disparada fuera del plato.
Stella (llora):- ¡Es injusto! Ya es la segunda vez que me ganas y yo no he podido ganarte ni una sola vez. ¿Por qué?
Claude trata de calmarme, ya que la furia se apoderó de mi pequeño cuerpo.
Claude (sonriendo):- Tranquila, Stella, esto no es el fin del mundo. Debes seguir practicando, ser mejor y nunca dejarte caer en este deporte ¡Nunca darte por vencido! De eso se trata el beyblade, también el de convivir con tus seres amados.
Claude me agarra de ambas manos y me mira a los ojos, en ese instante, me sonrojo por la acción que tomó.
Stella (apenada):- Nunca dejarme derrotar…
Claude (sonriendo):- Y ser mejores siempre.
Le sonrío tiernamente, pero en mi ser, aún seguía insistiendo que debía ganarle.
Stella (mirada traviesa):- ¿Qué tal si descansamos un rato y lo volvemos a intentar?, esta vez si te voy a ganar.
Claude (sonriendo):- Esta bien…
Mi amigo revisaba su beyblade si tenía algún daño durante esa pequeña batalla, mientras que en mi caso, comencé a buscar en el piso 2 ramitas de árbol para incrustárselas a mi Blade y ganar así el encuentro.
Cuando se volvieron a lanzar nuestros Blades, el mío cayo en el centro del plato de batalla y cuando cayó el de Claude, este salió disparado, sin que mi Blade lo tocara.
Saltando de alegría, le dije que después de muchos intentos, logré derrotarlo.
Stella (feliz):- ¡Si! ¡Lo hice! ¡Lo hice! ¡Por fin te derroté!
A mi amigo se le hizo muy extraño todo eso, así que, deteniendo mi Blade con sus manos, logro notar la trampa que realice en el juego, el cual, eso le ocasiono mucha molestia.
Claude (enojado):- ¡Hiciste trampa!
Stella (molesta):- ¡No es cierto!
Claude (enojado):- ¡Que sí!
Stella (molesta):- ¡Que no!
Y le saque la lengua a mi amigo. Me enojé y le di la espalda, pero mi amigo me hizo reflexionar en la acción que cometí.
Claude (molesto):- ¡Stella! ¡Al hacer este acto, pierdes la confianza en ti misma y en todas tus capacidades para resolverlo! ¡Prométeme que nunca lo harás para ganar un encuentro!
Volteo a verlo muy desconfiada.
Stella (nerviosa):- ¿Me lo dices en serio?
Claude (serio):- Cómo el amigo que soy para ti ¡Sí! así que debes prometerlo.
Lo vuelvo a ver con un mirar desconfiado.
Stella (molesta):- ¿Y tú? Una vez que te gane… si es que te llego a ganar, ¿no realizaras trampa para derrotarme como venganza del acto que cometí?
Me mira sorprendido, pero entendió el mensaje que le quise transmitir.
Claude (sonríe):- ¡Entiendo! Una batalla pareja, sin trampas o cualquier otro truco para ganar. ¡Acepto!
Ilusionada, volteo a verlo de frente y, entrelazo mis manos, como un símbolo de esperanza.
Claude (sonriendo):- Prometo nunca hacer trampa para ganar una beybatalla. Siempre he sido muy sincero contigo.
Le sonrió tiernamente.
Stella (feliz):- Y yo, prometo que nunca hare trampa y cuando te vuelva a ver ¡Te ganaré! ...
Me cruzo de brazos y le digo de manera digna:
Stella (sonrisa triunfal): … solo que no me pidas que te entrene cuando tenga la victoria en mis manos.
Mi amigo ríe.
Claude (sonriendo):- ¿Entonces, no tendré ninguna posibilidad de derrotarte?
Stella (sonriendo):- Claro que no ¡Seré mucho más fuerte y mejor que tú!
Claude (sonriendo):- Esta bien, es una promesa.
Cerrando su puño, me alza su dedo meñique para cerrar la promesa. Confundida, no entiendo lo que hace.
Stella (mirada inocente):- ¿Qué es eso?
Claude (sonriendo) :- Esto que hago es una promesa para ti, con amor y afecto. Vamos, dame tu meñique para que también no rompas la tuya.
Viéndome ambas manos, cierro el puño y le muestro mi meñique. Claude se acerca para que ambos cerremos el pacto y sellar la promesa. Ambos nos miramos a los ojos y reímos, pero antes de separar nuestros dedos, en mi mente, también hice otra promesa ante él en forma secreta, que cuando seamos un poco más grandes, confesare mi amor por él, ya que me gustaba mucho como me instruía en el beyblade, aunque no le entendía mucho, pero, gracias a él, había aprendido muchas cosas, sobre todo que era muy tierno conmigo.
Claude (sonrisa sarcástica):- Yo sé que te voy a ganar cuando perfeccione mi forma de luchar con el Blade. ¡Te sacaré muy rápido del plato de batalla!
Stella (mirada inocente):- No si yo lo perfecciono primero. Cuando sepa beybatallar de verdad, igual te voy a sacar muy rápido.
Entregándole su beyblade verde esmeralda, me dijo que no se lo regresara, que era un regalo de la hermosa amistad que cultivamos por muchos años en la primaria, así que, quería verme que le ganara en el juego usando el mismo Blade que me presto.
Sonriendo, me aviento a sus brazos y lo abrazo aferradamente, él igual realiza lo mismo.
Stella (feliz):- Te quiero mucho, Claude.
Claude (feliz):- También yo.
Hasta que la luz del día tocó mi cuarto a través de la ventana, el cual ya era un viernes 30 de abril del año 2004.
Saliendo de la cocina, con un mandil puesto en su cuerpo, una mujer de aproximadamente 45 años, cabello corto color morado hasta su cuello, de piel morena clara, alta y delgada con una apariencia de mujer trabajadora, vestida con pantalón gris, camisa azul y pantunflas, tiene un papel muy importante en mi vida: es mi madre.
Katherine (grita):- ¡Stella, baja a desayunar o vas a llegar tarde a la escuela!
Me levante para desayunar, posterior a este, me cambie colocándome mi uniforme escolar: Una camisa blanca de manga corta, con un chaleco de vestir color azul agua, falda larga oscura tableada hasta debajo de la rodilla, calcetas blancas largas y zapatos negros escolares, peinada con una coleta sencilla con dona azul cielo, donde se podía notar mi fleco bien peinado y las ondulaciones de mi cabello malva.
Agarré mi mochila que contenía mis útiles escolares, incluyendo una laptop, y salí corriendo de mi casa para reunirme con mis 2 amigos: Beatrice y Tanabe, quienes me esperaban en el local de mi mejor amiga llamada Kalila de 21 años, quien vende refacciones de beyblade en el centro de la ciudad de Verona, su tienda se llama "Beiburedo Ga Daisuki- BBA", que, por cierto, ella es una técnica y mecánica en beyblades. ¡Super recomendada!
Teníamos tiempo para entrar a la escuela, así que decidimos acceder al establecimiento de mi amiga para platicar un poquito y saber que otros accesorios y refacciones nos podía vender para perfeccionar nuestros beyblades.
Kalila (feliz):- Hola chicos, buenos días. Que gusto en verlos nuevamente por mi local.
En esta ocasión, iba portando un mandil color naranja y detrás de este, se podía ver una blusa blanca floreada, con pantalón de mezclilla y tenis casuales, teniendo una partidura en medio de su cabello suelto liso color rojo, donde su largo le llegaba hasta el busto.
Beatrice (sonriendo):- Solo pasábamos un rato.
Tanabe (feliz):- Exacto, para ver que otras cosillas te podíamos comprar para ayúdarte en tus ganancias.
Kalila (sonriendo):- Gracias, chicos.
En eso, mi amiga voltea a verme.
Distraída, aún seguía pensando en Claude.
Kalila (mirada sarcástica):- ¡Y miren! ¡Stella aún en su mundo de fantasía!
Fue cuando reaccione al oír mi nombre
Stella (confundida):- ¿Disculpa? ¿Me hablaron?
Mis amigos rieron.
Oooh, como siempre, se me paso presentar a mis amigos en primer lugar. Bueno, luego regresamos a la programación, discúlpenme, pero en serio que Claude no puede salir de mi mente.
Primero esta:
Mi amigo Tanabe: un chico alegre de 16 años, alto y delgado, cabello negro y lacio, ojos rasgados, cara no tan ancha, nariz grande, algo chata y de puente bajo, labios delgados. Entusiasmado, responsable, es un excelente beyluchador, me platico que tiene una bestia bit sagrada del quien su primo mayor se lo heredó como una reliquia familiar. Ha ganado varias batallas gracias a ese bit en su ciudad natal llamada Shizuoka, Japón, incluso, participó en el torneo regional de beyblade, ganando el primer lugar, y también en el campeonato nacional, aunque en este gano el segundo lugar. Nunca se interesó en participar en el torneo mundial, dice él que aún no se siente capaz, aunque en mi ser, siento que miente. Posteriormente, mi intuición fue cierta, ya que supe, por medio de Beatrice, que su madre los abandonó por otro señor, justo cuando iba a participar en el campeonato mundial, por lo que lo dejo marcado de por vida. Su padre se volvió a casar con otra mujer de nombre Yuzuki, quien trabaja en un restaurante de comida japonesa llamado "Kazoku ai". Tanabe se lleva muy bien con ella, y sobre todo Yuzuki le da todo su afecto, comprensión y amor ante él, apoyándolo en todo sentido, incluso en el beyblade, pero, siente él, que ya nada vuelve a ser igual. Por estudios es que está viviendo aquí y, por viaje de trabajo de su padre quien labora como presidente de una enorme compañía de inmuebles. Su cumpleaños es el 25 de septiembre, es signo libra y su comida favorita es el curry.
Mi amiga Beatrice, la mejor de todo el grupo de amigos. Es una chica de 17 años quien los cumplió apenas el 22 de diciembre del año pasado, es signo Capricornio y su comida favorita es el sándwich, porque puede leer mientras lo come. Lista, alegre y a veces seria, educada, culta en la lectura, fascinada con los artículos de investigación que la doctora Judy Tate publica cada mes en la revista "BBA: Scientific World of Beyblade" ¡Mira que nos ha ayudado para perfeccionar y mejorar nuestros blades en todo sentido! Ella es de estatura media, ojos en forma de almendra, cara en forma de diamante, nariz respingada y labios semi gruesos, cabello recogido hecho un chongo, ondulado, color azul con un mechón amarillo. ¡Ah si! Y usa lentes.
Luego sigue:
Mi amiga Kalila… bueno, ya dije su edad y a lo que se dedica, pero, no dije como es físicamente y lo que le gusta: Ella es delgada, alta, de aproximadamente 1.80 de estatura. Piel blanca, con un poco de pecas casi visibles solo en su cara. Es estudiante del 1° año de la universidad de arquitectura, está por pasar a 2° año muy pronto. Su cumpleaños es el 18 de mayo y es signo tauro. Tranquila, feliz, solidaria, centrada y madura, es muy observadora en cualquier situación, ya que detecta rápidamente lo que sucede antes que la otra persona se dé cuenta. Su pasatiempo es cocinar pasteles y le desagradan los hongos Shiitake, ya que le producen alergia, y eso lo supimos hace poco, cuando Tanabe le regaló, por parte de su mamá, una sopa como remedio herbal para curarla de un resfriado común… y digamos que no salió nada bien ¡Ups!
Ahora sigo yo que, siempre lo olvido cuando hay este tipo de casos: mi nombre es Stella, tengo 16 años y nací el 8 de noviembre de 1988, mi tipo de sangre es O+, mi comida favorita es el ramen y las golosinas Baci Di Giulietta, son muy deliciosos, se los recomiendo. Alegre, alocada, algo fantasiosa. Les comento que antes no me consideraba fanática del beyblade, lo veía como un juego tonto para bebés, pero, por él, por Claude, cambie muchas cosas: A la edad de 10 años, compito con otros bladers en los parques para ganar un poco de experiencia. Sigo fallando aun, pero trato de perfeccionar ¡No me doy por vencida! Tengo a mis 3 amigos que son expertos en el beyblade y la verdad, sigo aprendiendo mucho de ellos.
Ahora si, regresamos a nuestra programación habitual.
Platicamos un rato cuando, mis ojos pusieron visión a un cartel pegado en uno de sus pilares del establecimiento, cerca de los platos de beybatalla, el cual, anunciaba que los BBA Revolution y los Blitzkrieg Boys, estarían en el gran evento conmemorativo como día internacional del amor organizado por Love Fundation realizado el día de mañana 1° de mayo en el centro de convenciones "Piazza delle Capello".
No concebía esta gran emoción, me hizo brincar de la alegría ya que finalmente, vería a Kai en acción (un blader a quien admiro mucho) verlo en un encuentro, uno a uno, con los BBA Revolution ¡Y en vivo!
Mi amiga Kalila se disculpó con nosotros al no poder darnos el aviso, tiempo atrás.
Kalila:- Oh, es cierto. Se me pasó informarles desde la semana ante pasada. He estado muy ocupada con todo esto de las ventas con los beyblades y reparar algunos de ellos.
Tanabe (sonriendo): No te preocupes, tu trabajo es primero.
Kalila (sonriendo):- Lo bueno es que las ventas no han disminuido, y me alegro por ello.
Beatrice (sonriendo): - Y es bueno saberlo.
Kalila (feliz):- Y darle gracias al señor Dickenson, ya que fue el quien me proporcionó éste trabajo estable.
Tanabe (confundido):- ¿Kalila, tu si vas a ir a ese evento que realizara Love Fundation el día de mañana?
Kalila (sonriendo): - Si, pondré mi puesto y venderé algunas refacciones y accesorios para los bladers, además que necesitan a una técnica y mecánica como yo para sus encuentros.
Stella (feliz): Espero encontrarte para que equipes el mío.
Ella voltea a verme de manera sarcástica.
Kalila:- ¿en serio acudirás al lugar?
Stella (feliz): - Claro que iré.
Mis amigos quedaron sorprendidos, no emitieron palabra alguna.
Kalila (sonriendo):- Después de lo ocurrido en tu escuela, lo dices tan tranquila… ¡Me agradas! Está bien. Espero lo cumplas.
Stella (feliz):- Lo haré. Tienes mi palabra.
Beatrice, decide intervenir.
Beatrice (confundía):- Ehmm… ¿que no es más fácil equiparlo aquí?
Kalila (sonriendo):- En el día del evento llevare refacciones nuevas y algunas piezas que son edición limitada… creo que ya se a qué punto vas, Stella.
Me guiña el ojo y solo le sonreí muy grande, que hasta mostré mis dientes.
Fue en ese momento en que mi amiga revisa su reloj de pared que tiene a su lado.
Kalila (impactada):- Chispas, tienen que irse, ya casi están por cerrar su escuela y ustedes no deben llegar tarde.
Nos sorprendimos de la hora, ya que era las 8:48 am, y nuestra hora de entrada es a las 9:00 am. Demorándonos una hora de platica ¡Eso nos pasa por confiados!
Nos despedimos rápidamente de ella y huimos del lugar, sin emitir palabra alguna. Nos concentramos solamente en llegar a la escuela, corriendo a todo lo que nuestros pies daban.
Cuando entramos al centro de estudios, las campanas del instituto "Belmont Preparatory School" sonaron por lo que Tanabe y Beatrice se fueron para sus respectivas aulas del 3° año y yo… bueno… a mi recursamiento.
La maestra, llamada Fiama D'Altrui de 30 años, quien nos imparte las materias de inglés, italiano e historia, es un amor con aquellos estudiantes que recursaron: amigable y humanitaria, bondadosa y de corazón puro, nos tiene paciencia y nos enseña muy bien la clase, ganándose el cariño de sus recursados. ¿Por qué todos los maestros no pueden ser como ella?
Reuniéndome con mis amigos en el patio de la escuela, quería probar mis habilidades con el Blade ante mi amiga Beatrice.
Tanabe (molesto):- Llegas tarde.
Stella (mal humor):- Lo siento, pero es que la maestra Martina de la clase de matemáticas, me retuvo un buen ratisimo en el aula, para saber si en verdad le había entendido a su clase y me dijo que se la tenía que explicar, si no, no me dejaba salir.
Tanabe (molesto):- Es eso o estuviste pensando nuevamente en Claude durante su clase y la maestra se molestó por eso ¿o me equivoco?
Me enojé un poco, ya que separé muy bien el amor con la hora del estudio.
Stella (sonrisa satisfactoria):- ¡Silencio! ¡Vamos, que comience la beybatalla!
Mi amiga se encontraba recargada en un árbol con los brazos cruzados.
Beatrice (sería):- ¿En serio? Mira que ya faltan como 10 minutos para que se culmine el recreo.
Stella (sonrisa sarcástica):- No importa, veras que ahora si te venzo después de haber perdido 10 veces contigo durante nuestros entrenamientos en la escuela, así que, saca tu Blade.
Beatrice (sonrisa sarcástica):- Si tú lo dices...
Sacando de su contenedor especial llamado "BagEngine" color naranja que tenía abrochado en su cintura, un beyblade color violeta en el circuito bit con aleación plateada a los lados, lo coloca en su lanzador. Y el mío, mi beyblade color verde esmeralda, sacándolo de su contenedor especial color rosa que tenía sujeta con un cinturón en la mitad de mi muslo izquierdo, lo coloco rápidamente en mi lanzador, a lo que nuestro amigo realiza el conteo.
Tanabe (serio):- Que sea un juego limpio, amigas. ¿Listas? Por qué el juego comienza en 3… 2… 1…¡LET IT RIP!
Ambas jugadoras sueltan sus lanzadores haciendo que ambos beyblades salgan disparados súbitamente, cayendo en el plato de batalla. Al contacto con las puntas, ambos Blades se aproximan y dan un golpe lado a lado.
Stella (enojada): - Vamos blade, debes ganar, no me hagas perder otra vez.
Mi amiga estaba cruzada de brazos.
Beatrice (sería):- si tienes ese pensamiento negativo, jamás ganarás una batalla real.
Stella (molesta):-¿Por qué lo dices?
Beatrice (sería):- El objetivo de este deporte es perfeccionar tus estrategias cada día, no tener golpes de suerte.
Beatrice (grita):- Vamos, ataca.
El blade se vuelve a impulsar nuevamente, y me embiste queriéndome sacar del plato, yo, trato de resistir.
Beatrice (enojada): - Resistir no te servirá de nada.
Stella (enojada):- Eso ya lo veremos.
En ese momento el blade de mi amiga se dividió en dos ¡a la mitad de la batalla! haciendo que ambos anillos atacaran a mi blade.
Stella (impresionada):- ¿Qué sucede? ¡Eso es trampa!
Tanabe (sonriendo): No, eso es completamente legal, la BBA lo autoriza, está en su reglamento.
Realice una mueca de disgusto.
Stella (molesta):- Pues a mí me estresa.
Beatrice (enojada):- ¡Stella, sigue concentrándote en la batalla!
Sentía que me asfixiaba su blade, no podía separarme de ellos. El ataque era muy fuerte.
Stella (sonrisa tierna):- ¿Oye, soy tu amiga, házmela un poco más fácil, no?
Mi amiga se enoja muy feo conmigo y, choco muy fuerte ambos artefactos, desestabilizándome un poco.
Beatrice (molesta):- En este juego no hay partida con nadie. Todos somos iguales aquí.
Mi amigo también colabora en la idea de mi amiga.
Tanabe (sonrisa tierna): - Concuerdo con Beatrice. Además, no lo veas como una carga, veelo como… pasar un rato divertido con los amigos. Y así, socializar bien con ellos, conocer a más gente.
En ese momento recuerdo la otra parte de mis recuerdos que no visualice en mi memoria:
Era el día de la graduación, tenía que despedirme para siempre de mi amigo Claude, ya que se iría a estudiar lejos de nuestra ciudad natal.
Stella (llora):- ¿Por qué te tienes que ir? Es muy doloroso las despedidas ¡Odio las graduaciones! Y más porque yo me tengo que quedar en ésta escuela y tú, avanzaras.
Mi amigo ríe al notar la inocencia en la que me encontraba aún.
Claude (feliz):- Esto no es un adiós, Stella, es un hasta luego, además, tu pasaras a 5° año de primaria y conocerás a más personas…
Stella (molesta) :- Pero yo quiero estar contigo. Siempre he querido estar contigo, porque yo…
No me atreví a decir aquellas hermosas palabras que saldrían de mi boquita: "Te amo".
Claude (feliz):- ¿Si?
Mi amigo se acerca muy feliz hacia mi. Lo miro a los ojos fijamente de manera enamorada, pero Claude, no puede verme de esa manera.
Stella (sonrojada):- Te quiero mucho.
Claude vuelve a abrazarme de manera amistosa.
Claude (feliz):- Yo también, y aun sostengo la promesa que te hice en tu presencia.
Lo miro con mis ojos mojados.
Stella (solloza):- Seguiré perfeccionando en el beyblade. Ya verás que si te voy a ganar. No te defraudare.
Claude (feliz):- Esperaré con ansias, ese día.
Stella (solloza):- Pero… tu conocerás a más gente, y yo, me quedaré aquí… encerrada en esta escuela.
Claude vuelve a reír, ya que no dejaba ir esa idea absurda de mi cabeza.
Dejó de abrazarme, me mira de frente y coloca sus manos en mis hombros para tranquilizarme.
Claude (sonriendo):- No Stella, tu igual seguirás conociendo a más personas, y tendrás muchos amigos. Esto no es el fin del mundo. Y cuando llegue el momento de volvernos a ver, quiero ver que cumplas con la promesa y conocer a tus nuevos amigos, algún día…
En ese momento, sus últimas palabras, resuenan como eco en mi memoria.
Stella (pensando):- La promesa que te hice… en la graduación de la primaria, fue la última vez que te vi. Aún recuerdo tu hermosa sonrisa antes de que te fueras de mi vida para siempre... Pero este juego de beyblade me conecta mucho a ti y me hace sentir emociones que nunca antes había sentido.
Beatrice (sonrisa triunfante):- ¿Y bien? ¿ya te estas rindiendo ahora?
Alzando la vista en alto, la miro retadoramente.
Stella (sonrisa sarcástica):- Yo nunca me rindo y por amor, haría hasta lo imposible por alcanzar la meta que tanto he querido, y cumplir una promesa que le hice a esa persona que es especial en mi vida.
Stella (enojada):- Atacaaaaaaaaa
Concentrándome en el giro, tras haber realizado mi amiga aquel encuentro uno a uno con su Blade, dejando el mío en el centro, éste es empujado hacia arriba, impulsándolo, ella me observa de manera impactante.
Beatrice (confundida):- ¡Pero que…eso es nuevo!
Haciendo giros en círculos, caigo ahora, encima del bit de mi amiga.
Tanaba (feliz):- ¡Genial! ¡Stella está mejorando!
Stella (enojada):- Máxima potenciaaaaaaaaaaa
Éste, gira a máxima velocidad, absorbiendo un poco la energía de mi amiga, disminuyendo su potencia de giro.
Beatrice (enojada):- ¡Ah no!
Stella (sonrisa triunfante):- ¡Si, ya casi te tengo!
Beatrice (enojada):- ¡Eso sí que no! ¡No lo harás! ¡Vamos Delphinoidea!
Me heche para atrás al oír el nombre de su beyblade.
Stella (confundida):- ¿Delfino… que?
Comenzando a brillar de manera hermosa y fuerte, un resplandor azul como el agua, sale dentro del Blade, la bestia bit de mi amiga, la cual, era una especie de delfín, parecido a una beluga.
Stella (impactada):- ¿Qué? ¿Tienes un bestia bit en tu poder?
Beatrice (enojada):- ¡Ahora realiza una nueva estrategia a este ataque que realizaré!
Beatrice (grita):-"Aquaplaning".
Escupiendo un chorro de agua para detener mi ataque, este sale disparado del plato, perdiendo automáticamente la batalla.
Tanabe (serio):- Y la ganadora, es Beatrice.
Me quede sin habla por unos segundos hasta que reaccione.
Stella (impactada):- ¡Beatrice! ¿tienes una bestia bit? ¿Porque nunca me lo dijiste?
Recogiendo su Blade, se lo guarda en su "BagEngine".
Beatrice (sería):- Bueno… porque pensé que nunca la necesitaría contigo.
Mi amigo Tanabe se nos acercó corriendo.
Tanaba (sonriendo):- Pero eso es algo bueno. Stella ha mejorado un poco, y te la estabas viendo difícil, ¿eh, Beatrice?
Mi amiga sonríe y recoge mi Beyblade para entregármelo en mis manos.
Stella (confundida):- Pero si perdí la batalla.
Tanaba (sonriendo):- No Stella, estabas apunto de ganarle a Beatrice. Nunca había visto que realizaras una técnica en el combate, por lo que tu contrincante, tuvo que idealizarse un plan rápidamente que hizo sacarte del beyestadio.
Mis ojos se ilusionaron.
Stella (feliz):- ¿Entonces… si estoy mejorando?
Beatrice (sonrisa sarcástica):- Vas por un buen camino, aunque no ganaste, diste lo mejor de ti, eso significa que estas por cumplir tu promesa ante tu amigo Claude.
Dándome palmadas en mi espalda, mi amiga me responde con un: "bien hecho".
Feliz, comienzo a saltar de la alegría, no concebía que mi duro esfuerzo, constancia y dedicación, incluso, pasión por el beyblade, me haría alcanzar grandes cosas.
Muy feliz, los abrazo a los dos al mismo tiempo.
Stella (contenta):- Amigos, los quiero mucho, muchísimo, muchas gracias por sus enseñanzas, jamás las olvidare.
Mis amigos, sonríen.
Beatrice:- Pero recuerda, Stella: Los estudios son primero. El beyblade es solo un pasatiempo, el cual, debe ser visto como tal.
Asentí con la cabeza.
En ese momento, suena el timbre para reincorporarnos a nuestras respetivas aulas.
Tanabe (sonriendo):- Como ya aumentaste tu nivel de batalla, es bueno que ahora practiques conmigo pero, en la hora de la salida.
Tanabe (sonrisa sarcástica):-¡Recuerda que no voy a tener ninguna compasión contigo, aunque seas mi amiga!
Stella (feliz):- Lo hare.
Mi amigo se retira para su aula.
Mi amiga, cruzada de brazos, analiza mi beyblade y me sugiere las siguientes palabras.
Beatrice (sonriendo):- … Aunque siento que le falta una cosita más a tu beyblade para que puedas ganar un encuentro.
Stella (confundida):- ¿En serio?
Beatrice (sonriendo):- Claro, es tan obvio, que no te lo voy a decir ¡Bye!
Me puse muy feliz al ver que ya aumenté mi nivel de destreza y habilidad con el beyblade.
Stella (pensando):- Claude, espero te haya ido muy bien en todas tus beybatallas que tuviste con los contrincantes a quienes te enfrentaste en el Campeonato Mundial de Beyblade el año pasado. Seguiré rezando por ti, todos los días, para que te vaya bien en tu vida y espero verte, al menos, en ese evento que realizara la corporación Love Fundation. En serio que quiero cumplir con nuestra promesa que tengo guardada en lo más profundo de mi corazón.
Stella (enamorada):- Te amo Claude, y te seguiré esperando, hasta que llegue el día en que te vuelva a ver y declarar todo mi amor hacia ti.
Guardo mi Blade en su BagEngine, me dirijo muy feliz y enamorada al salón de clases.
Siendo las 3:00 pm, hora de la salida, mi amigo me lleva hasta un bosque para poder practicar muy bien nuestro siguiente combate.
Stella (mal humor):- No me gustan mucho estos lugares… está muy retirado de la ciudad y siento que me va a salir un animal muy feo. Espero mamá no se enoje de que voy a llegar muy tarde a la casa.
Beatrice (sonrisa cómplice):- Por hoy te ayude con tu madre, le dije una pequeña mentira de que te ayudaría a avanzarle a tus tareas.
Stella (sonriendo):- Aunque en realidad, no me dejaron mucha tarea y solo tengo una: avanzarle un poco al protocolo de investigación este fin de semana, pero ya casi está concluido ¡Aleluya!
Fue cuando mi amigo decide parar su andar.
Tanabe (feliz):- Bien, llegamos.
El lugar lo seguía viendo igual: había muchos árboles, plantas, rosas, tierra y un poco de pasto seco.
Stella (mal humor):- Pudimos habernos quedado en la mera entrada del bosque, no sumergirnos hasta el fondo de ésta.
Tanabe (feliz):- Tienes que conectarte con la naturaleza, para que esta te responda de la forma más amable.
Stella (confundida):- Ahmm, okay. ¿Y dónde está el plato de batalla?
Tanabe (feliz):- No lo necesitamos, así es como beylucharemos.
Stella (confundida):- ¿Estás loco, verdad?
Tanabe (sonriendo):- Estabas por ganarle a Beatrice…
Stella (mal humor):- Y quieres que pierda, mal amigo.
Tanabe (sonriendo):- Al contrario, quiero que ganes usando todo lo que existe a tu alrededor, si lo logras controlar, podrás enfrentarte a Claude en un futuro.
Me sonrojo al instante y mis ojos se iluminaron. Mi amiga se cruza de brazos.
Beatrice (sería):- Vamos, Stella, ya no sigas fingiendo y no tienes que ocultárnoslo, ya sabemos que te gusta mucho ese chico, o mejor dicho, ese fuerte y apuesto beyluchador.
Me sonrojo más de lo habitual.
Tanabe (feliz):- ¿Y bien? ¿Qué opinas?
Stella (sonrojada):- Saca tu Blade y que comience el juego.
Sacando su Blade color negro de su "BagEngine" color rojo donde lo carga en la parte de enfrente de su cintura, lo coloca en su lanzador.
Tanabe (sonriendo):- ¿Estás lista?
Preparo rápidamente mi lanzador con mi Beyblade en el.
Stella (sonrisa sarcástica):- ¡Que gane el mejor!
Beatrice (seria):- Muy bien amigos, que sea un juego justo, porque la diversión comienza en 3…2…1… ¡LET IT RIP!
Ambos Blades salen súbitamente disparados de sus lanzadores, cayendo en la tierra, pero Tanabe toma ventaja del juego, ya que lo lanzo mucho más rápido que yo.
Tanabe (enojado):- Vamos, ataca Nigricollis.
Miro muy ilusionada a mi oponente, juntando mis manos como en forma de rezo.
Stella (feliz):- ¡Waaaaaaaaaaaaaao! Finalmente voy a ver a Nigricollis en acción. ¡Que alegría!
Mi amigo me mira serio.
Tanabe (enojado):- Stella, concéntrate en el campo de batalla.
Saltando del susto, respondo con un "de acuerdo" de forma miedosa.
Ambos Blades chocan uno a uno, rosando sus aspas con el metal, sacando chispas.
Stella (enojada):- Bien, veamos si puedes con esto.
Bajando un poco el anillo de ataque de mi Blade, lo incrusto para lanzarlo fuera del terreno. Dando giros, fue impactado contra un árbol, el cual, hizo mucho polvo.
Stella (sonrisa sarcástica):- Ja, ahora si te gane.
Tanabe (sonrisa sarcástica):- ¿Estas segura?
Stella (sorprendida):- ¿Qué?
Al alzar la vista, logre notar un hoyo grande en el tronco del árbol, e inmedio, se encontraba su Beyblade que aun continuaba girando, como si su bestia bit, se enrollara en el tronco de esta, de manera fuerte, para no resbalarse, mirando frio a su presa, sacando su lengua, analizando en qué momento me descuidaba, para lanzarse contra mi y atacarme.
Stella (impactada):- ¡Imposible!
Tanabe (sonrisa sarcástica):- Y esto no termina…
Tanabe (grita):- ¡Vamos Nigricollis, ataque Naja Poison!
Impulsándose del árbol, saca a través de la punta de su Blade, una especie de aguijón que parecía como si quisiera inyectarle su veneno al núcleo de mi beyblade. Por lo cual, lo tuve que esquivar.
Stella (suspiro):- Hay, estuvo cerca. ¡Oye, yo no sabía que así beybatallabas en realidad!
Tanabe (sonríe enojado):- ¡Y eso que aún no conoces todo mi potencial!
Stella (sorprendida):- Okay, lo conoceré para después, por ahora, soy principiante y quiero un poco más de práctica…
Fue cuando se me prendió "el foco en la cabeza" y, pedí algo muy alocado ante mi amigo.
Stella (ilusionada):- Espera, Tanabe… Mejor… Quiero seguir perfeccionando mi blade, sabes que tengo poco tiempo para que, finalmente, me vuelva a reunir con Lord Kai, en aquel evento que leímos en el local de Kalila, así que por favor, quiero que subas un poco más el nivel para entrenar mejor.
Mi amigo se impacta.
Tanabe (confundido):- ¿ Y te crees muy segura en querer enfrentarte a Kai?
Stella (ilusionada):- Si pierdo, será el mejor recuerdo de toda mi vida.
Mi mirada se sube al cielo, imaginándome una humillante y vergonzosa derrota hecha por Kai ante mí, en el evento de mañana en frente de todos los espectadores. Mi rostro no se tornaría triste, sino se pondría en forma de ilusión, saliéndome un montón de corazones con la palabra "soy tu mayor admiradora y fan" alrededor de la cabeza, teniendo a la mano, un gran ramo de flores para entregarle de forma hincada, y Kai, lo acepte.
Mi amigo me mira extrañado y con una gota gorda derramando en su cabeza. Todo el mundo conoce a Kai y, saben, que ese tipo de infantilerías nunca las aceptaría.
Tanabe (confundido):- Eeeh... Está bien, pero no te agradara lo que va a salir de aquí.
Stella (ilusionada):- No importa, tu dale.
Tanabe (confundido):- Esta bien.
Cada que tenía oportunidad de beybatallar con Tanabe, siempre había ese uno – uno que nos caracterizaba: Una victoria y una derrota, viceversa y otras veces, empate. En una ocasión, si me logré enterar de que lo hacía sólo para que no me sintiera mal en obtener una derrota, tras otra. Pero, entendió después de que platique con él, que yo debía mejorar hasta el final y ser mejor cada día.
Concentrando su energía en la bestia bit, éste, aumenta un poco su poder de ataque, haciendo que se metiera, ahora, debajo de la tierra.
Stella (impactada):- Pero que …Se mete bajo la tierra.
Tanabe (serio):- Nigricollis es una cobra escupidora de cuello negro, su habitad es la naturaleza, así que, no vas a tener ninguna posibilidad en ganarme.
Realizando la misma maniobra que hice con Beatrice, realice un impulso hacia arriba, haciendo que mi Blade diera vueltas en círculos.
Stella (pensando):- Donde esta, donde esta. No puedo permanecer mucho tiempo en el suelo, puede que salga de improviso y me enrolle en su cola.
Tanabe se encontraba muy concentrado con los ojos cerrados, tal pareciera que el caer de una aguja no le generaba molestia. Viendo donde caería, abre sus ojos rápidamente.
Tanabe (sonrisa satisfactoria):- ¡Te tengo!
Saliendo de la nada, bajo la tierra, se impulsa nuevamente y saca su aguijón en la punta del beyblade.
Stella (sonrisa sarcástica):- No, no lo harás.
Cayendo, mi Blade se desliza hacia un rosal, el cual, al realizar un movimiento rotatorio, este le quita las espinas y se las lanza al Blade de mi amigo, pero este los esquiva de manera fácil, a manera de zic, zac.
Stella (asustada):- Waaaaaaaaaaaaaaiiiiiiii, veo que me metí con el rey de las cobras.
Mi amiga Beatrice solo observa y analiza el patrón de batalla de mi amigo. Eso me hizo molestarme mucho
Stella (enojada):- ¿y tú? ¿Que no me piensas apoyar, Beatrice? ¡Al menos, échame porras!
Beatrice (seria):- Es tu pelea, no la mía. Tú quisiste que él calentara motores, te aguantas. Lo único con lo que te puedo apoyar es que debes realizar una estrategia de inmediato para eliminarlo.
Stella (mal humor):- ¡Mpf!
Pero mi amiga, aún le seguía impresionando su forma de combate de Tanabe.
Beatrice (pensando):- Aunque, el ataque de Tanabe es fabuloso. Con todo ese poder, puede llegar a ser un campeón mundial y enfrentarse a Tyson, cara a cara, para ganar el título. No entiendo por qué aún sigue tan indeciso en participar en ese lugar. Debería ya superarlo y olvidarlo. Tanabe…
El Blade de mi amigo estaba muy cerca, hasta que uso mi defensa del Blade, tratando de sostener el poderoso aguijón de su Nigricollis y no me inyecte su letal veneno.
Tanabe (enojado):- No te será sencillo.
Stella (nerviosa):- ¡Si, lo estoy notando!
Hasta que lo impulsa y vuelve a correr por todo el bosque. Mi Blade ejecuta un remolino, haciendo que las hojas de los árboles los use como defensa, a lo que el Nigricollis, vuelve a saltar y usa su aguijón.
Stella (sonrisa satisfactoria):- ¡Eso!
Al notar que estaba muy cansada en este combate, decide mejor cederme la victoria de manera fácil, pero, sin ser tan obvio.
Una hoja muy gruesa, lo detiene, haciendo que este cayera y su Blade se detuviera, siendo finalmente, una "ganadora" en este combate.
Stella (cansada):- ¡Sí! ¡Lo logré…! ¡finalmente lo logré!
Caigo al suelo muy cansada por el desgaste mental que tuve, incluso hasta sudé de más. Estaba muy exhausta pero mi amigo ¡Fresco como una lechuga! A lo cual, se acerca para felicitarme.
Tanabe (sonriendo):- ¡Tu primera victoria real! ¡Nada mal!
Beatrice corre a abrazarme, levantándome del suelo y, apretarme muy fuerte, por ese logro tan hermoso que hice.
Beatrice (feliz):- ¡Felicidades, amiga! Y mira que no muchos pueden enfrentarse a él.
Stella (cansada):- ¿En serio?
Tanabe (sonrisa sarcástica):- Te falta perfeccionar muchas cosas aun, esto es solo el principio.
Stella (exhausta):- Es un hecho… así que… mejor nos vamos para la casa por qué... ya casi oscurece y también… déjenme descansar un rato.
Dejándome de abrazar Beatrice, volví a caer en la tierra. Me quede acostada un rato en el suelo y mis amigos decidieron esperarme hasta que recuperará un poco mis energías.
Saliendo del bosque, en las calles de Mazzini, platicábamos de cómo me sentí al realizar esa estrategia, nunca antes había realizado algo como lo que sucedió con mi amigo, siento que cada día estoy despertando más mis habilidades de beyluchadora. También mis amigos notaron que mi amor hacia Claude había aumentado, ya que, en cada lucha, mi lazo hacia él se hacía más fuerte.
Fue cuando a mis amigos se les vino a la mente las palabras que le dije Kalila.
Beatrice (confundida):- Una cosa con respecto a lo que le dijiste a Kalila… ¿tu madre si te dará permiso para que acudas con nosotros al lugar?
Reflexione.
Stella (sentida): - ¡Oh! No lo había pensado bien. La verdad que no lo se.
Tanabe (sorprendido):- Debes pensar en un plan alternativo si es que deseas ver a tu superior Kai el día de mañana.
Stella (disgustada):- Solo decirle mi deseo, ya que si miento, todo se va de picada.
Beatrice analiza la situación, entre cierra sus ojos.
Beatrice (reflexiona): Yo digo que si te deja.
Tanabe (confundido):- ¿Como estas tan segura?
Deteniendo su andar a casi dos cuadras del edificio departamental, para que me dejen ahí, reflexiona en su pensar.
Beatrice (sonrisa sarcástica):- Ya casi estamos por culminar el ciclo escolar, solo dos semanas más y adiós a todo, por lo que tienes dos opciones: una, que te deje pero bajo condición, que lo más seguro es que sea cierto lo primero, por lo que también, has sacado buenas calificaciones, y la otra… que no te deje por cuestiones estudiantiles, los cuales…
Mirándome de manera furiosa y con carácter fuerte, tal pareciera que estaba por sacar fuego dentro de su ser.
Beatrice (molesta):-… Tu ya sabes por qué.
Me sentí en ese instante.
Stella (triste): Lo sé. No hagas recordármelo.
Tanabe me levanta un poco el ánimo.
Tanabe (feliz):- ¡Descuida! Si no te deja ir tu mamá, tomaré muchas fotos de Kai en todos sus ángulos y perfiles para que no te olvides nunca de él, porque dudo que quiera darme un autógrafo.
Le sonreí tiernamente.
Stella:- Con lo simpático que es ese beyluchador … Gracias.
Mi amigo me mira de manera pícara.
Tanabe:-… además, me parece que alguien está deseosa en ver a un príncipe azul el día de mañana, y reza por qué esté presente, ¿o me equivoco?
Me sonroje muchísimo.
Stella (enamorada): - querrás decir, príncipe verde… por su cabello color esmeralda…
Beatrice (confundida): - ¿Y le dirás tu sentir el día de mañana? ¿Bueno, si es que acude de pura casualidad al evento?
Beatrice (feliz):- Mira que sería algo muy hermoso, por ser decretado como día internacional del amor, confesar tu sentir a la persona que te gusta, sería un agradable recuerdo…
Fue cuando las dudas me inundaron.
Stella (nerviosa):- Si… bueno, no sé… de hecho, eso es lo que quiero hacer pero… ¿qué tal si solo me ve como una amiga? Digo, ha pasado mucho tiempo y, es la primera vez que voy a tener contacto con él, tal vez ya no me reconozca… e incluso, ¿Qué tal si solo me hago ilusiones y resulta que nunca se presenta al lugar?
Mis amigos reflexionaron.
Tanabe (dudoso):- Tienes razón pero, el tiempo lo dirá.
Mi amiga Beatrice me levanta el ánimo, ya que me noto muy preocupada y triste.
Beatrice (feliz):- Tranquila, además, si él no va, podemos convivir más tiempo contigo, después de tu larga ausencia con nosotros…
Stella (mirada tierna):- ¿Crees que podamos participar en un encuentro con beyblades?
Tanabe (feliz):- Yo digo que sí. Además, en el cartel promocional dice que habrá beyestadios en ese evento solo para convivir con tus amigos, conocidos, familiares o pareja, ya que refiere que el amor está presente en cualquier lazo afectivo y que debe ser reconocido de manera consciente.
Stella (mirada tierna):- Que bueno que los tengo a mi lado.
Los abrazo a ambos de lado.
Beatrice (sonrisa tierna):- Y no estés triste si de pura casualidad no te lo encuentras o, si te lo encuentras en el lugar y no acepte ir contigo a pasear, por que tú no estas para rogarle a nadie, o si tiene a otra chica como su novia, tienes mucha vida por delante y más personas por conocer.
Mi amigo comenzó a mirarnos de forma pillina.
Tanabe:- Claro, además nos tienes a nosotros, y juntos, podemos botarle huevos podridos a la ventana de su casa. No importa si vive hasta del otro lado del mundo.
Stella (impactada):- No, eso no, eso sería… no…
Nos empezamos a reír.
Y así fue como me dejaron en mi casa.
Tanabe acompaña a Beatrice a la suya, que está casi de paso en el restaurante de su mamá a unos 3 kilómetros.
Cuando entré a casa, mi mamá me recibe, quien me indica que deje mis cosas a mi habitación y la laptop en mi mesa de estudio, para que baje rápido a poner la mesa.
Realizo el acto que se me indicó y, mientras bajaba las escaleras para realizar aquello que me dijo mamá, comenzó una plática amena.
Katherine (sonriendo):- ¿Y cómo te fue en la escuela?
Stella (feliz):- ¡De maravilla! Y tengo un chisme que quiero contarte, un logro que hizo todo el salón: Un compañero realizó el "peor oso" de su vida durante la clase, es que, como es tan presumido en ser un buen líder en los equipos que la maestra Fiama D'Altrui nos asigna, pues, ahora, lo dejaron sólo, sin equipo y completamente aislado del salón durante la clase de Historia. Comenzó a poner rostro fingido para que se apiadaran de él pero nadie del salón le hizo caso, por lo que la maestra opto a que hiciera solo el trabajo y el mismo lo expusiera… si supieras el gran berrinche que hizo, como todo un niño de 5 años. Pero eso le pasa por abusar de la confianza de los demás compañeros, teniendo la oportunidad de sacar buenas calificaciones sin hacer nada. Fue cuando todos entendimos la razón de el por qué había recursado, desde que lo conocemos nunca nos quiso decir sus razones, pero ahora ya todos lo sabemos.
Katherine (feliz):- Veo que te has llevado muy bien con tus compañeros de clase.
Stella (sonriendo):- Claro, mamá. Es que… trato de socializar un poco más con mis compañeros, no aislarme tanto y, aquí están los resultados.
Katherine (feliz): Y eso es un gran progreso.
Stella (feliz):- Obvio mamá. Incluso, ante el maestro Alessandro, cuando estuvimos realizando nuestro protocolo de investigación que entregaremos y expondremos ante él, al final del año, estuvimos modificando los escritos a través de nuestras laptops y, una compañera se quiso pasar de lista, descargando un protocolo existente y, optándolo pasar como suyo… ¿que no el maestro le dio la peor regañiza de su vida? Incluso a mí me tuvo que poner de ejemplo ya que, mi escrito tenía todo en orden, y sin nada de plagio, y eso como le hizo encabronar a mi compañera …
Cuando por fin terminamos de poner la mesa, y servir la comida llamada Shepherd's Pie para ya sentarnos a degustarla, mamá oye como he cambiado en todo aspecto, ya que antes, por mis inseguridades, miedos y temores, es que había reprobado… bueno, también el beyblade influyó más que esos sentimientos. Era tan fuerte el amor que sentía hacia Claude que, me desvíe de mis estudios completamente y, la verdad, que estaba muy arrepentida, ya que note que la fuerza avasalladora del amor no me haría pasar las materias de la escuela, por lo que debía ponerle empeño a ésta. Mamá, en ese entonces, me regaño y me prohibió durante todo un año, no saber nada, ni jugar, ni hablar nunca del beyblade, por lo que en el transcurso del campeonato mundial del año pasado se me prohibió verlo en la TV, haciendo que mi corazón se partiera, comprendiendo que mi destino era nunca volver a ver a Claude en algún punto de mi vida. Era comprensible todo, pero, al ver mi nueva versión, mi madre quedó asombrada del cambio tan radical que di, más el de ser reconocida por los maestros como la mejor estudiante del año, que fue muy extraño de que hubiese repetido el 2° año, si no notaba problemas o tener conflictos como lo tuvieron mis demás compañeros, además, de que era muy lista y aplicada para todo.
Continúe con la plática mientras degustábamos los alimentos.
Stella (riendo):-… Jajajajaja, Pobre de mi compañera. De veras que se la han hecho como trapeador y aún sigue sin entender de que no debe de hacer trampa en la realización de las tareas durante la clase de ese maestro.
Mi madre notó lo feliz que soy.
Katherine (comprensiva): - Eres muy feliz con tus nuevos compañeros, ¿verdad?
Solo me limite a sonreírle, asentí la cabeza y seguir degustando.
Katherine (comprensible): ¿Sabes? Creo que después de haberte puesto un castigo ejemplar…
Coloque una mirada traviesa, pero a la vez sería, ya que en verdad si cumplí con el castigo que me impuso mi madre: Ponerle atención a mis estudios y nunca volver a jugar beyblade en mi vida, pero lo rompía durante la escuela ante mis amigos, pero eso sí, ellos me vigilaban muy bien para que cumpliera con todas mis tareas y, nunca más se volviera a repetir.
Stella (feliz):- ¿Dime?
Katherine (comprensiva):- Necesitas un descanso, pasar más tiempo con tus amigos: Tanabe, Beatrice y Kalila. Te lo mereces después de un gran año de esfuerzo y dedicación.
Dejando de comer, coloco un mirar de ilusión.
Stella (feliz):- Ahora que lo mencionas, el día de mañana habrá un evento de beyblade…
Mi madre volteo a verme con mirada sarcástica. Me puse nerviosa.
Syella:- Y-y… ta-tal vez… me pudieras dar permiso para salir con mis amigos, ya que… habrá dos equipos invitados que participaron en el campeonato mundial de beyblade el año pasado, y ahí estará Kai, el beyluchador más cool y genial de todos los tiempos, un muchacho a quien he admirado por mucho tiempo …
Mi madre me sonríe.
Katherine (comprensiva):- Kai… ahora tienes a un ídolo a quien admirar, eso me recuerda mucho a tu amigo de la primaria, Claude…
Trate de contener mis emociones cuando mencionó el nombre del chico del quien he estado enamorada desde que era una infante.
Stella (melancólica):- ¿Aún te acuerdas de él?
Mi madre suspira tras recordar mi convivencia en la escuela y en su casa, cuando iba a visitarlo muy pequeña.
Katherine (comprensiva):- Claro que sí, siempre jugaban juntos al beyblade, tú nunca te dejaste vencer pese a las partidas difíciles que él te ponía, fuera de la escuela. Recuerdo que en ese entonces, él era muy fuerte… tal vez haya aumento su poder durante su participación en el campeonato mundial.
Stella (nerviosa):- Así que…
Mi madre agacho la cabeza y sonríe.
Katherine (sonríe):- ¿Y quieres ir, no es así?
Colocando mis codos arriba de la mesa, junte mis manos en forma de súplica y piedad.
Stella (Nerviosa):- Por favor. Es la última vez que pido algo así, solo será este evento y ya, y prometo nunca más ir a algo que tenga que estar relacionado con beyblades o campeonatos mundiales, regionales, locales, etc, de "trompitos", cómo tú le llamas.
Mi madre voltea a verme al rostro.
Katherine (sería):- ¿Y en qué lugar será?
Stella (nerviosa):- e-en el centro de convenciones "Piazza delle Capello".
Mi madre solo se limita a sonreír.
Katherine (reflexiva):- Bueno, siempre has idolatrado a Kai como uno de los mejores beyluchadores del campeonato mundial, y además, te adentraste al mundo del beyblade, gracias a tu Amigo Claude…
Stella (nerviosa):- Así que…
Mi madre voltea a verme aún de manera sarcástica, pero, dibujo una linda sonrisa en su rostro.
Ya de noche y en el cuarto, me desenredaba mi cabello largo, donde me llegaba hasta la mitad de mi cadera, para realizarme mi trenza e irme a dormir, por lo cual, decidí marcar a mi teléfono de casa para comunicarles a mis amigos la gran noticia que me dio mi madre. No podía ocultarlo.
Beatrice (entusiasmada):- ¿Es en serio?
Stella (entusiasmada):- ¡Ni yo me lo pude creer!
Tanabe (feliz):- En serio me siento como todo un ejecutivo empresario hablando de negocios con ustedes 2 en una llamada como ésta, a altas horas de la noche.
Comenzamos a reírnos, ambas.
Stella (feliz):- No son tan altas, son las 10:00 pm.
Me encontraba ya con la pijama puesta. Tenía en mi rostro unos ojos de ilusión y felicidad, mirándome al espejo que, no concebía como es que pasó.
Beatrice (feliz):- ¿Entonces, si iras? ¡La deducción fue acertada!
Stella (feliz):- Obvio que sí, solo que me dejó algunas condiciones.
Tanabe: (confundido):- ¿y cuáles fueron?
Stella (feliz):- Bueno, como reprobé un año de bachillerato anteriormente, y recurse el segundo año, dijo que para este 3° año, continúe sacando buenas calificaciones, porque… bueno, ya saben, si no cumplo, ya no podré salir con ustedes a convivir y realizar beybatallas justas…
Tanabe (sorprendido):- ¿Entonces, ya tu madre te dejó que jugaras beyblade?
Stella (feliz):- ¡Por supuesto! Será después de que culmine todas mis tareas y proyectos de la escuela, además que la universidad ya casi está cerca, y el ritmo se pondrá más pesado, por lo cual tendré que suspenderlo para poner atención a mi ingreso al nivel superior, y, si quiero participar en campeonatos de beyblade, que busque fechas donde no interfieran con mis estudios.
Mis amigos en verdad que se alegraron.
Beatrice: - Bueno, pero al menos esto que te sucedió que te sirva como experiencia. Aún sigo molesta de que pasaras en alto, aquellas advertencias que te dijimos por tu insolencia en querer mejorar en el beyblade.
Stella (triste):- Lo siento. Yo solo quería seguir practicando, concentrada en él, para cuando lo volviera a ver, quede maravillado por lo asombrosa y fabulosa que soy.
Tanabe (molesto):- Pero recuerda que los estudios son primero. Te dijimos las consecuencias e hiciste oídos sordos.
Stella (triste):- Perdón.
Beatrice (feliz):- Bueno, no estamos aquí para regañarte o que te arrepientas de los hechos pasados. Lo hecho, hecho está y, hay que enfocarnos en el presente, para que no alteres el futuro.
Stella (feliz): - Que haría sin ustedes. Si los tuviera en frente, los abrazaría y mucho.
Tanabe (sonriendo) :- Gracias por tu sentir pero…
Tanabe (feliz):- cambiando el tema, ¿a qué hora será el evento?
Nos reírnos ya que, el único que estaba emocionado en ir a ese lugar era mi amigo Tanabe.
Beatrice (feliz):- Recuerdo que el cartel decía algo como entre las 9:00 am o 10:00 am.
Tanabe (ilusionado):- Opto por ir a las 10:00 am, no me quiero levantar tan temprano para acudir al lugar.
Stella (feliz):- No importa la hora de entrada, sino la hora en la que Kai estará en el lugar ¡Mira que llevo tiempo en esperarlo!
Beatrice (confundida):- ¡Oh! ¡Ahí te voy a quedar mal, no recuerdo que estuviera plasmado un horario para los equipos invitados!
Stella (suspiro):- Esta bien, iremos a las 10:00 am.
(CONTINUARÁ…)
