Esto lo deberia haber puesto en el primer capitulo....se me olvido,
perdon.....
Harry Potter y todos los personajes que aparecen aquí del libro son de J. K
Rowling, Sra Rowling prometo devolverle sus personajes tal como estaban,
esto es solo por entretencion, no pretendo ganar nada con esto.
Ehhh...... Hola, puse dos capitulos para que la cosa avanzara mas rapido, los primeros dos capitulos son algo lentos pero despues les prometo que la cosa se pone muy buena y con muchas sorpresas. Ojala les guste y me dejen algun mensajito para saber que les parece o si deberia cambiar algo..... un beso grande, Javi
Cap. II La Primera Clase
La primera clase de Erin seria el Miércoles. Era Martes y no aguantaba el nerviosismo, ya durante el día se había encargado de presentar su mascota, Charlotte, una araña negra gigante de patas con rayas amarillas que llevaba a todas partes causando pavor, pero demostró, tal como ella decía, que era una criatura adorable. Erin y Hagrid compartían el mismo tipo de pensamiento: mientras mas horripilante la criatura, mas adorable es. Charlotte era conocida por los cariñosos abrazos que daba. Harry ya había sido víctima, pero al fin y al cabo no eran tan malos, solo algo extraños. Pero para Ron tener una araña así caminando por ahí era toda una pesadilla, estaba como Ojoloco Moody, en Alerta Permanente, no salía sin mirar a ambos lados de los pasillos y solo una vez Charlotte había tratado de abrazarlo produciéndole al pobre Ron un colapso que lo tuvo una noche en la enfermería.
La profesora Moore tenia todo preparado, hasta Charlotte estrenaría collar nuevo en la primera clase de su dueña. En esta no pasaría materia, sino que les explicaría en que consistirían las clases, materiales que utilizarían y ciertas visitas especiales que tendrían. Erin estaba feliz de volver a Hogwarts, después de unos anos de trabajo en Albania, deseaba algo mas simple. Estaba encantada de ver como todo seguía igual y de ser colega de los profesores que tanto admiro en su niñez. Dumbledore parecía no envejecer, Mc Gonagall seguía igual se estricta pero con un gran corazón y Snape, la amargura en persona. "Si fuera algo mas amable seria un excelente profesor" penso arreglando los últimos detalles. Recordó a Flickwick y sus geniales clases de encantamientos y a Sprout con las inolvidables Mandrágoras, además penso que ella y Hooch serian excelentes amigas siendo la profesora de vuelo y Quidditch, dos cosas que a ella le encantaban.
El Miércoles llego mas rápido de lo que pensaba, Erin abrió los ojos cerca de las 5:30 AM de la mañana y no volvió a quedase dormida. Cerca de las 6 AM se levanto a darle un par de pasteles a Charlotte y aprovecho para arreglarse para el desayuno. Se puso un vestido igual al del primer día, solo que este era negro con una cinta blanca. Casi parecía la versión femenina de Snape, sino fuera por su cabello, sus labios rojos, la extremada felicidad y dulzura que derrochaba. Los desayunos de Hogwarts eran espectaculares, llenos de frutas, tartas, panes y deliciosas avenas. Erin se relamía pensando con los manjares que se encontraría en el comedor. Y no se equivoco. El comedor de los profesores, como el de los alumnos estaba lleno de pasteles, jugos naturales y otras cosas ricas. Como todos estaban medios dormidos no conversaban mucho. Hooch le comento algo sobre un equipo de Quidditch y Snape a su lado solo gruñía, comía pasteles y tomaba café negro, tan negro como sus ojos.
Erin dejo el Gran Salón al final, junto con los últimos alumnos. Ya era tarde, sino se apuraba llegaría tarde a su primera clase. Se apresuro a su habitación, puso unos libros sobre Charlotte, la tomo de la cadena del collar y partió corriendo a su salón. Para su mala suerte casi tropezó con Dumbledore a la salida del cuadro. "Calma, Erin, todavía hay tiempo" sonrío y siguió su camino. La profesora Moore afirmo mas fuerte a Charlotte y corrió por el pasillo hacia la escalera.
El Profesor Snape se dirigía a su salón cuando escucho que Dumbledore le decía a la profesora Moore que se calmara, volteo para mirar que pasaba y siguió bajando. Hasta que Erin que venia corriendo le piso el final de la capa que estaba en el escalón anterior. Erin tratando de sujetarlo, lo agarro del hombro haciendo que ella se fuera de lado y Snape al tratar de agarrarla de la capa se fue al suelo junto con ella y Charlotte. Y los tres rodaron escalera abajo. Para suerte de Erin, Snape le amortiguo el impacto final.
La risa que había comenzado entre los alumnos paso a preocupación cuando ninguno de los dos se movía. La profesora Moore se había golpeado en la espalda y había terminado su viaje boca abajo sobre el pecho de Snape, a quien no le había pasado nada grave, solo tenia un corte en el brazo producto de una de las garras de Charlotte.
"Profesora" dijo Snape sacándosela de encima poniéndola boca arriba a los pies de la escalera. Erin despertó sobresaltada. "Profesor Snape, discúlpeme, perdón, perdón, perdón, le juro que fue sin querer, yo iba..." "No importa, ahora quédese tranquila y no hable" dijo Snape ayudándola a sentarse. "No, estoy bien, en serio" Erin se incorporo ayudada por Malfoy que iba pasando y vio lo que había pasado y alucinaba por haber sido el quien se hubiera caído con la profesora. Malfoy le recogió los libros. "Gracias, Draco, déjalos sobre Charlotte, por favor" la Araña media aturdida miraba a Malfoy con ternura preparando uno de sus abrazos. "Profesor Snape, esta sangrando" dijo Erin alarmada cuando vio que Snape se miraba la mano con sangre. "No es nada" "Ah, fue Charlotte, venga Profesor, yo lo puedo curar" dijo Erin poniéndose de pie. "No Gracias, iré a la enfermería" y Snape comenzó a alejarse. "Profesor, por favor, las garras de Charlotte tienen una sustancia urticante, tengo el antídoto, vamos, o le comenzara a picar y a doler mucho" "Tengo Clases" dijo Snape fríamente. "Yo también, y pueden esperar por algo así, vamos" "Esta bien" dijo en un gruñido. Erin sonrió satisfecha. "Charlotte, cariño, lleva estos libros al salón por favor" La araña partió corriendo por el pasillo y se sentían los gritos que daban los chicos por donde ella pasaba. Erin y Snape subieron la escalera hacia el salón de Encantamientos que estaba vacío. "Vuelvo enseguida" le dijo a Snape.
Volvió a los 5 minutos con una pequeña botella. Erin se sentó frente a Snape. "Profesora, puedo hacerlo solo" "Dígame Erin, por favor, mucha formalidad" Erin sonrió. Snape miro al suelo. "Eh.... Erin??.... si, eh...su, tu vestido..." Erin miro su vestido y noto que este se había rajado hasta la mitad del muslo. "Uy, demasiado sexy, no queremos eso, no me había fijado, Gracias Profesor" y Erin con su varita arreglo el vestido. "Severus" dijo Snape. "Ah?" Erin lo miro confundida. "Dígame Severus, si yo le puedo decir Erin, dígame Severus" Erin le pareció una frase adorable viniendo de tal espécimen, lamentablemente su cara seguía igual de seria y su expresión igual de amargada. "Esta bien..... Severus" dijo sonriéndole untando la poción en una tela. "Súbase la manga, por favor" Snape dudo unos segundos, y gruñendo se saco la chaqueta. La manga de su camisa blanca tenia una gran mancha roja evidenciando que realmente estaba herido. Con cuidado se arremango la camisa, pues le había comenzado a picar y a doler. Erin le tomo el brazo y lo puso sobre un trozo de tela sobre sus piernas y comenzó a limpiar la herida con extrema cautela para no causarle dolor a Snape, si era amargo cuando estaba normal, no se imaginaba lo que le podría decir si le llegaba a doler. Snape aprovecho de examinarla. "Como tiene tantas pecas??" se pregunto. "Quien es esta persona que es tan amable conmigo y que todavía no me pone en su lista de Personas desagradables?? Porque se esfuerza tanto por ser agradable conmigo?? Porque diantres me pregunto todo esto??" Snape estaba en plena reflexión cuando Erin dejo de limpiar la herida, el miro su brazo y se dio cuenta que el tajo estaba justo en el tatuaje de la Marca Tenebrosa, símbolo de los Mortigafos. Erin estaba pálida, hasta las pecas no se le notaban, soltó la tela ensangrentada. Snape se dio cuenta que ella temblaba, la miro y sus ojos color miel estaban llenos de lagrimas. Erin le bajo la manga, le puso la botella en la mano y le cerro el puño. "Será mejor que se lo apliquen en la enfermería" Diciendo esto se paro y se dirigió a la puerta. "Lo siento" le dijo antes de salir hacia su salón. Snape estaba desconcertado, acaso ella no sabia que el había sido Mortifago??"
Erin llego a su salón con cara de preocupación, los alumnos que tenían casi una fiesta se quedaron mirándola, era mas que claro que algo la molestaba. "Profesora, eh...esta usted bien??" Dijo Hermione acercándose a la mesa de la profesora. "Si, si Srta. Granger, estoy bien no se preocupe, Gracias" y se seco las lagrimas. Se paro y se puso delante de su escritorio apoyándose en el. Charlotte que descansaba en este la miraba con atención. "Bueno, jóvenes, les diré la verdad enseguida, esta no será una materia fácil, tenemos mucho en que ponernos al día..." pero la mano de Hermione en el aire la interrumpió. Dumbledore ya le había contado sobre los chicos de Gryffindor y obviamente sobre Harry, Ron y Hermione. "Que pasa Srta. Granger?? No he preguntado nada" Erin sonrió. "Eh, Profesora, tiene sangre en sus manos" Erin se miro y Hermione estaba en lo correcto. "Oh!" Erin agarro un pañuelo del escritorio y comenzó a limpiarse las manos. "Eh... no es mía no se preocupen... no, no he matado a nadie, tuve un accidente en la escalera con el profesor Snape y el tuvo un corte en el brazo el cual le ayude a curar, nada mas" Mientras explicaba Erin, un escalofrío subía por su espina de solo pensar que tenia la sangre de un Mortifago en sus manos. Harry, Ron y Hermione se miraron, Snape dejando que le ayuden?
Luego de dos horas de explicaciones de todo lo que harían durante el ano, a los alumnos le quedo claro que aunque la profesora fuera bonita, eso no le quitaría exigencia a su clase prometiéndoles que los pondría al día en lo que a Defensa contra las artes obscuras se refería. Los alumnos dejaron el salón para ir a sus siguientes clases, Erin se quedo en su escritorio pensando. Había sido una mañana extraña. Snape seria realmente un Mortifago?? Ella ya lo conocía como profesor y conocía su fama de amargura, sarcasmo y favoritismo, pero ella sabia que mas adentro de el existía algo, ese algo seria su devoción al Señor Obscuro o seria algo mas?? Entre reflexión y reflexión acariciaba a Charlotte que estaba en su regazo comiendo un pastel de ciruela. Erin estaba muy confundida.
Ehhh...... Hola, puse dos capitulos para que la cosa avanzara mas rapido, los primeros dos capitulos son algo lentos pero despues les prometo que la cosa se pone muy buena y con muchas sorpresas. Ojala les guste y me dejen algun mensajito para saber que les parece o si deberia cambiar algo..... un beso grande, Javi
Cap. II La Primera Clase
La primera clase de Erin seria el Miércoles. Era Martes y no aguantaba el nerviosismo, ya durante el día se había encargado de presentar su mascota, Charlotte, una araña negra gigante de patas con rayas amarillas que llevaba a todas partes causando pavor, pero demostró, tal como ella decía, que era una criatura adorable. Erin y Hagrid compartían el mismo tipo de pensamiento: mientras mas horripilante la criatura, mas adorable es. Charlotte era conocida por los cariñosos abrazos que daba. Harry ya había sido víctima, pero al fin y al cabo no eran tan malos, solo algo extraños. Pero para Ron tener una araña así caminando por ahí era toda una pesadilla, estaba como Ojoloco Moody, en Alerta Permanente, no salía sin mirar a ambos lados de los pasillos y solo una vez Charlotte había tratado de abrazarlo produciéndole al pobre Ron un colapso que lo tuvo una noche en la enfermería.
La profesora Moore tenia todo preparado, hasta Charlotte estrenaría collar nuevo en la primera clase de su dueña. En esta no pasaría materia, sino que les explicaría en que consistirían las clases, materiales que utilizarían y ciertas visitas especiales que tendrían. Erin estaba feliz de volver a Hogwarts, después de unos anos de trabajo en Albania, deseaba algo mas simple. Estaba encantada de ver como todo seguía igual y de ser colega de los profesores que tanto admiro en su niñez. Dumbledore parecía no envejecer, Mc Gonagall seguía igual se estricta pero con un gran corazón y Snape, la amargura en persona. "Si fuera algo mas amable seria un excelente profesor" penso arreglando los últimos detalles. Recordó a Flickwick y sus geniales clases de encantamientos y a Sprout con las inolvidables Mandrágoras, además penso que ella y Hooch serian excelentes amigas siendo la profesora de vuelo y Quidditch, dos cosas que a ella le encantaban.
El Miércoles llego mas rápido de lo que pensaba, Erin abrió los ojos cerca de las 5:30 AM de la mañana y no volvió a quedase dormida. Cerca de las 6 AM se levanto a darle un par de pasteles a Charlotte y aprovecho para arreglarse para el desayuno. Se puso un vestido igual al del primer día, solo que este era negro con una cinta blanca. Casi parecía la versión femenina de Snape, sino fuera por su cabello, sus labios rojos, la extremada felicidad y dulzura que derrochaba. Los desayunos de Hogwarts eran espectaculares, llenos de frutas, tartas, panes y deliciosas avenas. Erin se relamía pensando con los manjares que se encontraría en el comedor. Y no se equivoco. El comedor de los profesores, como el de los alumnos estaba lleno de pasteles, jugos naturales y otras cosas ricas. Como todos estaban medios dormidos no conversaban mucho. Hooch le comento algo sobre un equipo de Quidditch y Snape a su lado solo gruñía, comía pasteles y tomaba café negro, tan negro como sus ojos.
Erin dejo el Gran Salón al final, junto con los últimos alumnos. Ya era tarde, sino se apuraba llegaría tarde a su primera clase. Se apresuro a su habitación, puso unos libros sobre Charlotte, la tomo de la cadena del collar y partió corriendo a su salón. Para su mala suerte casi tropezó con Dumbledore a la salida del cuadro. "Calma, Erin, todavía hay tiempo" sonrío y siguió su camino. La profesora Moore afirmo mas fuerte a Charlotte y corrió por el pasillo hacia la escalera.
El Profesor Snape se dirigía a su salón cuando escucho que Dumbledore le decía a la profesora Moore que se calmara, volteo para mirar que pasaba y siguió bajando. Hasta que Erin que venia corriendo le piso el final de la capa que estaba en el escalón anterior. Erin tratando de sujetarlo, lo agarro del hombro haciendo que ella se fuera de lado y Snape al tratar de agarrarla de la capa se fue al suelo junto con ella y Charlotte. Y los tres rodaron escalera abajo. Para suerte de Erin, Snape le amortiguo el impacto final.
La risa que había comenzado entre los alumnos paso a preocupación cuando ninguno de los dos se movía. La profesora Moore se había golpeado en la espalda y había terminado su viaje boca abajo sobre el pecho de Snape, a quien no le había pasado nada grave, solo tenia un corte en el brazo producto de una de las garras de Charlotte.
"Profesora" dijo Snape sacándosela de encima poniéndola boca arriba a los pies de la escalera. Erin despertó sobresaltada. "Profesor Snape, discúlpeme, perdón, perdón, perdón, le juro que fue sin querer, yo iba..." "No importa, ahora quédese tranquila y no hable" dijo Snape ayudándola a sentarse. "No, estoy bien, en serio" Erin se incorporo ayudada por Malfoy que iba pasando y vio lo que había pasado y alucinaba por haber sido el quien se hubiera caído con la profesora. Malfoy le recogió los libros. "Gracias, Draco, déjalos sobre Charlotte, por favor" la Araña media aturdida miraba a Malfoy con ternura preparando uno de sus abrazos. "Profesor Snape, esta sangrando" dijo Erin alarmada cuando vio que Snape se miraba la mano con sangre. "No es nada" "Ah, fue Charlotte, venga Profesor, yo lo puedo curar" dijo Erin poniéndose de pie. "No Gracias, iré a la enfermería" y Snape comenzó a alejarse. "Profesor, por favor, las garras de Charlotte tienen una sustancia urticante, tengo el antídoto, vamos, o le comenzara a picar y a doler mucho" "Tengo Clases" dijo Snape fríamente. "Yo también, y pueden esperar por algo así, vamos" "Esta bien" dijo en un gruñido. Erin sonrió satisfecha. "Charlotte, cariño, lleva estos libros al salón por favor" La araña partió corriendo por el pasillo y se sentían los gritos que daban los chicos por donde ella pasaba. Erin y Snape subieron la escalera hacia el salón de Encantamientos que estaba vacío. "Vuelvo enseguida" le dijo a Snape.
Volvió a los 5 minutos con una pequeña botella. Erin se sentó frente a Snape. "Profesora, puedo hacerlo solo" "Dígame Erin, por favor, mucha formalidad" Erin sonrió. Snape miro al suelo. "Eh.... Erin??.... si, eh...su, tu vestido..." Erin miro su vestido y noto que este se había rajado hasta la mitad del muslo. "Uy, demasiado sexy, no queremos eso, no me había fijado, Gracias Profesor" y Erin con su varita arreglo el vestido. "Severus" dijo Snape. "Ah?" Erin lo miro confundida. "Dígame Severus, si yo le puedo decir Erin, dígame Severus" Erin le pareció una frase adorable viniendo de tal espécimen, lamentablemente su cara seguía igual de seria y su expresión igual de amargada. "Esta bien..... Severus" dijo sonriéndole untando la poción en una tela. "Súbase la manga, por favor" Snape dudo unos segundos, y gruñendo se saco la chaqueta. La manga de su camisa blanca tenia una gran mancha roja evidenciando que realmente estaba herido. Con cuidado se arremango la camisa, pues le había comenzado a picar y a doler. Erin le tomo el brazo y lo puso sobre un trozo de tela sobre sus piernas y comenzó a limpiar la herida con extrema cautela para no causarle dolor a Snape, si era amargo cuando estaba normal, no se imaginaba lo que le podría decir si le llegaba a doler. Snape aprovecho de examinarla. "Como tiene tantas pecas??" se pregunto. "Quien es esta persona que es tan amable conmigo y que todavía no me pone en su lista de Personas desagradables?? Porque se esfuerza tanto por ser agradable conmigo?? Porque diantres me pregunto todo esto??" Snape estaba en plena reflexión cuando Erin dejo de limpiar la herida, el miro su brazo y se dio cuenta que el tajo estaba justo en el tatuaje de la Marca Tenebrosa, símbolo de los Mortigafos. Erin estaba pálida, hasta las pecas no se le notaban, soltó la tela ensangrentada. Snape se dio cuenta que ella temblaba, la miro y sus ojos color miel estaban llenos de lagrimas. Erin le bajo la manga, le puso la botella en la mano y le cerro el puño. "Será mejor que se lo apliquen en la enfermería" Diciendo esto se paro y se dirigió a la puerta. "Lo siento" le dijo antes de salir hacia su salón. Snape estaba desconcertado, acaso ella no sabia que el había sido Mortifago??"
Erin llego a su salón con cara de preocupación, los alumnos que tenían casi una fiesta se quedaron mirándola, era mas que claro que algo la molestaba. "Profesora, eh...esta usted bien??" Dijo Hermione acercándose a la mesa de la profesora. "Si, si Srta. Granger, estoy bien no se preocupe, Gracias" y se seco las lagrimas. Se paro y se puso delante de su escritorio apoyándose en el. Charlotte que descansaba en este la miraba con atención. "Bueno, jóvenes, les diré la verdad enseguida, esta no será una materia fácil, tenemos mucho en que ponernos al día..." pero la mano de Hermione en el aire la interrumpió. Dumbledore ya le había contado sobre los chicos de Gryffindor y obviamente sobre Harry, Ron y Hermione. "Que pasa Srta. Granger?? No he preguntado nada" Erin sonrió. "Eh, Profesora, tiene sangre en sus manos" Erin se miro y Hermione estaba en lo correcto. "Oh!" Erin agarro un pañuelo del escritorio y comenzó a limpiarse las manos. "Eh... no es mía no se preocupen... no, no he matado a nadie, tuve un accidente en la escalera con el profesor Snape y el tuvo un corte en el brazo el cual le ayude a curar, nada mas" Mientras explicaba Erin, un escalofrío subía por su espina de solo pensar que tenia la sangre de un Mortifago en sus manos. Harry, Ron y Hermione se miraron, Snape dejando que le ayuden?
Luego de dos horas de explicaciones de todo lo que harían durante el ano, a los alumnos le quedo claro que aunque la profesora fuera bonita, eso no le quitaría exigencia a su clase prometiéndoles que los pondría al día en lo que a Defensa contra las artes obscuras se refería. Los alumnos dejaron el salón para ir a sus siguientes clases, Erin se quedo en su escritorio pensando. Había sido una mañana extraña. Snape seria realmente un Mortifago?? Ella ya lo conocía como profesor y conocía su fama de amargura, sarcasmo y favoritismo, pero ella sabia que mas adentro de el existía algo, ese algo seria su devoción al Señor Obscuro o seria algo mas?? Entre reflexión y reflexión acariciaba a Charlotte que estaba en su regazo comiendo un pastel de ciruela. Erin estaba muy confundida.