* RECIBIMIENTO *

Cuando entré al castillo de Hyrule, había mucha gente afuera en el mercado con músicos y bailables, contentos de recibirme. Todos los hyrulians se había reunido solo por ver a la princesa desaparecida...que desdicha...

Había muchos reyes adentro en el castillo con mis padres. Era muy raro, aunque tenía mucho tiempo sin verlos...no me causaba la mas mínima emoción verlos...sólo tenía temor al castigo...un castigo que realmente tendría...Oh Diosas! ¿Que va a hacer de mi?

Mi madre corrió y me abrazó llorando dramaticamente y tambien mi padre hizo lo mismo, sin llorar claro esta. Enfrente de todos se comportaban de una manera, pero se que me esperaba otra cosa. Llegó la noche, y antes de ir a mi recámara, fui llamada para ir al cuarto de mis padres.

-Zelda, tu madre tiene que hablar contigo, las dejo solas-Dijo mi padre saliendo del cuarto y cerrando la puerta detrás de el.

-¿Si madre?

-Zelda...como...¿Como pudiste?

-Madre...tu no entiendes...

-¿No entiendo que? ¿Que te rehusas a casar con Shenelik? ¿Que eres una...una...rebelde?

-Madre...yo no me quiero casar...deshaste de esa idea de la boda, es un absurdo que no voy a cumplir...olvidalo madre...

-¿Como? A mi no me vengas con esos estúpidos argumentos! Zelda, no pelees contra tu destino...

-Mi destino no es Shenelik!!- En eso, entra mi padre quien había escuchado toda la discusión.

-Zelda, ¿Como no va a ser tu destino eh? Tu destino es ser la reina de Hyrule!

-Pues yo no quiero ser la Reina de Hyrule ni mucho menos casarme con Shenelik!- Mi madre se soltó a llorar y mi padre me respondió un poco mas energico...

-Zelda! ¿Que va a ser de Hyrule si tu no te casas con Shenelik eh? ¿Vas a ser bastante egoísta para no cuidar de TU gente? Si no te casas con el...no tendre decendientes que gobiernen a Hyrule y tu sabes lo que pasará!!!

-¿Que pasará?-Dije yo- Lo único que pasaría es que mis primos lejanos reinen esta tierra, ¿Que tiene de malo eso?

-Ah! No puedo creerlo...hija,...has decepcionado a tu padre! ¿Como es que no te puedes sentir unida a esta tierra donde naciste? ¿Como es que no sientas coraje que otra persona ajena a este lugar gobierne a Hyrule a TU tierra y a TU gente? Entiendelo hija...Eso se le llama el destino!

-Pues yo reniego de el!...padre, no es que no quiera reinar o decepcionarte, no es eso, yo no quiero casarme con Shenelik...yo...no quiero...

-¿Y cual es la razón por la cual te rehusas a hacerlo??

-Pues...yo....-¿Les dire la verdad?- Padre...yo...

-Zelda, no me extraña que donde estuviste algun desdichado te haya deslumbrado...sino fuera por ese joven valiente Link...quien sabe lo que sería de ti...

-Padre!

-Mira hija, yo solo te voy a advertir algo...las princesas no se casan con personas que no sean realeza...y si llego a saber de alguien...te juro por las diosas que lo he de mandar a la horca!-No puede ser! No puedo decirles la verdad! Mandarían a Link a la horca...-

-Pero padre...yo no quiero casarme con Shenelik!-En eso, interviene mi madre..

-Aqui no es lo que tu quieras sino lo que te convenga! Mira, Zelda, ya no se dice más! Te casarás con Shenelik en cuanto el lo disponga y punto! Deberías de agradecer de que no esta enfadado contigo, despues de lo que le hiciste...

-Pero madre! Voy a ser infeliz a su lado!-Ya no pude aguantar las lágrimas.

-Eso depende de ti Zelda...solo de ti...ahora retirate que tu madre y yo necesitamos descansar, fue un día muy pesado para nosotros...-Entonces yo respondí con sarcasmo...

-¿Ah si? Pues a mi tambien me dió gusto verlos, hasta mañana!

Salí del cuarto llorando sin parar. No podía creer lo injustos que eran mis padres!! Y luego me echaban en cara mi responsabilidad de Hyrule...si me permitieran casar con Link...de todo corazón governaría a Hyrule...estoy segura que Link sería mejor rey que Shenelik y que ninguno!!! Como lo extraño ahorita!....Link....te necesito!

Fuí a mi habitación y para mi sorpresa...lo encontre vacío. ¿Que paso con mis cosas? ¿Por que desaparecieron? En eso, Impa apareció detrás de mi, y senti una inmensa alegría! Solo atine en abrazarla y llorar en su hombro, como cuando era niña...

-Impa! Impa! Que alegría!

-Oh mi niña! No sabes cuanto me hacías falta! Te extrañe muchisimo!

-Impa! Eres la única persona que me ha recibido amablemente y cariñosamente en este castillo! Eres la única que estoy alegre de ver!

-Ay Zelda, si vieras que preocupada estuve por tí este tiempo! Tenía miedo que te pasara algo malo!

-No Impa, estoy bien...ahora es cuando estoy mal...quisieramrecostarme y platicarte todo, pero no se donde estan mis cosas

-A eso vine, verás mi niña, por órdenes del rey, tus cosas fueron transladadas a la torre mas alta del castillo, ahí será tu recamara...

-Pero...¿Que no es ahí donde solían poner a los reos mas peligrosos?

-Si, pero ahora lo han acondicionado muy bien para que duermas ahí...

-No puedo creerlo...

-Pero eso no es todo princesa...

-¿Ah no?

-No...verás, de ahora en adelante, tendrás a dos soldados que te vigilaran y no te dejaran salir para nada...y solo podrás ver a tus padres, a Shenelik y a mi...pero solo estarás permitida a salir con tus padres y con Shenelik...

-¿Y contigo?

-Conmigo no podrás salir...sospechan que yo te ayude a escapar la última vez y ya estoy sentenciada...

-¿Sentenciada? ¿A que?

-A la pena máxima...

No puedo creerlo!! Han sentenciado a Impa tambien! Esto es el colmo! Pero lo que más me desepera es no poder hacer nada al respecto. Subí a mi torre y en efecto, Impa tenía razón. Tenía a dos soldados en el pasillo...fuertes y con cara de pocos amigos...

Entramos a mni recamara, que era casi la misma, la que siempre odiaba...Y empezé a relatarle a Impa lo que ocurrió en estos últimos meses. Le platique de mi viaje...de la gente que conocí...pero preferí callar lo de Link...

-Princesa, es muy bonita tu historia pero hay algo que te hace falta platicar...

-¿A-Algo? ¿Como que?

-No se...algo medio verde...

-Impa! ¿Acaso tu sabes...?-Impa siempre asi de misteriosa, a veces me asusta

-No...pero bastó ver la alma solitaria que está rondando alla afuera para darme cuenta...

-¿Que dices...?-Me asomé por la ventana...y no pude ver a nadie...mas que una pequeña lucesita azul, que se movía mucho con un gran resplandor...AHH! Ahora entiendo! Es la hadita de Link! Ya veo mas claro! Es él el que está afuera esperando...

-Míralo...está rondado el castillo como una pantera negra en la noche...busca a su complemento...a tí...

-Oh Impa...siéntate...es una larga historia.- La hadita desaparece en medio de la obscuridad y ya no veo mas a Link. Sólo escucho un galopeo de caballo en la noche quieta y fue como si el ruido de las herraduras del caballo asemejaran los latidos de mi corazón. Impa se sienta a mi lado, y mientras transcurren las horas...le relato mi recorrido...y mi infinito amor por Link...

-Zelda, aún no ha caído sobre Hyrule el caos que te predije...

-Estas equivocada Impa, el caos ya empezó...

Y así, las horas transcurrieron lentas y dos días pasaron...lentos, tormentosos y angustiosos...no sabía nada de Link, pero espero verlo esta noche, en la fiesta que no tardará en comenzar...