Cap. 7: ¿Dónde está la carta?

Entró en la habitación y cerró. Se volvió hacia los "peluches".

- ¡¡¡¿OS HABÉIS VUELTO LOCOS?!!! ¡¡¡¡CÓMO VOY A ENSEÑARLE MI CARTA A SHAORAN!!!!

- ¿Y por qué no? Es la oportunidad perfecta para decirle que le quieres- dijo Kira.

- Pero… ¿Y si él ya no me quiere? ¿Y si ha encontrado a otra chica?

- ¡¡No digas tonterías!! Eso no lo sabrás al menos que se lo digas- dijo Kero.

- ¿Y desde cuando me animas, Kero? A ti nunca te gustó Shaoran.

- Desde que te comportas así por él. No me gusta nada el mocoso…

- ¡¡Kero!!

- Perdón, Shaoran. No me gusta nada, pero aun me gusta menos que estés tan triste por él.

- ¡Oh! ¡Vamos Sakura! ¡Ese chico es guapísimo! No lo dejes escapar otra vez- dijo Kira.

- ¡Kira, tu estás loca! ¡Cómo se te ocurre decir delante de él que yo he dicho que es muy guapo! ¡Casi me muero de vergüenza!

- ¡Venga, no irás a enfadarte!

- ¿Enfadarme? ¡Estoy furiosa! ¡Vais demasiado deprisa chicos! ¡Dejadme tiempo!

- ¡De eso nada! Si no se lo dices ya, nunca te atreverás- dijo Kero.

- Venga Sakura. Enséñale la carta y dile la verdad- dijo Kira.

- Está bien, lo haré. Y también le daré el osito.

- ¡Muy bien Sakura ánimos!- dijo Kira.

- ¡Tu puedes!- dijo Kero.

Sakura abrió el libro de Sakura y buscó su carta, pero no estaba. Corrió hacia el salón, donde estaba Shaoran. Vio su mochila y buscó allá, pero solo estaban unas pocas cartas. Shaoran la miraba desconcertado. Sakura empezaba a desesperarse.

- ¡No está! ¡No la encuentro!

- Sakura, ¿qué ocurre?- preguntó Shaoran.

- ¡Claro! Seguramente debe de haberse escapado, como han hecho rapidez, viento y fuego. Pero no la noto. Shaoran, ¿tu notas alguna carta?

- No, no noto nada.

Sakura transformó la llave en la vara y llamó a la carta rápida. Ésta apareció en forma de animal delante suyo.

- Carta rápida, ¿mi carta también se escapó con vosotras?

La carta asintió con la cabeza.

- No estaba con vosotras cuando os encontré. ¿Sabes dónde ha ido?

La carta negó con la cabeza.

- ¿Ninguna carta sabe dónde ha ido?

La carta volvió a negar y volvió a su forma de carta. Sakura estaba asustada. Rápidamente cogió las cartas y salió de la casa. Invocó a la carta vuelo y se elevó, tan rápido que ni Kero, ni Kira ni Shaoran pudieron seguirla.

- Yo voy a dar una vuelta a ver si encuentro a esa carta. Por cierto, ¿cuál es?- preguntó Shaoran a Kero.

- Eso no te lo podemos decir, te lo tiene que decir Sakura- dijo Kira.

- ¿Por qué?

- Por que es su carta- dijo Kero.

- Te lo tiene que decir ella. No preguntes, tiene que ser así- dijo Kira.

- ¿Pero por qué?

- Yo voy a buscar a Sakura- dijo Kero.

- Yo te acompaño- dijo Kira.

- ¡¡Esperad!!

Pero Kero y Kira hicieron ver que no le escuchaban y se largaron. El pobre Shaoran, que no entendía nada de nada, empezó a caminar.

Ya era tarde y el sol empezaba a ponerse, y Shaoran no había encontrado nada. Cansado, se sentó en un banco en el parque pingüino, que estaba desierto. Miró los columpios y recordó cuando allí consoló a Sakura del rechazo de Yukito. Sonrió. También recordó que allí había vuelto a verla, sin reconocerse, y que la encontró triste. Entonces vio a Sakura acercarse con la cabeza agachada y sentarse en un columpio, rompiendo a llorar. Shaoran se entristeció al verla así y se levantó para ir a consolarla.

Sakura no vio como Shaoran se acercaba. Se había tapado la cara con las manos y su llanto le impedía oír los pasos del joven.

- Mi carta. No puede ser que la haya perdido. No puede ser- decía mientras lloraba.

- Sakura.

Sakura levantó la cara poco a poco. Allí estaba Shaoran, mirándola, con unos ojos que reflejaban ternura, cariño, amor. Los dos estaban algo ruborizados.

- Sakura ¿qué te pasa? ¿Por qué lloras?- decía Shaoran en tono dulce.

- Es… Es por mi carta, no la he encontrado.

- Vamos Sakura, no debes llorar. Ya verás como aparece.

Sakura se levantó y miró a Shaoran. Unas lagrimas volvieron a recorrer sus mejillas.

- ¿Y si no aparece? La he buscado por toda la ciudad y no la he encontrado. Es una carta muy especial para mí, demasiado- la chica rompió de nuevo a llorar.

Shaoran, para calmarla, la abrazó.

- Tranquila, Sakura. La encontraremos.

La tenía allí, entre sus brazos. Shaoran notó su calor, su corazón, su respiración cerca de la suya.

Sakura notó el calor de Shaoran y dejó de llorar. Apoyó su cabeza en el pecho de él y sintió su corazón. Cerró los ojos. Le gustaba tanto estar entre sus brazos que le hubiera gustado que ese momento nunca terminara.

Shaoran notó como Sakura se relajaba y sonrió. Estaba tan feliz de tenerla entre sus brazos que deseó tenerla siempre a su lado y no separarse nunca de ella.

- "Debo decirle que todavía la quiero. Quizás ella me quiera. O quizás no, no lo sé. Pero debo decírselo"- pensó Shaoran y se armó de valor-Sakura. Yo… Yo…

De pronto los dos notaron una energía. Sakura se giró y los dos vieron una carta de espaldas, que brillaba.

- ¡¡¡Mi carta!!! ¡¡¡Shaoran, es mi carta!!!

- ¿Esa es tu carta?

Notas de la autora:

Menudo corte le he dado al pobre fic ^^UUUU Solo quería decir que en el siguiente capítulo la cosa se pondrá interesante, porque van a reaparecer ciertos tipos… uno con una cicatriz en la cara… (Kina se hace la despistada) ¿quiénes pueden ser?

Bueno si queréis saber qué demonios vuelven a hacer esos tipos, el capítulo 8 lo tendréis dentro de 7 días!!

Y por favor dejen reviews!!!! ´·x·`Aunque sea para criticar lo que me he pasado con la pobre Sakura ^^UU No me enfado (antes ya he recibido mails con amenazas ^^UUUUU)

Gracias por leerlo, hasta dentro de una semanita!!

Kina ^_^ (Kina_chan Saku ^_-)