**Ok.. aquà está el 7° capÃtulo.. espero que les guste!!
**Camila: hehe a mi tampoco me gusta que me dejen picada!! Solo que pues no puedo entrar a internet todos los dias y pues es por eso que no todos los dias voy a poder subir los capÃtulos. Please, ténganme paciencia!! Prometo no dejar a medias esta historia!! ^_^!
------------- 7 LAS MUERTES MISTERIOSAS ---------------
Durante los siguientes dÃas en las clases se respiraba un poco de tensión. Ya se habÃan enterado de la marca tenebrosa y los alumnos no paraban de murmurar y verse asustados.
En la clase de herbologÃa (que la tenÃamos con los alumnos de Hufflepuff) la profesora Sprout nos explicó como se trata a las Tentáculas Venenosas, unas plantas grandes que tienen espinas y si te descuidas, te pueden morder, en su flor tienen dos hileras de filosas espinas, que usan también para capturar a los insectos que pasen cerca de ella. A pesar de ser muy peligrosas, se podÃa controlarlas dándoles algo dulce, generalmente chocolate, asà que nos pusimos por equipos para tratar de cambiar de macetas a las Tentáculas mas pequeñas a otras mas grandes, para que pudieran crecer mejor. Esta vez yo no pude trabajar con Harry ni con Ron ni con Hermione, me tocó trabajar con Justin Finch-Fletchley y Susan Bones, ambos de Hufflepuff.
Tardamos un buen rato tratando de hacer comer a la tentácula unos trozos grandes de chocolate, pues apenas nos acercábamos y ésta trataba de mordernos el brazo. Una vez que se comió el chocolate y se tranquilizó, pudimos hacer el resto del trabajo. A Ron no le fue muy bien, al final de la clase Harry y Dean tuvieron que llevarlo a la enfermerÃa pues una tentácula habÃa conseguido morderle el antebrazo.
Al dÃa siguiente a la hora de la comida entró el correo como de costumbre y vi que una scop venÃa justo a donde estábamos nosotros. Por un momento pensé que era Cooper, pero al verla llegar y empezar a zumbar al rededor de nuestras cabezas, me di cuenta que estaba en un error. Era Pigwidgeon, la lechuza de Ron, que dejó caer en su plato un diario enrollado. Lo abrió y por la expresión en su cara, supimos que no eran buenas noticias.
Harry agarró el diario y lo empezó a leer en voz lo suficientemente alta para que Hermione y yo escucháramos:
Extrañas muertes intrigan a magos del ministerio. Ignoran causa
El pasado jueves desaparecieron varios magos en unas circunstancias muy extrañas. Varios trabajaban en el ministerio de magia y después de un dÃa de trabajo, no regresaron a sus casas, las esposas, sin saber de que se trataba, no avisaron hasta el dÃa siguiente cuando tampoco regresaron. El ministerio negó haberlos retenido o que se hubieran dedicado a trabajar horas extras, según declaró el Ministro de Magia, el señor Cornelius Fudge:
"Últimamente el Ministerio ha estado muy ocupado en asuntos internacionales, varios de los magos desaparecidos trabajaban para esos departamentos, pero les puedo asegurar que ninguno de ellos se ha quedado tarde o ha tenido la necesidad de quedarse a trabajar horas extras."
Sin embargo, dos dÃas después de la misteriosa desaparición de los magos, sus cuerpos sin vida fueron encontrados a cientos de kilómetros de distancia de sus hogares, por gente muggle que trabaja en los campos. Estos declararon que durante sus jornadas por el campo encontraron los cuerpos de unas personas con atuendo extraño, ya sin vida y con algunas heridas no muy serias, pero expertos magos han declarado que sin duda se trata de la maldición con las que El-Que-No- Debe-Ser-Nombrado mataba a los que se rehusaban pasarse de su lado.
Con esta noticia esperamos que el Ministerio ponga mas atención a sus trabajadores y que resuelvan el misterio pronto. Aún no se encuentra al o a los culpables, pero el solo pensar en el antes causante de tantas muertes nos hace temblar de nuevo. ¿Será posible que el Señor Tenebroso haya vuelto? o ¿Hay aún mortÃfagos libres para seguir el camino de su amo?
Harry levantó la mirada y Hermione y yo nos miramos. Nosotros sabÃamos que el causante de todo eso era Voldemort, pero... ¿seguirÃa matando gente? el solo pensarlo hacia que una ola de miedo recorriera mi cuerpo, y al parecer a Hermione y a Ron les pasaba lo mismo.
El resto de la comida la pasamos en silencio, no tenÃamos ganas de seguir hablando.
**Camila: hehe a mi tampoco me gusta que me dejen picada!! Solo que pues no puedo entrar a internet todos los dias y pues es por eso que no todos los dias voy a poder subir los capÃtulos. Please, ténganme paciencia!! Prometo no dejar a medias esta historia!! ^_^!
------------- 7 LAS MUERTES MISTERIOSAS ---------------
Durante los siguientes dÃas en las clases se respiraba un poco de tensión. Ya se habÃan enterado de la marca tenebrosa y los alumnos no paraban de murmurar y verse asustados.
En la clase de herbologÃa (que la tenÃamos con los alumnos de Hufflepuff) la profesora Sprout nos explicó como se trata a las Tentáculas Venenosas, unas plantas grandes que tienen espinas y si te descuidas, te pueden morder, en su flor tienen dos hileras de filosas espinas, que usan también para capturar a los insectos que pasen cerca de ella. A pesar de ser muy peligrosas, se podÃa controlarlas dándoles algo dulce, generalmente chocolate, asà que nos pusimos por equipos para tratar de cambiar de macetas a las Tentáculas mas pequeñas a otras mas grandes, para que pudieran crecer mejor. Esta vez yo no pude trabajar con Harry ni con Ron ni con Hermione, me tocó trabajar con Justin Finch-Fletchley y Susan Bones, ambos de Hufflepuff.
Tardamos un buen rato tratando de hacer comer a la tentácula unos trozos grandes de chocolate, pues apenas nos acercábamos y ésta trataba de mordernos el brazo. Una vez que se comió el chocolate y se tranquilizó, pudimos hacer el resto del trabajo. A Ron no le fue muy bien, al final de la clase Harry y Dean tuvieron que llevarlo a la enfermerÃa pues una tentácula habÃa conseguido morderle el antebrazo.
Al dÃa siguiente a la hora de la comida entró el correo como de costumbre y vi que una scop venÃa justo a donde estábamos nosotros. Por un momento pensé que era Cooper, pero al verla llegar y empezar a zumbar al rededor de nuestras cabezas, me di cuenta que estaba en un error. Era Pigwidgeon, la lechuza de Ron, que dejó caer en su plato un diario enrollado. Lo abrió y por la expresión en su cara, supimos que no eran buenas noticias.
Harry agarró el diario y lo empezó a leer en voz lo suficientemente alta para que Hermione y yo escucháramos:
Extrañas muertes intrigan a magos del ministerio. Ignoran causa
El pasado jueves desaparecieron varios magos en unas circunstancias muy extrañas. Varios trabajaban en el ministerio de magia y después de un dÃa de trabajo, no regresaron a sus casas, las esposas, sin saber de que se trataba, no avisaron hasta el dÃa siguiente cuando tampoco regresaron. El ministerio negó haberlos retenido o que se hubieran dedicado a trabajar horas extras, según declaró el Ministro de Magia, el señor Cornelius Fudge:
"Últimamente el Ministerio ha estado muy ocupado en asuntos internacionales, varios de los magos desaparecidos trabajaban para esos departamentos, pero les puedo asegurar que ninguno de ellos se ha quedado tarde o ha tenido la necesidad de quedarse a trabajar horas extras."
Sin embargo, dos dÃas después de la misteriosa desaparición de los magos, sus cuerpos sin vida fueron encontrados a cientos de kilómetros de distancia de sus hogares, por gente muggle que trabaja en los campos. Estos declararon que durante sus jornadas por el campo encontraron los cuerpos de unas personas con atuendo extraño, ya sin vida y con algunas heridas no muy serias, pero expertos magos han declarado que sin duda se trata de la maldición con las que El-Que-No- Debe-Ser-Nombrado mataba a los que se rehusaban pasarse de su lado.
Con esta noticia esperamos que el Ministerio ponga mas atención a sus trabajadores y que resuelvan el misterio pronto. Aún no se encuentra al o a los culpables, pero el solo pensar en el antes causante de tantas muertes nos hace temblar de nuevo. ¿Será posible que el Señor Tenebroso haya vuelto? o ¿Hay aún mortÃfagos libres para seguir el camino de su amo?
Harry levantó la mirada y Hermione y yo nos miramos. Nosotros sabÃamos que el causante de todo eso era Voldemort, pero... ¿seguirÃa matando gente? el solo pensarlo hacia que una ola de miedo recorriera mi cuerpo, y al parecer a Hermione y a Ron les pasaba lo mismo.
El resto de la comida la pasamos en silencio, no tenÃamos ganas de seguir hablando.
