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------------- 10 EL BAILE DE NAVIDAD --------------

En las siguientes semanas las clases habían continuado normalmente. En Defensa contra Artes Oscuras, la profesora Delacour había empezado a hablarnos de Vampiros. En Cuidado de Criaturas Mágicas la profesora Grubbly- Plank ya había pasado de dragones a unicornios. En pociones, yo seguía sentándome junto a Malfoy (cada vez que me sentaba al lado de Harry, Ron o Hermione, el profesor Snape me cambiaba de lugar. Hasta intenté sentarme junto a Neville, pero aún así me cambiaba). Especialmente después de Halloweeon, había tratado mas fríamente a Draco, y siempre que me preguntaba porqué, solo le contestaba que pensara en cual podría ser la razón. Nunca le dije nada mas. Tenía algo de miedo cuando le hablaba. No había olvidado las palabras de Dumbledore.

Unas semanas antes de Navidad, en el gran comedor, el profesor Dumbledore hizo un anuncio que nos despejaría la mente durante un buen rato.

-Ya todos sabemos que se acerca Navidad, y que no es costumbre del colegio hacer bailes, pero como también sabemos, en estos momentos se vive una gran tensión por los sucesos que han estado ocurriendo. Hemos coincidido todos en que un baile este año sería lo mejor para pensar en otra cosa. Así que, el 25 de diciembre, aquí en el Gran Comedor, se llevará a cabo el Baile de Navidad. Lamentablemente, solo podrán asistir los alumnos de cuarto año en adelante. Los alumnos mas pequeños tendrán una pequeña fiesta en sus respectivas salas comunes.

Cada prefecto pasará la lista de los alumnos que se vayan a quedar en las vacaciones. Para asistir al baile tendrán que ponerse la túnica de gala, que ya se les había pedido. Y no olviden conseguir parejas.

En todas las mesas se podían observar a los chicos hablando entre sí y mirando a otras chicas.

-Hermione- Ron se apresuró a hablar. Se había puesto tan rojo como su cabello-¿Puedo... puedo... hablarte un momento afuera?

-Claro.- Hermione tenía una cara de extrañada. Mientras los dos se dirigían hacia la salida, Harry y yo nos estábamos aguantando la risa, ya sabíamos lo que le iba a pedir

-No va a dejar que alguien se la gane- dijo Harry finalmente.- La verdad es que... yo también quería decirte algo... y pues... ya que ellos se fueron, pues... quería saber si tu.. si tu quisieras ir al baile conmigo- Se había puesto tan rojo como Ron

-Esta bien.- de repente me empecé a reír al parecer sin ningún motivo

-¿Que? ¿que pasa?

Hermione y Ron ya venían de vuelta. Los dos igual de rojos..

-Es que Ron... tú..-no dejaba de reírme..- después yo... Hermione...

-¿Qué le pasa?- dijo Ron cuando se sentó. El color aún seguía en su rostro.

Harry se dio cuenta de lo que estaba diciendo y también se empezó a reír

-¿Que pasa¡!

-Es que.. mírate!! míranos!!- Harry tampoco podía hablar..

Todos nos habíamos puesto rojos y era lo que me causaba risa, primero Ron, después Harry, y luego yo, y luego.. Hermione. Al final ellos se dieron cuenta y se reían pero mas avergonzados.. "Es solo un baile!" terminó diciendo Hermione.

En los siguientes días Hermione ya tenía una lista muy larga de gente que se quedaba en vacaciones. Al parecer a todos les había gustado la idea del baile. Un día antes del baile estábamos Hermione, Ginny y yo hablando en nuestro dormitorio. Ginny había venido a visitarnos.

-Así que.. ¿con quien vas?- preguntó Hermione. Ginny se puso roja

-Voy con Neville- después de agachar la cabeza, como si le pesara dijo- otra vez

-Ay vamos, después de todo no es tan malo!

-Es que tu no has bailado con él! pero bueno, tienes razón, la verdad no es tan malo, además, es el único que me pediría que fuera con él.

Hermione de repente cambió el tema.. no sé porque lo hizo. Seguimos hablando un rato y después, cuando Ginny ya se había parado y dirigido a la puerta, se despidió y con los ojos un poco empañados, me dijo "Suerte con Harry". Yo lo único que le dije fue "gracias", no sabía porque lo había dicho. Después Hermione me explicó que a ella le gustaba Harry, pero ¿que podía hacer yo? No era mi culpa que también me gustara... *¿que también me gustara?* nunca había pensado en eso. Me reprimí por mis pensamientos y mejor intenté dormir.

El 25 desperté y vi que junto a mi cama había varios regalos. Había uno de cada quien, uno de Hermione (un libro de Desde América hasta Londres, los 100 mejores lugares mágicos), uno de Ron (una caja de dulces Bertie Botts y un póster de Taylor Lowen, el guardián de quidditch de los Black Bats de Brazil, uno de mis jugadores favoritos), y uno de Harry, que era una cajita de alhajero con una tarjeta muy bonita que hizo él mismo.

Esa mañana transcurrió muy rápido, y cuando nos dimos cuenta, ya nos estábamos arreglando para el tan esperado baile. Todas nos ayudábamos unas a otras para quedar lo mejor posible. Hermione se había alasiado el cabello y entre Parvati y yo le hicimos un peinado sencillo muy bonito. Yo iba a llevar mi cabello suelto, dijeron que se me veía muy bien. Hermione traía unos aparatos muggles que yo ya había visto antes, y me dijo que me vería muy bien con el cabello un poco moldeado, así que le hice caso y dejé que ella me peinara. Al final terminé con un cabello con el que había soñado hacía mucho (aunque solo fuera por un momento).

En cuanto a la túnica de gala, yo llevaba una de terciopelo de un verde oscuro muy brillante, Hermione llevaba una túnica de color azul rey, también muy bonita. Ya casi llegada la hora, sacó de su baúl una bolsita pequeña y me mostró lo que traía. Eran unos cosméticos muggles. Me insistió y al final las dos salimos con una sombra muy leve en los ojos, lo cual nos daba un toque especial. Salimos juntas del dormitorio, y antes de bajar por las escaleras, nos echamos a reír. ¿Sería posible que estuviéramos haciendo todo esto por unos chicos?

Llegamos al final de las escaleras. El baile estaba por comenzar. Harry y Ron voltearon al mismo tiempo y se quedaron sin habla ("wow"). Llegamos hasta ellos y Hermione, dirigiéndome una sonrisa les dijo a los dos: "¿Nos vamos?" ellos solo asintieron y nos dirigimos al gran comedor.

Entramos. El espectáculo era fantástico. En el techo del comedor se podía ver un cielo estrellado. Las cuatro mesas habían desaparecido y había muchas mesas mas pequeñas a los lados, dejando libre una pista de baile en medio del salón. Había 6 pinos de Navidad en cada lado y muchas de velas de colores verde y rojo flotaban en el aire. Avanzamos hasta una mesa y nos sentamos. Ya había mucha gente y algunos profesores ya estaban ahí.

Según me contaron, todo era como el año anterior. Las brujas de Mcbeth también estarían presentes con su música. En un rato mas entró Fred con Angelina y se sentaron en nuestro lado. El profesor Dumbledore nos dio la bienvenida y comenzó oficialmente el baile.

-¿Quieres bailar?- Harry se había parado y tenía una sonrisa en su boca

-Esta bien.. ¿Hermione, Ron? ¿vamos?

Nos paramos y nos fuimos a la pista. Ya habían empezado a bailar varias parejas, entre ellas pude distinguir a Ginny y Neville, a Parvati con Seamus, el profesor Dumbledore con la profesora McGonagall y en la parte de atrás, estaba Draco con Pansi Parkinson.

-Bonita túnica, Ron- era George, que bailaba con Katie

-Gracias- Ron se puso colorado.

-Di que te salvamos de traer ese vestido del año pasado

-Si, ya lo sé..

Después de un rato de estar bailando, Harry me empezó a llevar hacia la entrada del comedor, y nos salimos de ahí. Empezamos a caminar por los pasillos desolados del castillo hasta que llegamos a una de las torres. Nos sentamos en el suelo y empezamos a ver el cielo.

-Hace 4 años Hermione y yo estábamos aquí esperando a los amigos del hermano de Ron para que se llevaran al dragón de Hagrid

-¿Hagrid tenía un dragón?

-Si, él siempre había querido tener uno, y un comerciante se lo vendió. Nosotros lo convencimos de que sería mejor si dejaba que se lo llevaran a Rumania, allá Charlie el hermano de Ron lo podría cuidar mejor. Realmente nos causó demasiados problemas.

-No me los imagino cargando un dragón por el castillo. ¿y no los vieron?

-No, por suerte tengo algo que nos ayuda mucho

-y... se puede saber que es?

-Una capa de invisibilidad

-¿Enserio tienes una?- respondí un poco asombrada

-Si, era de mi papá. El profesor Dumbledore me la dio en la primer Navidad que pasé aquí

-Me hubiera gustado estar aquí desde el primer año

-A mi también- Volteé a verlo, aunque estaba oscuro pude ver como se sonrojaba. Traté de no reírme, últimamente me había dado por reír por ese tipo de cosas.

Los siguientes minutos no dijimos nada. Ya cuando nos cansamos de estar sentados en el suelo frío nos paramos y empezamos a bajar las escaleras de la torre. Cuando llegamos de nuevo al gran salón ya se había ido la mitad de la gente. Buscamos a Hermione y a Ron y no estaban. Fuimos a la sala común de Gryffindor y ahí los encontramos... Ron sentado en un sillón con los brazos cruzados y... Hermione gritándole desde arriba.

-¡¡Es que estás celoso!!

-¿Celoso? ¿yo? estás loca

-Agghhhh!!! definitivamente contigo no se puede!! Eres un...- pero no supimos que era Ron, se quedó sin palabras, parecía que iba a explotar. Se metió a los dormitorios a zancadas y azotó la puerta tan fuerte que pensé por un instante que la iba a tumbar. Harry y yo nos quedamos asombrados de lo que acababa de pasar, apenas los habíamos dejado un momento y ya se habían peleado!!

-Ron, que pasó?- por fin dijo Harry, cuando reaccionó

-Nada- Ron estaba tan colorado que casi no se distinguía su rostro en la oscuridad

-¿Nada? ¿y por eso se estaban gritando? ¡Todo el castillo se dio cuenta!!- Harry ya empezaba a molestarse

-Pues si todo el castillo se dio cuenta entonces pregúntales a ellos!!- Se levantó de un salto del sillón y se fue a los dormitorios de los chicos. Harry y yo nos miramos y enseguida cada quien se fue a su dormitorio, no sin antes despedirnos.

-Hermione, ¿qué pasó?- Ella estaba acostada en su cama boca abajo con una carta en la mano

-...

-¿me vas a decir?- pude ver unas cuantas lágrimas cayendo por sus mejillas. Me extendió la carta que estaba sosteniendo. Empecé a leer en mi mente:

Hermione:

Si he recibido las cartas que me has enviado, solo que había estado

ocupado, he tenido entrenamiento de Quidditch todos los días y se me

ha pasado escribirte. Te cuento que aquí en Buxbeatons ha estado nevando

desde que empezamos el año. En las clases también me ha ido bien, ¿y a ti?

Que bueno que Fleur es su nueva maestra de Defensa contra las Artes Oscuras,

ella me caía bien. ¿Que tal está Harry?

Bueno, es todo lo que puedo escribir por hoy, solo para que supieras que

me encuentro bien y que me gustaría que algún día vinieras para acá.

Espero que el próximo verano puedas venir, me gustaría enseñarte mi ciudad.

Sinceramente, Victor Krum.

-...y?- a mí no se me hacía una excusa para esa pelea

-¡¡Es que Ron...!!- después mas tranquila...- Estábamos sentados cuando entró una lechuza y me dejó la carta. La leí y me emocioné, pues claro, yo le había escrito antes y no había obtenido respuesta, y cuando le dije a Ron que era de Victor me la quitó y la leyó.. después, se puso como loco, me preguntó si era cierto lo de las cartas, y pues yo no veo nada de malo en escribirle! pero para él parecía que le acabaran de declarar la guerra!! me empezó a gritar que si pensaba verlo en el verano, que porqué no me había ido con el en estas vacaciones de Navidad, que seguramente el me iba a atender muy bien....

-Está celoso

-.... ya lo sé.

-Solo que es muy orgulloso para aceptarlo

-Es un tonto- Hermione se volvió de nuevo hacia su almohada- no le voy a hablar hasta que me pida perdón

Decidí que era mejor dejarla así. A fin de cuentas ella sabía como era Ron y no era necesario que yo se lo recordara. Nos dormimos al cabo de un rato.