Capitulo 7

1 El Despertar

La lluvia comenzó a caer lentamente sobre la cara de Sakura, haciendo que se despertara. Se encontraba tendida sobre un material frío y sólo podía oír unos murmullos alejados. Abrió cuidadosamente los ojos y lo primero que pudo observar fue a Li que, arrodillado junto a ella, la miraba con una cara de preocupación.

-¿Sakura, estás bien? -le preguntó al ver que abría sus ojos.

-Si, muchas gracias -Sakura sonrió.

-Estaba muy preocupado por ti -dijo mientras tomaba sus manos- Por un segundo llegué a pensar... pero ahora me alegro

-Yo también me alegro al ver que tu te encuentras bien, Syaoran -Sakura levantó una de sus manos y la puso en la mejilla de Li. Ambos se sonrieron, felices.

-Ejem, ejem... -los interrumpió Eriol, tosiendo con una mano en su boca- Tal vez deberían dejar eso para más tarde... ahora no me parece el momento.

Los dos se sorprendieron y giraron sus cabezas, para encontrarse que Eriol, Tomoyo, Yue y Kerberos los miraban avergonzados. Se sonrojaron bastante y Sakura se puso de pie, mirando a su alrededor. No pudo evitar lanzar una exclamación de sorpresa, ya que se encontraban sobre el rey pingüino, que flotaba inerte sobre el ahora apacible barro.

-¿Cómo... cómo llegamos hasta aquí? -preguntó, extrañada.

-Sabemos tanto como tú, Sakura -le respondió Tomoyo- Todos despertamos sobre el rey pingüino, no sabemos como llegamos hasta aquí, excepto...

-¿Excepto por qué? -preguntó Kero, sacudiéndose el barro de sus alas- ¿Acaso tú viste algo más, Tomoyo?.

-Bueno, puede haber sido una alucinación causada por la falta de aire, pero... -Tomoyo hizo una pausa para tomar aire- Pero cuando estaba cayendo inconsciente me pareció ver... que un enorme pingüino nadaba hasta mí por el barro y me llevaba hasta la superficie.

-¿Cómo? Eso es imposible -dijo Li, pero luego miró al rey pingüino sobre el que se encontraban- Aunque explicaría una o dos cosas...

-Ahora no importa -dijo Eriol- Es necesario que captures esta carta lo más rápido posible Sakura, ahora que estamos en un lugar seguro.

-Está bien -Sakura liberó su llave- Carta Flow, regresa a la extraña forma que mereces. Hazlo por el nombre de Sakura.

Al seguir las instrucciones que le había dado Eriol, Sakura pudo atrapar la carta, que se formó frente a ella. Iba a cogerla cuando esta voló a lo lejos, en busca de la persona que había conseguido superar sus poderes.

-¡La carta! -exclamó Li- ¿Donde se ha ido?.

-Eso es simple -explicó Eriol- Obviamente el nuevo Card Captor fue el responsable de haber vencido a la carta y de habernos salvado. Me parece que sólo usó el rey pingüino como herramienta para conseguirlo.

Todos miraron hacia el lugar donde había desaparecido la carta, preguntándose quién podría ser este personaje.

-¡Viva mocoso! -Karo celebraba junto a Takashi- ¡Has conseguido atrapar una nueva carta Flow!. ¡Y nada menos que la carta "El Barro", una de las más peligrosas del libro. Debo admitir que nunca pensé que lo lograrías.

-Si, que bien -Yamazaki también celebraba, pero luego adoptó una pose pensativa- Pero no puedo evitar preguntarme que hacían allí mis amigos, Li, Kinomoto, Daidouji y Hiragizawa. Además del león y del ángel, por supuesto.

-Eso es muy simple. Puedo ver que iban tras la carta, lo más probable es que quisieran arrebatártela. Por lo menos tres de ellos poseen un gran poder mágico, ni hablar de los guardianes... al que tiene forma humana no lo conozco, pero a Kerberos... -Karo puso una cara de disgusto.

-¿Kerberos? ¿Y quién es ese? -preguntó Yamazaki- Parece que usted lo conoce...

-Claro que lo conozco, aunque desearía no haberlo hecho nunca -Karo cerró los ojos y comenzó a narrar su historia- Él es un guardián como yo, ambos tenemos la misión de proteger las cartas de nuestros creadores, Kerberos las cartas Clow y yo las cartas Flow. Si acompaña a esas personas quiere decir que lo más probable es que las cartas Clow hayan pasado a ser de una de ellas.

-¿Quiere decir que las cartas Clow también escaparon? -Yamazaki estaba disfrutando mucho con la historia.

-Es lo más probable, pues un guardián nunca abandona las cartas... aunque no me sorprendería de Kerberos... ese "guardian"...

-Entonces el nuevo dueño de las cartas Clow es también un Card Captor como yo... -Yamazaki se puso pensativo otra vez- Y debe querer capturar cartas.

-Exacto, desde ahora debemos ser muy cuidadosos, no podemos permitir que nadie se entere de nuestra misión, mucho menos esos chiquillos. Si saben quienes somos, intentarán quitarnos las cartas y algo muy desastroso podría ocurrir en el mundo, lo que intentamos evitar precisamente al juntar todas las todas. Debes jurar que no se lo contarás a nadie.

-Lo juro solemnemente -Takashi levantó su mano y sonrió- Los juramentos solemnes se inventaron en la Europa medieval para...

-Yo también lo juro -anunció interrumpiendo una voz desde sus espaldas, haciendo que ambos se sobresaltaran de susto. Lentamente se dieron vuelta para ver quién había estado escuchándolos.

-¡Chiharu! -exclamó Yamazaki, con algo de miedo- Eh... este... puedo explicártelo todo...

-No hay nada que explicar Yamazaki -Chiharu parecía bastante calmada, en contra de lo que se esperaba Takashi- Ahora sé que no fue un sueño... tú luchas contra un desastre para toda la humanidad... estoy tan orgullosa de ti...

-Este... -Yamazaki puso uno de sus brazos detrás de su cabeza y rió de una manera nerviosa, ya que Chiharu lo había abrazado, colgándose de su cuello- No es para tanto...

-¿Cómo que no es para tanto? -Chiharu lo soltó y le puso una mala cara- Si es un desastre para toda la humanidad...

-Aha, pero lo que no sabes... -Yamazaki levantó un dedo y sonrió mientras hablaba- Es que el desastre consiste en que todos los mares del mundo se transformarán en caramelo liquido, haciendo imposible la navegación como la conocemos...

-¿Caramelo liquido? -Chiharu torció el gesto, sin creerle mucho- ¿Es eso cierto?.

-Ni más ni menos, además las nubes se convertirán en algodón de azúcar flotante, dificultando mucho el trafico aéreo tan importante en nuestros días...

-Ya basta Yamazaki, no creo lo que me estás...

-Y eso no es todo, porque la lluvia pasará a ser de dulces, que al caer sobre la tierra causarán muchos daños y destrozos...

-¡Te digo que pares Yamazaki! -Chiharu comenzó a apretar su cuello, sacudiéndolo- ¿Por qué tienes que mentirme de una forma tan descarada?...

Hasta ese momento Karo se había mantenido en silencio, todavía sorprendido por la aparición de Chiharu, pero en ese momento se decidió a hablar.

-Muy bien... muy bien... nos has descubierto... -dijo refiriéndose a Chiharu- Ahora dinos lo que quieres por tu silencio y déjanos en paz...

-¿Qué? -Chiharu pareció cortada- ¿Por mi silencio?.

-Si, si, si... -Karo cruzó sus brazos y se acercó volando- Para que mantengas esa bocaza cerrada, no sé si me entiendes...

-Oh, no se preocupe... ya juré que no se lo diría a nadie, ¿Recuerda?.

-Si seguro... está bien, te creo. Y ahora debes dejarnos, que tenemos asuntos muy importantes que atender en estos momentos con mi socio aquí presente...

-¿Se refiere al asunto de llevarlo a comer galletitas de coco para celebrar cada nueva captura, señor Karo? -acotó Takashi sonriendo.

-¡¡No!!, y no me interrumpas -Karo pareció enojado.

-¿Entonces al asunto de quien puede construir el castillo más grande usando las cartas Flow, sin doblarlas? -siguió Yamazaki, pensativo- ¿O acaso al asunto del juego de video...?

-¡No, no y no...! -interrumpió furioso Karo, es un asunto muy importante, que te diré apenas se haya ido esta chiquilla...

-Pero yo no quiero irme, señor -Chiharu le dijo vigorosamente a Karo.

-¿Qué no quieres irte? -Karo puso una de interrogación- ¿Y que quieres hacer entonces?.

-Pues es obvio... Yamazaki necesita mi apoyo...

-Que necesito... -Takashi tampoco entendía nada.

-Digo que yo voy a ayudarles a capturar las cartas Flow -exclamó por fin Chiharu, exasperada- Desde hoy cuéntenme en su equipo.

Yamazaki y Karo la miraron asombrados y confusos, luego se miraron entre ellos. Finalmente le preguntaron a coro, sorprendidos:

-¿Queeeeeee....?