Antes de nada, pido perdón por adelantado por cualquier fallo gramatical.
UN NIÑO PERDIDO
"¿Madre?" decía un Dave de siete años mientras se acercaba a los cuerpos de sus padres sin vida "¿Padre?" Dave no se dio cuenta de cómo la persona que estaba en la cocina tenía una herida profunda en la mano o como sacaba otra pistola y le apuntaba.
"Tú y los tuyos no deberíais haber nacido" Dave no escuchó y siguió avanzando a un ritmo lento hasta que todo se volvió negro. Ni siquiera escuchó el disparo.
Tres años después:
Dave paseaba tranquilamente por el mercado de Shiganshina mientras comía una manzana que… bueno, digamos que la había 'cogido prestada' para siempre.
¿Se le podía culpar por robar? No tenía padres que le dieran dinero o comida y vivía en una casa abandonada ya que nadie sabía su pasado. Desde que tenía siete años, se había tenido que buscar la vida él solo.
Dave era un niño de diez años con el pelo corto y de color castaño con un ligero toque rojizo, una tez un poco morena pero no mucho y los ojos de un color azul muy claro.
Iba vestido con una camiseta de color blanco y unos pantalones oscuros. Tenía un colgante de un colmillo de algún animal con su nombre en él alrededor del cuello.
Hace tres años su vida cambió por completo, o eso creía. Lo cierto era que tenía amnesia. La persona le disparó en la cabeza, pero no le dio en el centro, sino en un lado, por lo que la bala no le atravesó el cráneo y no le mató pero sí que le dejó con amnesia y una cicatriz muy notable en el lado izquierdo de su cabeza. Su primer recuerdo fue despertarse con una herida en la cabeza y dos adultos muertos en una casa de la que huyó hasta que llegó a Shiganshina.
A lo largo de los años había recuperado algunos recuerdos, como su nombre, ya que ni siquiera recordaba eso, que esas personas eran sus padres, a algunas personas más y, como no, su apellido: Eagle.
Los Eagle eran un clan que existía incluso antes que los titanes pero eran muy odiados. Eran unos asesinos sin piedad que mataban a quien fuera y eran prácticamente imparables porque, aunque tenían una gran fuerza y precisión, lo que los hacía tan temibles era su velocidad.
A estos Eagle se les podía reconocer sin problema porque tenían una marca de nacimiento, que era un águila, en el antebrazo izquierdo. Sin embargo Dave no tenía esa marca ya que era un 'impuro'.
Estos 'impuros' eran hijos de un no Eagle o un impuro y un Eagle normal o hijos de otros impuros, como él. Debido a esto, Dave no tenía la marca y sus habilidades, aunque eran buenas, estaban muy por debajo de los otros Eagle, denominados 'descendientes'. Hacía ya varios siglos que los descendientes fueron completamente exterminados y solo quedaban algunos impuros.
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Dave le dio un último bocado a la manzana para acabarla y luego la tiró. Su vida en Shiganshina era muy tranquila, los pocos abusones no se metían con él, los adultos le ignoraban, entrenaba en su casa sin que nadie le molestara y los demás niños pasaban de él. Bueno, no todos los niños.
Mientras seguía caminando por el mercado, su mirada se posó en una persona con el pelo negro muy familiar. Mikasa.
Con la mirada buscó a Armin y Eren pero no los pudo ver, cosa que le extrañó. Donde estaba uno, estaban los otros dos. Era muy raro que ellos tres estuvieran separados.
Armin y Eren eran mejores amigos y Mikasa era la hermana adoptiva de Eren después de que esta fuera adoptada por su familia tras el asesinato de sus padres.
De los cuatro, Dave era el más distante. Cuando conoció a Eren y Armin, se mantuvo muy alejado de ellos pero una cosa llevó a otra y acabaron siendo amigos aunque seguía siendo distante. La cosa fue muy similar con Mikasa. Aun así, los cuatro eran muy amigos.
Dave se acercó a Mikasa mientras esta compraba algún tipo de verdura. Mikasa le miró en un gesto de reconocimiento antes de volver a mirar al hombre que le estaba entregando las verduras para pagarle.
"¿Has visto a Eren?" preguntó mientras cogía la cesta con las verduras y le volvía a mirar.
"No" dijo negando la cabeza y Mikasa suspiró.
"Si le ves dile que su madre quiere que corte leña" Dave asintió y se quedó por si necesitaba algo más.
"¡Chicos!" la voz de Armin llamó su atención y ambos vieron a su amigo corriendo en su dirección.
"¿Armin?" dijo Dave cuando este se detuvo delante de ellos. Antes de poder explicarse tuvo que recuperar el aliento ya que se notaba que había estado corriendo un rato y estaba cansado.
"Chicos, Eren-" antes de poder acabar, Mikasa entró en el modo 'proteger a Eren' y le cortó.
"¿Qué le ha pasado?" preguntó acercándose más a Armin.
"Los tres de siempre me han quitado el pan y Eren ha ido solo" Mikasa no necesitó más información. Le dio la cesta a Armin y empezó a correr a donde sabía que estaba Eren. Los tres matones siempre iban al mismo sitio después de que se metieran con alguien.
Mikasa empezó a correr lo más rápido que pudo, con Dave siguiéndola y Armin detrás de ellos aún con la cesta.
"¡Esperarme!" gritó su amigo rubio mientras intentaba seguirles el ritmo.
"No pasa nada. Ya verás cómo llegan refuerzos más competentes" los tres escucharon a Hannes hablar con un mercader que le había dicho que parara la pelea.
Ignorando a los adultos, los tres se lanzaron contra los abusones. Dos de ellos estaban mirando la pelea mientras que el tercero tenía a Eren contra la pared.
Mikasa fue la primera en lanzarse. De una sola patada, tiró al suelo al chico que había agarrado a Eren. Los otros dos se bloquearon al ver a Mikasa ya que nunca la habían ganado en una pelea.
Dave aprovechó esto y le dio un puñetazo en la mandíbula a uno de ellos, tirándole al suelo. El otro intentó golpearle pero Dave desvió el puñetazo sin problemas y el chico se golpeó la cabeza contra la pared.
El chico que había golpeado se levantó e intentó darle un puñetazo pero Dave le agarró la muñeca y con un gancho lo tiró al suelo, consiguiendo inmovilizarlo.
Mikasa esquivó sin problemas el puñetazo del chico al que había dado una patada. El chico no se rindió y volvió a intentar golpearla pero Mikasa le agarró de la muñeca y le inmovilizó en el suelo.
"¡Eren, déjaselos a ellos!" gritó Armin mientras intentaba contener a Eren.
"¡Ni hablar!" Eren se liberó de Armin y cargó contra el único chico que quedaba. Ambos estuvieron en un forcejeo hasta que la policía militar se acercó a detener la pelea.
"¡Se ha armado buena! ¡Vámonos!" dijo el chico. Dave y Mikasa liberaron a los otros y se prepararon para huir. Sin embargo, Eren no pensó lo mismo e intentó seguir a los matones pero Dave y Armin se lo impidieron.
"Eren, no me importa lo del pan. Gracias" Armin intentó calmar a su amigo pero era en vano. Cuando se trataban de matones que se habían metido con Armin, era imposible tranquilizarle.
"Eren, tenemos que irnos" dijo Mikasa.
"Iros vosotros" si solo le hubiera detenido Armin, Eren habría sido capaz de liberarse pero al estar Dave no podía ya que él tenía mucha más fuerza.
"Vamos" Dave utilizó más fuerza y obligó a Eren a moverse justo cuando la policía militar se acercó a ellos y los cuatro empezaron a correr. Eren miró hacia atrás y vio a la policía militar atrapando a los matones.
Dos miembros de la policía militar les vieron alejarse y empezaron a perseguirlos pero se mezclaron con la multitud y los perdieron de vista.
En algún punto se dividieron y Armin acabó solo. Se movió con cuidado por la multitud, sin dejar de mirar hacia atrás para ver si la policía le seguía.
Había perdido por completo a sus amigos, intentó encontrarles con la mirada pero era imposible, había demasiadas personas. Echó la vista hacia atrás y vio a la policía acercándose. Aún no le habían visto pero no tardarían mucho.
De repente notó que alguien le agarraba del cuello de la camisa y le empezó a arrastrar por la multitud. Intentó librarse al momento pero se dio cuenta de que era Eren y dejó que le llevara.
Unos pocos segundos después entraron en un callejón, donde ya estaban Dave y Mikasa, y los cuatro empezaron a recorrerlo hasta llegar a otra calle, donde perdieron a la policía.
Al menos, esa vez no había acabado del todo mal.
"No era necesario que os metierais" dijo Eren por enésima vez después de que se alejaran de la policía militar, de eso hacía casi una hora.
Había estado todo el rato diciendo que no necesitaba a Mikasa y a Dave en las peleas y que podía arreglárselas solo.
Todos sabían que eso era mentira pero Eren se empeñaba en decir lo contrario.
Dave no se molestaba en decírselo. La primera vez que se lo dijo acabó en una discusión de a saber cuánto tiempo. Desde entonces, no le había dicho nada parecido ya que no quería discutir todo el día.
Mikasa, por el contrario, no le llevaba la contraria a Eren como tal, sino que se limitaba a decirle que era peligroso y que su madre lo castigaría si se metía en peleas, que era justo lo que le acababa de decir.
"No me trates como a un niño pequeño. No soy tu-"
"¡Lo tengo!" Armin cortó a Eren mientras se acercaba corriendo con el libro del mundo exterior. Debido a que era bastante temprano, ninguno quería volver a casa, así que Armin sugirió leer el libro para entretenerse y evitar entrar en otra pelea.
Armin y Eren eran los que más se emocionaban al leer el libro ya que el mundo exterior les fascinaba a ambos, soñaban con poder explorarlo algún día.
Mikasa tenía que admitir que le parecía curioso pero no hablaba de ello y tampoco pensaba en explorarlo.
Dave nunca dijo que opinaba del mundo exterior pero se notaba su entusiasmo cuando leía el libro con sus amigos pese a que no decía nada.
Armin puso el libro en el suelo y lo abrió por una página al azar, la cual hablaba de unos ríos de fuego que salían de una montaña con un agujero en la cima.
Eren lo leía sin contener su emoción, sin darse cuenta de que Armin estaba mirando a Dave, que miraba el libro fijamente y su mirada mostraba emoción al pensar en el mundo exterior.
Desde que se conocieron, Armin se dio cuenta de que Dave ocultaba algo, la cicatriz en su cabeza le delataba, pero jamás se lo preguntó ya que sabía que no le respondería.
Armin quería entenderlo pero el hecho de que fuera callado complicaba las cosas.
Mientras volvía a mirar el libro, notó por el rabillo del ojo que Mikasa también estaba mirando a Dave, aunque solo fue un instante. Ella también era muy perspicaz, por lo que también se habría dado cuenta pero, al igual que Armin, nunca dijo nada.
Eren parecía ser el único que no se había dado cuenta, eso o pensó que no era gran cosa.
De todos modos, Armin volvió a leer el libro y se permitió pensar que algún día estaría recorriendo el mundo exterior.
Algún día.
