Ladies and Gentlemen!
Es realmente un honor festejar mis ocho años en como escritora en Fanfiction en la compañía de todos ustedes. ¿Qué mejor que subir la cuarta temporada de una de mis series favoritas? Así es, ante el final que tuvo Vrains y del que a nadie le pareció (entre ellos a mi porque realmente pensaba que le hacía falta un poco más), yo me enfocare en darle una cuarta temporada, siguiendo el hilo de mis tres temporadas pasadas. [Continuación] Cuarta temporada [Sin llegar a creerlo, Por un futuro a tu lado, No temas cuando esta es mi voluntad] Y así poder otorgarle a la misma un final realmente interesante. Más sin embargo. ¿Por qué es especial todo esto? Bueno, porque es mi historia 500 en total pero también puedo decir que es la historia número 100 de Vrains ¡Hemos llegado tan lejos! Así que vamos este año por más historias. ¡A penas es el inicio de otro más estando al lado de todos ustedes!
It's time to read!
It's showtime!
Aclaración: Yu-Gi-Oh! VRAINS no me pertenece. Es propiedad de Kazuki Takahashi. Yo solamente pido prestado sus personajes para poder escribir mis historias que se podrán leer a continuación.
Aclaración: Con estas historias no estoy cobrando por ninguna ganancia o regalía. Solo escribo para el entretenimiento de todo público pidiendo permisos al autor. Cualquier aclaración, pueden escribir en los comentarios su opinión al respecto.
Un año había pasado y desde entonces, en la vida de Ryoken Kogami sentía que algo más le faltaba.
Le faltaba aquella emoción, le faltaba nuevas cosas por querer descubrir o crear con sus propias manos pero siendo sincero, era imposible que quisiera hacer algo diferente cuando había algo que le faltaba, le faltaba aquella motivación, aquella razón por la que hacia todo eso. No podía evitar mirar a su lado cada que despertaba después de una larga noche o cada que se iba a dormir después de un cansado día, mirar la silla que estaba a su lado en el momento del desayuno, de la comida o hasta de la cena. Incluso al ingresar a Vrains, no podía evitar mirar a su lado y buscar aquellos largos cabellos naranjas que se encargaban de monitorear la ciudad virtual. Aquella ausencia, aquella soledad que no podía dejar de sentir en ese momento que algo más faltaba en su vida. Para su desgracia, esa ausencia tenía un nombre, un apellido y hermosos ojos esmeraldas. Era la culpable de aquellos suspiros y que no pudiera concentrarse adecuadamente sin revolver sus cabellos blancos y cerrar por unos momentos sus ojos celestes para poder encontrarla, justo como ella lo hacía con aquella increíble habilidad que adquirió pero era imposible para él porque no podía ser como ella.
Nunca podría serlo.
Desde el momento que Yusaku Fujiki desapareció después de aquel duelo contra Ai, su propio Ignis de la Oscuridad. No se han llegado a encontrar registros de la chica, es como si la tierra se la hubiera tragado. Lo único que aún conservaba, era aquel video que fue enviado a todos donde no solo revelaba su identidad, también sobre algunas cosas que ella hizo para seguir sus ideales para poder llegar a ese duelo final, esa había sido su forma de despedirse sin saber si ella iba a regresar o no. Aquel pequeño anillo que ella le había regresado, aun estaba guardado en aquella cajita en espera de volver a estar en la mano de la mujer que todo ese tiempo había esperado en que regresara. Como sus hermanos siguieron con sus caminos, volvieron a tener una vida normal después de escapar de las leyes, ahora volvían a tener una vida donde realmente pueden utilizar sus verdaderas habilidades. Incluyendo Spectre que retomo sus clases en una escuela privada.
La manera en que todos los niños involucrados, empezaban a olvidar todo lo sucedido con su pasado. Como cada quien avanzaba a su manera mientras aquella sonrisa permanecía en su rostro aunque aun fuera difícil de creer que uno de esos niños, fue el que murió hace algunos meses al no resistir aquella cruel vida que le dejo su propio Ignis de viento. Como incluso, aquellos hackers hermanos seguían adentrándose en la red para proteger a la misma. Cosa que él hacia pero solo para disfrazar sus intenciones de encontrar a Yusaku. Incluso sus propios suegros que se mantenían bastante tranquilos ante el hecho de que su hija mayor estaba desaparecida, el hermano menor de esta, opinaba lo mismo que ellos, en algún momento, ella regresara. Todos estaban seguros que ella estaba ahí afuera y cuando sea el momento justo, regresaría.
¿Realmente lo hará?
Llegados a este punto, lo empezaba a dudar.
Desde ese momento donde decidió marcharse sin voltear a sus espaldas, donde no dudo y Ryoken realmente se arrepintió de no haber leído sus movimientos y lo enojado que se encontraba porque ella decidió no confiar en él, ha tratado de buscar un poco de ella, saber como estaba, si estaba haciendo las cosas correctas para poder buscar aquel futuro que ella siempre ha soñado con tener, no podía evitar preocuparse por tanto tiempo lejos de casa. Lejos de su pequeña Aiko Kogami, era desde hace algunos meses que la pequeña, tenía su apellido. No podía entender como todo ese tiempo, la chica se había mantenido lejos de la pequeña sin mandar algo más que ese peluche de Ai y algunas pequeñas notas que no había querido leer como para querer guardar las mismas en un lugar especial. No sabía el porqué pero en todo ese tiempo, no pudo mostrarle una imagen de la madre de la menor. Eso significaría un dolor mucho más grande lo que puede llegar a sentir y si un día le preguntara donde está la misma, no sabría que responder.
Desde el momento que despierta y hasta que se duerme, a partir de ese día, todos y cada uno de esos días de ese año, ha sido lo mismo que se convirtió en una monotonía. Desde el momento que despierta y hasta el momento que se acuesta para dormir, sus pensamientos no dejan de atormentarlo, tratando de siquiera pensar, si hubiera hecho aun más, si se hubiera esforzado más para poder comprender aquellos planes que no fue capaz de ver, solo se daba cuenta cuando no podía cambiar el pasado, era en ese momento que suspiraba y prefería hacer otras cosas.
Tal vez eran aquellos pequeños ojos turquesa que ve todo el tiempo como esas pequeñas manitas que alza para que la pequeña Aiko sea cargada por su padre, era aquella alegría, su momento de paz y tranquilidad para poder superar el día. Ver a la menor soltar grandes carcajadas como sus pequeñas manos se encargan de posarse en sus mejillas en el momento que ve una lagrima que sale de los ojos de su padre. Ryoken no podía evitar pensar que esa pequeña cada día se parecía más a Yusaku, aquellos grandes ojos, su piel tan clara como sus cabellos azules que se encargaban de crecer más para ser una gran telaraña de los mismos, excepto el flequillo blanco que la menor podía presumir, era hermosa y no dejaba de decirlo al momento que besaba su frente y estaba la mayoría del tiempo a su lado.
La dejaba a cargo de Pandor, aquella IA que construyo para la destrucción de los Ignis y que al final, le agarro cierto cariño porque ella seguía pensando para qué fue que la dejaron viva, alguno de sus hermanos, incluso Spectre cuando llegaba a tener tiempo libre antes de irse a su trabajo, cuando quería salir a comprar algunas cosas, arreglar algunos asuntos con la universidad que ya iba a terminar o aquellas visitas que daba a SOL para que el director Akira escuchara sus nuevos proyectos, aunque en realidad, solo era para poder salir un poco a que le de aire y buscar si en algún momento, fuera capaz de encontrarse con su eterno rival, con ese amor de su vida que dejo escapar, incluso iba a visitar a Shoichi y Jin los cuales, aun no tenían respuestas de ella, en el momento que veía que ese día no la encontraría. Solo suspiraba y regresaba a casa. Hacia las mismas cosas desde el momento que ella se fue.
Pero.
¿Quién hubiera pensado que en esa monotonía, no se dio cuenta de que alguien lo estaba siguiendo?
¿Cuándo fue el momento que bajo todas sus defensas?
Fue en ese momento que se encontró entre la espada y la pared mientras aquellos hombres se encontraban delante de él con aquellas armas, aquellos trajes y esos lentes oscuros que se encargaban de cubrir sus ojos, aquellas venenosas sonrisas. Mantuvo la compostura hasta el final, aquella tranquilidad en su rostro aunque no podía evitar mirarlos un tanto nervioso y con bastante coraje. Sus puños dolían pero podía decir que era más la cara que se encontraba un tanto ensangrentada. Realmente era malo para poder defenderse que solo subió su mano a su boca para poder limpiarse de la sangre que estaba saliendo de la misma.
Manteniendo su mirada en aquellos hombres que solo pedían que lo siguieran. ¿A dónde? No lo escucho en el momento como estos tipos caían al suelo como peso muerto. Dio un paso atrás creyendo que en algún momento le iban atacar pero fue grande su sorpresa al ver que un pequeño cuerpo que salía de entre la oscuridad, una capucha era lo que ocultaba su rostro. No pudo evitar entrecerrar sus ojos y abrirlos con sorpresa en el momento que aquel pequeño cuerpo se quitaba aquel gorro y un corto cabello azul que llegaba a sus hombros como aquellos ojos esmeraldas que le veían con normalidad.
A pesar de las tantas palabras que había querido decir en ese momento, cuando la vio, solo se quedo congelado.
Su Yusaku estaba parada frente a él.
-Hola Ryoken -Fue lo primero que ella menciono antes de soltar un pequeño suspiro.- No estoy aquí para contar donde estuve todo este tiempo, tenemos que irnos de aquí antes de que más de esos tipos regresen por ti -Subió su pequeña mano a su oído, vio un pequeño micrófono.- ¿Está libre la vía de escape?
-¿Quiénes vendrán? -Fue lo primero que pregunto después de salir de aquella sorpresa.
-Los antiguos directivos de SOL, Queen pero sobre todo -Tomo un pequeño respiro.- Esta vez viene King con ellos, vienen por nosotros, hay que irnos
-¿Por qué?
Un pequeño silencio se formo, al final, solo suspiro la chica frente a él.
-No puedo decírtelo aún pero quiero que confíes en mí ¿Puedes hacer eso a pesar de todo este tiempo que estuve lejos? -Iba a responder cuando vio a la misma subir su mano a su oído y como empezaba a ver a todos lados con bastante sigilo.- Muy bien, nos encontraremos ahí, vámonos
¿Qué era lo que estaba pasando?
Ni el mismo pudo pensar en el momento que ella tomo su mano para poder correr mientras en la otra, se veía un arma y la concentración en aquellos ojos que no dudarían en atacar a cualquiera que se acerca.
Solo era el preludio de esta historia donde la vida y la muerte de ella, iba a depender de todo lo que pasara en el futuro.
¡Muchas gracias por leer!
Bueno y eso que nada más es el prologo. No se preocupen que pronto vayamos con el primer capítulo. Debo de dar gracias a mi beta (por primera vez tengo una) quien me estará ayudando en mantener la historia en orden para que sea más interesante. ¡Gracias Saya! Como se ha hecho desde un principio, esta historia será actualizada al mismo tiempo que la versión en Wattpad (cualquier red social la pueden encontrar en mi perfil) Así que donde quieran leerla, estará disponible en estos dos.
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El Link de mi página, como el demás redes sociales, la encuentran en mi perfil de Fanfiction. Hay algunos que no se pueden ligar a la pagina pero por eso pongo el nombre de la red y de mi perfil para que ustedes puedan visitarlo.
Por cada comentario el escritor desvelado tendrá una gran sonrisa en su rostro y más energías al seguir escribiendo.
Nota importante: El sitio de Wattpad, es usado como medida de precaución ante el anterior robo de historias que se sufre. Por favor, de apoyar a su escritor favorito, nunca intenten copiar las historias en otros sitios y usarlos como suyos, recibirán grandes sanciones por parte de la comunidad como la falta de respeto que se podrían ganar. Solo obligan a que nosotros como escritores, ya no confiar en ustedes, dejar de escribir y en caso mucho más grave, eliminar nuestras historias.
¡Nos vemos a la próxima!
Atte.: AnZuZu Dragneel
Fecha: Miércoles 5 de Agosto de 2020
