Prologo: un nuevo mundo.

Japón CD Fuyuki 1994

Desesperación.

Era la única manera de describir todo alrededor del joven pelirrojo que caminaba sobre flamas negras las cuales no deberían de existir. A simple vista seria un incendio normal provocado por manos humanas pero, la realidad era totalmente diferente.

Si mirabas con atención los cuerpos a su alrededor las personas que apenas tocaban el fuego se ponían pálidas y su piel comenzaba a tornarse negra. Pero nada de eso le importaba al chico que seguía caminando, tratando de salvarse del inminente frio llamado muerte.

"¡Ayuda!"

"¡Por favor!"

"¡Mi hija!"

Gritos y gritos de auxilio resonaban en sus pequeños oídos los cuales solo rebotaban en su cerebro provocando que algo dentro de él quisiera cortarlos. Quería correr y pedir ayuda a ¿a quién? Ya no lo recordaba solo tenia un pensamiento que lo mantenía vivo.

"Quiero vivir"

¿Por qué? No lo sabe, pero era algo que tenia que hacer a toda costa, no había destino que se lo negara y si el destino lo quería muerto entonces el mandaría al diablo al destino.

Crack.

Un descuido.

Ese pequeño descuido le quito la estabilidad de seguir caminando y caer al suelo como un costal lleno de productos. Enseguida levanto la mirada y siguió arrastrándose ignorando todo a su alrededor, ignorando el dolor que le provocaban los hematomas en su cuerpo, la sangre que escurría de sus extremidades.

"Ya no pue... todavía puedo moverme..."

Si sus manos no le permitían moverse y sus pies estaban sangrando aun tenia su barbilla. Comenzó a arrastrarse con la barbilla ignorando que el suelo le quemaba la piel y la ropa.

(Cortar)

De la nada en su mente solo surgió un pensamiento. No sabía lo que significaba, pero decidió ignorarlo ¿de que le servía cortar en esta situación? Absolutamente para nada.

(Espada)

Aunque la mirada del chico estaba en blanco pudo verse un ceño fruncido por el repentino objeto que se dibujo en su mente. Era hermoso, ornamental para algunas personas, pero para él esa espada estaba bellamente repleta de poder y deseo.

Era una imagen vaga.

Inconscientemente se detuvo y giro su cuerpo para mirar al cielo, había un agujero en el mismo cielo... no sabía quién lo dijo, pero tenía un recuerdo sobre una frase:

"Si miras mucho tiempo al abismo, el abismo te regresara la mirada"

Ahora lo comprendía, no sabia como, pero era la sensación que le daba esta situación, su cuerpo se estremeció al sentir una sonrisa del vacío en el agujero.

"¿Por qué me traes a este lugar?"

Escucho una voz cansada a su derecha.

"No quería hacerlo, pero padre lo decretó"

El orbe de luz brillaba cada vez que pronunciaba una palabra.

"¿Padre?" pregunto el moreno con ligera confusión y un toque de... ¿curiosidad?

El niño desvió la mirada para poder observar a los sujetos que platicaban a su lado como si fuese lo más normal del mundo.

"No necesitas saber más... lo único que necesitas saber es que tienes que insertar esas dos cosas en el niño

Molesto.

Esa era la manera que se sentía el Counter Guardian al mirar este escenario una vez más, pero ahora hubo una diferencia.

No hay sobrevivientes, si tuviese que ponerlo en palabras de Alaya, Gaia, Zelretch o algún otro ser reconocido es:

Este mundo fallo.

Solo podía suspirar con frustración. Puede que de tanto mal que a hecho tuviese un poco de costumbre al ver este tipo de destrucción... pero aun así no podía negar que sentía enfermo con su incapacidad, quería culpar a Alaya por no haberlo desplegado antes. Estaba seguro de que podía hacer una diferencia.

Ya nada de eso importaba, todo este mundo se estaba preparando para ser descartado, solo necesitaba liberar Excalibur y borrar ese estúpido agujero en el cielo.

"Dame unos minutos..." murmuro antes de levantar una mano al cielo.

En unos instantes varios objetos comenzaron a llegar a su posición. El niño seguía observándolo si tuviese que decir nombrar lo que estaba presenciando lo llamaría mágico.

Lo que parecía ser un orbe de luz se formó en su mano.

"Solo no hagas algo estúpido..."

Fue lo que dijo el peliblanco al pelirrojo. No entendía lo que quería decir con eso, pero... estaba seguro de que no quería nada malo para él.

El niño a pesar de estar semiconsciente pudo sentir como su cuerpo comenzó a calentarse y una luz dorada ilumino el cielo borrando el agujero entre las nubes o donde se suponía que debían de estar.

Escucho la voz del hombre resonar en todo el páramo, pero no podía entender lo que dijo.

"EX-C-..."

Fue todo lo que entendió antes de que su mundo se oscureciera.

"¿Qué vas a hacer con él?" fue la pregunta del hombre al orbe.

"Padre quiere enviarlo a otro lugar... dice que es mejor él sea el centro"

El orbe tomo la forma de una mujer, una mujer que conocía el peliblanco demasiado bien.

"..." frunció el ceño tanto por la apariencia, como por el motivo de no comprender a quien se refería como padre "No intervendré porque no quiero que se metan en mi cabeza"

"¿Aun sigues molesto por eso Emiya?"

"... solo llámame Archer" bufo con molestia.

"Bien... de cualquier manera te quedaras con el tiempo suficiente como para que aprenda a manejar sus poderes"

"Debes de estar..."

"¿Quién mejor que tu para enseñarle el alcance de sus capacidades?"

Archer solo pudo negar con la cabeza ante las palabras de la mujer.

"Quisiera poder matarte, pero viéndote ahora..."

Solo suspiro con frustración viendo como el niño se retorcía por la vaina que se incrustaba en su alma y se fusionaba con sus

"¡Oye idiota!" llamo a la mujer.

"No deberías de llamarme de esa manera..." reprendió la mujer.

Venas de molestia se notaban en su frente.

"¿Cómo carajos... ?"

"¿... tiene circuitos físicos?" interrumpió "... vamos, no tienes porque estar molesto... velo como un regalo de mi parte"

Otro suspiro escapo de sus labios.

(Esa mujer será mi muerte... ah, no, ya lo fue) pensó para sí mismo.

Pero al ver la sonrisa plasmada en su rostro se dio cuenta que una vez más leyó sus pensamientos.

INICIANDO PROCEDIMIENTO DE ELIMINACION.

Una voz hizo eco en el mundo, Archer solo tomo al niño en sus hombros y se preparó para desaparecer como estaba acostumbrado. Solo miro a la mujer sonriente y al momento siguiente sintió como su cuerpo comenzaba a desvanecerse...

"Eres una hija de..." no pudo terminar su frase porque en ese momento los tres desaparecieron.

REALIDAD BORRADA, PROCESO COMPLETO.

Aturdido.

Era como se sentía el pelirrojo.

¿Cuál era su nombre? ¿Shin... ? ¿Sher... ? Shirou si, su nombre es Shirou. Es todo lo que necesita saber.

Mirando a su alrededor se dio cuenta de que estaba dentro de una sala blanca, inconscientemente comenzó a ponerse nervioso.

'No te alteres' dijo una voz en su cabeza.

"..." Shirou solo frunció el ceño ante la repentina voz.

'Tranquilo, lo único que necesitas saber es que estoy aquí para ayudarte y solo eso'

Por alguna razón no le gusto el tono en que lo dijo, pero ya era algo, de alguna manera logro comprender el hecho de que estaba en un hospital o una sala donde le estaban haciendo pruebas.

'Lo que viviste no fue un sueño' dijo la voz '... todo fue sumamente real y debes de vivir con ello, la vida no es un cuento de hadas'

No sabia que quería decir, pero era cierto. Aun recordaba todos esos cadáveres a la perfección, era el recuerdo de haber sobrevivido a dicho evento.

"¿Quién eres?" pregunto a la nada.

'... por ahora' la voz parecía vacilante 'dime Archer'

"Veo que estas despierto"

Una niña entro a la habitación, no parecía ser mayor que él, pero tenia la misma mirada, un rostro en blanco y una mirada estoica.

La niña si tuviese que decirlo a pesar de su corta edad podía decir que era muy hermosa y su cabello rojo carmesí lo resaltaba.

"¿No dirás nada?" la niña frunció el ceño.

"..." Shirou solo la miro detenidamente tratando de entender el motivo por el que estaba con el.

De lo poco que podía comprender es que el incendio le quito todo, su familia dejo de existir, tal vez camino sobre sus cadáveres, el no lo sabe. Pero una cosa es segura, ira a algún tipo de institución esperando ser adoptado ¿Cómo lo sabe? Si tuviese que llamarlo de alguna manera seria intuición.

"¿Cómo te llamas?"

"Shirou" dijo finalmente.

Todo este tiempo desde que la niña hablo por primera vez se estuvo preguntando ¿Cómo es que entendía sus palabras? El lo sabía, el idioma en el que hablaba la niña en definitiva no era japones.

'Eso es porque es ruso, ¡idiota!'

Una vez mas la voz en su cabeza, por alguna razón le molestaba dicha voz, pero no hablaría de eso. Simplemente sacudió su cabeza ignorando la mirada de la niña en él.

"Veo que estas despierto"

(¿Deja vu... ? Tal vez)

El solo asintió.

"Bien, te encontramos en un callejón inconsciente en medio de la noche, a partir de ahora vivirás, comerás, entrenaras con nosotros..." la mujer hablo con autoridad "... nos perteneces" declaro.

'Que idiota' resonó la voz en su cabeza.

Shirou no dijo nada, lo único que podía hacer era asentir.

"¿Nombre?" pregunto.

"Shirou"

"¿Apellido?"

Sacudió la cabeza, no había nada digno de mención.

"Bien, vístete, terminaran tus exámenes a las 0:600"

'¿Por qué las mujeres hermosas tienen que ser tan brutales?' escucho la voz de Archer.

Intrigada.

Esa era la manera en la que se sentía al ver al niño simplemente mirar a la nada.

Han pasado dos semanas desde que lo encontraron y comenzó a entrenar con nosotras, la pregunta que nos hacemos todas es ¿Por qué un niño? Era la primera vez que veía un niño dentro de la habitación roja.

De la poca información que ha logrado reunir es que solo esta complementada de mujeres y en ocasiones algunos hombres entran y se llevan a algunas de las chicas y ya no regresan, la mayoría de ellas son jóvenes entre 14 y 16 años. Siempre que vienen por alguien más preguntan:

"¿Cuáles están listas?" o "¿Quiénes serán desplegadas?"

Pero de lo poco que ha logrado captar además de eso es que ella es especial de alguna manera, no solo está el hecho de que entrena mas horas que la mayoría de las chicas, también toma mas cursos que ellas en los cuales el ballet es el único donde puede tener un momento de relajación.

Sin embargo, el niño que llego no hace mas de dos semanas ni siquiera se inmuta con los entrenamientos, jamás lo ve fruncir el ceño, quejarse, podría jurar que si no tuviese la necesidad no comería. Es demasiado extraño, las otras chicas a pesar de su actitud hablan entre ellas a pesar de que ella es excluida, puede que las demás piensen que no lo a notado, pero en definitiva no es estúpida.

Pero el chico en si era un misterio, al parecer era un año menor teniendo solo 7 años y ella 8, no es mucha la diferencia, pero la habilidad... se sentía inferior al chico, seria creíble si hubiese entrenado con anterioridad, pero cuando lo conoció no era más que un niño escuálido apenas notable para las personas.

"Tienen 1 minuto para estar con su instructora"

Selena, ese era el nombre de la mujer que hablo. No puede decir mucho de ella, solo dos cosas. Era sumamente fuerte y se daba a respetar durante o fuera de los entrenamientos.

"Shirou y Romanova los veo en la habitación uno"

Mirando como Shirou simplemente termino su plato y se dirigió a la habitación, ella se sentía extraña. Natasha Romanova o Romanoff como ella prefería que le llamaran se sentía menos, no solo un chico nuevo igualo su habilidad, también destaco en todo el sentido de la palabra.

Suspiro.

No podía hacer otra cosa mas que seguir el entrenamiento.

Bueno chicos, aquí mi nuevo fic, veo que les gustó Fate in Camelot y Fate vida Normal.

Probablemente publique capitulo de Fate in Camelot este fin de semana.

Cómo leyeron están en Rusia, más específicamente la habitación roja, este primer arco abarcará su infancia, no espero hacer mucho énfasis en el, lo suficiente como para comenzar a desarrollar a los personajes.

Puede que a Natasha le dé una actitud de adulta, pero eso no está lejos de ser canónico a pesar de su niñez, ella era mejor mental y físicamente, también fue alterada con biotecnología a pesar de su corta edad. Todas las niñas de la habitación roja pasaron por lo mismo, pero Natasha fue quien más destacó en el proyecto.

F. P. 09/03/2021

Att: J_A_H