Disclaimer: Los personajes de Inuyasha son de Rumiko Takahashi.

PARTICIPANDO EN LA DINÁMICA #El_Festín_de_Horror de la página de Inuyasha Fanfics de Facebook.

1. VOCES EN LA SOLEDAD

INUYASHA

—Inuyasha.

Una voz susurrante en su oído lo invitaba a despertar. La ligera brisa en su espalda y los escalofríos que le entumecieron la piel le dieron las pistas de que se encontraban detrás de él.

—Pobre, y pequeño iluso—insultó aquella voz.

Inuyasha la conocía, jamás podría olvidarse de esa dulce voz que ahora hablaba con tanta claridad. Qué descaro el de ella de venir, hablarle y además insultarlo después de todo el dolor que le había causado. Ella era la culpable de todo. Ella y solo ella.

—Idiota—dijo burlona aquella voz—. Tu eres el que confió el mí.

"¿Acaso leyó mi mente?", pensó temeroso de que ella conociera todos los secretos que guardaba dentro de su mente, y su corazón.

—Pobre cachorrito, ¿realmente creías que me quedaría contigo?

Un intenso dolor se plantó en su hombro, ardiente y sofocador. Sabía perfectamente de qué se trataba. La flecha de Kikyō. Poco a poco con un ligero movimiento destruía la carne que se abrazaba a ella, cortando y lastimando al pobre ser que no podía moverse de ese árbol.

Muchos aldeanos pensaron que el poderoso Inuyasha era una bestia durmiente en medio del bosque desolado. Qué no podía oír, escuchar o sentir nada de lo que ocurriera a su alrededor.

"¡MENTIRA!", quiso gritar al sentir como su piel se regeneraba y volvía a sentir su piel abriéndose ante la flecha incrustada en él, sin poder mover ni una pisca de su cuerpo. Con un poco de piedad, aquello que lo torturaba dejó de mover la flecha. Pero se paró justo delante de Inuyasha.

De poder ver, Inuyasha habría visto a su amada con una sonrisa aterradora a pocos centímetros de su rostro. Tal vez no podía verla, pero podía sentirla. Una respiración suave, cerca de sus labios.

—Te quedarás aquí, solo —dijo con una voz alegre —. Aquí, por siempre y para siempre.

Y así de simple, desapareció. Dejándolo nuevamente solo, en aquella oscura existencia. Cada día Inuyasha se preguntaba qué era eso que lo visitaba por las noches y lo torturaba de esa horrible manera.

Ya que por su olor, definitivamente no era Kikyō.

Quiero que disfruten de mis historias como yo lo hago con muchas de las de ustedes. Dejen sus sugerencias en sus comentarios.

Muchas gracias.