Advertencia... Puede haber momentos algo oscuros durante la trama...
Crossover Masivo, conforme pasen los capítulos se irán agregando etiquetas de personajes y animes para evitar arruinar las sorpresas.
My hero academia no me pertenece, esta obra es escrita y dirigida por Kohei Horikoshi, los personajes ajenos a su anime tienen sus respectivos autores, la creación de esta historia es sin fines de lucro, su único propósito es el de entretener
Prólogo
La batalla contra All For One se llevó muchas vidas en la guerra, no solo de héroes, también hubo villanos que perecieron en el calor de la batalla, al final, al gran mal no le importaba nadie más que el mismo, todo para él representaba piezas manipulables en un tablero de ajedrez.
Mr. Compress, Twice, Toga, ni siquiera el mismo Shigaraki se salvó del fuego cruzado. Kirishima, un buen amigo murió protegiéndome de un ataque devastador, pude ver como a Iida-kun le faltaba una pierna mientras que Uraraka-san y Kendo-san le ayudaban a salir del campo de batalla. Todoroki-kun, perdió su ojo izquierdo y su mano derecha mientras levantaba un muro protector de hielo.
Sato fue otra de las bajas junto a Sero, Ojiro… había perdido su cola entera, a Jirou le faltaba uno de sus jacks, mientras Tsuyu tenía su pierna derecha completamente rota en cuatro partes lo que le dificultaba poder ayudar.
Yaoyorozu-san tenia graves heridas en el abdomen y los brazos, su insistencia por brindarnos equipo para la batalla la había dejado muy grave y casi al borde de la muerte.
Sin embargo, lo peor de todo había sido, ver como Kacchan había sido asesinado frente a mí, con su propio quirk, All For One lo habia robado y lo había usado en mi mejor amigo.
Rabia, Impotencia, Frustración… Odio todo eso era lo que sentía en estos momentos por esa persona. Él se puso frente a mí con su mano abierta mientras reía.
- Hasta nunca, símbolo de la pa –Antes de poder terminar su frase, unas extrañas siluetas negras que parecían tener vida propia se aferraron al cuello y extremidades del villano, los rayos del One For All normalmente verdes, ahora eran negros, con un siniestro brillo rojo.
- ¡Aaaaahhhhhhh! –Gritó el peliverde, mientras que el quirk de látigos negros parecía comenzar a actuar como si tuviera vida propia, estaban cubriendo y apretando con tanta fuerza, los brazos y piernas haciendo que el mismo villano sintiera como sus propios huesos se rompían con la fuerza que estaba siendo ejercida.
- ¡Maldita sea! ¡Suéltame! –Gritó el símbolo de la maldad, pero Izuku Midoriya, no iba a escucharlo.
- Esto… esto es por Sato –Exclamó el peliverde aprovechando que estaba inmóvil para estamparle un puñetazo en el abdomen al villano, la potencia fue tanta que el villano se encorvó- Esto va… por ¡Sero! –Gritó el peliverde sujetando con fuerza los látigos para jalar al villano y comenzar a estrellarlo con todos los edificios que rodeaban el campo de batalla haciendo que estos se desmoronaran.
A lo lejos los amigos del peliverde se miraban preocupados, Izuku parecía haber perdido la cabeza. Ahora mismo podemos ver como muchas varillas atravesaban el cuerpo del villano, el cual se miraba muy lastimado.
- Y esto –Izuku se acercaba al villano el cual se removía algo débil, por más que lo intentaba, algo estaba bloqueando los quirks que había robado –ESTO ES POR ¡KIRISHIMA! –Gritó el peliverde impulsándose con un salto y caer con una patada de hacha, para su mala suerte, All For One logró activar el campo de aire evitando que el golpe llegara.
Los látigos fueron cortados por la presión del aire, entonces Izuku fue estrellado en un tumulto de rocas.
- Maldito niño… enserio… me hiciste mucho daño –Decía el villano, este miraba las varillas de metal encajadas en su cuerpo y comenzó a retirarlas, mientras sus heridas se quemaban y regeneraban lo más rápido que podían- ¡Se acabaron los juegos y el hombre bueno, es hora de que te vayas al infierno! –Gritó el super villano haciendo que sus manos mutaran de forma extraña y varias placas metálicas se fundieran en sus nudillos.
Izuku intentaba levantarse, entonces los puñetazos comenzaron a llegar de uno en uno sobre el cuerpo del muchacho de cabellos verdes.
- ¿Qué creías? –Cuestionaba el villano- ¿Que un simple arranque de ira injustificada iba a ser suficiente? -Se burlaba mientras los golpes continuaban haciendo que el peliverde pusiera los ojos en blanco y vomitara sangre- ¡Soy Dios Muchacho Estúpido! ¡Soy un ser superior! ¡Nada ni nadie podrá derrotarme! ¡Y mucho menos un niño tonto con sueños absurdos! –Exclamaba el villano cuando una llamarada le golpeo la espalda logrando detenerlo.
El villano se giró y pudo ver que se trataba de aquel chico con el Quirk de hielo y fuego, su mano derecha parecía haber sido sustituida por una mano creada a base de su quirk de hielo.
- ¿Podrías esperar? Una vez que termine con él, puedes ser el siguiente –Mencionaba el villano, pero Todoroki corrió en su dirección y aprovechando que aun con su pierna derecha podía crear hielo, hizo que unas estacas salieran del suelo, sin embargo, el villano no hizo ningún intento por evitarlas.
En ese momento una lengua alargada tomó a Izuku del torso y lo sacó del campo de batalla. Ahora podemos ver como Tsuyu había logrado atraer al peliverde hasta una zona segura, donde Uraraka lo revisaba.
- Vamos, Deku reacciona, no puedes morir, no aun –Decía la chica, mientras que Todoroki hacia su mejor esfuerzo por mantener un batalla con el más grande villano de todos.
- Adivina donde estoy –Mencionó All For One haciéndose invisible, mientras que Todoroki intentaba mantener la calma, ahora si estaba en desventaja, fue entonces que un rayo azul salió de la nada y golpeo al hijo de Endeavor haciéndolo salir del campo de batalla.
- Esta… usando los Quirks de Toru y Aoyama –Mencionó Kyoka mirándole desde una posición elevada al villano, el cual lentamente comenzó a levitar en el aire unos metros.
- ¡Vamos joven promesa! No puedes dejarle todo el trabajo a tu compañero de apoyo –Dijo de forma tranquila All For One con las manos detrás de su espalda -supongo que te tendré que hacer salir –Dijo de forma tranquila mientras que con un movimiento de mano, varios escombros se levantaban en el aire y después eran lanzados en dirección a Todoroki el cual apenas podía moverse.
El chico intentaba activar su lado de fuego para derretir todo, sin embargo estaba tan herido y cansado que no había manera, fue entonces que los escombros fueron reducidos a polvo, mientras una silueta se plantaba dándole la espalda.
- Si tu padre sabe que te dejé morir, yo seré el siguiente en su lista –Mencionó un joven rubio el cual tenía unas alas rojas en la espalda y una pluma muy alargada que llevaba en su mano derecha.
- El traidor de traidores, no cabe duda que fuiste un espía doble muy impresionante, me encargare de acabar con esa suerte tuya –Dijo el villano mientras que unas nubes negras comenzaban a arremolinarse sobre el campo de batalla, mientras poderosos rayos caían y hacían retumbar el suelo.
- Si no le tengo miedo a Mirko estando de malas, menos le voy a tener miedo a los rayos –Mencionó burlón el héroe emplumado mirando.
Hawks intentaría ganar algo de tiempo, aunque él lo sabía, si All Might o Endeavor no podían contra este sujeto, él tenía menos posibilidades.
Mente de Izuku
Nuevamente el chico era cubierto por las sombras, lo único visible eran sus ojos, nariz y cabello, el resto de su cuerpo era cubierto por las sombras, mientras que frente a él estaban los portadores.
- No puedes dejarte ganar, aún estamos contigo –Mencionó el primer portador, este se convirtió en una especie de orbe de luz rojo y se metió en el pecho del peliverde.
- Vamos niño, has lo que nosotros no pudimos en vida –Dijo el segundo portador convirtiéndose en una luz morado que igual al peliblanco, termino entrando al cuerpo de Izuku.
- Eres fuerte y quizás el mejor de nosotros –Uno a uno los portadores se transformaban en luces de colores y se adentraban en el pecho de Midoriya, azul, amarillo, rosa, verde y finalizó con Nana mirándole fijamente.
- Un verdadero héroe salva no solo vidas, sino también espíritus. Así que no importa cuán aterradoras se pongan las cosas, sonríe. Las personas en este mundo que pueden sonreír son siempre las más fuertes, es algo que le enseñé a Toshinori –Comentó la mujer convirtiéndose en un orbe de luz blanco que entró en el pecho de Izuku.
El peliverde despertó de golpe encontrándose quizás la peor situación del mundo, All For One tomando del cuello a Mineta, el cual no dejaba de arrojarle sus esferas desprendibles al cuerpo esperando poder retrasarlo de alguna manera, mientras las chicas parecían quedar como último sistema de defensa.
- Chicas… espero verme enserio genial –Dijo Mineta soltando lagrimas sabiendo que era su fin, entonces solo se escuchó un crack, su cabeza cayo hacia atrás con los ojos en blanco, para después verse como ante los ojos de las chicas e Izuku, Mineta comenzaba a desintegrarse como si jamás hubiera existido.
- ¡MINETA! –Gritaron las chicas al ver a su compañero ser asesinado sin misericordia alguna.
- ¿Quién sigue? –Preguntó All For One mirando a las chicas, Momo se puso de pie lista para crear algunas armas pero…
- Deténganse –Pidió el peliverde llamando la atención de las chicas- No más muertes, innecesarias –Mencionó Izuku, le dolía ver una muerte más, pero no iba a dejar que esto siguiera- Tu y yo, arreglaremos esto, sin secuaces, sin rehenes, ¿Quieres mi quirk? –Cuestionó el peliverde mirando al villano, el cual pudo ver cómo los rayos del one for all brillaban con más intensidad- ¡Ven y quítamelo! –Sentenció el peliverde, lanzándose contra el villano.
- ¡Midoriya! ¡MIDORIYA TE ESTOY HABLANDO! –Se escuchó una voz muy molesta, entonces All For One desapareció, el aludido levantaba la cabeza de su pupitre y al enfocar bien la vista, pudo ver a una mujer de cabellos rosados y ojos azules de brazos cruzados.
- ¡Ki-Ki-Kirisu-sensei! –Exclamó el peliverde en shock, la mujer solo suspiró mientras que el resto de los compañeros del peliverde reían ante la mala suerte del muchacho.
- Midoriya-san, si mi clase le parece aburrida puede irse, pero recuerde que igual tendrá una calificación reprobatoria si esto continúa de esta manera –Comentó la mujer de forma seria mientras que el chico asentía rápidamente y bajaba la mirada.
- Lo siento mucho, le… le prometo que no volverá a ocurrir –Dijo el peliverde mirándose como la mujer regresaba a la pizarra frente a toda la clase a paso lento y elegante.
- No haga promesas que no va a cumplir –Sentenció la mujer avergonzando un poco más a Izuku. Lo que este no notaba era como una joven de cabellos negros y ojos de la misma tonalidad le miraban con curiosidad.
La campana de la escuela comenzó a sonar dando por finalizada la clase y permitiendo a los chicos almorzar, el peliverde por su parte se puso de pie con un suspiro y comenzó a caminar, cuando aquel par de brillantes orbes azabache le volvían a mirar.
¨Ha pasado un año desde la pelea contra All For One, su último movimiento fue crear un portal con el poder de Kurogiri y ahora, estoy en una dimensión extraña. ¿Cómo sé que es otra dimensión? Es muy sencillo, cada vez que busco información de All Might o de otros súper héroes conocidos, los datos no existen, tengo que buscar una manera de regresar a casa, pues incluso las voces de los antiguos portadores cada vez se sienten más débiles¨
El peliverde opto por ponerse sus audífonos mientras que caminaba por los pasillos de su actual escuela, todo era tan… extraño. Mientras caminaba, el chico pasó por un lado de un cartel donde salía un sombrero de copa y la carta de la reina de corazones que decía, se buscan asistentes para el club, interesados, pasar al salón E3.
Ahora el chico estaba en el exterior, solían verle muy solo siempre, además el que fuera tan tímido hacía difícil hablar con él, pero eso no iba a ser el impedimento para aquella joven de cabellos negros a la cual, extrañamente se le levantaron dos mechones de cabellos, los cuales tomaron forma de orejas de gato.
- ¨Atención a todas las unidades, el grupo armado que asaltó el banco del distrito de Shibuya, ahora cuenta con una cantidad de 15 rehenes, favor de acudir al teatro de la zona¨ -El peliverde escuchaba con atención por medio de sus auriculares una estación de la policía.
- No en mi guardia –Dijo Izuku corriendo a una zona donde nadie pudiera verle, cuando estuvo seguro, este se quitó el uniforme, dejando ver que debajo llevaba un atuendo bastante similar al de su traje de héroe, este constaba de una camiseta ajustada y de color verde, llevaba una máscara que le cubriera la mitad del rostro al estilo de un ninja y una capucha para ocultar su cabello- One For All –Pronunció el muchacho apretando los puños mientras su quirk se manifestaba con fuerza y entonces dio un salto haciendo que la persona que le había estado siguiendo abriera los ojos de par en par, mostrando mucha confusión.
El chico ahora se desplazaba por el aire gracias a la habilidad de levitación, esto le permitía aumentar el rango entre saltos y caer con seguridad sobre los techos de los edificios.
Izuku se miraba bastante serio, al parecer algunas cosas jamás cambiarían, maldad siempre habría en todos lados. Fue un trayecto de 8 minutos, entonces pudo ver como la policía se había hecho presente.
- Esta es la policía, los tenemos rodeados –Dijo un uniformado con un megáfono en mano.
- ¡No me jodan! Si no quieren que comencemos a matar a los rehenes será mejor que… -El ladrón comenzaba a gritar sus exigencias mientras que Izuku observaba oculto desde donde la policía no pudiera verlos.
- Si pudo meterme por algún lado podría realizar una emboscada con la pantalla de humo para desorientarlos, pero primero debo asegurarme de que no pueden lastimar a los rehenes –Mencionó el peliverde analizando el campo de batalla, no podía dejar ningún clavo suelto en esta situación.
- ¡Si no acceden vamos a comenzar a hacer bastante daño! –Exclamó el maleante disparando con su arma haciendo que la policía se ocultara.
- Bien, tranquilo, solo… cálmate y por favor, si hay niños, déjalos salir, estamos solicitando cada una de las cosas por las que has demandado –Decía el oficial queriendo mantener la calma.
- Hasta no ver mi auto y la pizza, no soltaré a nadie –Sentenció el líder de la pandilla cerrando el lugar mientras que otros dos hombres armados se colocaban en la puerta para vigilar.
- Bien, es ahora o nunca –Se quejó el peliverde bajando del techo para comenzar a moverse en dirección al teatro, si tenía una puerta trasera podría acceder por ahí.
Era un callejón y se miraba algo sucio, pero había un hombre haciendo guardia, fue cuando sin darse cuenta, algo lo tomó de la pierna y lo jaló haciéndole gritar mientras soltaba su arma.
- ¿Cuantos son? –Cuestionó Izuku intentando hacer una voz seria e intimidante.
- So-Somos 4 –Mencionó el hombre, cuando el peliverde procedió a ponerle cinta adhesiva en la boca y las muñecas para que no escapara. De esa manera, entró por la puerta trasera, encontrando el backstage del escenario completamente oscuro, sin embargo, podía escuchar voces más adelante.
- Tengo que noquearlos antes de que griten, no puedo darme el lujo de que hagan ruido y pongan alerta a los demás –Mencionó el peliverde mientras que avanzaba con cautela.
- Los policías son tan estúpidos, mira que cumplir demandas tan absurdas –Se burlaba uno de los ladrones de banco.
- Además, yo no quiero regresar a ninguna rehén, estas chicas se ven bastante bien si lo piensas con detenimiento –Dijo otro de los sujetos mientras picaba el pecho de una de las chicas con el cañón de su arma.
- Por favor detente –Suplicaba asustada una joven derramando lágrimas, entonces se escuchó un disparo y aquel sujeto cayó al suelo herido tomándose un brazo.
- Hijo de perra ¿Estás loco? ¡MALDITA SEA! ¡ESTO DUELE COMO LA MIERDA! –Exclamaba el herido, aunque la bala solo lo había rosado.
- Nadie tocara a nadie, esperamos nuestra comida, nuestro vehículo y nos vamos, no tenemos por qué hacer esto más grande, ahora levántate a menos de que quieras una ambulancia para que te recojan mientras nosotros nos vamos –Sentenció el líder de forma severa.
- Maldito loco –Decía el sujeto apretando los dientes.
- ¨No puedo perder más tiempo¨ -Sentenció el peliverde el cual buscaba posicionarse bien, sin embargó sintió algo contra su cabeza al momento en que su sensor de peligro se activaba.
- Jefe encontré a un infiltrado y… oh mierda ¡ERES TÚ! ¡ERES EL NINJA VERDE! –Gritó este cuando una cortina de humo se esparció por todos lados haciendo que todos comenzaran a toser.
- ¡SAL DE DONDE QUIERA QUE ESTES! –Ordenó el líder, cuando escucho pasos sobre su cabeza, entonces pudo ver como el ¨Ninja verde¨ se movía entre la utilería del teatro- Ahí estas –Exclamó el sujeto para disparar contra Izuku.
- ¡ESTÁN DISPARANDO RÁPIDO MUÉVANSE! INMOVILICEN A ESOS DOS DE LA ENTRADA –Sentenció el uniformado para que abrieran fuego contra los guardias, los cuales se escondieron detrás de un par de columnas.
- Maldita sea, ya se complicó todo –Sentenció el líder de los criminales, fue cuando este fue levantado junto a otro del su grupo, esto solo dejó al que se encontraba herido, por lo que no le quedo de otra más que tomar a una rehén.
- ¡Suéltame! –Se quejó una joven castaña de largos cabellos, mientras que el sujeto seguía buscando al ninja verde.
- Vamos, sal de ahí o… le vuelo los sesos –Decía el sujeto buscando a Izuku mientras la cortina de humo se comenzaba a disipar, fue cuando pudo ver a sus compañeros y su líder colgados de cabeza con la misma utilería del teatro.
En ese momento el arma de aquel criminal fue sujetada por uno de los látigos negros de Izuku y se la arrebató de las manos. Entonces el ninja verde hizo acto de presencia.
- No compliques más las cosas déjala ir –Pidió el peliverde al nervioso hombre- No quiero lastimarte, solo, deja ir a los rehenes y todo estará bien –Dijo el ninja, estirando su mano para alcanzar a la chica.
- Tu ganas –Dijo el hombre soltando a la castaña, ella rápidamente se abrazó a Izuku buscando protección.
- ¿Estas bien? –Preguntó el muchacho mirando a la chica.
- Si –En ese momento el criminal sacó una navaja y el peliverde dio una vuelta cubriendo a la chica con su propio cuerpo, la navaja entró en la piel de Izuku, mientras el criminal reía.
- ¿No creíste que sería tan fácil verdad? –Preguntó el sujeto mientras el ninja verde aguantaba el dolor como podía. Aquel sujetó retiró la navaja dispuesto a seguir apuñalando, cuando un disparo lo detuvo.
- ¡Alto ahí policía! –Exclamó un hombre, entonces Izuku soltó a la chica y comenzó a huir, no podía permitir que lo atraparan- ¡Que no escape! –Ordenó el líder del cuerpo de policías, estos siguieron a Izuku hasta la puerta trasera, pero al abrirla, solo encontraron humo que les impidió ver por donde se había ido, el Midoriya ahora se encontraba trasladándose por los techos esperando regresar a la escuela antes de que alguien se diera cuenta de su ausencia.
- Lo perdimos, de nuevo señor –Se quejó uno de los oficiales molestando a su capitán.
- Ninja verde –Se quejó el hombre- Revisen a los rehenes y llamen a los paramédicos, tenemos un herido, también bajen a esos idiotas del techo y revisen todo el teatro –Explicó el hombre a su equipo, los cuales comenzaron a acatar órdenes.
- Ninja Verde –Murmuró la joven castaña recordando como al estar entre sus brazos, pudo sentirse protegida.
Minutos más tarde el peliverde había regresado a su escondite, el cual en realidad se trataba de un almacén de jardinería en los terrenos de la escuela, ahora mismo necesitaba colocarse una gasa y algo de alcohol en su herida, sin embargo al abrir la puerta, terminó encontrándose con una enorme sorpresa.
- Estoy en problemas –Dijo el peliverde tragando en seco.
Frente a Izuku se encontraba aquella joven de cabellos negros, la chica tenía una mochila con lo que parecía ser el uniforme de su escuela, al ver a Izuku la mochila se le cayó.
- Yo… puedo explicarlo –La chica al verlo se puso algo temblorosa y antes de que se diera cuenta, pasó corriendo a gran velocidad por un lado del peliverde- Si no la detengo, es mi fin –Mencionó el peliverde con una expresión de shock.
Esta historia continuará…
