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Hola queridos lectores

les comparto un nuevo capitulo de mi fic :D

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saludos desde CDMX

Serenity Moon

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CAPITULO 13 DE LAS CENIZAS RENACE EL AMOR II

LA DECISIÓN DE OLGA PATAKI I


La delicadeza de las palabras podría funcionar ¿Cuándo el corazón este herido? Es como un susurro entre el viento con interior de hielo ¿Cómo soportar la daga que atraviesa el alma?

¿Cómo cegarse ante lo evidente? ¿Cómo ignorar lo que hay en el corazón? ¿Cómo no gritar? ¿Cómo…? ¿Cómo no morir ante el dolor de la decepción por alguien que amabas tanto?

La dulce y amarga sensación del amor y desamor, del dolor y la felicidad, ¿Cómo llorar entre felicidad? ¿Cómo no amar a quien nos robo el aliento con solo mirarlo?

¿Cómo odiar a quien amaste mas que a nada en el mundo?

Maldita enigma.

O.P.


Helga miraba con una dulce sonrisa a su esposo, que raro se escuchaba eso, pero le llenaba el corazón de felicidad.

-Ahora ya estaremos juntos para siempre -Susurro Arnold teniéndola en sus brazos mientras bailaban al compás de la música

-Si -Susurro Helga sonriéndole con emoción

-Te amo Helga

-Yo también te amo

Ambos se dieron un beso casto y lleno de amor.

-Perdón por interrumpir -Susurro Miles mirándolos -Tu madre esta cansada y nos iremos a casa ya, hijo

-No te preocupes papa, de acuerdo -Dijo Arnold sonriendo

-Nos vemos después Helga -Stella la tomo entre sus brazos para felicitarla nuevamente -Te queremos hija y ya eres parte de nuestra familia, recuérdalo siempre

-Gracias Stella -Susurro tímidamente la rubia

-Esperamos que tengan buen viaje de luna de miel, por favor cuídense y escribanos

-Claro que si papa

-Nos vemos cariño -Miles la abrazo fuertemente

-Nos vemos Miles -Susurro Helga con cariño -Gracias por todo.

-No hay de que pequeña, nos vemos luego

-Cuídense por favor -Agrego Stella

-Si -Dijo Helga sonriéndoles junto con Arnold

-Arnold -Se acerco Miriam -Por favor cuida mucho a mi pequeña hija

Arnold sonrió -Claro señora Pataki

-Dime Miriam hijo -Abrazo al joven para después abrazar a su hija -Felicidades cariño

-Gracias mama

-Bueno ahora ya me iré a descansar también, Olga se quedara por aquí, nos vemos a su regreso

-Claro mama

-Felicidades cuñado -Dijo Hilda acercándose a Arnold -Espero no arrepentirte de esta decisión

-Nunca -Arnold miro a Helga sonriendo con amor cosa que Hilda odio

-Bueno nos vemos después entonces -Hilda dio media vuelta ignorando a su hermana

En ese momento llego William y el ambiente se tenso -Felicidades chicos

-Gracias -Dijo secamente el rubio tomando de la cintura a la rubia para halarla hacia el

-¿Puedo darle un abrazo a mi hermanita? -Pregunto mirando a Helga con una sonrisa torcida

-No creo, ya nos están esperando por allá -Intervino Arnold de manera posesiva

-Claro…cuñado -Dijo molesto William mirándolo con molestia y enojo

Arnold halo a la rubia hacia donde estaba su hermano -Muchas felicidades -Lo abrazo

-Gracias Arnie

Arnie miro a Helga con una sonrisa sincera -Felicidades Helga, espero que podamos ser como hermanos en algún momento

Helga sonrió -Claro Arnie

Arnold noto que su hermano estaba algo decaído, seguramente era por lo de Phoebe, pero ¿Qué podía hacer? En el amor…nadie manda

-¿Iras a casa ya o te quedaras un poco mas?

Arnie sonrió -No, ya casi me voy -Tomo su copa de un trago -Iré a pasear un poco antes de ir a casa, ustedes ¿Ya se irán?

-Si en un minuto -Comento Helga sonriéndole

-¿Quieres ir a cambiarte? -Pregunto el rubio -Es un camino algo largo

-Si me gustaría, creo que iré a buscar a Rhonda para despedirme de ella y de Phoebe, bajo en un minuto

-Claro amor -Le dio un beso breve antes de que la rubia se fuera

-Me alegra que hayas tenido suerte hermano

-También tu la tendrás

El rubio negó -Encontré a Phoebe con otro

Arnold hizo una mueca de incomodidad

-¿Lo sabias? -Enarco una ceja su hermano perspicazmente -Soy un tonto claro que si lo sabias, si Gerald es tu amigo

-Arnie déjame explicarte yo…

-No, creí que antes que amigos estaba yo, yo soy tu hermano y me acabas de traicionar, dejaste que me ilusionara con una zorra

-Arnie no insultes y baja la voz por favor

-¡No quiero! -Miro a los invitados que voltearon e intento respirar -No quiero…no quiero volver a hablar contigo, hoy perdí algo mas que una vieja, perdí a mi único amigo y hermano

-Arnie espera -Intento tomarlo del brazo pero el rubio estaba furioso y se zafo bruscamente

-Arnold se feliz, como yo nunca podre y este dolor es en parte tu culpa…mi propio hermano, es increíble -Susurro yéndose lejos del rubio quien no hizo ya nada para detenerlo

Gerald quien había visto la escena se acerco al rubio cuando el otro se fue

-¿Arnold?

-Los vio -Susurro -Ahora me odia…mi hermano…me odia

Gerald no dijo nada, solo se quedo a su lado.

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Helga se terminaba de colocar la capa de viaje para poder bajar con su esposo y partir a su viaje, Rhonda le había ayudado a preparar todo y estaba dando ordenes para bajar su valija, cuando de pronto William irrumpió en su alcoba.

Helga sintió que el corazón se le paralizara

-¿Te he dicho que me caen mal las mujeres que se hacen santas cuando no lo son?

Helga lo ignoro e intento seguir con lo suyo

-¡Te estoy hablando Helga! ¿quieres matar acaso a alguien mas de tu familia? Por favor solo es un himen

Helga se sonrojo levemente y lo encaro

-Para ti no tendré ningún valor como mujer, pero ¿estas loco? -Helga se acerco a la puerta pero William le impidió el paso -Dios William eres el esposo de mi hermana ¿Entiendes?

-¿Ese es tu impedimento? Vámonos lejos…la dejo…lo haría por ti

Helga le miro con molestia -¡¿Qué te pasa?!

La tomo de los hombros para besarla pero Helga le dio un puñetazo -No…no me vuelvas a tocar

-Helga por favor si quieres tanto como yo

-Me das asco -Susurro la rubia mirándolo con desprecio -No te tolero ¿Qué te hace pensar lo contrario?

William le miro molesto mientras se limpiaba la sangre de la nariz -Me lastimaste -Dijo sonriéndole -Conste que yo lo quería hacer por las buenas

La abofeteo en ese momento provocando que Helga cayera sobre la cama y William se dejo caer sobre de ella.

-Mira Helga hay dos formas de hacer esto, por las buenas o por las malas, si es por las buenas después de terminar lo que tenemos que hacer te iras con tu esposito a seguir jugando al matrimonio feliz y amoroso que aparentan ser y si es por las malas, voy a tener que seguir golpeándote y lo peor tendré que cambiarte por tu hermana Hilda para que ella se vaya con Arnold y tu te quedaras aquí conmigo a mi merced ¿Cuál escoges amor? -La besó en el cuello -¿Es mejor la primera verdad? -Pregunto sonriente al verla que se quedo quieta

Helga dejo escapar un sollozo mientras cerraba los ojos

-Eso pensé -Dijo William sonriendo mientras intentaba quitarle el vestido que hace un momento se había puesto, pero…

-¡¿William?!

Olga miro a su esposo con molestia y a su hermana con preocupación -Dejara ahora -Susurro molesta

-Hola amor -Dijo William sonriéndole -Ven puedes unirte para darle el mejor regalo a tu hermana

-¡¿Estas loco?! Mi mama ya viene con ayuda, escuchamos todo ¡Eres un imbécil!

-¿Qué?

En ese momento entro Gerald para sujetar a William que ya caminaba para donde se encontraba Olga, enseguida entro Arnold quien fue de inmediato a ver a Helga. -¿Estas bien?

Helga solo lo abrazo, dejando salir en silencio el miedo, la impotencia y el dolor que sentía.

Otra vez había escapado de William, pero ¿podría seguir así el resto de su vida? Al final siempre estaría ese problema porque…porque…William era el esposo de su hermana y sobre todo el padre de Charlotte

-Te quiero lejos de mi vida y la de mi familia -Dijo Olga molesta yendo hacia donde estaba Helga, quien le miro con vergüenza pero Olga solo la abrazo fuertemente -Perdóname -Susurro en su oído provocando aun mas dolor de Helga

Miriam solo observo como Gerald se llevaba a su yerno.

Si estaba molesta pero…¿y el escándalo?

-¿Estas bien Helga? -Pregunto acercándose a las rubias

-Si mama -Susurro intentando componerse

-¿Por qué diablos nunca nos dijiste nada?

-¿Me hubieras creído? -Pregunto molesta la rubia

Miriam bajo la mirada -Puede que no pero…¿Tu papa?

-Si mama, mi papa me defendió y… -Helga no pudo continuar

-Fue tu culpa entonces ¿No? -Susurro Miriam mientras daba media vuelta

-Eso no fue su culpa, señora Pataki -Intervino Arnold -William golpeo al señor Pataki y en el golpe provoco el infarto, Helga estaba inofensiva, William es el verdadero culpable de todo

-Mama no quiero verlo de nuevo -Comento Olga firme

-¿Y que van a decir de nosotros? Van a hablar -Miro a Gerald que había vuelto

-Si lo dice por mi, no se preocupe -Miro a Arnold -Es como mi hermano y no le haría daño

-No Olga, será mejor olvidar este asunto y que…que sigas con tu matrimonio amor

-¿De verdad vas a obligarla mama? ¿Qué tal si luego se lo hace a su propia hija? -Pregunto molesta Helga

-No lo hará

-¿Cómo lo sabes?

-Intento protegernos a todos Helga, incluida tu ¿Qué crees que dirán si alguien se entera?

Helga miro a Olga -Por mi no te detengas, yo no hice nada malo -Dijo mientras tomaba la mano del rubio con fuerza -William no es la primera vez que intenta abusar de mi y no será la ultima si continua bajo nuestro techo ¿Qué si lo intenta con Hilda? ¿Qué va a pasar?

-Hilda -Dijo con burla Miriam pero no agrego mas

-Mama por favor -Olga tomo su mano -No puedo seguir con alguien que nos ha hecho daño a todos

Miriam suspiro

-Supongo que tienes razón -Miro a Helga -Bajen antes de que los invitados comiencen a notar todo esto por favor y ni una palabra, manejaremos lo de tu separación con discreción ¿cuento con su apoyo verdad Arnold?

El rubio se sorprendió al ser nombrado por ella -Claro Señora Pataki

-Miriam hijo por favor

-Claro…Miriam

-Vayan

Todos se dirigieron a la puerta, mientras que Helga se dirigió hacia su tocador para tomar una pomada para ayudarse con el golpe que ya comenzaba a notarse.

-Te veo abajo amor -Susurro Arnold al ser el ultimo en salir

Helga solo asintió

Después de unos minutos Miriam se acerco a ella para arrebatarle el bote con maquillaje que tenia en las manos para aplicárselo.

-Gracias -Susurro Helga mirándola con sorpresa

-Helga -Tomo su mano antes de continuar -¿En verdad estas bien?

La rubia le miro con sorpresa -Si

-Olga hablo conmigo, cuando vinimos hacia tu habitación y escuchamos todo…sentí temor

-¿De verdad mama?

Miriam la miro con molestia

-No soy de palo y tu eres mi hija como ellas, también te quiero, supongo

Helga rodo los ojos ante eso ultimo -¿Supones?

-Te pareces a tu padre -Sonrió melancólicamente -Supongo por eso jamás vamos a congeniar

-Y por eso quieres mas a Olga y a Hilda

-Olga es simplemente la hija perfecta, siempre intentando serlo

-¿Y Hilda?

Miriam cambio de semblante -La quiero si como bien dices, pero…últimamente veo que se parece mas y mas en muchas cosas que no quise nunca para ninguna y eso me ha decepcionado

-Seguro casándose con Lorenzo cambiara mama

-Lo dudo y no se si habrá boda -Comento -Pero…en caso de que no se case ¿Puedes prometerme que la ayudaras?

Helga sonrió de lado -Siempre ayudare a mis hermanas

-Gracias

-Mama ¿Tu querías a mi papa?

-No todos se casan por amor Helga

-¿Entonces no?

Miriam dejo de lado el bote -Había cariño, pero no Helga, no lo ame

Helga bajo la mirada con tristeza -Mama -Miro hacia la puerta -Tengo miedo

-No va a pasar nada malo, solo es algo natural entre un esposo y mujer, supongo que cuando hay cariño de por medio es mas fácil

Helga se mordió el labio

-¿Qué…que es lo natural?

Miriam rio -Me alegra confirmar que pese a ser mi hija mas rebelde y que me daba dolor de cabeza sigas siendo pura

-Pero…¿Qué…?

-Helga no tienes nada de que preocuparte, seguramente Arnold te guiara

Helga suspiro

De todas formas nadie le explicaba ¿Qué demonios era lo que pasaba?

Se imaginaba pero seguro algo mas faltaba ¿no?

-Mama ¿Por qué siempre has sido mala conmigo? ¿Solo porque me parezco a Bob?

Miriam sonrió de lado -Creo que por eso y por el hecho de que para tu padre no hubo nadie mejor que tu

Helga sonrió melancólicamente -Lo lamento

-Bueno ya es hora Helga -Se puso de pie -¿Lista?

Helga sintió que se le doblaban las piernas pero siguió a su madre hacia la salida.

-Te odio Helga -Susurro Hilda saliendo de su escondite -No puedo creer que William no lograra arruinarte este día y para colmo mi madre te da un premio, cuando eres una mosca muerta

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Arnold y Helga caminaban por el pequeño sendero del carruaje hacia la posada en la cual pasarían la noche, era de madrugada y hacia algo de frio, pero se sentía bastante bien el ya no estar encerrados en ese carruaje.

Había sido un bonito camino por supuesto pero sentía demasiados nervios al tener tan cerca a Arnold, sabia que era algo normal o al menos lo imaginaba, ya que el matrimonio de sus padres no eran exactamente el mejor ejemplo a seguir.

-Buenas noches señor Shortman ya se encuentra lista su habitación -Comento el dueño sonriéndoles -¿quieren que les lleve la cena?

-Si por favor y agua para tomar un baño, estamos algo cansados -Comento Arnold sonriéndole con amabilidad

-Claro señores Shortman en un momento subimos su equipaje y lo demás

-Gracias -Dijo Arnold tomando de la mano a Helga para ir detrás del joven que los esperaba para guiarlos a su habitación

Helga sintió que su estomago comenzaba a revolverse.

-Es aquí -Comento el joven abriendo la habitación, se veía realmente enorme y hermosa, tenia una pequeña salita y al fondo la habitación, estaba iluminada ya, es obvio que si nos esperaban.

Había una chimenea la cual ya estaba encendida por lo que en la habitación ya no se sentía el aire frio que azotaba la noche. Había también un par de floreros con rosas blancas y rojas.

Sintió cosquillas cuando Arnold le quito su capa de viaje, ni cuenta se había dado que se habían quedado solos

-Bueno ¿Quieres esperar la cena? -Pregunto mirándola con un brillo diferente, eso provoco una corriente eléctrica en Helga

-Bue…bueno yo….

-¿Qué pasa amor?

-Si…si tengo hambre -Dijo sonrojada y nerviosa

Arnold rio pero la dejo escapar de sus brazos -Bien, no deben tardar, voy a ir a darme un pequeño baño, creo que ya subieron el agua

-¿Qué? Yo no los escuche -Dijo Helga sorprendida

-La puerta del baño tiene entrada por fuera de la habitación y creo que estabas algo distraída amor, ya nos esperaban

Helga se sonrojo aun mas -De…de acuerdo -Dijo sonriendo o intentando sonreír

-Bueno ahora vuelvo -Comento Arnold dándole un dulce beso mientras Helga comenzaba a hiperventilar

Después de unos minutos la cena ya estaba en la mesa y Arnold salía de la habitación del fondo con ropa intima, Helga se sonrojo

-Creo…creo -No termino la frase y mejor se metió al cuarto de baño con lo que ya previamente había preparado

Arnold no pudo decir nada pero sonrió con dulzura y observo la mesa, Helga solo había colocado los utensilios y los platos para poder servirse de lo que habían llevado.

Seguro lo estaba esperando

Sonrió de lado mientras decidía ponerse la bata para esperarla.

Varios minutos después salió la rubia del cuarto con una bata alrededor de su cuerpo con nerviosismo

-Bien ¿quieres comer algo?

Helga asintió

Por un par de minutos la cena fluyo con tranquilidad, hasta que terminaron los alimentos, Arnold se acerco un poco mas a ella para mirarla con dulzura -¿Tienes miedo?

Helga lo miro y susurro suavemente -Si

-Discúlpame por esa vez que…

-Olvidemos todo por favor -Dijo Helga con firmeza

-De acuerdo -Beso el torso de su mano para después mirarla -No tienes porque tener miedo, no te hare daño

-Lo se pero…no se que…no se que debo hacer -Cambio su contestación, en realidad le tenia miedo a lo desconocido ¿Qué demonios iba a pasar o se supone debe pasar?

-Tranquila amor -La beso -Solo debes dejarte llevar por lo que sientes

La volvió a besar mientras profundizaba el beso con su lengua, quería disfrutarla al máximo como no había podido hacerlo meses antes, estaba loco por ella.

Helga sintió el beso lleno de pasión y amor de Arnold provocando que casi se cayera intento sujetarse y mantener fuerza para no irse hacia atrás mientras intentaba seguirle el ritmo al rubio.

El comenzó a quitar su bata suavemente sin asustarla, disfrutando cada segundo de ese momento.

El también se sentía nervioso pero la amaba

Solo quería amarla

Helga puso alrededor de su cuello sus manos y Arnold supo que era momento de levantarse.

-Te amo -Susurro el rubio mirándola mientras lentamente le quitaba la bata dejándola en su camisón

-También te amo Arnold -Susurro Helga sin quitar su mirada de él.

El rubio se quito su propia bata con la ayuda de la rubia quien lo hacia tímidamente.

Fueron despojándose lentamente de sus pocas prendas hasta que…

-Eres hermosa -Dijo Arnold mirándola sin reparo

Helga se sonrojo pero no se cubrió y también observo al rubio, era la primera vez que miraba a un hombre desnudo, se sonrojo levemente al mirar bajo su cintura.

-Ven -Susurro el rubio abrazándola, ella temblaba bajo el -¿Quieres que pare?

Helga se sonrojo fuertemente al momento de negar con la cabeza, las palabras no le salían y el corazón estaba por explotar.

Arnold le besó con ternura mientras bajaba sus manos por su espalda hasta llegar a su cintura y posterior a la cadera para después acariciarle con suavidad hasta cargarla. La llevo con suavidad a la cama donde la acostó

-Arnold -Susurro Helga mirándolo con dulzura

-Helga -Arnold se recostó sobre de ella mientras la besaba apasionadamente y dejaba con libertad sus manos, que exploraban con dulzura el cuerpo de su amada.

Besaba su cuello mientras su mano jugueteaba por los glúteos de la rubia, ella soltó un pequeño gemido que fue música para los oídos de Arnold.

Bajo lentamente hasta llegar al seno de la joven quien se sobresaltó inmediatamente pero Arnold continuo con su cometido

Y su mano lentamente iba hacia la vagina de la joven quien al sentir su mano en su intimidad se asusto

-Arnold

-Confía en mi amor

Arnold la miro para posterior lentamente bajar hacia su parte intimida de la joven quien solamente dejo que lo hiciera al momento del contacto de los labios de Arnold contra su parte sintió una corriente eléctrica que no había sentido anteriormente

El rubio siguió besándola hasta que de pronto sintió demasiado placer, era demasiado que sentía que en cualquier momento no podría mantenerse en silencio.

-Arnold -Susurro, mientras sentía que llegaba al éxtasis y su cuerpo se contraía, sin poder evitarlo soltó un gemido al llegar a su orgasmo

Arnold la miro sonriente, para posterior volver sobre su camino hacia su boca para besarla nuevamente. De pronto el calor del cuerpo de la rubia subió, tanto que sentía que podría quemarse.

-Te amo -Susurro Arnold mirándola mientras intentaba ingresar en su intimidad

Helga sintió el intento del rubio -¿Qué…que haces?

-Respira -Susurro el rubio mientras la besaba -Puede que duela -Murmuro -Pero solo será un momento

Arnold estaba sonrojado como ella pero con un brillo lleno de lujuria

Y se le notaba ansioso

-De acuerdo -Susurro Helga agitada intentando relajarse

Sintió otro empujón por parte del rubio lo que le provoco un poco de dolor, cerro los ojos

-Mírame Hel -Susurro mientras le daba un beso

Helga abrió los ojos mirándolo mientras el rubio volvía a dar otro empujón y entraba a la cavidad de la rubia.

Helga soltó un gemido al sentirlo por fin dentro

-Tranquila -Dijo el rubio acariciándola y besándola, quedándose quieto para no incomodarla

-Te amo también Arnold -Susurro Helga sonrojada bajo su cuerpo -Estoy bien

Arnold sonrió

Después de algunos minutos de besos y caricias, Arnold comenzó un pequeño vaivén dentro de la joven quien poco a poco sentía como su vagina se acostumbraba a aquel movimiento y por supuesto al miembro del rubio quien entraba y salía con mayor facilidad.

El rubio ya tampoco sentía incomodidad sino placer. Un placer enorme al sentir como la hacia su mujer.

Estaba por llegar al climax, sentía que ya casi vendría miro a Helga quien estaba sonrojada y con la cabeza hacia atrás gimiendo, sus pechos rebotaban sonrojados también por el movimiento de su entrada y salida al paraíso

-Estoy…Helga -Susurro Arnold antes de besarla nuevamente para poder terminar de esa forma.

La rubia se tenso bajo su cuerpo también llegando al clímax con el.

El rubio dejo salir todo dentro de ella sonrojado -Te amo -Susurro mientras la miraba después de tener su orgasmo

-Yo también mi amor -Susurro mirándolo con dulzura, para posterior abrazarlo.

Ambos se quedaron dormidos después de hacerse el amor por primera vez.

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-¡¿Qué demonios te pasa Hilda?!

Lorenzo miraba con molestia a la rubia quien lo había mordido.

-Dije que no quiero

-¿Qué te pico hoy? Si bien que te gusta

-Lo haremos cuando nos casemos -Miro a Lorenzo con casi suplica -¿Me amas?

Lorenzo se rio -Date por bien servida si me caso contigo, si eso quieres en verdad, mejor pórtate bien

-Lorenzo

-Ya te dije, sino no me veras en un mes el día de la boda

-Pero

-A mi no me interesa el escándalo ¿Entonces?

-¿Cómo se que estarás ahí?

-Compórtate y lo veras

Hilda le miro un segundo ante de acercarse para acostarse en la cama y levantarse el vestido

-Asi me gusta Hilda

A lo lejos William miraba la escena

-Veamos ¿Qué harás con esta noticia Helga? -Se pregunto sonriente el hombre

-Ya veremos quien sonríe al final -Comento sonriente mientras caminaba hacia el otro lado del lugar.