Storm Warning
Disclaimer: Los personajes son de S. Meyer y la historia le pertenece a Curlywurl95. Yo solo traduzco.
Disclaimer: The characters are S. Meyer's and the story belongs to Curlywur95. I'm just translating.
Capítulo 6: Hot and bothered (1)
Los siguientes días transcurren sin incidentes. No tengo clases con Bella, pero la veo en el almuerzo y ninguno de nosotros menciona nuestro enamoramiento secreto. Aunque veo una mirada pasar por su rostro una o dos veces, lo que me hace pensar que podría estar pensando en eso. Sé que yo lo estoy. Es prácticamente todo lo que puedo pensar.
El miércoles por la noche, estoy sentado en mi habitación haciendo la tarea, tratando de concentrarme en las ecuaciones de química frente a mí, cuando mi computadora suena. Miro hacia arriba y veo una notificación en Facebook.
Bella Swan quiere ser tu amiga.
Observo las palabras por un momento, sintiendo que mi ritmo cardíaco se acelera con solo ver su nombre en mi pantalla.
Dios, qué maldita tontería.
Rápidamente hago clic en aceptar antes de convertirme inmediatamente en un acosador completo y dirigirme directamente a su perfil. Tan pronto como se carga la página, hago clic en su foto de perfil; parece que es de hace un par de años. Bella se ve un poco más joven que ahora, su cabello oscuro está tirado sobre un hombro y está sonriendo directamente a la cámara.
Ella es tan linda...
Comienzo a desplazarme por las otras fotos de su perfil y veo algunas que parecen tomadas en California. Luego, hay un puñado de ella con un grupo de chicas, todas de su edad. También hay un par de ella aún más joven con una mujer mayor. Supongo que es su madre.
Mmh... ella nunca ha mencionado a su mamá antes...
Mi computadora me saca de mis pensamientos haciendo otro «ding». Salto ante el sonido antes de ver un mensaje de Bella aparecer en la esquina inferior. Inmediatamente siento que me han pillado con la mano en el tarro de galletas.
¡¿Sabrá que estoy curioseando su perfil?!
Por supuesto que no, solo cálmate.
Tomo una respiración profunda antes de hacer clic para abrir el mensaje.
¡Hola, nuevo amigo! ¡Qué casualidad! — B.
Sonrío un poco antes de contestar.
Hola. Lo sé, ¿cuáles eran las probabilidades? — E.
Veo los tres puntitos aparecer en la pantalla mientras ella escribe antes de que otro mensaje llegue.
De todas las redes sociales en el mundo, tuviste que encontrar la mía — B.
Sonrío antes de contestarle una vez más.
Por lo que recuerdo, tú me agregaste —E.
Oh, sí. Touché :P — B
Pero para ser justos, te agregué solo porque tú nunca lo hiciste, así que eso nos equilibra — B.
Supongo que tienes razón — E.
Unos momentos después estoy desesperado intentando pensar en algo que decir para mantener la conversación fluyendo.
Entonces, ¿qué estás haciendo? — E.
Dios. Soy un jodido tarado.
Bueno, te diría, pero te pondrías muy celoso de mí — B.
¿De verdad? —E.
Sí, te lo advierto. Puede que empieces a sentir que soy demasiado genial como para pasar el rato contigo, pero quiero tranquilizarte. Soy una persona normal —B.
No puedo aguantarme la risa por lo tonta que es.
Okey. Lo entiendo completamente. Me sentaré y todo eso — E.
Okey. Prepárate —B.
Considérame preparado —E.
Estoy haciendo… —B.
Tarea de matemáticas —B.
Sonrío una vez más antes de responder.
Estabas en lo correcto. Estás muy por encima de mí como para que sigamos siendo amigos —E.
Te lo advertí :P —B.
De todos modos, ¿qué estás haciendo? —B.
No mucho. Tratando de hacer mi tarea de química —E.
Ah, sí, eso es complicado. Soy casi tan mala en química como en matemáticas —B.
Dudo que seas mala en alguna de ellas —E.
Dudo que seas mala haciendo cualquier cosa.
No estoy siendo modesta cuando te digo que APESTO (las mayúsculas son requeridas) en ambas —B.
Sonrío, mordiendo mi labio inferior. Escribo mi respuesta pero luego la borro. Luego vuelvo a escribir y lo vuelvo a borrar.
Ugh, desearía poder coquetear… Soy muy malo en esto.
Okey, no quiero sonar como una total rara o así pero… ¿qué no me estás diciendo? ¡Puedo ver los puntitos pero no me has mandado nada! —B.
Río de nuevo, sintiéndome un poco más relajado ahora que sé que ella obviamente está tan metida en la conversación como yo.
Te iba a decir que si necesitas ayuda con matemáticas o lo que sea, estaré encantado de ayudarte —E.
—Ugh —gimo, dejando caer la cabeza entre mis manos—. ¿En serio le acabo de ofrecer ser su jodido compañero de estudio?
Me estoy poniendo a mí mismo en la jodida zona de la amistad.
Y de todos modos, ¿quién dice «encantado de ayudarte»?
Echo una mirada y veo que han aparecido tres puntos mientras ella escribe. Luego se detienen y vuelven a aparecer. Se detienen de nuevo. Espero un momento hasta que la tensión es demasiado para mí.
¿¡Ahora qué no me estás diciendo?! —E.
¡Jaja! Es molesto, ¿cierto? —B.
Te iba a decir que estaría bien que me ayudaras con química y mate, pero encuentro difícil el concentrarme cuando estoy contigo…—B.
Me quedo viendo la pantalla y siento que mi boca se abre un poco.
Está coqueteando conmigo.
No estoy en la zona de amigos. ¡Viva!
Escribo rápidamente una respuesta antes de tragar con fuerza y presionar enviar.
A mi también me cuesta concentrarme cuando estoy contigo —E.
¿En serio? —B.
Muerdo mi labio inferior mientras escribo y decido tomar el toro por los cuernos y solo decírselo.
No tienes idea —E.
Oh, créeme. Me lo imagino ;) —B.
Sonrío ante su mensaje y mi corazón se acelera con sus palabras.
¿Por qué es muchísimo más fácil decir este tipo de cosas por mensaje? —E.
No lo sé. Supongo que porque no tienes que ver la reacción de la otra persona. Puedes ser tu mismo, con verrugas y todo :P —B.
No me parece que seas del tipo verrugoso —E.
Lo mismo digo —B.
Hay una pausa antes de que un mensaje nuevo llegue.
Me gusta que coquetees conmigo —B.
Luego otro.
Quiero que coquetees conmigo —B.
No puedo evitar la sonrisa que me cruza la cara ni el calor que me sube por la nuca ante su sinceridad.
A mí también me gusta que coquetees conmigo —E.
Quiero que coquetees conmigo también —E.
Tal vez deberíamos intentar coquetear el uno con el otro un poco más a menudo... —B.
Creo que puedo manejar eso —E.
Bien —B.
De nuevo, hay una pausa antes de que ella envíe otro mensaje.
Bueno, ya con eso, será mejor que me desconecte. Necesito terminar esta tarea para mañana y como dije, me distraes mucho —B.
Sí, de acuerdo. Yo también. Bueno, ¿nos vemos mañana entonces? —E.
Totalmente sip —B.
Buenas noches, Bella —E.
Buenas noches, Edward —B.
.
.
.
Al día siguiente no veo a Bella en toda la mañana. Estoy sentado en la cafetería con Jasper y Emmett, esperando a que las chicas lleguen, cuando Emmett de repente comienza a hablarme.
—Entonces, Ed, ¿ qué está pasando entre Bella y tú? ¿Ya la invitaste salir? —dice. Los miro a él y a Jasper y veo sus amplios y curiosos ojos devolverme la mirada.
—No, aún no la he invitado a salir —le contesto, ignorando su primera pregunta. No es que no les quiera contar qué está pasando con Bella y conmigo, pero para ser honesto no sé si tenemos un nombre para lo nuestro en este momento. Además de que como que me gusta la idea de que sea sólo nuestro secreto por ahora.
—¿Por qué no?
—Está preocupado porque piensa que ella dirá que no —Jasper contesta por mi.
Gracias, Jas…
—¿En serio? Creí que le gustabas... por lo que he visto al menos —dice Emmett, mirando a Jasper confundido.
—Eso le dije pero sigue sin hacer nada al respecto — Jasper le contesta de nuevo, mordisqueando una esquina de su pizza.
—¿Por qué no?
—Le tiene miedo al rechazo —dice Jasper.
—Ah, la historia de siempre —responde Emmett a sabiendas.
—¿Pueden dejar de hablar de mí como si no estuviera aquí? De hecho, estoy bastante seguro de que le gusto, sólo no encontrado el momento oportuno para decirle que salga conmigo. Y de todos modos, ustedes no son quienes para hablar Señor He Estado Enamorado de Rose Desde Secundaria y Señor Estoy Loco de Amor por Alice — contesto, haciendo que cuatro ojos azules me miren sorprendidos.
—Uhhh —ambos corean, haciéndome enojar aún más.
—¿De qué están hablando? — una voz dice detrás mío. Me volteo para mirar por sobre mi hombro y veo a Bella parada ahí, con ojos brillantes y mejillas sonrojadas. Rose y Alice la flanquean a cada lado.
Joder.
¿Habrán oído mi parloteo?
—Oh, sólo... cosas —respondo como un maldita idiota, mi enojo inicial se desinfla con sólo ver su cara. Rose y Alice me sonríen un poco antes de tomar asiento en la mesa y me doy cuenta de que Bella parece intentar no sonreír también.
Jodidamente genial...
Obviamente sí escucharon mi puto parloteo.
Por suerte, me salva de una mayor vergüenza el hecho de que Rose saque el tema del fútbol y luego discuta con Emmett sobre quién va a ganar el primer partido de la temporada. Estoy dando otro bocado a mi sándwich, decidiendo ocuparme la boca antes de decir nada más, cuando siento que Bella se inclina hacia mí.
—Entonces, ¿me vas a contar algunas de esas «cosas» de las que estabas hablando ?—me pregunta. La miro y me doy cuenta de que sus ojos brillan con picardía. No puedo evitar sonreírle un poco.
—Oh, no dije mucho —le digo, mirando a los demás para asegurarme de que no están escuchando—. Sólo se burlaban de mí por no poder... concentrarme —admito, eligiendo mis palabras con cuidado y decidiendo probar un poco de coqueteo en la vida real. La miro y noto que sus mejillas se vuelven un poco rosadas.
¡Anotación!
—¿De verdad?
—De verdad, de verdad —contesto, haciéndola sonreír y mi corazón tartamudea.
—Yo también he tenido problemas concentrándome — me dice con seriedad.
—¿Sí?— respondo, mi voz con un poco de burla y mi mirada atrapada con la suya.
—Sí —se ríe—. Tal vez deberíamos ayudarnos para poder concentrarnos —dice, sus ojos relucen con brillo mientras me alza la ceja. La acción hace que mi ingle se remueva y mi estómago se revuelva.
—Tal vez —secundo con una sonrisa. Ambos reímos silenciosamente antes de que Jasper me tome del brazo para llamar mi atención.
—Hey, ¿quieres ir a jugar Basketball conmigo y con Em el sábado?
—Claro.
—¡Oigan! —Rosalie chilla, haciendo que le pongamos atención—, ¿no nos van a invitar?
—¿Realmente quieres venir a jugar con nosotros? —Jasper le pregunta, alzando una ceja hacia ella.
—Bueno… no —admite—, pero de todos modos podríamos salir — se encoge de hombros.
—Sí, podemos animarlos —Alice sugiere, con los ojos muy abiertos mientras mira a Jasper. Casi puedo verla imaginándose su cuerpo sudoroso botando una pelota de baloncesto.
Ew.
—Sí, podrán impresionarnos con sus habilidades… deportivas —Bella dice, dándome su mirada de «recuerda nuestro chiste privado». No puedo evitar la sonrisa que se extiende por mi rostro debido al recuerdo. Ella se ríe conmigo hasta que se da cuenta de que todos nos están mirando, así que intentamos bajar el volumen y calmarnos.
—Okeeeeyyyy… ¿nos vemos a las tres, entonces? —Jasper sugiere. Todos asentimos.
—No puedo esperar —Bella dice bajito y sus ojos se encuentran con los míos.
Yo tampoco.
.
.
.
La tarde del sábado llega pronto y antes de que me de cuenta Alice y yo estamos llegando a la casa de Jasper. Ambos decidimos ir en bici porque hace un día bonito. El clima es inusualmente caliente para esta época del año bajo el sol de la tarde y todavía se siente lo pegajoso del verano en el aire.
Mientras nos detenemos frente a la casa, puedo ver que Jasper y Emmett ya están afuera en el camino de entrada, jugando uno contra otro. Rose y Bella aún no están aquí.
—¡Hola! —Jasper nos llama cuando nos ve, sus ojos se cruzan con los míos antes de moverse inmediatamente hacia Alice.
Idiota.
—Hola —contesto, dejando mi bici recargada en una pared del garaje.
—¿Estás listo para que te pateen el trasero, Cullen? —Emmett me pregunta, moviendo las cejas hacia mí y girando un balón en la punta de su dedo.
Jodido idiota.
—¿Tú lo estás? —contraataco. Emmett se ríe fuerte mientras rebota el balón en el suelo, acercándose a mi.
—Bueno, enséñame lo que tienes —dice, aventándome el balón. Lo atrapó fácilmente y finjo ir hacia la izquierda, distrayéndolo y encestando.
» Suerte de principiante —dice. Me burlo de él.
—Bueno. Juguemos 2 de 3 —digo, con un encogimiento casual de hombros antes de recoger el balón del piso. Emmett puede ser un grandioso jugador de fútbol, pero el basquetbol es mi jodido deporte. Puede intentarlo, pero no hay forma de que me supere.
—Vas, entonces —dice Emmett con una mirada de competencia cruzando su rostro. Noto a Jasper moviéndose a un lado y tomando asiento junto a Alice en el pequeño trozo de césped que conforma el jardín delantero antes de volver mi atención a Emmett.
Empezamos a jugar, él se defiende con firmeza y me mantiene alejado de la red. Cuando meto la última canasta, demostrando que es Emmett quien debería preocuparse de que le den una paliza, el sonido de los silbidos llega a mis oídos.
—Dios, Cullen, ¿quién iba a saber que eres el reemplazo de Forks a LeBron James? —Rose se burla mientras se acerca.
—Desde luego, has mantenido la destreza deportiva en secreto —añade Bella en voz baja mientras pasa junto a mí, rozando su brazo con el mío y haciendo que todo mi cuerpo se ponga en marcha. Me río entre dientes antes de poner los ojos en blanco.
Mantén la calma. Mantén la calma.
Te está mirando...
Las chicas se dirigen a Alice y empiezan a hablar de algún músico antes de que Jasper se levante de su sitio junto a mi hermana y corra para unirse a Emmett y a mí.
—Vale, mi turno, dos contra uno —grita Emmett antes de darse la vuelta y correr a buscar la pelota.
Intento concentrarme en el juego, pero mis ojos se desvían hacia donde está sentada Bella, tumbada en la hierba bajo el sol. Lleva unos pantalones cortos de mezclilla que le abrazan el trasero de todas las maneras posibles y una camiseta de tirantes que sólo le deja ver la parte superior del pecho.
Mmh.
Gracias a mi mente ociosa, apenas bloqueo a Emmett de la canasta, recibiendo un codazo en el costado de la cabeza.
—¡Ugh —gruño.
—¡Concéntrate en el juego, Teddy! —me grita Alice, sonriendo. Le saco la lengua, pero no puedo evitar la leve sonrisa que me cruza la cara al ver que Bella me observa con una sonrisa en la cara.
—¡Concéntrate! —grita, levantando las cejas hacia mí. Me río de sus palabras antes de girarme para recoger la pelota.
—¡Lo estoy intentando! —le respondo, mirándola por encima del hombro y recibiendo como recompensa una sonrisa.
Seguimos jugando dos contra uno durante un rato hasta que todos estamos jadeando y sudando bajo el sol de la tarde. Finalmente, Jasper da por terminado el juego y corre a buscar bebidas para todos. Dejo caer la pelota y me dirijo a la pequeña sombra que hay junto al garaje.
—Joder, sigue haciendo un calor asqueroso —Emmett gime, tirando de su camisa por encima de la cabeza y secándose la frente con la tela.
—Lo sé. Me estoy derritiendo, joder —estoy de acuerdo, aún jadeando con fuerza, antes de estirar la mano por detrás de mi cabeza y quitarme también la camisa. Se desliza sobre mi cabeza, liberando finalmente mi torso de su agarre. Utilizo la ofensiva tela para limpiarme la frente antes de dejarla caer al suelo junto a la de Emmett.
—Tomen —Jasper aparece de repente junto a nosotros y nos da una botella de agua a cada uno antes de seguir nuestro ejemplo y apoyarse en la fría puerta del garaje. Tomo la botella con gratitud antes de inclinar la cabeza hacia atrás y tragar el líquido frío hasta que el dolor de cabeza me obliga a parar.
—¡Dios, chicos! Es cierto lo que dicen... si sale el sol, salen las armas (2)— Rose nos dice, con voz burlona. Todos nos giramos hacia ellas y vemos tres pares de ojos que nos miran fijamente.
—Ah, ¿si, Rosie? —Emmett le pregunta, antes de flexionar sus bíceps hacia ella como el idiota que es. Ella rueda sus ojos pero noto que hay un ligero rubor en sus mejillas.
Mmh. Interesante.
También me doy cuenta de que a Alice parece que se le va a salir la lengua de la boca al contemplar el pecho tonificado y los hombros anchos de Jasper, que brillan a la luz del sol.
Ew. Consigue una habitación, Al.
Intento contener mi mirada, pero termino dirigiéndola a la morena sentada en la hierba a su lado. Los ojos marrones de Bella se clavan en los míos antes de recorrer lentamente mi cara hasta el cuello, pasando por los hombros y bajando por el pecho hasta la cintura del pantalón corto que cuelga de mis caderas. Su mirada deja un rastro de fuego a su paso y siento que mi temperatura corporal aumenta.
Oh, mierda. No te pongas duro ahora mismo.
Siento que me duele la ingle y mi polla empieza a agitarse en mis pantalones a pesar de mi advertencia. Lucho contra el impulso de ajustarme, pero no puedo evitar mirar a los demás para ver si se han dado cuenta de nuestro intercambio no verbal. Por suerte, todos están demasiado ocupados mirándose o burlándose de los demás como para prestarnos mucha atención y mis ojos vuelven rápidamente a Bella.
Al mirarla, me siento momentáneamente un poco inseguro, preguntándome si le gusta lo que ve o si se está dando cuenta de su equivocado interés por mí. Hasta que veo el rubor que cubre sus mejillas, su cuello y la pequeña zona de su pecho que permanece descubierta por la camisa. Levanta la mano de su regazo y se frota la nuca, con cara de acaloramiento y nerviosismo. El movimiento hace que mis ojos vuelvan a dirigirse a los suyos y no puedo evitar la oleada de orgullo que me recorre al darme cuenta de que soy yo quien está causando ese efecto en ella. Que soy yo quien ha hecho que sus ojos se oscurezcan ligeramente.
Joder. La deseo.
—Entonces, ¿estás listo para jugar de nuevo? —Jasper dice, sacándome de mis pensamientos. Me aclaro un poco la garganta antes de apartar los ojos de Bella y mirarlo a él. Doy un salto antes de coger la pelota del asfalto.
—¿A quién le toca? —pregunto, mi voz suena un poco más grave a mis propios oídos.
—A ti te toca la defensa —dice Emmett. Vuelvo a asentir con la cabeza antes de pasarle el balón y moverme para bloquear la red.
—¿Estás preparado para recibir una paliza, Ed? — Jaspee se burla, dedicándome una sonrisa.
—Es poco probable —respondo antes de que Emmett pase el balón y comience el juego.
Cumplo mi palabra y meto tres balones antes de "fallar" uno de sus pases y dejar que metan uno en la red. Oigo una risita cercana y me giro para ver a Bella observándome a mí y a nuestro juego. Sus ojos brillan en los míos y sé que sabe que les he dejado ganar. Le sonrío y le guiño un ojo. Ella sonríe más y eso hace que mi estómago vuelva a dar un vuelco.
Quizá esto de ligar no sea tan difícil...
Seguimos jugando un rato hasta que mi hermana chilla y atrae mi atención hacia ella.
—¡Oh, Dios mío! ¿Hablas en serio?
—¿Qué pasa? —le pregunto, atrapando la pelota que acaba de lanzar Emmett.
—¿Sabías que el próximo fin de semana es el cumpleaños de Bella? —chilla. Mis ojos se vuelven hacia Bella.
—No, no lo sabía. ¿De verdad?
Ella asiente un poco.
—¿Por qué no nos lo dijiste? —dice Rose, frunciendo un poco el ceño.
—No sé —responde encogiéndose de hombros—. Supongo que nunca me han gustado mucho los cumpleaños. Quiero decir, es sólo un día más en realidad.
—¡Oh, vamos Bella! ¡Sólo cumples dieciocho años una vez! ¡Deberíamos hacer una fiesta! — Alice grita, pareciendo absolutamente encantada con la idea. Miro a Bella y veo la mirada de pánico en sus ojos cuando mi hermana empieza a lanzarse a su verdadera vocación de organizar fiestas.
—¡Allie! —digo bruscamente, interviniendo—. Quizá Bella no quiera una gran fiesta —le digo suavemente. Alice me mira a mí y luego a Bella antes de calmarse ligeramente y frenar su entusiasmo.
—Lo siento —dice, mirando a Bella.
—No, no pasa nada —ella le contesta con una suave sonrisa. Observo cómo respira un poco antes de volver a hablar—. ¿Sabes qué? Tienes razón, debería hacer algo para mis dieciocho años. Pero, tal vez podría ser algo pequeño. Sólo nosotros seis —sugiere.
—¡Sí! Eso estaría bien —Alice dice, volviendo a ser la misma de siempre.
—Déjame hablar con mi papá , ¿vale? —responde Bella. Todos asentimos con ella antes de tumbarnos junto a las chicas, decidiendo dar por terminado el día, ya que el sol empieza a ocultarse en el horizonte.
—Entonces, ¿quién ganó? —Alice pregunta un momento después.
—¿Quién crees? —Jasper le responde—. El viejo chico dorado Cullen.
—Sigo pensando que hizo trampa —Emmett responde, picando un trozo de hierba.
—¡Vete a la mierda, Em! No lo hice —me burlo—. Si acaso fui suave con los dos.
—Claro que sí —Jasper responde con una mirada de soslayo.
—Pues a mí me ha parecido que todos jugaron muy bien —Alice le dice, agitando las pestañas hacia él.
—Ajá, claro —le respondo, con voz burlona. Ella me saca la lengua, pero oigo a Bella y a Rose soltar una risita.
—Entonces, ¿de qué estaban hablando, chicas? —les pregunto a todas.
—Oh, no mucho, sólo... cosas —Bella me contesta, riéndose ligeramente. Las otras dos se ríen también y tengo la clara sensación de que estaban hablando de nosotros. Después de un momento o dos, los demás empiezan a hablar entre ellos y no puedo evitar mirar a Bella. Al hacerlo, sus ojos se dirigen a los míos.
—Entonces... ¿de qué estaban hablando? —le pregunto en voz baja.
—Como te dije, solo cosas —dice con una sonrisa.
—¿Nada que puedas contarme? —indago, desesperado por saber.
¿Habrá hablado de mí?
—No sin sonrojarme —susurra antes de que sus ojos recorran mi cuerpo de esa manera que me hace sentir un poco mareado.
—¿De verdad? —respondo en un susurro, acercando automáticamente mi cara a la suya.
—De verdad, de verdad —responde ella, imitando mis propias palabras del otro día. Ambos sonreímos un poco antes de que mis ojos bajen a su boca por un segundo.
—Gracias, por cierto —dice en un susurro.
—¿Por qué? —pregunto, con la voz un poco más grave que antes.
—Por controlar a tu hermana —dice. No puedo evitar reírme un poco.
—Es un placer —le respondo sinceramente—. Entonces, ¿realmente vas a hacer algo por tu cumpleaños?
—Sí, pero puede que no sea grande y lujoso —contesta seriamente.
—Lo que quieras, todos estaremos allí.
—¿Lo que yo quiera?
—Lo que quieras —acepto con una risa.
—¿Incluso si no está bien? —pregunta con una ceja levantada.
—En mi opinión, cuanto más descabellado sea, mejor —respondo riendo.
—De acuerdo. Trato —dice con una risita.
—Trato.
.
.
.
A medida que el atardecer se convierte en el crepúsculo, el aire finalmente se enfría un poco. Decidimos que deberíamos volver a casa, Alice y yo acordamos acompañar a Rose y a Bella, ya que está oscureciendo. Rápidamente cojo mi camiseta del suelo antes de depositarla en la cesta de la bicicleta de Alice.
—¡Nos vemos mañana, chicos! —Emmett se despide con la mano antes de volver a correr calle arriba hacia su casa.
—Nos vemos, chicos—Jasper dice antes de coger la pelota de baloncesto del asfalto y subir las escaleras de su porche. Nos despedimos con la mano antes de dirigirnos a nuestras bicicletas.
—¿Quieres compartir, Rosie? —pregunta Alice.
—Claro, pero pido la parte de atrás —Rose le responde, balanceando la pierna sobre la bicicleta y subiéndose a la parte de atrás. Miro a Bella y la veo mirando a las otras dos.
—¿Vamos? —le pregunto, señalando la bicicleta.
—Claro.
—Esta vez te sientas delante.
—Vale —dice con una sonrisa antes de pasar la pierna por encima del cuadro de la bici y sentarse en la parte delantera del asiento. Me subo detrás de ella y pongo los pies en los pedales y las manos en el manubrio.
Sentado tan cerca de ella, puedo sentir la tela de su camiseta de tirantes contra mi pecho, el tacto de su piel contra mis brazos y el olor de su champú bajo mi nariz. Tengo que contenerme físicamente para no gemir.
—¿Listos? —Alice me pregunta, sacándome de mis pensamientos inapropiados. Bella y yo asentimos con la cabeza antes de pedalear por la calle.
Mientras pedaleamos, la ligera brisa nocturna hace que el cabello de Bella me haga cosquillas en la cara. No puedo evitar reírme de la sensación.
—¿Qué pasa?
—Tu cabello me hace cosquillas.
—Oh, lo siento —me contesta, levantándose el pelo por encima de un hombro y dejando al descubierto parte de su suave y cremoso cuello.
Mmh. Quiero besarlo.
Entonces se apoya en mi pecho, apoyando su cabeza en mi hombro y, a su vez, atrapando su cabello detrás de la cabeza. Si antes pensaba que me costaba respirar, no es nada comparado con lo de ahora. Siento físicamente que mi pecho tartamudea.
—¿Está bien? —me pregunta en voz baja, con sus grandes ojos marrones mirándome desde abajo.
—Completamente —respondo, con la voz un poco ronca. Soy muy consciente de lo cerca que está su cara de la mía y me obligo a concentrarme en la carretera.
Seguimos pedaleando durante unos minutos más antes de llegar a la pequeña colina que baja a la calle principal del pueblo.
—¡Woo! —Alice grita mientras ella y Rose se lanzan por la pendiente y entran en el pueblo. Puedo oírlas reír desde aquí.
—Estás lista para la colina?
—Totalmente —Bella responde con una risita—. ¿Estás preparado para volar?
—¿Volar?
—Sí —ella dice. Empujo los pedales y subo a la cresta de la colina antes de saltar por encima y volar por la pendiente. Bella se ríe y saca los brazos por el lateral de la bici, simulando que vuela.
» ¡Wooo! —grita, echando la cabeza hacia atrás, mirándome y haciéndome reír. El aire pasa a toda velocidad, el pelo de Bella gira alrededor de su cara y me hace sentir en el cielo. Llegamos al final de la pendiente y seguimos hacia la ciudad, Bella todavía con los brazos extendidos, volando por el aire de la tarde.
No tardamos mucho en entrar en el camino de Bella y Rose y sé que nuestro día tiene que llegar a su fin.
—Bueno, gracias chicos —Rose dice, bajando de la bici de Alice cuando nos detenemos frente a su casa—. Nos vemos, mañana —se despide antes de subir corriendo los escalones de la entrada.
Continuamos por la calle antes de detenernos frente a la casa de Bella. Veo el coche de la policía en la entrada cuando nos detenemos y sé que su padre está en casa. Pongo los pies en el suelo y quito las manos del manubrio, liberando a Bella de mi jaula artificial.
—Gracias —dice antes de bajarse del asiento—. Entonces, ¿nos vemos mañana? —pregunta, volviéndose hacia nosotros.
—Totalmente —le respondo, sonriendo.
—Buenas noches, entonces —dice antes de girarse para subir las escaleras de la entrada.
—Buenas noches —Alice se despide con la mano.
La sigo con la mirada por un momento antes de volver a mirar a mi hermana. Me sonríe.
—Cállate, Allie —murmuro antes de pisar los pedales y dirigirme a la calle. Oigo su risa detrás de mí, alcanzándome rápidamente.
—¡No he dicho nada!
—No tienes que hacerlo.
Mientras seguimos pedaleando hacia casa, siento que sonrío un poco al notar que, a pesar de la ausencia de la morena de ojos color avellana, sigo sintiendo que estoy volando. Sigo sintiendo que estoy en el cielo. Y realmente, así es como Bella me hace sentir.
En el cielo.
(1): Hot and bothered es un slang y no pude encontrar una traducción que me gustara lo suficiente (si se les ocurre alguna, soy toda oídos). Esta frase se usa para describir dos sentimientos: O puede ser para alguien que esta excitado (sexualmente hablando) o para una sensación de preocupación/molestia. Ya sabemos qué caso aplica para Edward ;)
(2): Es un slang / «suns out, guns out». Hace referencia a que, en la temporada de verano, cuando sale el sol, las personas tienen la oportunidad de mostrar sus «armas» (músculos).
Este capítulo es de mis favoritos; en lo personal amo como los chicos hacen cosas super normales de adolescentes :))) Me recordó a cuando salía a jugar volei con mis amigos en la prepa, era muy divertido!
¿Qué les pareció?
¿Merece review?
