1. Bautismo de fuego

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Disclaimer: Los personajes que se desmiembran o cambian de personalidad a lo largo de la historia pertenecen a la obra del célebre Mangaka Hiro Mashima. Este Fanfiction está basado en una serie derivada y secuela de su Manga principal Fairy Tail, llamada Fairy Tail: 100 Years Quest. Contiene varios hechos canónicos dentro de la obra. No obstante, varios personajes, personalidades y escenarios puede que estén fuera de este.

¡Este fanfiction es una continuación directa de la historia: Fairy Tail, una nueva historia comienza!. Si no leiste dicho libro previamente, siento decir que la compresión de este fic será difícil, por lo que te recomiendo leer primero la mencionada historia si no lo hiciste…

¡Un saludo a todos!

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...

Tras recuperar la llave de Acuario, Lucy regresó al país de Joya, un lugar muy relacionado con su pasado. Cayendo en una trampa puesta por su abuelo, Lord Gian Borgias y siendo obligada a comprometerse en matrimonio con un viejo conocido. Tras un primer intento de rescate por parte de Fairy Tail, Wendy también fue capturada y tomada como rehén para garantizar la obediencia de Lucy.

Durante la batalla, Natsu, Erza y Gray fueron humillados y heridos de gravedad. La reina Hisui E. Fiore intentó una salida diplomática, a costa de su credibilidad y prestigio entre sus ministros, sin ningún éxito.

Con la claudicación de Lucy y las presiones políticas de los propios gobiernos de Fiore y Joya, toda esperanza parecía perdida…

Sin embargo, decidido a no abandonarla, Natsu hizo una apuesta desesperada, recurriendo a Ophis, un ser tanto ancestral como misterioso, que conoció durante el viaje para buscar a Acuario... y tuvo éxito. Lucy fue liberada y regresó a Fiore.

Sin embargo, Natsu y Happy tuvieron que pagar un terrible precio...

...

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...

"... ¡Ríndete por favor Natsu!... ¡Antes de que sea tarde!... "

"... ¡TE HARÉ VERLO! ... ¡VOY A MATARLO Y JURO QUE TE HARÉ VERLO!... "

"... No tienes la fuerza ..."

"... ¡NATSUUU!... "

...

¡AHJ-AHJ!... ¿Dónd...

Natsu despertó jadeante, alertando a Happy también.

—¿Natsu?... ¿Qué pasó?—preguntó Happy, todavía adormilado.

El chico sudaba y temblaba. Instintivamente buscó en su bolsillo el reloj dorado que la había prestado Lucy. Lo apretó con fuerza y respiró hondo para tranquilizarse… Una pesadilla, eso y nada más…

—Un mal sueño... es todo.

Natsu respondió con indiferencia, cosa que comenzó a preocupar a Happy. Llevaba repiténdose ya 3 días. En su cabeza se repetían una y otra vez algunos fragmentos de su humillante primera derrota ante Karan, aunque claro, su mente le jugaba bromas, modificando y empeorando algunas partes, asustando más al muchacho…

—¿Seguro que estás bien?—Preguntó el Exceed en forma insistente.

Natsu lo miró seriamente por un momento y rápidamente cambió a una gran sonrisa.

—¡Claro, todo está muy bien!

—... pero sí...

El joven no quería preocupar a su compañero con sus dudas internas, por lo que escogió esconderlas y hacer de cuenta que no existían.

—¡Terminemos esto pronto para que podamos volver a casa!—Natsu lo cortó en forma entusiasta y le mostró el puño.

¡Aye sir!...

Ambos varones chocaron los puños riendo, pero al terminar el gesto, la cara de Natsu se llenó de dudas de nuevo. Happy miró de reojo y continuó con sus sospechas…

«… Sabes que puedes confiar en mí, Natsu… »

El grupo se encontraba en un campo solitario, cerca de un camino fronterizo. Era una noche tranquila llena de estrellas. Natsu y Happy permanecieron en incómodo silencio, ya no pudiendo conciliar el sueño ninguno de los 2.

«... ¿Qué rayos hace?... » Happy pensó mientras buscaba al dragón con la mirada.

Encontró al dragón del infinito sentada lejos de ellos.

Ophis era extraña. Desde el principio los había hecho vagar sin rumbo. A veces por aire, a veces por tierra, sin dar nunca razones para ello. Ellos tampoco se habían atrevido todavía a preguntar.

Los hacía andar hasta el agotamiento, y cuando caía la noche, Ophis se alejaba de ellos y permanecía sentada con los pies cruzados, sin moverse un centímetro. En varias ocasiones, Happy había hecho el intento de quedarse despierto para descubrir qué hacía allí, pero no ocurría nada. Ophis se quedaba inmóvil hasta el amanecer. Su semblante era casi melancólico...

Em, Natsu?

—Dime Happy.

—¿Cuándo vamos a llegar con ese Hechicero al que buscamos? ¿Dónde está exactamente?—Happy preguntó de forma demandante—Quiero decir... llevamos vagando sin rumbo por casi una semana desde que salimos... ya ni siquiera sé donde estamos ahora mismo.

Tras dejar la capital del país de Joya, repostaron cerca de la frontera con el país de Minstrel y al sur de Joya, claro que eso Natsu y Happy no lo sabían porque el grupo no poseía ningún mapa de la región para la navegación. Esto los forzaba a confiar en que Ophis conocía el camino..

Natsu no supo qué responderle. Después de todo, Happy solo era un acompañante y creyó que al conocerla un poco más que él, Ophis le habría compartido sus planes para el viaje en alguna otra ocasión.

—Yo... No se—resopló Natsu apenado—Lo siento. ¡No lo sé tampoco!

El dragon-slayer era corto de mente. Hizo esfuerzos vanos para tratar de recordar algunos detalles de la conversación que mantuvieron cuando Ophis le entregó la llave de Acuario...

"... Tal vez sea culpa tuya... tal vez fuiste tú quien me liberó..."

"... Lo que tú llamarías un fantasma..."

"... Tal vez ese poder es mío..."

Natsu se agarró el cuello en un ademán de fatiga, notando la falta de su bufanda en el cuello. Seguro Lucy sería lo suficientemente lista para unir los puntos y descubrir alguna pista…

«... Lucy... »

Como nunca, pensaba a diario en ella. Siempre la recordaba antes de irse a dormir y después de despertar de su pesadilla recurrente. Se sentía avergonzado y furioso.

Sacó una vez más el reloj que le obsequió la chica y lo miró con detalle. Un precioso reloj de bolsillo dorado. La renovación fue todo un éxito, pues parecía nuevo...

«... ¡Esto es estúpido!... »

Natsu se levantó ante la mirada dudosa de Happy y se dirigió hacia donde estaba sentada Ophis. A estas alturas ya no le asustaba tanto como para no exigirle respuestas…

—¿Qué quieres, Dragneel?

Ophis se adelantó y le habló con dureza ni bien se acercó. El dragón nunca lo llamaba por su nombre, haciendo el trato muy impersonal.

—Deberías dormir. Necesitarás tus fuerzas mañana—Ophis habló con indiferencia—¿Sabías que la mayoría de los amos no permite que sus esclavos duerman más de 4 horas? Tal vez estoy siendo muy amable. Por que son eso. Mis esclavos—dijo Ophis.

Natsu rodó los ojos y aún así se animó a hablar.

—¿A dónde carajo vamos?

—Ya te lo dije, buscamos a un hechicero—replicó Ophis.

—¿Y qué es lo que vamos a hacer exactamente con él? ya sabes, ¿Cuál es tu "plan malvado"?

Ophis se giró ligeramente y levantó una ceja.

¿Mm? ¿Qué entiendes tú por "malvado"?—Ophis respondió—Si te refieres a cuando empezaremos a actuar, MAÑANA.

—¿Mañana?—Natsu abrió los ojos con sorpresa—¡¿Hablas de mañana-MAÑANA?!—Natsu repitió dos veces.

—¿Qué otra clase de mañana conoces?—Ophis replicó.

—Este, yo ah...

Ophis sacó algo de su costado y se lo enseñó a Natsu para callarlo. Una serpiente negra muerta. Natsu levantó una ceja con escepticismo.

—¿Por qué tienes eso?

—Es una pista. Nos estamos acercando—replicó Ophis sin más.

—¿A dónde? ¡¿A dónde rayos vamos?!

—¡Haces demasiadas preguntas para ser tan tonto!—replicó Ophis molesta—La mocosa de la tierra no hacía tantas y es más lista que tú…

—¿De quién diablos habl...—Natsu fué interrumpido.

—Ve a dormir—Ophis ordenó—¿No dijiste que estaban cansados?

—¡Es porque llevamos días sin parar!—justificó Natsu.

—No me importa, vete ya—dijo Ophis indiferente.

—Pero...

—Lo explicaré cuando lleguemos a nuestra primera parada. Estuve investigando. Si te lo explico ahora, no vas a entenderlo...—Ophis lo explicó con simpleza.

Natsu se ofendió por el comentario y regresó donde Happy. Ophis permaneció sentada inmóvil.

«... ¡No soy tan tonto!... »

Una vez acostado junto al gato, divagó un momento más antes de dormir.

«... ¿Qué es lo que estás haciendo ahora Luce?... »

...

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Reino de Fiore…

—¿Lu-chan?

Levy entró en la habitación seguida por Gajeel. Llevaba una canasta con frutas y flores de parte de todo el gremio, en un intento de animarla un poco. La chica sintió un penetrante olor a sudor y moho…

«... uh... parece que alguien no ha salido de aquí en un buen tiempo... »

La rubia se encontraba recostada en la cama, a medio vestir y todavía envuelta con la bufanda de Natsu.

—...—Lucy no respondió.

—Vinimos a ver como estabas—Levy habló en tono amable—no has visitado el gremio desde que regresamos...

Lucy no había salido de la casa en más de una semana.

—Vayanse por favor... quiero estar sola. Es todo—respondió Lucy en forma vacía.

Ambos esposos se intercambiaron una mirada cómplice, y desoyendo a la chica, Levy se acercó por el costado de la cama, buscando mirarla a la cara.

Lucy tenía los ojos muy hinchados y llenos de lagañas, el cabello grasoso y desordenado. No parecía haberse bañado en un tiempo.

«... Aw, Lu-chan... »

Por su estado actual, Levy y Gajeel pudieron intuir que no la había pasado nada bien.

—... todos en el gremio están preocupados...

Al oírlo, Lucy se giró a verlos, avergonzada. Solo había logrado hacerla sentir peor. No solo culpable del destino de Natsu y Happy, sinó ahora también por la tristeza de sus compañeros.

«... Perdónenme amigos... »

Sin querer había oído algunos comentarios desafortunados durante el viaje de retorno:

"... Ella se rindió... ¡Le faltó el respeto al gremio!..."

"... No es su culpa... no tuvo otra opción..."

"... Actuó con cobardía... no puedo creer que después de todo el tiempo que lleva con nosotros no aprendió nada de cómo hacemos las cosas en Fairy Tail..."

Levy se preocupó más cuando vió lo delgada y demacrada que estaba.

—Lu-chan, ¿Estás comiendo bien?

Lucy se mantuvo cabizbaja y no dijo nada.

Gajeel se sentía algo incómodo y retrocedió un poco.

«... ¿Lu-chan qué estás haciendo?... »

—... Estoy...—Lucy volvió a callarse antes de poder hablar. Por su cara pálida, su amiga creyó por un momento que se desmayaría, pero solo estaba muy deprimida...

Levy pensó algo diferente y miró la desordenada habitación. En su escritorio relucían sus llaves celestiales, en el mismo lugar donde Mirajane las dejó para ella cuando regresaron a casa...

—Lu-chan, ¿Has hablado con tus espíritus?—Levy se sorprendió que no los hubiese llamado ni una sola vez tras recuperarlos ¿Qué rayos estaba esperando Lucy para el reencuentro?

Al oír la pregunta, el rostro de Lucy se llenó de miedo y vergüenza y toda ella comenzó a temblar.

sniff-sniff...—Lucy quiso quebrarse a llorar de nuevo.

«... Ay no... ¿Acaso dije algo malo?... » Levy se arrepintió de haber preguntado.

—Lu-chan esper...—Levy quiso correr a consolarla.

—No puedo...—masculló Lucy.

—¿Eh?

Lucy apretó los puños y comenzó a llorar abiertamente.

—¡NO PUEDO HACERLO!... sniff-sniff—chilló.

Gajeel se descolocó un poco con la repentina reacción.

—¡¿?!—Levy se llenó de dudas pero seguía dispuesta a escuchar.

—¡Los decepcioné... Los decepcioné a todos...!—Lucy siguió llorando.

Levy no entendía prácticamente nada de lo que hablaba. Tras regresar de su propio viaje de Luna de miel, apenas se había podido ver con ella. Le sorprendió también el hecho de que sus fieles espíritus no utilizaran su propio poder para cruzar la puerta y venir a visitarla...

—¡ELLOS ME LO ADVIRTIERON Y NO HICE CASO!...—Lucy gritó aún con más fuerza.

De inmediato Levy le hizo una seña a Gajeel para que dejara la habitación y esperara afuera.

—¡Lucy, cálmate!—le dijo Levy—Respira hondo y...

—¡Tú no entiendes!—Lucy gritó—¡ME LO DIJERON... ¡dijeron que tendría que ser más precavida porque ellos ya no pueden cruzar solos para salvarme!...

Levy podía sentir el dolor de su amiga en cada una de sus palabras y se conmovió a la vez que se intrigó más... Los únicos que conocían el secreto de la relación entre la luna morada y el cierre de la puerta aparte de ella eran los propios espíritus más Natsu y Happy.

—... ¡Me engañaron como a un niño y lo arruiné!... ¡No debí haber ido sola!...—Lucy seguía gritando lo que para Levy eran cosas inconexas—¡Y ahora por mi culpa, Natsu y Happy están!... están… ¡QUÉ VERGÜENZA TENGO!

Levy la abrazó con fuerza y se sentó junto ella en la cama.

Ya-ya... respira hondo...—Levy la consoló a la vez que le sostuvo la cabeza.

—¡Buaaa... jaaah...! ¡AAAAHJAA!.. sniff-sniff.

Lucy lloró amargamente un rato largo en el hombro de Levy.

Fuera de la casa, Gajeel se reunió con Gray y Juvia, que también aguardaban buenas noticias.

...

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...

Era una típica noche tranquila en Magnolia y el gremio ya había sido cerrado por Mirajane. Dentro del edificio y con solamente la oficina de Makarov iluminada, una reunión secreta se llevaba a cabo...

—Muy bien mocosos... ¡Los escucho!—Makarov anunció con severidad—No hice preguntas hasta llegar a Magnolia como acordamos, pero ahora quiero oírlo todo...

Erza y Gray comparecían ante él.

Tras el caos resultado de la situación de Lucy y Wendy, otra mala noticia hubiera sido devastadora para el gremio, por lo cual Erza y Gray, al ser los compañeros más cercanos a Natsu y Happy, inventaron la mentira de que ambos amigos habían decidido salir nuevamente de viaje de entrenamiento en forma repentina y sin dar explicaciones. No sería la primera vez, pues ya estaba el antecedente del último viaje sorpresivo de ambos, por lo que buena parte del gremio aceptó la explicación cómo válida sin hacer demasiadas preguntas.

Ophis había exigido absoluta discreción con el asunto si querían mantener a sus amigos a salvo...

—Una cosa primero...—dijo Gray en tono desconfiado—Entiendo que Mira-san tenga que estar aquí por ser tu asistente y eso pero... ¡¿Por qué él tiene que oírlo también?!—Gray señaló a Laxus con el dedo.

El dragon-slayer de rayo también se encontraba en la habitación, recargado en la pared y cruzado de brazos en un gesto despreocupado...

—¿Algún problema con eso?—Laxus replicó en tono amenazante y parándose erguido.

Gray también se puso en guardia.

No era nada personal, pero para Gray, esto era algo muy íntimo del "equipo Natsu", y si el propio Laxus antes no había querido compartir asuntos de esa gravedad antes, como su enfermedad por partículas de barrera, Gray sentía que tampoco tenía por qué dar explicaciones...

Erza intuía una escaramuza entre ambos y se preparaba para intervenir, pero Makarov se adelantó y le lanzó una mirada de reprobación a Laxus.

«... ¡Compórtate y presta atención!... ¡Tienes mucho que aprender, nieto!... »

Laxus se relajó y recobró la compostura. Gray no notó el gesto y la intención oculta de Makarov hacia su nieto, pero Erza si... se hizo una idea incómoda acerca del futuro.

Mirajane mantuvo su sonrisa habitual y se hizo el orden.

—Basta los 2—El maestro se interpuso—Lo último que necesitamos ahora es enfrentarnos entre miembros. ¡Hablen de una vez!

Erza y Gray intercambiaron miradas de complicidad y se pusieron de acuerdo para empezar a relatar.

—... Tengo entendido que todo empezó durante el viaje de Natsu y Lucy a Giltena...

Natsu había sido bastante magro a la hora de contar los detalles a Erza y Gray, y Lucy estaba en estado tal que no podía articular frases coherentes, por lo que Ambos jóvenes únicamente pudieron fiarse de los pocos datos proporcionados por Natsu para comunicarle la situación al maestro...

—¡¿Dragón infinito?!—el maestro exclamó sorprendido—¡Todo eso suena muy imposible de creer!—Makarov habló escéptico—... y ahora dos de mis niños están sometidos a servidumbre por todo un año, sin garantía alguna de que regresen... ¡Ustedes no debieron mantener esto en secreto!—les reclamó a Erza y Gray.

Erza y Gray se vieron en apuros y obligados a pensar una mejor explicación, pero Makarov volvió a hablar...

—... aunque por otro lado, está en el mismo nivel de inverosímil que las cosas que hemos enfrentado últimamente...—el anciano maestro se rascaba la barba mientras reflexionaba, aliviando a Erza y Gray.

—Lo que a mi me intriga es la "Benefactora" de Natsu—comentó Mirajane—¿Un dragón con forma humana y que además luce como una niña?

Todos pusieron gesto pensativo al oír.

—... Ya sabemos que eso es posible, recuerda a Acnologia, ¿Acaso no dijiste que tú lo habías visto, Erza?—Laxus habló de pronto con voz serena. Todos en la habitación se giraron a verlo con sorpresa, pues no es el tipo de respuesta que esperarían de él. Laxus se incomodó un poco y se encogió de hombros de forma casi imperceptible.

—... Es verdad. Y con esto ahora sabemos también que Acnologia no es el único que puede hacerlo—Ahora Erza habló.

Los 4 permanecieron en silencio un momento más hasta que llegó el momento de decidir un curso de acción...

—¿Cómo procederemos ahora, Maestro?—preguntó Mirajane—Todavía estamos a tiempo de reunir un grupo de búsqueda que rescate a esos 2...

Erza y Gray estaban realmente confundidos con respecto al asunto y la culpa la tenía el imprudente de Natsu. Por un lado querían intervenir, pero también se sentían en la obligación de respetar los deseos de Natsu y Happy, por extraños que fueran...

...

"... No quiero que Ophis los lastime, así que no intervengan... ¡Yo me metí en este problema y buscaré la manera de salir!... Cuiden de Lucy... ¡Por favor hagan que lo entienda! ¡Que el maestro lo entienda!... "

...

¿Natsu pidiéndoles que se acobardaran y no hicieran nada? Ninguno comprendió en qué momento el muchacho había cambiado así...

—Si eso es lo que Natsu dijo, entonces no queda más que discutir...—vaciló Laxus.

Todos lo observaron con reprobación, pero pronto se sorprendieron de que Laxus no tuviera su expresión vanidosa y arrogante...

—¿?

—... un mago no debe interferir con la vida de otro mago—Laxus habló en tono solemne—además, si dio su palabra de regresar en 1 año, entonces sólo depende de él cumplirla.

Sus compañeros lo miraron extrañados al oír salir de su boca palabras que el propio Makarov había dicho alguna vez. Mirajane levantó una ceja a la vez que escuchaba con atención...

Erza suspiró.

—Bueno... si se trata de Natsu, supongo que no tenemos porqué temer ¡Debemos confiar en que volverá!

Gray sonrió desafiante antes de hablar.

¡JA!, conociendo a ese cabeza dura, a lo mejor acaba divirtiéndose—dijo con prudente entusiasmo.

Toda la habitación se contagió de la inusitada esperanza. Makarov asintió también, de todas maneras nada podía hacer ya.

«... ¡Vuelve pronto muchacho! ...»

Ya solo quedaba un asunto más que discutir.

—... Ahora sólo queda ayudar a Lucy—dijo Erza con preocupación.

—Esta mañana Levy lo volvió a intentar pero no tuvo suerte. ¡Dice que su estado no es nada bueno!—acotó Mirajane.

—Mañana temprano volveremos a intentarlo. ¡Todo el equipo!—sentenció Gray—le avisaré a Wendy para que...

—Nadie hará nada—Makarov lo cortó de imprevisto, sorprendiendo a todos los presentes, Laxus incluso.

Gray se alteró de inmediato.

—¡¿A qué se refiere con NADA?!—protestó—¡Lucy debe sentirse terrible y nos necesita!

Erza se quedó pensativa.

—... ¡No dejó de culparse desde que salimos y...

—Espera—Erza habló con tranquilidad—escucha lo que el Maestro tiene que decir...

Makarov le agradeció el gesto con una expresión sutil y empezó a hablar.

—Hay algo importante que Lucy debe aprender ahora—Makarov habló con seriedad—uno pensaría que ya lo habría entendido cuando terminó nuestra batalla contra el gremio de Phantom la primera vez que fuimos a rescatarla, pero parece que aún no. Y es un miembro del gremio. Debe ser ahora.

Gray pensó un segundo y recién lo comprendió.

—... No creo que sea eso. Tal vez sólo lo olvidó por lo difícil de la situación...

—Sea cual sea el motivo, no la convencemos por mucho que digamos. Debe entenderlo por sí misma y recuperar su confianza—dijo Mirajane con voz dulce.

—Claro que estaremos atentos si la situación se desborda—Erza le sonrió a Gray con calidez y este asintió.

Tomadas todas las decisiones, Makarov dio por terminada la reunión. Cómo precaución adicional, se acordó mantener estricta discreción sobre los verdaderos motivos del viaje de Natsu, cómo este les había pedido antes de partir.

Despachados Erza, Mirajane y Gray, al último sólo quedaron Laxus y Makarov.

—Eso no estuvo nada mal. Aunque todavía tienes que trabajar en esa actitud tuya—El maestro le habló a su nieto en tono de broma.

—No fue gran cosa. ¡Sólo repetí tus palabras!—minimizó Laxus—Y en cuanto a mi actitud, es mi actitud y punto. No pienso cambiarla…

—¡Qué aguafiestas!—bromeó Makarov una vez más.

Laxus sonrió ligeramente para contentar a su abuelo y aprovechó para cuestionar una última cosa.

—Hay algo que no entiendo—dijo Laxus—¿Por qué no permitiste que esos mocosos fueran a consolar a la princesa rubia? Con lo blando que eres, aposté a que los madarías de inmediato ¿Por qué no lo hiciste?

Makarov inspiró profundamente antes de explicar.

—¿Tú también lo olvidaste o no estabas prestando atención?—le dijo con tranquilidad a su nieto.

—¿Eh?—Laxus tenía una expresión de duda.

—Fué lo primero que me enseñó mi maestro—dijo Makarov— "... El gremio es una familia... Aún si te encontraras atrapado sin salida, nunca debes rendir tu voluntad... Porque así tendrías la certeza de que nosotros siempre iríamos por tí... al rendirte le faltas el respeto a los que tratan de ayudarte... "

Laxus arqueó una ceja como si hubiera escuchado algo que ya sabía.

—Eso es como que obvio ¿no?—minimizó Laxus.

—No para todos—replicó Makarov—¿Tú que casi siempre has sido poderoso puedes saber cómo reaccionarías si estuvieras acorralado como una rata?

Laxus se encogió de hombros.

"... ¡Aquellos que se rinden, no merecen ser salvados!... "

Makarov obvió a propósito la siniestra segunda parte de la lección que su propio maestro le había transmitido.

«... En eso tienes razón, soy más blando que el maestro Purehito... » Makarov pensó secretamente.

...

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...

¡Ahj-ahj... Espera. ¡Descanso!

Eran las 5 de la tarde. Jadeantes y agotados, Natsu y Happy se quejaron al unísono.

—¿Otra vez?—cuestionó Ophis de forma demandante.

«... No son tan resistentes como la mocosa de la tierra... ¡Qué remedio!... »

—¡Llevamos días sin parar!—protestó Happy.

Ophis rodó los ojos y accedió a la petición de mala gana.

—Bien. 10 minutos.

Ambos chicos suspiraron aliviados y se sentaron en la hierba frondosa del lugar.

Una lúgubre región boscosa, con plantas de color ocre y una extraña bruma en el aire.

—¿Dónde estamos ahora?—preguntó Natsu al aire.

—No lo sé. Creo que nunca nos habíamos aventurado por aquí—comentó Happy de forma distraída—Perdí la ruta cuando nos alejamos del camino real cerca del sur de Joya.

—Minstrel—Ophis dijo de imprevisto—... Creo que esta nación ahora se llama así.

El tono distraído de Ophis enojó a Happy.

—¿Crees?

—No estoy segura. No he visitado Ishgar en un par de siglos…

Natsu y Happy levantaron ambas cejas de la impresión.

—¡¿Ya estamos en otro país?!

—Es correcto.

Lo que más preocupó a Happy fue la forma despreocupada y poco expresiva con la que Ophis se refería a lo problemático de la ruta.

«... ¿A dónde diablos nos está llevando?... »

—¿Cuándo fue la última vez que estuviste por aquí?—Natsu cuestionó con interés.

—... durante el genocidio de Acnologia—Replicó Ophis como si se tratara de algo sin importancia.

Ambos jóvenes dejaron sus cuestionamientos y se acercaron a ella con gran curiosidad. Natsu con algo de incomodidad añadida.

—... Entonces, quieres decir que... ¡¿Lo viste?!

—Ya te dije que sí—Dijo Ophis con desgano—te lo dije cuando nos conocimos en Giltena hace meses ¿No te acuerdas?

Natsu se rascó la cabeza con duda y Happy lo miró con sorpresa...

—Es que su memoria no es muy buena—dijo el gato—Y además... ¡Hablas de ello como si hubiera sido una visita turística!—exclamó Happy—¿No te conmueve lo que le pasó a tu especie?

Ophis giró la cabeza sin comprender la pregunta.

—¿Por qué debería conmoverme? No entiendo—Ophis lo dijo sin un atisbo de malicia o interés en el asunto. Completamente neutral.

Natsu y Happy se rascaron la cabeza confundidos.

—Entonces...

—Tiempo—Ophis cortó—Continuemos.

—pero...

—Ya son 10 minutos—Ophis volvió a interrumpir.

El dragón se levantó y les ordenó continuar. El grupo partió de nuevo, pero Natsu siguió insistiendo en saber.

—¡Espera!—Natsu protestó.

—¿Y ahora qué quieres?

—¡Tengo muchas preguntas!—Natsu habló—¡Sobre Acnologia y la...

—¿Qué hay que saber?—dijo Ophis—Sangre, muerte y mucho fuego. No es algo que a un mortal le incumba—Despreció Ophis.

—Pero...

—No hables—dijo Ophis con hastío—camina y cierra la boca.

El dragón fué tajante y la marcha continuó. Curiosidad e incertidumbre aumentaban en Natsu y Happy a medida que se adentraban más y más en la región boscosa.

El ocaso cayó y la noche se impuso. Ophis caminaba a paso firme con ambos detrás.

Natsu se moría de curiosidad por preguntarle acerca de la masacre de Acnologia, ocurrida hace 400 años. Las preocupaciones de Happy estaban más relacionadas a que comerían o a dónde se dirigían.

Al Exceed le perturbaba la facilidad con la que Natsu seguía a Ophis y el no cuestionar su destino actual. ¿Recibir tanto golpe de Karan lo habría dejado más tonto que antes?

«... ¿En qué piensas Natsu?... »

—Oye Natsu—Happy se acercó a su oído para susurrarle.

—¿Qué pasa Happy?

—¿Por qué ya no vamos volando? Así iríamos más rápido—le susurró de nuevo.

—No lo sé...

...

Shhh.

Ophis detuvo la marcha y les hizo una seña para que guardaran silencio.

—¿Ophis?

🔥fssssss🔥

El dragón apretó el puño y lo encendió con una llama azul.

sniff-sniff... ¡Eh!—Natsu olfateó el aire y se puso en guardia también, preocupando a Happy.

—¡Natsu que pasa!—Happy exclamó.

—Algo se acerca...

El gato se ubicó flotando cerca de ellos, atento a cualquier movimiento. Happy temblaba y sudaba mientras Natsu y Ophis se mantenían estoicos.

El sonido de hojas y ramas rompiéndose fue demasiado corto para alertarlos...

¡ROAAARR!

—¡Natsu!—Happy chilló.

La criatura se lanzó de forma sorpresiva sobre Natsu...

—🔥¡Karyū no Tekken!🔥

Natsu cargó su puño con fuego a media potencia y lo descargó contra el monstruo.

¡Krak!

Se oyó un crujido de huesos y la criatura fue derribada contra el suelo, aturdida por el golpe.

Un gigantesco oso, de proporciones deformes. Dientes desproporcionados, miembros inferiores gruesos y fuertes. Parte de su carne estaba en estado descomposición pero se seguía moviendo. Era demasiado rápido como para ser un oso. Sus ojos brillaban de color purpura.

—¡¿Qué es eso?!—Chilló Happy.

Ophis permaneció quieta y atenta.

Grrrr.

La criatura se levantó y les gruñó de forma amenazante, enseñando los dientes y preparándose para saltar de nuevo. Natsu volvió a empuñar fuego en su puño.

¡ROAAARR!—Se oyó un segundo rugido detrás de ellos.

«... ¡Oh no!... »

Happy se giró por reflejo, pero lo siguiente que vió fué las cabezas de 3 criaturas ser cercenadas por una hoja de luz púrpura.

🐍¡SLASH!🐍

Ophis reaccionó a tiempo y los mató al instante. Happy resopló aliviado. Natsu preparó su golpe de nuevo, esta vez a plena potencia. El primer lobo saltó al mismo tiempo

—🔥¡Karyū no Tekken!🔥

—¡ROAAARR!

¡Crash!

Auuuu—El monstruo emitió un chillido impropio de la especie cuando el golpe le rompió los huesos una vez más y lo dejó fuera de combate.

Natsu y Happy se acercaron al cuerpo para verlo con detalle.

—Oye, no soy un experto pero... así no son los osos—comentó Happy.

Natsu olfateó el cuerpo y se llevó una sorpresa. Se giró a mirar a Ophis.

—¡Estas cosas huelen parecido a ti!—dijo Natsu alterado—No. Tu no hueles a casi nada, en realidad, se sienten como tú...

Ophis endureció la mirada.

—Significa que nos estamos acercando…

—¿En serio? ¿A dónde?—volvieron a preguntar. Esta vez Ophis no se molestó. El dragón creyó pertinente preparar a los 2 para la incursión...

—Caminen conmigo—Ordenó, dando a entender que iba a explicar algo. Ambos obedecieron…—En algún lugar de este bosque, vive un hechicero que tiene algo mío. ¡Y lo vamos a recuperar!—afirmó Ophis—a partir de aquí, actuaremos solo a mi orden.

Ambos asintieron y aceleraron el paso.

Mientras se iban adentrando más y más, la vegetación empezó a cambiar. El denso bosque se fue espaciando, con los árboles haciéndose más y más escasos.

El bosque pronto se reveló como un valle, rodeado por altas montañas.

En 2 ocasiones más fueron atacados por las siniestras criaturas y venciéndolas con relativa facilidad, dando a entender la cercanía de la guarida de éstas. Fue entonces cuando se toparon con unas ruinas...

Wow... ¿Qué es eso?

Una demacrada pero gigantesca catedral de una religión que no pertenecía a Zentopia, rodeada por peñascos. Como si la tierra hubiera intentado reclamarla tirando hacia abajo.

—Atención—dijo Ophis—Vamos a entrar y para eso necesito que ustedes...

¡Ataque frontal!—Natsu chilló como un niño y salió corriendo hacia el edificio.

—¡¿Qué haces Dragneel?!

Ophis se quedó perpleja antes de enfurecerse rápidamente. Miró a Happy pidiendo una explicación.

El gato le dió una mirada que decía: "... Así es él, ¿que esperabas?..."

«... ¡Muy bien!... ¡Termina esto rápido y volverás a casa!... » Natsu pensaba.

Lo único que Natsu tenía en la cabeza era terminar rápido el trabajo y volver de vuelta a Magnolia. No le importó el plan de Ophis para la incursión. Tampoco se cuestionó siquiera por qué Ophis, siendo tan poderosa, insistía en proceder con cautela.

De forma imprudente se acercó a la catedral, con Ophis y Happy corriendo detrás de él.

Toda la fachada frontal no existía, convirtiéndose en una especie de entrada a una cueva.

—¡Natsu, espéranos!—Happy chilló.

El interior todavía conservaba buena parte de la piedra labrada y bancas originales, algo resquebrajadas por el paso del tiempo. Una nave bastante amplia con la cúpula intacta coronando el techo...

¡Sniff-Sniff!—Natsu olfateó el aire para buscar enemigos.

«... ¡Ésta vez no me sorprenderá… aarr... »

¡Aaaarrgh!—Natsu se quejó mientras se agarraba el cuello.

Natsu sintió un terrible dolor, cómo si algo invisible lo estrangulara. La marca de Ophis en el cuello también le ardía.

Con la vista ya borrosa, notó la figura de Ophis acercarse por detrás...

—¡Suéltalo ya!—chilló Happy.

—¿Qué fue eso?—Ophis preguntó de forma oscura—Creí haberte ordenado que esperaras mi órden para atacar…

Natsu seguía retorciéndose en el suelo, sufriendo el castigo de la magia de Ophis. A diferencia de Lucy, Ophis no era nada tolerante ante esta clase de proceder. Él junto a Happy siempre se lanzaban al frente sin plan y todo lo que podía hacer Lucy era protestar y seguirlos.

Natsu olvidó por un instante que Ophis no era Lucy.

grrr... eah—Natsu seguía sufriendo y Ophis ahora preparó su puño para agredirlo.

—Creo que alguien necesita aprender sobre RESPETO...—dijo Ophis a la vez que se le acercaba a Natsu

Happy se aferró a su puño para detenerla. Era una imagen surrealista: Una niña pequeña intentando golpear a un hombre del doble de su estatura y un gato volador agarrándole el puño...

—¡Noo!—Happy chilló.

Ophis se detuvo en seco.

«... ¿Eh?... ¿Funcionó?... » Happy se preguntó.

sniff-sniff—Ophis olfateó el aire y se tensó.

«... Se acercan... »

¡COFF-COFF!—Natsu tosió con fuerza cuando Ophis detuvo el conjuro y lo liberó.

Happy corrió a socorrerlo. El dragón se dió vuelta y volvió a encender su puño con llamas azules...

—Levántate y ponte en guardia...—Ophis ordenó.

¡CRUNCH-CRUNCH!

El suelo comenzó a crujir.

¡YRRRG! ¡UOORGH! ¡ROAAR!

—¡¿Qué pasa?!—Happy exclamó.

De lo profundo del edificio llegaron rugidos y aullidos furibundos. Natsu se puso de pié y también se preparó para pelear.

—Me encargaré de ti después...—Ophis amenazó a Natsu.

—¡Aquí vienen!—Happy exclamó.

¡ROAARRR!

Una manada de criaturas monstruosas se abalanzó para atacarlos. Osos, lobos y muchas otras criaturas salvajes, corrompidas por los extraños poderes que antes habían visto.

—🔥¡Karyū no Tekken!🔥

Natsu comenzó a pelear con ellas, logrando mandar a volar con facilidad a las más pequeñas, y haciendo retroceder a las grandes.

A su vez, Ophis también tenía su propia versión del ataque de Natsu. Usando sus puños, también mandaba a volar a todos con una estela de fuego azul y partía los huesos de los monstruos. Cosa rara, en esta ocasión no utilizó sus espadas de luz púrpuras. Como si estuviera probando algo.

¡KRAK! ¡PUNCH!

—¡Esto no tiene fin!—exclamó Happy.

—¡Tomen esto malditos!—arengó Natsu antes de descargar otro brutal golpe sobre un monstruo grandulón y preparándose para dar un gran combo...

—🔥¡Karyū no Yokugeki!🔥 (Alas del Dragón de Fuego)

—¡Espera! ¡Con nosotros adentro NO!—Happy chilló, a su vez que ascendió casi hasta la cúpula de la catedral para ponerse a salvo de la explosión de fuego. Ophis no se inmutó y permaneció en tierra.

🔥¡FSSSSSSSS!🔥 ¡CRASSSH!

La onda expansiva bañó a buena parte de la horda con fuego y tierra. Una densa nube de polvo y ceniza permaneció unos momentos tras el impacto.

Happy descendió a tierra y se encontró con Ophis, quien había permanecido en su lugar inmutable, solo un poco cubierta de tierra.

—Eso fue inesperado—comentó el dragón, a su vez que observaba a Natsu, quien estaba recuperando el aliento y sudando. El chico puso una sonrisa confianzuda.

—Así es él...—dijo Happy algo apenado.

—Es un inútil—comentó Ophis con desprecio.

—¿Cómo dices?

—Mira...—Ophis señaló con el dedo hacia donde estaba la horda.

—¡Pero qué...

Natsu quedó estupefacto cuando la nube de polvo se disipó por completo y reveló a la horda de monstruos. ¡Se estaban levantando!

Un poco tiznados de ceniza y con algunas quemaduras, pero intactos.

[grrr... uoroogg] [arrgh]

Las criaturas emitían ruidos viscerales de carne retorciéndose y gruñidos lastimeros.

Happy se asustó al ver también que los que habían derrotado previamente también se movían y comenzaban a ponerse de pié...

—¿Q-qué son estas cosas?—tartamudeó el gato.

Ophis permaneció serena. Natsu retrocedió de un salto hacia ellos.

—¡Estos malditos no se mueren!—se quejó Natsu.

—Te dije que esperaras mi órden—Dijo Ophis con tranquilidad—Míralos bien: No todos son iguales…

Happy los analizó con detenimiento y descubrió a qué se refería Ophis: Algunos de los monstruos tenían formas casi humanoides, cuerpos humanos con mutaciones horribles… casi parecidas a…

—¡Esos malditos se parecen a la cosa en la que se convirtió Karan!—Happy chillo. Natsu se quedó paralizado.

—Lo sé…—dijo Ophis con una gran sonrisa malvada. El dragón se mostraba complacida.

«... ¿Por qué no está preocupada? ¡Nos tienen rodeados!... »

[grrr... uoroogg] [arrgh]

A continuación, una nueva horda de monstruos salió del fondo de la catedral...

—¡Son muchos!

—Este edificio no es tan amplio. Debe haber cuevas subterráneas—Reflexionó Ophis.

El dragón ahora sí desplegó sus hojas de luz con los dedos índice y medio...

🐍¡SLASH!🐍

Blandiendo su brazo como una espada, Ophis atacó a la horda. La onda de choque cortante cercenó a algunos de ellos e incapacitó a otros.

—Saldremos a campo abierto y ahí los enfrentaremos—dijo Ophis—Nosotros podemos volar. Los atacaremos desde el cielo...

—¡¿Hablas de huir?!—protestó Natsu.

—¡Obedece!—se enojó Ophis.

Ambos asintieron y comenzaron a correr de vuelta a la salida...

¡STUMP!

Los tres se toparon con un obstáculo invisible, que los derribó al suelo.

—¡¿Qué fue eso?!

Se levantaron con rapidez. La horda se les acercaba.

¡hmmv!✨

En el lugar donde Ophis tocó, una pared traslúcida y con brillo rojo apareció...

Ophis levantó las cejas con asombro y acercó su palma al lugar...

—Una barrera... ¡Una trampa!—Reflexionó Ophis molesta.

«... Dragneel pagarás por esto... »

La barrera mágica se hizo visible por completo, revelándose cómo un gigantesco domo que cubría todo el edificio y sus alrededores. Círculos mágicos con runas desconocidas para Natsu y Happy.

Jo—Ophis hizo un ruido gutural de complacencia cuando observó los círculos y descubrió la naturaleza del amo de la catedral...

¡ROAAR!—La horda los alcanzó.

—¡Al ataque!—gritó Natsu con su puño en llamas—¡AAHHH!

Auuuu.

Momentos antes de impactar ambas fuerzas, repentinamente los monstruos aullaron de susto y retrocedieron varios metros.

—¡¿Qué pasó?!—cuestionó Happy.

... No, no mis pequeños, así no se trata a las visitas...

Una voz sombría y bufonesca habló.

Natsu y Happy se desorientaron, pero Ophis los detuvo.

—Va a salir al fin...—dijo el dragón.

¡CRUNCH-CRUNCH!

El suelo volvió a crujir. Flamas y energías mágicas iluminaron el lugar, disipando las sombras y permitiendo ver el fondo de la catedral. Había un agujero rojo resplandeciente... de él brotó una figura humanoide...

Un poder mágico escalofriante presionó el aire, haciendo temblar a Happy.

—¿Quién es ese?—dijo Natsu sin asustarse.

—El hechicero que buscamos. Un demonio verdadero...—replicó Ophis.

Un hombre joven, de mirada suave pero siniestra. De mediana estatura y cabello negro, complexión delgada. Tenía los ojos cerrados y lo que parecía ser... ¿2 pares de cejas?

El supuesto hechicero era en realidad un demonio.

—... Sean bienvenidos...—el joven abrió los ojos, revelando que en realidad su segundo par de cejas era un segundo par de ojos, escondidos debajo de su flequillo...—¿Vinieron a unirse a mis fuerzas?—preguntó de manera siniestra.

Uy, ¡pero que feo es éste sujeto!—comentó Natsu en voz alta, evadiendo la pregunta. Happy se escondió detrás de su hombro.

El hombre mantuvo la sonrisa, pero las venas de su frente se dilataron, mostrando su enojo por el comentario.

—¿Feo yo?—dijo el demonio indignado—¡Miren quién habla! Un demonio vagabundo de clase baja con cabello rosa—se burló de Natsu, haciendo gala de sus finas ropas y zapatos brillantes.

Natsu se asustó y luego se enfureció...

—¡YO NO SOY UN DEMONIO!...

—Cierra la boca—ordenó Ophis a Natsu.

El hombre hizo una cara graciosa y comentó.

—¿Tú estás al mando de estos dos? ¡Qué simpático!—se burló el demonio—una mocosa dragón enana, un demonio vagabundo rosa y un... ¿gato? ¡Serán un buen complemento para mis fuerzas... o al menos alimento para las ya existentes.

—¡¿Qué quieres decir?!—chilló Happy asustado.

—Quiere decir que muchos de estos monstruos alguna vez fueron gente—dijo Ophis.

—¡Una mocosa muy lista!—dijo el hombre.

Happy puso cara de terror.

«... ¿Por qué este sujeto no se atemoriza de Ophis como los demás?... » pensó Natsu «... Un momento... ¡No lo siento! ¡No siento el poder de Ophis!... »

Natsu recién descubrió que el dragón escondía de alguna manera su presencia, aparentando ser más débil de lo que era.

«... ¿Por qué lo hace?... »

—No vinimos a unirnos a tu ejército de carne muerta—dijo Ophis alzando la voz—Vinimos a recuperar lo que es mío. ¡Y tú responderás a mis preguntas ahora!

¡JA-JA-JA! ¡Qué sentido del humor tienes! ¿Crees que yó, un demonio descendiente de la élite va a obedecer a unos insectos como ustedes?

—Si—dijo Ophis de forma anticlimática, rompiendo el ambiente—básicamente...

El demonio torció la cara en un último intento de mantener la sonrisa y sudó una gota gruesa con incomodidad.

—Eres extraña, mocosa...

—¡Basta de charla!—exclamó Natsu.

🔥 Fssssss 🔥

Natsu se irritó y encendió su aura llameante de forma amenazante. Los monstruos también lucían ansiosos por reanudar el combate.

Tan impaciente estaba que volvió a olvidar que Ophis no era Lucy y pegó un segundo salto hacia el nuevo rival...

—¡¿Oye, qué haces?!—protestó Ophis

—🔥¡Karyū no Tekken!🔥

¡BOOM!

El puño de Natsu fue detenido en seco por la mano del demonio, quien ni se inmutó...

¡Arrrr!—Natsu seguía haciendo esfuerzo aun después de conectar el golpe, con la esperanza de que la estela de fuego al menos lograra derribarlo.

«... ¡Vamos!... »

El demonio lo miró despreocupado mientras la llama del puño de Natsu se extinguía.

«... ¡NO puede ser!... »

¡Grunch!

Las garras de la mano del demonio se extendieron y se enterraron en su puño aprisionado, causándole dolor

¡Argh!—Natsu emitió un quejido disimulado, con el rostro apretado y furibundo, intentando mantenerse firme…

Cuando la potencia del golpe de Natsu se agotó, este se quedó colgado de la mano que el demonio le aprisionó.

—Dime ¿Eso fué todo?—le cuestiono el demonio.

La criatura extendió las garras de su mano libre y las apuntó al vientre del chico, con toda intención de matarlo.

Natsu tenía una cara de susto y un poco de...

¡PHWWWM!✨

Un pitido cortó el aire y lo siguiente que Natsu vió fue un delgado rayo de fuego azul frente a su rostro... El demonio lo soltó y lo arrojó hacia sus amigos.

—¡¿QUIÉN?!—gritó el demonio furioso, a la vez que se agarraba la mejilla derecha. Un corte y un poco de sangre...

Natsu seguía desorientado por la caída y ahora vió a Ophis apuntar con su dedo hacia el demonio. La punta todavía humeaba...

—Ya estoy cansada de tu imprudencia—Ophis le habló a Natsu en tono de pocos amigos.

Natsu se cohibió un poco y Happy se le acercó con rapidez para ver su estado.

—¿Estás bien?

El demonio limpió la sangre de su rostro y le lanzó una mirada de odio a Ophis...

—¡¿Quién te crees que eres?!

Los monstruos también rugieron de forma amenazante. Ophis tomó el desafío y se colocó en posición de combate. El demonio le devolvió una sonrisa sádica.

—¿¡Tu me desafías!?—dijo el demonio de forma arrogante.

—Todavía puedes responder mis preguntas y te prometo una muerte rápida—replicó Ophis.

Natsu también se colocó en posición de pelea de nuevo, eso sí, esta vez aguardó la orden de Ophis...

El demonio cambió su postura y separó las piernas ligeramente. Extendió los brazos en forma orante...

«... ¿Qué es este poder tan horrible?... me recuerda a... » pensó Happy

¡AAAHH!—el demonio gritó a la vez que un aura verde lo cubrió. La presión del aire era sorprendente...

🔥 ¡WOOSH! 🔥

—¡Qué poderoso!—exclamó Natsu, a la vez que intentaba cubrir sus ojos de la ventisca generada por la liberación. Ophis permaneció impasible...

El cuerpo del demonio comenzó a cambiar. Le crecieron un par de alas de murciélago, una cola fina y elegante y unos alargados y delgados cuernos rectos...

—¡Se parece al satán soul de Mira!—exclamó Happy.

Mientras Natsu salía de su asombro, el demonio se elevó en el aire y comenzó a hablar de nuevo...

—¡Prepárense para sentir la ira del gran Raxhel!

Happy observó a Ophis con preocupación...

«... ¿Qué haremos ahora?... »

El dragón asumió una postura similar a la de Raxhel...

🔥 ¡WOOSH! 🔥

Ophis también se cubrió de su propia aura púrpura, pero sin gritar. Las ondas que emitió durante la liberación también hicieron retroceder a Natsu y Happy.

«... Oh, ¡Ahí está después de todo!... » pensó Happy con cierto alivio al sentir de nuevo el poder de Ophis, quien había dejado de ocultarlo.

Raxhel también mostró su asombro, aunque no se asustó por ello.

—Vaya... al parecer nuestra fuerza es similar—comentó el demonio—¡Esto será divertido!

Natsu también se cubrió de su propio fuego, dispuesto a no quedar atrás.

—Ni se te ocurra, Dragneel—dijo Ophis.

—¡¿Por qué no?!—protestó Natsu.

—Estás fuera de tu liga Dragneel ¿Qué más?

Natsu intentó desobedecer pero esta vez Happy lo detuvo.

Ophis extendió también sus amplias alas oscuras de dragón y se elevó al nivel de Raxhel...

—Dragneel, Gato—Ophis habló—Yo lo interrogaré. Ustedes se encargan de la horda. Atentos a mi llamado...

Raxhel sonrió desafiante y le hizo una señal a sus fuerzas para reanudar el ataque.

—¡Prepárate Natsu, aquí vienen de nuevo!—arengó Happy mientras se situaba detrás de él, listo para levantarlo en caso de ser necesario.

—¡Estoy listo!

¡ROAAARR!

La horda de monstruos rugió y se abalanzó sobre ambos.

—¡Prepárense para arder!... 🔥¡Karyū no Tekken!🔥

Mientras el combate en tierra se reanudó, Ophis y Raxhel también estaban por comenzar el suyo...

—Me has intrigado, mocosa ¿Quién eres?

—Yo soy quien hace las preguntas—contestó Ophis—Primero... dónd...

💥 ¡BOOMM! 💥

El demonio la interrumpió con un ataque explosivo... Ophis contrarrestó con su fuego y disipó la cortina de humo con la mano...

—¿Decías?—se burló el demonio.

Ophis hizo un puchero y el combate aéreo se inició...

...

—•○•—◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘

...

💥 ¡BOOM! 💥

¡UNGH!... ¡Tch! ¡Esto no tiene fin!—se quejó Natsu después de mandar a volar a una criatura.

La horda atacaba de manera incansable, sin importarle recibir los ataques de Natsu, quién utilizaba todo su repertorio para repelerlos...

—🔥¡Karyū no Tekken!🔥

5 monstruos fueron derribados, uno de ellos perdió un brazo...

—¡Natsu cuidado!—Happy chilló.

—🔥¡Karyu no Kenkaku!🔥

Ahora hizo retroceder de un cabezazo a uno más grande que él que se acercó demasiado...

«... ¡Eso estuvo muy cerca!.. »

—🔥¡Karyū no Gokugeki!🔥

Viéndose rodeado utilizó la onda de choque ardiente para hacerlos retroceder...

Natsu derribaba decenas y decenas de criaturas, pero no conseguía imponerse sobre la horda. Muchos de ellos, heridos de gravedad, se seguían levantando y atacando sin importarles su desmembramiento... Natsu estaba en desventaja, no podía darse el lujo de pelear así.

«... Si sigue así va agotarse pronto... ¡Son demasiados!.. »

—¡Voy a limpiar toda el área de una sola vez!—Natsu inspiró profundo—🔥🐉 ¡Karyū no Hōkō!🐉🔥

Natsu ensanchó el disparo lo más que pudo. La poderosa corriente de fuego se convirtió en una gran bola después de bañar con flamas a buena parte de la horda. Algunos de ellos se desintegraron, hechos cenizas entre el calor de las llamas…

Toda la vegetación y parte del salón de la catedral quedaron invadidos por el fuego, un incendio peligroso. Happy se elevó un poco para soportar el calor, pero teniendo el cuidado de no acercarse a la batalla aérea entre Ophis y Raxhel.

—¡No puede ser!—protestó el gato.

Algunos monstruos comenzaron a emerger de forma lenta de las llamas. Estaban quemados al punto de que sus músculos se pegaron entre ellos, impidiendoles moverse de forma rápida... pero eso no los detenía.

—¡Por qué no se mueren de una vez!—Natsu les gritó jadeante e indignado.

El dragon-slayer no salía de su asombro.

«... ¡Esto no es como lo que tenía en mente!... »

UOORGGH...

—¡Toma esto maldito!—Natsu ahora peleaba con lentos monstruos abrasados por las llamas, pero él también se estaba volviendo lento...

Ingenuamente pensó que resultaría como el enfrentamiento contra el culto de Avatar, pero no consideró que esta vez estaba sólo y que los oponentes tendrían tanta tenacidad y resistencia…

"... ¡Ríndete mientras puedes, Natsu!… "

—¡¿Qué?!... ¡Ungh!—Natsu se distrajo y recibió un zarpazo en la espalda, que le dejó 3 rayas sangrientas.

Happy se asustó.

"... ¡Ríndete ahora o Lucy va a llorar!… "

—¡Mierda!... ¡Argh!—Natsu volvió a distraerse y recibió más daño.

«… ¿Qué es lo que le pasa?… »

Natsu Dragneel creía escuchar la voz de Karan Sforza repetirle las cosas que le había dicho durante su primera pelea. EL joven recibió tal impresión al ver a los monstruos levantarse y resistir sus ataques que su mente le jugó una mala pasada, por el parecido de estos con Karan en su forma mutada…

—¡Natsu concéntrate!—lo animó Happy.

—¡Ya sé, no tienes que decirlo, maldición!

Natsu se sentía muy frustrado y hacía grandes esfuerzos para imponerse. Al cabo de algunos segundos abatió al último de sus enemigos…

—¡Listo, los vencí! ¡Ajh!—Natsu jadeaba e intentaba recobrar el aliento…

—¡Oh noo!—exclamó Happy.

—¡¿Qué ocurre Happy?!

Natsu no veía bien a lo lejos por el fuego, pero desde arriba, el Exceed vió a monstruos nuevos salir del mismo agujero del que emergió Raxhel. Monstruos más rápidos y descansados...

«... ¡Oh mierda!... »

A toda velocidad, la nueva horda atravesó las llamas y se dirigió hacia el joven.

«... ¡no queda otra forma!.. »

Natsu reunió todo el poder que le quedaba...

— 🔥Mōdo Raienr... ¡¿Happy qué haces?!

El Exceed lo tomó por la espalda y lo elevó lejos de la horda.

—¡Happy, estaba a punto de...

—¡Son demasiados!—Happy lo calló—¡Mira!

Natsu observó recién y vió que tenía razón...

—¿Qué se supone que hagamos ahora?...

En el cielo, dragón y demonio se enfrentaban en una batalla aérea.

Ophis y Raxhel intercambiaban ataques a distancia y ocasionalmente colisionaban entre sí, Ophis con sus sables de luz púrpura, y el demonio con sus garras incandescentes, imbuidas en magia para resistir los cortes de Ophis...

—Eres buena—comentó Raxhel.

—Y tú no eres tan malo...

«... Muy poco modesta por lo visto... »

—Estos engendros tuyos... ¿Cuál es su origen?—preguntó Ophis antes de intentar cortarlo.

¡SLASH!

Raxhel esquivó el ataque con gracia y con una pirueta se posicionó peligrosamente cerca de Ophis...

¡SKRRISSKHS!

El demonio intentó atacar con ráfagas de poder color verde, similares a flamas... Ophis contrarrestó y se alejó de nuevo.

—¿Te gustan?—dijo el demonio, continuando la conversación—Son el resultado de mis experimentos. Tú por otro lado... tu habilidad con la espada me intriga.

—¿Por qué?—cuestionó Ophis.

—Porque es imperfecta y un poco torpe...

Ophis puso un gesto sombrío.

—... No estás acostumbrada a pelear de esta forma no es cierto? ¡Es porque eres un dragón, y los dragones no pelean con armas!—el demonio se jactó de haber deducido su naturaleza—¿Por qué un dragón utiliza una forma humana tan patética como esa?—se burló Raxhel. Ophis siguió atenta, sin perder los estribos—¡Tus brazos y piernas son demasiado cortos para pelear!

Raxhel continuó atacando. Ophis se tragó la ofensa y respondió algo distinto a la vez que se defendía.

—¿Por qué usas esos monstruos en lugar de las almas de los humanos que tienes por contrato?

—¡¿Y tú cómo diablos sabes eso?! Que hice contratos con humanos.

—Así fue como te encontré—dijo Ophis—uno de tus siervos en Joya... El niño rico ¿Cómo se llamaba?... ¡Sforza! o algo así.

—¡O sí! lo recuerdo muy bien—dijo Raxhel en tono burlón—Karan Sforza. ¡El estúpido que vendió su alma por un poco de poder! ¡Y encima su padre pagó por el favor con una cuantiosa contribución a mi causa! ¡El ingenuo nunca supo que el verdadero precio por el favor era el alma de su querido hijo!

«... Así que al final murió... » cuestionó Ophis.

—¡Coseché su alma hace nada! ¡Chilló como un cerdo cuando arranqué su ser de su cuerpo!—se vanaglorió—¡Y su adquisición sólo me hizo más fuerte!

Raxhel creyó ver una abertura en la posición de Ophis y lanzó una técnica...

¡Demon blast!

Un veloz rayo salió disparado de las manos de Raxhel, tan rápido que apenas fué notado por Natsu y Happy, quienes se sorprendieron al reconocer la habilidad...

«... ¡Esa técnica es de Mirajane, pero mucho peor! ...»

Ophis desapareció.

—¿Dónde te... uh?

¡SLASH!

¡UNGH!

Raxhel fué repentinamente atacado por Ophis y apenas logró zafar... ¡Uno de sus cuernos fué cortado!

—¡¿Cómo?!—Raxhel exclamó

Ophis se mantuvo en posición de combate y le hizo un ademán con las manos...

«... Acercate ahora, si puedes... »

Grrrh... —Raxhel se enfureció y la amenazó con el puño—¡Fué solo suerte! ¡Veremos si ahora puedes seguirme el paso!... ¡GAAAAH!

Raxhel comenzó a atacar de forma frenética a Ophis.

—¡Disparo Satáni... mierda!—Ophis contraatacó y Raxhel no pudo completar su técnica.

De esta forma volvió a pelear con garras y puños.

—¡Quédate quieta!—le gritó frustrado. Ophis le esquivaba los ataques y le cancelaba todas las técnicas antes de poder lanzarlas...

Raxhel perdió los estribos.

«... ¡Cómo es posible!... ¡Hace un momento estábamos parejos!... Todo este tiempo... ¡Solo estaba jugando!... »

¡KRAK!

¡Bluagh!—Ophis le dió un golpe en el vientre que le sacó el aire y lo mandó a volar contra los altos muros de piedra de la catedral...—¡GAAAH!

El dragón se dirigió a toda velocidad hacia él para continuar...

Natsu y Happy lo observaron todo...

—Vaya ¡Por lo menos a alguien le va bien!—dijo el gato de forma sarcástica.

—¡UORG!—Un monstruo atacó de sorpresa, saltando para alcanzarlos.

¡Uuuy!—Happy se elevó un poco más

Impulsandose con sus compañeros, algunos de los monstruos intentaban alcanzarlos...

—Esto no está bien—Natsu se rascó la barbilla—¡No podemos quedarnos atrás! ¡Descendamos Happy!

—¿Estás listo ya?—le dijo el Exceed.

—¡Ya descansé lo suficiente!—dijo entusiasmado—¡Hora de la acción!

¡Aye sir!

Happy descendió a Natsu y éste reanudó la batalla.

¡ROAAR!

—¡Toma ésto! ¡Y para ti también! ¡Acérquense, que hay para todos!

Natsu repartía golpes y patadas potenciados con fuego a toda la horda, que no tenía reparos en atacar toda a la vez...

—¡Trata de no agotarte desde el principio!—le recomendó Happy.

«... Hora del desquite... » pensó Natsu.

...

—•○•—◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘◘

...

¡UUUNGH!...

¡KRAK!

¡GAAAH!

Raxhel era estampado contra rocas y la propia catedral, inclinándose la balanza a favor de Ophis.

«... una mocosa dragón como ella... ¡No puede vencerme!... »

—¡Tú, maldita!

Raxhel volvió a precipitarse contra Ophis. Golpes, patadas y arañazos. Todo era desvíado por el dragón, frustrando más y más a Raxhel...

¡PUNCH!

¡Ugh... ¡NAAAA!

Ophis volvió a pegarle una vez más en la cara, estrellándose contra el suelo.

El demonio se levantó como pudo. Jadeante y furioso, no se lo podía creer. Comenzó a dudar.

«... ¿Quién diablos es ésta mocosa?... ¿De dónde salió?...»

Ophis descendió a su altura y se paró frente a él.

—Dijiste... ¡dijiste que habías venido a buscar algo!—le gritó Raxhel—¡¿Quién eres?!

—Dije que soy yo quien hace las preguntas—replicó Ophis—¿Cuál es el origen de los poderes de tus monstruos? ¿Cómo conseguiste transferir las habilidades que le concediste a Karan Sforza?

Raxhel reflexionó y unió los puntos...

"... vine a recuperar lo que es mío... "

El demonio torció un gesto de susto, para luego empezar a reír de forma nerviosa...

¡JA-JA-JA! Es una broma cruel... NO. ¡De seguro sólo quieres apropiarte de ese poder! ¡Si eso debe ser!... ¡GAAH! ¡Chispa demoníaca!

Raxhel atacó con un ataque eléctrico. Ophis evadió sin esfuerzo, asustándolo más.

—No... ¡No es cierto!... ¡Sólo tratas de asustarme! ¡Tú no puedes ser ese sujeto! ¡Ese monstruo está encerrado!

El demonio intentó sin éxito, atacar a Ophis de todas las maneras posibles. ¡Era como ver todas las técnicas de Mirajane en exposición!

Raxhel ahuecó el espacio entre sus manos, formando un vórtice esférico de energía oscura...

—¡MUEREEE!—Raxhel gritó—¡SOUL EXTINCTOR!

WWWHHHM... ✹✹!BOOOOOM!✹✹

El ataque se liberó y se transformó en una gran explosión de energía oscura. Parte del cielo se tiñó de un negro más oscuro que el de la noche.

Inclusive parte de la horda en tierra fué tragada por el vórtice. Happy reconoció el hechizo y agarró a Natsu por la espalda.

—¡Al suelo!

—¡Happy, esa técnica era de...

Ophis fué completamente cubierta por la magia, y desapareció entre la luz negra...

¡Ahj-ahj-ahj!... ¡Lo he logrado!—exclamó Raxhel jadeante.

Sin embargo, una figura emergió de entre la nube de humo. Ophis, cubriéndose con sus antebrazos pero intacta...

¡¿EEH?!

El dragón ahora lo observó con ojos profundos, como advirtiéndole que ya no habrían más juegos...

Raxhel finalmente aceptó la verdad.

—¡NOO!... NO... no-no-no

¡BOOOM!

—¡No puede ser!

¡BOOOM!

El demonio hacía un berrinche digno de un niño, arrojando esferas malignas de energía a todas partes, descargando su impotencia con la nada.

—¡No me puede estar pasando ésto a mí!... Eres... eres... ¡El dragón infinito!... ¡OPHIS!

—En cuerpo y alma… o algo así—replicó el dragón—¡Dime donde está la fuente de poder de tus monstruos para que pueda matarte de una vez! ¡Devuélveme lo que es mío!

Raxhel tenía una expresión de terror y confusión.

«... ¿Por qué me lo pregunta cuando fácilmente podría buscarlo ella misma aquí?... »

El demonio aprovechó los escasos segundos de tregua que le dió Ophis para observarla con detalle...

La niña dragón tenía las mangas roídas y los antebrazos algo dañados. Algunos rasguños en el rostro.

—Te dije que...—Ophis interrumpió su hablar. Un fino hilo negro le brotó del costado de la boca. ¡Era sangre!

El dragón se limpió extrañado y se quedó viendo el líquido en la mano...

«... ¡Así que la leyenda es verdadera!... ¡Si la leyenda es cierta, ella aún debe estar débil!... si a esto podemos llamar débil claro... » pensó Raxhel.

El demonio tuvo una idea.

«... ¡Mi Soul Etinctor funcionó! ¡aunque sea un poco!... ¡Sólo necesito un pequeño impulso de poder y al mismo tiempo algo para debilitarla más... y si mi interpretación de la leyenda es verdadera, eso quiere decir que... »

Raxhel sonrió con malicia.

—... Sin trucos—escupió Ophis ya enojada.

Un ruido de aleteo...

Ante la atónita mirada de Ophis, ¡Raxhel salió huyendo!

—¡Atrápame si puedes!

Las venas de la frente de Ophis se dilataron y su expresión cambió a una iracunda. Aquello fué casi una ofensa para ella y salió disparada tras él...

Ambas criaturas voladoras hacían vueltas y piruetas mientras recorrían todo el campo.

—¡Acabemos con esto!—arengó Ophis.

—Eso haremos—replicó Raxhel.

Natsu y Happy seguían peleando en tierra, cada vez más cansados...

—¡Natsu agáchate!

FSSSSS

Ophis y Raxhel pasaron volando a toda velocidad, casi rozando al muchacho. Se metieron a la catedral, y luego al mismo agujero del que salió Raxhel...

—Ya deberías haberlo notado. Que nunca podrás ganarme—dijo Ophis con vanidad, ya calmada.

«... eso está por verse... »

Se metieron más y más profundo en el agujero. Un complejo sistema de cuevas y salas secretas donde Raxhel hacía sus experimentos...

🔥 ¡FSSSS! 🔥

Ophis escupió varias bolas de fuego para intentar derribar a Raxhel, quien esquivaba a duras penas...

«... ¡Esto comienza a ser molesto!... »

—Creo que ya entendí por qué creaste a esos monstruos—dijo Ophis—¡Por qué eres débil! ¡Aún no has evolucionado lo suficiente para enfrentarme en mi estado actual!

Raxhel se puso colorado de rabia por la declaración, pero trató de contenerse...

«... ¡Maldita mocosa dragón!... ¡Solo espera y verás!... »

Ophis abrió la boca y tomó aire.

🔥🔥🐉 ¡Roooarr! 🐉🔥🔥

Ophis emitió un potente rugido e inundó todo el túnel con su fuego azul.

—¡Oh, mierda!

Raxhel busco huir y apenas lo consiguió. El chorro de fuego lo tocó los extremos de las alas haciéndole perder el equilibrio en el último tramo...

¡Arrgh!

Raxhel prácticamente se embarrancó al tocar el suelo y se descalabró varios metros antes de detenerse, tragando piedras y rasguñandose el cuerpo.

Un subnivel bastante amplio, pero aún con un agujero en el centro. Dicho salón era bastante amplio...

—Fin del camino—dijo Ophis tras aterrizar.

—¡Para tí!—se burló Raxhel de forma muy confiada, contrario a sus heridas.

Ophis se extrañó.

—¿Qué te hace pensar que... ¿uh?... ggrrrrh...

¡Ophis se desplomó sola! Cayó de rodillas, aquejada por un dolor quemante en todo el cuerpo...

—¡¿Esto de nuevo?!—exclamó Ophis mirándose la mano, la cual comenzó a humear junto con todo su pequeño cuerpo—Eso significa que...

Raxhel sonrió complacido.

Una luz blanca resplandeció desde dentro del agujero central del salón. Un ruido de metal cortando el aire y del hoyo brotó un artefacto similar a un altar dorado. En la punta había un cáliz, con un pequeño orbe en la punta...

«... ¡La leyenda es verdadera!... » pensó Raxhel.

Ophis observó el objeto con ojos llenos de codicia. ¡Si tan solo pudiera tocarlo!

—Me tendiste una trampa—dijo Ophis, intentando no perder la compostura.

«... Me confié... » pensó el dragón.

—Resultaste bastante ingenua para ser una criatura tan antigua—se burló el demonio.

🔥 ¡Fsssss! 🔥

Ophis le escupió una bola de fuego, la cual Raxhel evadió con facilidad.

—Uh, parece que alguien se volvió lenta... ¡GGAAAH!

Raxhel dirigió su ataque mágico contra el dragón, el cual esquivó con algo de dificultad. El dolor entorpecía sus maniobras y el humo que brotaba de su propio cuerpo afectaba su visibilidad.

«... Debo llevarnos de vuelta a la superficie y mandar a Dragneel aquí solo... »

Ophis intentó despegar y regresar al agujero, pero Raxhel reaccionó más rápido...

¡STUMP!

Ophis fue derribada y mandada al suelo. Envalentonado, Raxhel tackleó a Ophis antes de que esta pudiera meterse de vuelta en el agujero.

—¿Te vas tan pronto?—se burló—¡Creí que habías venido por esta cosa!... ¡Vamos, tómala!—la animó el demonio, señalando el orbe del cáliz.

—¿Por qué no me la acercas tú?—replicó Ophis en forma desafiante.

—¿Crees que soy torpe? ¡¿Crees que no estudié esa cosa a fondo los últimos 20 años como para saber que no debo tocarla?!—exclamó Raxhel con orgullo—¿No es irónico Ophis? ¡La sola presencia de esta cosa que tanto quieres es capaz de lastimarte de esta manera!

Ophis comenzó a enfurecerse.

—¡Tú no eres el guardián original de este templo!—exclamó Ophis.

—Acertaste—dijo Raxhel con una sonrisa de maldad—Los fieles del dios Ankhseram cuidaban este templo antes que yo llegara pero por alguna razón lo abandonaron... ¡Los humanos que mantenían este lugar no tenían ni idea del tesoro que custodiaban! Además, ¡En la actualidad, los inmortales más jóvenes, tanto dioses como demonios te consideran un mito, y los mayores no quieren ni recordarte!—Raxhel se burló conteniendo la risa.

Ophis tembló de rabia al oirlo.

—¡¿Oíste Ophis?!—la provocó Raxhel—¡Te encerraron, tiraron la llave y olvidaron que estabas allí!

¡PUUUM!

Ophis disparó un ataque explosivo sin apuntar bien. El dolor era cada vez más insoportable.

Grrr... ¡sigh!—Ophis respiraba con dificultad a la vez que gruñía.

—Pero alégrate—dijo Raxhel—Al final, tus poderes sirvieron para una buena causa. Mi causa. ¡Prepárate para ver los resultados preliminares de 20 años de investigación!

Raxhel utilizó un círculo mágico para invocar una Joya color púrpura. Al estrujarla se transformó en una serpiente de luz brillante...

—¿Una víbora?

—¡Observa y maravíllate!... ¡Glups!

¡El demonio se tragó al animal! Consecuentemente, su cuerpo se cubrió de un aura más poderosa, cuya liberación hizo temblar el lugar...

¡Groooarrr!—Raxhel rugió.

Su cuerpo también comenzó a cambiar una vez más. Su antes delgado y elegante cuerpo se ensanchó, tonificandose bastante. Sus manos y antebrazos se hicieron desproporcionadamente gruesos, y sus piernas se deformaron: los fémures se hicieron cortos y los huesos inferiores más largos. El tobillo quedó a la altura donde estaba la rodilla, igual que las patas traseras de un cuadrupedo.

Por último, todo el cabello se le cayó y los cuernos también. En su lugar, dos nuevos y gigantescos cuernos brotaron de su frente, encorvandose hacia atrás...

—¿Qué te parece?—Preguntó Raxhel. Su voz ahora se oyó inusualmente gruesa y monstruosa.

—¡Eso que usaste... ¡Es mío!—gritó Ophis, todavía adolorida.

—Las he mejorado bastante desde la que le dí al niño rico de Joya. Era un imbécil, pero debo reconocerlo: el mocoso Sforza fue mi primer intento exitoso...—admitió Raxhel—Y gracias a los datos de esa investigación, ¡Ahora pude evolucionar hasta mi forma más fuerte!—Raxhel se enorgulleció—¡Ahora conocerás todo mi poder!

«... ¿Puedes llamarlo exitoso después de ver cómo terminó Sforza?... » reflexionó Ophis.

De un momento a otro, Raxhel desapareció de la vista de Ophis, quien se sorprendió y abrió los ojos con efusividad...

—Estoy aquí...

¡KRAK!

¡Raxhel atacó a Ophis por detrás y la estrelló contra el techo!

¡Ungh!—se quejó Ophis al caer de vuelta a tierra.

—¡Ahora soy superior a ti!

El dragón se enfureció y se lanzó a atacar con sus sables.

¡SLASH! ¡SLASH!

Raxhel se burló de todos sus ataques, con una sonrisa en su cara. Ophis no podía moverse con rapidez por el efecto del orbe en la habitación. Todo su cuerpo humeaba mientras se movía.

—¡Eres lenta!.. ¡GAARH!

¡STUMP!

¡ANGH!—Ophis fue golpeada en el estómago, haciéndola escupir baba...—¡PAGARÁS!

Ophis contraatacó con varios disparos de fuego...

🔥 ¡Fsssss! 🔥

—¡¿Qué le pasó a tu puntería?!—se burló el demonio.

¡SKKRIISH!

Raxhel derribó a Ophis al suelo e intentó empalarla con su garra derecha. Ophis detuvo el ataque con sus pequeñas manos. ¡Necesitaba una mano completa para detener una sola uña de Raxhel...

Ophis pataleaba y se retorcía con su mitad inferior libre, hasta que Raxhel se la pisó con su propio pié.

—Tu forma humana es patética—la insultó el demonio—¡Quién diría que de todos los seres yo, Raxhel, tendría la oportunidad de derrotarte definitivamente!

Raxhel preparó su mano libre para herirla, pero Ophis intentó una última cosa...

¡BOOOM!

¡UNGH!—Raxhel fué primero cegado por la luz púrpura del aura explosiva que Ophis emitió en todo su cuerpo, para después ser arrojado hacia atrás por la onda de choque...

El dragón se incorporó de inmediato fatigado, pero cayó arrodillado una vez más. Ahora su cuerpo soltaba más humo que antes...

¡gggrr!—Ophis gruñó adolorida al debilitarse aún más y darse cuenta que había sido lanzada aún más cerca del altar central...

¡JA-JA! Lo único que conseguiste con eso es debilitarte más!—se burló—¡Qué irónico! ¡El dragón del infinito debilitado por eso que tanto quiere conseguir!

¡WOOSHH!

Ophis se lanzó contra él potenciandose con su aura púrpura y golpeó a Raxhel con la cabeza en el vientre...

—¡JA! Eso no me... ¡Arrr! ¡mis ojos!

Ophis intensificó su aura para cegarlo de nuevo con su luz a quemarropa. El dragón aprovechó su distracción para empuñar sus sables de aura e intentar cortarlo.

Su accionar fue torpe por el dolor y el humo, pero Ophis alcanzó a cortarle primero un cuerno y luego una mano...

¡ARGH!—Gritó Raxhel.

Ophis respiró agitadamente al detenerse.

—No te será tan fácil...

Raxhel sonrió desafiante al verse el muñón.

¡JA! ¡Parece que aún con ese cuerpo débil haces honor a lo que las historias dicen sobre tí! Eres muy difícil de matar...

¡CRUNCH! ¡CRUNCH!

Un ruido de piedras crujiendo distrajo a ambos combatientes.

—¿Eh?

...

¡AAAAHH!

Los gritos de Natsu y Happy se oyeron con bastante eco en el túnel. Ambos chicos cayeron también por el agujero.

¡UGH!... ¡Ouch!... eso dolió...—se quejó el gato al tocar el suelo.

Raxhel los miró con algo de confusión y a Ophis se le ocurrió un plan para voltear la situación...

«... Tengo una idea... »

¡GROAR!

Ahora se escuchó el ruido de gruñidos de los monstruos de la horda...

5 monstruos también descendieron por el agujero. Alguna vez habían sido humanos pero ahora lucían como cadáveres putrefactos agigantados, con garras y dientes...

—🔥🐉 ¡Karyū no Hōkō!🐉🔥

El rugido de Natsu bastó para carbonizarlos por completo, pero el ataque fué mucho más débil que el estándar. Natsu estaba agotado y tanto su rostro sudando como su respiración agitada lo delataban...

—¿Qué pasó allá arriba?—preguntó Ophis sin perder de vista a Raxhel.

—Tuvimos que retroceder... ¡Son demasiados!—dijo Happy

Natsu se veía avergonzado y enojado. Miró recién a Raxhel y las heridas de Ophis...

—¡¿Qué pasó aquí abajo?!—preguntó—¡Ese sujeto está todavía más feo que antes!...

—Mutó en una forma más fuerte, al menos en apariencia… con ayuda de mi poder...—Ophis señaló al altar central para que Natsu lo viera...

«... Atento, Dragneel... »

Raxhel sonrió con burla.

—¿Al menos en apariencia? ¡Todavía me subestimas!—presumió Raxhel.

—Pero todavía utilizas esos engendros baratos...—dijo Ophis, refiriéndose a la horda.

El demonio miró a Natsu y Happy de piés a cabeza...

—¿Y qué me dices de esos 2?—preguntó con sorna—¿Es enserio? ¿Es lo mejor que pudiste conseguir?—Raxhel siguió burlándose—Pero lo entiendo ¡Me pregunto qué clase de estupido cooperaría contigo! quiero decir... Yo soy malvado, pero tú... lo que hiciste... ¡Apuesto que este par de torpes no podrían juntar un cerebro entre los 2!

—¡Oye! ¡Yo no te insulté!—Natsu protestó agitando el puño—¡Ven aquí y pelea!

—¿Contigo? ¡No me hagas reír!—dijo Raxhel—... pero Ophis tiene razón... ¡Esos eran engendros baratos, en los cuales desarrollé mi investigación con el orbe! ¡Ahora les mostraré el nuevo alcance de mis poderes!

Raxhel empuñó luz verde en su mano intacta y comenzó a invocar un poder oscuro, a la vez que se la enseñaba a sus enemigos…

¡WOOOSH!

El aura del demonio se elevó en forma agresiva y empezaron a oírse gritos lastimeros. Happy comenzó a temblar...

—¡¿Qué ésta sensación tan escalofriante?!

—¡Sean testigos de mis nuevos poderes!—gritó Raxhel—¡Las almas humanas que coseché y los poderes de Ophis que logré extraer del orbe!

Las luces se convirtieron en fantasmas, que comenzaron a salir del cuerpo de Raxhel, gritando y gimiendo de dolor...

[¡AYÚDENME!] [¡Madre!...] [Aaaarh]... [¡Lucy!]

Natsu fue perturbado por uno de los gritos... reparó con detalle en una de las almas. Todo su ser comenzó a temblar sin que pudiera evitarlo... creyó reconocer a alguien...

«... Ese es... Kar... »

¡Bluagh!

De imprevisto, Raxhel vomitó, sorprendiendo a todos, incluso a él mismo.

—¡¿Qué es esto?!—el demonio exclamó furioso y sorprendido—¡Aaargh!... ¡DUELE!—el demonio se abrazó a sí mismo.

Las almas de los condenados se retrajeron y volvieron del lugar donde Raxhel las había llamado... Esto dejó una gran impresión en Natsu, que todavía tenía la carne de gallina...

—Te lo dije—Ophis habló triunfante—Sólo en apariencia. Deberías saber que mi poder es veneno para los que lo usan de forma imprudente—Celebró Ophis a la vez que Raxhel caía de rodillas.

—Natsu...—Happy se preocupó al ver a su amigo tan afectado.

Ophis aprovechó la debilidad de Raxhel para ejecutar su idea... ¡Cogió a Natsu y Happy del cuello!

—¡¿Qué haces?!—Happy se quejó.

—¡Gato, lleva a Dragneel para que recoja esa cosa!—señaló al orbe en la punta del altar...

—Pero el demonio está... ¡AAAH!

Ophis hizo caso omiso y cual jabalina, los lanzó contra el objetivo... Raxhel rugió e intentó agarrarlos en el aire...

¡Max speed!—Happy usó su supervelocidad por un corto momento para sortear el ataque, pero no pudo detenerse a tiempo para no chocar contra el altar...

—¡Naaatsuuu!—Happy alertó a su amigo que solo tendría una oportunidad.

Se oyó un ruido metálico y un segundo después ambos se estrellaron al otro lado de la sala…

¡KRAK!

—¡Estúpidos!—arengó Raxhel—¡Ahora que tocaron el orbe, ustedes... ¿uh?—Raxhel se detuvo—¡¿Pero qué es esto?!

Aún en el suelo, Raxhel estaba anonadado. Ophis miraba a los 2 atenta y complacida.

¿Uh? ¿Natsu?—Happy se recuperaba de la caída cuando observó que Natsu ya se había levantado, y en la mano, sujetaba el orbe blanco con firmeza...

Una pequeña reliquia esférica, color blanca y aparentemente hecha de piedra labrada, no más grande que un puño. Rodeando el orbe, había una serpiente dragón tallada.

«... Es... es... ¡Es igual a la cosa que estaba dentro el monstruo que nos atacó en el tren cuando fuimos a Giltena!... »

Pero lo que más perturbó a Natsu y Happy fué que en esta ocasión, en la joya también brillaba un símbolo con luz dorada...

«... Yo he visto ese símbolo antes... »

Happy trató de recordar pero no pudo. Estaba en el libro de astronomía que Lucy siempre leía en la biblioteca... Equuleus, el caballito. ¡Una de las 88 constelaciones!

Natsu estaba visiblemente confundido. Ophis seguía debilitada y con el cuerpo humeando...

—¡Es imposible!—chilló Raxhel—¡No deberías poder siquiera tocarla! ¡LA TOCASTE! ¡La tocaste y tu cuerpo no se destruyó!...

Happy se asustó por la declaración y retrocedió de su intento de tocarla también. Raxhel ahora se giró a ver a Ophis y descubrió el engaño:

—¡Ahora lo entiendo todo! ¡Por eso él viene contigo!

Ophis se puso en alerta por cualquier cosa que intentara Raxhel... demasiado tarde, pues el demonio se lanzó contra Natsu, con toda intención de matarlo...

Happy se aterró al ver la garra de Raxhel acercarse...

—¡DRAGNEEL, ÁBRELA AHORA!—gritó Ophis a todo pulmón.

Natsu reaccionó y encendió la mano en llamas. ¡Con toda su fuerza, estrelló el orbe contra el suelo cual martillo!

¡AAAH!—Natsu gritó.

—¡NOOOO!—Raxhel aulló.

¡CRASH!

Cuando la envoltura se quebró, una gran onda de choque se emitió desde el centro de ésta. ¡Raxhel, Natsu y Happy fueron mandados a volar!

🔥¡WOOOSSHH!🔥

Raxhel logró resistir por su poder, pero Natsu y Happy fueron directo a estrellarse contra las paredes de piedra del templo subterráneo.

—El fragmento... ¡Está libre!—dijo Raxhel.

Donde estaba el orbe, ahora levitaba una pequeña gema morada, del tamaño de una semilla, con intrincado diseño y brillo siniestro.

La gema ahora se dirigió hacia Ophis, cuyo cuerpo había dejado de humear y sentir dolor. ¡El dragón ya tenía su boca transformada en la ventosa con dientes, lista para tragarse la gema!

¡Glups!.. ¡Grrrh!

🔥🔥¡WOOOOSSHSH!🔥🔥

Ophis gruñía mientras su aura púrpura se manifestaba una vez más, solo que esta vez era enorme y presionaba el aire con mucha más fuerza que antes...

—¡Sus poderes!... ¡Están creciendo!—exclamó Happy al sentir el aura de Ophis, a la vez que se agarraba del hombro de Natsu para no ser lanzado por las ondas de choque que emanaba el cuerpo de Ophis.

El dragon-slayer de fuego también se impresionó por la liberación de magia que obtuvo Ophis...

—Estoy lista...—dijo Ophis con tranquilidad. La liberación se detuvo y el aura púrpura permaneció a su alrededor, sólo que menos agresiva que al inicio...

Raxhel estaba atemorizado, pues la presencia mágica de Ophis era enorme. Happy sentía una mezcla contradictoria de alivio y susto...

«... Bueno, mientras ella no olvide que estamos de su parte supongo que todo estará bien... creo... »

—¡Tttu-tus poderes sólo se incrementaron un poco!—Raxhel intentó minimizar la situación para tranquilizarse. Mala idea.

¡SLASH!

Ophis hizo brotar su sable de aura de sus dedos medio e índice.

¡Glubs!—Raxhel tragó seco.

—Tenías razón...—Ophis finalmente habló, otra vez con su habitual tono despreocupado, como quien sabe que ahora está en completo control de la situación—... Las espadas no son lo mío. No estoy habituada a luchar con ellas. Me falta práctica...

Ophis retrajo su sable.

—... Sin embargo...—Ahora Ophis hizo puño y concentró aura allí.

¡PUNCH!

¡Bluagh!—Raxhel volvió a escupir, pero esta vez sangre. ¡Ophis lo había golpeado con tal fuerza en el vientre que lo atravesó!

Natsu y Happy se impresionaron...

«... ¡No la vi moverse!... »

¡Uuurgh!... ¡gah!—Raxhel se agarró la herida en el momento que Ophis desconectó el golpe. El demonio se arrodilló una vez más.

—... También dijiste que mis brazos y piernas eran demasiado cortos para pelear... ¿Lo probamos?—Ophis habló en tono siniestro.

Raxhel puso cara de horror...

¡Naah!... ¡Grr!—Movido por la desesperación, Raxhel hizo un último esfuerzo por subir sus poderes... Happy tembló al sentir el incremento, y aún más al verlo ahuecar las manos y llevarlas a un costado...

«... peligro-peligro-peligro... » Happy tomó a Natsu por la espalda, quien también estaba impactado.

—¡Es la técnica de Mirajane de nuevo!...

—💥¡ROYAL SOUL EXTINCTOR!💥

Ésta vez, la explosión de energía oscura fué tan grande que acabó con todos los túneles subterráneos, destruyó el templo y a la horda de monstruos que todavía esperaba en la superficie... ¡Buena parte del terreno boscoso fué barrido de una sola vez!

¡CRAAAASSH!

Natsu y Happy apenas lograron escapar, flotando con ayuda de las alas de Happy.

—¡Esto tiene que ser una broma!—dijo Natsu al notar la escala de poder que manejaban Ophis y Raxhel. La zona quedó reducida a un enorme cráter...

De la nube de polvo emergió primero Raxhel, visiblemente agotado...

—¡¿Dónde está?!...

—Justo aquí...—Ophis replicó.

¡PLAF!

Raxhel fue golpeado y mandado al suelo.

¡KRAK!

¡UNGH!

¡PUNCH!

Bluaghh..!

Ophis castigó brutalmente a Raxhel únicamente con sus puños. El demonio intentaba inútilmente defenderse con su garra y cuerno restantes, pero la precisión y fuerza con la que Ophis atacaba era muy superior...

—¡Su cuerpo está cambiando de nuevo!—anunció Happy. El propio Raxhel se observó sorprendido de la pérdida de su forma de batalla.

¡COFF-COFF!—El demonio tosía sangre mientras su cuerpo perdía su musculatura y su piel volvía a su tono habitual. Sus cuernos desaparecieron pero su cabello no volvió a crecer...—¡¿Por qué?!

—Un aumento de poder forzado mal ejecutado nunca superara a lo verdadero—Ophis le replicó al acercarse a él. El dragón estaba parado a 2 pasos de Raxhel, dispuesto a terminar todo—... Mi poder sólo me sirve a mí y aquellos demasiado débiles para tolerarlo serán destruídos por él…

Ophis levantó su mano y concentró un poder excesivo allí.

¡Espera! ¡Por favor!

—¿Por qué?—preguntó Ophis con tranquilidad. Natsu y Happy se acercaron también—Ya recuperé lo que vine a buscar y tú ya no me sirves para nada...

—¡Por favor... No me... mates!

El dragón blandió su mano hacia la cabeza de su víctima...

—¡Puedo serte útil!—gritó Raxhel a último momento. Ophis se detuvo.

—Explica cómo—dijo Ophis de forma demandante. Ahora el dragón tenía su palma extendida justo en la frente de Raxhel—¿Sabes dónde están mis otros fragmentos?

—¡No, pero...

—Es todo—cortó Ophis...

¡SPLASH!

¡Ophis le explotó la cabeza con su magia! Sin mayores contemplaciones, el dragón acabó con su vida.

Su sangre salpicó y Happy se tapó la boca con ambas manos, asqueado. Natsu miró todo firme.

—Lo mataste...—le dijo el chico.

—No.—dijo Ophis—Ese maldito encontrará la forma de volver…

El decapitado cuerpo de Raxhel comenzó a producir sombras, y volvieron a oírse sus gritos. Del cadáver, una luz verde se desprendió y luego tomó la forma del propio Raxhel. El alma del demonio se manifestó y siguió gritando mientras se alejaba en el horizonte.

El espectáculo casi hace desmayar finalmente a Happy. Demasiadas emociones fuertes para un solo día...

Por su parte, Natsu se sorprendió por partida doble. Primero por la intensidad de los poderes que acababa de presenciar, y por el hecho de que Ophis había sido herida durante su combate. El hecho de que existan seres tan poderosos como Ophis y Raxhel lo hizo sentir terriblemente pequeño. Una sensación que comenzó a crecer desde su encuentro contra Karan Sforza...

—¿Qué fue eso?—le preguntó Natsu con rudeza—¡¿Y la cosa que te comiste?!... ¡¿Qué sucede aquí?!

—Dime Dragneel. ¿Lo entendiste?

¿Eh?

—... Nuestro objetivo para éste año—dijo Ophis, como si fuera algo obvio.

Había llegado el momento de que Ophis revelara por fin sus motivos y cuáles serían sus planes para ellos. Cómo era su costumbre, Ophis era muy impersonal a la hora de explicar y obviaba detalles que consideraba innecesarios.

—... yo... ¡tch!—Natsu renegó no entender.

—Para empezar—Happy interrumpió—¿Qué era ese orbe? Eso es lo que vinimos a buscar ¿Cierto?... Recuerdo haber visto otra igual antes...

Ophis giró para mirar a Happy.

—... Estás en lo correcto. Esos pequeños orbes son nuestro objetivo—el dragón hizo una pausa—... Mi alma—añadió Ophis.

«... ¡¿Qué dijo?!.. »

—... en realidad, un pequeño fragmento de ella...

Natsu y Happy tenían un gesto de confusión y sorpresa.

—¿Pero cómo es que...

—... Hace 20 milenios, cuando me derrotaron, no lograron matarme... así que me sellaron...—continuó Ophis—... Dividieron mi alma en muchas partes y las esparcieron por el mundo. Y con ella, mis poderes también se dividieron…

—¿Quiénes?—ambos le preguntaron—¿Quiénes te hicieron eso?

—... Los dioses. La alianza...

«... ¿Dioses?, ¿Alianza?... ¡No entiendo nada!... » Natsu pensó.

—... Al privarme de mi alma, también perdí la capacidad de emplear mis poderes a plena potencia, quedando confinada a esta forma débil que ves...—dijo Ophis, mostrando su desprecio por su forma humana.

—¿Y el orbe blanco qué?—preguntó Natsu—Esa cosa te lastima siempre que te le acercas… Si de verdad es tuyo, ¿entonces por qué daña?—insistió con desconfianza.

Natsu no comprendía porqué el orbe debilitaba tanto a Ophis si se suponía que en realidad era suyo...

—... El orbe encierra el fragmento aislando el fragmento de mi alma del exterior, es sólo es una envoltura—explicó Ophis—Fue maldecido de tal manera que ningún ser sea capaz de tocarlo sin destruirse, con excepción de quien lo maldijo y otros pocos seres poderosos... La maldición de la envoltura hace que de solo acercarme a él me debilite. De esta manera, previnieron que yo o cualquier otro pudiera apoderarse del poder que encierran… pero al parecer Raxhel consiguió extraer un poco…—Ophis mencionó esto último con preocupación disimulada.

—... Oh, ya veo...—dijo Natsu con algo de lástima.

—¡Pero ahora vamos a recuperarlos!—Ophis apretó el puño con gran orgullo—... Ahí es donde entras tú, Dragneel—Ophis alzó la voz.

—¿Yo?

—¡Si! ... Mis enemigos jamás habrían imaginado que algún día sería creada una abominación como tú...

Natsu se enfureció y apretó los dientes. Happy se confundió y se asustó.

«... ¡¿Abominación?!... »

—... un ser que reúne 3 naturalezas diferentes en su interior... dragón, demonio y humano. Un no-ser. En pocas palabras: Eres una cosa tan extraña y anormal que no es afectada por la maldición y por lo tanto puedes abrir los orbes sin lastimarte…—dijo Ophis.

—¡Yo no soy un demonio! ¡Soy humano! ¡HU-MA-NO!—le gritó Natsu.

«... Natsu...» Happy pensó preocupado.

Ophis ignoró por completo sus protestas y se le acercó en forma amenazante:

—... Dicho esto, creo que sólo nos queda una cosa que resolver...

¡PUNCH!

¡Bluagh!—Natsu escupió baba. Ophis lo golpeó en el estómago de sorpresa, derribándolo al suelo.

—¡¿Por qué hiciste eso?!—Happy protestó.

Haciendo caso omiso, Ophis ahora le pisó el pecho cuando estaba en el suelo...

¡UNGH!

—... No soporto tu imprudencia—dijo Ophis de forma oscura—... lo que hiciste hoy. Arruinaste la incursión y la hiciste más difícil de lo que debió ser...

—¡Ya suéltalo!—Happy intentó detenerla—¡Arh!

Ophis lo apartó con un golpe y volvió a centrarse en Natsu.

—¡Ufff!—Ophis lo volvió a pegarle, esta vez en la cara, comenzando una salvaje golpiza sin que éste pudiese evitarlo. Natsu intentaba patalear y revolcarse para soltarse, pero la fuerza de Ophis era mayor. Una situación muy humillante.

«... ¡Maldición!... Está pasando de nuevo... »

—¡Ya basta! ¡Detente!—Happy chilló.

El dragón desoyó y siguió propinando el castigo. Azotó la cara de Natsu una y otra vez, imponiendo lo que ella consideraba como "respeto"... Una vez hubo terminado, hizo brotar su sable de luz de ambos dedos...

—LO JURO... que si no te necesitara, te haría añicos—amenazó Ophis, apuntando su espada de luz al cuello de Natsu—... Esperaba mucho más de tí Dragneel. Eres una maldita decepción. No quiero volver a tener que repetirlo. ¡Mis órdenes son absolutas!...

Ophis finalmente lo dejó en paz y se dio vuelta...

—¡Natsu!—Happy corrió a verlo.

El joven permaneció tirado en el suelo. Su rostro estaba hinchado y amoratado por los golpes. Lucía algo aturdido y apunto de perder el conocimiento…

... aaahjjj…—Natsu emitió un gemido ahogado.

—¡Natsu hablame! ¡No te duermas!—Happy se preocupó al verlo a punto de desmayarse—¡Te excediste!—Happy protestó contra Ophis.

—Estará bien—minimizó Ophis—Lo necesito. No lo mataría.

—¡Sus ojos!—dijo Happy.

Los globos oculares de Natsu se tiñeron de un color púrpura que no era por la sangre y cayó en un profundo sueño... Happy recordó haberlo visto antes así y súbitamente miró al cielo...

«... La luna... »

La luna, en cuarto creciente, estaba teñida de color morado en toda su superficie visible. Ophis también observó.

—Curiosa reacción—comentó el dragón—Le pasó lo mismo a la mocosa de la tierra…

Happy le lanzó una mirada acusatoria a Ophis:

—¡Eres tú! ¡Todo el tiempo fuiste tú! ¡Tú haces que la luna cambie de color!

El dragón no prestó atención a sus palabras y asumió voz de manos una vez más:

—Gato—se dirigió a Happy en forma impositiva—sirve de algo y cárgalo para poder irnos.

—¿Irnos ahora?—preguntó Happy confundido—¡Pero Natsu está...

—Estará BIEN—recalcó Ophis—No tenemos tiempo que perder.

«... ¡Hoy, mi regreso comienza!... ¡Usándolos a ustedes 2, volveré a ser el dragón más poderoso de todos!... »

...

—•○•—

¡Gracias por leer hasta aquí y no olvides dejar tu review!

NOTAS DEL CAP

¡Buenos días a todos y bienvenidos!

Creo que ya pasó un tiempo pertinente para que todos los lectores se pongan al corriente con el primer volúmen, de manera que hoy empiezo la publicación semanal de los capítulos del segundo volúmen. Gracias a todos los que dejaron sus reviews y comentarios en el libro anterior ¡Los leo todos!

¿Qué les pareció el primer capítulo del segundo volumen? Siento mucho si le di demasiado protagonismo a Ophis, pero creí necesario sentar sus bases y mostrar su objetivo de una vez, después de tantas insinuaciones que hice y así poder entrar a los viajes y batallas que tendrá Natsu a lo largo de su año con ella y al mismo tiempo no descuidar lo que pasa en Magnolia ¡Como siempre, estoy abierto a sus comentarios y opiniones!

Gracias a todos por su lealtad y un afectuoso saludo a todos