Un día antes de regresar a Hogwarts, Hermione dejó solos a Lucius y Narcissa.

Su excusa ir por unas plumas al Diagón, pero en realidad iba a La Madriguera.

Estaba ansiosa por ver a los gemelos bebés.

Así que Milly y ella entraron al Diagón.

De ahí a la tienda de bebés.

Después de elegir varios conjuntos salió de la tienda con una sonrisa.

.- Extraña elección de tienda para usted, Señorita Malfoy.

Hermione se sobresaltó y dejó caer la caja de regalo.- Si... Sirius.- se agachó y ambos se golpearon en la frente.

.- Oww.- Sirius se llevó una mano a la frente sobando.el área.

.- ¿Que intentabas hacer?.- Hermione también sobaba su frente.

.- Levantar ese paquete.

.- ¿Porqué?

Sirius la miró unos segundos en los cuales analizaba porqué lo había hecho.

.- ¿Ama?.- Milly la llamó.

.- Si, ya debemos irnos.

Sirius se levantó y le ofreció su mano para ayudarla a levantarse.

.- Estoy bien.

.- Maldita sea, ¿ni siquiera puedes tolerar tocarme?

Hermione frunció el ceño.- mas bien me pregunto ¿porque quieres hacerlo? ¿No solías odiarme?

Sirius apretó la mandíbula.

.- ¿Sabes? Olvidemos este asunto, hagamos como si nunca nos hubiéramos visto.- Hermione se giró y Sirius la tomó de la mano.

Hermione lo miró confundida.

.- Si tan solo no fueras Slytherin ni una Malfoy...

Hermione abrió la boca para responderle.

.- ¡Sirius!.- James estaba furioso.

.- ¿Prongs?

.- ¿Que haces con ella?.- James apretaba las manos.

.- Nada, solo nos topamos y dejó caer ese regalo.

Hermione observó las reacciones de James. Parecía enfadado, pero ¿Porqué?

.- Vamos a la Tienda de Quidditch.- Sirius dijo jovial.

.- Papá me ha quitado la mesada, lo sabes ¿No?

Sirius le guiñó un ojo.- Y tu sabes que yo tengo.

James negó.- si mamá nos vé llegando con un nuevo juego de pelotas nos castigará lo que resta del año.

Hermione se giró para irse cuando vió a Tom Riddle charlando con un Mago extraño.

Se giró hacia los chicos y los tomó de los brazos.- por favor siganme la corriente.- susurró.

.- ¿Qué?

.- Por favor, por favor, caminen junto a mi.- la voz de Hermione sonaba casi estrangulada.

Sirius y James se miraron y asintieron.- ¿Y que ganaremos haciendo este favor?

Hermione suspiró.- No decirle a la Señora Potter que fueron ustedes lo de la bromita de Febrero.

.- Oye, ¿Cómo sabes eso?

Hermione rió.- No lo sabía, lo acaban de confirmar.

.- Ohh, Slytherin tenías que ser.

Llegaron ante la tienda de Quidditch y Hermione sacó 4 galeones.- gracias por el favor.

.- Hey, por lo menos valía 10.- James protestó.

Hermione tomó la mano de Milly y desaparecieron.

.- Wow, no sabía que aquí había un punto de aparición.- James se rascó la nuca.

.- Vamos a gastar nuestros 4 galeones.- Sirius sonrió.

.- ¿Petardos?

.- Hecho.- Sirius pasó su brazo por los hombros de James.

Caminaron a Zonko.

Tom tenía la mirada entrecerrada. Aquella chiquilla siempre se le escapaba como agua en las manos.

Chasqueó la lengua, debía ir a la Mansión de los Lestrange.

Torció la boca. Ver a Bellatrix siempre le causaba escalofrío.