Capítulo 57

POV de Dante

-¿Qué?

No podía ser cierto, esto no podía estar pasando. Se suponía que no debía ser así. Se suponía que esto sería diferente. ¿Por qué tiene que ser un caos?

-Ya me has oído. ¿Quién de los dos nos ha vendido?

Lok seguía intentando alejarse de mí, pero le era difícil moverse para alejarse de la mesa. Se apoyaba en ella para mantener el equilibrio, temblaba levemente y volvía a tener dificultades para respirar. Tenía que sacarle de aquí antes de que sufriera otro ataque. Tuve que tragar varias veces para intentar eliminar la sequedad de mi boca y mi garganta. No funcionó.

-No sé qué crees que está pasando, pero no es lo que piensas.

-Os pensáis que no me entero de nada. Siempre me subestimáis. ¿Tan tontos os creéis que somos Sophie y yo, qué no nos daríamos cuenta?

-Lok, te dije que te protegería de la Organización. Puedes confiar en mí.

-Ambos sabemos que eso no es cierto- Eso había dolido, y mucho.

-Te prometo que cuando terminemos esta misión os lo explicaré todo, pero ahora no es el momento. Tenemos que irnos. Puede que no confíes en mí, pero sabes que no quiero que la Organización gane. Nadie del equipo quiere eso.

Lok me miraba desconfiado y asustado. Tenía que reconocer que Lok tenía motivos para desconfiar de mí. Yo tenía el mapa en la tumba, yo los conduje hacía la trampa y fui yo quien entregó el cetro. Zhalia y yo habíamos intentado disimular, pero era obvio que solo habíamos conseguido perecer sospechosos. Les mentimos y les ocultamos información. Yo dividí al equipo y conduje a Lok a un laboratorio que "casualmente" tenía una jaula destinada para él en medio de la sala. Parecía que los planetas y los astros se habían alineado para que todo fuera mal, y ahora tenía otro problema. Tenía que sacar a Lok del laboratorio para evitar que le diera otro ataque de pánico, pero eso requería que confiara en mí, y yo solito le había perdido. Si hubiera sido sincero con los chicos sobre lo que estaba pasando, podría haberme ahorrado muchos problemas, pero quería evitar que sufrieran emocionalmente para esta misión, como estaba sufriendo yo.

-Quería protegeros y he metido la pata hasta el fondo, y ahora… no sé qué hacer. Zhalia y yo os lo contaremos todo, pero marchémonos de aquí, recuperemos el cetro y ayúdame a protegerte, a que esto- Señale la jaula-no suceda. Porque, te prometo, que haré lo que esté en mi poder para evitar que suceda.

Le tendí la mano. Lok la miró, luego a mí, a la jaula y de vuelta a mí, aún dudaba y desconfiaba, pero tras estudiarme un poco, creo que supo que no mentía. Aunque puede que después de volver a casa, Lok se marché y no vuelva, pero por lo menos me dejó ayudarle a salir de este manicomio.

Lok agarró mi mano y tiré de él hacia mí sin que se lo esperara. Lo volví a abrazar, y aunque al principio se resistió, al final sus emociones ganaron a su orgullo y aceptó el abrazo.

-Esto no cambia nada- No pude evitar sonreír.

-Lo sé.

-Si me vendes, te prometo que te lo hará pagar muy caro. Y soy capaz.

-Lo sé, acabas de atravesar una mesa de metal, creo que me hago una idea de lo que eres capaz de hacer

POV de Dante end


Tercera persona

Sin que Dante, ni Lok lo supieran, un pequeño bicho robótico, creado por las manos de Claus como seguridad, había mandado una alerta de intrusos al puesto de guardia de la guarida, donde dos agentes fueron alertados de su posición.

-El sensor del laboratorio se ha encendido. ¡Vamos!

Los dos agentes se levantaron de sus puestos y corrieron hacía la posición de los miembros masculinos del equipo.

Tercera persona end


POV de Lok

Dante había conseguido calmarme lo suficiente, aunque ahora apenas confiaba en él y tenía muchas cosas nuevas en las que pensar. Pero Dante tenía razón, teníamos que salir de aquí y recuperar el Cetro, mi vida y la existencia de la Fundación Huntik dependía de ello. Después de haber recuperado el Cetro tendría tiempo para destrozarme la cabeza con todo lo que había pasado, la jaula y la máquina, que me da miedo averiguar que hace, el ataque de pánico y la revelación de Dante. Me sentía mareado y me daba dolor de cabeza la sola idea de tener que pensar en nada.

Aún estaba un poco alterado por lo que había pasado, mis emociones estaban desbordadas y por mucho que lo odiara, Dante era un gran consuelo, me hacía sentir seguro y no quería que me soltara o se alejara de mí. Pero teníamos que movernos y salir de este laboratorio de locos.

Dante me soltó lentamente, me quedé como una estatua con la esperanza de que todo dejará de dar vueltas. Algo en la mesa en la que había estado apoyado, y que había sido víctima de mis garras, había llamado la atención de Dante. Cogió un papel marrón, parecía un pergamino bastante antiguo, y lo leyó con una sonrisa.

-Parece que hemos encontrado un nuevo poder. Nos será muy útil.

Nos disponíamos a salir cuando las puertas del laboratorio se abrieron y entraron dos agentes, uno de ellos nos miró directamente a nosotros, mientras el otro se dedicó a mirar el laboratorio.

-Fundación Huntik. ¡Cógelos, detenlos! ¡Enforcet!

Después de admirar el laboratorio, el segundo agente se puso al día con su compañero e invocó a Bonelasher. Parecían contentos, por lo menos el agente que nos miraba, probablemente porque sabían que tenían la ventaja. Dante los miró sin inmutarse, levantó las dos manos y lanzó un poder extraño, "Pegamento para detener", hacia los dos titanes. Una mucosidad rojo-pastel los cubrió de arriba abajo impidiéndoles moverse.

Dante no quiso darles opciones, corrió hacía el agente más grande, se tiró al suelo y le barrio las piernas. El agente cayó hacia atrás, golpeándose la cabeza contra el suelo, quedando inconsciente y con un buen golpe. No me gustó que Dante se alejara de mí, me sentía vulnerable y débil, y odiaba sentirme de esa forma tan patética. El otro agente aprovechó que Dante estaba ocupado para atacarme. Utilizó un poder para moverse a gran velocidad y poder golpearme desde todas direcciones. Me cubrí con los brazos para protegerme. Me quedé desconcertado al principio por todo lo que estaba pasando, no se me ocurría cómo defenderme, pero me di cuenta de que no tenía que hacer nada, solo tenía que dejarlo salir, y como él estaba tocándome, todo el trabajo lo hacía él. Así que, dejé que la electricidad fluyera y el agente salió volando hasta quedar cerca de su compañero, también inconsciente y un poco humeante.

Durante unos instantes conseguí abstraerme de todo. No pude evitar preguntarme, si lo que acababa de hacer era un poder, o sigue siendo descontrol de mis poderes, quiero decir…, ni Dante ni Sophie hacen eso, no al menos que yo haya visto. Y también me pregunté, cómo era posible que Dante hubiera podido usar un poder, únicamente con leerlo, y, además, no siendo de su naturaleza.

-Marchémonos cuanto antes.

Miré a Dante algo desconcertado, no me había dado cuenta de que se había acercado. Tuve que volver a la cruel y angustiosa realidad. Asentí levemente, ya que no confiaba en poder hablar, e intenté recomponerme, no soportaba que Dante me mirara con lástima.

POV de Lok end


Tercera persona

En la planta más profunda de la guardia, que servía de almacén para todos los artículos mágicos que Claus había recolectado (robado) a lo largo de los años.

Claus caminaba de un lado a otro algo angustiado. La última vez que su hija le había contactado fue para avisarle de que Dante Vale buscaba la Botella del Genio. Un artilugio que había robado hacía muchos años en un pueblo de Arabia. Se suponía que contenía un poderoso ser en su interior, pero después de numerosos estudios, Claus descubrió que no contenía nada desde hacía muchos años. Fue algo trágico que tuviera que deshacerse de su dueño original para no obtener nada.

El mensaje lo había recibido hacía casi 12 horas y lo último que supo fue que un avión de la Fundación había sido detectado e interceptado por sus agentes. Sabía que lo habían intentado derribar, pero no había tenido más noticias, ni de sus agentes, ni de Zhalia.

Muy nervioso y enfadado activó un botón del suelo para que se levantara el panel de control de los contenedores de sus artilugios. Tecleó un código para tener acceso a otro panel con un mecanismo mágico de activación. En sus años de agente de la Organización había aprendido que toda seguridad era poca cuando estabas rodeado de necios que solo querían ascender de manera rápida y fácil, y que a su jefe y sus subordinados les encantaba ponerle la mano encima a todos sus inventos y descubrimientos por sus ansias de control y poder.

En el panel mágico había dos huecos con forma de cuencas oculares, uno de los ojos ya estaba en su sitio, sacó la pareja de un bolsillo interno de su chaleco y lo colocó en la cuenca vacía. Ambos ojos brillaron en amarillo y el suelo de la habitación se movió para recolocar las torres de compartimentos. Cada compartimento tenía un cierre de cilindros parecidos a los de las cajas fuertes, y cada una de las más de cien, tenían una contraseña diferente. Abrió la correspondiente con la Botella del Genio y el Cetro de Nefertiti, sacó la Botella y la sostuvo con desinterés.

-No entiendo por qué Dante Vale busca esto. Pero sí es importante para la Fundación, no dejaré que lo consiga.

Tercera persona end


POV de Dante

Por fin estaba centrado, el incidente del laboratorio me había sentado como…, un jarro de agua fría no se acerca para nada a lo que sentí, fue más un puñetazo en el estómago, de esos que te dejan sin aire. Lok no estaba bien y cuanto más tiempo pasáramos en la guarida de Claus, peor sería. Antes ya era malo estar aquí, porque creíamos que, si atrapaban a Lok, lo entregarían el profesor, pero ahora, no tengo tan claro que lo entregue, es más, creo que el Profesor es el menor de nuestros problemas. No me había dado cuenta hasta ahora, y creo que nadie, ni siquiera el propio Profesor, se había dado cuenta, pero Claus es mucho más peligroso que el mismísimo líder de la Organización.

Una vez centrado, encontrar el camino hasta nuestro objetivo fue muy fácil. Bajamos una de las escaleras metálicas, las únicas que tenían dos agentes vigilando al final de estas. Nos daban la espalda y parecían bastante aburridos. Supongo que es nuestro deber entretenerlos, pero Lok no estaba bien, por mucho que intentara ocultarlo era obvio que aún no se había recuperado y no puedo culparlo, el descubrimiento que habíamos hecho era aterrador y muy espeluznante. Una pelea cuerpo a cuerpo, no era una opción, Lok no era capaz en estos momentos y, además, una pelea alertaría a Claus y al estar en medio de la pelea tendría toda la ventaja, y quería que la sorpresa se la llevara él.

-¿Se te ocurre algo que podamos hacer para distraerlos?

Lok me miró detenidamente, me sentía estudiado y me hacía sentir incómodo. No dijo nada, solo sacó unas pelotas de goma de uno de los bolsillos de su cinturón y señaló con la cabeza a los agentes. Sonreí ante la idea que se le había ocurrido, luego me pregunté por qué tenía pelotas de goma en el bolsillo, pero no iba a cuestionarlo, al menos no ahora, no era el momento. Ultimamos algunos detalles y nos pusimos en posición. Le lance una de las pelotas a la cabeza de uno de los agentes, y todo funcionó perfectamente.

Con la primera solo se enfadó con su compañero, echándole la culpa, pero nada más. Luego, le lanzamos otra al otro agente, y ambos se enfadaron y empezaron a discutir, captando la atención de Claus, se alejó muy enfadado de su archivo principal, dejando al descubierto el Cetro, para ver lo que pasa con su escolta. Los agentes miraron por las escaleras y vieron a Springer con otra pelota, que lanzó dándole en la frente a Claus.

Lok y yo nos miramos sorprendidos desde nuestro escondite, eso no estaba planeado, pero ahora los dos estábamos aguantando la risa para no hacer ruido. Obviamente Springer lo había hecho adrede, y yo había hecho para Lok, para animarle un poco, y ¿qué mejor forma de animar a alguien que dejándole una marca roja en medio de la frente que a su enemigo?

Los agentes se quedaron blancos y petrificados. Claus tardó unos minutos en procesar lo que había pasado, pero cuando lo hizo, su piel blanca-verdosa se puso roja de ira y empezó a gritar órdenes y unas cuantas maldiciones que me hubiera gustado que ninguno tuviera que escuchar. Ahora entiendo de dónde las sacaba Zhalia. Ordenó a los agentes que fueran tras Springer y que lo atraparan. Y Springer salió corriendo por todas las escaleras con los agentes detrás de él, que pena que los agentes no supieran que al final de las escaleras les esperaba una trampa con "Pegamento para detener".

Lok empezaba a estar mejor, y, creo, que todo es gracias a su amigo peludito. Claus estaba muy enfadado, se aferraba a la Botella del Genio con mucho empeño. Le ordené a Lok ir a buscar a las chicas mientras yo me enfrentaba a Claus. No quería que Lok tuviera que estar cerca de él, además, por culpa del Zombie, tenía un miembro de equipo corrupto y a otro aterrado. Se podría decir que era un asunto personal y quería hacerle entender a Claus que no debía meterse con mi equipo. Claus estaba tan concentrado en la Botella que no se dio cuenta de que me acercaba por su espalda. Me subí a una de las mesas y me preparé para darle un susto que jamás olvidaría.

-La Fundación Huntik nunca me encontrará.

-Lamento decepcionarte.-Me sentí muy satisfecho al conseguir lo que pretendía. La cara de Claus cuando se giró no tuvo precio.

-¡Dante Vale! No sé por qué quieres conseguir la Botella del Genio, pero ¡yo lo impediré! ¡Sal Brahe!

Me hacía gracia que Claus pensara que me pillaba desprevenido, era muy claro, para mí, que Claus iba a usar a su mejor tintan para proteger nuestro objetivo, aunque no fuera el que él esperaba. Invoqué a Metagolem para que los dos golem pelearan. Puede que hubiera anticipado la aparición de Brahe, pero no esperaba que le ayudará.

Claus sonrió antes de golpear a su titán con un potenciador, uso un poder llamado "Modo Golpeo", que recorrió el cuerpo de Brahe. Sus runas se tiñeron de un rojo muy intenso, y en segundos se deshizo de Metagolem. Le dio un puñetazo que hizo que cruzara la sala por los aires y golpeara la pared. Pero Metagolem es más rápido y ágil de lo que parece, y desde luego lo es más que Brahe, por lo que se levantó rápido y esquivo el placaje, y fue Brahe quien acabó en el suelo. Vi una oportunidad y la aproveche, corrí hacia el titán caído y lo inmovilice con "Pegamento para detener". Le estaba cogiendo mucho gusto a este poder.

-"Modo Golpeo", eh. Buen truco. Pero una vez que se le acaba el poder, no puede hacer mucho.

Claus no estaba contento, pero no lo podía considerar una amenaza con la marca circular roja en la frente del pelotazo que le había dado Springer. Lleno de rabia sacó el amuleto de otro titán e invocó a Ammit Traga-Corazones. El cocodrilo intentó darme un mordisco, pero salté por encima de él y dejé que Metagolem se ocupara de él, yo quería ocuparme de una vez por todas de Claus.

No dudé ni por un segundo, y ese fue mi error, no pensé con claridad sobre mi enemigo. Simplemente pensaba en vengarme, en que si lo derrotaba todos los problemas desaparecerían. En el momento en que tuve al alcance a Claus le di una patada, pero el único que salió perjudicado fui yo. En cuanto mi pie impactó contra "Claus", se hizo visible una especie de red anaranjada que estaba en constante movimiento. Caí al suelo y me aferre a mi pierna, sentía un lo que creí que era un ardor insoportable, ya que como mi poder es el fuego, no es que haya sentido alguna vez ardor o una quemadura, ¿era así como se sentía mi poder? Esperaba que no, porque si no habría sido muy doloroso para mis enemigos.

-Lo llamo "Último borde". Es un cable que se envuelve a mi alrededor- Cuando me fije mejor pude ver una especie de insectos formado la red.- Muy eficaz, ¿verdad?

-Sí, lo has hecho de una trampa giratoria peruana.- Me puse nervioso cuando mi visión se nublo, y los bordes se oscurecieron.

-El veneno es cosa mía. Lo sentirás muy pronto.

Use "Eternal Flame" para curarme la pierna, pero la visión no volvió. Me levanté lentamente y tambaleándose, aunque mi poder había eliminado el dolor, mi pierna se sentía inestable, y ante la falta de mi visión no es que pudiera hacer mucho. Oí a Claus maldecir de repente.

-¿Cuándo has invocado a esta cosa?

Yo no había invocado a más titanes, por lo que mi equipo debía de haber llegado ya.

POV de Dante end


Unos minutos antes

POV de Lok

Encontré a las chicas corriendo por uno de los pasillos. Nada más acercarme agarré la mano de Sophie y la alejé de Zhalia, mientras la miraba fijamente. Todos captaron el mensaje en seguida, Sophie se quedó a mi lado sin soltarme la mano, y Cherit se subió a mi hombro. Zhalia me miró herida, y dio un paso hacia atrás. Me sentía mal por hacerla sentir así, pero aún no sabía quién era el peligro, ¿Zhalia?, ¿Dante?, ¿ambos? Hasta que no tuviera una respuesta no iba a arriesgarme.

-Lok, hemos encontrado información…

Intenté relajar la mirada, respiré profundo e intenté mostrar una postura y expresión más relajada, aunque por dentro estaba a punto de sufrir un colapso mental, pero sabía que no era el lugar. Ya tendría tiempo de sufrirlo cuando todo hubiera terminado. Miré a Sophie, se veía claramente que estaba preocupada por mí, al igual que Cherit, e incluso Zhalia. Estaba seguro de que no debía verme muy bien, pero llevaba luchando por no cambiar desde hacía mucho rato, y es agotador cuando todo tu cuerpo y tus instintos te dicen que te escondas y luchas para permanecer de pie.

-Nosotros también, pero ahora Dante está luchando contra Claus, hay que ir a ayudarle.

Solo solté la mano de Sophie cuando corrimos hacia el archivo de Claus. En el trayecto varios agentes aparecieron, intentamos perderlos, pero estaba claro que esa no era una opción. Al final, Zhalia nos dijo que nos fuéramos a ayudar a Dante, una parte de mi se negaba a dejarla sola, pero otra parte solo quería estar a salvo. Fue Sophie la que tomó la decisión por mí, le ordenó a Cherit que se fuera conmigo y a mí, que fuera a ayudar a Dante. La decisión ahora era más difícil. No podía dejar a Sophie con Zhalia, ¿y si era peligrosa y la entregaba?, o ¿la dañaba?, pero…, si me equivocaba y dejaba a Zhalia sola, y le pasaba algo… Sentía que el pasillo daba vueltas, llegué a creer incluso que vomitaría ahí mismo, por suerte no fue así. Sophie me miró y me puso una mano en el hombro.

-Estaremos bien, ve a ayudar a Dante. Pronto estaremos fuera.

Miré a Zhalia. Asentí a Sophie y me marché con Cherit. Cuando llegamos al almacén la cosa se veía muy mal. Dante estaba en el suelo, y aunque se había levantado no parecía que estuviera en condiciones óptimas. Invoqué a Freelancer, y saltó delante de Claus, impidiéndole acercarse a Dante. Le lanzó un golpe, pero retiró la mano, y pude sentir a través del vínculo que eso dolía.

-¿Cuándo has invocado a esa cosa?

Claus miró hacia arriba y vio a Cherit, aproveché que estaba distraído y le golpeé en la nuca, empujándolo al suelo, pero mi agarre la pierna con algo de ardor. Por suerte fui lo suficientemente listo como para dejar que la electricidad fluyera un poco, después del aviso de Freelancer, pude tomar precauciones. Creo que fue eso lo que evitó que me quedara sin pierna y lo que empujó a Claus al suelo. Sin embargo, no parecía herido, solo molesto.

-He sido yo el que lo ha invocado

-Cachorro repelente…

-¡Dante!¿Estás bien?

-De momento sí, pero me ha segado.

-Tranquilo, yo te cubriré.

No sabía de dónde venía el valor que estaba teniendo, bueno…, si lo sabía, de una ira que podía cegarme y hacer que generará caos y destrucción, por lo que tenía que evitar que me cegarra y me hiciera perder el control. ¿Esta misión podría ser peor? Ahora tenía que enfrentarme a Claus, mientras protegía a Dante, y tenía que evitar no matar a nadie. ¿Puedo transformarme? por favor, o ¿morirme?

POV de Lok end.