Disclaimer: Twilight pertenece a Stephenie Meyer, la historia es de DaniDarlingxx, la traducción es mía con el debido permiso de la autora.
Disclaimer: Twilight is property of Stephenie Meyer, this story is from DaniDarlingxx, I'm just translating with the permission of the author.
Capítulo beteado por Yanina Barboza
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Ochenta y ocho
―¿Necesito una palabra de seguridad? ―La mano de Bella está en la manija de mi puerta, con una pierna rebotando por los nervios.
―Siempre es buena práctica tener una. ―Mi mano aterriza en su rodilla, calmándola―. Oye, no tenemos que hacer esto. No todavía, de todos modos. Solo pídemelo y te llevaré a casa y les diré que te enfermaste.
―No, está bien. Quiero hacerlo. Estoy segura de que estará bien.
Retiro mi mano de su rodilla y la deslizo debajo de su cabello en la nuca, dándole un apretón tranquilizador y acercándola para besarla.
―Te encantarán. Ellos te amarán. Esto será algo bueno. Y si no es así, te daré un pase libre para que me hagas lo que quieras más tarde.
―Como si ya no pudiera hacer eso. ―Sus ojos ruedan, una sonrisa ansiosa tirando de sus labios. Siempre es hermosa, pero el clima inusualmente cálido la tiene en este tipo de vestido largo de aspecto bohemio que estaba muy emocionada de mostrarme que tiene bolsillos. Incluso la chaqueta de mezclilla que usa es sexy, lo que la hace lucir como si perteneciera a una playa en algún lugar, con su cabello en ondas salvajes y su piel pálida rogando por el sol.
Cuando respira hondo, observo cómo su pecho sube y baja, recordando cómo se sintió debajo de mis labios esta mañana en el lavabo del baño y luego nuevamente en la ducha.
―¿Edward?
―¿Hm?
―Estás mirando fijamente.
Mis ojos saltan a los de ella, una sonrisa reprendida se extiende por mis labios.
―No puedo evitar que tengas las tetas más bonitas de toda la tierra.
Sus ojos se estrechan, un indicio del petardo que era al principio destellando en ellos.
Créeme, eso sigue ahí. Pero ahora puedo apagar esa llama con mi pene; sacarle ese fuego a folladas.
―¿Necesitamos volver a casa para que puedas calmarte? No puedo soportar que me mires así cuando intento dar una buena impresión.
No se me escapa que habló en "plural" y dijo "casa" como si viviéramos en el mismo espacio. Si bien ese puede no ser el caso todavía, muy rara vez pasamos la noche separados. Incluso con nuestros horarios tan diferentes, hacemos que funcione.
―No, me portaré bien. ―Levanto dos dedos juntos―. Palabra de explorador.
―¿Eras un explorador? ―Sus ojos se estrechan, sospechosos, especialmente cuando me alejo para abrir la puerta.
―De ninguna puta manera.
Cuando la dejo con un guiño, puedo oírla débilmente riéndose cuando rodeo el coche. Ella ya tiene la puerta del auto abierta antes de que yo llegue allí, así que con una mirada rápida para asegurarme de que no hay partes importantes de su cuerpo en el camino, juguetonamente empujo la puerta para cerrarla, espero un segundo, luego muevo mis brazos en un floreo dramático cuando llego y vuelvo a abrirle la puerta.
Bella no es el tipo de mujer que necesita o quiere caballerosidad.
―Vivimos en el siglo XXI y soy perfectamente capaz de hacer las cosas por mí misma ―me dijo. Le gustan las relaciones modernas y divididas por la mitad, aunque me niego a compartir la cuenta de la comida con ella. Ocasionalmente le permitiré que nos invite a cenar, pero solo porque eso la hace muy feliz.
Así que estoy completamente preparado para el ceño fruncido con el que ella sale del auto, el cual suavizo presionando mis labios en su frente.
―Es probable que mi madre esté mirando por la ventana en este momento. Si no abriera tu puerta, ella tendría mis bolas, y esas ya deberían estar metidas de forma segura en tu bolso.
Mirando nerviosamente hacia la casa, como un cordero al que llevan al matadero, Bella respira hondo una vez más antes de que sus grandes ojos color chocolate me miren.
―Está bien, hagamos esta mierda.
