Graduación
Los personajes no me pertenecen, son de la gran Rumiko Takahashi. Esto es sin fines de lucro solo diversión por y para los fans.
*Día 22
Historia AU
Sería una noche inolvidable, este evento marcaba un antes y un después en la vida de cualquier adolescente. Terminábamos un ciclo importante de enseñanza y dábamos paso a un prometedor pero nada fácil futuro, la adultez podía ser bastante complicada. Sin embargo, luego tendría tiempo de pensar en todo aquello ya que ahora mismo estaba a punto de salir muy elegante dispuesta a pasarlo espectacular, el detalle era que mi pareja no era quien esperaba, el sujeto vive en mi casa y ni siquiera tuvo la decencia de ser mi compañero en una fecha tan importante como esta. Prefirió ir con ella, la dueña de aquel local de pizzas japonesas, solo recordarlo me daba mucho coraje. Pese a todo, no iba amargarme en esta noche, claro que no, mi mejor amiga vendría a buscarme porque ella tampoco iba en pareja así es que a falta de hombre para eso están las buenas amigas.
De pronto entraba Nabiki y cerraba la puerta de mi alcoba interrumpiendo mis pensamientos.
—¡A dónde crees que vas con esa mierda! —exclamó viéndome de pies a cabeza.
—Hey, no seas grosera me veo bien —respondí viéndome de pies a cabeza.
—Bien para ir a un bingo, no me jodas Akane es tu graduación debes usar algo despampanante. ¡Luce esas benditas caderas! —exclamó muy animada.
—El vestido no está mal —murmuré viéndome en el espejo, quizás era largo pero bonito o ¿no?
—Mira lo que tengo aquí, esta joya no la he usado porque no he tenido oportunidad pero sé que te verás como una diosa —añadió bajando el cierre del saco en donde tenía protegido el vestido.
Mis ojos se abrieron de par en par, era hermoso, sensual y diminuto.
—¡Estás loca! Papá se infarta me ve con eso puesto.
—Qué importa, solo llorara porque su niña creció… pruébatelo —ordenó.
Lo tomé entre mis mano y lo dejé sobre la cama.
—Solo lo usaré un momento, no te creas que saldré con él ¿eh? —Nabiki sonreía como una perversa.
Retiré el vestido que llevaba puesto el cual cayó sobre mis pies, tomé la nueva prenda, un vestido muy ceñido de hombros descubiertos, corto y en color rojo pasión.
Cuando me vi en el espejo me sorprendí tanto que llevé mis manos hasta las mejillas.
—Wow… lo sabía es que mira nada más esas piernas Akane, por qué carajos quieres ocultarlas entre esos harapos.
—Es demasiado —musité por lo bajo.
Entonces Nabiki me tomó de los hombros y me obligó a verme en el espejo.
—Eres hermosa e inteligente, y vas a usarlo porque tienes la percha suficiente para lucirlo. Además imagina la cara de ese idiota cuando te vea ¿No te gustaría hacerlo retorcerse de celos? —concluyó Nabiki quien estaba sumamente ofendida con Ranma por no haberme invitado.
Volví a mirarme, mis piernas blancas y recién hidratadas por la loción se veían muy bien. Resaltaba mi cintura e incluso el busto, no era un escote pronunciado pero sí realzaba mis pechos con soltura. Me veía bien, me veía más que bien y mi hermana tenía razón.
—¡Lo haré! —exclamé decidida.
—Perfecto, iré por unos tacones que le harán juego —corrió hasta su alcoba y regresó en un minuto exacto —Usa mi coche —agregó pasándome las llaves.
—No, no, no, sabes que no tengo licencia y que…
—¡Qué importa! Sabes conducir ya te enseñé además no vas a dejar que Yuka y su padre las vaya a dejar, dile a la pecosa que tienen carro y listo.
—¿Y si bebo?
—Yo iré a buscarte, yo conduciré de regreso.
—Está bien —respondí tomando sus llaves con temor pero entusiasmada.
—Diviértete, es tu graduación que nada ni nadie arruine esta noche Akane —finalizó besando mi frente.
Y así lo hice, cuando asomé por la escala mi papá casi se fue de culo. Sacaba fotografías con lágrimas en los ojos más no dijo ni una sola palabra, Kasumi pidió que me cuidara y él, no estaba por ningún lugar al parecer ya se había ido.
Mi amiga llegó en el coche de su padre quien la dejó y se marchó, Yuka estaba asombrada de mi look…
—¡No lo puedo creer! —Exclamó una vez sentadas dentro del coche —Te ves impactante Akane —agregó.
—Gracias —contesté —Yuka abrocha el cinturón ¿quieres? —mi amiga hizo caso sabiendo que haría un acto ilegal, sin documentos era una locura pero ya qué ya estaba aquí no había vuelta atrás.
—Si nos llevan presas ¿crees que me veré bien con este maquillaje para el registro? —preguntó mi pecosa amiga poniéndome más nerviosa.
—No seas ridícula, sí te verás genial pero nadie nos llevará presas conduciré con cuidado ¿ok?
Y así emprendimos camino al salón de eventos, llegamos en veinte minutos lo cual consideré bastante bueno para ser mi primera vez.
Cuando bajamos lo primero que vi fue a Ranma quien iba muy agarrado del brazo de Ukyo, y él también me vio pues pude notarlo porque la mandíbula se le fue hasta el suelo.
Sonreí como si no me importara y caminé junto a mi amiga hacia la celebración.
La música era buena, el ambiente festivo y todos sonreían felices bebiendo sus ponches.
Varios compañeros se nos acercaron a saludar, todos halagaban mi look mientras Ukyo me veía con sorna desde la otra mesa, era el centro de atención de todo mundo incluyendo a su acompañante.
Una hora después las luces bajaron, Yuka fue invitada a bailar y aunque no quería dejarme sola, le dije que se divirtiera. Me moví entre las mesas y la gente hasta la mesa del bendito ponche, estaba dulce así es que serví un poco y bebí, fui por un segundo vaso cuando alguien detrás susurró tan cerca del oído que me estremeció la piel, no podía ser más que él, Ranma.
—No bebas tanto —dijo por lo bajo.
Quise voltear más él plantó sus manos una en cada lado de mis caderas, jamás me había tocado siquiera y eso me descolocó.
—¿Cómo pretendes que te ignore? —preguntó.
—Haz lo que quieras, yo vine a divertirme —respondí, pero entonces me volteó y nuestras frentes chocaron sutilmente.
—Estás preciosa, y sé que estás enojada conmigo por haber venido con ella…
—Estás en lo correcto, pero justo ahora tengo deseos de bailar y tú solo podrás mirar desde lejos por idiota.
—Akane
—¿Qué?
—No bailes con nadie —suplicó, lo miré de arriba abajo y enarqué una ceja.
—Solo mírame —respondí yéndome.
Tan solo un minuto después tenía no a uno a tres sujetos bailando a mí alrededor. Y me divertí mucho haciéndolo viendo su cara de estreñido por haber elegido mal.
Después de todo no le daría el gusto en tan especial noche, era mi noche y con o sin él me divertiría a lo grande en mi graduación.
Nota del autor
Estimado lector, una graduación diferente sin duda alguna. Esta vez le tocó mirar y desearla desde lejos, porque eligió mal. Lo importante es que Akane lo pasaría divinamente incluso sin él. Actitud de campeona.
Una vez más, gracias por sus asiduas lecturas.
Sweetsimphony._
