Por todas partes reinaba una oscuridad tan penetrante que logró hacerla
temblar profundamente. Hermione trató de moverse desesperada, aspirando
lo que pudiera del oxigeno, que se le escapaba rápidamente.
-Está pasando de nuevo....Dios.....está empezando de nuevo- Poco a poco, las tinieblas dominaron su vista. Una sensación parecida al horror la invadió de pies a cabeza, trepando por su cuerpo como una serpiente. Ella no podÃa saber si estaba soñando despierta o si aquello era real esta vez; lo único que podÃa comprender a esas alturas era que él no estaba cerca; y entonces; con los últimos vestigios de conciencia, inició una oración para protegerlo, donde quiera que estuviese.
Draco se movÃa por una dimensión de ensueño que le era bastante conocida. Sintió al ente persiguiéndolo, pero aquello sólo le dio el alivio de saber que no estarÃa acechando a su compañera. De repente, se detuvo en seco; con la mirada dilatada de miedo. Aquella presencia demonÃaca ya no lo estaba buscando a él; y eso sólo podÃa significar que habÃa localizado a su objetivo: Hermione.
-Draco- Suspiró ella con el último aliento que consiguió, antes de perder completamente el conocimiento. Pero aquel levÃsimo murmullo, desde el otro lado de la escuela, fue escuchado por su receptor como un grito de ayuda. Malfoy supo entonces, entre las tinieblas, hacia donde dirigirse. El jamás habÃa rezado; no creÃa en la existencia de Dios; sin embargo, en ese momento, en que todo lo que alcanzaban a ver sus ojos era negrura y vacÃo, imploró la ayuda de algún ser lo suficientemente poderoso para darle la luz que necesitaba. No bien hubo pronunciado la petición, lleno de ansiedad y temor, cuando alcanzó a vislumbrar una tenue chispa de luz rosada. Aferrándose a esa única esperanza corrió hacia ella, sintiendo a medida que avanzaba, el ambiente hostil de sus otras visiones.
Por fin pudo verla, y lo que vio le heló la sangre en las venas. Hermione estaba tendida en el suelo, blanca como un fantasma, y sobre ella, flotaba una sombra amorfa de color gris. Draco buscó su varita aterrorizado, tratando de mantener la sangre frÃa necesaria para conjurar cualquier hechizo.
Antes de que pudiera recordar alguna palabra, una luz venida de algún lugar, dio de lleno contra la sombra, hiriéndola lo suficiente para debilitarla y obligarla a retirarse. Draco no se puso a pensar que habrÃa sido aquello, sino que corrió hasta Granger para ver cómo se encontraba.
Entonces palideció como nunca en su vida.
Hermione no respiraba.
N/A: Holas!!!!!!
Lo siento; tardé muchisisimo; además está muy cortito; pero es que de repente se me ocurrió darle otro giro y apenas lo estoy imaginando.
En fin, espero que les haya gustado. Creo que tendrán una que otra pregunta.
¡¡¡Nos vemos!!! Esta vez espero que más pronto ^.^
-Está pasando de nuevo....Dios.....está empezando de nuevo- Poco a poco, las tinieblas dominaron su vista. Una sensación parecida al horror la invadió de pies a cabeza, trepando por su cuerpo como una serpiente. Ella no podÃa saber si estaba soñando despierta o si aquello era real esta vez; lo único que podÃa comprender a esas alturas era que él no estaba cerca; y entonces; con los últimos vestigios de conciencia, inició una oración para protegerlo, donde quiera que estuviese.
Draco se movÃa por una dimensión de ensueño que le era bastante conocida. Sintió al ente persiguiéndolo, pero aquello sólo le dio el alivio de saber que no estarÃa acechando a su compañera. De repente, se detuvo en seco; con la mirada dilatada de miedo. Aquella presencia demonÃaca ya no lo estaba buscando a él; y eso sólo podÃa significar que habÃa localizado a su objetivo: Hermione.
-Draco- Suspiró ella con el último aliento que consiguió, antes de perder completamente el conocimiento. Pero aquel levÃsimo murmullo, desde el otro lado de la escuela, fue escuchado por su receptor como un grito de ayuda. Malfoy supo entonces, entre las tinieblas, hacia donde dirigirse. El jamás habÃa rezado; no creÃa en la existencia de Dios; sin embargo, en ese momento, en que todo lo que alcanzaban a ver sus ojos era negrura y vacÃo, imploró la ayuda de algún ser lo suficientemente poderoso para darle la luz que necesitaba. No bien hubo pronunciado la petición, lleno de ansiedad y temor, cuando alcanzó a vislumbrar una tenue chispa de luz rosada. Aferrándose a esa única esperanza corrió hacia ella, sintiendo a medida que avanzaba, el ambiente hostil de sus otras visiones.
Por fin pudo verla, y lo que vio le heló la sangre en las venas. Hermione estaba tendida en el suelo, blanca como un fantasma, y sobre ella, flotaba una sombra amorfa de color gris. Draco buscó su varita aterrorizado, tratando de mantener la sangre frÃa necesaria para conjurar cualquier hechizo.
Antes de que pudiera recordar alguna palabra, una luz venida de algún lugar, dio de lleno contra la sombra, hiriéndola lo suficiente para debilitarla y obligarla a retirarse. Draco no se puso a pensar que habrÃa sido aquello, sino que corrió hasta Granger para ver cómo se encontraba.
Entonces palideció como nunca en su vida.
Hermione no respiraba.
N/A: Holas!!!!!!
Lo siento; tardé muchisisimo; además está muy cortito; pero es que de repente se me ocurrió darle otro giro y apenas lo estoy imaginando.
En fin, espero que les haya gustado. Creo que tendrán una que otra pregunta.
¡¡¡Nos vemos!!! Esta vez espero que más pronto ^.^
