Sé que dije que lo iba a poner antes pero... tengo una semanita llena de exámenes... y digamos que mis notas caen en picado y... eso significa que si no estudio adiós ordenador, y si adiós ordenador, adiós fics...

Muchas gracias por los reviews que me habéis escrito (los no sobornados) (no te pikes maika, que sabes que lo digo de coña), suben mucho mi moral (jeje... yo que vosotros no escribía más no vaya a ser que me lo termine creyendo) (olvidad el comentario anterior, escribid reviews!). Me pondría a responder uno a uno a los reviews pero... no hay ganas.

Me ha hecho mucha gracia que algunos en sus reviews dicen a Ginny "mujer fatal". Para hacer una aclaración, he puesto a Ginny así porque es la fama que tengo yo donde vivo (gracias a la-zorra-que-no-me-da-la-gana-nombrar- porque-su-nombre-me-da-asco, con todos los respetos al Señor Tenebroso), y en realidad nadie sabe como soy en verdad ni lo que pienso ni la razón por la que me comporto así, como le pasa a Ginny. Cuando Santi leyó la historia dijo que era una especie de autobiografía... si quitamos que llevo por un tío 14 días y no 14 años, no me acuesto con nadie (ejem, a ver que dicen de eso tus musas, pirra), no le he dado la espalda a mi familia y amigos, ningún tío me quiere tanto como Harry a Ginny (lo hará R algún día?) y ni me voy a casar en un mes...

Bueno, ya, hablando del fic... este será al 97% el último capítulo, no creo que escriba otro, aunque quizá haga como "Jo", y escribo un último capítulo donde voy explicando uno a uno lo que le pasa a cada personaje...

Ya, no os hago esperar más... el último capítulo, en el que pongo la canción al principio:

SIN TI NO SOY NADA

Sin ti no soy nada, Una gota de lluvia mojando mi cara, Mi mundo es pequeño, Y mi corazón pedacitos de hielo.

Solía pensar que el amor no es real, Una ilusión que siempre se acaba, Ahora sin ti no soy nada.

Sin ti niña mala, Sin ti niña triste Que abraza su almohada. Tirada en la cama Mirando la tele Y no viendo nada.

Amar por amar Y romper a llorar, En lo más cierto Y profundo del alma, Sin ti no soy nada...

Los días que pasan, Las luces del alba, Mi alma, mi cuerpo mi voz, No sirven de nada. Porque yo... Sin ti ni soy nada, Sin ti ni soy nada, Sin ti no soy nada.

Me siento tan rara Las noches de juerga Se vuelven amarga., Me río sin ganas Con una sonrisa Pintada en la cara.

Soy solo un actor Que olvidó su guión, Al fin y al cabo Son solo palabras Que no dicen nada.

Los días que pasan, Las luces del alba, Mi alma, mi cuerpo, mi voz, No sirven de nada. Qué no daría yo, Por ver tu mirada, Por siempre como siempre los dos, Mientras todo cambia. Por que yo... Sin ti no soy nada, Sin ti no soy nada, Sin ti no soy nada.

Los días que pasan, Las luces del alba, Mi alma, mi cuerpo, mi voz, No sirven de nada. Qué no daría yo, Por tener tu mirada, Por ser como siempre los dos, Mientras todo cambia. Porque yo... Sin ti no soy nada, Sin ti no soy nada, Sin ti no soy nada.

Ya había pasado un mes, en el que Virginia, Draco y la madre de Draco (más la madre que los novios) habían estado preparando la boda, que empezaría en unos minutos.

Virginia estaba en su habitación sola, con el traje de novia puesto (un vestido de corpiño con falda lisa), mirándose al espejo.

"Me veo tan rara así... llevaba seis años sin ponerme algo de color blanco, y también sin pintarme las uñas de blanco y ponerme maquillaje tan natural. Dentro de unos minutos seré Virginia Malfoy... Dios, Ginny... ¿estás segura de lo que vas a hacer? Y Harry ¿Dónde estás Harry? Pensaba que quizás después de que le dijera que me iba a casar... pero está claro que no me quiere... estará destrozado por lo de Chang...".

Otra lágrima como las muchas que habían cruzado su cara en el último mes apareció por sus ojos.

Virginia se dirigió a su cajita fuerte, la abrió y sacó una fotografía que hizo Colin Creevey sin que ella y Harry se dieran cuenta durante esos quince días en los que estuvieron saliendo juntos en secreto... ella y Harry se estaban besando...

******FLASH BACK******

-Ginny...

-Harry...

-Te quiero.

-Yo a ti también te quiero.

******FIN DEL FLASH BACK******

-Mentira... -susurró Virginia, mientras que rompía en pedazos la foto en movimiento y otra lágrima salía de sus ojos.

-Virginia, querida, date prisa.

-Ya voy señor Malfoy -dijo Virginia mientras se secaba las lágrimas y tiraba los pedazos de la foto por la ventana.

-Hija, no me llames señor Malfoy, llámame Lucius, que dentro de unos minutos te casarás con mi hijo.

"Me casaré con su hijo...".

Virginia salió con paso decidido de la habitación y subió en el coche de Lucius para dirigirse a la misma iglesia en la que estuvo el mes pasado.

Al entrar en la iglesia todas las miradas se fijaron en ella. Draco la sonreía. La iglesia estaba totalmente llena de gente que Virginia no conocía... Malfoys llegados de todas partes e íntimos amigos de la familia.

Llegó al altar del brazo de Lucius y Draco cogió su mano temblorosa. El cura inició la ceremonia:

-Hermanos y hermanas, estamos aquí reunidos para unir en Santo matrimonio...

Dicen que cuando estás a punto de morir, tu vida pasa por delante... eso era lo que le pasaba a Virginia, que fingía prestar atención al cura, pero en realidad estaba recordando toda su vida... su feliz infancia rodeada de tantos seres queridos que había abandonado... su estancia en Hogwarts, con Harry y sin él, con sus amigos, sus hermanos... cuando se fue de casa y le dijo un montón de barbaridades a todas las personas que quería y cambió radicalmente de imagen... cuando se cruzó con Draco por una calle de Londres, se quedaron mirando y terminaron juntos... el encuentro del mes pasado con Harry... y de repente volvió en sí. Allí estaba, convirtiéndose en la esposa de Draco Malfoy... no, no podía hacerlo... tenía que volver con su familia y amigos... alejarse del mundo en el que había estado viviendo los últimos años... pero... quizás sería demasiado tarde... pero eso no lo sabría si no lo intentaba...

-Draco Malfoy, ¿aceptas a Virginia Weasley...

"Weasley... no te vas a casar con él"

-Sí, quiero.

-Viginia Weasley, ¿aceptas a Draco Malfoy...

Pero el cura no terminó la pregunta, pues algo lo interrumpió (n/a. Contentos?). Virginia volvió la cabeza, moviendo su melena morena adornada con pequeñas florecitas (detalles de la madre Malfoy... era una candorra), y abriendo los ojos como platos y sonriendo como no lo había hecho en años.

-¡Ginny! ¡No lo hagas! ¡Te quiero! -gritó Harry jadeando, al parecer había llegado corriendo a la iglesia. Miraba a Virginia de manera suplicante.

Draco apretó más fuerte la mano de Virginia. Toda la iglesia tenía la boca abierta, el cura tenía cara de pocos amigos.

Virginia miró a Draco, intentando explicar con una sola mirada cientos de pensamientos que cruzaban su mente, que Draco pareció entender, porque soltó su mano con cara de resignación. Virginia ahora lo miraba de manera agradecida y le entregó el ramo. Después volvió a mirar a Harry, se levantó un poco la parte delantera del vestido y fue corriendo hacia él, mientras todo el mundo la seguía con los ojos y Draco tiraba con todas sus fuerzas el ramo al suelo.

Harry y Ginny se abrazaron fuertemente, mientras Ginny lloraba.

-Ginny...

-Harry...

-Nunca he dejado de amarte...

-Yo a ti tampoco...

Y se besaron dulce y apasionadamente a la vez, y después salieron de la mano de la iglesia. Fuera estaban todos los Weasleys (incluidas mujeres de los hermanos y sus hijos), todos fueron a abrazar a Ginny, la mayoría llorando.

-Perdonadme, por favor, perdonadme...

-Calla...

Después Harry y Ginny fueron a recoger todas las cosas de Ginny de la casa en la que vivían ella y Draco, para trasladarlas a la casa de Harry, donde Ginny se quitó el conjuro que hacía que sus ojos fueran negros para volver a dejarlos marrones y se quitó el hechizo del pelo, y volvió a tener un precioso pelo rojo. El vestuario y el maquillaje no lo cambio, porque le gustaba vestir así.

Luego, toda la familia Weasley al completo se fue a la madriguera a celebrar el regreso de Ginny a la familia, donde había muchas caras nuevas: Ginny tenía cuñadas y sobrinos. Definitivamente se arrepentía muchísimo de haberse ido de esa hermosa familia...

-Hey, Gin... venga princesa, es hora de levantarse -dijo una voz con dulzura en su oído que reconocería sin problemas en cualquier situación.

Ginny abrió los ojos, se encontraba en su dormitorio de Hogwarts.

-¡Harry! ¿Qué haces aquí?

-Michelle me dijo que se te habían pegado las sábanas...

Ginny se incorporó en la cama. Tenía un camisón blanco de tirantes finos por la rodilla y el pelo ahora más corto totalmente despeinado... cualquiera diría que era el pelo de Hermione pero en pelirrojo. Ante esta observación que pasó por la mente de Harry, no pudo evitar sonreír de oreja a oreja.

-Oh, Harry, no te rías... sé lo que estás pensando.

-Jeje, ¿Y qué estoy pensando, princesa?

-Que no quieres abrir los ojos por la mañana y encontrarte con esta mata de pelo rojo.

-Sí que quiero. Por cierto, te queda muy bien el camisón.

Ginny sonrió y Harry la besó.

-Ya puedo ir a ver a Snape en paz -dijo Ginny cuando Harry se separó de ella, y Harry rió-. ¿Sabes? Deberías hacer esto todas las mañanas.

-Y todo lo que tu quieras -la volvió a besar

-No me digas eso que me lo tomaré al pie de la letra.

-No estaría mal -Harry le guiñó un ojo-. Venga, levántate, que ya es muy tarde y todavía tienes que desayunar.

-He tenido un sueño muy extraño... guardábamos lo nuestro en silencio... cortabas conmigo... me iba de casa... iba siempre de negro y era mala... tú te ibas a casar con Chang pero te plantaba... yo me iba a casar con Malfoy, pero...

-Qué cosas más raras sueñas mi vida... todo eso no va a pasar jamás -la cortó Harry sin dejar de sonreír y revolviéndole aún más el pelo cariñosamente-, venga princesa, te espero abajo.

Harry se despidió con otro beso y Ginny se vistió con una sonrisa de oreja a oreja... todo había sido un sueño, pero muy real.

FIN

¿Y bien? ¿Te gusta el final? No seas muy cruel en el review que me vas a dejar en unos segundos ¿vale?

AIDA