A veces, aunque no queramos, el tiempo pasa y no nos damos cuenta, y,
sin pensarlo, vemos como nuestra vida va desapareciendo lentamente en
cada uno de los rincones de nuestra inconciencia, a pesar de saber muy
bien, que al no recordar a las personas, estas van muriendo en nosotros,
y por nosotros…


A VECES

Autor: smcg2

Fic sobre Himura Kenshin y Kamiya Kaoru

Discleamer: Nada de esta maravillosa historia y sus personajes me
pertenece, es obra del inteligentísimo Watsuky-sama (se ve a smcg2 y
sub-consciente haciendo reverencia al pronunciar este nombre), bien,
ya lo dije.



Kaoru observa de forma muy pacifica el pequeño estanque que se ha formado
en el patio del Dojo después de una lluvia tan fuerte, lo mira de forma
distraída mientras su mente piensa en otras cosas,
"a veces, quisiera ser otra persona diferente, que sintiera las alegrías
y tristezas de las personas que están a mi alrededor", piensa, y se
recuesta una vez mas en la pared frágil de la puerta del Dojo.

Aunque lo niegue, su mente le juega sucio cuando, ya después de tanto
tiempo ha decidido olvidar su forma de ser anterior, de importarle en
realidad lo que pensó que debía ser importante, lo único que deseaba
en realidad, en ese momento, era sentarse y disfrutar de la suave brisa
que llenaba el lugar, en verdad, después de un día tan caluroso, una
refrescante lluvia no estuvo mal y ahora, esa suave brisa que llenaba
sus pulmones de aire puro la hacían sentirse reconfortada, en ese
instante, la brisa sopló algo mas fuerte, como tratando de llevarse
sus pensamientos, y sin quererlo, Kaoru soltó una pequeña lagrima, pero
no de dolor o amargura, solo era de una suave tristeza, de un sentimiento
que la embargaba desde el ese día en que tomo la decisión que hizo que
cambiara totalmente, a lo que ahora era.

En realidad, no podía arrepentirse, pues ya hacia mucho tiempo de ello,
con delicadeza, limpio la fugitiva lagrima y se cubrió los hombros con
el suave chal que llevaba puesto, su cabello negro, ondulaba al compás
del viento, sin pensarlo mucho, salio del Dojo dando unos pasos a través
del patio, cuando de pronto, observo sin querer el lugar donde se lava
la ropa, una y otra vez lo miraba, como queriendo llevar algo a su
memoria, sin embargo, no podía recordar que era en realidad, resignada,
camino unos pasos mas adelante y se volteo, dirigiendo su mirada a la
entrada del Dojo, suspiró, pensando en nada y en todo a la vez, bajo su
mirada y cerro sus ojos, "era lo mejor" se repetía una y otra vez, no
sin sentir una presión en el pecho, pequeña pero molesta, sabiendo que
tal vez, si hubiese actuado diferente, las cosas habrían cambiado mucho,
otra lagrima silenciosa bajaba por su mejilla, en esta ocasión, fue el
viento quien la limpio, muy suavemente, una brisa la rodeo, levantando
su cabello azabache, como consolándola, susurrándole al oído que
a veces, las personas toman decisiones, algo duras, pero que a la larga,
son las mejores. Kaoru levanta su rostro, su expresión, aunque
melancólica, ha cambiado, ahora demuestra una pequeña sonrisa de
ternura, en unos instantes el viento se ha calmado, dejándola, se
acomoda de nuevo su chal y al girarse, se consigue con los ojos violeta
mas hermosos que ha visto, que la miran preocupados.

"¿Estas bien Koishi?", le escucha decir, Kaoru solo le dice un quedo
"Hai", observa como sus ojos se entrecierran un poco, sin dejar de ser
dulces, como queriendo examinarla, ella solo esboza una dulce sonrisa y
dice mientras lo abraza "los dos estamos bien", siente, que su rurouni
se relaja un poco y corresponde el abrazo. "será mejor que entremos,
esta haciendo un viento frió y no quiero que les pase nada, otra vez".

Kaoru solo se deja guiar dentro de la casa, ahora puede pensar en que el
viento tenía razón…


A veces, las decisiones más difíciles son, con el tiempo, las correctas.









NOTA DE LA AUTORA: Si, se que esta algo extraño y melancolico, pero queria
plasmar los sentimientos de Kaoru una vez que comienza su vida junto a
Kenshin, lo que sentia al dejar el Dojo en manos de Yahiko y el sentirse
diferente ahora que estaba embarazada de Kenji y cambiando de maestra
Kendoka por una mujer delicada y respetada, una buena esposa, cosa que no
pudo lograr de soltera. (Bueno, yo me sentiria igual si eso me pasara a
mi), espero que les gustase y para la próxima no la hare tan corta.