LA VERDAD DE SUS CORAZONES
Capitulo 2: Una tarde muy enredada.
En todo el trayecto hasta la vivienda de Matt, Tai se había arrepentido de haberse llevado con tanta urgencia a Joe de la preparatoria. A pesar de que manejo su persuasión para hacerle entender que todo había sido por culpa de su hermana, ya que se mostraba extremadamente preocupada; Joe le respondió con un largo sermón acerca de la imprudencia y la falta de amabilidad y modales.
***
Angeline llegaba extenuada a su apartamento. Al abrir la puerta, una gata de ojos verdes y de bellos tonos anaranjados, semejantes a los de un tigre, se levanto de la cama de ella y se acerco a esta para ronronearle en las piernas.
Hola, Gami. –Saludó a su mascota con una imperceptible sonrisa.
La gata maulló contenta.
Ella tira a un lado su maleta y después de quitarse los zapatos, se encamino seguida por su naranja sombra a su alcoba.
Allí ante la vista amigable de su amiga, se quito todo su uniforme y lo lanzaba sin la menor importancia al piso. Quedando solo en paños menores, con su venda al aire. Angeline se agachó y quedo a la altura de su amiga, donde le mostró afable sus gasas nuevamente ensangrentadas.
¿Escuchas lo mismo que yo, verdad?
La gatita empezó a jugar con unos de los extremos de los vendajes. Mientras, por el otro extremo ella dejaba al descubierto su herida piel. Dejando ver el digivice que emitía periódicamente una leve luz y el sonido característico del artefacto.
¿Sabes lo que significa? ¿Quieres ayudarme?
Aquella amiga, se acercó de nuevo a sus piernas y paso una gran caricia con su cuerpo.
Dado el visto bueno, ella se acercó a una de las esquinas de su cuarto. Allí estaba un computador portátil. Este estaba pintado de colores militares y tenia gran cantidad de enchufes y cables.
En un ágil salto, la gata se trepó en su hombro y ella puso sus dos manos en su corazón.
Un pequeño halo de luz la rodeo. Mientras sus ojos sé medió abrían mostrando paz. Mientras un extraño y bello eco se empezaba a escuchar en el recinto, ella empezó a recitar.
eco...
Mundo digital, Siempre he sido parte de tu encarnación. Ahora quiero acceder a tus horizontes, para realizar lo que mi vida te a prometido. Por favor, déjame ingresar para llevar a cabo tu legitimidad.
De pronto un destello de luz se produjo en la pantalla e inundo todo la habitación. Cuando finalizo, Angeline y su gata habían desvanecido.
***
Ellos dos eran los dos últimos en llegar del grupo de digielegidos. Todos estaban reunidos en el pequeño sala comedor que ofrecía el apartamento. Matt e Izzy estaban sentados en el comedor. Jolei estaba apoyada en la pared. Sora se encontraba sentada en un sofá junto con Kari; mientras, Ken se encontraba algo apartado del grupo, justo frente de la puerta que daba al mirador. Takeru hallaba junto con Davis sentados en una alfombra que se hallaba en la sala. Todos los digimons estaban en modo training, reunidos en medio de la sala y viendo divertidos la televisión.
Ya era hora que llegaran. – Contestó Matt al sentir como la puerta se abría y cerraba. ¿Qué los entretuvo? –Preguntó Kari asustada.- ¿Acaso te di mal la dirección de la preparatoria de Odaiba? Por un segundo pensé que les había pasado algo.- Corroboro Sora.
Tai vio a Joe con algo de aburrimiento y se volvió a donde su hermana.
No te preocupes. Lo que sucede es que estábamos con una charla muy animada.
Joe ignoro eso y se sentó en una butaca vacía y miro a todos con seriedad.
¿ Ya saben por que estamos reunidos? –Preguntó Joe. La verdad, esperábamos que todos estuviéramos reunidos para hablar adecuadamente de lo sucedido.- Izzy se notaba despreocupado y tranquilo. Entonces, ¿Qué esperan?- Matt estaba al borde de un ataque cardiaco por tanto misterio.- No tenemos todo el día ¿Qué fue lo que sucedió en el digimundo?
Finalmente comenzaron a hablar de lo sucedido con un aire fúnebre.
Alguien o algo nos ayudo. –Habló completamente pensativo Ken. ¿Era un niño elegido?- Pregunto asombrado Izzy. No lo creo. – Wuormon hablaba algo temeroso- Lo extraño, es que no conocía esa clase de poderes por parte de un digimon. Lo peor... –Kari hablaba afligida- No es que nos hallan ayudado, es... es que los digimons no desaparecían cuando eran derrotados.
Sora, Matt, Tai, Izzy, Takeru junto con sus digimons quedaron con la boca abierta de sorpresa. Izzy apoyo sus manos fuertemente sobre la mesa y se levanto tan rápido que su silla se fue para atrás produciendo un seco sonido.
¡¿Estas segura?!- Izzy había preguntado con un tono semejante al de un grito. Tranquilo, Izzy.- Sugirió sorprendido Matt, sujetándolo del brazo. Para que volviera a tomar asiento. ¡Todos sabemos que los digimons cuando son derrotados, sus bases de datos son eliminadas del sistema y no dejan rastro! ¡Eso es lo extraño! – Jolei parecía tensa ante los sentimientos agitados- ¡Además, es posible que vuelvan a aparecer digimons malignos en este mundo! Sea lo que sea, ni siquiera los digimons que iban a venir a este mundo lo conocían.- Sentencio Cody. ¿Por qué lo dices?- preguntó Kari. Es verdad.- Corroboró Ken, poniéndose más atento a la charla- Devilmon no sabia que era lo que había matado a sus sirvientes y se asustó demasiado al ver esos poderes. Eso significa que se van a sacrificar seres por ambos lados.- Comentó secamente Matt. Esos son los hechos imprescindibles.- Joe tenia un aire de sabio- Si no se eliminan cada uno de los impedimentos que hacen que nuestro mundo o el de digimons este a salvo, no podremos ganar. El triunfo necesita de sacrificios... – Repitió Takeru absorto en sus pensamientos. Eso es lo que me preocupa... –susurró Sora- Ya me estoy hartando de esta batalla sin fin...
Ante ese comentario todos agacharon la cabeza. Por unos segundos hubo un largo y tenso silencio. Los digimons habían dejado tras la TV y veían confundidos a sus dueños.
Joe recordó las palabras del extraño fulgor que había visto en el digimundo:
"Ustedes jóvenes elegidos son iguales a su emblema pero tienen una debilidad... son egoístas. Por que no se arriesgan por su bienestar."
Finalmente había comprendido algo de sus palabras... o al menos asi lo pensaba. Joe se levantó de la butaca y dio unos pasos hacia ella.
No puedo creer lo que dices, Sora.- Joe la miro con unos ojos llenos de determinación. -Jamás pensé que la chica que llevara el emblema del amor, pudiera ser asi de egoísta.
Sora bajo su mirada, ocultándola de Joe. Matt al ver que había lastimado los sentimientos de Sora se levanto y se puso delante de Joe.
¿Qué te da derecho a decirle tal cosa?- Los ojos de Matt mostraban una leve furia. Mi orgullo como niño elegido, Matt.- Joe parecía otra persona.- Nosotros estamos aquí para defender a nuestro mundo y al de los digimons. Y no puedo creer que alguien que a estado desde el inicio en esto quiera darle la espalda a varias personas que ni siquiera sabe que existimos; pero, que necesitan de su bienestar.
Lagrimas silenciosas cubrieron el rostro de Sora, al escuchar la veracidad de esas palabras.
Kari puso su mano junto con la de Sora para darle algo de animo.
Los digimons estaban hechos todo un pandemonio. Cada uno fue en la defensa de quien más le convencía.
Piyomon empezó a volar en toda la sala, gritando: "¡Ya cálmense! ¡Por favor!". Pero los ánimos ya estaban muy subidos.
¡Sora no es un ser perfecto!- Matt empujo algo brusco a Joe al ver la reacción de Sora- ¡Ella tiene sus momentos de sentir debilidad! ¡No es como tú... Señor pesimismo!¡Es más! ¡ Me sorprende que alguien como tú, este ahora lleno del coraje como para hacerte el valiente! ¡Por que a diferencia de otras personas, yo ya he madurado! ¡Contrólense!- Gritaban Takeru y Tai, mientras se acercaban a los dos enfrentados para evitar que esto se agrandara.
Sora dejo escapar un sollozo. Haciendo que Matt llegara al borde.
¡Ya cállate!
Todos abrieron sus ojos sorprendidos al ver que Matt sin resistirse le propino un golpe en él estomago a Joe, sacándole el aire. Este se balanceo por un segundo, intentando recuperar el equilibrio y el aire.
Izzy y Jolei se acercaron a Joe; mientras, Matt fue rodeado por Tai y Takeru. Ken observaba a lo lejos completamente perplejo. Mientras, los digimons parecían una representación de sus dueños. Aunque la escena era diferente: Gabumon estaba en el suelo ante una bofetada por parte de una aleta de Gomanon.
Joe finalmente volvía a pararse adecuadamente; mientras, Matt recuperaba la cordura.
Joe... yo... – Matt intentaba articular alguna palabra de justificación. Volveré cuando los ánimos estén menos agitados.- Joe le dio la espalda a Matt y se dirigía a la puerta- No pretenderé hablar de algo que tiene tanta seriedad, con mis sentimientos tan descontrolados. ¡No te comportes tan inmaduro!- Grito Tai detrás de él, para ver si lo podía detener. No soy inmaduro. Solo pienso antes de actuar. ¡Joe, espera! – Grito Gomamon; pero, la puerta ya se había cerrado.
Sora sintió como si una gran espada la atravesara, cuando oyó el tenue sonido de la puerta al cerrarse. Sin pensarlo dos veces, Izzy empezó a alistarse.
Tentomon, quiero que vuelvas al digimundo y avísame cuando suceda cualquier detalle por pequeño que sea.
Tentomon, se sorprendió al escuchar eso. Pero solo afirmo con la cabeza sin preguntar.
Tai, hazme el favor de comunicarte a mi casa, si hablan de algo trascendental. ¿Adónde piensas ir, Izzy?- Preguntó ante tal orden Tai. Pienso averiguar algo que me inquieta.
Izzy apresuradamente se puso el saco de su uniforme y salio a toda prisa del apartamento.
Finalmente, Matt digo con su puño un seco golpe en la pared.
¡Rayos! ¡Por dios, Matt! ¡Serénate!- Exclamó preocupado Takeru. L-Lo siento.- Susurró Sora; mientras, se limpiaba las lagrimas- Por mi debilidad he hecho que se peleen.
El ave rozada descendió en las rodillas de aliento y acariciando una de sus manos con sus alas, la vio con ojos comprensivos
¡Eso no es cierto!- Piyonom hablaba positiva- Lo que sucede es que Joe es un extremista. Eso es todo.
Gomamon dio un extraño gruñido de ira y acercándose a pequeños pero enérgicos saltos se puso enfrente de la afectada.
¡No digas eso!- Gomamon estaba perturbado-¡Todos los que están aquí saben que Joe no es de los lastima los sentimientos de las personas a propósito! ¡Él es SOLO SINCERO! ¡Al menos podía ser más sensible!- Comentó Gabumon en defensa de Sora.
Los dos digimon estaban a punto de darse otra vez un intercambio de puños; pero, Tai dando unos pocos zancazos se puso en medio de ellos.
Por eso mismo es asi Joe. – Comentó tranquilo Tai.- Su forma de ser hace que el exprese sus pensamientos tal como las sienten-
Jô se alejaba del conjunto residencial con paso ágil y veloz. Quería alejarse de ese lugar antes de que estallara y lo único que él no quería era lastimar a sus amigos. Pero, por vez primera había sentido una gran satisfacción al decirle algo que se había contenido de decirle a Matt por hace mucho tiempo.
No sabia por que pero se le forma una ligera sonrisa al recordar que Gomamon lo había defendido ante el digimon de Matt y lo había vencido. Tal fue asi que a pesar que aun estaba algo resentido por el golpe que le había dado Matt, una ligera risa se le escapaba de sus labios.
Casi inmediatamente se detuvo en seco y vio detenidamente sus manos.
¡Vaya! – Comentó Jô con algo de humor- Debo pedirle a Gomamon que me enseñe algunos movimientos.
De pronto sintió que unos pasos se acercaban a él. Joe se dio media vuelta y vio como Izzy intentaba darle alcance.
Izzy se acercó a él y poniendo una mano en su hombro se encorvo un poco para recuperar el aire.
¡Oh, Cielos! –Izzy hablaba entre respiro y respiro- ¡Tú... estas... caminando... muy... muy rápido... últimamente... amigo Jô Eres la primera persona que me lo dice.- Respondió amable ante su cansado amigo que ya había recuperado energía. Jô ¿Qué fue lo que te sucedió?
Jô encogió sus hombros con gesto de desconocimiento.
No me lo preguntes a mí, pregúntaselo a Sora. Y seria un favor para mí si le preguntas a Matt.
Izzy lo vio con detenimiento. Haciendo que Jô se incomodara. Estaba buscando una respuesta.
La gente ya nos esta viendo extraño. – Con una gota sobre su cabeza Jô comentó eso como ultimo escape a Izzy.
Izzy empezó a caminar y Joe le seguía el paso. Jô no sabia que lo este estaba pensando pero, en su cara parecía como si estuviera descifrando un jeroglífico.
Jô, no lo tomes por el lado equivocado pero... Te veo cambiado.
Jô se detuvo, dejo escapar una leve carcajada de sorpresa.
¿Por qué lo dices? Es que nunca me imagine que tu dijeras esa clase de cosas. ¡Por favor, Izzy! ¡Solo intentaba reanimarla! ¿Por qué no puedes negar que Sora tampoco es la misma de siempre. Bueno, tu sabes como son las mujeres; tal vez, era la famosa depresión premenstrual. ¡¿PERO QUE COSAS DICES, IZZY?! – Jô se escandalizo ante ese termino. – Al menos hubieras suavizado un poco el comentario ¿Qué pensaran si te escuchan hablar asi? La verdad, no veo la razón para que te comportes asi. Tú mas que nadie debería estar más tolerante con ese término ¿Oh no?
Las manos de Jô intentaban estar coordinados con los pensamientos de Jô; pero, solo lograba alborotados movimientos.
¡¿Qué yo que?! ¡¿Y por que diablos debo yo estar cómodo ante eso?!
Izzy intento contener una risita y se volvió a ver su amigo con un semblante demasiado tranquilo.
Por que vas a ser médico ¿O me equivocó?
A Jô se le resbalaron los lentes por la respuesta tan valedera que le había dado su amigo.
Izzy vio el semblante de su amigo y a pesar que era muy divertida; decidió ignorarlo. Aun asi al ver hasta donde habían llegado, se le formo una sonrisa de oreja a oreja.
¿Sabes lo que necesitas?
Jô dirigió toda su atención a Izzy esperando su respuesta.
Necesitas relajarte. No te entiendo.- Comentó Jô esperando que las manías de George y Kevin no estuvieran hechizando a Izzy.
Izzy se acercó su migo y puso su mano izquierda sobre el hombro e Jô, con la otra mano señaló a un local que estaba a unos pasos de ellos.
La fachada era de un ladrillo rustico, con grandes ventanales en los que están grabados dibujos alusivos al té, chocolate, café y semejantes. A través de los vidrios se podían ver como los marcos servían de materas en las que había varias flores y plantas decorativas. La única puerta que había era de madera y grande, semejante a las grandes puertas republicanas.
A pesar de que aun estaban lejos de ahí, Jô escuchaba el melodioso sonido de un clarinete tocando Blues.
En los pisos superiores se podían ver varios ventanales que daban la sensación de balcones. Encima de estas existía un dibujo alternativo hecho en algo semejante al metal de una taza de café humeante en la que sus humos formaban un ángel. Debajo de él decía: "Sombra de ángel - Café"
Jô quedo con la boca abierta al ver esa clase de edificio en Odaiba. Él sabia que ese distrito estaba dividido en cuatro zonas: Industrial, Residencial, Zona Rosa y Puerto Marítimo y Financiero; pero, no pensó que caminaran tan rápido para haber llegado a la zona rosa. Por sorprendente que esto suene: Jô solo conocía el parque de diversiones de Odaiba... jamás había pasado d ahí, lo cual significaba que no conocía ni la mitad de esa área.
¡Ven! Entremos aquí. Te invitó a un café, ahí bien relajado me cuentas todo lo que paso en el digimundo ¿De acuerdo? No lo sé.- Jô parecía incomodo- Parece muy caro. Déjate hacer la invitación. Además, tu bien sabes que yo soy igual de tímido que tú para conocer nuevos lugares. Yo ya tuve la valentía de conocerlo recién las vacaciones de verano. Ahora es tu turno ¿De acuerdo?
Jô pensó que el negarse seria una descortesía. Además, no tenían otra opción, era eso o la casa de Jô. Ya que en la de Izzy su padre se encontraba desde hace dos días enfermó de gripe, asi que solo seria incomodar. Y al pensar en la posibilidad de llevar a su amigo a su casa, le dio una sensación de desagrado. Asi que decidió entrar.
Al ingresar, Jô le agrado el sitio enseguida. El olor a café estaba en el aire. El café era una como un cóctel arquitectónico entre los bohemios cafés de los 60´s en la que los hipíes se reunían para recitar poemas y beber café; los elegantes cafés parisinos de la "Avenue de la Concorde" y los modernos edificios del underground británico.
Es más, Jô sentía que algún rincón era parecido a los lujosos bares en los que posaban los modelos de las revistas femeninas que ya estaba tan acostumbrado de verle leer a su madre.
Los dos recién chicos se sentaron en una mesa al lado de las ventanas que daban a la calle.
La mesa era muy cómoda hecha de madera. Las sillas igualmente eran del mismo material, grandes, espaciosas y con suaves almohadillas rojas
A unos cuantos metros, se hallaba uno de los lugares donde atendían. Del techo colgaban varias copas de diversas formas y colores. En la pared se hallaban exhibidos toda clase de bebidas de los alrededores del mundo en una bella gaveta de aluminio. Mientras, Dos chicas manejaban la maquina de capuchinos cerca de ahí.
Al percatarse de la llegada de nuevos clientes, una chica de cabellos negros y ondulados se acercó a ellos. Parecía una universitaria, estaba vestida con un pantalón de Dril beige, una blusa de a cuadros rojos que tenia amarrada a forma de ombliguera y una pañoleta roja que sujetaba sus cabellos
Ella les pasó a cada uno un menú y sacando de su oreja un lápiz y de su bolsillo una libreta, los saludó jovialmente.
Un saludo angelical de nosotros y sean Bienvenidos a sombra de Ángel ¿Qué desean ordenar? Un expreso, por favor.- Comentó Izzy devolviéndole el menú.
Sin embargo Jô se quedo algo ambiguo. Ella le sonrió amablemente al ver la indecisión del cliente.
¿Por qué no tomas un Capuchino con Brandy?- Comentó la chica amable.- Es una buena forma par subir los ánimos. Seria agradable. Pero, yo lo tomaré sin brandy.
Izzy se le formó una inmensa gota ante el comentario de su amigo. La chica se sorprendió un poco; pero, le preguntó amable.
Un Capuchino sin licor, es como un árbol sin raíces. ¿Por qué lo quieres asi?
La conclusión que dio Jô hizo que a Izzy s le cayera la cara de bochorno. Definitivamente Jô tiene la responsabilidad en las venas.
Es que, aun soy menor de edad.
La camarera soltó una risa de sorpresa. Jô e Izzy sintieron eso como una burla; pero, ella se apoyó en la mesa, haciendo que quedara cara a cara con Jô. Izzy estaba sorprendido y Jô trago saliva ante esa comprometedora pose.
No te preocupes, te conozco muy bien, sé de lo que eres capaz. – ella tocó su nariz coquetamente y luego le picó el ojo.- tengo buenas referencias de ti, pequeño Jô.
Ambos quedaron con los ojos abiertos de sorpresa; mientras, ella s levantaba confiada e haberlos sorprendido.
¿De donde conoces a Jô?- Preguntó asombrado Izzy. Lo conozco de fotos. Este chicuelo a sacado de mil aprietos a mi primo y toda mi familia se lo tiene muy agradecido. Lo siento.. pero... yo...
La joven se divertía por el asombro y el desconocimiento de Jô.
¡Por Dios! ¿¡Me vas a decir, que este tono de piel es el mismo de todos los ojos rasgados de este país!?
Como si un disco se rayara, todo el ambiente relajado se cortó de repente y todos los presentes voltearon a mirar a la camarera. Izzy y Jô reían nerviosos al ver que eran el centro de todas las miradas.
La chica suspiró y luego de dar mil venias, dijo un: "Lo siento, pero mi ego me lastima él ver que sus ojos son más bellos que los nuestros."
Tan rápido como había ocurrido esa situación, todo volvía a la normalidad. A la chica se le hizo una gota en la cabeza al ver como los japoneses olvidan rápidamente las cosas.
¡Vaya! ¡Casi te crucifican!- Comentó algo confiado Izzy. Mientras me den propina, no sucederá nada malo. ^_
Jô si se había percatado que el tono de piel de ella era más oscuro de lo normal, ni siquiera los de Osaka eran tan oscuros, solo hasta que recordó al único con la piel tan morena se le hizo una vana idea.
¿Eres prima de Kevin? En realidad, soy la medio hermana mayor de él; pero es un secreto familiar.-
La joven le dio una exagerada venia, ya que casi toca sus rodillas con su cabeza. A Izzy y Jô se les formo una sonrisa nerviosa al ver "tal muestra de respeto" y luego ella le dio su mano a su nuevo conocido.
Mi nombre es Catalina Klain. – la joven apretó enérgicamente su mano y luego la salto. Mucho gusto, como sabes, soy Jô Kido y mi amigo es Izzy Hola, mucho gusto.- Comentó Izzy saludando con la mano. Disculpa la pregunta, pero pensé que Kevin vivía solo acá.- Izzy estaba algo confundido. Por un instante pensó que se estaba alejando de Jô.
Jô estaba igual de confundido, pero, ella le respondió igual de amable y pacifica que Kevin.
Lo que sucede es que Vine acá, para estudiar una especialización en tecnología aplicada a la biología marina. Disculpen si me acento es raro. Es que recién lo practico y en la isla casi ni lo utilizaba. ¿La isla?- Preguntó Izzy. San Andrés. –Respondió casi instintivamente Jô- La familia de Kevin es originaria de Italia; pero, se han dispersado por todo el caribe y por generaciones se han vuelto más... Morenos.- complementó Catalina, antes de que Jô se incomodara por lo que iba a decir.- En fin, un Expreso y un capuchino, ambos con brandy ¿De acuerdo?
La chica es guiño el ojo, coqueta y partió en busca de la orden.
Ambos chicos parpadearon con los ojos grandes y sorprendidos viéndola partir y luego se veían a sí mismo. La verdad ninguno de los dos comprendía como habían conseguido la amistad de Catalina.
***
En Estados Unidos ya era de noche, más no era tranquila para todos.
La asociación de climatología estaba perpleja al ver todos los datos de sus computadoras e imágenes de satélite. De la nada había surgido en el estado de una gran tormenta eléctrica que amenazaba con llegar a Houston, su capital.
Los Teléfonos replicaban sin cesar: periodistas, organismos gubernamentales y hasta la comunidad civil estaban buscando respuesta de aquél acontecimiento.
Todo se había vuelto un pandemonio. Unos se hallaban buscando la razón de aquel repentino ataque natural. Otros, se hallaban dibujando sobre planos de la zona, la posibles rutas de este y demarcando los rastros que dejaban. Unos pocos, se aventuraban a redactar la información que le darían a la opinión publica y otros eran suplicando para que los corresponsales de la zona hablaran de lo sucedido.
Pero aun asi, eran elevando una suplica al cielo... para que se calmara.
Buenas noches, mi nombre es Mary Oldman y soy del equipo informativo de la CNN.- Hablaba rápidamente una chica a través de una maquina telefónica-¿Qué nos puede comunicar acerca de este hecho?
Una persona de aparentes 40 años y de cabello canoso, tragó saliva antes de contestar.
La verdad, este suceso sobrepasa nuestras perspectivas. Ya que ninguna corriente cálida a chocado con los vientos fríos que provienen de la zona polar. Asi que no sabemos la razón por la que se ha producido. ¿Esto tienen que ver con los demás desastres ocurridos en Rusia, Europa Oriental, Australia, India, Canadá y Argentina? Lo repetiré todas las veces necesarias, señorita Oldman. No ha habido pruebas de que esos terremotos y diluvios hallan tenido algo que ver con esto. Ya si lo que se refiere a los asesinatos, no es nuestra jurisdicción. ¿Y que tan grave es este fenómeno? Generalmente catalogamos una tormenta en de 1 a 5 grados, y esta, se encuentra en 4,5 y va intensificándose.
Hubo un silencio incomodó en los dos lados de la línea.
¿Y los datos de la comunidad civil afectada? Según la cruz roja, desde que esto a iniciado, ya había producido cerca de 50 bajas alrededor de los pueblos agricultores y dejado atrás a los perplejos sobrevivientes con todas sus tierras carcomidas por los incendios producidos por los fugaces castigos del cielo.
Lo que ellos no habían visto con sus datos técnicos y observatorios espaciales es que en el centro del huracán se hallaba caminando como si nada un chico de escasos 10 años. A pesar que el viento era tan mortífero en esa zona que arrastraba casas, tractores, carros y hasta unos incautos animales a kilómetros de distancia, este, estaba caminado tranquilo y sereno como si eso fuera una brisa veraniega.
Cuando aquel chiquillo veía cualquier cosa moviéndose, en sus ojos se dibujaban las siluetas de varios truenos y no pasaba una enésima de segundo para que eso fuera blanco de los rayos. Para después, reírse a carcajadas del inerte cuerpo quemado hasta los huesos.
Pronto llego a una autopista y pudo ver a una caravana de cinco autos repletos de varias familias, que intentaban huir de este desastre.
¡Lo puedo ver! ¡Lo puedo ver! – Gritaba ingenua de alegría una niña de tres años. ¡Por favor papá, acelera! – Gritaba más llena de miedo un chico de 17 años. ¡No puedo! - Contestaba un señor bigotudo en el volante.- Pronto, estaremos en la zona en la que cae granizo y eso seria más peligroso!
Esta escena se repetía en los otro cuatro carros, que entre ellos se ayudaban para poder sortear los problemas del clima.
El chico sonrió malignamente, señalando con su mano el carro que se encontraba en la mitad de aquella fila india.
Como una mortal cobra, un rayo serpenteó por todo el cielo y produciendo un ensordecedor ruido cayo con gran poder en medio de la caravana.
Los desafortunados de ese carro jamás supieron que fue lo que los mató, pues inmediatamente estalló.
Los pilotos de los carros que se hallaban detrás del desafortunado carro frenaron en seco, al tiempo, que los niños estallaban en gritos de miedo y los adultos dejaban escapar unas palabras indecentes de sorpresa. Pero, por el piso mojado, no lograron frenar sino que los dos carros giraron como tropos por unos segundos antes de chocar entre ellos.
Los que se encontraban en los carros delanteros empezaron a llenarse de ansiedad y sus pelos de volvieron de punta al ver por el espejo retrovisor esa imagen desastrosa y al escuchar la incesante sirena de los dos carros que chocaron.
¡Papá, detente! – Gritaba la niña pequeña- ¡Debemos ayudarlos! ¡Ahí esta mamá! ¡Papá! ¡Papá! ¡Maldita sea!- Maldecía el padre, golpeando el timón del carro. No podemos.- habló el hermano mayor comprensivo.- Mamá, se quedo a ver como llueve.
El chico observó confiadamente a los dos que faltaban y de inmediato una ráfaga de viento se llevó por los aires a los dos carros. Cayendo al revés, prácticamente a pocos metros de donde se hallaba la hoguera de autos.
¿Qué pasa aquí?- Lloraba la niña asustada.- ¿Por qué la lluvia esta siendo mala? No te preocupes, ya pronto se aburrirá, tranquila.
Las sirenas de los últimos carros se unieron al coro de sirenas. El hermano mayor, abrazaba con miedo a su hermanita, intentado infundirle valor. Mientras, se empezaba a llenar de pavor al ver que su padre no reaccionaba.
El chico se acercó al grupo de autos, en sus ojos se veía que iba a ponerle punto final a esa pequeña diversión.
Te diviertes de forma muy infantil ¿Sabias?
El chico busco con furia a la persona que había osado insultarlo. Viendo detrás del a una joven de 17 años, con un pantalón camuflado verde, botas de campaña y un top negro. En su cuello llevaba puesto una gargantilla con una cruz de plata colgando en él. Y en uno de sus brazos colgaba un vendaje negro. En el otro... una bifurcación de protuberantes venas que se unían todas en un punto... una extraño aparato con una pantalla rosada. En sus hombros estaba encaramada una bella gata tigresa.
El chico se puso delante de ella y se dirigió a ella con algo de confianza.
¿Te conozco? Eso depende de quien lo pregunte. ¿Algo a sí como Blanco y negro?- Le contestó irónicamente el chico sin apartar su maligna sonrisa.- ¿Sol o Lluvia? ¿Humanos o Digimons? Aquí no hay blanco ni negro... sol o lluvia... aquí solo hay torrencial ácida.
La gata se bajo de su dueña y un gran halo de luz rodeo a la chica. Él joven dio unos pasos atrás, mientras, de nuevo sus ojos se inundaban de rayos.
A pesar que utilices los poderes de tu sacrificado elecmon con los poderes de tu miedo, no me lograras atemorizar.
Por u instante el chico vio una visión de su pasado con su digimon; Pero, el miedo que sintió, se apodero de él y el ultimo vestigio que le quedaba de niño elegido se borró, haciendo que riera como paranoico.
Terminemos esto, quiero continuar jugando en paz.
La chica sin embargo no lo escuchaba, sino recitaba una especie de rezo.
Mundo digital, permíteme disponer de los poderes de tu realidad, para acabar con quien osa deshacer el equilibrio entre estos dos mundos.
En la asociación de climatología, todos se llamaban los unos a los otros para ver los censores de rayos infrarrojos y las imágenes de satélite.
Esto... es imposible.- Comentó científico canoso al ver lo que daban las imágenes.
Desde el centro del huracán hasta varios kilómetros a la redonda do se inundo de un color violeta casi cercano al negro, para luego dar una fugaz respuesta multicolor. En los imágenes de los vientos, mostraban que parecían comportarse como si hubieran lanzado una bomba nuclear: Primero se reunían en la zona de impacto y luego con una veloz arremetida avanzaban hacia todos os sentidos.
En realidad todo había surgido con este rezo: el pequeño halo de luz de la chica se había vuelto una inmensa luz que se expandió más allá de aquella tormenta y se propagó por todo el estado en menos de unos segundos. Varios rayos caían como locos, mientras, un grito de dolor se escuchaba por cada rincón que tocara esa poderosa luz.
La pareja de hermanos se protegía el uno al otro rogando al cielo que no pasara nada más, soportando el dolor enceguecedor en sus ojos.
Al final, poco a poco cada uno abrió los ojos para ver como ese chico caía al suelo, dejando una mancha de sangre que surgía de su cuello. La chica cayó de rodillas, mientras, respiraba jadeante.
Por unos segundos, agitó su cabeza con sus ojos llenos de dolor y lagrimas. El dolor que sentía en su cabeza era tan severo, que repetidas veces golpeaba el asfalto y hasta a sí misma, para lograr aguantarlo.
¡Ya basta! ¡Basta! ¡Descansen en paz! ¡DESCANSEN EN PAZ!- Gritaba de tal forma que la pareja de hermanos se entumieron del miedo que ella provocaba.
Lo que no sabían, era que en la mente de la chica se escuchaban las voces de todo el pasado del chico y de todo los sucesos que lo volvieron asi... victima del deseo.
Vio la visión de varias correas, sentia como la piel del fallecido niño s volvia roja de dolor. Sintio como si fuera sentimiento de ella,
Finalmente, el clima se calmó al igual que el animo de ella. La chica se levantó y se acercó al carro donde se hallaban los dos únicos supervivientes.
La chica sin ningún esfuerzo, jaló la puerta del automóvil y ayudo a los dos jóvenes en salir.
Gracias.- Pronunció en shock el joven.
La niña sin embargo no agradeció.
¿D-Dónde están tus modales?- Preguntó el joven a su hermanita. Mi mamá siempre dijo, que jamás debería halar con extraños.- Hablaba mimada la niña. Hinemiya, Angeline Hinemiya. Pero, eso es un secreto.
En un mandoble de manos, los chicos cayeron inconscientes al suelo.
La chica dio un suspiro de cansancio, fue entonces cuando Gami se acercó a ella y empezó a ronronearle en las piernas.
Angeline se puso a la altura de su compañera y acariciándole el oído, empezó a hablarle.
Vamos, llévame a descansar.
Dicho esto, descubrió una pequeña fisura en la nuca de la gata, semejante a los de un módem. Angeline hizo un leve gesto de dolor, cuando una de las venas se separó de su piel y se conectó literalmente con Gami, deshaciéndose poco a poco, hasta haber dejado solo un leve rastro de chispas.
Gami dio unos cuantos pasos y luego, se disolvió de la misma forma como cuando había accedido al atajo por el digimundo.
***
Con lo sucedido en el apartamento de Matt, solo dieron un leve resumen de lo sucedió. Todos esperaban que esa pecunia disputa se solucionara rápido; para que asi, todos pudieran actuar como el equipo que siempre había sido siempre.
Aunque para ser sinceros, decidieron dejarlo asi, ya que algunas tenias sus mentes en otros lados: Sora, por sus sentimientos alterados y las palabras de Jô; Matt, por los sentimientos de Sora; Tai, por la actuación de Matt y el comportamiento de Sora; Takeru, por la violencia de su hermano y lo discutido antes de la pleita; Kari y Jolei, por el superior Jô y Sora; Davis, Cody y Ken, por la poca importancia que le estaban dando a lo ocurrido en el digimundo. (Aunque, es notorio, que Davis, también estaba preocupado por Kari.)
Cada uno salio directo para sus respectivas casas; aunque, Matt no quería quedarse encerrado en la casa. Tenia aun mucha adrenalina y furia en su interior y decidió respirar un poco de aire puro, para soltar la tensión.
Takeru.- Lo llamo serio Matt ¿Que sucede, hermano?- Takeru se acercó al pasillo con Patamon equilibrado en su sombrero. Deje un poco de arroz frito en la cocina y unas gaseosas en la nevera, disponte tú y Patomon a sus anchas, de todo lo que quieran. ¿Por qué? ¿Adónde vas? Iré a ensayar con el grupo- Mintió su hermano, poniéndose el calzado para salir-¿Agumón, te vas quedas con ellos? No, yo iré al digimundo para vigilar. Esta bien. –Comentó Matt, sin energías.- Nos vemos al rato, adiós.
Matt cerró la puerta sin esperar las palabras de despedida de su hermano. Dejando a Takeru y Patamon solos en el apartamento.
El Peluche anaranjado, voló de la cabeza de Takeru hasta la cocina para ver que disponían, aunque Takeru estaba algo desganado y no era por el hambre.
El chico salio al balcón y sintiendo en el aire que se acercaba la noche, suspiró melancólico y se volvió a su compañero.
Patomon. ¿Puedo preguntarte algo?
El digimon se acercó volando a su dueño, sosteniendo golosamente un paquete de jugos tropicales.
Si, no te preocupes, preguntarme lo que quieras.-
Tal vez por lo satisfecho que se sentía por esa golosina, Patamon le respondió feliz mientras aterrizaba en el barandal del balcón, al lado de Takeru.
He estado pensando en las palabras que dijo hace poco Jô. Y desde que te he conocido he estado en montones de aventuras y batallas. He conocido a personas y digimons maravillosos, pero...
El chico vio al cielo para buscar ahí algo para argumentar sus pensamientos, pero, cabizbajo se volvió a su amigo digimon, que se encontraba interesado viéndolo.
La verdad me preocupa que debamos sacrificarnos. Takeru... – Pronunció preocupado Patamon. ¿Recuerdas la primera vez que nos conocimos, Patamon? ¡Claro que sí! ¡Fue en la isla PAI! ¡En el Digimundo! ¡Fui muy feliz cuando nos encontramos y e recibiste con los brazos abiertos!
Antes de que Patamon continuara dándole palabras de aliento, Takeru le hizo una pregunta que lo dejo algo turbado.
¿Qué sentiste cuando moriste en la batalla con Devilmon? ¿QUÉ? Bueno, es que estuve pensando como pudiste ser capaz de dar todo de ti, sin ningún temor y sin pensaren las posibles consecuencias.
Patamon se inquietó y se asombró por las sabias palabras dichas por Takeru.
Pues... –él hablaba lleno de amarga melancolía por tan doloroso recuerdo.- La primera vez en que digievolucione a Angemon, yo decidí pelear con todas mis fuerzas por que te vi en peligro. Y no me importó, él haber dado mi vida por haberte salvado. Pero ¿Por qué? Por que no quería que tu risa se acallará para siempre, Takeru. Por eso. Yo di mi vida por verte feliz, Takeru.
Takeru se sorprendió por la respuesta de su amigo, dio un paso atrás lleno de sorpesa y vio a su amigo confundido, solo topándose con la sonrisa amiga sincera de Patamon.
Por verme feliz... – Repitió Takeru sonriéndole de satisfacción a Patamon.- ¿Tu crees que a eso se refería Jô? Eso esperó que a si sea, Takeru. Lo mismo digo... lo mismo digo.
Ambos se sonrieron sinceramente. Takeru acarició el pelaje de su amigo; mientras, cada uno sé inmerso en un mar de pensamientos, viendo el próximo atardecer acercarse.
***
Sora recién había llegado a su hogar. Su madre no se encontraba, ya que estaba atendiendo la tienda de flores y su padre casi nunca se hallaba en la casa.
Te pido que no me interrumpas, Piyomon. Mañana debo estudiar y debo concentrarme ¿De acuerdo? Sí. No te preocupes, Sora.
Piyomon, recién llego se acercó al televisor prendió el televisor; pero, Sora como una zombi entró a su cuarto y sin Ningún cuidado cerró la puerta.
Ella se sentó en su escritorio y se recostó sobre sus dos brazos. Sus ojos poco apoco se empezaron a nublar en lagrimas y sus mejillas se empezaron a colorear. Su rostro se ocultaba por sus cabellos y su rostro. En un susurro, se compadeció a sí misma antes de romper en un llanto silencioso.
Lo sé, yo solo quiero la atención para mi misma... no soy capaz de dar algo a los demás... nada...
Dos fugaces imágenes pasaron en su mente antes e ahogarse en sus confusos sentimientos y en su recién y extraña confusión.
***
Con un destellante rayo, Gami se volvió a formar luego de salir de la computadora que se hallaba tirada en la habitación de Angeline. De pronto, Angeline apareció otra vez tumbada en él suelo, jadeando y dejando salir ligeras maldiciones al dolor que ella sentía. Su cuerpo mostraba ligeras chispas, que parecían las secuelas de una electrucación.
Algunas de las chispas eran tan dolorosas que hacían que Angeline se revolcará en el suelo, gritando como poseída. Se ampliaba y volvía a doblarse como un muñeco de trapo. Sus cabellos giraban desorbitadas por cada movimiento brusco que ella producía.
Gami se metió debajo de la cama y apareció con una jeringa con una aguja larga y delicadamente filosa; Aquella jeringa tenia un liquido viscoso y azul casi neon. La gata se acercó y con gran desesperación la chica la cogió de la boca de su mascota y se arrodilló con gran rapidez y con gran fuerza introdujo la aguja por su cuello, acompañándolo con un sordo grito.
Como el liquido empezó a circular por sus venas, la chica se tendió a gatas y empezó a respirar con menor dificultad poco a poco. A los pocos segundos, la chica apartó de su cuello aquel instrumento y sin la menor repulsión la lanzó a la esquina de su habitación, en las que se hallaban otras 5 jeringas vacías allí echadas.
Gami se acercó a su dueña y empezó a ronronearle, acariciando su cuerpo con él suyo. Sin importarle que aun ligeros choques eléctricos que se desencadenaban del cuerpo de su ama, azotaban contra su cuerpo felino.
Angeline la aparto de un empujón y se tiró a su cama agotada, sin importarle que allí estaba su uniforme de preparatoria tendida en la cama.
No te preocupes tanto, Gami. Ya sabes que me he acostumbrado a eso; pero, creo que tendremos que volver al digimundo por un poco más de Catarsis.
Gami de un saltó se trepó junto a su dueña y volviéndose un manojito caliente de piel se tendió al lado de Angeline. La chica se dio media vuelta y empezó a acariciar con ternura a la gata. Gami sabia desde hace 7 años, que era privilegiada; pues, era tal vez la única criatura por a que Angeline demostraba tal ternura.
¿Sabes? Siempre me a agradado, que hagas eso... Gracias.
La gata maulló satisfecha.
¿Será que hago lo correcto, Gami?..Digo, ¿Y si dejó que todo suceda? – La gata la vio a los ojos, asombrada; mientras, la voz de Angeline se rompía.- Digo, no esta en mi jurisdicción salvarlos. Eso es problema de los niños elegidos. ¿No?
Gami se levantó y empezó con su patita a tocar el injerto de su dueña. Angeline, se sentó en su cama y desahogando su tristeza y frustración habló con su vieja amiga.
¡Sí! ¡Sé que esta mierda que a atormentado mí vida, es un maldito digivice! ¡Pero eso no me hace a mí nada! ¡Tu sabes lo que soy! ¡No soy un niño elegido! ¡Nunca lo seré!
Cuando ella se volvió a ver a su gata, ella no le estaba poniendo atención y se hallaba investigando curiosa por debajo las ropas de Angeline. Ella se divertía el ver aquel tumulto moviéndose por entre sus vestidos y dejando escapar de vez en cuando su colita por entre las hendiduras de su ropa.
¿Pero que haces, Gami? –Preguntó curiosa.- Deja ver que travesuras estas haciendo.
La chica apartó las ropas y vio que Gami estaba intentando abrir con sus manitas la envoltura que rodeaba un chocolate. La chica cogió el manjar y vio analíticamente el pequeño bocadillo.
Gami, dio unos pasitos y estaba sobre las rodillas de Angeline; preguntándole algo con los ojos.
¡Sé lo que estas insinuando Gami! Pero, no es nada. Solo lo recibí por decencia. Tu sabes que jamás he comido estas cosas dulces
La chica recordó con cierta amargura las palabras de Jô:
"Creo que podré ayudarte... habla sinceramente; pues, nota que es grave.."
Es que ni siquiera sé por que lo acepté, Gami.- Habló algo despectiva, viendo con algo de ira el chocolate.- Ya decidí tiempo atrás, el tener contacto cercano con cualquiera que puede ser mi próxima victima, no lo deseó.
Hinemiya sin ningún remordimiento lanzó aquel chocolate a la basura. Gami la vio sin titubear y luego se volvió a recostar en la cama. Hinemiya se levantó de su cama y se dirigió a la cocina. Parecía un laboratorio clínico: todo era blanco, con un ambiente antiséptico y luces blancas de Neon. La chica se acercó a la Nevera y saco una Botella de Vodka y sin mostrar síntomas de desagrado tomó un gran sorbo directo de la garrafa. Luego saco una caja de atún y abriéndola con las uñas, la destapó, dejándola en el suelo para que Gami la disfrutará.
Confórmate con el atún, mientras sé de algún buen parque para que puedas cazar pájaros, Gami.
Aun sosteniendo en una de sus manos, la garrafa de vodka se acercó a una grabadora que se hallaba en una desolada habitación que con algo de muebles seria la sala. Puso un cd y empezó a sonar música algo mitica y triste.
Esa canción es mi favorita, Gami... me identifica.- Tomó algo de vodka y comenzó a cantar al ritmo de la música, imitando el sonido de las mezclas con sus manos, como si estuviera invocando hechiceria.- You only see what your eyes want to seeHow can life be what you want it to be
You're frozen
When your heart's not open
-La chica empezó a cantar con tal energía, como soltando todas las amarguras que tenia, sin dejar de verse en un espejo que se hallaba en el recibidor. La música invadía todo el apartamento-
You're so consumed with how much you get
You waste your time with hate and
regret
You're broken
When your heart's not open
-La chica empezó a
usar la botella medio vacía como micrófono, cantando con desgarradora energía y
moviéndose lentamente al ritmo de la música.
Mmmmmm, if I could melt your heart
Mmmmmm, we'd never be apart
Mmmmmm,
give yourself to me
Mmmmmm, you hold the key
-Angeline no saia por que
recordo la cara de Jô y canto con mas tristeza; pero, rodeada con un aire de
misticismo.-
Now there's no point in placing the blame
And you should know I suffer the
same
If I lose you
My heart will be broken
La chica dio unos pasos por el corredor y se tendio al suelo y con sus uñas queria desgarrar su propia piel para evitar sentir la poca alegría por sentir al recordarlo. Su voz continuaba cantando, atrapando la energía que le atraía esa canción.
Love is a bird, she needs to fly
Let all the hurt inside of you
die
You're frozen
When your heart's not open
Angeline dejo de cantar al ver la chocolatina medio enterrada por los vestigios de sus otros viajes. Lentamente y con su típica sequedad camino hasta quedar delante del dulce. Dudo un poco, pero lo levanto y lo vio. La música detrás de ella se acabó.
Usare esta canción en la próxima presentación. – La chica prefirió hablar de sus trabajo a enfrentar sus conflicto interno- ¿No lo crees, Gami?
Pero la gata ni se inmutaba, estaba ya dormida en su cama. Angeline puso una alarma a las 7 pm y se tumbo en su cama, aun sin soltar aquella chocolatina y maldiciéndose a sí misma por haber establecido una conversación tan comprometedora con el digielegido japonés. Detestaba, según ella, que le hubiera tenido lastima.
***
Ya habían pasado dos horas desde que Jô e Izzy hubieran pasado por la puerta de "Sombra de Angel". Sin haberlo planeado, los dos jóvenes se encontraban charlando muy amenamente al ritmo de Blues, tazas de café y anécdotas recientes.
Había momentos en los que Catalina se acercaba le añadía un tono pícaro a la conversación, contándoles alguna cita textual de las cartas de Kevin.
De no ser porque ya había oscurecido, continuarían hablando de temas de amigos; pero, ahora debían centrarse en temas de los niños elegidos.
Izzy sacó de su maletín una computadora portátil y la puso sobre la mesa. El rápidamente tecleó algunas palabras y luego vio con asombro a su amigo.
Según el programa que me cedió Guenai el año pasado, no me indica que exista una sola aguja de control en el digimundo. Pero... ¿Cómo es posible? Sea lo que sea lo que vio Gomamon, no creo que sean las torres de control que hemos combatido desde hace un año atrás.
Jô se sintió algo molesto por ese comentario; pero, Izzy se mostraba muy serio.
¿Estas insinuando que Gomamon? Yo no estoy insinuando nada, Jô. Tal vez estas torres de controle han evolucionado se han vuelto indetectables. O peor aún... va surgir un nuevo enemigo. ¿Tú crees eso? Bueno... – Izzy parecía algo temeroso de alertar a Jô- Averigüé en estos programas por algún digimon que cometiera ataques parecidos a los que me describiste y no halle a ningún digimon que se asemeje en un 100% a siquiera 0.000000009%. Y la únicas veces en queme han sucedido fue cuando intente averiguar algo sobre Arukenimon y Mumimon.
Izzy soltó un suspiro cuando termino esa frase. Jô intentó calmarse tomando un poco de café. (Que por cierto, era su tercera taza) y también soltó un suspiró compara soltar el nerviosismo.
Lo más prudente será que primero vayamos a hablar con Guenai acerca de esto antes de alertar a los demás. Estoy de acuerdo contigo, Jô.-Izzy lo vio con seriedad, ero, tranquilo por ver la madurez de Jô- Llamaré a los demás esta noche y reuniré a un pequeño grupo para ir a visitar a nuestro viejo amigo. Cuenta contigo. Listo.
Ambos sonrieron con satisfacción al ver como podrían manejar la situación. Y que a pesar de la pequeña trifulca no había empeorado el tratar tan vital tema y al contrario consiguieron tener un ameno rato.
De un momento a otro, dos chicos se sentaron en la mesa con ellos. Cada uno al lado de los jóvenes elegidos.
¡Pero, mira con quien nos hallamos acá!
Invítanos un café, Jefe. ¡¿Qué?!- preguntó asombrado Jô al ver a los recién llegados.
Sin embargo, Izzy respondió con mucha cortesía y habilidad a los recién llegados.
Buenas Noches, George, Kevin. Tiempo sin vernos. Puedes aprender una que otra cosita de Izzy.- George empezó con sus pequeñas jugarretas, viendo el menú del café- Por ejemplo: la cortesía, el saludar decentemente y no con dos piedras en la mano. George... – Dijeron los tres con una gran gota sobre sus cabezas.
No tardó mucho para que Catalina se acercara a la mesa, sin antes hacerles a Izzy y a Jô una mueca de "Finjan que no me conocen" con las manos.
¿Alguna otra orden o la cuenta?
George puso su mano sobre la mano de Catalina y la vio coquetamente, mientras, con la otra mano se acomodaba los mechones de la cara.
Si, porque nos vamos los dos juntos a un restaurante muy intimo y tenemos una cita privada.
A Jô e Izzy se les cayó la cara de vergüenza; mientras, Kevin reía divertido; aunque, sin imaginar que era su pariente querida. Por que de saberlo, ya le hubiera hecho sus famosas llaves a George.
Lo siento, querido. Pero estoy en turno.
La chica se acercó a George y le empezó a hablar al oído. Aunque lo suficientemente alto como para que los demás escucharan.
Además, solo saldría contigo si quisiera volverme lesbiana.
Los tres estallaron en risas; mientras, nubes oscuras y luces opacas ocupaban el sobrio rostro de George que caía en otra mini depresión porno haberla conquistado. Pero, no tardo mucho ya que todos vieron sorprendidos a Jô que no paraba de desternillarse de la risa.
Él día de hoy no esta comportando como siempre. – Comentó George. No era asi como me lo describías tus cartas, Primito- Aseveró Catalina con una gota en la cabeza y sentándose con ellos. ¡¿Primito?!- Preguntó sorprendido Kevin ¿Con ustedes tampoco se comporta como siempre?- Preguntó Izzy ignorando la pregunta de Kevin.
Al sentir que toa la conversación se centró en él. Jô intento salir de la mesa; ero, lo acorralaron. Asi que técnicamente, la inquisición española había comenzado.
No, él cambió radicalmente desde que ingresó a la preparatoria.-Comentó Kevin, sin dejar de ver a la mesera que muy confiadamente se había sentado juntó a él. Debe ser el piropo de las chicas bonitas. – George hablo con picardía.
Jô intentó parar eso, preguntándole como lo habían localizado, ellos solo señalaron hacia una esquina del café en donde había una cámara de vigilancia y continuaron hablando.
O la adulación del maestro.- Kevin se unió al juego. O el nuevo uniforme. Pero la razón numeró uno y la mas sospechada es... ¡¡ANGELINE HINEMIYA!!- Gritaron los dos en coro, señalando con victoria hacia una estrella imaginaria. ¡¿QUÉ PATRAÑAS ESTÁN HABLANDO, USTEDES DOS?! –Jô se levantó de su silla como un cura ofendido ante la confesión de un seguidor suyo. (Pues, los vio a ellos como si fueran condenador pecadores) ¡¿Quién?!- Preguntó curioso Izzy al ver el nerviosismo de su amigo.
Los ojos de los dos amigos brillaron como si hubieran esperado el que les hicieran esa pregunta y con igual semblante de triunfo pusieron varias fotos de ella sobre la mesa. Eran tatas que les sorprendía a Catalina que su primo fuera fanático de la chica y a Izzy no se le ocurrió idea lógica de que tantas fotos cupieran en los reducidos bolsillos del uniforme de la preparatoria Odaiba.
Vaya, una chica bonita hace que un hombre pierda los estribos.- Comentó con aire de filosofa Catalina. Si, tienes razón. – Aseveró Izzy divertido.- Pero eso no explica el que se halla enfrentado a Ishida y lo halla provocado hasta recibir un golpe de él. ¡¿Qué haz dicho?!- Dijeron al uníoslo Kevin, George y Catalina; Mientras, veían asombrados a Jô de tal manera que lo hicieron sonrojarse. Solo digo de lo que fui testigo. – Comentó filosófico, tomando un sorbo de su 2 expreso.
A Jô no se le ocurría como reaccionar ante tantas fotos de la chica, ni ante las miradas y comentarios que giraban entorno de su comportamiento amigable con Hinemiya y no tan agradable con Matt.
Kevin y George le daban júbilos y vivas por enfrentarse con Matt y le dieron la total razón, a pesar que no sabían el motivo de la disputa. Catalina aplaudía emocionada de la idea de que él tímido chico que tanto había conocido por las cartas de su primo menor se enamorara e Izzy analizaba la influencia de Angeline con el cambio de Matt, aunque no dejaba d divertirse por los comentarios de sus dos amigos; pero, algo le llamó la atención de varias de ellas.
¿Esto es un fotomontaje, no?- Preguntó dudoso sin dejar atrás su rubor.- Digo... estos lugares no parecen Tokio, es más no son de Japón.
Catalina e Izzy se acercaron a Jô para ver la foto y vieron a la chica de cabellos plateados, con un buzo de cuello de tortuga y una falda hasta la pantorrilla y unas botas de cuero todas negras, con un maquillaje gris y oscuro, resaltando sus ojos violeta, caminando seria pero tranquila. Pero, en el fondo se apreciaba la famosa señal de metro redonda con borde rojo y en su centro, el letrero de borde azul y con la famosa palabra: "underground" escrita en letras negras. Y las escaleras para bajar por el metro.
Yo conozco este lugar. –Comentó curiosa y animada Catalina.-Bueno, más bien lo he visto en los cines y películas. Eso es un distrito de Londres.
George sacó de su bolsillo una hoja de papel y empezó a leer lo escrito en él.
Angeline Hinemiya, actualmente tiene 17 años y se cree que nació el 29 de febrero. ¡Un momento!- Los detuvo Izzy intrigado.- ¿Haz dicho "se cree"? Sí, o al menos es lo que dicen sus células. – Continuó leyendo.- La chica por ser uno de las privilegiadas en pertenecer al selecto grupo de no tener señales de tener familiares, a sido cuidada por el gobierno del Japón. Bueno, eso todo ciudadano japonés lo sabe. Cuando existe un huérfano este se cuida hasta tener la mayoria de edad. Entiende bien, Jô.- Respondió Kevin.- No tiene NINGUNA señal de que halla tenido familia. En el caso de los huérfanos ellos no saben quienes son sus padres; pero, los registros de los orfanatos, hospitales, en algún lado deben dar información de ellos; pero, en el caso de ella no hay nadie. Por lo menos que halla vivido en Japón. Por eso, es que el recorrió todo país que accediera a que ella buscara información familiar; mientras, le trataban una enfermedad. ¿Una enfermedad?- Preguntó preocupado Jô al recordar el brazo de Hinemiya. No se porque la información era clasificada. – Comentó con gran furia George.- Y mi pc alquilada no me funciono. ¿Puedo intentarle en este?-
George Preguntó con ojos llorosos a Izzy al que respondió amable entregándosela. Sin antes cerrar los programas referentes al digimundo. Este conectó su celular a la entrada de MODEM y empezó a teclear rápidamente en la web. Izzy intentaba ver que era lo que hacia George y le perdió el hilo de la historia.
Hemos averiguado que entre sus destinos a estado Inglaterra, China, Rusia, Bulgaria, Alemania, Egipto, Mi querida cuba * suspiró * Estados Unidos, Colombia, Argentina, Brasil, Portugal, Francia, La India y otros países que ni idea.- Comentaba Kevin.- Y siempre ha trabajado desdé que consiguió su libertad al demostrar que tenia cordura, a trabajado en lugares de gran afluencia y estatus: Discotecas, Cafés, teatros. Técnicamente se a codeado con los más conocidos y cools dela música y el arte
De pronto, encendieron un televisor en el café e interrumpieron la música. Una señora habló por micrófono que pusieran atención a esta noticia. Catalina les explico que la dueña siempre pone cualquier cosa referente a esa noticia; ya que su hijo había sido victima de eso. Todo el salón se puso en silencio.
Era una noticia en directo de La CNN.
Al fondo de una rubia periodista, aparecía una devastada carretera, y varias ambulancias y carros de policías aparcados allí. Algunos oficiales ponían varios cuerpos en bolsas y los subían a un camión como si fueran bultos de comida.
Buenos Noches, Soy Mary Oldman reportando en el kilómetro 15 al norte de Houston, Texas. Como todos saben ya es el 45 de una ola de asesinatos a escala mundial. Como siempre a seguido los mismos requisitos. Niños o adolescentes entre 3 y 19 años, desangrados en su totalidad por dos hendiduras en el cuello, con un extraño logotipo en sus heridas, y siendo atacadas en medio de una catastofre natural o movimiento de la naturaleza. En este parece que hubo dos testigos; pero, sus memorias fueron alteradas y no recuerdan ni quienes son. Como siempre no hubo huellas ni una prueba. Que lamentable.- comentó sorprendido por tal acto de atrocidad. Y pensar que esos son los que les quitan prestigios a los verdaderos locos. – Comento Triste George. Si alguien le hace algo asi a mi familia, se iría directo al infierno.- Comentó furico Kevin. Como acto de respetó por los fallecidos, pasaremos sus fotos.- Comentó Mary, volviendo la noticia al estudio.
Jô e Izzy se vieron sorprendidos al ver las fotos de varios fallecidos. El Horror y el miedo iluminaron sus miradas.
Esos dos chicos, los ví cuando fui a Australia con Cody. – Pensó asustado al ver el rostro de un chico de unos 11 años pelirrojo y una chica de cabellos oscuros. ¡A esos dos los ví en Moscú! – Pensó horrorizado al ver una niña de cabellos negros y ojos verdes.
Sin que ellos no supieran, el sentimiento de incertidumbre era compartido por el resto del grupo de niños elegidos en el Japón. Pues, todos los canales estaban dando la misma noticia para advertir a toda la comunidad. Cada uno recordaba a alguien que conocieron en su viaje por el mundo para derribar las torres de control erguidas en la época de navidad del 2001.
Todos menos uno...
***
Ken al contrario de los demás, estaba alistando una ropa muy formal, enfrente de la vista de su madre y de wuormon. Todos se notaban algo cabizbajos. Ken alzó su vista y e topó con la foto de Osamu.
Él se acercó al retrato y por unos segundos lo vio con una sonrisa amarga pero tierna y poso su mano sobre aquella foto, intentando como acariciar el rostro de su fallecido hermano.
Mañana es el día... – murmuró Ken con tristeza.
Su madre se acercó a él y abrazo a Ken por detrás de él, con ternura. Instintivamente sabia lo que sentía, asi que le dio ánimos muy cálidamente. Haciendo que Ken se sonrojara levemente ante el cariño de su madre.
Él esta muy orgulloso al ver, lo buen hijo que eres para mí y lo buen amigo que eres. Gracias mamá. Ahora vé a dormir, mañana será un día muy importante para nosotros. Sí, mamá.
Él se retiró a su cuarto, seguido por u fiel digimon y con suavidad cerró la puerta.
¿Seguro que mañana no te puedo acompañar, Ken?- Preguntó preocupado Wuormon. No te preocupes, mañana será un bello día. Me enorgullecería presentarte ante él; pero, prefiero cuando mi familia no se encontré ¿de acuerdo? Esta bien, Ken.
Ambos ingresaron a la cama de Ken y Wuormon rápidamente se quedo dormido; pero, antes de que Ken pudiera conciliar el sueño, musitó: "Mañana serán 7 años... 7 largos años, desde que él no volvió... desde que Osamu se fue..."
***
Angeline se encontraba caminando muy serena por los tranquilos puertos de la zona de Odaiba. Allí se encontraban solitarias bodegas; pero, no muy lejos de allí, había un montón de jóvenes vestidos de forma estrafalaria y punk haciendo fila y bailando al son de la música que se podía escapar en una inmensa bodega. La más grande de ahí.
En la entrada os grandes y corpulentos hombres e encontraban en la entrada permitiendo quien entrar o salir. En sus oídos se encontraban pequeños comunicadores se les podia ver dos pistolas camufladas cada uno.
Cuando el más grande de los dos vio acercarse a Angeline, la llamo con la mano, mientras le gritaba.
¡Llegas cinco minutos tarde, el jefe te llama!
La chica ingresó al local como si nada.
Nadie podría imaginar el hallar cinco pistas de baile. Inmensas pantallas gigantes en cada extremo de la bodega. Luces de neon brillando al son de la música, Bailarines en varios postes estratégicamente puestos en el lugar. Y Asemejando varias tarimas se encontraban conectadas solo con escaleras en las que la gente bailaba. En el centro de toda la bodega se encontraba una gran y circular cantina. Con varias sillas de acero y gran cantidad de licor.
Cuando ella dio unos pasos hacia alla, varias luces se enfocaron en ella y una voz masculina y animada empezó a hablar.
¡Él momento que todos esperaban!¡Aquí esta! ¡La d.j venida desde la famosa Laundry en Londres, la Dj más conocida! Taiki.. – musitó mientras con una mano ocultaba u ojos e as incandescentes luces. ¡ La imitadora de lo mejor! ¡Con ustedes! ¡La gran! ¡ La mejor! ¡Nuestra cantinera estrella! ¡ Y gran cantante!¡Dj. Silver Angel!
Un hombre corpulento e logística se acercó y le dio un micrófono a Angeline; mientras, esta le daba su chaqueta.
No sé que fue lo que te fumaste; pero, hoy es lunes de Rock.- Comentó con algo e sequedad; pero, haciendo que todos enloquecieran en gritos de algarabía. Pero, estamos animados de verte actuar hoy, Silver Angel. Además, es la primera vez en toda tu vida en la que llegas tarde, no puedes negarme capricho.
La chica suspiró al ver que los gritos de aceptación aumento con los comentarios de Taiki, su jefé. Además, todas las luces se centraron en ella y las pantallas solo trasmitían su imagen. La chica caminó hacia su lugar de trabajó... el inmenso bar. Ella vio directo a la cámara que la enfocaba y les dijo a todos lo presente: ¿Quieres que los divierta con un dance?"
Al ver que la chica actuaría, Taiki soltó una risa de triunfo; mientras, todos los presentes estallaban en gritos eufóricos.
Ella se apoyó en la barda dl bar y dio un gran saltó quedando encima de esta; volvió bajar al otro lado del bar; allí, se hallaba una pequeña consola en la que ella se empezó a "divertir" produciendo extraños y nuevos sonidos en los que ella cantaba extrañas canciones. Haciendo que a diferencia de ella, todos pasaran una noche enérgica y emotiva. Pero ella estaba toda la noche concentrada sirviendo bebidas, remezclando música, alimentándose de la energía que los demás expulsaban al saltar y bailar.
***
Pronto fue media noche y Sora se habia quedado dormida sobre su escritorio; pero, un sonido familiar la despertó. L abrir sus ojos, vió que su digivice tinteleaba, aun dormida lo cogio con su mno y leyó lo que estaba escrito.
Sus ojos se abrieron de sorpresa y el sueño que le invadía se desvaneció de repente al comprender lo que había leído.
Ella salio de su cuarto y busco a hurtadillas todo el apartamento. La sala estaba vacía. La cocina tenia los trastes de la comida que seguro consumió Piyomon y su madre. En el cuarto de sus padres, solo se hallaba su madre. El baño estaba solo y el balcón solo estaba habitado por una paloma que pasajeramente estaba allí descansado.
Sus ojos se llenaron de lagrimas al no ver ni una sola señal de Piyomon... Lo que estaba escrito en su aparato, podría ser real.
Con toda la prisa del caso prendió su computador y extendió su Digivice hacia la pantalla.
Aguanta, Piyomon... aguanta.
Fue Lo único que pudo decir, antes de que ella fuera atraída a la pantalla y se desvaneciera en el aire.
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Tatiana: Bueno, bueno. Desde hoy les pediré que tengan andando sus buscadores de Mp3; pues, no habra capitulo que se escapé sin que tengan que bajar alguna canción. Esta vez, usamos "Frozen de Maddona" Creó que es testimonio en clave de la vida de Angeline y además, no es launica vez en que esta canción aparezca acá.
Tatiana: Jeje, creo que por no hacer el capitulo más largo corte algunas escenas de este capitulo, asi que serán desvelados en el capitulo 3
Tatiana: Comentarios y trifulcas a tv_maya@hotmail.com
