Capítulo 4: de bailes, disfraces y romances
La salida a Hogsmeade fue un poco... loca, nunca me imaginé que Draco fuera tan divertido, y jamás me imagine que yo pudiera sonreír tanto. Gracias al cielo estábamos solos, él compra en una parte muy exclusiva del pueblo, y yo nunca había ido, así que él fue mi guía. Prácticamente fue la primera vez que salí por voluntad de Hogwarts, la primera vez que visité Hogsmeade, aunque el permiso lo había obtenido desde la primera salida.
-te vez muy linda cuando sonríes- me dijo Draco
-no lo hago a propósito- respondí tratando de contenerme. Draco se probaba los trajes más ridículos que encontraba, y como Halloween acababa de pasar, así que había muchos trajes ridículos en los estantes.
-deberías de hacerlo más seguido- me dijo
-bueno, no siempre hay alguien que me haga reír delante de mí.
-¡ah claro! ¡Aquí tienes a tu bufón!- me dijo bromeando
-pues es lo que pareces en este momento
-estos trajes muggles son realmente ridículos
-nunca te imaginé de esta manera
-¿en serio?
-Bueno siempre eras el tipo arrogante y engreído que odiaba a los muggles y a los sangre sucia, que se rodeaba de idiotas con dinero y que rivalizaba con el niño estrella de Gryffindor.
-bueno y ¿ahora que piensas de el engreído de Slytherin?
-que basta con tratarlo un poco para que se muestre como es
-solo me mostré contigo porque tu te mostraste conmigo, solo te correspondo
-bueno... ya es ganancia.
Regresamos al castillo, pero al pasar por la tienda de bromas y dulces, encontramos a Potter y a los demás, casualmente iban Fred y George, y al parecer Potter le había dicho a Giny que fueran al baile juntos, pues platicaban muy amenamente. George volteó a verme, no iba con Katie, así que me regaló una sonrisa a la que no me pude resistir y le correspondí; Draco se dio cuenta y solo me dio un ligero codazo, a manera de burla.
-Le gustas- me dijo cuando los pasamos
-lo sé- respondí
-¿te lo dijo?
-Anoche
-eso no me lo has contado
-tampoco me habías contado que eres el admirador secreto de Hermione Granger
-bueno... ¿quién te lo dijo?
-la lechuza que le da las cartas a la chiquilla no es la tuya, pero es la única que come el alimento de la tuya... solo tú puedes darle un alimento tan caro a una lechuza
-¡me descubriste!
-¿por qué no la invitaste al baile?
-porque entonces todos se darían cuenta
-y te atacarían como me atacaste a mí
-¡exactamente!
Llegado el día del baile todo era un caos, mi dormitorio estaba patas arriba, mis compañeras tenían todo desordenado, mientras que yo había puesto ya todo en su lugar.
-¿no piensas maquillarte?- me preguntó Martha buscando entre sus cosas el par de zapato que le faltaba
-¿con quien irás?- me preguntó Nancy
-ya lo sabrán- respondí intentando pedirle a Martha sus cosméticos
-¿me dejas peinarte?- me preguntó Nancy nuevamente
-pero no muy apretado
-no te preocupes, te lo dejaré suelto, quizá un poco rizado
-¿usaras poción risadora?
-si, pero la preparó mi novio
-ah entonces adelante
Se tardaron mucho en mí, era la primera vez que acudía a un evento y que me quedaba en Hogwarts para navidad, había muchas dudas alrededor de quien sería mi pareja, muchos decían que sería alguien de Hafflepuff o de Ravenclaw, pero nadie sabía la verdad. Cuando me miré en el espejo parecía otra, mi cabello lucía hermoso, mis ojos resaltaban don el delineador y las pestañas rizadas, el color negro me favorecía aún mas con la túnica, que era de terciopelo negro con el pecho en rojo, ajustada a la cadera, un tanto gótica. Cuándo bajé las escaleras, Draco me esperaba boquiabierto, me extendió la mano y se la tomé.
-de haber sabido que lucirías así, te hubiera invitado también el año pasado
-el año pasado aún no nos hablábamos
-hubiera comenzado
Cuando salimos y entramos en el gran salón, éramos la máxima atracción, Pansy lucía como una reina muggle amargada y con dos guaruras, ya que iba con Crabbe y Goyle. Hermione lucía igual de bonita que el año pasado, pero lucía una gran sonrisa de ir con Ron, quien parecía un idiota enamorado, Giny y Potter lucían como cualquier pareja de amigos, Lee, Fred y George lucían tan radiantes como de costumbre, y sus parejas Angelina, Alicia y Katie respectivamente lucían hermosas. Algo en Katie me llamó la atención y era la forma en la que miraba a George, parecía estar enamorada de él, parecía anonadada con él.
-¿qué es lo que miras?- preguntó Draco intrigado
-nada en especial- mentí
-sabes que puedes confiar en mí- me dijo tomando mi mano
-no es nada, en serio
-¿es George?
-no exactamente
-entonces
-es Katie... la manera en que lo mira
-parece una tonta
-está enamorada
-¿le corresponde?
-no, él solo quiere divertirse
-¿cómo sabes?
-porque él está platicando con Lee y Fred, no muestra interés hacia ella, si no hacia la fiesta.
-Es momento de comenzar el baile- dijo el profesor Dumbledore con la voz amplificada mágicamente.
Por lógica el primero que abriría el baile sería Harry, ya que fue él el campeón del Torneo el año pasado. Así lo hizo, pero poco a poco se le unieron más parejas.
-¿quieres bailar?- me preguntó Draco
-a eso vinimos ¿cierto?- respondí.
Tomó mi mano y me llevó dulcemente hacia la pista, puso una de sus manos en mi cadera y la otra sujetaba mi otra mano, era una balada, así que no nos costó trabajo seguir el ritmo. Poco a poco me olvidé de las demás personas que estaban a nuestro alrededor, era como un cuento de hadas, me sentía volando llevada solo por la música, Draco puso mi mano sobre sus hombros y asió mi cintura con ambas manos, nos pegamos más y seguimos los compases. Yo sentía esa estrechez, era algo alucinante, cuando la música paró y Draco y yo hicimos la reverencia acostumbrada, mi nube se esfumó con los aplausos de los que estaban a nuestro alrededor, cuando pude voltear, todos estaban haciéndonos un círculo para vernos mejor. No era para menos, Draco llevaba puesta una túnica verde esmeralda que hacían que sus ojos relucieran y que su cabello platinado brillara más que de costumbre.
-Creo que tengo un poco de calor- le dije a Draco
-Vamos a dar un paseo, yo también lo siento
Tomó mi mano y salimos al jardín, nos sentamos en una de las bancas que habían puesto especialmente para esta ocasión.
-Joven Malfoy, Señorita Adams, ¡que bien que ya sean amigos!- dijo Snape burlonamente viendo que íbamos tomados de la mano -lamento interrumpir este bello momento, pero necesito hablar con Malfoy a solas- concluyó.
Me quedé sola, así que decidí dar un paseo por mi lugar preferido, el lago. Justamente allí estaba, cuando alguien tomó mi hombro, me hizo girar y me besó.
-lo siento- dijo George cuando todo hubo terminado -luces irresistible esta noche -no es para tanto- dije tratando de ocultar mi rostro sonrojado
-¿Draco es tu novio?
-solo somos amigos
-ah... me preguntaba si...
-George- interrumpí -¿te gusta Katie?
-¿por qué lo preguntas?
-porque ella está enamorada de ti
-¿cómo lo sabes? ¿Has hablado con ella?
-no, pero he visto como te mira, esa mirada de niña enamorada que....
-pero yo solo tengo ojos para ti- y volvió a besarme
-no hagas eso- le dije sin corresponderle esta vez
-¿qué sucede?
-acabas de romperle el corazón a Katie
-¿cómo?
-mira- le hice una seña con la cabeza para que volteara, detrás de él estaba Katie Bell con el rostro lleno de lágrimas mirándome como si yo fuera la mala del cuento, y mirándolo a él con dolor infinito, ella se echó a correr para adentro del castillo y le hice una seña a George para que fuera tras ella.
-Eso fue muy noble- dijo una voz detrás de mí
-fue tonto- respondí rompiendo en llanto. Draco me abrazó aún más tierno que antes, me dijo que no valía la pena, que yo podía ser su hermana menor y que había quienes me querían aún más que él.
-¿cómo quien?, nadie me conoce aquí
-como yo.
-Draco...- me abracé aún más fuerte de él.
La salida a Hogsmeade fue un poco... loca, nunca me imaginé que Draco fuera tan divertido, y jamás me imagine que yo pudiera sonreír tanto. Gracias al cielo estábamos solos, él compra en una parte muy exclusiva del pueblo, y yo nunca había ido, así que él fue mi guía. Prácticamente fue la primera vez que salí por voluntad de Hogwarts, la primera vez que visité Hogsmeade, aunque el permiso lo había obtenido desde la primera salida.
-te vez muy linda cuando sonríes- me dijo Draco
-no lo hago a propósito- respondí tratando de contenerme. Draco se probaba los trajes más ridículos que encontraba, y como Halloween acababa de pasar, así que había muchos trajes ridículos en los estantes.
-deberías de hacerlo más seguido- me dijo
-bueno, no siempre hay alguien que me haga reír delante de mí.
-¡ah claro! ¡Aquí tienes a tu bufón!- me dijo bromeando
-pues es lo que pareces en este momento
-estos trajes muggles son realmente ridículos
-nunca te imaginé de esta manera
-¿en serio?
-Bueno siempre eras el tipo arrogante y engreído que odiaba a los muggles y a los sangre sucia, que se rodeaba de idiotas con dinero y que rivalizaba con el niño estrella de Gryffindor.
-bueno y ¿ahora que piensas de el engreído de Slytherin?
-que basta con tratarlo un poco para que se muestre como es
-solo me mostré contigo porque tu te mostraste conmigo, solo te correspondo
-bueno... ya es ganancia.
Regresamos al castillo, pero al pasar por la tienda de bromas y dulces, encontramos a Potter y a los demás, casualmente iban Fred y George, y al parecer Potter le había dicho a Giny que fueran al baile juntos, pues platicaban muy amenamente. George volteó a verme, no iba con Katie, así que me regaló una sonrisa a la que no me pude resistir y le correspondí; Draco se dio cuenta y solo me dio un ligero codazo, a manera de burla.
-Le gustas- me dijo cuando los pasamos
-lo sé- respondí
-¿te lo dijo?
-Anoche
-eso no me lo has contado
-tampoco me habías contado que eres el admirador secreto de Hermione Granger
-bueno... ¿quién te lo dijo?
-la lechuza que le da las cartas a la chiquilla no es la tuya, pero es la única que come el alimento de la tuya... solo tú puedes darle un alimento tan caro a una lechuza
-¡me descubriste!
-¿por qué no la invitaste al baile?
-porque entonces todos se darían cuenta
-y te atacarían como me atacaste a mí
-¡exactamente!
Llegado el día del baile todo era un caos, mi dormitorio estaba patas arriba, mis compañeras tenían todo desordenado, mientras que yo había puesto ya todo en su lugar.
-¿no piensas maquillarte?- me preguntó Martha buscando entre sus cosas el par de zapato que le faltaba
-¿con quien irás?- me preguntó Nancy
-ya lo sabrán- respondí intentando pedirle a Martha sus cosméticos
-¿me dejas peinarte?- me preguntó Nancy nuevamente
-pero no muy apretado
-no te preocupes, te lo dejaré suelto, quizá un poco rizado
-¿usaras poción risadora?
-si, pero la preparó mi novio
-ah entonces adelante
Se tardaron mucho en mí, era la primera vez que acudía a un evento y que me quedaba en Hogwarts para navidad, había muchas dudas alrededor de quien sería mi pareja, muchos decían que sería alguien de Hafflepuff o de Ravenclaw, pero nadie sabía la verdad. Cuando me miré en el espejo parecía otra, mi cabello lucía hermoso, mis ojos resaltaban don el delineador y las pestañas rizadas, el color negro me favorecía aún mas con la túnica, que era de terciopelo negro con el pecho en rojo, ajustada a la cadera, un tanto gótica. Cuándo bajé las escaleras, Draco me esperaba boquiabierto, me extendió la mano y se la tomé.
-de haber sabido que lucirías así, te hubiera invitado también el año pasado
-el año pasado aún no nos hablábamos
-hubiera comenzado
Cuando salimos y entramos en el gran salón, éramos la máxima atracción, Pansy lucía como una reina muggle amargada y con dos guaruras, ya que iba con Crabbe y Goyle. Hermione lucía igual de bonita que el año pasado, pero lucía una gran sonrisa de ir con Ron, quien parecía un idiota enamorado, Giny y Potter lucían como cualquier pareja de amigos, Lee, Fred y George lucían tan radiantes como de costumbre, y sus parejas Angelina, Alicia y Katie respectivamente lucían hermosas. Algo en Katie me llamó la atención y era la forma en la que miraba a George, parecía estar enamorada de él, parecía anonadada con él.
-¿qué es lo que miras?- preguntó Draco intrigado
-nada en especial- mentí
-sabes que puedes confiar en mí- me dijo tomando mi mano
-no es nada, en serio
-¿es George?
-no exactamente
-entonces
-es Katie... la manera en que lo mira
-parece una tonta
-está enamorada
-¿le corresponde?
-no, él solo quiere divertirse
-¿cómo sabes?
-porque él está platicando con Lee y Fred, no muestra interés hacia ella, si no hacia la fiesta.
-Es momento de comenzar el baile- dijo el profesor Dumbledore con la voz amplificada mágicamente.
Por lógica el primero que abriría el baile sería Harry, ya que fue él el campeón del Torneo el año pasado. Así lo hizo, pero poco a poco se le unieron más parejas.
-¿quieres bailar?- me preguntó Draco
-a eso vinimos ¿cierto?- respondí.
Tomó mi mano y me llevó dulcemente hacia la pista, puso una de sus manos en mi cadera y la otra sujetaba mi otra mano, era una balada, así que no nos costó trabajo seguir el ritmo. Poco a poco me olvidé de las demás personas que estaban a nuestro alrededor, era como un cuento de hadas, me sentía volando llevada solo por la música, Draco puso mi mano sobre sus hombros y asió mi cintura con ambas manos, nos pegamos más y seguimos los compases. Yo sentía esa estrechez, era algo alucinante, cuando la música paró y Draco y yo hicimos la reverencia acostumbrada, mi nube se esfumó con los aplausos de los que estaban a nuestro alrededor, cuando pude voltear, todos estaban haciéndonos un círculo para vernos mejor. No era para menos, Draco llevaba puesta una túnica verde esmeralda que hacían que sus ojos relucieran y que su cabello platinado brillara más que de costumbre.
-Creo que tengo un poco de calor- le dije a Draco
-Vamos a dar un paseo, yo también lo siento
Tomó mi mano y salimos al jardín, nos sentamos en una de las bancas que habían puesto especialmente para esta ocasión.
-Joven Malfoy, Señorita Adams, ¡que bien que ya sean amigos!- dijo Snape burlonamente viendo que íbamos tomados de la mano -lamento interrumpir este bello momento, pero necesito hablar con Malfoy a solas- concluyó.
Me quedé sola, así que decidí dar un paseo por mi lugar preferido, el lago. Justamente allí estaba, cuando alguien tomó mi hombro, me hizo girar y me besó.
-lo siento- dijo George cuando todo hubo terminado -luces irresistible esta noche -no es para tanto- dije tratando de ocultar mi rostro sonrojado
-¿Draco es tu novio?
-solo somos amigos
-ah... me preguntaba si...
-George- interrumpí -¿te gusta Katie?
-¿por qué lo preguntas?
-porque ella está enamorada de ti
-¿cómo lo sabes? ¿Has hablado con ella?
-no, pero he visto como te mira, esa mirada de niña enamorada que....
-pero yo solo tengo ojos para ti- y volvió a besarme
-no hagas eso- le dije sin corresponderle esta vez
-¿qué sucede?
-acabas de romperle el corazón a Katie
-¿cómo?
-mira- le hice una seña con la cabeza para que volteara, detrás de él estaba Katie Bell con el rostro lleno de lágrimas mirándome como si yo fuera la mala del cuento, y mirándolo a él con dolor infinito, ella se echó a correr para adentro del castillo y le hice una seña a George para que fuera tras ella.
-Eso fue muy noble- dijo una voz detrás de mí
-fue tonto- respondí rompiendo en llanto. Draco me abrazó aún más tierno que antes, me dijo que no valía la pena, que yo podía ser su hermana menor y que había quienes me querían aún más que él.
-¿cómo quien?, nadie me conoce aquí
-como yo.
-Draco...- me abracé aún más fuerte de él.
