Escrito por Javeman
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Capítulo 4: Prisioneras
YOLEI
Desde el instante que nos atacó ese maniático que había estado escondida en el patio, detrás de unos arbustos. Nunca pensé que la predicción de Sora sería cierta, si tan sólo no les hubiera insistido tanto... nada de esto estaría pasando. ¿Por qué tenía que tocarnos una familia como ésta? Fue entonces cuando escuché unas pisadas, acompañadas de un sonido metálico, unas tijeras...
Era Bobby, al parecer no me había visto, pero si me quedaba ahí me descubriría cuando pasara, tenía que salir de ahí... fue entonces cuando vi una pequeña grieta en la pared, no era muy grande, así que tomé una piedra que había ahí y luego de darle un par de golpes la grieta era lo suficiente grande para entrar, así que entré.
Estaba dentro de la mansión otra vez, pero eso no significaba que estaba a salvo, sobre todo cuando sentí que algo me rozaba el pie...
"AAAAAH!!"
Unas tijeras se asomaban por la grieta por la que acababa de entrar, ¡Bobby me había visto entrar, tenía que huir!
Salí por la puerta hacia un pasillo, opté por la izquierda, y corrí hasta llegar al recibidor de la entrada, me dirigí hacia la puerta de entrada, pero ésta estaba con llave. Bobby estaba entrando por la puerta que venía del pasillo, así que corrí hacia mi única opción, las escaleras.
Corrí hacia arriba, ya en el segundo piso, a la derecha había un callejón sin salida, pero a la izquierda había una puerta solitaria... mi única vía de escape. Corrí hacia ella, pero mientras corría me di cuenta que el piso estaba débil, cómo que se hundía... al parecer pisé el punto más debil, porque todo el piso comenzó a venirse abajo, todo crujiéndose debajo mío. No sé como pasó, pero alcancé a colgarme del borde opuesto, hice todo mi esfuerzo por subir, así que trepé y ya estaba a salvo, miré hacia atrás y para gran suerte mía, Bobby aún estaba del otro lado, y el hueco era tan grande que él no podía seguirme. Vi cómo se daba vuelta, frustrado y se iba de ahí. Ahora. mi única salida parecía ser tras esa puerta... si no, estaba atrapada.
SORA
Esperé un rato a que el lugar estuviera despejado, para luego ir a la bodega donde habían encerrado a Kari, intenté ir por la puerta pero estaba bajo llave, y a pesar de que la puerta ya estaba bastante vieja, no parecía lo suficientemente débil como para poder tumbarse. Miré por la ventana que había al lado, dentro de la bodega había una celda con barrotes, y dentro de ella estaba Kari, pero no era la única persona dentro de la celda, había alguien más, pero no pude distinguir a esa persona, la cosa es que ambos parecían inconscientes, eso si no estaban muertos. Mejor buscaba la manera de entrar rápido, antes que le pudiera pasar algo a Kari.
Continuará...
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¿Cómo está quedando la historia? ¿Da miedo? Bueno, espero tenerlos intrigados con el fic, ya que esto apenas es el comienzo.
Con respecto a Jun, no se preocupen, aún está viva, es sólo que ha estado escondida durante todo este tiempo. Ya le tocará narrar su parte de la historia.