VI
El sol y la luna se pusieron varias veces y ellos seguían juntos.
Todas las noches las pasaban juntos en la sala abandona de Slytherin, en el día recorrían los jardines blancos, los pasillos solos, la biblioteca.
Retornó la normalidad. Los alumnos volvieron y la rutina se instaló de nuevo en Hogwarts.
Etili se mantenía en los brazos de Draco, veían un trozo de la noche a través de la ventana de la torre y se lo soltó de una vez:
- Draco... ¿Me amas? -
Le miró con enojo, ella tuvo un poco de miedo.
-¿No te lo he demostrado? -
- No es eso, pero es que nunca me lo has dicho -
Acarició sus cabellos, sus hombros, su cuello... cerró los ojos y dijo al fin - sabes bien cuanto te amo -
El invierno a cada paso se hacia mas frío, lo cual los obligaba a mantenerse aun más cerca. Trabajaban duramente, por algo eran los mejores de las clases, reían (habían aprendido a reír juntos), pero no conocían, que cada noche, a cada paso una sombra oscura los seguía, los vigilaba y les preparaba algo nuevo...
- Draco - el solo alzó la ceja en señal de escucharla - creo que ya hemos estudiado mucho tu ¿no? - Etili le quitó el libro de las manos y ocupó su lugar sentándose en la mesa, frente a Draco. Él la miró divertido y besó sus labios.
-¿Qué quieres hacer? -
-¿Me das helado? -
- Piénsalo bien, estamos en mi habitación (la sala común de Slytherin estaba llena y aquellas habitaciones presentaban muchas comodidades: Eran individuales, poseían una cama de tamaño considerable, una pequeña biblioteca, una mesa tipo estudio con un par de sillas, el armario, una dizque ventana y baño propio... "¿por qué las de Gryffindor no son así?" pensaba Etili)... y tu manera de comer el helado... nos causaría un pequeño problema... -
- Yo no veo el problema - dijo con una sonrisa picara y besó suavemente su cuello.
- Basta - Draco la sujetaba del cuello.
- Veo que aun tienes ganas de matarme - hablo en tono burlón.
- No lo pensaría dos veces si me das las razones suficientes -
- Entonces mejor me cuido - se soltó de la mano de Draco y se bajó de la mesa - que descanses -
Etili se encaminó a la puerta, al abrirla sintió el hechizo que la cerraba. Como un rayo Draco la interceptó, obligándola a estar contra la puerta, la miraba divertido. Etili sentía el mundo moverse y desvanecerse, solo podía ver a Draco parado frente a ella con una mano en la pared y la otra en su cintura, con el cuerpo levemente inclinado sobre ella, el cabello que le caía de una manera muy sensual, con esa sonrisa picara, los ojos grises fijos en ella:
- Y ¿me creer tan estúpido como para dejarte ir? - buscó sus labios pero Etili giró la cara y besó su mejilla. Abrió los ojos y le miró furioso - igual no te iras -
- Si grito deberás dejarme ir -
- En ese caso hazlo, pues nadie te escuchará -
- Puedo romper el hechizo - Etili estaba molesta, bueno solo lo aparentaba.
- No sin esto - Draco bamboleaba ambas varitas.
-¡No es justo Malfoy! -
- Por favor, no me lo recuerdes, te lo suplico - la expresión de Draco cambió.
- No le has dicho lo nuestro ¿cierto? -
- Que lindo sonaría: Padre estoy saliendo con la sobrina de Dumbledore, tu sabes el viejo chiflado que va contra Voldemort - dijo con tono burlón y mueca en la cara.
- No le digas viejo chiflado - golpeó su hombro - y si sonaría lindo... - le sonrió dulcemente y acarició su mejilla.
-¿Dumbledore ya lo sabe? - la chica asintió con la cabeza - ¿qué te ha dicho? -
- Que le pareces un buen muchacho y que esta feliz por nosotros dos - Draco sonrió al escucharlo - tienes una sonrisa hermosa y esos labios... ¡Dios mío! - le robó un beso y volvió a recostarse de la pared. Draco la miró divertido.
- Estas loquita -
- Si lo admito, pero ¿qué se hace? - sonrió y le guiñó el ojo.
Draco la veía maravillado. Su corazón latía a mil cada vez que la tenia cerca. Ella le había enseñado a sentir, a acariciar. Y sabia que, aunque a veces le diesen ganas de matarse mutuamente, el estar juntos se les hacia indispensable.
- Draco - él salió de sus pensamientos y la miró directamente a los ojos - ¿en qué piensas? -
- En como preguntarte para que te quedes -
- Sabes que no puedo, nos meteríamos en problemas - dijo tristemente.
- Solo hoy, te vas temprano, antes que todos se levanten -
- Pareces un niño chiquito - dijo divertida.
- Si aceptas olvido lo que acabas de decir -
Draco no dejó que respondiera, besó sus labios, acarició su espalda. Etili no quería irse, se entregó de nuevo a sus caricias, a sus besos.
Draco la condujo hasta la cama y la recostó con cuidado, sin dejar de besarla, quería sentir de nuevo su piel canela, el calor que de ella salía, su aroma, su tacto, sus caricias...
Etili volvió a sentir su piel suave debajo de su camisa, su respiración en su oído, su aroma exquisito.
Dormían placidamente, uno abrazado del otro, sus cuerpos tan juntos como sus almas.
- La quiero ya, tráela y no me falles, sé que Malfoy no me fallara - Se cerró una puerta y Draco despertó sobre saltado, la voz continuaba en su cabeza, tan fría, sin vida.
Etili se sobre saltó también:
-¿Qué sucedió? -
- Un mal sueño - respondió molesto, pero a la vez asustado. Se abrazó a su amada quien le acarició sus cabellos.
Etili volvió a dormirse abrazada a él. Pero Draco se mantuvo un poco más despierto.
Había escuchado la voz del señor tenebroso, esperaba que hiciera algo y sabia que quería a una chica... la chica que dormía en su pecho abrazada a él.
Los días continuaron su rumbo, pero cada vez Draco despertaba mas seguido por el mismo sueño, cada vez sentía mas cerca el día, y lo que más deseaba era que Etili no se separase de él.
- Andas muy extraño ¿sabes? - Etili había abiertos sus ojos para encontrase con Draco que le acariciaba los cabellos. Él estaba sentado en el nuevo sofá de su estudio privado y ella descansaba en sus piernas.
-¿A que te refieres? -
- Dime en que andas metido -
- No hay nada -
- En ese caso, quita esa cara - Etili se había levantado y arreglado a su lado mientras le abrazaba.
Draco acarició sus brazos mientras se besaban, sin poder resistirse la recostó del sofá. Etili comenzaba a desabrocharle la camisa, cuando un golpe seco indicó que alguien había entrado.
Flewth, el prefecto de Slytherin había entrado con Crabbe y Goyle quienes se detuvieron frente al sofá.
Draco los miró con mala cara y le hizo señas a Etili para que saliera. Esta se levantó del sofá y asqueada por la mirada que Flewth le dirigía se bajó la falda.
Las cuatros serpientes le siguieron con la mirada hasta la puerta y ella, sin voltearse dijo de manera fría y cortante:
- Cuidado Malfoy, mira que con Mortifagos no me ando - y con un fuerte golpe cerró la puerta.
Etili subió mal humorada las escaleras que llevaban a la torre de Gryffindor. Tomando un libro de la pequeña librería se sentó frente al fuego.
Draco miraba muy enojado a sus acompañantes.
- Gryffindor pedante. Aunque con esas piernas ya sé porque te gusta estar con ella -
- No te atrevas a insultarla delante de mí - Draco lo sujetaba del cuello y le profirió un golpe que lo dejo unos segundos sin razón.
- Ya Malfoy - lo detuvo Crabbe antes de que se lanzase de nuevo en contra de Flewth - ¿te has vuelto loco? -
-¿Desde cuando defiendes a los Gryffindor? - Flewth se levantaba con mucha dificultad del piso - no has cambiado de idea en cuanto al amo ¿o sí? -
- Dejen esa estupidez ¿qué quieren? -
- Nosotros nada. El Señor Tenebroso solicita tu presencia -
- Tendrás un trabajo con él - le dijo Goyle como si le anunciara que ganaba la lotería mágica.
-¿Qué quiere? -un nudo se hizo en su garganta.
- A la portadora - una sonrisa cruel se posó en los labios de Flewth - te llevaremos con él - y antes que Draco pudiese negarse lo introdujeron a las llamas y llegaron a una sala no muy cuidada con un sofá alto y verde, sonde un hombre cuya piel parecía mas muerta que viva, los miraba con una sonrisa de triunfo en sus ojos rojos y deformes y con una voz mas de serpiente que humana les habló:
- Mis futuros Mortifagos, bienvenidos a mi morada - Goyle, Flewth y Crabbe se arrodillaron, Draco se mantuvo de pie e intento contener su mirada de odio - veo que han traído al joven Malfoy. Espero que seas tan fiel como tu padre en mis legiones, tengo planes para ti -
-¿Qué desea? - preguntó mas por salir del paso que con verdadero interés.
- Vas por buenos pasos - siseó la voz - al punto ¿no? - le penetró con la mirada examinándole - quiero que me traigas al portador del poder máximo -
- Sus intentos para atrapar a Potter no han sido muy efectivos ¿cierto? - dijo en tono burlón.
-¡ANDATE CON CUIDADO NIÑO! - de sus ojos podían verse salir las llamas como reflejo a la rabia retenida, pero Draco no se inmutó - a demás, - dijo sonriendo maliciosamente - no es a Potter a quien quiero, Dumbledore cuida a su sobrina con mucho recelo, porque sabe lo que tiene en sus manos, tráela Malfoy -
- Malfoy tiene ya el terreno ganado, esta enredado con... - intentó decir Flewth pero Draco le envió un Cruciatus que lo dejo revolviéndose en el piso.
-¿Por qué has hecho eso?-
- Nadie le ha pedido que hablara -
- Así me gusta Malfoy, vete y vuelve para la siguiente luna llena con mi presa, tu futura ama - rió, pero sin alegría, sino lleno de maldad.
Los cuatro jóvenes salieron de nuevo por la chimenea y Draco se separó de ellos en dirección a las mazmorras, sin escucharles, sin mirarles.
Habían pasado tres días en los que Draco no había subido al comedor, ni a las clases. No hablaba con nadie, ni respondía las innumerables lechuzas.
Se la pasaba tirado en la cama, con la mano en el pecho, la mirada perdida en el techo. Voldemort le había llamado a sus filas, le tenia una misión, él ya lo sabia y las ultimas palabras de Etili "mira que con Mortifagos no me ando" ella sabia su procedencia y aun así se le acercaba de aquella manera. Pero ya lo había decidido. Solo le restaban dos semanas para la luna llena y tenia que comenzar ahora...
@--`--
Ya veremos que sale de esto.
¿Que creen que ha decidido Drakito? Yo ni opino, pero ese capítulo esta casi listo.
Rinoa no sabes lo feliz que me hace leer tus mensajes =0D.
Estuve en Barcelona estas vacaciones de verano con mi familia, fue realmente hermoso. Ese era uno de mis sueños (conocer a mi Francia y a mi España) el 25 de septiembre estuve en Nice y en Barcelona a partir del 26 =0). es un lugar muy hermoso.
A ver que ando entre dos historias, mejor la corto y termino el siguiente capítulo.
Mientras entren en mi pro-file
^.^
El sol y la luna se pusieron varias veces y ellos seguían juntos.
Todas las noches las pasaban juntos en la sala abandona de Slytherin, en el día recorrían los jardines blancos, los pasillos solos, la biblioteca.
Retornó la normalidad. Los alumnos volvieron y la rutina se instaló de nuevo en Hogwarts.
Etili se mantenía en los brazos de Draco, veían un trozo de la noche a través de la ventana de la torre y se lo soltó de una vez:
- Draco... ¿Me amas? -
Le miró con enojo, ella tuvo un poco de miedo.
-¿No te lo he demostrado? -
- No es eso, pero es que nunca me lo has dicho -
Acarició sus cabellos, sus hombros, su cuello... cerró los ojos y dijo al fin - sabes bien cuanto te amo -
El invierno a cada paso se hacia mas frío, lo cual los obligaba a mantenerse aun más cerca. Trabajaban duramente, por algo eran los mejores de las clases, reían (habían aprendido a reír juntos), pero no conocían, que cada noche, a cada paso una sombra oscura los seguía, los vigilaba y les preparaba algo nuevo...
- Draco - el solo alzó la ceja en señal de escucharla - creo que ya hemos estudiado mucho tu ¿no? - Etili le quitó el libro de las manos y ocupó su lugar sentándose en la mesa, frente a Draco. Él la miró divertido y besó sus labios.
-¿Qué quieres hacer? -
-¿Me das helado? -
- Piénsalo bien, estamos en mi habitación (la sala común de Slytherin estaba llena y aquellas habitaciones presentaban muchas comodidades: Eran individuales, poseían una cama de tamaño considerable, una pequeña biblioteca, una mesa tipo estudio con un par de sillas, el armario, una dizque ventana y baño propio... "¿por qué las de Gryffindor no son así?" pensaba Etili)... y tu manera de comer el helado... nos causaría un pequeño problema... -
- Yo no veo el problema - dijo con una sonrisa picara y besó suavemente su cuello.
- Basta - Draco la sujetaba del cuello.
- Veo que aun tienes ganas de matarme - hablo en tono burlón.
- No lo pensaría dos veces si me das las razones suficientes -
- Entonces mejor me cuido - se soltó de la mano de Draco y se bajó de la mesa - que descanses -
Etili se encaminó a la puerta, al abrirla sintió el hechizo que la cerraba. Como un rayo Draco la interceptó, obligándola a estar contra la puerta, la miraba divertido. Etili sentía el mundo moverse y desvanecerse, solo podía ver a Draco parado frente a ella con una mano en la pared y la otra en su cintura, con el cuerpo levemente inclinado sobre ella, el cabello que le caía de una manera muy sensual, con esa sonrisa picara, los ojos grises fijos en ella:
- Y ¿me creer tan estúpido como para dejarte ir? - buscó sus labios pero Etili giró la cara y besó su mejilla. Abrió los ojos y le miró furioso - igual no te iras -
- Si grito deberás dejarme ir -
- En ese caso hazlo, pues nadie te escuchará -
- Puedo romper el hechizo - Etili estaba molesta, bueno solo lo aparentaba.
- No sin esto - Draco bamboleaba ambas varitas.
-¡No es justo Malfoy! -
- Por favor, no me lo recuerdes, te lo suplico - la expresión de Draco cambió.
- No le has dicho lo nuestro ¿cierto? -
- Que lindo sonaría: Padre estoy saliendo con la sobrina de Dumbledore, tu sabes el viejo chiflado que va contra Voldemort - dijo con tono burlón y mueca en la cara.
- No le digas viejo chiflado - golpeó su hombro - y si sonaría lindo... - le sonrió dulcemente y acarició su mejilla.
-¿Dumbledore ya lo sabe? - la chica asintió con la cabeza - ¿qué te ha dicho? -
- Que le pareces un buen muchacho y que esta feliz por nosotros dos - Draco sonrió al escucharlo - tienes una sonrisa hermosa y esos labios... ¡Dios mío! - le robó un beso y volvió a recostarse de la pared. Draco la miró divertido.
- Estas loquita -
- Si lo admito, pero ¿qué se hace? - sonrió y le guiñó el ojo.
Draco la veía maravillado. Su corazón latía a mil cada vez que la tenia cerca. Ella le había enseñado a sentir, a acariciar. Y sabia que, aunque a veces le diesen ganas de matarse mutuamente, el estar juntos se les hacia indispensable.
- Draco - él salió de sus pensamientos y la miró directamente a los ojos - ¿en qué piensas? -
- En como preguntarte para que te quedes -
- Sabes que no puedo, nos meteríamos en problemas - dijo tristemente.
- Solo hoy, te vas temprano, antes que todos se levanten -
- Pareces un niño chiquito - dijo divertida.
- Si aceptas olvido lo que acabas de decir -
Draco no dejó que respondiera, besó sus labios, acarició su espalda. Etili no quería irse, se entregó de nuevo a sus caricias, a sus besos.
Draco la condujo hasta la cama y la recostó con cuidado, sin dejar de besarla, quería sentir de nuevo su piel canela, el calor que de ella salía, su aroma, su tacto, sus caricias...
Etili volvió a sentir su piel suave debajo de su camisa, su respiración en su oído, su aroma exquisito.
Dormían placidamente, uno abrazado del otro, sus cuerpos tan juntos como sus almas.
- La quiero ya, tráela y no me falles, sé que Malfoy no me fallara - Se cerró una puerta y Draco despertó sobre saltado, la voz continuaba en su cabeza, tan fría, sin vida.
Etili se sobre saltó también:
-¿Qué sucedió? -
- Un mal sueño - respondió molesto, pero a la vez asustado. Se abrazó a su amada quien le acarició sus cabellos.
Etili volvió a dormirse abrazada a él. Pero Draco se mantuvo un poco más despierto.
Había escuchado la voz del señor tenebroso, esperaba que hiciera algo y sabia que quería a una chica... la chica que dormía en su pecho abrazada a él.
Los días continuaron su rumbo, pero cada vez Draco despertaba mas seguido por el mismo sueño, cada vez sentía mas cerca el día, y lo que más deseaba era que Etili no se separase de él.
- Andas muy extraño ¿sabes? - Etili había abiertos sus ojos para encontrase con Draco que le acariciaba los cabellos. Él estaba sentado en el nuevo sofá de su estudio privado y ella descansaba en sus piernas.
-¿A que te refieres? -
- Dime en que andas metido -
- No hay nada -
- En ese caso, quita esa cara - Etili se había levantado y arreglado a su lado mientras le abrazaba.
Draco acarició sus brazos mientras se besaban, sin poder resistirse la recostó del sofá. Etili comenzaba a desabrocharle la camisa, cuando un golpe seco indicó que alguien había entrado.
Flewth, el prefecto de Slytherin había entrado con Crabbe y Goyle quienes se detuvieron frente al sofá.
Draco los miró con mala cara y le hizo señas a Etili para que saliera. Esta se levantó del sofá y asqueada por la mirada que Flewth le dirigía se bajó la falda.
Las cuatros serpientes le siguieron con la mirada hasta la puerta y ella, sin voltearse dijo de manera fría y cortante:
- Cuidado Malfoy, mira que con Mortifagos no me ando - y con un fuerte golpe cerró la puerta.
Etili subió mal humorada las escaleras que llevaban a la torre de Gryffindor. Tomando un libro de la pequeña librería se sentó frente al fuego.
Draco miraba muy enojado a sus acompañantes.
- Gryffindor pedante. Aunque con esas piernas ya sé porque te gusta estar con ella -
- No te atrevas a insultarla delante de mí - Draco lo sujetaba del cuello y le profirió un golpe que lo dejo unos segundos sin razón.
- Ya Malfoy - lo detuvo Crabbe antes de que se lanzase de nuevo en contra de Flewth - ¿te has vuelto loco? -
-¿Desde cuando defiendes a los Gryffindor? - Flewth se levantaba con mucha dificultad del piso - no has cambiado de idea en cuanto al amo ¿o sí? -
- Dejen esa estupidez ¿qué quieren? -
- Nosotros nada. El Señor Tenebroso solicita tu presencia -
- Tendrás un trabajo con él - le dijo Goyle como si le anunciara que ganaba la lotería mágica.
-¿Qué quiere? -un nudo se hizo en su garganta.
- A la portadora - una sonrisa cruel se posó en los labios de Flewth - te llevaremos con él - y antes que Draco pudiese negarse lo introdujeron a las llamas y llegaron a una sala no muy cuidada con un sofá alto y verde, sonde un hombre cuya piel parecía mas muerta que viva, los miraba con una sonrisa de triunfo en sus ojos rojos y deformes y con una voz mas de serpiente que humana les habló:
- Mis futuros Mortifagos, bienvenidos a mi morada - Goyle, Flewth y Crabbe se arrodillaron, Draco se mantuvo de pie e intento contener su mirada de odio - veo que han traído al joven Malfoy. Espero que seas tan fiel como tu padre en mis legiones, tengo planes para ti -
-¿Qué desea? - preguntó mas por salir del paso que con verdadero interés.
- Vas por buenos pasos - siseó la voz - al punto ¿no? - le penetró con la mirada examinándole - quiero que me traigas al portador del poder máximo -
- Sus intentos para atrapar a Potter no han sido muy efectivos ¿cierto? - dijo en tono burlón.
-¡ANDATE CON CUIDADO NIÑO! - de sus ojos podían verse salir las llamas como reflejo a la rabia retenida, pero Draco no se inmutó - a demás, - dijo sonriendo maliciosamente - no es a Potter a quien quiero, Dumbledore cuida a su sobrina con mucho recelo, porque sabe lo que tiene en sus manos, tráela Malfoy -
- Malfoy tiene ya el terreno ganado, esta enredado con... - intentó decir Flewth pero Draco le envió un Cruciatus que lo dejo revolviéndose en el piso.
-¿Por qué has hecho eso?-
- Nadie le ha pedido que hablara -
- Así me gusta Malfoy, vete y vuelve para la siguiente luna llena con mi presa, tu futura ama - rió, pero sin alegría, sino lleno de maldad.
Los cuatro jóvenes salieron de nuevo por la chimenea y Draco se separó de ellos en dirección a las mazmorras, sin escucharles, sin mirarles.
Habían pasado tres días en los que Draco no había subido al comedor, ni a las clases. No hablaba con nadie, ni respondía las innumerables lechuzas.
Se la pasaba tirado en la cama, con la mano en el pecho, la mirada perdida en el techo. Voldemort le había llamado a sus filas, le tenia una misión, él ya lo sabia y las ultimas palabras de Etili "mira que con Mortifagos no me ando" ella sabia su procedencia y aun así se le acercaba de aquella manera. Pero ya lo había decidido. Solo le restaban dos semanas para la luna llena y tenia que comenzar ahora...
@--`--
Ya veremos que sale de esto.
¿Que creen que ha decidido Drakito? Yo ni opino, pero ese capítulo esta casi listo.
Rinoa no sabes lo feliz que me hace leer tus mensajes =0D.
Estuve en Barcelona estas vacaciones de verano con mi familia, fue realmente hermoso. Ese era uno de mis sueños (conocer a mi Francia y a mi España) el 25 de septiembre estuve en Nice y en Barcelona a partir del 26 =0). es un lugar muy hermoso.
A ver que ando entre dos historias, mejor la corto y termino el siguiente capítulo.
Mientras entren en mi pro-file
^.^