-A veces el amor nos hace hacer locuras. ¿Pero quien no hizo alguna locura por amor? Bueno.. no creo que seas la persona indicada para escuchar esto pero como había nadie más… -Dijo la misma mujer de antes. Ella ahora estaba usando ropas limpias pero su sonrisa era igual que siempre pero cuando se encontró con el chico que estaba atado esta sonrisa se borró-. -¿Quieres decirme algo? ¿Quieres ir al baño? ¿Quieres agua? ¿Quieres que te libere?

-El chico asintió antes de que un fuerte golpe en sus bolas le hiciera cagarse encima por el dolor…

-¿Crees que voy a dejarte escapar pedazo de mierda? No sabes todos los problemas que me causaste. Siempre queriendo aparentar ser más importante… De verdad no entiendo la verdad… -Dijo en un tono triste la mujer que quedó de espaldas a su nueva víctima.

-Aquel chico intentó liberarse pero un fuerte dolor hizo que este mirara donde debía estar su brazo.

-Veo que te has dado cuenta de que te falta algo. Para ser una mierdecilla tienes un lindo brazo ¿me preguntó a qué sabrá? -Comentó la fémina que lleva una máscara que cubre sus ojos sonriendo de forma diabólica. Ella abrió su boca que se dislocó dejando ver sus colmillos. De un solo bocado el brazo del chico fue tragado por la misteriosa fémina…

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-No tiene un buen sabor pero.. me quitó un poco el hambre. Quizás luego vaya por una pierna o tu otro brazo. Nunca pensé que podrías ser como esos juguetes a los que les puedes sacar sus miembros.. Pero ellos nunca llorarían como una nena. ¿Tanto te duele? -Preguntó haciéndose la inocente la mujer de la máscara extraña.

-Su víctima le miraba con el ceño fruncido.

-Odio que me miren de esa forma -dijo con un tono seco y con sus ojos vacíos. La mujer que porta la máscara de cráneo se acercó donde su presa estaba. De una patada en sus testículos el chico quedó en silencio- -nunca me ha gustado ser vista de esa forma y menos por alguien como tú..por eso es mejor que te quedes callado. Antes de matarte serás testigo de mi mejor obra de arte -comentó la mujer encendiendo las luces detrás de ellas se pudo ver una figura horrenda creada a partir de los cuerpos mutilados de las otras víctimas de esta persona-, -¿qué te parece te gusta?

-El muchacho abrió sus ojos tanto que le dolieron. Su estómago se revolvió y algo de su vómito cayó por su boca manchando sus ropas.

-Qué asco..pero ahora cualquiera es crítico ellos lo fueron y mira como terminaron. En fin, vamos mejor con la historia del día de hoy..., esta pequeña obra la título...

"El demonio que vive bajo mi cama..."

En la residencia de la familia Kousaka vivía una chica de mirada azul como el mismo cielo. Ella era la líder de un grupo idol que estaba en el auge de su carrera. Es decir, las canciones que componía su gran amiga y ahora pareja eran las mejores, el acompañamiento musical que alegra el corazón de todos fueron posibles a Maki.

Resumiendo todo esto las chicas de este singular grupo de idols estaban en la mejor etapa de sus vidas. Aunque algo parecía andar mal con su líder y a veces dolor de cabeza...

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-¿Ocurre algo Honoka-chan? -Preguntó Rin a su amiga. Y compañera de travesuras.

-No, no nada es solo que he podido dormir bien... Es todo -dijo con una sonrisa fingida la chica de pelo naranjo a su amiga.

-¿Por qué será que no te creo? -Habló Umi sentándose al lado de su novia.

-¿Umi-chan? -Honoka estaba sorprendida por la mirada que estaba recibiendo de su pareja. La chica de pelo azul estaba muy preocupada por su pareja por eso los ojos ámbar de la letrista se volvieron dos cristales debido a las lágrimas que estaban amenazando con escapar...

-Yo de verdad... -Eran las pocas palabras que dejó escapar la líder antes de romper en llanto.

-¡Honoka/chan! -Exclamaron todas las chicas que estaban reunidas en el pequeño restaurante de comida rápida.

-¿Nos dirás qué te pasa? -Exigió Maki desde su asiento teniendo el ceño fruncido.

-Somos tus amigas y puedes decirnos lo que sea..aunque termine siendo una tontería -dijo con un tono lleno de soberbia la pequeña puta..quiero decir la presidenta del club de investigación idol.

-Nico-chan podrías dejar de ser tan idiota por una vez ¿quieres? -Nozomi mirando de mala manera a su amiga hizo que la pequeña perra se callará dejando hablar a la alocada come pan.

-Pues..verán todas las noches que intentó dormir..algo viene.. a mi dormitorio, pueden pensar que estoy loca, incluso yo lo creo pero..es algo horrible… -entre sollozos ahogados contestó la chica amante de los panes siendo consolada por su novia quien la abrazó.

-Ya, ya Honoka no pasa nada. Sí quieres Kotori y yo podemos quedarnos en tu casa a dormir. Haremos una pijamada como en los viejos tiempos ¿qué me dices? -Mencionó la chica de pelo azul.

-Sí, Honoka-chan podemos quedarnos contigo y así ayudarte con tu problema -comentó la pajarita sonriendo como siempre lo hace ante la mirada su querida amiga de ojos azules.

-Después de haberse calmado un poco. Escapó de los brazos ajenos para mirar donde sus compañeras. Honoka tenía una pequeña sonrisa pintada en su rostro… Pero antes de que dijera algo sus ojos se abrieron tanto que parecía que estos iban a salir de sus órbitas y un aterrador gritó se pudo escuchar en todo el lugar…

-¡ALLÍ ESTÁ..ES..EL MONSTRUO…! ¡ALLÍ ESTÁ Y VIENE POR MÍ…! -Gritó la amante de los panes apuntando con su dedo el lugar donde estaba su padre sonriendo a su hija. La pequeña niña de ojos azules continuaba gritando como loca llamando la atención de toda la gente que estaba por allí sentada.

-Señoritas. Les pido que si no calman a su amiga tendré que pedirles que se vayan -dijo una mujer de ojos azules. Esta parecía estar molesta por la presencia de las chicas, aún así mantenía una sonrisa pintada en su rostro.

-Lo sentimos. Pero nuestra amiga parece que está teniendo un ataque de nervios ¿podría usted…? -Antes de que Nozomi dijera otra cosa las palabras de la otra mujer se hicieron escuchar…

-Me importa un carajo que su amiga esté pasando por algo así. Les pido por favor que si esto continua me veré obligada a sacarlas a todas de este lugar ¿me entienden? -Volvió a decir la mujer de mirada azul mirando a las musas quienes fruncieron el ceño en señal de molestia.

-Claro. Claro ¿por qué no va con sus hijos o su marido? Nosotras sabremos qué hacer con nuestra amiga -habló la pequeña zorra de ojos rojos.

-Mira pequeña puta. No eres nadie para decirme lo que tengo que hacer. Ni ustedes ni nadie son quienes para decirme lo que debo hacer ¿entiendes? ¿O será que eres tan estúpida como para no entender lo que estoy diciendo? ¿Se llaman ustedes idols? Si solo son un grupo de putas que mueven el culo para que otros las miren..sinceramente me dan asco -dijo la fémina de mirada azul.

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Pobrecitas niñas no saben en lo que se habían metido pero la historia podría dejarla aquí y continuar con tu tortura. ¿Qué puedo hacer? ¿Qué puedo hacer? -Decía la mujer que lleva la extraña máscara dando vueltas en el lugar-. -Mejor continuaré con la historia ya que pareces querer saber qué pasará con Honoka y sus amigas ¿cierto? -Preguntó al chico que estaba medio dormido debido a los sedantes que le había inyectado pero que despertó luego de haber sido apuñalado-. -¡Despierta pedazo de mierda!

-El nuevo juguete de la cuentista despertó mirando molesto a su captora..

-¿Qué quieres…?