Mientras la noche transcurría, la misteriosa chica, llamada Fischl, decide explorar la zona por la que había llegado, hasta que se detuvo al ver un pueblo a la distancia. En eso, llama a Oz, su cuervo espiritual, para que haga un reconocimiento de la zona. Tras varios minutos, la criatura regresa con su ama para indicarle que el pueblo está abandonado, así que decide refugiarse en una de las casas que aún seguían casi intactas. Al ver unas llaves que estaban entre los pedazos de una maceta rota, las usa para abrir la puerta de la casa y pasar la noche ahí, mientras decidía qué hacer en este nuevo mundo.

Al día siguiente, en la Saint Freya's Academy, Ouryuu se sentía mucho mejor tras levantarse, y podía continuar con sus clases normalmente. Tras cambiarse de ropa y tomar sus cosas, el chico sale rumbo a los salones de clases, pero en el camino se encuentra con Himeko y empiezan a tener una pequeña conversación.

- Buenos días, señorita Himeko. - saluda Ouryuu respetuosamente.

- Buenos días, chico. - responde Himeko. - Dime, ¿Te está yendo bien en la academia? ¿No has tenido ningún problema con adaptarte? -

- Por ahora no, y afortunadamente ya tengo a dos amigas que son de mi salón de clases. -

- Me alegra escuchar eso. Bueno, tengo que irme. Voy a ir a recoger unos papeles importantes en la biblioteca y enseguida voy al aula a impartir la clase. Después de todo, les toca física, ¿Verdad? -

- Sí... Un momento, ¿Usted nos dará la clase de física? -

- ¿Acaso no lo sabías? Bueno, aún no te tocaba la clase ya que apenas ingresaste hace poco, pero sí. Yo soy tu profesora de física. Así que si tienes cualquier duda sobre la materia, no dudes en consultarme. Por cierto, no te sorprendas si ves a personas como Fu Hua o Theresa dando clases. Ellas son tu entrenadora y tu profesora de historia respectivamente, para que estés enterado. -

- Ya veo, y gracias por la información. -

Tras despedirse, Ouryuu se dirige a su salón de clases y Himeko a la biblioteca. Una vez que llega, la mujer pelirroja se acerca a Theresa y tienen una pequeña reunión privada, alejada de oídos curiosos que puedan estar por ahí. Himeko menciona.

- Theresa, ¿Recuerdas los resultados de los exámenes médicos del chico que te envié? -

- Sí. El infectado. - responde la directora. - ¿Qué hay con él? -

- Necesito que me hagas otro favor con respecto al chico. Dale autorización para entrar a la sección prohibida. Necesito que le des los libros de esta lista. -

Theresa toma la lista de los libros que solicitaba Himeko, y al examinarla menciona.

- Pero... ¡Éstos libros no los puede leer cualquiera! ¡Solo unos cuantos pueden tener acceso! -

- Ya lo sé, pero debemos hacer que sepa la verdad mientras tenemos tiempo. Su condición aún es estable y podemos hacer que se una a nosotros si logramos hacer que crea que lo que hacemos es lo correcto. -

Theresa se quedó pensando por un momento y luego dijo.

- Veré qué puedo hacer. Solo espero que valga la pena. Estamos arriesgando mucho si dejamos que tenga acceso a esa información. -

- Si algo sale mal, tomaré la responsabilidad y me haré cargo de él yo misma. - responde Himeko. - Por ahora, seguiré realizando un par de experimentos más antes de que procedas a prestarle esos libros. -

Mientras tanto, en el salón de clases, Ouryuu y Bronya estaban hablando mientras llegaba la profesora Himeko, y Mei se encontraba hablando con su mejor amiga, una chica de cabello blanco llamada Kiana. Después de un par de minutos, Himeko llega al aula y todos vuelven a sus lugares. Himeko menciona.

- Muy bien, chicos. Antes de comenzar la clase, necesito que se junten en grupos de cuatro personas, para así poder realizar una actividad en equipo. -

Rápidamente, todos empiezan a formar equipos de 4 personas, pero Kiana se acerca rápido a Bronya y Mei, diciendo.

- ¡Eso no será necesario! ¡Nosotras tres podemos hacer esa actividad, y no necesitamos a nadie más! -

- No digas eso. - le dice Bronya a Kiana en tono serio. - Podemos incluir a alguien más en nuestro equipo, y ya sé a quien podemos incluir. - en eso, voltea hacia donde estaba Ouryuu y dice. - Ven con nosotras, amigo. Los cuatro juntos vamos a hacer esa actividad en equipo. -

Al voltear, Kiana logra ver al chico al que Bronya le hablaba, y tras reconocerlo menciona.

- ¡Un momento! ¡Tú eras el que estaba con mis amigas el día anterior! - Kiana se acerca molesta y toma de los hombros al chico, y sosteniéndolo con fuerza dice. - ¡¿Qué intenciones tienes con mis amigas?! ¡¿Eh?! ¡Más te vale que te alejes de ellas! ¡Conozco a los tipos como tú, que solo...! -

De pronto, la piel de Ouryuu se tornó pálida, su vista se nubló por varios segundos, un fuerte zumbido azotaba sus oídos, y una insoportable migraña llegó a su cabeza de la nada. En eso, todos excepto Himeko se alarmaron al ver que Ouryuu se desvaneció, cayendo inconsciente, aún estando sujeto de los hombros por Kiana. Rápidamente, ésta lo soltó, pero es salvado por Bronya que lo sostiene antes de que caiga al suelo. Himeko no hizo nada, y solo realizó unos cuantos apuntes en una hoja suelta que tenía a la mano, y al terminar, se acerca hacia donde estaba Ouryuu inconsciente. Bronya y Mei estaban furiosas con Kiana por hacer que su amigo caiga inconsciente, diciendo.

- ¡¿Pero qué hiciste?! - pregunta Mei a Kiana.

- ¡Mira lo que provocaste por tu estupidez! - continúa Bronya, mientras le daba una bofetada en la cara a Kiana, mientras que unos brazos mecánicos sostenían al chico. - ¡Ouryuu es un chico el cuál se hizo nuestro amigo, y tú no tuviste que hacer eso! -

- ¡Él es una buena persona, y nos volvimos sus amigas después de que lo salvamos de un ataque de bestias Honkai y zombies que invadieron su pueblo! - dice Mei.

- Tranquilas, chicas. - dice Himeko mientras se acercaba a ellas. - El susto que Kiana le provocó al chico hizo que se desmaye, pero no es grave. Solo necesita un poco de descanso y estará como nuevo. -

- Yo me encargaré de llevarlo a la enfermería. - dice Mei.

- De acuerdo. - responde Himeko. - Quédate con él por si necesita algo cuando se levante. Los demás seguiremos con la clase. -

- Después de clases, iré contigo por si ocurre algo, Mei. - dice Bronya. - Mientras tanto, hablaré seriamente con Kiana por lo que hizo. -

- Pero... ¡Yo no hice nada! - alega Kiana que seguía nerviosa por lo que pasó. - ¡Solo le dije que se aleje de mis amigas porque...! -

- ¡Cállate! - interrumpe Bronya. - ¡No debiste hacer eso! ¡Él es mi amigo y el de Mei desde ahora, y no te perdonaré si le pasa algo! -

Mientras Bronya y Kiana discutían, Himeko le pide a Mei que lleve a Ouryuu a la enfermería y que se quede con él por un rato. Antes de irse, Mei pregunta mientras seguían en el pasillo del edificio.

- ¿Y sabe por qué fue que se desmayó? -

- No exactamente, pero probablemente se deba a que su contacto con Kiana hizo que su cabeza tuviera un fuerte impacto, como si estuviera por recordar algo. - responde Himeko.

- ¿A qué se refiere con eso? -

- Es posible que tenga que ver con su memoria. Quizás estaba recordando algo que tenga que ver con Kiana, y por eso tuvo esa reacción. -

- ¿Y qué tiene que ver su memoria con Kiana? -

Himeko no responde a su pregunta, y en su lugar menciona.

- Lleva al chico a la enfermería. Después hablaremos de eso. -

Sin más remedio, Mei lleva a Ouryuu a la enfermería, a pesar de que aún tenía muchas dudas sobre lo que pasó. Una vez que llegaron a la enfermería, Mei colocó al chico en una de las camas para que descanse, mientras que ella preparaba medicamentos y agua para cuando se levante. Ouryuu logra levantarse finalmente 20 minutos después, y al ver a Mei, pregunta.

- ¿Qué pasó? -

- Tranquilo. - responde Mei. - Estás en la enfermería. Te desmayaste en clase y te traje hasta aquí para que te recuperes. Aquí tienes unas pastillas para el dolor de cabeza. -

Mei le da los medicamentos a Ouryuu y luego dijo.

- Muchas gracias, Mei. Y disculpa la molestia. -

- No te preocupes. - responde Mei. - Es lo que los amigos hacen. Pero dime, ¿Qué pasó para que te sintieras así? -

- No sé... Cuando esa chica me tomó de los hombros y nos miramos a los ojos, tuve una extraña sensación, como si estuviera a punto de recordar algo. Las imágenes que vinieron a mi cabeza... Mi pueblo... el lago... el atardecer... Y luego... Algo más había ahí, y estaba a punto de recordarlo, pero de pronto perdí el conocimiento y me desmayé. -

- Parece que tus recuerdos estaban tratando de volver, ¿Pero por qué tuviste esa reacción cuando Kiana te tomó de los hombros? -

- No sé... Es como si mi conciencia me dijera que yo tenía algo que ver con ella, pero aún se me hace muy extraño. -

- A mí también se me hace raro eso, pero ya habrá tiempo para poder esclarecer todas esas dudas. -

En eso, Mei observa el reloj de pared que estaba en la enfermería y menciona.

- Vaya... Ya casi se acaba la clase de física. Bueno, debemos prepararnos para la siguiente. Dime, ¿Te sientes mejor? -

- Sí. - responde Ouryuu. - Gracias por preocuparte por mí. Vamos a la siguiente clase. -

Y así, los dos regresan a su aula para continuar con sus clases. Bronya se disculpó por no poder ir a la enfermería, pero Mei le dijo que no pasaba nada y que todo estaba bien. Las horas pasaron, y al finalizar las clases, Kiana, Mei, Bronya y Ouryuu se reúnen cerca de la entrada ya que se debían juntar los equipos que estarán en las naves para partir a las misiones que sus capitanes les asignaban. Sin embargo, y antes de que llegue Himeko, la líder de su equipo, Mei pregunta.

- ¿Por qué será que la capitana Himeko vaya a hacer que Ouryuu vaya a una misión con nosotras? -

- Ni siquiera tiene un arma ni la preparación necesaria para cumplir misiones. - continúa Kiana. - Quizás se quedará en la nave para realizar tareas de logística. -

- De hecho, tengo una misión especial para él, y necesito que vaya solo. - dice Himeko mientras se acercaba al grupo.

Todos se sorprendieron al ver que Himeko llegó de sorpresa, tomando a los chicos con la guardia baja. Himeko se acerca a Ouryuu y menciona.

- Chico, tengo una misión especial para tí. Necesito que hagas una misión de reconocimiento. Se detectó una misteriosa fuente de energía proveniente del pueblo donde vivías, así que necesito que vayas a investigar sobre dicha fuente. Sobre todo, inspecciona el lago. Nuestros sensores detectaron que esa fuente de energía se encontraba cerca de ahí, así que trata de buscar cualquier cosa que creas sospechosa, y si logras encontrar algo, usa el comunicador que te daré y nosotros haremos el resto. -

A pesar de que no quería revivir malos recuerdos por lo que pasó con su pueblo y su familia, Ouryuu responde.

- De acuerdo, capitana. Haré esa misión como me indicó. -

Bronya se acerca y le dice a Ouryuu mientras toca su hombro derecho.

- Si quieres, te acompaño a realizar esa misión. Después de todo, necesitas protección por si algún enemigo se acerca. -

- Eso no será necesario, Bronya. - interrumpe Himeko. - Ésta misión será sencilla porque no se detectaron enemigos alrededor de la zona, por lo que estará seguro. -

- No te preocupes, Bronya. Estaré bien. - dice Ouryuu. - Aún así, te agradezco por ese apoyo. Si algo ocurre, volveré a usar la cadena que dejé en ese lugar. -

- Bien, si no tenemos nada más por agregar, nos vamos a la nave. - dice Himeko. - Tenemos trabajo que hacer. -

Y así, los cinco parten a la nave y son asignados a sus misiones. Antes de irse, Kiana se acerca a Ouryuu y le pide disculpas por lo que pasó, a lo que éste responde que no pasa nada y no le guarda rencor. Después de eso, todos parten a sus misiones. Mientras tanto, Fischl vuelve a la casa en la que se había quedado y tenía varias cosas que había recolectado, como frutas, verduras, hongos y pescados, y al dejarlas sobre una mesa, menciona.

- Menos mal que en este mundo hay recursos que puedo consumir y así poder sobrevivir. Ahora que se agotaron todas las provisiones que había en esta casa, voy a aprovechar los recursos de esta zona antes de partir a explorar este mundo. -

Entre tanto, mientras que la nave se acercaba al pueblo donde vivía Ouryuu, Himeko se acerca al chico y menciona.

- ¿Estás listo? Quizás sea un mal sabor de boca que tengas que volver a tu pueblo, pero necesitamos que explores el lugar para poder encontrar esa fuente de energía. -

- No se preocupe, señorita Himeko. - responde Ouryuu. - Las heridas son temporales, pero tarde o temprano sanarán. Lo importante es seguir adelante. -

- Bien dicho. Ahora, vé al teletransportador y empieza a trabajar. -

Cuando Ouryuu se sube a la plataforma y desaparece para ser llevado a su pueblo, Himeko piensa.

- Si el chico encuentra la espada que usó el especimen aquel día hace 9 años, y ésta es compatible con él, entonces estaremos a un paso más de completar nuestro objetivo. Y si eso ocurre, podremos enmendar el error que se cometió cuando ese especimen escapó... -

Una vez que llegó a su pueblo, Ouryuu observa que las casas de sus vecinos estaban muy dañadas y otras totalmente destruidas. Sin embargo, su casa era la que menos daños sufrió, y casi estaba intacta, aunque la habitación de sus padres y una parte del patio trasero quedaron dañados por las bestias Honkai. En eso, un aroma extraño a sopa de verduras salía de su casa, y curioso se acerca a inspeccionar, y al abrir lentamente la puerta de la entrada y acercase poco a poco a la cocina, quedó impresionado al ver a una chica rubia acompañada de una misteriosa criatura similar a un cuervo, que estaban preparando algo de comida. Rápidamente, la chica da media vuelta y al observar a Ouryuu, ambos se quedan mudos por la impresión por breves segundos, hasta que dicho silencio se interrumpió por una pregunta que ambos hicieron al unisono.

- ¡¿Quién eres tú?! -