Capitulo 01: Cumpleaños y Sorpresas

Ese verano había sido muy diferente para Harry. Luego de los sucesos de la tercera prueba del Torneo de los Tres Magos, Harry solía tener pesadillas con los sucesos de esa noche: la muerte de Cedric, el resurgimiento de Voldemort y la confesión de Barty Crouch Jr., solían plagar sus sueños. Aunque Harry no se sentía culpable de estos sucesos, el revivirlos no le era grato.

Gracias a Ron, uno de sus mejores amigos del mundo mágico se mantenía informado de todos los sucesos: Voldemort y sus Mortífagos habían hecho varios ataques en todo el país. En el transcurso de Julio ya habían muerto más de 50 personas entre Magos, Muggles y Squibs.

Cornelius Fudge, el Ministro de la Magia, continuaba en su posición de ceguera ante el regreso del Lord Oscuro y no hacía nada por intentar detener estos ataques. Muchos magos ante los ataques habían dejado de creerle al Ministro y estaban del lado de Dumbledore.

El director de Hogwarts, como le habían contado en sus cartas Sirius, Hagrid y Ron, estaba combatiendo firmemente a Voldemort.

Hagrid, el semi-gigante profesor de Cuidado de Criaturas Mágicas y Guardián de los terrenos del colegio, estaba junto a Madame Maxime, Directora de Beauxbatons, intentando convencer a los gigantes para que no se pasen al lado oscuro.

Sirius, su padrino, estaba buscando "al viejo grupo": Remus Lupin, Arabella Figg y Mundungus Fletcher. Harry estaba seguro de haber escuchado el nombre de Fletcher antes pero no recordaba donde. Lupin había sido su profesor de DCAO, en su tercer año y era quien le había enseñado a hacer su patronus. Harry sospechaba que Arabella Figg era su vecina, la Sra. Figg. Pero no la había visto en todo el verano y no se lo había podido preguntar.

Mientras tanto, en el mundo Muggle estos asesinatos no habían pasado desapercibidos aunque la Policía no tenía pistas sobre la causa de esas muertes.

Mientras todos estos sucesos ocurrían, Harry debía convivir con sus tíos y su primo. Este año Dudley continuaba a dieta, para desgracia de Harry. Afortunadamente Ron, Sirius, Hagrid y Hermione habían vuelto a enviarle comida para su supervivencia, cosa que Harry agradecía.

Luego de una semana había decidido comenzar a buscar trabajo. Esto no le resultó muy difícil: encontró uno en una pequeña biblioteca cercana a Londres. En ella trabajaba desde las 9 de la mañana a las 4 de la tarde.

Este trabajo le daba 3 cosas buenas: la primera era que le permitía estar fuera de casa por varias horas; la segunda era tener su propio dinero para comprarse cosas como ropa de su talle y otras cosas, le servía también para guardar dinero para cuando fuera al Callejón Diagon y comprar sus cosas sin tener que sacar dinero de su cuenta de Gringotts; la tercera era libertad de poder hacer algo sin que su familia lo molestara.

También durante ese verano había comenzado a practicar Karate. Su Sensei estaba impresionado con Harry. En solo un mes de práctica había alcanzado el cinturón marrón. Esto solía llevar años de práctica, pero Harry había alcanzado un record. Harry había combinado su destreza natural en las artes marciales con sus reflejos de Quidditch, adquiridos en sus 4 años de colegio, y era casi invencible. Sus duelos con su maestro (Sensei) eran combates que no tenían siempre un ganador declarado hasta el final del mismo. Esta habilidad sumada al miedo por la magia había hecho que Dudley se mantuviera lo más alejado de él que pudiera, esto significaba que el único momento que compartían en el mismo cuarto eran las comidas.

La noche del 31 de Julio, su cumpleaños, Harry estaba en su cama leyendo un libro de Karate que había sacado de la biblioteca cuando escuchó el golpetear de la ventana que marcaba la llegada de 6 lechuzas.

Una de ellas era Hedwig, la suya que tenía atado un paquete en su pierna. Harry se lo desató y esta se colocó en su jaula. Otra era Pig, la de Ron, que tenía un paquete atado a su pierna. Después de que Harry le desatara el paquete se colocó en la jaula de Hedwig. De las otra 4 Harry no reconoció ninguna salvo una que recordaba como la que había usado el año anterior para escribirle a Sirius y que era del colegio. Harry tomó su carta y el paquete y esta se fue volando. Las otra 3 se marcharon luego de que Harry les quitara el paquete y bebieran agua.

Harry tomó el paquete de Pig, que venía acompañada de una carta de Ron, que decía:

Querido Harry:

FELIZ CUMPLEAÑOS!!!!!!!!!!!

Mamá le escribió a Dumbledore para ver si podías venir las últimas dos semanas pero sigue diciendo que no. Aún así estoy seguro que te veré pronto.

El regalo lo compré con los mellizos. Aparentemente consiguieron 1.000 Galleons de algún lado y decidieron abrir la tienda a pesar de las protestas de mamá. Espero que te guste.

A Hermione la hicieron prefecta. (Como sino lo hubiéramos sospechado desde primer año.) Lo sorprendente es que también a mí me nombraron Prefecto. ¿De locos no? ¿Qué hay acerca de ti? ¿Lo eres? Espero que sí.

Hermione vendrá aquí en dos semanas. Ojalá que no haya ido a Bulgaria con "Vicky". Si fue, será insoportable.

¿Qué te parece encontrarnos el 25 de Agosto en el Callejón Diagon para comprar las cosas? Espero que puedas ir.

No dejes que los Muggles te depriman.

Un saludo,

Ron.

Harry se rió ante la carta de su amigo. Era él quien le había dado a los mellizos los Galleons del premio del Torneo y al parecer lo iban a usar muy bien. Tomó el paquete, que resultó ser un reloj con una Snitch en el centro y sus alas eran las agujas. El reloj se colocó de inmediato en su muñeca y se acomodó perfectamente allí.

"Gracias Ron!!!!" pensó Harry. El antiguo reloj que permanecía en su muñeca no funcionaba desde que se había sumergido en el lago para la segunda prueba del Torneo. Se quitó el viejo y lo tiró a la basura.

También se detuvo en la parte de Prefecto, y esperaba serlo él también. "Después de todo si Ron lo es, ¿Por qué no yo?" Se preguntó a si mismo.

Pensando esto, dejó la carta a un lado y tomó el paquete de Hedwig. Tenía una carta con una letra que Harry reconoció como la de Hermione. Abrió la carta que decía:

Querido Harry:

¡¡¡¡¡FELIZ CUMPLEAÑOS!!!!!

En este momento estoy en Francia con mis padres y en dos semanas voy a la Madriguera a pasar el resto del verano. Es una lastima que Dumbledore no te deje ir, pero seguro que nos veremos en el Callejón Diagon o en Expreso de Hogwarts. El regalo te lo compré aquí en Francia. En cuanto lo vi supe que esto era algo que te iba a gustar. Espero que lo haga.

Me hicieron Prefecta!!!! ¿Qué sorpresa, no? Mis padres están orgullosos de mí. Espero que no me convierta en una versión femenina de Percy. Creo que nadie lo soportaría. También Ron lo es. ¿Y tú lo eres? Espero que sí.

¿Irás al Callejón Diagon el 25? Espero que sí, sino como dije te veré en el Expreso.

Besos de,

Hermione.

Harry abrió el paquete que resultó ser un libro llamado: "Quidditch en Hogwarts a través de los tiempos: todos los jugadores casa por casa y año por año." Harry sonrió, Hermione estaba acertada al creer que le gustaría ese libro. El Quidditch, en opinión de Harry, el mejor juego del mundo, era algo que amaba. Él jugaba de Buscador en la casa Gryffindor desde su primer año y era uno de los mejores en su puesto que había existido en muchos años.

Dejó el libro a un lado y tomó el tercer paquete. Harry adivinó que era un libro, esta vez de Hagrid. Tomo la carta y la leyó:

Querido Harry:

FELIZ CUMPLEAÑOS!!!!!!!

En este momento Olympe y yo estamos cumpliendo la misión para Dumbledore y no te diré donde estoy.

Este libro te servirá para este año. Es el que veremos en Cuidado de Criatura Mágicas, no te preocupes que este no muerde, y te vendrá bien leerlo y tenerlo.

Espero que esos Muggles te estén tratando bien.

Saludos

Hagrid y Olympe

Harry tomó el libro y lo abrió: "Bestias Mágicas y Monstruos: Donde encontrarlos, como protegerse de unos y domesticar otros."

Harry dejó el libro en la mesa y tomó la siguiente carta, que era de Sirius:

Querido Harry

FELIZ CUMPLEAÑOS!!!!!!!!

El regalo lo encontramos Remus y yo en la casa de él y le pertenecía a tu padre. Estoy seguro que querrás tenerlo. Aún estoy cumpliendo mi misión para Dumbledore pero estoy seguro que nos veremos pronto, ya que Remus volverá a enseñar en el colegio e irá acompañado por su perro "Hocicos".

No dejes que esos Muggles te depriman ni pienses en Voldemort demasiado.

Saludos de tu Padrino

Sirius.

Harry abrió el paquete con ansia y encontró un pequeño espejo como los que le había visto a Moody en su despacho el año anterior: Era un Reflector de Enemigos. Con el paquete encontró una nota:

Harry

Esto es un reflector de enemigos, te mostrará siempre a alguien que quiera lastimarte.

Tu padre tenía este y le era valioso e importante. Estoy seguro que te lo habría dado después de todo lo que pasó.

Sirius y Remus.

Harry dejó el Reflector en su mesita de luz y tomó el siguiente paquete. Este era muy pequeño, casi del tamaño de una Snitch. Al abrirlo Harry se sorprendió al ver que era realmente una Snitch. Tomo la carta que venía con ella y la leyó:

Querido Harry

Estoy segura que estarás sorprendido por el regalo, pero el resto del equipo decidió que esto te vendrá muy bien este año que vuelve el Quidditch al colegio.

Como recordarás Oliver se graduó hace dos años y dejó dos puestos libres: Guardián y Capitán. Para el de Guardián mantendremos pruebas pero el de capitán es el tema de esta carta.

Con el resto del equipo hemos decidido que seas tú. Estoy segura que pensarás "¿Por qué no los otros?"

La respuesta es sencilla: Angelina y Katie estarán ocupadas con los EXTASIS; yo, aparte de los exámenes, estaré demasiado ocupada siendo Premio Anual; y los mellizos estarán ocupados con la tienda, así que hemos decidido que seas tú.

Además, los 5 sabemos que sin ti Gryffindor no habría ganado la Copa y a ti te quedan otros 3 años más de colegio a diferencia de nosotros que terminamos todos este año.

FELIZ CUMPLEAÑOS CAPITÁN!!!!!!!

Alicia Spinnet, Katie Bell, Angelina Johnson, Fred y George Weasley.

Tus compañeros del Equipo de Quidditch de la Casa Gryffindor.

Harry sonrió: "¡¡¡Capitán de Quidditch!!! Cuando Sirius se entere, no lo va a creer." Con una sonrisa de oreja a oreja tomó la carta del colegio.

Al abrirla cayó del sobre una insignia con la letra "P" en ella. Harry la miró sorprendido y comenzó a leer la carta:

Estimado señor Potter

Como Jefa de su casa, estoy orgullosa de notificarle que ha sido elegido junto a la Srta. Granger y el Sr. Ronald Weasley como prefectos de la casa Gryffindor. Esta es una responsabilidad que estoy segura que no tomará a la ligera. Usted tendrá la responsabilidad de cuidar el orden de la sala común y ayudar a los profesores cuando sea necesario. También deberá asistir a las reuniones de prefectos que serán llevadas a cabo regularmente. Estas serán conducidas por los Premios Anuales, la Srta. Alicia Spinnet de la Casa Gryffindor y el Sr. Roger Davies de la casa Ravenclaw.

Se adjunta la lista de Prefectos y la lista de libros para el presente año. El Expreso de Hogwarts partirá desde la Estación 9 ¾ el Primero de Septiembre a las 11.00 de la mañana.

Atentamente,

Profesora Minerva McGonagall.

Jefa de la Casa Gryffindor y Vice-Directora.

"¿¿¿¿Prefecto yo????" Pensó Harry. Esto era algo que realmente no esperaba en lo más mínimo sobre todo teniendo en cuenta todas las reglas que habían roto con Ron y Hermione y los problemas que había causado en 4 años. Tomó la lista de Prefectos y la leyó:

Prefectos de Hogwarts de quinto año de 1995

Casa Gryffindor: Hermione Granger - Harry Potter - Ronald Weasley

Casa Ravenclaw: Padma Patil - Terry Boot

Casa Hufflepuff: Ernie Macmillan - Hannah Abbott

Casa Slytherin: Pansy Parkinson - Blaise Zabini

Harry sonrió al ver que Draco Malfoy no era uno de los prefectos. Eso era una gran noticia, al menos demostraba que los profesores de Hogwarts no estaban completamente locos al nombrarlo a él de Prefecto. Decidido a contarle a Sirius todas estas noticias tomó un pergamino y una pluma y comenzó a escribir:

Queridos Sirius y Remus:

Gracias por el regalo realmente me encantó el Reflector de Enemigos. Estoy seguro de que me servirá mucho.

Tengo 2 noticias que me han sorprendido:

La primera ¡¡¡¡¡¡soy el Capitán de Quidditch!!!!!! Los demás del equipo me escribieron y me dijeron que había sido nombrado el Capitán.

La segunda: en un ataque de locura McGonagall me nombró Prefecto junto a Ron y Hermione. ¿Prefectos nosotros? ¿Con las reglas que quebrantamos, los puntos que perdemos y los problemas en los que nos metemos? Definitivamente están locos!!!!!

Me alegro de que Remus vuelva al colegio para dar DCAO. Será bueno tener un profesor que regrese a dar esa materia. Si quieres verme búscame en la Biblioteca St. Louis todos los días entre las 9.00 de la mañana y las 4.00 de la tarde. Allí es donde trabajo. Me alegrará verte y hablar en persona, sino te veré en el colegio.

Saludos a los dos,

Harry

Harry despertó a Hedwig y le ató la carta a su pierna.

"Llévale esto a Sirius, ¿de acuerdo Hedwig?" Le dijo acariciándole la cabeza a su lechuza. Esta le mordió cariñosamente en dedo y salió volando por la ventana.

Luego de que Hedwig desapareciera de la vista, Harry tomó un pergamino y escribió una carta a Ron:

Querido Ron

Gracias por el reloj, no sabes que bien que me viene.

Tengo dos cosas que decirte, aunque yo no termino de creerlo. La primera es que me nombraron Capitán del Equipo de Quidditch.

La otra: McGonagall me nombró Prefecto de Gryffindor a mí también. Esta es la prueba que necesitaba para saber que los profesores del colegio están locos. ¿Los tres prefectos con todas las reglas que hemos roto? Lo bueno es que Malfoy NO LO ES!!!!!!!! Vamos a poder quitarle puntos por cualquier cosa!!!!!!

En cuanto a lo del callejón Diagon, seguro que podré estar allí.

Saludos a toda tu familia y gracias por el reloj,

Espero verte pronto

Harry.

Tomó a Pig y le ató la carta a su pata. "Llévale esto a Ron ¿Entendiste?" Le dijo a la lechuza miniatura. Esta ululó felizmente y salió volando por la ventana.

Luego de ver a Pig desaparecer en el horizonte, Harry miró el reloj y vio que ya eran casi las 2.00 de la mañana. Pensando que era mejor dormir, guardó los regalos bajo la tabla suelta del piso debajo de su cama, se quitó los anteojos y se acostó con una sonrisa en su cara.

El reloj marcaba las 1.58 de la madrugada cuando Harry finalmente se durmió en una noche tranquila sin pesadillas, sino sueños felices.