Vaya!!! Si me dejaron reviews!!! Ah, estoy taaan feliz y agradecida que les
contestaré a todos los que me dejaron un comentario!:
Saeta: Mi primer review! Gracias por lo q dices ^___^ intento hacerlo lo más original posible, y aquí subo el cap 2 =) Oh, habrá mucho romance jajaja
Lina Saotome: Ah, no podía dejar de lado a Severus!!! =D el es completamente genial! Estará más en la historia, no te preocupes!
Dolphin: Los Merodeadores son lo mejor! Si q si! Jeje me alegra q te haya parecido divertidas algunas frases! Yo ya lo lei tantas veces q ya ninguna palabra tiene sentido asi q no puedo saber si es algo gracioso o no =P muerte a Peter? Lo mataría si no fuera parte tan importante de esta historia jejeje
Princess Leia Skywalker: Un gusto! Si q lo sigo! =)
cali-chan: Oh, pero si Severus entra perfectamente en el grupito, a nadie se le habia ocurrido? =P Has acertado en lo de Sev!!! Me sorprendes, de hecho, si será animago y además un cuervo! Dios, me has leído la mente O_O Te respondo lo mismo q a Dolphin, Peter aun tiene su papel, desgraciadamente! =) Ah, me han contado q el apodo de Padfoot en español es Canuto, q horror... mejor en ingles!
Nicole: Gracias! Hago lo q puedo! =D
Los Pactos
Capitulo II: Ser o no ser, ese es el dilema
Los cinco chicos se apresuraron a bajar y se dieron cuenta que no eran los únicos que se habían olvidado de la hora, pues muchos otros Gryffindor estaban saliendo apretujadamente por la entrada del cuadro, entraron al Gran Salón en un gran alboroto, del que ellos no eran responsables, cosa de la que no podían jactarse muy a menudo, pero de todas formas recibían miradas de 'siempre llegando tarde' o 'seguro ocasionaron este disturbio' por parte de algunos profesores en la mesa del fondo.
Al acercarse a la mesa, ninguno pudo evitar notar una rojiza cabellera e inconscientemente se sentaron junto a ella. Al sentir a alguien al lado de ella, Lily se sobresaltó y casi inmediatamente una mueca de odio adornaba su rostro. Empinó su nariz con aire orgulloso y se arrastró unos centímetros en el banco, alejándose del grupo.
-Ah, que atenta, nos está dando más espacio para sentarnos cómodamente. – dijo Sirius en voz alta y sarcástica, para que la pelirroja alcance a escucharlo.
En ese momento Dumbledore empezó su tan esperado discurso (y se dieron cuenta que se habían perdido del sorteo de los alumnos, lo que no les importaba demasiado), pero eso no detuvo a la chica de sacarles la lengua y arrastrarse aún más por el banco, apretujando a todos los que estaban al extremo del asiento donde se estaba dirigiendo. Los chicos siguieron sus movimientos, acercándose más a ella. Entonces, Lily, totalmente enojada empujó con todas sus fuerzas a la persona que estaba al lado opuesto de los chicos, para alejarse aún más de ellos, pero esto ocasionó una reacción en cadena que terminó por hacer caer del banco a la chica que se sentaba al final, que se levantó apresuradamente y empezó a gritarle algunas cosas.
-Le agradeceríamos que dejara de moverse, Señorita Evans. – dijo, frente a toda la escuela, Dumbledore, que había sido interrumpido en la mitad de su discurso. Lily se sonrojó tanto al estar ante la mirada divertida de todos los alumnos de la escuela que no se sabía donde comenzaba su cabello y donde terminaba su cara.
Todo lo que quedó del discurso y la cena Lily lo pasó en silencio, ocultando su cara lo más que podía, ya que estaba segura de que seguía sonrojada, podía escuchar las risas ahogadas del grupito que había ocasionado –según ella- esa escena, y esto la ponía cada vez más furiosa. Apenas Dumbledore les dijo que podían retirarse la chica caminó rápidamente hacia la salida, para dirigirse a su habitación.
-Hum, no se porqué, pero presiento que no le caemos muy bien... – dijo pensativo James.
-¿Tu crees? – agregó sarcásticamente Remus.
-Están equivocados – comenzó a decir Sirius – a las chicas les gusta que alguien les haga la vida imposible. – sonrió con aire de sabelotodo – aquí entre nos, creo que son masoquistas...
-Yo no creo que—argumentó Severus.
-Blackbeak... ¿has tenido novia alguna vez?- le preguntó atrevidamente Sirius. Snape le respondió con una mirada molesta. – Entonces no tienes derecho de palabra en esta conversación. – le dijo presumidamente mientras comenzaba a retirarse de la mesa. Severus hizo un movimiento como para seguirlo y darle una golpiza, pero Remus, conociendo sus intenciones, lo detuvo por el brazo, hasta que se calmara.
Al otro día comenzaron las clases normales, era su primer día en cuarto año, y su primera clase fue transformaciones. Los Merodeadores andaban por el pasillo, dirigiéndose a su clase, cuando divisaron a Lily, James se adelantó y la alcanzó, los otros lo siguieron.
-¡Bueeeeenos días!- la saludó Potter. Ella no le contestó, solo pretendió ignorarlo, pero no pudo alejarse ya que los otros cuatro chicos estorbaban su paso.
-¿Necesitas ayuda con esos libros? – le preguntó Remus, ella comenzó a negarse, pero antes de que pudiera terminar de decir 'no' Sirius ya había agarrado la mayoría de sus libros, James intentó agarrar los que quedaban, pero Severus se le adelantó.
-¡Snape! – le gritó James, llamándolo por su apellido, como hacía cuando estaba enfadado con alguien – ¡dame unos cuantos libros! ¡Yo llegué primero aquí!
-¡Habrás llegado primero pero eres lento con las manos! – le dijo malvadamente Severus.
-¡Dejen de gritar! – los intentó callar la pelirroja- denme mis libros de vuelta ¡AHORA!
-¿Ves? – agregó enfadado James – ¡ahora quiere sus libros! Y todo es tu culpa, eres taaan problemático.
-Tu eres el problemático, Potter. – le dijo Severus con una voz calmada pero fría. Hizo un ademán de devolverle los libros a Lily, pero James lo detuvo.
-¡No, yo se los devolveré! – James intentó quitarle los libros, pero Severus se resistió, pelearon, cada uno tirando de un extremo de los libros, hasta que James no pudo más y soltó los libros, después de todo Severus era más fuerte, y los libros salieron volando por el aire. Peter y Remus se apresuraron a alzarlos, pero Lily, harta de todo, los detuvo a gritos.
-¡NI SIQUIERA LO PIENSEN! ¡Yo lo levantaré!
-Pero... – comenzó Remus.
-¡VÁYANSE! – gritó furiosamente, sonrojándose de enojo. Los chicos se quedaron petrificados un momento, hasta Snape tenía una mirada de espanto, y con aire derrotado entraron al aula. La chica alzó todos sus libros y entró rápidamente a clases.
-Veo que se decidió a unírsenos, Señorita Evans. – le dijo la profesora McGonagall.
-Lo siento profesora... mis libros—empezó a explicarse, pero la profesora la interrumpió.
-No quiero excusas, que no vuelva a pasar. –dijo con aire severo – Ahora, lea la introducción que está en la página 3 de su libro para toda la clase.- Lily buscó su libro entre el montón, pero no estaba ahí, entonces se dio cuenta que Sirius no le había devuelto alguno de su libros. - ¿Qué sucede? – preguntó la profesora al notar que Lily no comenzaba.
-Eh... no tengo ese libro... – se disculpó.
-Llega tarde y además sin libro. – dijo la profesora McGonagall con una voz que estremeció a toda la clase.
-No es mi culpa fue—trató de seguir disculpándose.
-¡Basta! Yo siempre la creí una alumna modelo, Señorita Evans... –comenzó – cinco puntos menos para Gryffindor y por esta vez, pasará la clase en el pasillo, pensando en lo importante de la responsabilidad que viene con--- y así siguió el sermón, que tomó al menos tres cuartas partes de la clase, y por eso mismo Lily no se perdió de nada importante más que 'Bienvenidos al emocionante mundo de la transformación , parte IV'.
A la salida de esa clase, Sirius, como buen chico, le devolvió sus libros y le pidió perdón, pero ella no lo escuchó, estaba más enfada que nunca.
En la siguiente clase, Encantamientos, Los Merodeadores tomaron asiento junto a Lily, logrando que se desconcentrara por completo y no pudiera hacer ni un simple 'Wingardium Leviosa'. Y la siguiente clase, Cuidado de animales mágicos, ella pisó la cola de un Jarvey al intentar alejarse de Sirius, que la estaba persiguiendo para pedirle perdón acerca de su libro. Luego, en el almuerzo, entró al Gran Salón, con su escolta, Sirius pidiéndole perdón casi de rodillas, James y Severus discutiendo sobre quien tenía la culpa, Remus intentando calmar a todos y Peter meneando la cabeza ante la situación, casi toda la escuela se había dado cuenta ya de la atención que causaba la chica a Los Merodeadores, y, como es normal en toda escuela, los rumores comenzaron ese mismo día. Las chicas, celosas, rumoreaban que ella era una chica fácil y lanzada, Los chicos, al escuchar los rumores de las chicas, empezaron a tomarle más atención a la pelirroja. Los profesores simplemente creía que el grupo trataba de copiarse las tareas.
Había pasado una semana de incansable persecución para Los Merodeadores, y aún no entendían que era lo que les atraía tanto de ella, ni porque querían ser sus amigos. Había pasado una semana de interminable huída y rumores para Lily y ya tenía una reputación que podía escribirse en un pedazo de papel de un kilómetro con la letra más chica en tinta negra.
-No, esto no está funcionando. – se decidió al fin James, luego de acosar por los pasillos de la escuela toda la mañana a la pelirroja.
-Claro que si, ya no nos mira con tanto odio. – argumentó Sirius.
-Eso es porque ya ni nos mira. – le dijo Remus.
-Es cierto, antes le caíamos mal y no nos conocía... ahora nos conoce y nos odia. – empezó Severus. – Si tan solo me hubieran hecho caso al principio...
-Si, si, si, para sermones tenemos a McGonagall, ok? – le dijo exasperado Sirius.
-Entonces, ¿Qué piensas que debemos hacer? – le preguntó James a Severus.
-Yo les aclararé el terreno. – les dijo.
Esa misma tarde, Severus se acercó para hablar con ella, esperando suavizar los ánimos.
-Lil--- pero antes de que pudiera decir al menos una palabra, Lily lo recibió con una cachetada que lo dejó viendo estrellitas el resto del día. Los otros chicos, obviamente, se burlaron y rieron de él el resto del año a causa de este incidente, y decidieron tener otra pequeña charla.
-Resígnense, nos o-d-i-a – les dijo Remus, ya algo cansado de todo esto.
-La esperanza es lo último que se pierde... – dijo todo delicado James.
-Y lo primero es la dignidad, ¿cierto Severus? – agregó Sirius.
-Cállate. – le contestó de mala gana Snape, que todavía tenía una mejilla roja.
-¿Tienen alguna idea de por qué queremos tan desesperadamente ser sus amigos?- les preguntó a todos Peter.
-Para limpiar nuestro nombre.-respondió James.
-Porque es una preciosidad. – respondió Sirius.
-Por orgullo. – respondió Severus.
-Porque es la única chica que no se ha tirado a nuestros pies... – respondió Remus. Deliberaron un momento y decidieron que la razón que había dado Lupin era la verdadera. Luego de un tiempo resolvieron ir todos juntos a hablar con ella, sin acoso, sin presiones y sin Peter, pues él dijo que no estaba de humor para ser golpeado por una chica.
-Lily. – trató de llamar su atención James, pues ella se encontraba leyendo en uno de los sillones de la Sala Común de Gryffindor, ella intentó dejar el lugar, pero los demás la detuvieron , quebrando su promesa de 'sin presiones'.
-Solo queríamos disculparnos por acosarte últimamente... – comenzó Remus.
-Y por desconcentrarte... – agregó James.
-Y por enojarte... – agregó Sirius. Y todos miraron impacientemente a Severus, como esperando que diga algo.
-¿Qué? Yo no voy a disculparme, creo que ya pagué todo lo que le hice al dejar que me golpeara... – dijo caprichosamente.
-Ay si, dejar que te golpeara... – agregó sarcásticamente James. Severus golpeó en la cabeza a James y el golpeado estaba a punto de defenderse cuando algo raro pasó, la pelirroja se rió.
-Ah, ¿vieron? El problema fue que ella no era masoquista, era sádica. – agregó Sirius.
-No soy sádica. – se defendió Lily. – Me rió de la ironía de la vida... los odio pero me hacen reír, son estúpidamente graciosos.
-¡Nos llamó graciosos!- dijo alegremente James.
-Nos llamó estúpidos.- lo corrigió Sirius.
-Pero... no tienes porque odiarnos – empezó Remus. – Solo queríamos ser tus amigos... pero no utilizamos las tácticas correctas... – dijo mirando de soslayo a Sirius, James y Severus.
-Oh, no, no voy a caer en eso...
-¿Caer en qué? – le preguntó Sirius.
-En sus trampas... ¿creen que no sé que solo quieren jugar conmigo?-les preguntó desafiante.
-Nosotros nunca jugamos con nuestras amistades... – le dijo James, muy seriamente.
-Solo bromeamos un poco. – agregó Remus.
-Sé de muchas chicas que solo utilizaron para jugar. – los desafió de nuevo.
-Ah, esas eran novias, no amigas. – explicó Black, ganando una mirada enojada de la chica.
-Aún no se si creerles... – les dijo. – además, si causan tantos problemas intentando ser mis amigos, como será cuando sean mis amigos.
-Que tal si... pruebas un rato ser nuestra amiga y si te gusta te quedas, si te exasperamos, te vas, sin resentimientos. – le ofreció Remus. La chica hizo una cara como de estar pensándolo.
-Esta bien... – aceptó finalmente, Los cuatro chicos le regalaron una sonrisa, que ella contestó. – y... ¿te dolió mucho cuando te golpeé? – le preguntó a Severus.
-Y... un poco. – mintió Severus, le había dolido más que cuando él y James se agarraron a puñetes al final de un partido de Quidditch.
-Oh, lo siento. – le dijo con una voz melosa, Severus le sonrió. – y... ¿Cuál es tu materia favorita? – y así comenzaron a charlar y se empezaron a ir, dejando a tres chicos con miradas horrorizadas en sus rostros.
-¡¿Severus y Lily?!- dijo con voz ahogada Sirius.
-Oh no, ¡¿Qué hemos hecho?! – se lamentó Remus.
Fin del Capitulo II
¿Qué tal? ^_^U Bueno, no se olviden de seguir dejando reviews! Unas anotaciones más:
-No se si están bien los nombres de las materias... pero pueden vivir con eso, no?
-Severus estaba en Slytherin según los libros, cierto? Aquí haré unos cambios y está en Gryffindor =P que irónico, no?
Eso es todo... sip! Nos leemos!
Irrel~
Saeta: Mi primer review! Gracias por lo q dices ^___^ intento hacerlo lo más original posible, y aquí subo el cap 2 =) Oh, habrá mucho romance jajaja
Lina Saotome: Ah, no podía dejar de lado a Severus!!! =D el es completamente genial! Estará más en la historia, no te preocupes!
Dolphin: Los Merodeadores son lo mejor! Si q si! Jeje me alegra q te haya parecido divertidas algunas frases! Yo ya lo lei tantas veces q ya ninguna palabra tiene sentido asi q no puedo saber si es algo gracioso o no =P muerte a Peter? Lo mataría si no fuera parte tan importante de esta historia jejeje
Princess Leia Skywalker: Un gusto! Si q lo sigo! =)
cali-chan: Oh, pero si Severus entra perfectamente en el grupito, a nadie se le habia ocurrido? =P Has acertado en lo de Sev!!! Me sorprendes, de hecho, si será animago y además un cuervo! Dios, me has leído la mente O_O Te respondo lo mismo q a Dolphin, Peter aun tiene su papel, desgraciadamente! =) Ah, me han contado q el apodo de Padfoot en español es Canuto, q horror... mejor en ingles!
Nicole: Gracias! Hago lo q puedo! =D
Los Pactos
Capitulo II: Ser o no ser, ese es el dilema
Los cinco chicos se apresuraron a bajar y se dieron cuenta que no eran los únicos que se habían olvidado de la hora, pues muchos otros Gryffindor estaban saliendo apretujadamente por la entrada del cuadro, entraron al Gran Salón en un gran alboroto, del que ellos no eran responsables, cosa de la que no podían jactarse muy a menudo, pero de todas formas recibían miradas de 'siempre llegando tarde' o 'seguro ocasionaron este disturbio' por parte de algunos profesores en la mesa del fondo.
Al acercarse a la mesa, ninguno pudo evitar notar una rojiza cabellera e inconscientemente se sentaron junto a ella. Al sentir a alguien al lado de ella, Lily se sobresaltó y casi inmediatamente una mueca de odio adornaba su rostro. Empinó su nariz con aire orgulloso y se arrastró unos centímetros en el banco, alejándose del grupo.
-Ah, que atenta, nos está dando más espacio para sentarnos cómodamente. – dijo Sirius en voz alta y sarcástica, para que la pelirroja alcance a escucharlo.
En ese momento Dumbledore empezó su tan esperado discurso (y se dieron cuenta que se habían perdido del sorteo de los alumnos, lo que no les importaba demasiado), pero eso no detuvo a la chica de sacarles la lengua y arrastrarse aún más por el banco, apretujando a todos los que estaban al extremo del asiento donde se estaba dirigiendo. Los chicos siguieron sus movimientos, acercándose más a ella. Entonces, Lily, totalmente enojada empujó con todas sus fuerzas a la persona que estaba al lado opuesto de los chicos, para alejarse aún más de ellos, pero esto ocasionó una reacción en cadena que terminó por hacer caer del banco a la chica que se sentaba al final, que se levantó apresuradamente y empezó a gritarle algunas cosas.
-Le agradeceríamos que dejara de moverse, Señorita Evans. – dijo, frente a toda la escuela, Dumbledore, que había sido interrumpido en la mitad de su discurso. Lily se sonrojó tanto al estar ante la mirada divertida de todos los alumnos de la escuela que no se sabía donde comenzaba su cabello y donde terminaba su cara.
Todo lo que quedó del discurso y la cena Lily lo pasó en silencio, ocultando su cara lo más que podía, ya que estaba segura de que seguía sonrojada, podía escuchar las risas ahogadas del grupito que había ocasionado –según ella- esa escena, y esto la ponía cada vez más furiosa. Apenas Dumbledore les dijo que podían retirarse la chica caminó rápidamente hacia la salida, para dirigirse a su habitación.
-Hum, no se porqué, pero presiento que no le caemos muy bien... – dijo pensativo James.
-¿Tu crees? – agregó sarcásticamente Remus.
-Están equivocados – comenzó a decir Sirius – a las chicas les gusta que alguien les haga la vida imposible. – sonrió con aire de sabelotodo – aquí entre nos, creo que son masoquistas...
-Yo no creo que—argumentó Severus.
-Blackbeak... ¿has tenido novia alguna vez?- le preguntó atrevidamente Sirius. Snape le respondió con una mirada molesta. – Entonces no tienes derecho de palabra en esta conversación. – le dijo presumidamente mientras comenzaba a retirarse de la mesa. Severus hizo un movimiento como para seguirlo y darle una golpiza, pero Remus, conociendo sus intenciones, lo detuvo por el brazo, hasta que se calmara.
Al otro día comenzaron las clases normales, era su primer día en cuarto año, y su primera clase fue transformaciones. Los Merodeadores andaban por el pasillo, dirigiéndose a su clase, cuando divisaron a Lily, James se adelantó y la alcanzó, los otros lo siguieron.
-¡Bueeeeenos días!- la saludó Potter. Ella no le contestó, solo pretendió ignorarlo, pero no pudo alejarse ya que los otros cuatro chicos estorbaban su paso.
-¿Necesitas ayuda con esos libros? – le preguntó Remus, ella comenzó a negarse, pero antes de que pudiera terminar de decir 'no' Sirius ya había agarrado la mayoría de sus libros, James intentó agarrar los que quedaban, pero Severus se le adelantó.
-¡Snape! – le gritó James, llamándolo por su apellido, como hacía cuando estaba enfadado con alguien – ¡dame unos cuantos libros! ¡Yo llegué primero aquí!
-¡Habrás llegado primero pero eres lento con las manos! – le dijo malvadamente Severus.
-¡Dejen de gritar! – los intentó callar la pelirroja- denme mis libros de vuelta ¡AHORA!
-¿Ves? – agregó enfadado James – ¡ahora quiere sus libros! Y todo es tu culpa, eres taaan problemático.
-Tu eres el problemático, Potter. – le dijo Severus con una voz calmada pero fría. Hizo un ademán de devolverle los libros a Lily, pero James lo detuvo.
-¡No, yo se los devolveré! – James intentó quitarle los libros, pero Severus se resistió, pelearon, cada uno tirando de un extremo de los libros, hasta que James no pudo más y soltó los libros, después de todo Severus era más fuerte, y los libros salieron volando por el aire. Peter y Remus se apresuraron a alzarlos, pero Lily, harta de todo, los detuvo a gritos.
-¡NI SIQUIERA LO PIENSEN! ¡Yo lo levantaré!
-Pero... – comenzó Remus.
-¡VÁYANSE! – gritó furiosamente, sonrojándose de enojo. Los chicos se quedaron petrificados un momento, hasta Snape tenía una mirada de espanto, y con aire derrotado entraron al aula. La chica alzó todos sus libros y entró rápidamente a clases.
-Veo que se decidió a unírsenos, Señorita Evans. – le dijo la profesora McGonagall.
-Lo siento profesora... mis libros—empezó a explicarse, pero la profesora la interrumpió.
-No quiero excusas, que no vuelva a pasar. –dijo con aire severo – Ahora, lea la introducción que está en la página 3 de su libro para toda la clase.- Lily buscó su libro entre el montón, pero no estaba ahí, entonces se dio cuenta que Sirius no le había devuelto alguno de su libros. - ¿Qué sucede? – preguntó la profesora al notar que Lily no comenzaba.
-Eh... no tengo ese libro... – se disculpó.
-Llega tarde y además sin libro. – dijo la profesora McGonagall con una voz que estremeció a toda la clase.
-No es mi culpa fue—trató de seguir disculpándose.
-¡Basta! Yo siempre la creí una alumna modelo, Señorita Evans... –comenzó – cinco puntos menos para Gryffindor y por esta vez, pasará la clase en el pasillo, pensando en lo importante de la responsabilidad que viene con--- y así siguió el sermón, que tomó al menos tres cuartas partes de la clase, y por eso mismo Lily no se perdió de nada importante más que 'Bienvenidos al emocionante mundo de la transformación , parte IV'.
A la salida de esa clase, Sirius, como buen chico, le devolvió sus libros y le pidió perdón, pero ella no lo escuchó, estaba más enfada que nunca.
En la siguiente clase, Encantamientos, Los Merodeadores tomaron asiento junto a Lily, logrando que se desconcentrara por completo y no pudiera hacer ni un simple 'Wingardium Leviosa'. Y la siguiente clase, Cuidado de animales mágicos, ella pisó la cola de un Jarvey al intentar alejarse de Sirius, que la estaba persiguiendo para pedirle perdón acerca de su libro. Luego, en el almuerzo, entró al Gran Salón, con su escolta, Sirius pidiéndole perdón casi de rodillas, James y Severus discutiendo sobre quien tenía la culpa, Remus intentando calmar a todos y Peter meneando la cabeza ante la situación, casi toda la escuela se había dado cuenta ya de la atención que causaba la chica a Los Merodeadores, y, como es normal en toda escuela, los rumores comenzaron ese mismo día. Las chicas, celosas, rumoreaban que ella era una chica fácil y lanzada, Los chicos, al escuchar los rumores de las chicas, empezaron a tomarle más atención a la pelirroja. Los profesores simplemente creía que el grupo trataba de copiarse las tareas.
Había pasado una semana de incansable persecución para Los Merodeadores, y aún no entendían que era lo que les atraía tanto de ella, ni porque querían ser sus amigos. Había pasado una semana de interminable huída y rumores para Lily y ya tenía una reputación que podía escribirse en un pedazo de papel de un kilómetro con la letra más chica en tinta negra.
-No, esto no está funcionando. – se decidió al fin James, luego de acosar por los pasillos de la escuela toda la mañana a la pelirroja.
-Claro que si, ya no nos mira con tanto odio. – argumentó Sirius.
-Eso es porque ya ni nos mira. – le dijo Remus.
-Es cierto, antes le caíamos mal y no nos conocía... ahora nos conoce y nos odia. – empezó Severus. – Si tan solo me hubieran hecho caso al principio...
-Si, si, si, para sermones tenemos a McGonagall, ok? – le dijo exasperado Sirius.
-Entonces, ¿Qué piensas que debemos hacer? – le preguntó James a Severus.
-Yo les aclararé el terreno. – les dijo.
Esa misma tarde, Severus se acercó para hablar con ella, esperando suavizar los ánimos.
-Lil--- pero antes de que pudiera decir al menos una palabra, Lily lo recibió con una cachetada que lo dejó viendo estrellitas el resto del día. Los otros chicos, obviamente, se burlaron y rieron de él el resto del año a causa de este incidente, y decidieron tener otra pequeña charla.
-Resígnense, nos o-d-i-a – les dijo Remus, ya algo cansado de todo esto.
-La esperanza es lo último que se pierde... – dijo todo delicado James.
-Y lo primero es la dignidad, ¿cierto Severus? – agregó Sirius.
-Cállate. – le contestó de mala gana Snape, que todavía tenía una mejilla roja.
-¿Tienen alguna idea de por qué queremos tan desesperadamente ser sus amigos?- les preguntó a todos Peter.
-Para limpiar nuestro nombre.-respondió James.
-Porque es una preciosidad. – respondió Sirius.
-Por orgullo. – respondió Severus.
-Porque es la única chica que no se ha tirado a nuestros pies... – respondió Remus. Deliberaron un momento y decidieron que la razón que había dado Lupin era la verdadera. Luego de un tiempo resolvieron ir todos juntos a hablar con ella, sin acoso, sin presiones y sin Peter, pues él dijo que no estaba de humor para ser golpeado por una chica.
-Lily. – trató de llamar su atención James, pues ella se encontraba leyendo en uno de los sillones de la Sala Común de Gryffindor, ella intentó dejar el lugar, pero los demás la detuvieron , quebrando su promesa de 'sin presiones'.
-Solo queríamos disculparnos por acosarte últimamente... – comenzó Remus.
-Y por desconcentrarte... – agregó James.
-Y por enojarte... – agregó Sirius. Y todos miraron impacientemente a Severus, como esperando que diga algo.
-¿Qué? Yo no voy a disculparme, creo que ya pagué todo lo que le hice al dejar que me golpeara... – dijo caprichosamente.
-Ay si, dejar que te golpeara... – agregó sarcásticamente James. Severus golpeó en la cabeza a James y el golpeado estaba a punto de defenderse cuando algo raro pasó, la pelirroja se rió.
-Ah, ¿vieron? El problema fue que ella no era masoquista, era sádica. – agregó Sirius.
-No soy sádica. – se defendió Lily. – Me rió de la ironía de la vida... los odio pero me hacen reír, son estúpidamente graciosos.
-¡Nos llamó graciosos!- dijo alegremente James.
-Nos llamó estúpidos.- lo corrigió Sirius.
-Pero... no tienes porque odiarnos – empezó Remus. – Solo queríamos ser tus amigos... pero no utilizamos las tácticas correctas... – dijo mirando de soslayo a Sirius, James y Severus.
-Oh, no, no voy a caer en eso...
-¿Caer en qué? – le preguntó Sirius.
-En sus trampas... ¿creen que no sé que solo quieren jugar conmigo?-les preguntó desafiante.
-Nosotros nunca jugamos con nuestras amistades... – le dijo James, muy seriamente.
-Solo bromeamos un poco. – agregó Remus.
-Sé de muchas chicas que solo utilizaron para jugar. – los desafió de nuevo.
-Ah, esas eran novias, no amigas. – explicó Black, ganando una mirada enojada de la chica.
-Aún no se si creerles... – les dijo. – además, si causan tantos problemas intentando ser mis amigos, como será cuando sean mis amigos.
-Que tal si... pruebas un rato ser nuestra amiga y si te gusta te quedas, si te exasperamos, te vas, sin resentimientos. – le ofreció Remus. La chica hizo una cara como de estar pensándolo.
-Esta bien... – aceptó finalmente, Los cuatro chicos le regalaron una sonrisa, que ella contestó. – y... ¿te dolió mucho cuando te golpeé? – le preguntó a Severus.
-Y... un poco. – mintió Severus, le había dolido más que cuando él y James se agarraron a puñetes al final de un partido de Quidditch.
-Oh, lo siento. – le dijo con una voz melosa, Severus le sonrió. – y... ¿Cuál es tu materia favorita? – y así comenzaron a charlar y se empezaron a ir, dejando a tres chicos con miradas horrorizadas en sus rostros.
-¡¿Severus y Lily?!- dijo con voz ahogada Sirius.
-Oh no, ¡¿Qué hemos hecho?! – se lamentó Remus.
Fin del Capitulo II
¿Qué tal? ^_^U Bueno, no se olviden de seguir dejando reviews! Unas anotaciones más:
-No se si están bien los nombres de las materias... pero pueden vivir con eso, no?
-Severus estaba en Slytherin según los libros, cierto? Aquí haré unos cambios y está en Gryffindor =P que irónico, no?
Eso es todo... sip! Nos leemos!
Irrel~
