Año 194 DC
En la colonia A0206, los descendientes y herederos del clan del dragón son obligados a casarse a los 14 años. La pareja de Meiran es Wufei Chang, un chico estudiante.
-ah... eres tú, el chico de la escuela... es una deshonra para mí, la más fuerte del clan que...
-Bueno, haz como te plazca- le respondió Wufei saliendo del templo
"Regresará" pensó Meiran
Durante el resto de la ceremonia los dos adolescentes permanecieron callados, sin nisiquiera mirarse uno al otro, Wufei no podía creer que esa mañana hubiese asistido a la escuela y esa noche se casaba y Meiran no podía creer que luego de tanto entrenar y convertirse en la más fuerte de su clan le tocara casarse con ese chico tan débil.
Al terminar la ceremonia, los felices esposos se retiraron a la casa que les había sido asignada
-Quiero que sepas - recordó Meiran - que soy tu esposa, no tu sirviente, niñera, madre, consejera ni nada por el estilo, tu esposa o compañera como quieras llamarle
-Esta bien Mei...
-Y por favor, no duermas conmigo esta noche ¿entendido? Ahí está el famoso sofá, yo dormiré en la cama y... Buenas noches- dijo cerrando la puerta tras ella
"Por qué? Por qué es así? Y quien decidió que yo era el hombre perfecto para semejante llorona consentida??" pensaba mientras trataba de dormir en el incómodo sofá "Eso envidio de los occidentales son un poco mas... libres"
A la mañana siguiente, Meiran despertó cuando el sol entró por su ventana "ahhh un nuevo día para fastidiar a Wufei" dijo ajustándose sus moñitos y saliendo en pijamas de la habitación, Wufei aún dormía en el sillón.
-Despierta, alguien tiene que ir al colegio- le susurró al oído
-En un segundo, Meiran
-Llámame Nataku... Nataku, soy la más fuerte de mi clan ¿recuerdas?
-Ah sí, entonces llámame Isabel, soy la reina de Inglaterra... ¿no te lo dijeron?
Meiran captó el sarcasmo de su esposo, y optó por darse media vuelta
-Por cierto, reina Isabel, no puedo cocinar... estas manos han sido entrenadas para golpear, no para hacer comida y mucho menos limpieza... así que prepárate tú solito el desayuno... yo tengo que entrenar, te veo luego Wu-Isabel
Wufei por primera vez, sintió que haberlo casado con esa chica era la peor decisión que habían tomado por él, llegó a su escuela en donde recibió felicitaciones... lo que menos estaba era feliz, estaba enojado con la persona que habían escogido para él, esa mocosa que no sabía lavar un plato, finjía ser fuerte y mejor que nadie...
Meiran, con su mente de niñita recién casada pensaba "Wufei se ve fuerte... pero sé que no lo es... Un momento ¿no he sido suficientemente cruel con él?" Inmediatamente corrió a su casa pasando por una tienda de comestibles y comprando lo necesario para una buena cena
-Jajaja!! Wufei, prepárate para ver a Meiran como Martha Stewart-decía mientras picaba frenéticamente distintas verduras
Wufei se distrajo al salir de clases esa tarde, talvez nunca había apreciado su libertad, al salir de clases se dirigía a la casa de alguien más a estudiar o a entrenar... Ahora no, tenía que llegar a ver que nada le hubiese pasado a la niña esa... ahora caminaba por un estrecho camino rodeado de distintas flores. Meiran preparó una cena al estilo tailandés, luego se arregló un poco para recibir a su esposo, dieron las 7, las 8... pasó despierta hasta las 11 de la noche y Wufei no llegaba, finalmente se quedó dormida en el sillón de la entrada.
Wufei abrió la puerta a eso de las 11:10, se quitó los zapatos, y vio el conmovedor cuadro, una mesa bien arreglada, una suculenta comida y Meiran dormida en el sofá muy bien arreglada, sus sentimientos de chico duro lo traicionaron en ese momento
"Meiran... ¿habrá sido capaz? ¿habrá preparado esto en realidad? Dios, que frío... llevaré a Meiran a la cama"
Wufei cargó el delgado cuerpo de la adolescente hasta la habitación "no puede dormir así" pensó viendo el incómodo vestido que tenía "debe de tener alguna pijama o algo por aquí... ah si, aquí esta ¿se enojará si la desvisto para luego ponersela?"
-¿¿QUÉ HACES ENFERMO PERVERTIDO?? Déjame!!- dijo al verse en paños menores frente al chico
-CÁLMATE, NEURÓTICA... NO TENGO MALAS INTENCIONES... ERES UNA IMBÉCIL ¿¿COMO SE TE OCURRE QUEDARTE CON ESE VESTIDO EN UNA NOCHE TAN FRIA COMO ESTA??
Meiran se calmó, vió que el rostro de su joven esposo estaba casi tan alterado como el de ella
-yo... yo te esperaba par cenar, hasta había cocinado... normalmente no hago esto ¿me perdonas?
El asiático observó con atención a Meiran, estaba notablemente avergonzada, no supo si por encontrarse en ropa interior frente a él o por haberle gritado
-Duérmete ya, estás cansada y yo ya cené... gracias de todos modos - dijo saliendo de la habitación
-Espera, Wufei...- Meiran corrió hacia él- duerme tu aquí ahora, podemos turnarnos la cama y el sofá
-Sería muy cobarde de mi parte dejar a mi esposa durmiendo afuera en una noche tan fría... no te preocupes por mí, Nataku estaré... - no siguió, Meiran no era tan fea como ayer, tenía el cabello suelto que por cierto era negrísimo al igual que sus profundos ojos; por su parte, Meiran se dio cuenta que su joven esposo no era tan flacucho... y que al igual que ella tenía unos profundos ojos negros detrás de esas gafas...
-Por favor Wufei... duerme aquí... yo... estaré...bien... a...qui afuera
y por arte de magia, los que ayer se odiaban, los que esa mañana se habian tirado indirectas y sarcasmos... ahora se besaban como si todo el tiempo hubieran estado enamorados.
En la colonia A0206, los descendientes y herederos del clan del dragón son obligados a casarse a los 14 años. La pareja de Meiran es Wufei Chang, un chico estudiante.
-ah... eres tú, el chico de la escuela... es una deshonra para mí, la más fuerte del clan que...
-Bueno, haz como te plazca- le respondió Wufei saliendo del templo
"Regresará" pensó Meiran
Durante el resto de la ceremonia los dos adolescentes permanecieron callados, sin nisiquiera mirarse uno al otro, Wufei no podía creer que esa mañana hubiese asistido a la escuela y esa noche se casaba y Meiran no podía creer que luego de tanto entrenar y convertirse en la más fuerte de su clan le tocara casarse con ese chico tan débil.
Al terminar la ceremonia, los felices esposos se retiraron a la casa que les había sido asignada
-Quiero que sepas - recordó Meiran - que soy tu esposa, no tu sirviente, niñera, madre, consejera ni nada por el estilo, tu esposa o compañera como quieras llamarle
-Esta bien Mei...
-Y por favor, no duermas conmigo esta noche ¿entendido? Ahí está el famoso sofá, yo dormiré en la cama y... Buenas noches- dijo cerrando la puerta tras ella
"Por qué? Por qué es así? Y quien decidió que yo era el hombre perfecto para semejante llorona consentida??" pensaba mientras trataba de dormir en el incómodo sofá "Eso envidio de los occidentales son un poco mas... libres"
A la mañana siguiente, Meiran despertó cuando el sol entró por su ventana "ahhh un nuevo día para fastidiar a Wufei" dijo ajustándose sus moñitos y saliendo en pijamas de la habitación, Wufei aún dormía en el sillón.
-Despierta, alguien tiene que ir al colegio- le susurró al oído
-En un segundo, Meiran
-Llámame Nataku... Nataku, soy la más fuerte de mi clan ¿recuerdas?
-Ah sí, entonces llámame Isabel, soy la reina de Inglaterra... ¿no te lo dijeron?
Meiran captó el sarcasmo de su esposo, y optó por darse media vuelta
-Por cierto, reina Isabel, no puedo cocinar... estas manos han sido entrenadas para golpear, no para hacer comida y mucho menos limpieza... así que prepárate tú solito el desayuno... yo tengo que entrenar, te veo luego Wu-Isabel
Wufei por primera vez, sintió que haberlo casado con esa chica era la peor decisión que habían tomado por él, llegó a su escuela en donde recibió felicitaciones... lo que menos estaba era feliz, estaba enojado con la persona que habían escogido para él, esa mocosa que no sabía lavar un plato, finjía ser fuerte y mejor que nadie...
Meiran, con su mente de niñita recién casada pensaba "Wufei se ve fuerte... pero sé que no lo es... Un momento ¿no he sido suficientemente cruel con él?" Inmediatamente corrió a su casa pasando por una tienda de comestibles y comprando lo necesario para una buena cena
-Jajaja!! Wufei, prepárate para ver a Meiran como Martha Stewart-decía mientras picaba frenéticamente distintas verduras
Wufei se distrajo al salir de clases esa tarde, talvez nunca había apreciado su libertad, al salir de clases se dirigía a la casa de alguien más a estudiar o a entrenar... Ahora no, tenía que llegar a ver que nada le hubiese pasado a la niña esa... ahora caminaba por un estrecho camino rodeado de distintas flores. Meiran preparó una cena al estilo tailandés, luego se arregló un poco para recibir a su esposo, dieron las 7, las 8... pasó despierta hasta las 11 de la noche y Wufei no llegaba, finalmente se quedó dormida en el sillón de la entrada.
Wufei abrió la puerta a eso de las 11:10, se quitó los zapatos, y vio el conmovedor cuadro, una mesa bien arreglada, una suculenta comida y Meiran dormida en el sofá muy bien arreglada, sus sentimientos de chico duro lo traicionaron en ese momento
"Meiran... ¿habrá sido capaz? ¿habrá preparado esto en realidad? Dios, que frío... llevaré a Meiran a la cama"
Wufei cargó el delgado cuerpo de la adolescente hasta la habitación "no puede dormir así" pensó viendo el incómodo vestido que tenía "debe de tener alguna pijama o algo por aquí... ah si, aquí esta ¿se enojará si la desvisto para luego ponersela?"
-¿¿QUÉ HACES ENFERMO PERVERTIDO?? Déjame!!- dijo al verse en paños menores frente al chico
-CÁLMATE, NEURÓTICA... NO TENGO MALAS INTENCIONES... ERES UNA IMBÉCIL ¿¿COMO SE TE OCURRE QUEDARTE CON ESE VESTIDO EN UNA NOCHE TAN FRIA COMO ESTA??
Meiran se calmó, vió que el rostro de su joven esposo estaba casi tan alterado como el de ella
-yo... yo te esperaba par cenar, hasta había cocinado... normalmente no hago esto ¿me perdonas?
El asiático observó con atención a Meiran, estaba notablemente avergonzada, no supo si por encontrarse en ropa interior frente a él o por haberle gritado
-Duérmete ya, estás cansada y yo ya cené... gracias de todos modos - dijo saliendo de la habitación
-Espera, Wufei...- Meiran corrió hacia él- duerme tu aquí ahora, podemos turnarnos la cama y el sofá
-Sería muy cobarde de mi parte dejar a mi esposa durmiendo afuera en una noche tan fría... no te preocupes por mí, Nataku estaré... - no siguió, Meiran no era tan fea como ayer, tenía el cabello suelto que por cierto era negrísimo al igual que sus profundos ojos; por su parte, Meiran se dio cuenta que su joven esposo no era tan flacucho... y que al igual que ella tenía unos profundos ojos negros detrás de esas gafas...
-Por favor Wufei... duerme aquí... yo... estaré...bien... a...qui afuera
y por arte de magia, los que ayer se odiaban, los que esa mañana se habian tirado indirectas y sarcasmos... ahora se besaban como si todo el tiempo hubieran estado enamorados.
