BLANCO Y NEGRO
CapÃtulo 6: Intuición
Ahora que lo miraba mejor, podÃa incluso entender a Mione. Era la segunda clase de la mañana, Defensa, y Ginny estaba observando al Profesor Noel Graham mientras éste recogÃa los trabajos antes de que terminara la hora. Era alto, de veintipocos años, con el pelo algo más largo que Draco (¿Por qué tuvo que pensar en él precisamente?), castaño oscuro con reflejos rojizos y bucles descuidados tras las orejas. Las cejas eran anchas, y los ojos sonreÃan todo el rato y eran pardos con motas más claras. La nariz era recta y soberbia, y aunque era muy pálido de piel, no parecÃa delicado. Las gafas cuadradas le daban un toque... intelectual, justo lo que Hermione necesitaba después de Ron.
'Muy bien', pensó, aliviada. 'Chico, estás aprobado.'
- Virginia, ¿su trabajo?- sonrió él. Ginny se lo entregó algo sonrojada, y Eloïse, a su lado, entregó el suyo, también roja.- Muy bien. Quedan cinco minutos, pero... ya pueden marcharse.
Ginny recogió sus libros, casi feliz, para bajar al comedor. TenÃa mucha hambre, porque se habÃa levantado tarde y no habÃa podido desayunar más que una tostada, y la noche anterior no cenó... En la puerta de la clase se encontró a Hermione. Gin levantó una ceja, Mione le hizo un gesto para que disimulara y sonrió al profesor Graham.
- ¿Profesor?
- Buenos dÃas, Hermione. ¿Acabó ya mi libro?
Hermione sonrió otra vez y levantó el libro para que pudiera verlo.
- VenÃa a devolverlo- explicó, y Ginny se dio cuenta de que a su amiga se le estaban subiendo los colores. El profesor Graham le devolvió la sonrisa:
Muchas gracias. Tengo otros que quizás le interesen sobre la no existencia de la materia...- los dos entraron en la clase vacÃa (Hermione ya no se acordaba de ella y él ni la habÃa visto) y Ginny se quedó sola en el pasillo frente a la puerta abierta.
Muy lindos y demás, pero la habÃan dejado abandonada.
Suspirando, se fue a comer.
*-*-*-*-*
La mañana habÃa sido como cualquier otra. FrÃa, nublada y sin viento. Transfiguración y Defensa. En ambas clases se lo podrÃa haber pasado bien si no fuera por el dolor de cabeza que la perseguÃa. Se sentÃa como si alguien le golpeara en la frente con un martillo constantemente.
- ¿Cómo va?- preguntó Nille en cuanto ella se sentó a la mesa.
- Esta noche he soñado una cosa muy rara..
Nille arqueó una ceja.
- ¿Qué sucedÃa?
Ginny empezó a comer mientras se explicaba:
Estaba en un bosque. Estaba oscureciendo. Hubiera tenido miedo, pero era un sueño y claro, no es lo mismo.
Nille sonrió a medias y la animó a continuar con un gesto.
- HabÃa mucha niebla. Estaba todo nevado, pero era como si yo no estuviera allà de veras, fuera un fantasma o algo asÃ, porque iba en camisón y no tenÃa frÃo. ¿En los sueños todo parece muy normal, no?- explicó ella, y Nille sacudió la cabeza con cara de 'Y yo qué sé, nunca recuerdo lo que he soñado'.- Oà unas voces algo más allá y empecé a andar hacia ellas. Eran un chico y una chica. Estaban discutiendo. Yo casi no veÃa nada porque entre la niebla y que estaba oscuro, la verdad, era un poco difÃcil. Como ni los veÃa ni entendÃa nada tuve que acercarme más hasta que quedé a cinco metros o asÃ. No se enteraron de que yo estaba allÃ, pero yo tampoco me enteré muy bien de lo que pasaba. Estoy casi segura de que el chico era Draco, pero no tengo ni idea de quién era la chica... aunque sonaba un poco a Hermione, pero no creo que fuera ella. Entonces... bueno, yo no vi casi nada, pero él dijo algo y ella le pegó una torta impresionante.- Ginny gesticuló como si le diera una gran bofetada a alguien y abrió mucho los ojos.- La cara que puso él daba miedo, Nille. Estaba tan furioso que ella casi huye corriendo. De hecho lo intentó, pero él la agarró de la muñeca, se acercó mucho y le siseó no-sé-qué. Entonces me desperté. Eran las tres y poco.
Volvió la vista hacia Nille, que la estaba mirando con el tenedor a medio camino de la boca.
- ¿Y ya está?
- SÃ- dijo Ginny, encogiéndose de hombros.- ¿Sabes qué puede significar?
- ¿Que ves demasiados culebrones?
Ella rió, más por la cara de él que por nada.
- Oh, venga.- Iba a pedirle más ideas, pero entonces se puso seria de golpe y volvió a mirar su plato.
- ¿Qué pasa?
- Ha llegado- suspiró ella. Nille se giró, Draco se estaba sentando en la mesa de Slytherin.
- Oh. Vamos fuera, entonces.
Salieron del comedor (Ginny con la carne de su estofado entre dos rebanadas de pan y un par de manzanas en el bolsillo).
- A ver, ¿qué ha pasado?
- ¿Cómo?
- Entre tú y Draco. ¿Vas a contármelo, no?
- Bueno... estuvimos hablando la noche del baile. Me contó... - Ginny vaciló- que su hermano se suicidó cuando tenÃa su edad.- Se dejó caer bajo un árbol delante del lago.- ParecÃa tan indefenso. Lo abracé... pero cuando encontramos a Harry me aparté... y él se fue. Ayer lo vi en el entreno de tiro. Es el nuevo capitán de Slytherin, supongo que habrá comprado su puesto. Iba... abrazado por la cintura con la chica del pelo lila. Me insultó, el muy gilipollas, y lo mandé a la mierda- Alzó la mirada hasta Nille.
- Es increÃble que te contara que su hermano se suicidó.- Neville le pasó el brazo por los hombros y Ginny recostó contra él la cabeza.
- Pero lo he estropeado. O eso o es un cabrón.
- Quizás Moss tenÃa razón y es realmente maricón- bromeó Nille, pero sólo consiguió que Ginny sonriera.- Por mucho que te apartaras, no tenÃa porqué... meterse contigo ni darte celos con la chica ésa.
- Champi.
- ¿Ein?
- Que yo la llamo Champi- aclaró Ginny, y notó el temblor de los hombros de Nille al reÃrse suavemente. QuerÃa contarle los detalles, pero Nille dijo:
- Yo tampoco estoy muy bien.
- Se te ve.
- Ya... ayer no vine porque tuve que ir al entierro de mi padre. Se mató. Se tiró de la ventana del quinto piso. Sin querer, supongo. Pero vete a saber, en su estado...- Ginny lo oyó tragar saliva- Mamá ni siquiera se ha dado cuenta.
- Nille...
Él descansó su cabeza sobre la de Ginny.
- Estoy cansado de llorar.
Ginny no dijo nada durante lo que les pareció una eternidad.
- ¿Sabes que Ron ha ligado?- dijo, al final, cambiando de tema.
- Con Moss, él me lo dijo.
- Moss está en las nubes- rió ella.
- Él parece que no está muy interesado.
Ginny se incorporó un poco para mirarlo, sorprendida.
- ¿En serio?
- Yo no me preocuparÃa mucho por ella, Gin. Seguro que enseguida se busca a otro.
- No hables asà de Moss, ¿quieres? Ella no te ha hecho nada- se quejó Ginny, aunque en el fondo pensaba lo mismo que él.
- ¿Y cómo le sentó a Hermione?
- En un principio, mal, pero ahora ha... 'mossificado' y ha encontrado a otro.
- ¿Quién?
Ginny se llevó un dedo a los labios.
- Secreto de confesión.
Qué cruel era, Nille se morÃa de ganas de saberlo. Pero él puso cara de 'Bueno, ya me lo contarás en un momento de debilidad cotillera' y siguió hablando:
- Harry me preocupa, también. Está obsesionado con que debe encontrar al 'asesino' de Hermione.
- ¿Asesino? ¡Si no la mataron!
- Ya lo sé. Pero él lo dice asÃ, 'asesino'. Encima Ron se siente culpable. Dice que ella estaba sola porque él la dejó y Harry no está ayudando mucho.
- Ya hablaré con él- dijo Ginny, y volvieron a quedarse silenciosos. En cinco minutos, Nille se habÃa dormido con la cabeza en el hombro de Ginny, que sonrió. Seguramente Nille no habÃa descansado muy bien esa noche. Ella sÃ, pero sin embargo, los ojos se le cerraban... caÃa lentamente... el sol de enero le rozaba una mejilla... los rizos de Nille le hacÃan cosquillas en la otra... la corteza del árbol era áspera a través de su capa... se estaba durmiendo...
Virginia... Virginia...
Despertó, sobresaltada, despertando a Nille también. ¿Quién la llamaba? Era voz de chica, pero sonaba como un susurro lejano... se sintió incómoda.
- ¿Qué pasaaaa?- preguntó él, bostezando.
- ¿No has oÃdo una voz?
- ¿Eh?
- Una voz de mujer.
- No oà nada- dijo Neville.- Pero estamos llegando tarde a las clases.
Sintiéndose mejor, los dos corrieron hacia el castillo.
*-*-*-*-*
Después de Runas, Ginny bajó a la galerÃa de tiro con arco, que estaba desierta. Se quitó la túnica, se puso el jersey viejo y los guantes, tensó el arco y abrió el libro de la biblioteca. HabÃa encontrado una técnica nueva, la flecha del parto, que daba (según las reglas de tiro mágico) veinte puntos extras siempre que se acertara a la diana. No parecÃa muy difÃcil. Si aprendÃa a hacerla, la podrÃa enseñar a Joanne y quizás a Dean. Según el dibujo, debÃa tirarse de espaldas por sobre el hombro, girando la cintura. Al cabo de diez minutos, sólo dos flechas habÃan dado en la diana, y encima eran de las blancas, las que eran fáciles de dirigir.
- ¿Cómo se juega a esto?
Era Moss, sentada contra la pared a su espalda. Ginny se dejó caer a su lado.
- Pues... hay cuatro variantes: de arco corto, arco largo, de ballesta y diana libre. Para cada uno, hay una diana y una distancia de inicio. Dependiendo de dónde le des a una diana determinada, se te da un número de puntos, mayores cuanto más te acercas al centro. Hay cinco tipos de flechas: las blancas, que son las fáciles; las azules, que cuestan más y suman cinco puntos si aciertas o los restan si fallas; las rojas, que suman o restan veinte si les das bastante en el centro o no y las negras, que suman cincuenta sólo si das en el cÃrculo central. Si no, te restan setenta y cinco. Además hay posiciones y tácticas que también añaden puntos.
Moss parpadeó, confundida.
- Oh... de lejos parecÃa más fácil.
Ginny la observó atentamente. TenÃa el pelo corto recogido con dos clips rosas en forma de mariposas que aleteaban, los ojos amarillos estaban escondidos bajo las pestañas (¿cómo hacÃa para tenerlas tan largas?), la piel más blanca que de costumbre, y llevaba una capa de terciopelo verde musgo preciosa, pero se la veÃa triste.
- Bueno... en realidad la que me paso toda la competición sufriendo y tratando de decidir qué tienen que hacer mis jugadores soy yo.
- Seguro que lo harás bien... cada vez que yo tengo que decidir algo me equivoco.
Ginny suspiró y le puso un mechón de pelo en su sitio. Definitivamente, si Moss se criticaba a sà misma, era una señal muy, muy mala.
- ¿Qué ha pasado?
Moss se echó a llorar, dejando a Ginny desconcertada.
- Ron... he hablado con él... *hip* dice que no... 'está interesado' en mÃ, el muy *hip* cabrón... he...*hip* he insistido, pero *hip* me ha *hip* man- *hip*mandado a *hip**hip*- Moss se atragantó con su hipo y no pudo continuar.
- Moss... venga, Moss, ya pasó... no llores.- murmuró Ginny, acariciándole el pelo azabache y sintiéndose inútil.
Aunque hubiera querido, Moss no habrÃa podido parar. Trataba de secarse las mejillas mientras seguÃa llorando (sólo consiguió estropearse su elaborado maquillaje) y trataba de hablar, pero se atascaba con el hipo.
- *hip* Crees...- articuló al final- *hip* ¿crees que me lo *hip* me- merezco?
- ¿El qué?- preguntó Ginny con suavidad.
- Yo siempre *hip* planté a todos en cuanto *hip* me aburrÃ.
- Bueno... algún dÃa tenÃa que pasarte...
- ¡Pero no con *hip* con Ron! ¡Yo iba en serio! *hip* Pero él dijo que no... *hip*
Alguien las estaba mirando a unos metros. Moss ni se enteró (suficiente trabajo tenÃa con el hipo), pero Ginny levantó la cabeza y vio que era Hermione, con los libros bajo el brazo, que la venÃa a buscar para aclararle las diferencias entre las diferentes pociones del sueño. ParecÃa estar observando a Moss atentamente. Ginny esperaba que volviera por donde habÃa venido, quizás sonriendo disimuladamente, porque era lo que ella creÃa sinceramente que habrÃa hecho en su lugar.
Pero Hermione se acercó, se sentó al otro lado de Moss y le tendió su pañuelo.
Moss vio el pañuelo, miró hacia arriba y arqueó una ceja. (*hip*) Hermione se sonrojó pero aguantó la mirada.
'Por favor por favorcito' rezó Ginny.
Finalmente, Moss cogió el pañuelo y sonrió un poco.
*-*-*-*-*
Las mazmorras estaban oscuras, y todo lo que Nille deseaba era salir de allà cuanto antes. No soportaba los techos bajos y las habitaciones oscuras y húmedas de los bajos del castillo, y ya llevaba allà una hora limpiando calderos como castigo.
Ya llegaba a la puerta. Por fin. Pero...
- Nille, espera.
Por la forma de arrastrar las sÃlabas supo quién era antes de volverse.
- Hola, Malfoy.
El otro chico sonrió muy ligeramente y sacudió la cabeza.
- Draco para los amigos, ¿no?
- Hola, Draco- cambió Nille. Draco le caÃa bien, pero no se sentÃa muy cómodo. A decir verdad, sólo se encontraba cómodo y feliz con Ginny y en el invernadero con las plantas, lo cual no querÃa decir que Ginny fuera una planta. Y menos una planta de invernadero.
- ¿Cómo estás?
- Muy bien.
- No mientas.
- Fatal- reconoció Nille.
- Siento lo de tu padre.
Nille asintió, con ganas de contestar 'Y yo lo del tuyo', pero se calló.
- ¿Cómo estás tú?
Draco se encogió de hombros.
- QuerÃa preguntarte... ¿Cómo está Ginny?
- No muy bien.- Lo observó, evaluando las posibilidades de salir ileso después de preguntar:- ¿A qué vino lo de tiro y Champi? la chica, quiero decir.
Draco rió.
- ¿Champi?! ¿Se lo puso Ginny, no?
Neville asintió, Draco rió más.
- ¿Tan mal le sentó?
- Draco... no puedo contarte nada. Si quieres saber algo, habla con ella.
- No voy a hacerlo. De hecho, querÃa proponerte un trato.
- No creo que...- Nille retrocedió imperceptiblemente. No le gustaba cómo sonaba 'trato' en boca de Draco.
- Escucha. Tú me dices cómo está Ginny. No quiero los secretos que te pueda contar, sólo... saber cómo está, si es feliz... Yo no lo soy y no creo que lo sea nunca, asà que, como mÃnimo, ella debe serlo.
- Se lo estás poniendo un poco difÃcil, ¿no crees?
- Debe olvidarme. Pero por favor, Nille. Ayúdame y te ayudaré.
Draco habÃa dicho 'por favor'. Neville asintió, aun inseguro, y los dos chicos encajaron las manos.
*-*-*-*-*
- Pensé que no acabarÃa de llorar nunca- comentó Hermione, mientras ella y Ginny iban a cenar.
- El hipo era peor.
Hermione sonrió un poco.
- Pobrecita. Espero que el plan funcione.
- ¿Estás de broma? ¿Un plan ideado por una Slytherin desesperada y Hermione con complejo de niña buena, y además puesto en práctica por una Weasley? No puede fallar- aseguró Ginny.
- Más nos vale, porque si tenemos que consolarla otra vez...
- Me alegro de que ya no estéis peleadas.
Hermione sonrió.
- Yo también. No parece tan tonta como pensaba. Sólo... necesita un poco de cariño.
Ginny iba a replicar cuando se encontraron a Ron corriendo hacia ellas todo acalorado.
- Harry ha descubierto tu agresor, Hermione.
- ¿Cómo?- se sorprendió Mione.
- No lo sé, pero McGonagall me envió a buscarte. Están en el despacho de Dumbledore. Tú puedes venir también, Gin.
Ginny corrió tras ellos hasta la gárgola de entrada. Mione dijo la contraseña, 'merengues rellenos', y los tres subieron precipitadamente las escaleras de caracol. Hermione, detrás de ella, se estaba quedando sin aliento. ¿Quién era el que la habÃa herido? No sabÃa si podrÃa soportar tenerlo delante y no lanzarse a su cuello. Si algo le hubiera pasado...
Pero no estaba preparada para lo que vio. Sentado en su mesa, estaba Dumbledore, y tras él, los profesores Sprout, McGonagall y Snape. A un lado de la habitación estaba Harry, y al otro, Neville, que miraba a Hannah, que estaba en el centro, llorando, histérica, bajo la mirada acusadora de Harry.
*-*-*-*-*
N/A: Frente todas las quejas por la falta de H/R en este fic, debo decir que yo creo que Ron y Hermi acabarán liados en el libro, asà que ya no me molesto en escribirlo aquÃ. Además, es muy tópico y a mà lo que me gusta es sorprenderos.
Y ahora, dejar claro que Moss sólo necesita que le hagan algo de caso, que Ron es un tÃo como cualquier otro y que por tanto puede hacer lo que quiera con su vida sin tenerse que preocupar si eso significa ser un poco cabrón, que Draco tiene motivos para todo y que Hannah... bueno, ahà os dejo a solas con la intriga.
1 Por último, ¡gracias por los reviews! Allá vamos: *Nimph coge aire*
Ron's lover: ¡Ya lo sé! ¡Me encanta la pareja R/H! Pero en este fic no hay, lo siento. Aunque si hago una secuela... me lo pensaré ;) Muchas gracias por tu review y tu tiempo!
Favila: *Nimph se queda boqueando* ¿Cómo lo hiciste? ¡Entendiste todo lo que quise decir! Y lo siento, pero Ginny no va disparando a la gente en la entrepierna porque es pacifista. ;)
Lina Saotome: ¡Muchas gracias! Me alegro de que te haya gustado. :)
Slythy: CapÃtulo servido. ¿Desea algo más? ;)
Noriko: Siento lo de R/H... pero como he dicho, me lo pensaré para la secuela, ok? Gracias por preocuparte por Nille, ¿a que es muy mono? No te preocupes, lleva demasiado tiempo sin tener padres de verdad, asà que no creo que se deprima mucho.
Minaro: Lo siento. Moss es estupenda, no veo porqué la odias. Y no podÃa matar a Hermione, es parte esencial de la trama. Y creo que aunque pudiera no lo habrÃa hecho.
Selene: *Nimph mira el nick y se pregunta si tiene algo que ver con Buscándote* Muchas gracias! Me alegro de que Draco te siga cayendo bien, estaba preocupada por cómo os lo tomarÃais. Y traté de alargar este capÃtulo, pero ya ves, no pude. ^^
chica potter (isa): Muchas gracias! :) Me alegra mucho que la gente me diga eso.
Spacey: Moss y Ronnie hacen buena pareja, ¿verdad? Y Marujita DÃaz es perfecta para Lockhart, a mi humilde parecer. ;)
LucÃa: Muchas gracias! Ya verás como Moss y Ron se complementan... sólo dame tiempo para enseñaroslo.
Hermione12: Pues sÃ, a Hermione le guta su profe, ¡y no te metas con Ron! Cualquiera se quedarÃa sola en un baile si con eso ayudas a tu mejor amigo a ligar, no? Además, no estaba sola. Aunque la verdad es que deberÃa haberla avisado. ^^ Gracias!
Princess Leia Skywalker: Repetimos: ¡R/H forever! Pero no en mi fic. :) Y hay que decir que el profesor Graham está muy, pero que muy bueno y además es una monada, asà que estoy con Hermione: puede enamorarse de quién le dé la gana. Gracias por todo!
cali-chan: gracias por tu ayuda y comentarios, me ayuda mucho saber qué te ha gustado en especial. ¡Destructores de la Champi al poder! (sólo esperad que YO termine con ella ;) )
Esmeralda: No sabes cómo me animó tu review! Gracias por leerlo y por aprobar mi 'no H/R'. Espero que este capÃtulo te guste!
Tsuku Miaki: Wohoo! Bienvenida al club de fans de Draco Malfoy! ;)
LaLi: ¡Gracias por el review! Aunque ¿no me dijiste que no lo habÃas leÃdo? ;) Eso son trampas.
Jade: Gracias por tu apoyo siempre en el msn y por perseguirme para que escriba. Por ahora puede que pase algo, pero jamás voy a reducir el voltaje G/D a un 'te quiero y siempre te querré' porque me cansarÃa de ellos. Asà que puedes esperar algo fÃsico, pero ligero, porque me gusta mantenerlos en vilo.
Júbilo: Vaya susto me di cuando vi ese mega-review que me dejaste! :) Se me subió la sonrisa hasta las orejas. Todos tus comentarios me animaron, asà que ya estás dejando un review otra vez. ;) ¡Vivan Draco, los malos que no lo son tanto, Ginny y Éowyn, el cuero, la tensión sexual y las frases cortantes! Me gustó tu consejo porque era lo que yo pensaba hacer. Desde luego, van a liarse, pero nunca acabarán mirándose con ojos de cordero degollado, no te preocupes. Pero va a pasar algo como unos cuantos besos para... aumentar el voltaje un poquito más... Mwahahahaha! Muchas gracias!
Sólo me falta decir que ni siquiera empecé el capÃtulo siete. Con toda probabilidad, sacaré antes el último de 'Buscándote en la oscuridad', aunque quizás tenga una inspiración divina para el 7 y os enteréis de qué pasa con Hannah...
Besos y órdenes de dejar reviews suculentas:
Nimphie
CapÃtulo 6: Intuición
Ahora que lo miraba mejor, podÃa incluso entender a Mione. Era la segunda clase de la mañana, Defensa, y Ginny estaba observando al Profesor Noel Graham mientras éste recogÃa los trabajos antes de que terminara la hora. Era alto, de veintipocos años, con el pelo algo más largo que Draco (¿Por qué tuvo que pensar en él precisamente?), castaño oscuro con reflejos rojizos y bucles descuidados tras las orejas. Las cejas eran anchas, y los ojos sonreÃan todo el rato y eran pardos con motas más claras. La nariz era recta y soberbia, y aunque era muy pálido de piel, no parecÃa delicado. Las gafas cuadradas le daban un toque... intelectual, justo lo que Hermione necesitaba después de Ron.
'Muy bien', pensó, aliviada. 'Chico, estás aprobado.'
- Virginia, ¿su trabajo?- sonrió él. Ginny se lo entregó algo sonrojada, y Eloïse, a su lado, entregó el suyo, también roja.- Muy bien. Quedan cinco minutos, pero... ya pueden marcharse.
Ginny recogió sus libros, casi feliz, para bajar al comedor. TenÃa mucha hambre, porque se habÃa levantado tarde y no habÃa podido desayunar más que una tostada, y la noche anterior no cenó... En la puerta de la clase se encontró a Hermione. Gin levantó una ceja, Mione le hizo un gesto para que disimulara y sonrió al profesor Graham.
- ¿Profesor?
- Buenos dÃas, Hermione. ¿Acabó ya mi libro?
Hermione sonrió otra vez y levantó el libro para que pudiera verlo.
- VenÃa a devolverlo- explicó, y Ginny se dio cuenta de que a su amiga se le estaban subiendo los colores. El profesor Graham le devolvió la sonrisa:
Muchas gracias. Tengo otros que quizás le interesen sobre la no existencia de la materia...- los dos entraron en la clase vacÃa (Hermione ya no se acordaba de ella y él ni la habÃa visto) y Ginny se quedó sola en el pasillo frente a la puerta abierta.
Muy lindos y demás, pero la habÃan dejado abandonada.
Suspirando, se fue a comer.
*-*-*-*-*
La mañana habÃa sido como cualquier otra. FrÃa, nublada y sin viento. Transfiguración y Defensa. En ambas clases se lo podrÃa haber pasado bien si no fuera por el dolor de cabeza que la perseguÃa. Se sentÃa como si alguien le golpeara en la frente con un martillo constantemente.
- ¿Cómo va?- preguntó Nille en cuanto ella se sentó a la mesa.
- Esta noche he soñado una cosa muy rara..
Nille arqueó una ceja.
- ¿Qué sucedÃa?
Ginny empezó a comer mientras se explicaba:
Estaba en un bosque. Estaba oscureciendo. Hubiera tenido miedo, pero era un sueño y claro, no es lo mismo.
Nille sonrió a medias y la animó a continuar con un gesto.
- HabÃa mucha niebla. Estaba todo nevado, pero era como si yo no estuviera allà de veras, fuera un fantasma o algo asÃ, porque iba en camisón y no tenÃa frÃo. ¿En los sueños todo parece muy normal, no?- explicó ella, y Nille sacudió la cabeza con cara de 'Y yo qué sé, nunca recuerdo lo que he soñado'.- Oà unas voces algo más allá y empecé a andar hacia ellas. Eran un chico y una chica. Estaban discutiendo. Yo casi no veÃa nada porque entre la niebla y que estaba oscuro, la verdad, era un poco difÃcil. Como ni los veÃa ni entendÃa nada tuve que acercarme más hasta que quedé a cinco metros o asÃ. No se enteraron de que yo estaba allÃ, pero yo tampoco me enteré muy bien de lo que pasaba. Estoy casi segura de que el chico era Draco, pero no tengo ni idea de quién era la chica... aunque sonaba un poco a Hermione, pero no creo que fuera ella. Entonces... bueno, yo no vi casi nada, pero él dijo algo y ella le pegó una torta impresionante.- Ginny gesticuló como si le diera una gran bofetada a alguien y abrió mucho los ojos.- La cara que puso él daba miedo, Nille. Estaba tan furioso que ella casi huye corriendo. De hecho lo intentó, pero él la agarró de la muñeca, se acercó mucho y le siseó no-sé-qué. Entonces me desperté. Eran las tres y poco.
Volvió la vista hacia Nille, que la estaba mirando con el tenedor a medio camino de la boca.
- ¿Y ya está?
- SÃ- dijo Ginny, encogiéndose de hombros.- ¿Sabes qué puede significar?
- ¿Que ves demasiados culebrones?
Ella rió, más por la cara de él que por nada.
- Oh, venga.- Iba a pedirle más ideas, pero entonces se puso seria de golpe y volvió a mirar su plato.
- ¿Qué pasa?
- Ha llegado- suspiró ella. Nille se giró, Draco se estaba sentando en la mesa de Slytherin.
- Oh. Vamos fuera, entonces.
Salieron del comedor (Ginny con la carne de su estofado entre dos rebanadas de pan y un par de manzanas en el bolsillo).
- A ver, ¿qué ha pasado?
- ¿Cómo?
- Entre tú y Draco. ¿Vas a contármelo, no?
- Bueno... estuvimos hablando la noche del baile. Me contó... - Ginny vaciló- que su hermano se suicidó cuando tenÃa su edad.- Se dejó caer bajo un árbol delante del lago.- ParecÃa tan indefenso. Lo abracé... pero cuando encontramos a Harry me aparté... y él se fue. Ayer lo vi en el entreno de tiro. Es el nuevo capitán de Slytherin, supongo que habrá comprado su puesto. Iba... abrazado por la cintura con la chica del pelo lila. Me insultó, el muy gilipollas, y lo mandé a la mierda- Alzó la mirada hasta Nille.
- Es increÃble que te contara que su hermano se suicidó.- Neville le pasó el brazo por los hombros y Ginny recostó contra él la cabeza.
- Pero lo he estropeado. O eso o es un cabrón.
- Quizás Moss tenÃa razón y es realmente maricón- bromeó Nille, pero sólo consiguió que Ginny sonriera.- Por mucho que te apartaras, no tenÃa porqué... meterse contigo ni darte celos con la chica ésa.
- Champi.
- ¿Ein?
- Que yo la llamo Champi- aclaró Ginny, y notó el temblor de los hombros de Nille al reÃrse suavemente. QuerÃa contarle los detalles, pero Nille dijo:
- Yo tampoco estoy muy bien.
- Se te ve.
- Ya... ayer no vine porque tuve que ir al entierro de mi padre. Se mató. Se tiró de la ventana del quinto piso. Sin querer, supongo. Pero vete a saber, en su estado...- Ginny lo oyó tragar saliva- Mamá ni siquiera se ha dado cuenta.
- Nille...
Él descansó su cabeza sobre la de Ginny.
- Estoy cansado de llorar.
Ginny no dijo nada durante lo que les pareció una eternidad.
- ¿Sabes que Ron ha ligado?- dijo, al final, cambiando de tema.
- Con Moss, él me lo dijo.
- Moss está en las nubes- rió ella.
- Él parece que no está muy interesado.
Ginny se incorporó un poco para mirarlo, sorprendida.
- ¿En serio?
- Yo no me preocuparÃa mucho por ella, Gin. Seguro que enseguida se busca a otro.
- No hables asà de Moss, ¿quieres? Ella no te ha hecho nada- se quejó Ginny, aunque en el fondo pensaba lo mismo que él.
- ¿Y cómo le sentó a Hermione?
- En un principio, mal, pero ahora ha... 'mossificado' y ha encontrado a otro.
- ¿Quién?
Ginny se llevó un dedo a los labios.
- Secreto de confesión.
Qué cruel era, Nille se morÃa de ganas de saberlo. Pero él puso cara de 'Bueno, ya me lo contarás en un momento de debilidad cotillera' y siguió hablando:
- Harry me preocupa, también. Está obsesionado con que debe encontrar al 'asesino' de Hermione.
- ¿Asesino? ¡Si no la mataron!
- Ya lo sé. Pero él lo dice asÃ, 'asesino'. Encima Ron se siente culpable. Dice que ella estaba sola porque él la dejó y Harry no está ayudando mucho.
- Ya hablaré con él- dijo Ginny, y volvieron a quedarse silenciosos. En cinco minutos, Nille se habÃa dormido con la cabeza en el hombro de Ginny, que sonrió. Seguramente Nille no habÃa descansado muy bien esa noche. Ella sÃ, pero sin embargo, los ojos se le cerraban... caÃa lentamente... el sol de enero le rozaba una mejilla... los rizos de Nille le hacÃan cosquillas en la otra... la corteza del árbol era áspera a través de su capa... se estaba durmiendo...
Virginia... Virginia...
Despertó, sobresaltada, despertando a Nille también. ¿Quién la llamaba? Era voz de chica, pero sonaba como un susurro lejano... se sintió incómoda.
- ¿Qué pasaaaa?- preguntó él, bostezando.
- ¿No has oÃdo una voz?
- ¿Eh?
- Una voz de mujer.
- No oà nada- dijo Neville.- Pero estamos llegando tarde a las clases.
Sintiéndose mejor, los dos corrieron hacia el castillo.
*-*-*-*-*
Después de Runas, Ginny bajó a la galerÃa de tiro con arco, que estaba desierta. Se quitó la túnica, se puso el jersey viejo y los guantes, tensó el arco y abrió el libro de la biblioteca. HabÃa encontrado una técnica nueva, la flecha del parto, que daba (según las reglas de tiro mágico) veinte puntos extras siempre que se acertara a la diana. No parecÃa muy difÃcil. Si aprendÃa a hacerla, la podrÃa enseñar a Joanne y quizás a Dean. Según el dibujo, debÃa tirarse de espaldas por sobre el hombro, girando la cintura. Al cabo de diez minutos, sólo dos flechas habÃan dado en la diana, y encima eran de las blancas, las que eran fáciles de dirigir.
- ¿Cómo se juega a esto?
Era Moss, sentada contra la pared a su espalda. Ginny se dejó caer a su lado.
- Pues... hay cuatro variantes: de arco corto, arco largo, de ballesta y diana libre. Para cada uno, hay una diana y una distancia de inicio. Dependiendo de dónde le des a una diana determinada, se te da un número de puntos, mayores cuanto más te acercas al centro. Hay cinco tipos de flechas: las blancas, que son las fáciles; las azules, que cuestan más y suman cinco puntos si aciertas o los restan si fallas; las rojas, que suman o restan veinte si les das bastante en el centro o no y las negras, que suman cincuenta sólo si das en el cÃrculo central. Si no, te restan setenta y cinco. Además hay posiciones y tácticas que también añaden puntos.
Moss parpadeó, confundida.
- Oh... de lejos parecÃa más fácil.
Ginny la observó atentamente. TenÃa el pelo corto recogido con dos clips rosas en forma de mariposas que aleteaban, los ojos amarillos estaban escondidos bajo las pestañas (¿cómo hacÃa para tenerlas tan largas?), la piel más blanca que de costumbre, y llevaba una capa de terciopelo verde musgo preciosa, pero se la veÃa triste.
- Bueno... en realidad la que me paso toda la competición sufriendo y tratando de decidir qué tienen que hacer mis jugadores soy yo.
- Seguro que lo harás bien... cada vez que yo tengo que decidir algo me equivoco.
Ginny suspiró y le puso un mechón de pelo en su sitio. Definitivamente, si Moss se criticaba a sà misma, era una señal muy, muy mala.
- ¿Qué ha pasado?
Moss se echó a llorar, dejando a Ginny desconcertada.
- Ron... he hablado con él... *hip* dice que no... 'está interesado' en mÃ, el muy *hip* cabrón... he...*hip* he insistido, pero *hip* me ha *hip* man- *hip*mandado a *hip**hip*- Moss se atragantó con su hipo y no pudo continuar.
- Moss... venga, Moss, ya pasó... no llores.- murmuró Ginny, acariciándole el pelo azabache y sintiéndose inútil.
Aunque hubiera querido, Moss no habrÃa podido parar. Trataba de secarse las mejillas mientras seguÃa llorando (sólo consiguió estropearse su elaborado maquillaje) y trataba de hablar, pero se atascaba con el hipo.
- *hip* Crees...- articuló al final- *hip* ¿crees que me lo *hip* me- merezco?
- ¿El qué?- preguntó Ginny con suavidad.
- Yo siempre *hip* planté a todos en cuanto *hip* me aburrÃ.
- Bueno... algún dÃa tenÃa que pasarte...
- ¡Pero no con *hip* con Ron! ¡Yo iba en serio! *hip* Pero él dijo que no... *hip*
Alguien las estaba mirando a unos metros. Moss ni se enteró (suficiente trabajo tenÃa con el hipo), pero Ginny levantó la cabeza y vio que era Hermione, con los libros bajo el brazo, que la venÃa a buscar para aclararle las diferencias entre las diferentes pociones del sueño. ParecÃa estar observando a Moss atentamente. Ginny esperaba que volviera por donde habÃa venido, quizás sonriendo disimuladamente, porque era lo que ella creÃa sinceramente que habrÃa hecho en su lugar.
Pero Hermione se acercó, se sentó al otro lado de Moss y le tendió su pañuelo.
Moss vio el pañuelo, miró hacia arriba y arqueó una ceja. (*hip*) Hermione se sonrojó pero aguantó la mirada.
'Por favor por favorcito' rezó Ginny.
Finalmente, Moss cogió el pañuelo y sonrió un poco.
*-*-*-*-*
Las mazmorras estaban oscuras, y todo lo que Nille deseaba era salir de allà cuanto antes. No soportaba los techos bajos y las habitaciones oscuras y húmedas de los bajos del castillo, y ya llevaba allà una hora limpiando calderos como castigo.
Ya llegaba a la puerta. Por fin. Pero...
- Nille, espera.
Por la forma de arrastrar las sÃlabas supo quién era antes de volverse.
- Hola, Malfoy.
El otro chico sonrió muy ligeramente y sacudió la cabeza.
- Draco para los amigos, ¿no?
- Hola, Draco- cambió Nille. Draco le caÃa bien, pero no se sentÃa muy cómodo. A decir verdad, sólo se encontraba cómodo y feliz con Ginny y en el invernadero con las plantas, lo cual no querÃa decir que Ginny fuera una planta. Y menos una planta de invernadero.
- ¿Cómo estás?
- Muy bien.
- No mientas.
- Fatal- reconoció Nille.
- Siento lo de tu padre.
Nille asintió, con ganas de contestar 'Y yo lo del tuyo', pero se calló.
- ¿Cómo estás tú?
Draco se encogió de hombros.
- QuerÃa preguntarte... ¿Cómo está Ginny?
- No muy bien.- Lo observó, evaluando las posibilidades de salir ileso después de preguntar:- ¿A qué vino lo de tiro y Champi? la chica, quiero decir.
Draco rió.
- ¿Champi?! ¿Se lo puso Ginny, no?
Neville asintió, Draco rió más.
- ¿Tan mal le sentó?
- Draco... no puedo contarte nada. Si quieres saber algo, habla con ella.
- No voy a hacerlo. De hecho, querÃa proponerte un trato.
- No creo que...- Nille retrocedió imperceptiblemente. No le gustaba cómo sonaba 'trato' en boca de Draco.
- Escucha. Tú me dices cómo está Ginny. No quiero los secretos que te pueda contar, sólo... saber cómo está, si es feliz... Yo no lo soy y no creo que lo sea nunca, asà que, como mÃnimo, ella debe serlo.
- Se lo estás poniendo un poco difÃcil, ¿no crees?
- Debe olvidarme. Pero por favor, Nille. Ayúdame y te ayudaré.
Draco habÃa dicho 'por favor'. Neville asintió, aun inseguro, y los dos chicos encajaron las manos.
*-*-*-*-*
- Pensé que no acabarÃa de llorar nunca- comentó Hermione, mientras ella y Ginny iban a cenar.
- El hipo era peor.
Hermione sonrió un poco.
- Pobrecita. Espero que el plan funcione.
- ¿Estás de broma? ¿Un plan ideado por una Slytherin desesperada y Hermione con complejo de niña buena, y además puesto en práctica por una Weasley? No puede fallar- aseguró Ginny.
- Más nos vale, porque si tenemos que consolarla otra vez...
- Me alegro de que ya no estéis peleadas.
Hermione sonrió.
- Yo también. No parece tan tonta como pensaba. Sólo... necesita un poco de cariño.
Ginny iba a replicar cuando se encontraron a Ron corriendo hacia ellas todo acalorado.
- Harry ha descubierto tu agresor, Hermione.
- ¿Cómo?- se sorprendió Mione.
- No lo sé, pero McGonagall me envió a buscarte. Están en el despacho de Dumbledore. Tú puedes venir también, Gin.
Ginny corrió tras ellos hasta la gárgola de entrada. Mione dijo la contraseña, 'merengues rellenos', y los tres subieron precipitadamente las escaleras de caracol. Hermione, detrás de ella, se estaba quedando sin aliento. ¿Quién era el que la habÃa herido? No sabÃa si podrÃa soportar tenerlo delante y no lanzarse a su cuello. Si algo le hubiera pasado...
Pero no estaba preparada para lo que vio. Sentado en su mesa, estaba Dumbledore, y tras él, los profesores Sprout, McGonagall y Snape. A un lado de la habitación estaba Harry, y al otro, Neville, que miraba a Hannah, que estaba en el centro, llorando, histérica, bajo la mirada acusadora de Harry.
*-*-*-*-*
N/A: Frente todas las quejas por la falta de H/R en este fic, debo decir que yo creo que Ron y Hermi acabarán liados en el libro, asà que ya no me molesto en escribirlo aquÃ. Además, es muy tópico y a mà lo que me gusta es sorprenderos.
Y ahora, dejar claro que Moss sólo necesita que le hagan algo de caso, que Ron es un tÃo como cualquier otro y que por tanto puede hacer lo que quiera con su vida sin tenerse que preocupar si eso significa ser un poco cabrón, que Draco tiene motivos para todo y que Hannah... bueno, ahà os dejo a solas con la intriga.
1 Por último, ¡gracias por los reviews! Allá vamos: *Nimph coge aire*
Ron's lover: ¡Ya lo sé! ¡Me encanta la pareja R/H! Pero en este fic no hay, lo siento. Aunque si hago una secuela... me lo pensaré ;) Muchas gracias por tu review y tu tiempo!
Favila: *Nimph se queda boqueando* ¿Cómo lo hiciste? ¡Entendiste todo lo que quise decir! Y lo siento, pero Ginny no va disparando a la gente en la entrepierna porque es pacifista. ;)
Lina Saotome: ¡Muchas gracias! Me alegro de que te haya gustado. :)
Slythy: CapÃtulo servido. ¿Desea algo más? ;)
Noriko: Siento lo de R/H... pero como he dicho, me lo pensaré para la secuela, ok? Gracias por preocuparte por Nille, ¿a que es muy mono? No te preocupes, lleva demasiado tiempo sin tener padres de verdad, asà que no creo que se deprima mucho.
Minaro: Lo siento. Moss es estupenda, no veo porqué la odias. Y no podÃa matar a Hermione, es parte esencial de la trama. Y creo que aunque pudiera no lo habrÃa hecho.
Selene: *Nimph mira el nick y se pregunta si tiene algo que ver con Buscándote* Muchas gracias! Me alegro de que Draco te siga cayendo bien, estaba preocupada por cómo os lo tomarÃais. Y traté de alargar este capÃtulo, pero ya ves, no pude. ^^
chica potter (isa): Muchas gracias! :) Me alegra mucho que la gente me diga eso.
Spacey: Moss y Ronnie hacen buena pareja, ¿verdad? Y Marujita DÃaz es perfecta para Lockhart, a mi humilde parecer. ;)
LucÃa: Muchas gracias! Ya verás como Moss y Ron se complementan... sólo dame tiempo para enseñaroslo.
Hermione12: Pues sÃ, a Hermione le guta su profe, ¡y no te metas con Ron! Cualquiera se quedarÃa sola en un baile si con eso ayudas a tu mejor amigo a ligar, no? Además, no estaba sola. Aunque la verdad es que deberÃa haberla avisado. ^^ Gracias!
Princess Leia Skywalker: Repetimos: ¡R/H forever! Pero no en mi fic. :) Y hay que decir que el profesor Graham está muy, pero que muy bueno y además es una monada, asà que estoy con Hermione: puede enamorarse de quién le dé la gana. Gracias por todo!
cali-chan: gracias por tu ayuda y comentarios, me ayuda mucho saber qué te ha gustado en especial. ¡Destructores de la Champi al poder! (sólo esperad que YO termine con ella ;) )
Esmeralda: No sabes cómo me animó tu review! Gracias por leerlo y por aprobar mi 'no H/R'. Espero que este capÃtulo te guste!
Tsuku Miaki: Wohoo! Bienvenida al club de fans de Draco Malfoy! ;)
LaLi: ¡Gracias por el review! Aunque ¿no me dijiste que no lo habÃas leÃdo? ;) Eso son trampas.
Jade: Gracias por tu apoyo siempre en el msn y por perseguirme para que escriba. Por ahora puede que pase algo, pero jamás voy a reducir el voltaje G/D a un 'te quiero y siempre te querré' porque me cansarÃa de ellos. Asà que puedes esperar algo fÃsico, pero ligero, porque me gusta mantenerlos en vilo.
Júbilo: Vaya susto me di cuando vi ese mega-review que me dejaste! :) Se me subió la sonrisa hasta las orejas. Todos tus comentarios me animaron, asà que ya estás dejando un review otra vez. ;) ¡Vivan Draco, los malos que no lo son tanto, Ginny y Éowyn, el cuero, la tensión sexual y las frases cortantes! Me gustó tu consejo porque era lo que yo pensaba hacer. Desde luego, van a liarse, pero nunca acabarán mirándose con ojos de cordero degollado, no te preocupes. Pero va a pasar algo como unos cuantos besos para... aumentar el voltaje un poquito más... Mwahahahaha! Muchas gracias!
Sólo me falta decir que ni siquiera empecé el capÃtulo siete. Con toda probabilidad, sacaré antes el último de 'Buscándote en la oscuridad', aunque quizás tenga una inspiración divina para el 7 y os enteréis de qué pasa con Hannah...
Besos y órdenes de dejar reviews suculentas:
Nimphie
