¿Slytherin o Gryffindor? Por: MissIntelligence Capitulo 8: La Marca.

"No," dijo Draco liberándose de las manos de Hermione.

"¿No?" preguntó Hermione un poco desconcertada al cambio de actitud y tono.

"No voy a ningún lado, esa enfermera haría muchas preguntas que no estoy dispuesto a contestar, ni siquiera sé por que estoy confiando en ti," explicó poniéndose de pie y devolviéndose al castillo sin ninguna palabra.

"Espera... no puedes." Hermione se quedo sin palabras, ella no era nadie para juzgar a Malfoy, más ahora que sabía exactamente lo que sucedía con el y lo terrible que su vida debía ser. Ese era el momento adecuado para agradecer la vida que ella tenía.

"Escucha Granger," dijo Malfoy volviéndose para mirar a Hermione directamente a los ojos, "Olvida todo lo que dije, todo, bórralo de tu sistema nervioso, de ese enorme cerebro que tienes, ol-vi-da-lo"

Hermione no estaba dispuesta a olvidarlo, pero no tenía intenciones de meterse en el tema, además de ser peligroso, Malfoy no estaba dentro de sus primeras prioridades, es más no tenía idea de lo que estaba haciendo en medio de la noche fuera de su tibia cama, y lo peor no sabía porque había dado parte de su sangre en un intento de ayudarlo. No tenía sentido.

Malfoy desapareció en la oscuridad de la noche dejando a Hermione sola y llena de preguntas sin contestar y que los mas probable nunca serás contestadas.

***

A la mañana siguiente, Hermione se sentía muy mal. Su cuerpo ardía en dolor, de los pies a la cabeza, por dentro y por fuera. No podía moverse, y apenas podía sentir de tanto dolor. Lo más razonable era ir a la enfermería, pero ¿cómo diablos llegaba hasta ahí con tal dolor? No, lo único que quedaba era esperar, esperar a morir o esperar a una solución por arte de magia. Lo último que Hermione vio ge como el sol salía iluminando el día, luego la visión se perdió completamente dejando a Hermione en un mar de nubes sin sentido alguno.

***

"¿Ha tenido algún avance?"

"No, no desde que llegó, no se mueve, ni abre los ojos, es muy preocupante." Hermione escuchaba murmuros por toda la habitación, y su dolor de cabeza los amplificaba tres veces más, El dolor ya no era tan grande pero aún residía en algunas partes de su cuerpo. En cuanto hizo el intento de moverse su cuerpo respondió mandando millones y millones de disparos de dolor por su columna vertical y sus extremidades, privándola de todo movimiento. "Arghh..." fue el único sonido que Hermione logró hacer con sus cuerdas vocales.

"OH ¿Señorita Granger, está bien?" preguntó una muy borrosa Madame Pomfrey.

Hermione quería gritar 'No por supuesto que no estoy bien, ¡Acaso no ve!' pero su cuerpo no respondía a ninguno de sus comandos. Pero logró negar con la cabeza.

"No se preocupe, y por favor, no intente pararse o moverse, su situación podría empeorar." Dijo la enfermera "La voy a examinar"

Madame Pomfrey entró en acción, examinado cuello, estomago, haciendo extraños masajes, y tomando pulso.

"¿Hizo algo que la dejó en este esta- ¡OH Dios mío!" exclamó tragando un poco de aire de la impresión, "N-no puede ser,"

Madame Pomfrey sostenía el brazo de Hermione en alto para examinarlo más cuidadosamente y asegurarse de que sus ojos no la estaban engañando. Tan alto y tan fuerte que ya le estaba haciendo daño.

"Espere aquí," dijo saliendo de la enfermería y dejando a Hermione con las ganas de gritar 'Ja como si pudiera ir a algún lado.' De todos modos, ¿Que era tan impresionante que dejó sin aire a la enfermera más estricta que Hermione había visto en su vida?

Madame Pomfrey volvió media hora después con el profesor Dumbledore pisándole los talones.

"Profesor mire, no he visto esto desde... Nunca he visto algo así," exclamó una vez más Madame nuevamente levantando el brazo de Hermione.

"Por desgracia, yo sí lo he visto antes Poppy," dijo examinando el mismo el brazo de Hermione, "Y no es bueno... pero la pregunta clave es ¿Cómo?, según tengo entendido la Señorita Granger es de sangre Muggle, es totalmente imposible, pero creo que esto demuestra lo contrario."

"Le tomaré una muestra y lo comprobaremos," dijo dejando el brazo de Hermione tranquilo, "Pero profesor, ¿Qué es lo que tiene?" Hermione no pudo escuchar más ya que las voces estaban ya muy lejos. Lo único que Hermione sabía era la palabra Dormir.

***

Una Semana completa Hermione permaneció en la enfermería, con visitas regulares de Ron, Harry y Ginny. La mayoría de lo que había escuchado se le había olvidado y solo le importaba ponerse al día con los trabajos y tareas que se había perdido durante la semana más aburrida de su vida. "Bueno y... ¿Y sabes lo que pasó? Preguntó Ron, quién nuevamente actuaba normalmente y sin indicio de algún sentimiento por Hermione, tal como habían acordado.

"No, no me han dicho nada, pero ya pasó," dijo muy aliviada que el sufrimiento y el dolor ya estaban atrás y que ahora se sentía mejor que nunca e incluso más fuerte.

Cuando el glorioso día de volver a clases llego, Hermione era la mujer más feliz de toda la tierra. Volver a su cama fue un alivio, ya que las camas de la enfermería eran muy incomodas. Volver a tomar una ducha y volver a ocupar su tan preciado uniforme.

"¡Buenos Días!" saludó Hermione de muy buen humor cuando ya estaba en el salón común, "¿Qué se cuenta?"

"Nada, todo normal por alguna vez," sonrió Harry, "Tenemos transfiguración."

"Uff! Macgonagall no anda de buen humor, ayer me la crucé y me gritó hasta que se cansó," explicó Ron, levantando las cejas y moviendo la cabeza en desaprobación.

"Bueno entonces es mejor no llegar tarde para tener una clase tranquila," dijo Hermione ordenándoles de inmediato que se dirigieran a su primera clase, que gracias a Merlín era con los de Ravenclaw.

***

Hermione no podía ocultar la alegría que sentía al estar de vuelta en su escritorio con sus libros y sus cosas, era completamente incontenible.

"Muy bien, quiero que abran sus libros en la página ciento ochenta y tres, y que copien la formula de transformación numero ciento veinte y cuatro y quiero que a tengan descifrada para la próxima clase," instrucción una profesora Macgonagall muy apurada, "Señorita Granger, me haría el favor de seguirme,"

"Pero mi-"

"Sin peros."

Hermione siguió los pasos de su profesora silenciosamente, preguntándose la razón de todo el lío.

Subieron escaleras, bajaron algunas y llegaron a una estatua de piedra, una gárgola. La profesora MacGonagall murmuró la contraseña y la gárgola se movió para dar paso a una puerta. Hermione nunca había estado en ese lugar, las escaleras que estaban escalando subían solas al más mínimo toque. Ahora las cosas parecían tomar forma, cuando las escaleras terminaron en una oficina llena de los sonidos más insólitos y artefactos extraños que ni en tus propios sueños los encontrarías.

"Tome asiento," Dijo MacGonagall, señalando o de los sillones que estaba a un lado de un enorme escritorio. Hermione obedeció.

MacGonagall desapareció por una puerta situada al final de la habitación. Hermione aprovechó el momento para hecha un vistazo a la oficina mas de cerca. Más de cien libros estaban apilados en una equina del lugar y una jaula albergaba un hermoso Fénix. Rojo con plumas doradas. También notó una espada con empuñadura de oro y diamantes. Y en una repisa estaba el Sombrero Seleccionador. Hermione se preguntó que pasaría si se lo pusiera de nuevo. Decidió tomar el reto, lo posó el su cabeza y esperó. No sucedía nada, pero luego de unos momentos una vocecita habló.

"¡Qué tenemos aquí!" dijo el sombrero ensordeciendo a Hermione, " Si... si te recuerdo, impresionante mente, muy compleja, pero que tenemos aquí... me mezcla más extraña, yo digo ¡SLYTHERIN!"

Hermione se quitó el sombrero y lo puso en su lugar al ver que el profesor Dumbledore ya estaba sentado en la silla en frente de ella.

"¿Qué dijo?" dijo con una sonrisa jugando en sus labios.

Hermione pensó seriamente antes de responder en un murmuro "Slytherin... pero no entiendo"

"Yo tampoco sé que significa, y creo que la única que tiene la respuesta es usted," dijo Dumbledore.

"¿Yo? Pero no sé que estoy haciendo aquí, ¿Cómo debería saber?" preguntó Hermione mas confundida que nunca, primero el Sobrero Seleccionador la elige en Slytherin y ahora el profesor Dumbledore dice que ella sabe la razón de ello.

"Señorita Granger, que usted halla pasado la última semana en la enfermería, significa que algo sucede ¿No cree?" no era una pregunta, era un hecho "Levante la manga de su brazo derecho,"

Hermione lo miró desconcertada, pero sin embargo obedeció. Ahí delante de sus propios ojos en su propia piel se levantaba una serpiente, justo en el lugar de la cicatriz de la cortadura que había usado con Malfoy.

Todavía incrédula a lo que sus propios ojos estaban viendo, miró al profesor delante de ella buscando respuestas.

"Madame Pomfrey tome una muestra de su sangre, y... los resultados fueron impresionantes," dijo limpiando los cristales de sus anteojos en sus túnicas "¿Qué tipo de sangre tiene usted?"

"Muggle,"

"Bueno, creo que hubo un pequeño cambio, usted ya no tiene sangre Muggle, de hecho tiene una mezcla bastante interesante, incomparable a cualquier otra que yo conozca, más extraña que de el mismo Harry Potter," explicó Dumbledore.

"No me explico como sucedió... pero creo que usted sabe," miró Dumbledore seriamente a Hermione. Ella repasó los sucesos de la noche con Malfoy. Le explicó la verdad de su existencia, solo una sangre pura podía ser parte del experimento, luego ella traspasó parte de su sangre a una de las heridas ensangrentadas de Malfo- ¡Sí! Eso era parte de la sangre de Malfoy debió haberse traspasado a su cuerpo.

"No puedo decir, es algo muy serio," dijo Hermione recordando lo que Malfoy realmente era.

"Hermione, yo solo he visto ese tipo de marca en una sola persona," dijo más íntimamente, "Tom Riddle,"

A/N: SIII!!! EL COMPLOT SE ENGRUEZA Y TODO SE PONE LOCOO! Espero que les guste la historia hasta ale momento, DEJEN REVIEWS!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! :)!!