Aquí va el capítulo seis, por cierto los personajes no son míos, no hace falta que diga de quien son porque todo el mundo lo sabe. Bueno, por si acaso la señora Rowling y el señor Bross.

6. DE 24 A 11

Faltaban cuatro días para que empezara el curso en Hogwarts, el plan había empezado, harían creer al resto del profesorado que Gabrielle se iba, y en cierto modo era correcto. Snape la llevaría a Londres, harían una pequeña ruta de despiste por allí, luego le daría la poción rejuvenecedora, que haría que aparentase 11 años y aparecerían en el callejón Diagon, donde comprarían el material escolar. En resumen que los únicos que lo sabrían serian Snape y Dumbledore, este último introduciría el ficticio expediente de Gabrielle.

Los primeros pasos del plan y los más fáciles ya estaban hechos. Llegaron a Londres sin ningún contratiempo. Empezaron a pasear por una calle muggle, Snape iba con su cara seria. Gabrielle se fijo que muchas mujeres se quedaban mirando a Snape, ella le miró de arriba a bajo, para ver si se había dejado algo mágico en su "disfraz" de muggle, y lo vio. Snape se veía realmente atractivo con esa ropa muggle Llevaba unos vaqueros negros más bien apretados y una camisa también negra de tacto suave de manga larga que le resaltaban sus bien formados músculos. Gabrielle se sonrojó y desvió la mirada, por muy atractivo que fuese era insoportable y frío.

-¿Gabrielle?- preguntó una voz delante de ella. Se la quedó mirando y la reconoció enseguida.

-¡Bert!- exclamó ella, se acercó a él y le abrazó- Cuanto tiempo.

-Eso tu que desapareciste...

-Si... es que...- Gabrielle estaba improvisando- un amigo me invitó a pasar unos días en su casa y... no os pude avisar- le había salido bastante bien.

-¿Un amigo? – Bert miró a Snape con desagrado- ¿él?- Gabrielle se giró hacia Snape que estaba unos pasos  atrás de ella con cara de impaciente.

-Em...Si- miró otra vez a Snape y vio como con su cara decía claramente "VAMONOS YA". Bueno me tengo que ir, ya os escribiré ¿De acuerdo?- Bert asintió y se despidió de la chica.

-Que ¿Su novio?- le preguntó con desprecia Snape.

-No es de su incumbencia... pero no, solo es un amigo.

-Si, claro y por eso estaba celoso, ¿no?- le dijo Severus que se había fijado en la mirada de odio que le había enviado el supuesto amigo de Gabrielle.

-¿Celoso? Por favor, ¿Quién podría sentir celos de usted?- le dijo Gabrielle con una sonrisa. Snape ni se inmutó.

-Tienes razón, ¿Quién podría sentir celos POR usted?- le sonrió irónicamente y continuo andando. Gabrielle se enfureció aún más y estuvo a punto de gritarle, pero sus ojos se quedaron mirando su trasero. Gabrielle desvió la mirada y se sonrojó, se podía saber ¿Que estaba haciendo?- se dijo a si misma.

-Esto es porque las túnicas lo ocultan todo y al verlo así, bueno soy una mujer es normal que me fije ¿no?- murmuró para si dudando y caminó rápido hasta alcanzar a Snape.

 Snape y Gabrielle llegaron a un café muggle, como era de esperar Snape con mala cara no le gustaban las cosas de muggles y la ropa muggle le parecía la más incomoda del mundo. Snape pidió un café y Gabrielle un zumo de melocotón. En todo el rato no se dijeron nada. Gabrielle pagó y fueron juntos al baño, fueron al de mujeres, a Snape parecía no importarle que las muggles le miraran con mala cara, aunque también miraban así a Gabrielle. Esas mujeres pensaban en lo que iría a hacer esa pareja en el baño de mujeres.  Entraron en un pequeño baño y cerraron la puerta.

-Venga, tómese esto- Snape le dio una botellita- no se preocupe, cuando estemos en el callejón Diagon le daré el antídoto que solo lo podrá usar en caso de absoluta necesidad- dijo seriamente. Gabrielle cogió la botella y se bebió su contenido de un trago, rápidamente su cuerpo fue encogiéndose, las caderas se le estrecharon, los pechos disminuyeron considerablemente, en resumen, todos los símbolos de mujer que consiguió en la adolescencia desaparecieron, hasta aparentar una chiquilla de 11 años. Evidentemente la ropa le iba extremadamente grande.

-Vaya, así que yo era así a los 11 años- dijo con una sonrisa y una fina voz de niña.

-Si, encantadora- dijo irónicamente Snape.-Tome.

-Muy gracioso- Gabrielle cogió la ropa que le tendía, le vendría un poco grande, porque aunque aparentaba ser una niña de 11 años, era un poco más pequeña que la media.- le importaría girarse- Snape bufó y con serias dificultades se giró- creo que no nos tendríamos que hablar de usted, ahora aparento 11 años y si usted representa a mi tutor, no puede dirigirse a mi de esa forma- dijo mientras se cambiaba. Cuando acabo de vestirse se miro- ya puede girarse, por cierto podría haber escogido una ropa más...

-Lo dicho encantadora- dijo con una sonrisa irónica. Gabrielle llevaba una túnica de tirantes color violeta con unas sandalias del mismo color. Snape se puso una túnica, sorprendentemente negra encima de la ropa muggle- Vamonos. Súbete aquí- dijo señalando la tapa del retrete, ella obedeció, Snape se acercó a ella, con la varita en la mano- ahora agarrase... agarrate- Gabrielle paso los brazos por el cuello de Snape y él con la mano libre la cogió por la cintura- ¿Preparada?- esta asintió. Snape murmuro unas palabras y cogió a Gabrielle más fuertemente, en unos segundos aparecieron en el caldero Chorreante.

-Buenos días, profesor Snape, les estábamos esperando- dijo Tom, el propietario- ¿esta es su ahijada?- Snape asintió mientras dejaba a Gabrielle en el suelo- Hola bonita- Gabrielle le sonrió forzadamente- sus equipajes están en sus habitaciones.

-Gracias- dio fríamente Snape.

-Les serviremos la comida en 10 minutos, si hacen el favor de sentarse- y les indicó una mesa, donde se sentaron.

-Recuerda que te llamas Gabrielle Cooper y que tienes 11 años, o sea que compórtate como tal.

-Si y tu recuerda que eres mi tutor, así que también compórtate como tal, tío Severus .-le respondió Gabrielle con una sonrisa. En ese momento les trajeron la comida y las llaves de sus habitaciones, cada uno cogió la suya y se la guardó. Empezaron a comer, al cabo de un rato Snape se fijo que Gabrielle estaba apartando comida.

-Se puede saber ¿Qué haces?- preguntó seriamente.

-Comportándome como una niña de 11 años- le sonrió- no me gustan las verduras.

-Haz el favor de comértelo todo, Gabrielle.

-No quiero, no me gustan las verduras, así que como niña de 11 años que soy no me las comeré...

-Y como padrino tuyo que soy te obligare a comértelas aunque sea poniéndotelas yo mismo en la boca.- le respondió Snape empezando a enfurecerse.

-No serás capaz.

-Ponme a prueba- Gabrielle siguió mirándole a los ojos. Snape cogió el tenedor de Gabrielle y pincho un par de verduras- ¡Abre la boca!- Snape estaba realmente enfurecido.

Alguien llegó por la chimenea. Unos cuantos pelirrojos, un chico con el pelo negro y una chica.

-Harry, Hermoine, mirad es Snape- sus amigos se giraron hacia donde él indicaba.

-¿Conoces la niña que va con él, Ron?-este negó con la cabeza. Se fijaron en la escena.

-¡HE DICHO QUE ABRAS LA BOCA!

-¡NO ME GUSTA LA VERDURA!

-¡O ABRES LA BOCA O TE LA ABRO YO!- La niñita miro a Snape y vio que no tenia ninguna otra salida y la abrió, Snape le puso la verdura en la boca y la niña mastico y tragó- y ahora comete la verdura- le dio su tenedor. La niña se lo comió todo muy deprisa y cuando acabó se levantó y se fue corriendo hacia su habitación.

-Pobre niña, pero ¿qué hará Snape con una niña?¿Creéis que será su hija?

-Bueno, Ron, no se parecen mucho...- los tres chicos se fijaron como la madre de Ron se dirigía hacia la mesa de Snape. Lo único que oyeron fue a Snape.

-Es MI ahijada, y soy el responsable de que se coma la verdura.- Snape se levantó y se dirigió a su habitación, no sin antes dirigirle una mirada de odio a Harry y compañía. Bueno, ahora en poco tiempo todo el mundo sabría que él tenia una ahijada.

-Pobre niña...

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La primera intención de Snape fue dirigirse a su habitación, pero cuando paso por la de Gabrielle, suspiró y llamó.

-¿Quién es?- dijo Gabrielle con la voz entrecortada.

-Soy yo, abre.- dijo con su típica voz dura, pero con un intento, fracasado de suavizarla.

-No quiero.- dijo esta vez enfadada.

-Haz el favor de abrir, no te estas comportando como una niña de 11 años, te estas comportando como una de 5.

-Déjame en paz- pero Snape con un hechizo abrió la puerta. Gabrielle estaba en su cama- es que ya no tengo ni intimidad...

-¿Has...llorado?- le preguntó Snape sorprendido.

-Si, algún problema, o es que mi padrino también me lo impedirá...

-Yo solo me he comportado como tu padrino.

-Si como un padrino malo, despiadado y sin sentimientos.

-Claro, porque tu te has comportado como una niña malcriada, consentida e insolente...- Gabrielle se volvió a tirar en la cama.

-No quiero ser tu ahijada y no quiero verte nunca más- aunque Snape no quiso aceptarlo esto le dolió.

-De acuerdo, pero te propondré un trato- dijo sentándose en la cama, Gabrielle lo miró con los ojos rojos- olvidamos este incidente si tu no te vuelves a comportar como una malcriada, consentida e insolente y yo no me comporto como un tutor malo y despiadado.

-Y sin sentimientos- puntualizó Gabrielle.

-De acuerdo y sin sentimientos- aceptó a regañadientes Snape.

-Acepto- y le tendió la mano a Snape, este estrecho la pequeña mano de Gabrielle y hizo una mueca que precia una sonrisa.

-Te vendré a buscar dentro de media hora para ir a comprar los útiles escolares- Gabrielle asintió y Severus se levantó- si necesitas algo ya sabes donde encontrarme.- y se fue a su habitación.

            N/A: UFFF dos peleas en un capítulo, por lo que veo no se llevan muy bien, por un trozo de verdura la que ha montado Sev.

            Bueno, espero que os haya gustado y ya sabéis REVIEWS.

            Avance del proximo capítulo: Compran la varita de Gabrielle, es muy corto, puede que ponga el siete y el ocho juntos, NO SE.