Aquí va el ocho, normalito, ni mucha emoción ni nada, solo van de compras.

8.CALLEJÓN DIAGON (día 2:de compras)

La mañana amaneció un poco más fría que de costumbre, se levantaron y se fueron a desayunar. Luego se dispusieron a recorrer las tiendas en busca del material.

-Primero, iremos a buscar las túnicas de Hogwarts, para que si te tienen que hacer arreglos- la miró de arriba a bajo- que te los tendrán que hacer, podamos recogerlas por la tarde.

-¿Qué quieres decir con que me tendrán que hacer arreglos?- dijo ofendida.

-Solo hay que mirarte, para tener 11 años eres muy poca cosa...

-No hace falta ofender...- fueron a la tienda y hicieron pasar a Gabrielle a un cuarto apartado haciendo esperar a Snape en la entrada de la tienda.

-Haber señorita...ya veo- Gabrielle aceptó que la túnica le venia un poco grande.- bueno tendremos que hacer algunos arreglos- y empezó a preparar los arreglos, cogiendo un poco de aquí y un poco de allí.- le tendremos que decir a tu padre que tendréis que volver más tarde.

-No es mi padre, es mi padrino.

-Perdona, pensaba que era tu padre.

-Por Dios, no.

-¿Dices?

-¿Eh? Nada- en la cara de Gabrielle apareció una de sus sonrisas angelicales.

-Bueno, esto ya esta. Vamos.- y volvieron donde les esperaba Snape.

-Tendrán que volver más tarde, tenemos que hacer algunos arreglos- Snape sonrió disimuladamente, pero no disimulo lo suficiente para que Gabrielle no se diera cuenta. Gabrielle le dedicó una mirada de enfado y cuando pasó por su lado le piso el pie, pero como era tan poca cosa apenas notó la presión.

-Bueno, mientras esperamos que te arreglen las túnicas iremos a comprar lo de pociones.- le informó Snape. Entraron en la tienda Severus paso su mirada por los calderos y divisó el que Gabrielle necesitaba para el primer año, luego rápidamente y como el experto en pociones que era, en 10 minutos ya había encontrado todos los ingredientes.

-Buenos días profesor Snape, ya hemos recibido los ingredientes que nos pidió- se fue a la rebotica y volvió con un gran paquete.

-Gracias, también necesitaría estos ingrediente- y le acercó un pergamino. El dependiente lo leyó.

-De acuerdo, lo tendremos dentro de un par de días- Snape asintió.

-¿Cuanto es?

-3 galeones y siete Knuts- Snape pagó. Gabrielle salió de la tienda con el gran caldero, donde dentro habían puesto los potecitos de pociones, en un paquete. Gabrielle cada dos pasos tropezaba porque el caldero era demasiado pesado.

-Vamos a buscar los libros- fueron a la tienda y más o menos a la hora de comer salieron con el caldero repleto de libros, y algunos más que llevaba Snape en las manos que se había comprado para su uso personal.

En esos momentos el caldero debía pesar lo mismo que Gabrielle, porque cada par de pasos tenia que dejar el caldero en el suelo.

-Tío Severus- Snape miro sospechosamente su sonrisa angelical- es que el caldero con los libros pesa demasiado para una niña de mi edad...

-¿Qué quieres decir?

-Nada da igual- dijo enfadada,  Gabrielle cogió el caldero como pudo y empezó a andar, unos segundos después estaba intentado mantener el equilibrio.

-De acuerdo- cogió el caldero con una mano y a ella con la otra para impedir que cayera al suelo.

-Gracias. Mira ese es Harry- Snape miro donde señalaba la chica y gruñó. Por su parte Harry se sorprendió que la niña todavía le hablase después del numerito de la verdura. Y se sorprendió más con el gesto amable de llevarle el caldero a la niña.

Al poco rato se dirigieron a comer, comieron en una especie cafetería.

-Recuerda que la poción te la tienes que tomar cada semana, no quiero que nadie la vea y empiece a sospechar o sea que vendrás a mi despacho a tomártela. ¿De acuerdo?

-Mira que a veces eres pesado.

-¿De acuerdo?

-Siii- Gabrielle bufo y Snape la miro extrañado.

-No se si soy yo, o es que cada vez te comportas más como una niña de 11 años- Gabrielle se quedo pensando un momento.

-Ahora que lo dices, puede que si. No será un efecto secundario de tu magnifica poción, ¿no?

-No lo se, pero como continué influyendo sobre ti, acabaremos el curso que no te soportarás ni tu misma- Gabrielle le hizo una mueca- creo que será mejor que antes de volver a beber la poción la semana que viene estés unos minutos en tu edad normal.

-Vale- cuando acabaron de comer el tiempo había refrescado bastante. Al poco rato Gabrielle comenzó a toser y a estornudar. Snape la miró, llevaba una túnica de manga larga pero muy fina y con el cuello totalmente destapado.

-No te vas a resfriar ¿no?- le preguntó Severus a Gabrielle.

-No creo...AAACHIS...bueno puede que si.

-¿Ahora tendré que controlarte lo que te pones de ropa para salir?- dijo enfadado Snape.

-No hace falta, se cuidarme solita...- le respondió burlonamente Gabrielle.

-Si, ya lo veo. La gran mujer que no tiene el conocimiento de ponerse ropa de abrigo cuando hace frío ¿no?

-Déjame en paz, quieres?- le dijo Gabrielle que ya estaba harta.- Siempre críticas todo lo que hago...

-Será porque te lo mereces ¿no?

-No. Y encima siempre nos estamos peleando...- a esto Severus tuvo que asentir, respiró hondo e intento tranquilizarse, al cabo de un minuto a los dos les había pasado el enfado.

 -Vamos toma- Severus se quitó su bufanda y se la enrolló a Gabrielle al cuello, evidentemente dio para machas vueltas- como vuelva contigo resfriada, Dumbledore me mata.

Más tarde fueron a buscar las túnicas, donde Gabrielle ya tenia una considerable nariz roja, y suerte de la bufanda porque si no hubiera sido peor. Cuando llegaron a sus habitación, Gabrielle se metió, por orden de Severus, en la cama sin cenar, y él le dio una poción para el resfriado. Siempre llevaba algunas pociones elementales cuando estaba fuera de Hogwarts.

Snape se quedó hasta que Gabrielle estuvo dormida, luego se fue a cenar.

-Profesor Snape, ¿Hoy su ahijada no cenará?- Harry que lo veía todo desde un rincón, pues había decidido pasar lo que le quedaba de vacaciones en el Callejón Diagon, pensó que seguramente la tendría encerrada en la habitación, castigada sin cenar.

-No, se ha resfriado y la he mandado a la cama.- todas las suposiciones de lo que le hacia el malvado profesor de pociones a la dulce niña se fueron al traste.

N/A: Dejad reviews, espero que os guste, el próximo...no se porque ahora con la universidad, trabajos, etc... no tengo mucho tiempo pero bueno haré lo que pueda.