Desclaimer: ninguno de los personajes me pertenecen (qué más quisiera yo.
que Ronnie fuese mío) excepto Lorie e Iris, esas dos sí que son mías, mías
y sólo mías ^^
Ah! Y sí, le eh cambiado el nombre al fic, porque el otro no me gustaba demasiado que digamos. . .
**************************
:: The Runaway ::
Al levantarse, le pareció que había demasiado silencio. Se levantó lentamente, sin despertar a Hermione, que aún dormía plácidamente. Bajó, se tomó el desayuno y se encerró en su despacho para seguir con los formularios que debía entregar esa misma tarde.
- Todo por ser animagos. . . - murmuró.
Nada perturbaba aquel silencio. No había las típicas peleas matutinas en las casas vecinas, no pasaban coches por la calle, no se escuchaba esa música odiosa que solía poner a todo volumen aquel niño insolente. . . niños. . . tampoco había niños jugando en la calle. . .
- Qué demonios. . .
Ron se levantó y salió del despacho. Oyó ruido arriba.
- ¿Ron? - preguntó la voz adormilada de Hermione.
- Voy a tirar la basura - respondió el chico - Vístete. . .
Cogió la bolsa de la basura y cerró la puerta principal tras de sí. Un fuerte viento le golpeó en la cara. Hacía mucho frío. El cielo estaba nublado: iba a llover en cualquier momento. La calle estaba completamente desierta.
- ¿Ron? - dijo Hermione, asomándose a la ventana - ¿Qué pasa?
Ron la miró, extrañado, pero algo le hizo volver su atención a la calle: un ruido, una pelota. Un niño de no más de tres años, rubio, riendo, iba tras ella. El pequeño tomó la pelota en sus manitas, y una mujer que debía ser su madre, salió como un rayo de una casa, cogió al pequeño en brazos y, mirando aterrorizada en dirección a Ron, volvió a desaparecer.
- Herm. . . - murmuró Ron.
- ¿Sí?
- Las maletas. . .
Estaban preparadas desde la boda de Draco, cuando este les contó lo sucedido en la habitación.
Hermione cogió las maletas que tenían escondidas en el armario. Ron dejó la bolsa en el suelo y se dirigió al garaje. Puso el coche en marcha. Hermione llegó corriendo, soltó las maletas en el maletero y se apresuró a sentarse en el asiento del acompañante.
A los pocos segundos habían abandonado la zona residencial, sin más ruido que el leve rumor de las hojas al caer de los árboles y sus respiraciones. Estaban a punto de entrar en la autovía cuando hubo una explosión.
El estruendo fue ensordecedor. Objetos atravesaban el aire, y las llamas llegaban hasta el cielo. Ron y Hermione, a pesar de estar cubiertos en el interior del coche, se protegieron en un acto reflejo, pero querían ver. Salieron del coche y miraron hacia el lugar del suceso.
- Nuestra casa. . . - murmuró Hermione.
- No puedo creerlo. . . - dijo Ron - Voldemort. . .
- En las casas de al lado había niños. . . - añadió Herm, con la mirada perdida.
- Vámonos.
*************
- ¿Cuánto tiempo nos quedará? - preguntó Remus.
Draco, Iris, Snape, Sirius y Remus estaban en el despacho de McGonagall, directora de Hogwarts tras el fallecimiento de Albus Dumbledore años atrás.
- No mucho. . . - dijo Iris tristemente, mirando a Draco - Se nos va. . .
Draco estaba echado en un sillón, temblando, sudando, con el rostro demasiado pálido y enfermo. Todos lo miraban preocupados. Por unos momentos, Sirius y Snape olvidaron sus diferencias.
- Deberías prepararle una poción, Severus - dijo Sirius, con aire preocupado, sin dejar de mirar a Draco.
- Lo haría - contestó Snape - ¿Pero y si McGonagall no lo aprueba?
- Creo que merece la pena arriesgarse - sentenció Lupin, acercándose a Draco y tomándole la temperatura.
- Salva al chico, Severus - dijo Sirius - Simplemente hazlo. . .
Severus asintió y salió a toda prisa de la habitación.
- ¿Creéis que podrá? - preguntó Iris en un hilo de voz.
- Si se da prisa sí. . . - murmuró Remus.
Iris bajó la vista. Sirius abandonó el rincón en el que se encontraba para irse a sentar junto a la chica rubia. La abrazó tiernamente.
- No te preocupes - le dijo, intentando sonreír - Severus es demasiado orgulloso. hará lo imposible por salvar a uno de sus chicos...
Iris le sonrió, y le agradeció sus palabras apoyando su cabeza en el pecho de Sirius. Unos minutos más tardes llegó McGonagall, extremadamente alterada y nerviosa. Entró en la oficina como una exhalación.
- ¿Qué ha pasado? - preguntó Remus, intrigado.
McGonagall se volvió hacia ellos, con una expresión de confusión en el rostro.
- ¿Qué ha pasado aquí? - le preguntó ella a Remus.
- Pues. . . - comenzó él - es Draco. El espejo ha cobrado fuerza.
- Eso no puede ser. . .
- Sí puede. . . de hecho. . . lo estamos perdiendo. . .
McGonagall se desplomó en su sillón, con las manos cubriéndole el rostro, a punto de llorar.
- Minerva. . . - dijo Remus, delicadamente - ¿Qué ha pasado?
La mujer levantó la vista, su rostro cubierto de lágrimas, intentando hablar, pero era incapaz de ello. Remus se sentó a su lado e intentó consolarla. Hubo un ruido en la puerta, alguien llamaba. Sirius se levantó y abrió la puerta. Una chica, de pelo castaño y grandes ojos verdes, vestida toda de plateado entró en la oficina. Habrían reparado en su belleza de no ser por la situación. Era Lorie, la profesora de Defensa Contra las Artes Oscuras.
- Lorie. . . - dijo Remus, sorprendido. La chica sonrió levemente.
- He supuesto que McGonagall no podría hablar. . . - dijo la chica.
- ¿Sabes qué ha pasado? - preguntó Remus.
- Claro que lo sé. . . - dijo ella, apagadamente - Ron y Hermione. . . su casa ha volado por los aires. . .
- ¿¿¡¡CÓMO!!?? - preguntaron Sirius y Remus a un mismo tiempo, Remus casi saltando del sillón.
- Yo le di la noticia a Minerva - prosiguió ella - me dirigía a su casa a hacerles una visita, y de paso iba a ayudarles con los formularios de animagos y todo eso, pero. todo estaba ardiendo, destrozado. . . - a Lorie se le cortó la voz.
Remus apartó la vista. Se levantó y se dirigió a la ventana, apoyándose en el alféizar. Sirius volvió a sentarse, con las manos cubriéndole el rostro.
- Aún no he terminado - dijo Lorie.
Todos la miraron rápidamente, temerosos de que aún hubiese algo peor.
- Ni siquiera usted, directora, me dejó terminar - continuó Lorie, mirando a McGonagall - salió de la habitación antes de que pudiese decirle todo - suspiró y los miró a todos - Su coche no estaba allí. Tampoco encontraron sus cuerpos. Lo cual quiere decir que lograron escapar antes de que aquello sucediese.
Todos respiraron aliviados. Al menos habían podido escapar.
- Pero. . . - prosiguió la chica - No se sabe su paradero. Se puede decir que han desaparecido, se han volatilizado. No están. . .
- Bueno. . . - dijo Remus, dudoso - se podría decir que eso es bueno. . .
- En cierto sentido sí. . . - asintió Lorie.
- Bien. . . - comenzó Minerva, pero fue interrumpida por Severus, que entró como un rayo en la sala, poción en mano.
- ¡Profesor Snape! - dijo McGonagall - ¿Qué cree que está haciendo?
- Salvar a Draco - intervino Sirius. Severus lo miró, casi agradeciéndole la intervención, mientras que Minerva se levantó, acercándose al chico rubio.
- Tómate esto, Draco. . . - susurraba Snape - Vamos. . .
Todos se habían agolpado alrededor del sillón en el que se hallaba Draco. No quitaban ojo de encima.
Cuando al fin se tomó la poción, todos se retiraron, observando su reacción. Para sorpresa de todos, el chico cayó dormido.
- ¿Eso es bueno? - preguntó Sirius.
- Eso es perfecto, Sirius - dijo Severus - He llegado a tiempo.
- Gracias al cielo - murmuró Sirius.
- Gracias a ti - murmuró Severus a su vez. Sirius sonrió.
- Si no os importa. . . - comenzó McGonagall - me gustaría estar unos momentos a solas. . .
Todos se miraron, confusos, y salieron lentamente. Lorie fue la última en salir, y cerró la puerta.
- Estoy preocupada por ella. . . - murmuró Lorie.
- No le pasa nada - dijo Snape - sólo no entiende por qué la situación se le va de las manos. . .
- Yo estaría incluso peor - dijo Remus.
- Yo simplemente no estaría. . . - comentó Sirius. Los demás rieron. - Bueno. . . ¿qué hacemos ahora?
- Esperar. . . - sugirió Snape, encogiéndose de hombros.
No tuvieron que esperar mucho. En menos de cinco minutos Minerva abrió la puerta, indicándoles que entrasen de nuevo. Draco se había despertado. Todos se reunieron en torno a Minerva, que estaba en frente del chico.
- Es muy simple - dijo, mirándolos a todos - Sirius, ve en busca de Harry y Ginny. Remus y Severus, vosotros iréis con Draco e Iris a la mansión en busca del espejo en cuestión. Lo examinaremos aquí. Y tú, Lorie, quiero que te dediques a intentar localizar a Ron y Hermione.
Todos asintieron, y una lechuza golpeó el cristal de la ventana con su pico. Lorie se acercó a ella, le desató el sobre y lo leyó, perdiendo el equilibrio, necesitando apoyo para no desplomarse.
- ¿Qué dice la carta? - preguntó McGonagall.
- Ginny. . . - dijo Lorie, con dificultad - Ella también ha desaparecido. . .
********************************
Hola chicos!!! ¿Qué les pareció el segundo capítulo? Espero que les haya gustado!! Porque la cosa se pone interesante, no? ¿Verdad que sí? ^^
Bueno, no espero recibir muchos reviews de este capítulo. . . pero bueno, qué se le va a hacer. . . a la gente no le gusta mi imaginación jeje ^^
Se lo dedico a mis niñas, las Ronnie's Lovers!! Que una de ellas nos ha abandonado!! Malvada!!!! Veréis, es que se ha ido con su familia por ahí ^^ jeje
Ah! FELIZ AÑO!!!!
R&R please!!!!
GiNgEr WeAsLeY ( Ronnie's Lover #3
:: Remember the full moon ::
Ah! Y sí, le eh cambiado el nombre al fic, porque el otro no me gustaba demasiado que digamos. . .
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:: The Runaway ::
Al levantarse, le pareció que había demasiado silencio. Se levantó lentamente, sin despertar a Hermione, que aún dormía plácidamente. Bajó, se tomó el desayuno y se encerró en su despacho para seguir con los formularios que debía entregar esa misma tarde.
- Todo por ser animagos. . . - murmuró.
Nada perturbaba aquel silencio. No había las típicas peleas matutinas en las casas vecinas, no pasaban coches por la calle, no se escuchaba esa música odiosa que solía poner a todo volumen aquel niño insolente. . . niños. . . tampoco había niños jugando en la calle. . .
- Qué demonios. . .
Ron se levantó y salió del despacho. Oyó ruido arriba.
- ¿Ron? - preguntó la voz adormilada de Hermione.
- Voy a tirar la basura - respondió el chico - Vístete. . .
Cogió la bolsa de la basura y cerró la puerta principal tras de sí. Un fuerte viento le golpeó en la cara. Hacía mucho frío. El cielo estaba nublado: iba a llover en cualquier momento. La calle estaba completamente desierta.
- ¿Ron? - dijo Hermione, asomándose a la ventana - ¿Qué pasa?
Ron la miró, extrañado, pero algo le hizo volver su atención a la calle: un ruido, una pelota. Un niño de no más de tres años, rubio, riendo, iba tras ella. El pequeño tomó la pelota en sus manitas, y una mujer que debía ser su madre, salió como un rayo de una casa, cogió al pequeño en brazos y, mirando aterrorizada en dirección a Ron, volvió a desaparecer.
- Herm. . . - murmuró Ron.
- ¿Sí?
- Las maletas. . .
Estaban preparadas desde la boda de Draco, cuando este les contó lo sucedido en la habitación.
Hermione cogió las maletas que tenían escondidas en el armario. Ron dejó la bolsa en el suelo y se dirigió al garaje. Puso el coche en marcha. Hermione llegó corriendo, soltó las maletas en el maletero y se apresuró a sentarse en el asiento del acompañante.
A los pocos segundos habían abandonado la zona residencial, sin más ruido que el leve rumor de las hojas al caer de los árboles y sus respiraciones. Estaban a punto de entrar en la autovía cuando hubo una explosión.
El estruendo fue ensordecedor. Objetos atravesaban el aire, y las llamas llegaban hasta el cielo. Ron y Hermione, a pesar de estar cubiertos en el interior del coche, se protegieron en un acto reflejo, pero querían ver. Salieron del coche y miraron hacia el lugar del suceso.
- Nuestra casa. . . - murmuró Hermione.
- No puedo creerlo. . . - dijo Ron - Voldemort. . .
- En las casas de al lado había niños. . . - añadió Herm, con la mirada perdida.
- Vámonos.
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- ¿Cuánto tiempo nos quedará? - preguntó Remus.
Draco, Iris, Snape, Sirius y Remus estaban en el despacho de McGonagall, directora de Hogwarts tras el fallecimiento de Albus Dumbledore años atrás.
- No mucho. . . - dijo Iris tristemente, mirando a Draco - Se nos va. . .
Draco estaba echado en un sillón, temblando, sudando, con el rostro demasiado pálido y enfermo. Todos lo miraban preocupados. Por unos momentos, Sirius y Snape olvidaron sus diferencias.
- Deberías prepararle una poción, Severus - dijo Sirius, con aire preocupado, sin dejar de mirar a Draco.
- Lo haría - contestó Snape - ¿Pero y si McGonagall no lo aprueba?
- Creo que merece la pena arriesgarse - sentenció Lupin, acercándose a Draco y tomándole la temperatura.
- Salva al chico, Severus - dijo Sirius - Simplemente hazlo. . .
Severus asintió y salió a toda prisa de la habitación.
- ¿Creéis que podrá? - preguntó Iris en un hilo de voz.
- Si se da prisa sí. . . - murmuró Remus.
Iris bajó la vista. Sirius abandonó el rincón en el que se encontraba para irse a sentar junto a la chica rubia. La abrazó tiernamente.
- No te preocupes - le dijo, intentando sonreír - Severus es demasiado orgulloso. hará lo imposible por salvar a uno de sus chicos...
Iris le sonrió, y le agradeció sus palabras apoyando su cabeza en el pecho de Sirius. Unos minutos más tardes llegó McGonagall, extremadamente alterada y nerviosa. Entró en la oficina como una exhalación.
- ¿Qué ha pasado? - preguntó Remus, intrigado.
McGonagall se volvió hacia ellos, con una expresión de confusión en el rostro.
- ¿Qué ha pasado aquí? - le preguntó ella a Remus.
- Pues. . . - comenzó él - es Draco. El espejo ha cobrado fuerza.
- Eso no puede ser. . .
- Sí puede. . . de hecho. . . lo estamos perdiendo. . .
McGonagall se desplomó en su sillón, con las manos cubriéndole el rostro, a punto de llorar.
- Minerva. . . - dijo Remus, delicadamente - ¿Qué ha pasado?
La mujer levantó la vista, su rostro cubierto de lágrimas, intentando hablar, pero era incapaz de ello. Remus se sentó a su lado e intentó consolarla. Hubo un ruido en la puerta, alguien llamaba. Sirius se levantó y abrió la puerta. Una chica, de pelo castaño y grandes ojos verdes, vestida toda de plateado entró en la oficina. Habrían reparado en su belleza de no ser por la situación. Era Lorie, la profesora de Defensa Contra las Artes Oscuras.
- Lorie. . . - dijo Remus, sorprendido. La chica sonrió levemente.
- He supuesto que McGonagall no podría hablar. . . - dijo la chica.
- ¿Sabes qué ha pasado? - preguntó Remus.
- Claro que lo sé. . . - dijo ella, apagadamente - Ron y Hermione. . . su casa ha volado por los aires. . .
- ¿¿¡¡CÓMO!!?? - preguntaron Sirius y Remus a un mismo tiempo, Remus casi saltando del sillón.
- Yo le di la noticia a Minerva - prosiguió ella - me dirigía a su casa a hacerles una visita, y de paso iba a ayudarles con los formularios de animagos y todo eso, pero. todo estaba ardiendo, destrozado. . . - a Lorie se le cortó la voz.
Remus apartó la vista. Se levantó y se dirigió a la ventana, apoyándose en el alféizar. Sirius volvió a sentarse, con las manos cubriéndole el rostro.
- Aún no he terminado - dijo Lorie.
Todos la miraron rápidamente, temerosos de que aún hubiese algo peor.
- Ni siquiera usted, directora, me dejó terminar - continuó Lorie, mirando a McGonagall - salió de la habitación antes de que pudiese decirle todo - suspiró y los miró a todos - Su coche no estaba allí. Tampoco encontraron sus cuerpos. Lo cual quiere decir que lograron escapar antes de que aquello sucediese.
Todos respiraron aliviados. Al menos habían podido escapar.
- Pero. . . - prosiguió la chica - No se sabe su paradero. Se puede decir que han desaparecido, se han volatilizado. No están. . .
- Bueno. . . - dijo Remus, dudoso - se podría decir que eso es bueno. . .
- En cierto sentido sí. . . - asintió Lorie.
- Bien. . . - comenzó Minerva, pero fue interrumpida por Severus, que entró como un rayo en la sala, poción en mano.
- ¡Profesor Snape! - dijo McGonagall - ¿Qué cree que está haciendo?
- Salvar a Draco - intervino Sirius. Severus lo miró, casi agradeciéndole la intervención, mientras que Minerva se levantó, acercándose al chico rubio.
- Tómate esto, Draco. . . - susurraba Snape - Vamos. . .
Todos se habían agolpado alrededor del sillón en el que se hallaba Draco. No quitaban ojo de encima.
Cuando al fin se tomó la poción, todos se retiraron, observando su reacción. Para sorpresa de todos, el chico cayó dormido.
- ¿Eso es bueno? - preguntó Sirius.
- Eso es perfecto, Sirius - dijo Severus - He llegado a tiempo.
- Gracias al cielo - murmuró Sirius.
- Gracias a ti - murmuró Severus a su vez. Sirius sonrió.
- Si no os importa. . . - comenzó McGonagall - me gustaría estar unos momentos a solas. . .
Todos se miraron, confusos, y salieron lentamente. Lorie fue la última en salir, y cerró la puerta.
- Estoy preocupada por ella. . . - murmuró Lorie.
- No le pasa nada - dijo Snape - sólo no entiende por qué la situación se le va de las manos. . .
- Yo estaría incluso peor - dijo Remus.
- Yo simplemente no estaría. . . - comentó Sirius. Los demás rieron. - Bueno. . . ¿qué hacemos ahora?
- Esperar. . . - sugirió Snape, encogiéndose de hombros.
No tuvieron que esperar mucho. En menos de cinco minutos Minerva abrió la puerta, indicándoles que entrasen de nuevo. Draco se había despertado. Todos se reunieron en torno a Minerva, que estaba en frente del chico.
- Es muy simple - dijo, mirándolos a todos - Sirius, ve en busca de Harry y Ginny. Remus y Severus, vosotros iréis con Draco e Iris a la mansión en busca del espejo en cuestión. Lo examinaremos aquí. Y tú, Lorie, quiero que te dediques a intentar localizar a Ron y Hermione.
Todos asintieron, y una lechuza golpeó el cristal de la ventana con su pico. Lorie se acercó a ella, le desató el sobre y lo leyó, perdiendo el equilibrio, necesitando apoyo para no desplomarse.
- ¿Qué dice la carta? - preguntó McGonagall.
- Ginny. . . - dijo Lorie, con dificultad - Ella también ha desaparecido. . .
********************************
Hola chicos!!! ¿Qué les pareció el segundo capítulo? Espero que les haya gustado!! Porque la cosa se pone interesante, no? ¿Verdad que sí? ^^
Bueno, no espero recibir muchos reviews de este capítulo. . . pero bueno, qué se le va a hacer. . . a la gente no le gusta mi imaginación jeje ^^
Se lo dedico a mis niñas, las Ronnie's Lovers!! Que una de ellas nos ha abandonado!! Malvada!!!! Veréis, es que se ha ido con su familia por ahí ^^ jeje
Ah! FELIZ AÑO!!!!
R&R please!!!!
GiNgEr WeAsLeY ( Ronnie's Lover #3
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