Mi amada, mi vida.
10 años después.
Harry y Hermione disfrutaban de un lindo atardecer en su casa. Los niños habían cumplido un año y estaban muy saludables, lo más probable es que la hembra Lily hubiera contraído la neumonía de su madre comentó Sirius, pero que aun no se haría presente. A cambio de James, que parecía muy sano. Decidieron llamar a sus hijos Lily Leanne Potter y James Ronald Potter en conmemoración a su mejor amigo. Los dos tenían hermosos ojos esmeraldas y muy brillantes, el cabello marrón pero muy alborotado, sus facciones eran muy parecidas a las de los dos, es decir eran una combinación brillante.
En la casa de los Potter se vivía mucha armonía y paz, era agradable tratar con ellos y con sus preciosos bebés.
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Habían pasado diez largos años, Lily y James ingresarían a Howarts ya que tenían once años. Los dos habían crecido mucho y eran muy amables. Harry seguía practicando el Quiddich y la actuación al igual que su esposa Hermione, los dos trabajaban en muchas películas juntos y los habían nombrado la mejor pareja de todas. Al parecer Lily y James tenían los dotes para cantar y por eso habían hecho un grupo musical, eran muy exitosos desde que habían cumplido los diez y más teniendo unos padres famosos como lo eran Harry y Hermione.
El primero de Septiembre se hizo presente, Lily y James se marcharían a Howarts. Se despidieron y muy nerviosos corrieron hacia la entrada del andén nueve y tres cuartos y desaparecieron de la vista de sus padres. Harry y Hermione se marcharon a la casa, estaban muy contentos porque sus hijos habían entrado a Howarts pero a la vez tristes porque no los verían sino hasta navidad. Harry y Hermione entablaron una conversación muy cómoda sobre sus hijos.
-¿De verdad crees que ellos se emocionarían si tenemos otro hijo?
-Yo creo que sí.
-Si te comprendo, yo también quiero cuidar de unos pequeños de nuevo.
-Sí, pero no olvides cariño que nuestros bebés pronto llegarán a una etapa importante donde surgen muchas preguntas.
-Por supuesto, yo ya estoy lista para eso mi amor.
-¿Sabes algo?, Me gustaría que tuviéramos ese bebé ya... –comenzó a besarle el cuello.
-¡Ay James, no tienes remedio!
-El amor no tiene remedio...
Pasados ya tres días, Hermione se consultó con Sirius quien suponía de qué se trataba su visita. Resultó positiva algo que los llenó de alegría a los dos. Salieron a comer unos helados y a comprar ropa de bebé. Herminio parecía segura de que sería un varón, entonces Harry no tenía más remedio que acompañarla con su suposición. Decidieron enviarle una carta a sus hijos para avisarle que tendrían un hermano / ana, aunque no sería necesario porque al parecer la prensa ya los había hecho enterar del asunto. Era impresionante como los periódicos y la revista corazón de bruja se enteraban tan pronto de lo que sucedía en sus vidas. A veces eso hacía pensar a Harry que algunos de sus asistentes era algún espía o que le pagaban por informarles de lo que sucedía en sus vidas (Las de él y su esposa) o al menos tenía que ser algo por ese estilo. Realmente no importaba.
Habían recibido varias cartas diciendo que sus hijos habían hecho travesuras, Hermione se ponía muy brava pero Harry sólo se reía. Hermione llegaba hasta veces que no le hablaba por una o dos horas a Harry por darle un mal ejemplo a los niños. Cuando se alteraba Hermione podía llegar a ser muy irritante. Harry a cambio disfrutaba de las enojadas que se echaba su esposa preparando la cena. Lo más cómico era que después de preparar la cena ella siempre quedaba encantada con él y se reconciliaban de nuevo (Sí a eso se le podía llamar reconciliación), Harry amaba mucho a Hermione, siempre pensaba qué sería de él si ella no se hubiese aparecido de nuevo en su vida. Nada ni nadie podría arruinar su felicidad y menos lo iba a permitir. Siempre se preguntaba cómo llegaban esos pensamientos a su cabeza, pero aunque no sabía la respuesta, le gustaban mucho.
La navidad llegó así de pronto como todo, porque cuando se disfruta, el tiempo pasa volando. Lily y James regresaron a casa muy contentos. Lily abrazó fuertemente a su padre y luego se dirigió a su madre a quien le dio un gran beso en la mejilla y acarició su vientre, se veía tan contenta de tener un hermanito. A cambio de James quien se dio un abrazo con su padre y al llegar a su madre la besó y se quedó escuchando su vientre.
-Mami, por qué decidieron tener el bebé ahora y no antes, acaso las reglas decían que no se los podían traer antes.
-¡AY Lily!, Pareces mensa, ¿qué acaso no sabes cómo se tiene un hijo?
-Pues no, y no me importa.
-Claro, tienes una mente tan infantil como tu cara.
-¡Cállate! No me fastidies James que le voy a contar a papá y a mamá que pasó durante el colegio.
-Eres una sapa. Sólo tienes esa boca para chismear.
-¡basta niños!- reclamó Harry
-Pues dile a él.
-A ver niños, a ver, que fue lo que pasó.
-¡NADA!-gritó el pequeño James.
Se fue corriendo a su habitación.
-A ver cariño que pasó.
-Es sólo que a James le gusta alguien.
-¿Eso es todo?-preguntó Harry- Entonces hablaré con él.
Notas de la autora: Como me lo pidieron hice una pequeña continuación para que vieran como son los hijos de Harry y Hermione ^^
Lis Jade