Nota del autor.
Los capítulos van a ser largos en general. Espero que no se les haga pesado. ¡Gracias por leer!
Capítulo 1: ¡La plaga!
Perseguido por la destrucción y la muerte misma, un ser omnisciente que no descansara hasta consumir su existencia, se creía por un tiempo perdido, derrotado, a punto de aceptar la voluntad de Dios. Pero los rumores hablan de un paraíso milagroso, infinito, protegido por un misterioso ser. Le parece absurdo que las leyendas sean reales, pero de alguna manera sabe que son ciertas. Ese lugar podría ser su única salvación.
Dormía plácidamente el quien mató la rencarnación de dios. ¿Quién se atrevería a molestarlo? Aunque nadie parece saberlo, sin voluntad para pensar ni si quiera él parece consciente de lo que hacía, tampoco es que le diera importancia, su único propósito es sentir emociones positivas en otros y hará lo que sea para conseguirlo.
Humildemente, descansa sobre los muy verdes pastos de Dream Land de un planeta llamado Pop Star, lugar que ha conseguido lo que otras civilizaciones de otros mundos añoran, paz. Claro, todo esto gracias a este pequeño ser, la paz no sucede porque si lamentablemente, algo debe de poner orden y eliminar lo que la amenace. En un mundo donde todo es aleatorio y el caos es el alma del universo, no es tarea sencilla.
Nadie duerme eternamente, en algún momento se debe despertar. Abriendo sus cristalinos ojos, oscuros como el vacío y tan reflejantes como el diamante, con un profundo azul en la orilla inferior mira el imponente amanecer. De acostado pasa a sentarse y estirando sus brazos bosteza profundamente, espera unos segundos y luego se levanta alegre. De color rosa, pies más rojizos y una forma redonda, tiene la apariencia perfecta para cosechar buenas emociones. Hoy será otro gran día.
Ser considerado héroe no le es nada, necesita que la gente le ame, no que le respeten. Por suerte conoce a varios que sobresalen de la población normal de Dream Land, sus amigos, bueno todo el mundo es su amigo, pero ellos son más especiales. ¿Qué tal darles un regalo? Es una gran idea, les hará felices y eso es lo que busca.
Corre hacia su casa, gracias a su gran fuerza es bastante veloz. En su camino a su hogar todo se ve despejado, pareciera que es un mundo salvaje sin civilización. Aire puro, cielo limpio y tan irreal por lo bello que es. También lleno de irregularidades, hay algunos antiguos árboles, lagos celestes, montañas pequeñas y puntiagudas, enormes y verdes montañas con forma de anillo y suaves nubes en espiral, definitivamente está en las praderas de Dream Land. No se ve algún tronco cortado o alguna planta seca, solo un primitivo y delgado camino. Hay unas extrañas figuras brillantes en forma de estrella tiradas aleatoriamente, algunas más grandes que otras. Finalmente llega. Su casa no es sorprendente, es bastante simple. Pequeña, blanca, circular, con una diminuta ventana y una puerta, arriba sobresale la chimenea. Adentro solo hay una cama, la chimenea y un pequeño cofre donde guardar cosas. Lo abre y saca unas viejas hojas, las pocas que le quedan y procede a dibujar con algunos colores.
No es un gran artista, pero lo que importa es la intención. Sin mucha habilidad utiliza la primera hoja para dibujar a un amigo Waddle Dee, tiene una pequeña idea de cómo es su aspecto, pero al tratar de trasmitirlo a la hoja se le complica demasiado. Es un círculo café con... azul arriba y 2 ojos. Realiza lo que recordó y el dibujo quedó muy simple, ni si quiera tiene la forma de un Waddle, literal es solo un círculo café con algunos rayones arriba de azul y 2 puntitos. Al final la simpleza da ternura, así que quedó bien a su manera. Luego, busca dentro de su pequeña memoria una figura que por alguna razón los demás al verla reaccionan de manera positiva. Ese símbolo es "Te quiero". No tiene habilidades de lectura, y claro, no sabe muy bien el significado de esa figura. Procede a dibujarlo y listo. ¡Regalo para Bandana hecho! Agarra otra hoja y ahora intentara a dibujar a Dedede, luego a Marx, Magolor etc.
Con todos los papeles listos los guarda en una maltratada bolsa y procede a entregar sus regalos. Sus amigos se encuentran normalmente separados uno de los otros ya que tienen estilos de vida muy diferentes, uno es parte de la guardia del rey, otro vive en otra dimensión, y así sucesivamente. Pero hoy es un día especial, se celebra el día de destrucción de nova. ¿Por qué? Era la primera vez que salvó al planeta entero y porque no decirlo, también detuvo la conquista del universo. Anteriormente a esto ya había hecho actos heroicos, pero de ese calibre nunca se había visto. Fue algo inesperado, impresionante, y la población celebró por esto. Años después se ha hecho costumbre y es recordado como el día en que se conoció Kirby, el héroe más fuerte y Pop Star como el único planeta que había conseguido la añorada paz.
No entiende muy bien los horarios, para él todos los días son iguales e increíbles, pero ese específico olor a mucha comida y ese gran ruido que se produce por las mañanas le dicen que hoy habrá una enorme reunión.
En teoría todos sus amigos, o al menos la mayoría, vendrían al festival. Así que entregar sus regalos no debería ser un problema. Con la bolsa en mano corre a dirección al castillo de Dedede ya que cerca siente a sus amigos.
"Hoy será un gran día" se dijo optimistamente a si mismo el Waddle Dee. Aspecto igual a sus compañeros de su misma especie, pero con la diferencia de tener una bandana azul en la cabeza y su mítica lanza en la mano, es conocido como Bandana Dee, el mejor guardia del rey.
Ser guardia no es fácil, es más bien pesado, siempre hay que estar atento y preparado para la batalla, pero hoy es un día especial, el más especial de todos los días festivos por lo cual tiene asueto. Así que deja su preciada lanza con las otras armas dentro de una habitación del castillo, diseñado precisamente para guardarlas. Sale para ver el sol y se encuentra a lo lejos con muchos adornos colgados de diferentes formas y colores. "Si que son rápidos" pensó. Se dirige hacia el centro de toda esa conmoción visual.
Entre más cerca, voces y risas empezaban a escucharse. Luces rodeaban los alrededores y el olor de deliciosa comida comienza a notarse. Al llegar un gran ambiente de alegría golpea la acostumbrada tranquilidad que suele tener el lugar. Tantos seres diferentes reunidos solo para disfrutar de su compañía le llenan el corazón. Waddle Dees preparando las mesas, Chips y Bouncys saltando alrededor, Bombys explotando pequeños fuegos artificiales, Brotínes corriendo alegremente, el mismísimo Dee Llave cargando una enorme llave como siempre, Dindones tocando sus campanas, etc. Incluso el gran cocinero Kawasaki está aquí para preparar la comida, obviamente con ayuda de algunos Waddle Dees. Finalmente se encuentra con Chilly, un muñeco de nieve que cobró vida misteriosamente después de que Kirby lo armara, lleva puesto su típico collar rojo donde cuelga su cascabel de bronce y un gorro azul lleno de hielos cristalinos.
—Finalmente has llegado! —dice Chilly.
—Hay que asegurar el castillo antes de festejar —responde Bandana Dee —¿Has visto a Kirby?
Chilly niega con la cabeza.
—Que extraño, siempre es el primero en llegar... debería ir a buscarlo —dice pretendiendo preocupación.
—Vamos Bandana ¡Esta bien! Llegar un poco tarde es algo que a todos nos sucede —dice positivamente.
—Lo sé, pero si hablamos de que llegará tarde para comer, si es algo preocupante, no, más que preocupante ¡es un milagro! —dice en sentido gracioso.
Chilly responde con una risa. Los 2 van a buscar asientos disponibles y de paso saludan a algunos de sus amigos. Se sientan y esperan a que sirvan la comida. En la mesa también se encuentra Taranza, esperando tan tranquilamente como siempre y al otro lado está Adeleine pintando algo en un pequeño lienzo sobre la mesa. Mirando alrededor se puede ver a Meta Knight en el hueco más silencioso, solo mirando profundamente la fiesta de manera misteriosa. Susie, un genio para la tecnología, saca una gran máquina de forma cuadrada, de ella empieza a sonar música. Algunos, especialmente niños empezaron a bailar, pero a un Waddle Dee aleatorio le abra entrado la canción al alma, ya que saltó al centro de todo y empezó a bailar con increíble habilidad y ¡salió con unos pasos nunca antes vistos!
Kawasaki da la orden a los Waddle Dees para que finalmente se entregara la comida y Kirby aún no llega. Bandana Dee empieza a sospechar, pero no podría ser algo malo ¿o sí? Es Kirby, es el ser más bueno que conoce y alguien muy fuerte, ¿estará en peligro? ¡Ja! incluso suena gracioso pensarlo. Lo más probable es que se haya quedado dormido. Intentando pensar en otra cosa se percata de algo.
—¿Magolor no va venir? —pregunta Bandana Dee.
—No sé, hace unos días vino a Pop Star con su Astrovelero Lor, también esperaba que viniera. —dice Chilly pensativo.
—Es todo un misterio, me da curiosidad saber qué hace, su magia, porque viaja tanto y a donde, intento preguntarle, pero ya sabes cómo es ese mago, no le gusta que lo molesten. —dice intrigado.
—¿Porque tanta curiosidad sobre él? Es solo un extraterrestre, algo que no es extraño aquí en Dream Land y aparte es amigo de Kirby.
—Lo sé, pero cuando lo conocí se veía tan vulnerable, tan bueno, parecía solo otro ser que necesitaba nuestra ayuda. ¡Al final todo era una actuación! ¡Una gran mentira! Alguien con esas increíbles habilidades para mentir y manipular no debería merecer confianza. —dice aumentando su tono de voz.
—¿Y Marx? Él también engaño a Kirby y te llevas bien con él. —dice Chilly alegre.
-Marx es un caso diferente, ya lo conoces, no parece ser consciente de lo que hace. Su cabeza siempre está en otro lugar, pero Magolor, sus oscuras intenciones si eran reales.
-Hablando del Rey de Dream Land (Rey de Roma) - Chilly apunta a cierta dirección del cielo.
Bandana sigue la indicación del muñeco de nieve con su mirada y a lo lejos ve el Astrovelero, un barco flotante mayormente celeste con una notable gran vela y 6 ramos a los lados, viniendo a toda velocidad.
—Entonces si vendrá después de todo. —dice Bandana acomodándose en su asiento, relajándose.
—Bandana, viene demasiado rápido. —responde Chilly alertando al Waddle Dee.
El del pañuelo vuelve a mirar y esta vez nota a un ratón con capa roja encima del barco y muy muy atrás se puede ver a Magolor persiguiendo desesperadamente al Lor desde el suelo.
—Oh no... —dice el Waddle.
—¡Daroach! —grita Chilly.
El Astrovelero pasa por encima de ellos velozmente a dirección al castillo, dejando atrás una poderosa ráfaga de viento, levantando así todas las mesas junto a los seres menos pesados, los adornos se rompieron y salieron volando. La máquina de música cayó y se rompió, y la comida se tiró inevitablemente al suelo. El polvo se elevó tanto que se creó una niebla muy densa por algunos segundos, muchos empezaron a toser. Unos momentos después el ambiente volvió a tranquilarse, el polvo fué afectado por la gravedad nuevamente y todo quedó en silencio.
Todos se quedaron un poco extrañados, impresionados, no se esperaban esto. Kawasaki al ver la comida desperdiciada por el suelo se enfadó, dejó todo y regresó a su restaurante apretando los dientes. Finalmente Magolor aparece en la escena agotado, débil, temblando y con una débil voz dice "Mi... barco..." y cae al suelo.
—Tranquilos —dice Bandana tomando control de la situación —Los Waddle Dees investigaremos que sucede, solo esp... —De la nada, el sonido de una tremenda explosión lo interrumpe.
Todos voltean, muchos asustados, y ven el castillo del rey en llamas y a medio destruir.
Bandana al ver tan inesperada situación, sin más remedio tendrá que olvidar el día libre y ponerse a trabajar.
—Todo el mundo regrese a su casa, —dice levantando su voz - por esta imprevista situación no tenemos certeza de que el lugar es seguro.
Un pequeño Brotín se acerca al Waddle Dee.
—¿Y qué pasará con la fiesta? —dice el Brotín con unos ojos resplandecientes de tristeza.
—Lo siento, la fiesta se cancela. —dice Bandana.
Muchos bajaron la mirada y se prepararon para marcharse, pero Meta Knight en el fondo, soltó una carcajada al escuchar las palabras del Waddle. Bandana Dee se percata de su risa y reaccionó con molestia, ¿Cómo puede darle gracia una situación así? Parece que nunca entenderá las intenciones del misterioso caballero.
Llama a los demás guardias del castillo, entonces varios Waddle Dees aparecieron listos. Siguiendo a Bandana todos corrieron a proteger al rey incluido Chilly, pero él es más lento.
En el camino agarraron lo que pudieron, unos palos, rocas o lo que sea que pensaran que podría hacer daño. Las armas están en el castillo y por primera vez, Bandana tendrá que entrar a la batalla sin su preciada lanza.
Daroach, un ratón gris con unas enormes orejas, ojos amarrillos, 3 enromes garras en cada una de sus patas delanteras, con su siempre puesta capa roja y un notable sombrero del mismo color, es conocido por todo el mundo como aquel que logró robarle al mismísimo Kirby, y no fue cualquier cosa, fue capaz de quitarle ¡un pastel! al ser más tragón del mundo, algo que sería una condena a muerte para cualquiera, pero con sus grandes habilidades de ladrón lo consiguió. Ahora amigo de Kirby, o eso parece, acaba de utilizar las armas del Lor para explotar el castillo del rey.
—¿Qué ha sucedido? ¿Qué le pasó a la mitad de mi castillo? Y... ¡¿Dónde están mis guardias?! —grita endurecidamente el rey Dedede.
Grande, panzón y egocéntrico, este pingüino verde se proclamó a si mismo el rey de Dream Land. Definitivamente no va a permitir que alguien se burle de él de esa manera. Entre los escombros busca al responsable y se encuentra con el imponente Lor, encima ve a Daroach con una sonrisa descarada, agarrando con una de sus patas el sombrero y con la otra cubre su cuerpo con la capa.
—Mis saludos majestad —dice con confianza —pero me parece injusto que solo el rey merezca tantos lujos y riquezas, si no le molesta, las tomaré.
—¡Cállate maldita rata! —grita furioso Dedede.
—Coopere y no debería de haber ningún problema, supongo que no arriesgara su vida por cosas materiales, así que seré piadoso con usted. Has que tus guardias no nos molesten y váyase, calladito e ignorante.
—Tu campesino no eres nadie para darme ordenes ¡Tú eres el que debe de obedecer e irse! —dice y apunta furiosamente a Daroach.
—Si eso es lo que quieres... ¡Storo!
Entonces de la cabina del Lor sale un ratón celeste extremadamente grande y musculoso, viste un gorro rojo y un polo del mismo color, con la característica de tener un parche en su ojo izquierdo. Salta y cae al suelo enfrente del rey tambaleando el lugar. Mucho más grande que Dedede lo intimida fácilmente. Procede a abrazarlo con sus fuertes brazos para sujetarlo. El rey se agita intentando liberarse, pero todo esfuerzo es inútil.
—¡Te ordeno que me sueltes, rata! —ruge Dedede.
Otros 2 ratones aparecen, un pequeño pero extremadamente rápido ratón amarillo llamado Spinni, y por el otro lado, en un pequeño platillo volador rojo, Doc, un ratoncito celeste con un bigote verde. Así juntos los 4, forman el temido grupo llamado ¡los Squeaks!
—Jajaja ¡Esto ha sido pan comido! —dice energéticamente Spinni.
—¿Qué deberíamos hacerle jefe? —dice Doc volando alrededor del sujeto Dedede.
—¿Tal vez encerrarlo? —propone Storo.
—No, —dice secamente Daroach —ahórquenlo y cuelguen su cadáver en el centro del pueblo, para que puedan ver a su querido rey.
Los demás reaccionan sorprendidos, no se esperaban una orden así por parte de él. Dedede al escuchar intenta escaparse más desesperadamente.
—Esto... es algo nuevo de ti jefe —dice pensativo Spinni.
—Si, ¿no es algo... cruel? —pregunta preocupado Storo.
—Na! Está bromeando, ¿no es así jefe? —dice alegre Doc.
Daroach al notar las dudas de sus compañeros, baja del Astrovelero de un salto para levantarles el ánimo.
—¡Vamos equipo! ¿dudan de mí? —pregunta persuasivo.
—¡Claro que no! Nunca dudaríamos de ti jefe. —responde el ratón amarillo con su aguda voz.
—Dime Spinni, —se agacha para mirar mejor al pequeño ratón - antes de que nos conociéramos ¿Cómo te trataba el mundo?
—Yo... era un ratón de ciudad, un huérfano.
—¿Por qué eres un huérfano? —pregunta Daroach para que avanzara en su historia.
—Como cualquier roedor de cuidad, vivía en las alcantarillas, odiado por el mundo por ser un ratón. Simplemente un día confiamos de más y mi familia termino envenenada. Solo, tuve que ser rápido, ágil, escurridizo para poder sobrevivir y escapar.
—¿Y ahora? ¿Por qué ya no lo eres? —pregunta el jefe.
—Porque tú me salvaste, ¡me enseñaste que la vida podría ser más para un pequeño ratón! —dice alegrando su voz.
—¿Y tú Storo? —pregunta el jefe levantándose y volteando hacia él.
—Yo era una mascota. Toda mi vida no conocía más que una diminuta jaula. Mi dueña no era responsable, así que termine grande y gordo. Pero una noche tú me encontraste y liberaste, ¡me mostraste el exterior y las maravillas que esconde el mundo! —dice Storo melancólico.
—¿Doc? —pregunta Daroach.
-Ya sabes jefe, yo era una rata de laboratorio, desde que nací sufrí incontables experimentos, especialmente cerebrales. Mi vida no era más que dolor y confusión, ¡quería morir! Jefe, tú me rescataste, me dijiste que la vida es el mayor de los tesoros, algo que deberíamos de ¡aferrarnos ferozmente a ella y nunca soltarla! —dice el de bigote verde, volando orgullosamente su platillo.
—¿Se dan cuenta? —dice Daroach —¡El mundo nos dijo que nos rindamos! Conocemos su odio, sufrimos su lado más oscuro, nos dijo que somos una plaga, una mascota, unos estúpidos objetos de laboratorio. Pero yo sé la verdad, nosotros sabemos la verdad. ¡Por esto somos los Squeaks! Para demostrarles que somos valiosos, inteligentes y ¡orgullosos de ser ratones!
Por esto Daroach era el jefe, era el ratón que le dijo ¡No! al destino y guio a otros a hacer lo mismo.
—No, ustedes no son los Squeaks malditos. - dice enfadado Dedede - Ustedes más bien son ¡La plaga!
Al escuchar gran insulto, Storo reaccionó apretando fuertemente a Dedede y como una boa, empezó a asfixiar al pobre rey.
—¡Alto! —grita Bandana Dee llegando justo a tiempo.
Detrás del Waddle aparecen otros Dees preparados para luchar. Bandana inmediatamente con un palo en la mano, corre rápidamente hacia Storo, salta y al caer, con toda su fuerza lo golpea fuertemente en su cabeza, rompiendo el palo. El gran ratón suelta al rey a consecuencia de poderoso golpe y queda bastante aturdido. Dedede cae al suelo respirando profundamente, agarrando finalmente su tan necesitado oxígeno. Los demás Waddle Dees empezaron a lanzar rocas inútilmente contra los ratones. Daroach ríe al ver tan patético ataque.
—¡¿Cómo te atreves a traicionar al héroe de Pop Star?! —pregunta ferozmente Bandana.
—¿Qué? ¿Kirby? Jajaja —responde Daroach —No lo he traicionado pequeño Waddle Dee, aún somos amigos, esto no tiene nada que ver con nuestra amistad.
—¡Le prometiste a Kirby que no volverías a robar! —recalca el Dee.
—Te lo prometí a ti, no a él —dice astutamente el ratón.
Entonces finalmente llega Chilly y sin dudarlo escupe una enorme ráfaga de viento capaz de congelar a cualquiera que impactara hacia los ratones. Ahora si este era un ataque al que tomar enserio. Los Squeaks van a salvaguardarse inmediatamente, Daroach en particular se cubre en su capa y desaparece, escapando así de la agresiva brisa. Esto dio el tiempo suficiente para que varios Waddle Dees cargaran al rey y lo llevaran a un lugar seguro.
Chilly no tiene el aliento infinito, así que después de unos segundos se detuvo para recargarse. Bandana agarra una enorme roca de los escombros y se para a lado de su amigo. Visualmente busca a los ratones, pero no los encuentra. Sabe que es riesgoso buscarlos físicamente ya que podría caer en una trampa, así que solo espera a que ellos ataquen primero. Los otros Waddle Dees siguen su ejemplo.
Daroach aparece detrás de una de las pocas paredes que aún permanecen en pie y ve a sus compañeros también escondidos. Creyendo que no será necesario hacer un gran plan subestimando a los Dees, simplemente da señal a Spinni para que busque el dinero de Dedede. Siendo el ratón más rápido y pequeño debería ser una tarea sencilla. Acepta sin dudar la orden y responde asintiendo con la cabeza. Daroach se asoma ágilmente sin ser visto para verificar que toda la guardia está aquí. Si están todos.
—Ustedes aseguren que nadie interrumpa a Spinni, —dice susurrante el jefe a los otros 2 —yo al rato vengo, tengo que encargarme de... un pequeño asunto.
Storo y Doc asienten sin preguntar. Daroach desaparece con su capa sin dejar rastro.
Proceden con el plan. Spinni corre a buscar, olfatear, encontrar alguna pista del tesoro, al hacerlo sale del escondite y queda al alcance de la vista de los Waddle Dees. Bandana con sus increíbles reflejos es el primero en reaccionar y ataca al distraído ratón, corre hacia él con todas sus fuerzas, agarrando inercia fortaleciendo el golpe con su roca, pero para su sorpresa, en el momento justo es disparado por el láser de Doc, el Waddle lo nota e intenta instintivamente cubrirse con su lanza, pero al no tenerla falla y es golpeado, empujándolo al lado contrario. Cae al suelo y siente la electricidad inmovilizarlo dolorosamente por unos momentos. Doc vuelve a disparar al aturdido Dee, pero un su camino se interpone Chilly, creando un escudo con su helada magia, así bloqueando el disparo. Los demás Dees atacan, no son tan fuertes como Bandana, pero la cantidad realmente hace la diferencia.
—¿Estás bien? —pregunta Chilly aun cubriéndolo con el escudo.
—Si, estaré bien. —dice recobrando su compostura —No será fácil pelear sin mi lanza.
—Lo harás bien Bandana. —dice animando al Dee.
El Waddle Dee responde con un gesto de agradecimiento. Se levanta y agarra otra vez su roca. Ve a Storo y Doc atacando a los otros guardias, luego mira de nuevo a Chilly y asiente de manera "Estoy listo"
El muñeco de nieve rompe de inmediato su escudo y los 2 van a atacar. Bandana corre alrededor de Doc, esquivando los láseres del pequeño ratón. Algunos Dees se encontraban en el camino de Bandana y terminaron disparados, caían al suelo inconscientes. Doc empieza a desesperarse, tantas vueltas y en ninguna le da a al Waddle, tan ágil, tan escurridizo, daba coraje, es como si se estuviera riendo de él, era como un... ¿ratón? "Estoy perdiendo el tiempo" pensó Doc, ignora a Bandana y voltea por un momento, ve a Chilly esquivando los intentos de aplastamiento por parte de Storo, patinando tan elegante sobre el liso suelo del antes no destruido castillo. Ve una oportunidad, Chilly solo concentrado en uno, no vera su ataque, así apunta al muñeco de nieve y esta vez no fallará. Bandana al ver las nuevas intenciones del ratón, de inmediato se prepara para lanzar su roca con toda su fuerza, pero lo hace demasiado tarde.
Inesperadamente, Chilly es golpeado por el láser y siente la horrible electricidad recorrer su cuerpo, cae al suelo dejándolo vulnerable, otros Dees de inmediato corren a socorrerlo, pero quedan dentro del área de caída de Storo, el quien sin dudar salta a aplastarlos. Y efectivamente los aplasta a Chilly y a otros pobres Waddle Dees.
"¡No!" piensa Bandana y urgentemente lanza su piedra con toda su fuerza. La piedra voló como una bala directo a Doc, haciendo que la pequeña nave se estrellara contra la roca y quedara inestable. De inmediato, el Waddle salta hacia Storo y le da una enorme patada en la cabeza. El enorme ratón, al no esperar gran fuerza por parte de un Dee, cae sorprendido, liberando a los que tenía abajo de su peso. Bandana se encuentra con varios Waddle Dees inconscientes y nieve esparcida por todo el lugar.
"¡Ha destrozado a Chilly!" pensó impactado, asustado, impresionado. Justo cuando su corazón iba a llenarse de tristeza, la nieve de manera mágica se juntó de nuevo, formando otra vez a Chilly.
—¡Qué susto me has dado! —dice conmocionado Bandana.
—Vamos, no soy tan fácil de matar, de hecho, ni si quiera sé si estoy vivo realmente. —responde Chilly levantando su gorro y collar.
Antes de que Bandana le cuestionara lo que respondió, el horrible olor a humo le interrumpe. Este venía de la destrozada nave de Doc.
"Maldita sea" se dijo a si mismo el pequeño ratón, mientras intentaba salir de su destrozada y valiosa nave. Por primera vez un mucho tiempo está solo, ahora depende de su forma física, algo que no tenía muy bien, tantos experimentos en un cuerpo no lo han dejado en buen estado. Asustado intenta desesperado esconderse, pero es agarrado por la cola por Bandana. Doc en defensa de inmediato intenta morderlo, pero es demasiado lento y el Waddle lo detiene fácilmente. Chilly se para a lado de él, parece que por un momento tienen un descanso, pero aún falta Spinni y Daroach.
Storo, apenas levantándose del golpe con intenciones de seguir peleando, son interrumpidas al ver a su compañero Doc detenido, definitivamente no puede arriesgarse a atacar y que ellos dañen a Doc a consecuencia.
—¡Suéltalo! —grita Storo.
—Si tanto te preocupa tu amigo, no deberían a arriesgarse a robar, especialmente en un mundo donde el mal siempre pierde. —responde Chilly.
—Esa fuerza —dice Storo nervioso —no la debería de tener un Waddle Dee.
El del pañuelo suelta al ratón y deja que los otros guardias se encarguen de arrestar a Doc.
—¿Qué insinúas? —pregunta Bandana.
—Es como... si fueras él.
"No me estará comparando con... no puede ser. Es imposible que él lo conozca. Deidad no puede saber." pensó sombríamente el Waddle Dee. Él, que siempre ha luchado y dado su vida por la justicia, ser comparado con un monstruo le asusta. Chilly nota los nervios de Bandana, ¿acaso hay algo que no sabe?
—¿De quién estás hablando, Storo? —pregunta el muñeco de nieve alzando la voz.
—Jajaja —ríe Doc —¿enserio no sabes? Y yo que creía que eras uno de los mejores amigos de Bandana, o tal vez, Bandana no es tan honesto como tú crees. —dice con una pequeña sonrisa.
—¡Suficiente! —dice endurecidamente Bandana —Esto es solo asunto Waddle Dee, él no necesita saber nada.
—Admítelo Bandana, no le dices no porque no lo necesita, si no, porque sabes que la libertad de ese demonio es la prueba de que eres un fracaso como héroe, un cobarde.
"Maldita rata" pensó Bandana, pero ese coraje solo confirma que lo que dice Doc en cierta parte, es cierto.
Chilly al escuchar tan ridícula afirmación, se acerca a Doc y lo sujeta del pecho, acercando su mirada intimidante hacia él.
—¡¿Cómo puedes decir eso de Bandana?! —pregunta furioso el muñeco de nieve —Él es el ser más honesto y de más buen corazón que conozco. Sacrificaría todo por salvar a este mundo y a su gente, tu no lo conoces.
Doc ante tal mirada llena de hielo y furia, no pudo hacer nada más que asentir.
—Eso es demasiado Chilly, no soy tan especial —dice humildemente Bandana.
—Claro que lo eres. —dice el helado soltando a Doc a los guardias y dirigiéndose al Dee —No por nada eres considerado el mejor guardia del rey ¿o sí?
El Dee siente un pellizcar de vergüenza, no sé cree merecedor de esas palabras.
—¿Enserio tan buen héroe es? —dice una sarcástica voz detrás de ellos.
Bandana y Chilly de inmediato voltean y saltan hacia atrás en posición de batalla, los demás Waddle también se sorprenden y se preparan. La voz era de Daroach, quien había aparecido con su capa flotando detrás de ellos.
—Daroach, termina de una vez, yo sé que no quieres hacer esto —dice Bandana —Mira a tus compañeros, mira a Doc como ha terminado, ¡todo por este sin sentido!
El Waddle Dee estaba seguro de que el jefe se preocupaba mucho por sus compañeros, así que intenta apelarlo de esta manera. Sabe que si lo consigue todo esto terminara, Storo, Spinni y Doc no son el problema, solo están siendo leales al quien más respetan y quieren. De algún modo se siente identificado con ellos, como Waddle Dee siempre será leal al rey, aunque a veces Dedede hacía maldades las cuales conllevaban poner en riesgo a sus Dees al ordenarles robar comida, sabías que estaba mal pero simplemente obedecías. Kirby mató a muchos por esto. Todo por el egoísmo de un rey, de un líder.
—Si tan bueno eres ¿Dónde estabas cuando tu pueblo gritaba por ayuda, pequeño Waddle Dee? —dice Daroach ignorando el comentario del Bandana.
—¿De qué hablas? —pregunta el Dee sin entender el contexto.
—Hace poco me la pase genial, ver como el alma de muchos desaparecer entre el fuego es tan... relajante ¿Sabes? Antes no entendía al mundo, pero ahora que yo soy ese mundo, es bastante comprensible.
—Ve al grano, Daroach. No me gusta cómo estás hablando, —dice Bandana disgustado y sorprendido de las palabras del ratón —vamos, si necesitas dinero, podríamos poner una caja de donaciones en el centro del pueblo, seguro que completaremos cualquier cosa que necesites.
Bandana pensando un poco más, el arriesgar tanto para robar al rey le parecía sospechoso. Tal vez los Squeaks se han metido en una gran deuda y necesitaban dinero urgente, conoce a Daroach, no robaría porque si, ¿o sí?
—Permíteme darte contexto pequeño, asómate y mira al sol, a que es precioso ¿verdad?
Los guardias voltearon al cielo y no vieron nada. Todo estaba nublado del polvo de los escombros del castillo. Bandana no volteo, sabe que Daroach solo necesita de un parpadeo sin ser visto para robar o herir. Chilly si lo hizo y reacciono con enojo, "¿Acaso se ha burlado de nosotros?" pensó. Notó que Doc y Storo también voltearon, pero para su sorpresa, se veían sorprendidos, asustados.
—¿Qué sucede? —dice Daroach mirando a sus caras confundidas —Ah sí, ustedes no son ratones, sus vistas no son tan sensibles como las nuestras. Déjenme ayudarles pequeños inferiores.
El ratón, como si fuera un truco de magia, saca una varita, su gran varita mágica, con la cual toca el cielo y este se limpia, dejando a los Waddle Dees ver.
Lo que ven fué aterrador. Su peor pesadilla se ha hecho realidad.
En el cielo se ve humo negro el cual tiene su origen al pueblo, este está en llamas y no se veía ninguna señal de vida. "No puede ser" pensó Bandana. Su pecho se llenó de dolor, había fallado como guardia, como héroe... otra vez.
—Aw, se ven tan tristes Waddle Dees —dice Daroach sonriendo —No se preocupen, terminare con su tristeza con un pequeño truco mágico que tengo para ustedes.
El ratón saca una bomba de su capa y la tira al suelo. De inmediato, Chilly agarra al distraído Bandana y se lo lleva abajo, cubriéndolo con su cuerpo, pero antes de que pudiera hacer el escudo, la bomba explota.
La explosión fue extremadamente fuerte. Los Waddle Dees que quedaban más cerca de la zona de la explosión quedaron destrozados, llenando todo el lugar de sangre Dee. Storo pudo resistir, pero Doc salió volando. Bandana protegido por Chilly, solo quedó muy aturdido, abrió los ojos y veía todo borroso, un pitido en sus oídos no le dejaban escuchar. Como si una fuerza invisible le sujetara, simplemente no podía levantarse. Solo diferenciaba unos trozos de nieve esparcidos a lado de él.
Storo quedó impactado. Tanta sangre y partes de Waddle Dees en todas partes. Una pata por ahí, un ojo por allá. Una escena sádica y horrible. Notó como su jefe no se inmuto, es como si le diera igual la atrocidad que acaba de cometer. Voltea a ver a Doc, lo encuentra inconsciente. Corre a socorrerlo y lo carga.
—¿Doc? —preguntó buscando alguna respuesta.
El pequeño ratón respiraba, pero no respondía. Una pena muy profunda en su alma golpeo su estado de ánimo. El pensar en perder a uno de sus compañeros, su única familia, le es muy doloroso. Mira a Daroach y este solo sonríe.
—No —dice en el suelo Bandana débil y susurrante —¿Qué has hecho Daroach?
El jefe voltea al escuchar con sus sensibles orejas de ratón al Waddle Dee. Flota hacia él y lo carga con su pata. Lo observa y admira su vulnerabilidad.
—Ahora entiendo, —dice Daroach —tener en tus manos a un ser tan pequeño, tan débil. Tener en tu voluntad su vida, ver su miedo y la poca validez de su existencia. Se siente tan... poderoso.
Daroach empieza a encajar poco a poco sus 3 enormes garras al Dee. Bandana se retuerce. Siente como su piel es rebanada, es un dolor insoportable. Gritó y no podía hacer nada más. Intentó salvarse, pero moverse le arde como el fuego.
—¡Jefe! —gritó Storo.
—¿Qué sucede? —pregunta Daroach molesto.
—¿Q... ¿Qué haces? —dice con voz temblorosa.
—Pagándole con la misma moneda, Storo.
—No, n.. no, ¡Jefe! S... Somos mejores que esto. No nos convirtamos en lo juramos destruir, jefe. ¿Recuerda lo que nos dijo? Hay que derrotar al mundo siendo mejores que él, no igual a él.
En ese momento llega Spinni.
—¡Jefe! ¡Encontré finalmente el... - dice alegre e interrumpido por impactante escena - ¿Qué sucedió? —pregunta perturbado.
—¿Sabes qué? Tienes razón Storo —dice Daroach soltando a Bandana, dejándolo caer al suelo bruscamente —Somos mejores que esto.
El jefe se acerca a Storo, quien se encontraba sentado, viendo con pena a Doc entre sus brazos.
—Estará bien, es fuerte, créeme —dice ya cerca del gran ratón.
Storo mira al jefe y en sus ojos encontró al ratón que le salvó la vida. Por un momento un sentimiento de seguridad llego a su pecho, pero sabe que lo que ha hecho es un terrible pecado. Pero quiere mucho a Daroach, es como un padre para él, simplemente no podía negarse a perdonarlo. Lo mejor que le quedaba era pensar que esto solo fué un error por parte del jefe, un enorme y terrible error.
—Entonces, ¿Dónde está el tesoro, Spinni? —pregunta ansioso Daroach.
—¿He? Ah si - dice el pequeño ratón —pero esto ¿Quién lo hizo?
—Eso lo hablaremos después, guíanos. —dice alegre.
—¡Espera!, ¿¡Qué le paso al pueblo!? —dice sorprendido Spinni.
—¡Dije que nos guíes, maldita rata! —gritó de manera endemoniada Daroach al pequeño ratón.
Todo quedó en silencio. Spinni se encorvó y paralizó de miedo, no se había sentido así desde que vivía en las alcantarillas. Nunca creyó que volvería a estos sentimientos, y mucho menos por parte del jefe. Temblando solo miró a Daroach.
—Lo siento, Spinni. - dice el jefe —No era mi intención, anda guíanos. - dice tranquilo, pero con una pisca de desesperación.
Spinni asintió sin explicación, pero por primera vez obedeció a Daroach por miedo. "¿El jefe no podría hacerme daño, o sí? Él me salvó, nunca haría algo así" pensaba repetidamente el ratón, intentando calmar sus instintos que le gritaban "¡Corre!".
Mientras tanto Bandana no podía creer lo que acababa de pasar, es imposible. Daroach no haría algo así, algo definitivamente extraño está sucediendo. Trató de levantarse, pero fué inútil, hizo todo lo posible para detenerlos, pero todo era en vano. "Espero que estés bien" pensó Bandana rindiéndose y mirando los trozos de nieve a lado de él. Lo que más le dolía era que iba a dejar escapar otra vez a un villano, no le quedaba nada más que rogar a que un héroe viniera a salvarlos.
—¡Aquí esta! —dice Spinni, apuntando al suelo.
Daroach se acerca y del suelo se encuentra una trampilla muy bien camuflada. La rompe ferozmente con sus garras y en el fondo se ve el valioso tesoro. El jefe soltó una mirada de codicia. Spinni y Storo solo se juntaron, compartiendo su falta de entusiasmo.
—Bueno, creo que ya no necesito su ayuda, ratas —dice Daroach.
—¿Qué? —dice sorprendido Storo
Y en un momento, las garras de Daroach estaban encajadas en su pecho. En su último suspiro miró a su jefe, al quien más respetaba y quería, manchado con su propia sangre, terminando con su vida.
"¡Nooo!" gritó en su interior Bandana, intento desesperadamente ayudarlos, pero apenas pudo arrastrarse.
Spinni entró en pánico y corrió. El corazón se ahogó en dolor y como alguna vez en su pasado corrió.
Storo muerto, sus músculos se relajaron dejando que el inconsciente Doc cayera de sus brazos. Daroach simplemente lo pisó brutalmente destrozándolo. Todo un artista de la sorpresa, desapareció con su capa para aparecer cerca de Spinni quien aún corría desesperadamente.
El pequeño ratón, se sintió tan débil y vulnerable como antes, huyendo constantemente de los que deseaban matarlo, pero esta vez era su propio salvador. Daroach aparece enfrente de él, Spinni en pánico va a ocultarse y se conforma debajo de los escombros. Era inútil correr.
Para mala suerte de Spinni, no podía esconderse de los agudos sentidos de ratón de Daroach, el quien lo encontró fácilmente y lo agarro de inmediato. En su pata, el pequeño intento liberarse, pero su fuerza era inútil.
—Que irónico, ¿no es así? —dice Daroach mirando al ratón —Luchaste años para dejar atrás la vida de la ciudad y mírate ahora, como quiera terminaras igual que tu familia. Asesinado porque el mundo te odia... bueno esta vez será por mí.
Y en un segundo, Spinni sintió 3 grandes cuchillas cortar su cuerpo en 3, finalmente quedó en paz.
—No puede ser, te creía mejor que esto, eres un maldito monstruo, Daroach —dice Bandana arrastrándose hacia él.
El ratón solo responde con una sonrisa desde arriba, disfrutando su superioridad. Pero esa cara desapareció de repente, escuchó algo viniendo a lo lejos. Ese particular sonido de pisadas era imposible de no distinguir. Es Kirby.
Con su pequeña bolsita llena de cartas, Kirby finalmente llega al pueblo. Pero se encuentra con el vació, no había comida, no había amigos, todo estaba negro ¿Qué ha pasado aquí? Todo olía a humo, pero no le hizo sospechar. Ahora tendrá que viajar para entregar sus regalitos. Así que intentó recordar, ¿Quién está más cerca? Claro, Bandana y Dedede, el castillo está a lado. Miró y se ve a un castillo más pequeño de lo que recordaba, más específicamente, está a la mitad.
Corrió hacia alla esperando ver a sus amigos. Al llegar se encuentra con polvo, escombros y muchos Waddle Dees inconscientes y muertos. Sin entender nada, solo miró confundido. Un particular olor le llegó a su increíble olfato. Olía a ratón y no era cualquier ratón, es ¡Daroach! Feliz, siguió ese aroma, podrá entregarle el regalo y alegrarle el día.
Kirby se encuentra a Daroach saludándolo con una gran sonrisa. Bandana no se ve en ninguna parte. El rosado de inmediato busca en su bolsa la carta para el ratón, el ex jefe solo se acerca, viendo que hacía.
—¡Poyo! —dice alegre mostrándole su carta a Daroach.
Él lo acepta, lo abre y se encuentra con un dibujo extremadamente simple de él, con un "Te quiero" puesto aleatoriamente.
—Gracias Kirby —responde —Es muy tierno por tu parte.
Kirby salto de alegría esperando a que Daroach emanara energía positiva, pero no lo hizo.
—¿Poyo? —dice el rosado confundido.
—¿Qué sucede? —dice sonriente al redondo y ríe —Déjame contarte algo, de amigo a amigo.
Kirby solo asintió, el ratón está manchado de sangre, pero simplemente lo ignoró, está muy feliz de estar con su amigo. Los actos heroicos de Kirby no eran besos y abrazos, las batallas son sangrientas, así que lo relaciona con algo normal. Daroach carga al rosado y vuela al techo más alto aún existente del medio destrozado castillo, para que los 2 pudieran contemplar bien el horizonte. Kirby suelta la bolsa al suelo en el proceso.
—¿Sabes? - dice el ratón —eres un ser muy fuerte sin alguna duda, alguien con mucho poder Kirby, más de lo que nunca has mostrado. Lo puedo sentir. No me parece correcto que la utilices solo para salvar a seres que no lo merecen.
Kirby solo miró, se sentía cómodo en las patas de Daroach.
—Por eso vengo a guiarte, mira alrededor, todo esto podría ser tuyo. Nadie podría detenerte. ¿No te parece tentador? Podrías fácilmente tener todas las riquezas que quieras, conquistar ciudades, destruir mundos, ¡Que todo el universo se hinque ante ti! ¡Vamos Kirby! Demostrémosle al mundo lo que realmente eres.
El rosado solo empezó a chupar su manita. Tiene hambre.
—No entiendes ¿verdad? —dice Daroach con un exhalar de decepción, pensó por un momento y habló —Oye, he escuchado que un rey a lo lejos te quiere robar la comida.
EL redondo se acurruco más, no parece entender nada.
—Emm… ¿No… ñom?
Kirby reaccionó con asombro.
—¡¿Poyo?!
—Si, no ñom, deberíamos matar ¿no crees?
El redondo no respondió, pero se veía enojado, eso era suficiente para Daroach. Ser considerado amigo vuelve engañar a Kirby una tarea bastante fácil, puede que no entendiera sus intenciones, pero con mentirle para que haga maldades no intencionadas es todo lo que necesita.
Entonces una enorme ráfaga de hielo es disparada a Daroach, este de inmediato se teletransporta para salvarse con su capa junto a Kirby y aparece donde el origen de ese ataque. Se encuentra con Chilly, el quien parece se acababa de formar.
—No tan rápido ratita. —dice en tono muy enfadado.
—Demonios —dice Daroach nervioso.
Ahora que esta Chilly el cual es otro amigo de Kirby, lo ponía en peligro, no por los ataques del muñeco, si no por el mismo rosado.
—¡Kirby! No le hagas caso, te está engañando, ¡ven aquí! —dice intentando convencer al pequeño.
El redondo al ver a Chilly de inmediato recuerda el regalo que le debe. Intenta soltarse de Daroach para agarrar la bolsa que dejo tirada. El ratón al sentir los intentos de liberación de Kirby, mal piensa la situación y cree que obedece a las palabras de Chilly. Se llenó de furia y rápido como un rayo, rasguña al muñeco partiéndolo en 3.
Kirby mira y se sorprende, su amigo acaba de ser descuartizado enfrente de él. Con fuerza se suelta bruscamente de los brazos de Daroach y se dirige a ver los restos de nieve de su amigo.
"La he cagado." se dice a si mismo el ratón.
EL rosado después de admirar la nieve, se voltea enfadado, y sin que Daroach se diera cuenta, le da un poderoso puñetazo en la cara, dejándolo inconsciente en el suelo.
Kirby comprobó si el ratón se movía, al no ser así, regreso a ver por su amigo. Pero como ya sabemos, Chilly es capaz de formarse, así que lo hace por tercera vez. El rosado salta de alegría y lo abraza bruscamente.
—D.. Demasiado fuerte Kirby —dice el muñeco a punto de ser aplastado otra vez por la fuerza del redondo.
Chilly es soltado y voltea alrededor buscando a Bandana, pero no lo encuentra. Piensa lo peor. Unos toquecitos en la espalda le hacen voltear y ve a Kirby dándole una cartita. Lo abre y después de haber sufrido tanto mentalmente por los crimines de Daroach, este pequeño acto de bondad le da un poco de la alegría que tanto necesitaba. Kirby lo siente y se encontenta bastante. Ha hecho feliz a su amigo otra vez.
—Gracias Kirby —dice calmando su mente.
Han pasado varias horas, los Waddle Dees que estaban inconscientes se han despertado y Bandana Dee poco a poco agarra la compostura. Fué encontrado enterrado en los escombros, Daroach intento esconderlo para que el Dee no lo interrumpiera en su plática con Kirby, pero se olvidó de Chilly. Ya se han apagado las llamas del pueblo y se intenta reparar los daños lo mejor que se puede.
Todos estaban muy desanimados, definitivamente fué un mal día. ¿Derrotaron al mal? sí, pero lo hicieron demasiado tarde. El pueblo está destrozado, muchos murieron, pero algunos sobrevivieron. Un Waddle Dee venda sus heridas mientras Bandana piensa. Aún le era imposible creer que existiera alguien tan cruel, especialmente viniendo de Daroach, no se la esperaba y lo subestimo en ese aspecto. El intentar razonar con él fué un error.
Chilly está lado de él y le agarra el hombro, dándole consuelo. A lo lejos ven a Magolor acercándose y a un Dedede muy enfadado.
—¡Ey! ¡Tú! —grita el rey a Meta Knight —¿Por qué no ayudaste?
El guerrero no respondió como siempre, ríe y simplemente se va volando.
—¡Ah! ¡¿A dónde crees que vas?! —reclama, pero es inútil —Este maldito misterioso Meta Knight y su maldita forma misteriosa de ser. —queja apretando los dientes.
El del pañuelo solo suspira e ignora la escena. Entonces el mago finalmente llega.
—Gracias pequeño Waddle Dee por rescatar mi nave. —dice rápidamente Magolor.
—Yo no fui, el héroe aquí es Chilly —dice Bandana amargado, no porque tenía envidia del muñeco, sino porque siente que ha fallado como héroe.
—Oh, claro. —dice ahora dirigiéndose a Chilly —Gracias pequeño muñeco por rescatar mi nave.
Bandana se enfadó, al maldito Magolor hablaba como si todo lo que acaba de suceder le valiera queso, de hecho, podría ser cierto. Aparte que repitió lo dicho, definitivamente no está hablando desde el corazón.
—Magolor ¿y eso? Estas muy... normal, muy optimista. ¿Acaso solo te preocupa tu nave? —pregunta en tono molesto.
—Efectivamente Waddle Dee. —dice Magolor.
"Que descarado" pensó Bandana. Cuando estuvo a punto de reclamarle, los tiernos gritos similares al de niño inocente se escucharon a lo lejos.
—¡Magogo!, ¡Magogogooo! —gritó Kirby buscando al mago con su bolsita.
—¡Aquí estoy Kirby! —dice en voz alta para que lo encontrara.
El rosado corre hacia él y saca de su bolsa la carta para Magolor.
—¡Wow Kirby!, ¡Gracias! Es increíblemente horrible, pero me sorprende que puedas si quiera dibujar siendo tú un ser tan simple, tan tonto. —dice el mago alegre.
"¿¡Cómo!?" pensó Bandana, no le entró en la cabeza como es que alguien menospreciara de esa manera a un amigo, y no solo eso, ¡al héroe de Pop Star, él quien le dio otra oportunidad! Pero aun así Kirby se veía feliz y reía.
—Bandana, lo mejor es descansar —dice Chilly viendo el coraje del Dee —Relájate, merecemos un descanso.
Tenía razón, el estrés de lo sucedido está a punto de reventarle la cabeza, seguir pensando en ello en este estado no ayudara en nada, así que asiente y relaja.
—¿Quieres también un regalito? ¿A que si quieres uno? —dice Magolor de manera juguetona a Kirby.
El rosado asiente muy feliz. Él mago lo guía hacia su recién rescatado Astrovelero, al subir Magolor entra directo a la cabina dejando a Kirby atrás en la proa, en ese momento el redondo ve una extraña pequeña jaula a lado de la puerta de la cabina. Sentía vida dentro de ella, así que curioso se acerca para ver qué es.
Adentro de la jaula hay un conejo.