Día 24: Cielo
-Sabes, llevo tantas horas aquí encerrada contigo, que siento que todavía el cielo debe estar oscuro – Dije captando la atención de Syaoran – Pero para estas alturas probablemente ya debe estar amaneciendo.
Él levantó la vista hacia el reloj que estaba en la pared – Tienes razón, ya deben estar por llegar los chicos del cambio de turno.
De repente escuchar las palabras "los chicos del cambio de turno" no me cayó tan bien como lo habría hecho varias horas atrás, y es que no me había percatado de que, en efecto, entre más nos acercáramos al amanecer, significaba que alguien más vendría a vigilarme, y que Syaoran tendría que irse a casa… me haya ido o no.
Este pensamiento hizo que se formara un nudo nada agradable en la boca de mi estómago y que mi ánimo decayera un poco. Pese al mal comienzo, las discusiones, los momentos embarazosos, las risas y básicamente cualquier situación por la que pasamos habían hecho mi estadía en este lugar mucho más amena de lo que habría esperado cuando me arrestaron, y me costaba un montón pensar en cómo habría sido si Syaoran no hubiese estado conmigo.
-No voy a irme hasta que tu hermano y tu cuñado hayan llegado por ti – Dijo de repente sacándome de mis pensamientos.
Y por supuesto que esta declaración me dejó desconcertada – ¿Qué?
Syaoran rodó los ojos con impaciencia – No voy a repetirlo.
-Pero estas de turno desde que me detuviste, y puedo asegurar que desde antes de eso ya estabas trabajando – Dije levantándome de la cama y acercándome a las rendijas – No has dormido y debes estar exhausto.
-He tenido peores noches – Respondió restándole importancia.
Lo miré con el entrecejo fruncido – El oficial Clow no va a dejar que pases más horas aquí y mandará a otro oficial.
-Alguien tiene que firmar tu salida de este lugar, y para mi suerte yo he estado a tu cuidado toda la noche – Contestó rápidamente sin inmutarse… ¡es como si lo tuviera todo preparado en un discurso en su cabeza!
-Eso es bastante injusto y se considera explotación laboral – No iba a mentir, una parte de mi estaba aliviada y emocionada de que él estaría aquí hasta el último momento, sin embargo, sabía que no había dormido absolutamente nada y que prácticamente había sobrevivido la noche a punta de café, refresco y un montón de cigarrillos.
-Cuando decides ser policía, debes estar dispuesto a tener noches como estas – Respondió sin inmutarse, era como si estuviese acostumbrado.
-Como arqueólogo no te pasarían estas cosas – Dije en un tono un poco más ligero, de todas formas, sabía que no lo haría cambiar de opinión acerca de irse a casa, y aparentemente, esto seguía siendo parte de su trabajo.
-Si, pero quizás como arqueólogo no me habría cruzado contigo ¿no crees? Digo ¿a cuantos estudiantes de tu padre conoces? – Esto lo dijo seguido de darme un guiño de ojo rápido antes de volver la vista a los papeles en su escritorio.
Ese simple gesto hizo que mi corazón se acelerara muchísimo y sentí como mis mejillas se sonrojaban fuertemente, tanto que ni siquiera me atreví a darle respuesta a su pregunta… ¡el desgraciado sabía que tenía una debilidad por él y lo usaba muy a su favor!
Y aunque él no me vio, yo devolví este gesto con una sonrisa tonta.
oOo
N/A: ¡Hola a todos por aquí! Espero que su semana haya empezado bien. Por aquí les dejo el capítulo de hoy.
Sé que se siente como que volvimos a la lentitud, pero tengan en cuenta que todo el fanfic transcurre en horas, por lo que me permití incluir detalles como que aquí ya estén hablando del cambio de turno, aunque tengan en cuenta de que ya está amaneciendo.
Espero que les haya gustado y les agradezco a todos por su apoyo en los comentarios, votos y lecturas, me pone muy contenta ver lo que opinan de cada capítulo.
Nos leemos mañana en el siguiente.
Un abrazo enorme.
ACLARATORIA: Esta historia es de mi autoría, no existen colaboraciones con nadie y en el caso de que las hubiese se le darían sus respectivos créditos. Esta historia solo es publicada a la fecha en las plataformas FanFiction y Wattpad; si está en alguna otra es porque no está autorizada por mi persona y se considera plagio. No se permite la copia y/o adaptación de esta historia.
