DISFRACES
PAREJA: Harry Potter / Draco Malfoy
—Vamos, Draco, apúrate, llegaremos tarde.
—Ya casi estoy listo —se escuchó desde el baño.
Hoy sería la fiesta de disfraces que los gemelos Weasley estaban organizando, y si no se apresuraban serían los últimos en llegar. No que Harry sea la persona más puntual del mundo, pero sabía que si eso pasaba Draco haría un drama de aquello al regresar a casa, conocía bien a su esposo.
Pasaron cinco minutos y el rubio por fin salió del baño.
—¿Te gusta? —giró sobre sí mismo para que Harry pudiera ver bien el disfraz —Soy tu patronus.
Lo veía. Draco se disfrazó de ciervo, de un ciervo condenadamente sexy.
Llevaba un leotardo café, también unas medias del mismo color y en la parte de atrás se veía una cola color blanco, en la cabeza una cornamenta y la cara alguno hechizos para darle rasgos de ciervo.
—Me encanta —dijo Harry acercándose para darle un beso.
Posó sus manos en las caderas de su pareja y no pudo evitar llevarlas hacia atrás para presionar su trasero, le pareció una idea divertida tirar un poco de la cola del disfraz, cuando lo hizo Draco gimió.
Lo miró con sorpresa.
—No está pegada a las medias.
Draco negó y sonrió coquetamente.
—¿Esto está…? —Harry estaba girando levemente la cola del disfraz haciendo que Draco se sonrojara un poco.
—Está dentro de mí —le confirmó el rubio jadeando —. Tuve que hacer un hechizo para que pareciera que es parte de las medias y también para que aquí no se note —. Llevó una de las manos de Harry a su entrepierna, se sentía su polla semierecta pero a simple vista estaba completamente plano.
—¿Cómo se supone que iremos a la fiesta si ya me tienes completamente excitado? —Harry acarició más el miembro de su pareja y continuó moviendo el pug de su trasero.
—Solo quería hacerlo más divertido.
—Bien, pero necesitaré mucho autocontrol para no echarme encima de tí con todos los demás alrededor.
—Lo lograrás, solo te echarás sobre mí cuando regresemos a casa, Señor Cazador.
Sí, ahora el pelinegro entendía por qué su pareja quería que se disfrazara sea cazador.
Durante la fiesta nadie sospechó que Draco estaba utilizando un pug anal, solo él y Harry lo sabían y eso los excitaba a sobremanera.
Cuando estaban sentados Harry no dejaba de ver a su pareja removiendose disimuladamente de vez en cuando para acomodarse mejor, sabiendo que estaba siendo estimulado. Afortunadamente mientras bailaban se pudieron desahogar un poco.
Aunque eso más bien los hizo estar más calientes aún.
Mientras bailaban de regresaban como las demás parejas, Harry estaba tan duro que agradece que su disfraz disimulara su miembro. Agarraba las nalgas de Draco para acercarlo más a él y que sus pollas se frotaron, de vez en cuando jugaba con la cola de ciervo con toques que a los demás les podrán parecer consecuencia del baile, pero que sabía le propinaron placer a su pareja.
Poco después de media noche por fin se retiraron y regresaron a su casa por red floo. Apenas estuvieron en el salón, Harry abrazó a su pareja y los apareció en la habitación principal y lo comenzó a devorar.
La ropa de ambos desapareció, literalmente por arte de Magia, Harry no tenía más paciencia para hacerlo de la manera tradicional así que desapareció todo, excepto los cuernos y la cola de ciervo que usaba Draco.
—Creo que me gusta más esta versión del disfraz —dijo Harry entre besos.
—Demuéstrame qué tanto te gusta.
Draco se separó de su esposo y se subió a la cama a cuatro patas, moviendo el trasero mostrando el pug y girando la cabeza para poder ver la expresión de Harry.
El moreno se abalanzó hacia él y tomó el pug, primero lo giró levemente en el interior de su pareja, luego lo sacó solo unos centímetros y lo volvió a meter, hizo eso unos minutos hasta que Draco estaba apoyado en sus codos jadeando por más.
Fue entonces que Harry por fin sacó el juguete por completo y lo dejó caer de cualquier forma, llevó bsu cara a la entrada de su amante y lo comenzó a lamer, introduciendo su lengua unas cuantas veces.
Draco no necesitaba ser preparado después de haber usado el pug durante tanto tiempo, pero a Harry le gustaba tanto el sabor de su esposo que no pudo evitarlo.
Solamente lo lamió durante unos pocos mii pues él se encontraba tan al borde como su pareja. Cuando se alineó empujó para meterse en él de una sola estocada y comenzó a follarse a su esposo de manera rápida y precisa.
Con los años de experiencia, sabía exactamente cómo y dónde embestir para que la próstata de su esposo sea estimulada de la manera que al rubio más le gustaba. Solo gemidos, jadeos y el rudo de piel chocando contra piel se escuchaba en la habitación.
—¡Harry! me voy a correr —Dijo Draco entre gemidos.
—Hazlo, también yo estoy muy cerca.
Media docena de embestidas más y ambos estaban derramándose, Draco sobre la cama y Harry en el interior de su esposo.
El moreno salió del interior de su pareja con cuidado y realizó algunos hechizos para limpiarlos.
—¿Tendremos que esperar al siguiente Halloween para que lo vuelvas a usar? —preguntó el ojiverde con un tono falsamente inocente.
Draco se rió y acurrucó contra su pareja.
—Si te portas bien, puede que no esperemos tanto —se deshizo de los cuernos que aún adornabannsu cabeza, besó a Harry y ambos se dispusieron a descansar.
Tal vez en la mañana el disfraz sería usado nuevamente, Harry buscaría la manera de convencer al rubio, tenía unos trucos muy buenos para lograrlo.
Nota:
Les prometí que este no sería triste y aquí está.
Por cierto, para las personas que aún están esperando que llegue el OS del spoiler sin contexto que publiqué en Facebook, les tengo buenas noticias.
ES MAÑANA
