Lady Dark: Aquí estamos otra vez, más rápido que corriendo con otro
capítulo de nuestro fic para los fieles fanáticos que siguen leyéndolo. Les
mandamos saludos a Carla, Clow Reed y Bra por las críticas que nos
enviaron.
Lady Evil: Esperamos que disfruten este fic.Gracias Clow por apoyarme, pero deberas esperar a que mate a esta loca o la convenza.
Lady Dark: Nos gustaría hablar mucho más, pero como gastamos todas las ideas en la historia me quedé sin material.
Lady Evil: "Todas las ideas", me permito recordarte que son MIS ideas.
Lady Dark: En este, casi todas fueron mías.
Lady Evil: NO MIENTA.
Lady Dark: Bueno, bueno, ya cálmate.
Lady Evil: Bueno, empecemos el fic.
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Capítulo 5: Hora del ejercicio
Después de una vueltita por el dormitorio de Kai, de la que Tyson aún no se recuperaba del asombro, los Bladebreakers y Aki, que cada vez les parecia más distitnto de Kai; bajaron nuevamente por las escaleras para llegar el segundo piso, y nuevamente Tyson se quejaba invariablemente por tener que seguir haciendo un esfuerzo físico después de semejante desayuno, aunque Tyson afirmaba que solo había sido una botanita. Aki se reía ante la idea de lo que Tyson pudiera describir como un desayuno pesado.
Llegaron al segundo piso,y nuevamente fue para que a los muchachos se les cortara la respiración por el lujo que adornaba también este piso, el mismo del resto de la casa, alfombras, pinturas, muebles antiguos y todos los adornos del caso. Aki los guió por una sucesión de corredores que, para aquellos que no están acostumbrados o conocen esta casa, parecía interminable.
-¿De verdad crees que él está en el gimnasio Aki? - dijo Rei casi en un jadeo.
-Si, si no ha salido de la casa casi siempre está en su cuarto o en el gimnasio entrenando. - le explicó Aki.
-¿Y si tampoco está en el gimnasio? - preguntó Tyson, aún decidiendo si se estaba ahogando o estaba mareado.
-Pues en ese caso estará en la biblioteca, o el salón, o el patio, o la piscina, o en cualquier otro punto de la casa - Aki ya había empezado a reírse - pero no creo que tardemos más de dos o tres horas buscándolo por la casa.
- Genial - dijo Tyson con sarcásmo.
- Pero no se preocupen, estoy casi seguro que debe estar en el gimnasio - les tranquilizó Aki.
- Pues será mejor que así sea - Kenny ya se veía azul - no creo poder dar un paso más.
- Aki, como es que no te cansas de andar tanto por esta casa - Max también parecía que se ahogaba.
-De hecho, es un efecto psicológico, el diseño y la decoración de la casa están hechos para que las personas que no andan mucho por aquí sientan que es interminable y que no pueden respirar, - Aki les explicó más serio - fue una idea del abuelo.
- Lindo - esta vez fue Rei el del sarcásmo.
- No se preocupen, ya llegamos. - anunció Aki.
Ante ellos estaban las típicas puertas de madera fina que había por todo la casa, Aki apoyo la mano en el pomo y ya había a abrir cuando Rei le preguntó.
-¿No vas a tocar primero?
-No - simple respuesta de Aki.
Abrió la puerta del gimnasio, y nuevamente los Bladebreakers se quedaron sin aliento, pero no por la aparentemente infinita extensión de los pasillos, sino por el lujo que también se veía en el gimnasio de la mansión. No solo contaba con los típicos artículos de un gimansio como bicicletas estacionarias, caminadoras, pesas y todos los demás artículos del caso; sino que también podían darse el lujo de tener 4 platos de beyblade distribuidos por el área del gimnasio.
Nuevamente a Tyson iba a darle un soponcio por el lujo en que vivía Kai. Ahí fue cuando se fijaron en una figura que los obsevaba desde uno de los platos de beyblade, era Kai, que había recuperado su apariencia de costumbre con la cara pintada y sus usuales ropas oscuras, y les estaba dirigiendo a todos la "mirada de la muerte", obviamente no le gustaba que lo interrumpieran mientras entrenaba.
- ¿Aún andan por aquí? - se notaba el enojo en su voz.
- Kai, que mal anfitrión eres - Aki lo reprochó sin responder a su pregunta - dejas a tus invitados solos y perdidos por la casa.
- Si realmente son invitados y no metiches, serán tuyos, no mios.
- Si, supongo que sí. Pero también son tus amigos, y yo los invité para que te visitaran. - otra vez Aki sonreía.
- Que considerado - respuesta sarcástica de Kai - pero me pregunto, si no serán más bien una parte de otro de tus molestos planes para fastidiarme la vida.
- Tal vez, pero no te lo voy a decir. - la sonrisa de Aki se había transformado en malicia pura - Y que importa además, son invitados de la casa por los próximos dos días y vas a tener que convivir con ellos hasta entonces.
-De verdad tienes que estar bromeando - a Kai no se le veía nada contento, es cierto que nunca lo estaba, pero esto superaba todo lo anterior.
- Oh vaya, Kai, - Max intervino tratando de tranquilizar la conversación - nunca nos dijiste que tuveras platos de beyblade propios.
- Ustedes no .
- .me preguntaron - Tyson terminó la frase - Saben, ustedes dos ya me tienen enfermo con esa fracesita.
- Si no te gusta, vete. - le respondió Kai.
Tyson iba a empezar una discusión mucho más acalorada, Aki se dio cuenta del peligro al que se exponía Tyson si llevaba su discusión con Kai a un plano más físico, por lo que decidió que lo mejor sería calmar los animos, o llamar a los abogados para enfrentar las demandas civiles por ataque.
- Saben, ¿por qué no olvidan estos tontos problemas y se ponen a practicar con los beyblades?
- Si, vamos. - apoyó Kenny, notando también el peligro que podía haber es esa discusión.
- Si crees que voy a aceptar practicar con estos.
"Tin, tan"; para tranquilidad de Aki, la campana sonó anunciando la hora del almuerzo. Eso debería relajar un poco los animos y le daría tiempo de preparar a Kai para la sorpresa mayor que debería llegar más tarde.
- Hora del almuerzo - dijo alegremente Aki, pero que no ocultaba completamente su alivio por esta interrupción. - Vamos Kai, deja estos pleitos ridículos y bajemos a comer.
- Bien, como sea. - otra frase típica de Kai.
Ya más tranquilos, los seis se dirigieron a las escaleras para bajar al comedor principal. Kai guardaba silencio mientras Aki emocionaba más a Tyson con las posibilidades de lo que pudiera haber para almorzar.
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Lady Dark: Opss. Creo que me quedó un poquito más pequeño que de costumbre, y otra vez es puro relleno.
Lady Evil: Te dije que metieras idea, pero siempre quieres dejar sorpresas.
Lady Dark: Hay que darle al público una razón para que sigan leyendo, y a mí para seguir escribiendo.
Lady Evil: Esperamos que envíen sus crítcas.
Lady Dark. De véras que nos estamos quedando sin material.
Lady Evil: Es que lady Dope le ponía química al asunto.
Lady Dark: Si, pero me amenazó de muerte si un diálogo de ella volvía a aparecer en uno de nuestros trabajos.
Lady Evil. No sé por qué te preocupas, ella ni siquiera los lee.
Lady Evil: Esperamos que disfruten este fic.Gracias Clow por apoyarme, pero deberas esperar a que mate a esta loca o la convenza.
Lady Dark: Nos gustaría hablar mucho más, pero como gastamos todas las ideas en la historia me quedé sin material.
Lady Evil: "Todas las ideas", me permito recordarte que son MIS ideas.
Lady Dark: En este, casi todas fueron mías.
Lady Evil: NO MIENTA.
Lady Dark: Bueno, bueno, ya cálmate.
Lady Evil: Bueno, empecemos el fic.
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Capítulo 5: Hora del ejercicio
Después de una vueltita por el dormitorio de Kai, de la que Tyson aún no se recuperaba del asombro, los Bladebreakers y Aki, que cada vez les parecia más distitnto de Kai; bajaron nuevamente por las escaleras para llegar el segundo piso, y nuevamente Tyson se quejaba invariablemente por tener que seguir haciendo un esfuerzo físico después de semejante desayuno, aunque Tyson afirmaba que solo había sido una botanita. Aki se reía ante la idea de lo que Tyson pudiera describir como un desayuno pesado.
Llegaron al segundo piso,y nuevamente fue para que a los muchachos se les cortara la respiración por el lujo que adornaba también este piso, el mismo del resto de la casa, alfombras, pinturas, muebles antiguos y todos los adornos del caso. Aki los guió por una sucesión de corredores que, para aquellos que no están acostumbrados o conocen esta casa, parecía interminable.
-¿De verdad crees que él está en el gimnasio Aki? - dijo Rei casi en un jadeo.
-Si, si no ha salido de la casa casi siempre está en su cuarto o en el gimnasio entrenando. - le explicó Aki.
-¿Y si tampoco está en el gimnasio? - preguntó Tyson, aún decidiendo si se estaba ahogando o estaba mareado.
-Pues en ese caso estará en la biblioteca, o el salón, o el patio, o la piscina, o en cualquier otro punto de la casa - Aki ya había empezado a reírse - pero no creo que tardemos más de dos o tres horas buscándolo por la casa.
- Genial - dijo Tyson con sarcásmo.
- Pero no se preocupen, estoy casi seguro que debe estar en el gimnasio - les tranquilizó Aki.
- Pues será mejor que así sea - Kenny ya se veía azul - no creo poder dar un paso más.
- Aki, como es que no te cansas de andar tanto por esta casa - Max también parecía que se ahogaba.
-De hecho, es un efecto psicológico, el diseño y la decoración de la casa están hechos para que las personas que no andan mucho por aquí sientan que es interminable y que no pueden respirar, - Aki les explicó más serio - fue una idea del abuelo.
- Lindo - esta vez fue Rei el del sarcásmo.
- No se preocupen, ya llegamos. - anunció Aki.
Ante ellos estaban las típicas puertas de madera fina que había por todo la casa, Aki apoyo la mano en el pomo y ya había a abrir cuando Rei le preguntó.
-¿No vas a tocar primero?
-No - simple respuesta de Aki.
Abrió la puerta del gimnasio, y nuevamente los Bladebreakers se quedaron sin aliento, pero no por la aparentemente infinita extensión de los pasillos, sino por el lujo que también se veía en el gimnasio de la mansión. No solo contaba con los típicos artículos de un gimansio como bicicletas estacionarias, caminadoras, pesas y todos los demás artículos del caso; sino que también podían darse el lujo de tener 4 platos de beyblade distribuidos por el área del gimnasio.
Nuevamente a Tyson iba a darle un soponcio por el lujo en que vivía Kai. Ahí fue cuando se fijaron en una figura que los obsevaba desde uno de los platos de beyblade, era Kai, que había recuperado su apariencia de costumbre con la cara pintada y sus usuales ropas oscuras, y les estaba dirigiendo a todos la "mirada de la muerte", obviamente no le gustaba que lo interrumpieran mientras entrenaba.
- ¿Aún andan por aquí? - se notaba el enojo en su voz.
- Kai, que mal anfitrión eres - Aki lo reprochó sin responder a su pregunta - dejas a tus invitados solos y perdidos por la casa.
- Si realmente son invitados y no metiches, serán tuyos, no mios.
- Si, supongo que sí. Pero también son tus amigos, y yo los invité para que te visitaran. - otra vez Aki sonreía.
- Que considerado - respuesta sarcástica de Kai - pero me pregunto, si no serán más bien una parte de otro de tus molestos planes para fastidiarme la vida.
- Tal vez, pero no te lo voy a decir. - la sonrisa de Aki se había transformado en malicia pura - Y que importa además, son invitados de la casa por los próximos dos días y vas a tener que convivir con ellos hasta entonces.
-De verdad tienes que estar bromeando - a Kai no se le veía nada contento, es cierto que nunca lo estaba, pero esto superaba todo lo anterior.
- Oh vaya, Kai, - Max intervino tratando de tranquilizar la conversación - nunca nos dijiste que tuveras platos de beyblade propios.
- Ustedes no .
- .me preguntaron - Tyson terminó la frase - Saben, ustedes dos ya me tienen enfermo con esa fracesita.
- Si no te gusta, vete. - le respondió Kai.
Tyson iba a empezar una discusión mucho más acalorada, Aki se dio cuenta del peligro al que se exponía Tyson si llevaba su discusión con Kai a un plano más físico, por lo que decidió que lo mejor sería calmar los animos, o llamar a los abogados para enfrentar las demandas civiles por ataque.
- Saben, ¿por qué no olvidan estos tontos problemas y se ponen a practicar con los beyblades?
- Si, vamos. - apoyó Kenny, notando también el peligro que podía haber es esa discusión.
- Si crees que voy a aceptar practicar con estos.
"Tin, tan"; para tranquilidad de Aki, la campana sonó anunciando la hora del almuerzo. Eso debería relajar un poco los animos y le daría tiempo de preparar a Kai para la sorpresa mayor que debería llegar más tarde.
- Hora del almuerzo - dijo alegremente Aki, pero que no ocultaba completamente su alivio por esta interrupción. - Vamos Kai, deja estos pleitos ridículos y bajemos a comer.
- Bien, como sea. - otra frase típica de Kai.
Ya más tranquilos, los seis se dirigieron a las escaleras para bajar al comedor principal. Kai guardaba silencio mientras Aki emocionaba más a Tyson con las posibilidades de lo que pudiera haber para almorzar.
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Lady Dark: Opss. Creo que me quedó un poquito más pequeño que de costumbre, y otra vez es puro relleno.
Lady Evil: Te dije que metieras idea, pero siempre quieres dejar sorpresas.
Lady Dark: Hay que darle al público una razón para que sigan leyendo, y a mí para seguir escribiendo.
Lady Evil: Esperamos que envíen sus crítcas.
Lady Dark. De véras que nos estamos quedando sin material.
Lady Evil: Es que lady Dope le ponía química al asunto.
Lady Dark: Si, pero me amenazó de muerte si un diálogo de ella volvía a aparecer en uno de nuestros trabajos.
Lady Evil. No sé por qué te preocupas, ella ni siquiera los lee.