Lady Dark: Que levante la mano el que está cansado de repeticiones de
Beyblade.
Lady Evil: Yo, yo, yo...
Lady Dark: Saben, este capítulo es para reventar los últimos cartuchos de mi inspiración, si el FOX Kids no empieza a pasar pronto capítulos nuevos, creo que me voy a volver loca.
Lady Evil: Tengo que hacer un anuncio. Primero: ¡Ahhhhhh! ¿Por qué no ponen más capítulos? ¿Por quéeee?. Segundo: Para aquellos que se pregunten cuál es la sorpresa del final, ¡ES SORPREEEESA!; lo único que les puedo decir es que tiene que ver con Suki. Y, por último: para el que pidió (¿Clow?) que alejáramos un poco a Suki de Kai, aquí está tu pedido; honestamente yo también me estoy cansando de pegarlos tanto. Hoy si dije bastante, ¿no?.
Lady Dark: Dijiste tanto que apagaste mis quejas, así que para reiterar: YO QUIERO NUEVOS CAPÍTULOS.
Lady Evil: Ya deja eso. *la golpea con un cojín* Empecemos con el fic.
©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©© Capítulo 12: ¡Cuidado con los platillos voladores!
Luego de la exhibición de lucha libre que realizó Suki con las tres porristas en media calle, decidieron que era bastante paseo y regresaron a la mansión; Aki estaba visiblemente enojado con Suki y se había negado a dirigirle la palabra en todo el camino de regreso, no es que ella lo notara, estaba demasiado orgullosa de la lección que acababa de dar como para prestar atención a algo más; pero los demás si lo notaron.
Llegó la hora de la cena, y como manada se dirigieron todos al comedor; y por una vez, desde la llegada de los "invitados", Kai podía ir tranquilo a comer sin tener a Suki pegada a él como una guacamaya del hombro (N/A: Nos tomamos la libertad de tomar prestado esa analogía), ya que ella al fin se percató de que Aki estaba enojado con ella por lo de Mina, Tina y Nina o como diantres sea, por lo que se había entablado con él en una batalla de miradas.
Se sirvió un enorme festín en la mesa (N/A: Extraño, ¿no?) y Tyson estaba en el cielo ante la oportunidad de comer tanto, no bien hubieron dado las gracias, comenzó a comer como loco.
- Esto está delicioso - se le medio logró entender a Max, que trató de hablar con la boca llena de comida. Suki hizo una cara de exasperación ante esa falta de modales y preparó la retahíla habitual de sermones respecto a los buenos modales.
- Max, o como te llames, las personas educadas no hablan con la boca llena de comida, eso solo lo hacen los caballos.
- Tú no eres mucho para hablar de buenos modales - le dijo irónicamente Tyson, mostrándole la lengua llena de puré.
- ¿Quieres decir.? - le respondió Suki, muy política, pero claramente enojada y asqueada con Tyson, porque, ahora no solo eran los malos modales, sino el obvio insulto.
- Pues - comenzó Aki, que estaba claramente de mal humor - una jovencita que le rompa los dientes a otra dama con una patada voladora, sin tener la menor provocación, no puede sermonear respecto a malos modales.
- Sin ningún motivo, ¿ehh? - le regresó Suki - ¿Qué tal si yo te muelo los dientes sin ningún motivo?
Los demás ya estaban empezando a ponerse muy nerviosos ante la posibilidad de tener que llamar una ambulancia para Aki, bueno, todos menos Kai, que parecía tan fresco como una lechuga pese a las amenazas que volaban alrededor.
- Ves - continuó Aki - eso es lo que quiero decir, no bien te digo una frase y ya me amenazas. Suki, tienes que encontrar métodos menos violentos para resolver tus diferencias con las personas.
- ¿Menos violentos? Bien, y que te parece esto - y con esa frase, Suki agarró uno de los pastelitos del carrito de postres que acaba de llegar, y lo arrojó, con tal tino que pegó justo en la cara de Aki y lo hizo ver como un payaso de circo.
Después de eso, se desató el pandemonium. Los Bladebreakers aún no se recuperaban de la impresión que les causó el ataque de Suki, cuando Aki cogió el plato de pasta que tenía ante él y lo arrojó con todas sus fuerzas, pero con tan mala puntería que en lugar de darle a Suki, le dio a Rei de plano en la cara. Y eso fue, Rei le lanzó la carne a Aki, pero le dio a Tyson, que, después de dejar de sollozar por la comida desperdiciada, cogió el puré de Max y se lo arrojó a Suki; ella será agil, pero no es Flash, y se le embarró todo el pelo. Suki enloqueció con eso, cogió una tarta de chocolate, pero esta vez le pegó tanto a Kenny como a Tyson.
Por el aire iban volando pasteles, sopas, carnes de pollo, cerdo, res, pescado; ensaladas, refrescos, lasagna, salsas, etc, etc, etc. En otras palabras, una lista tan innumerable como el menú de un restaurante; y entre toda esta comida voladora, Kai estaba de lo más tranquilo, masticaba sin prisa su bistec, esquivando de tanto en tanto un pedazo de pastel que casi le rozaba la oreja o algo así; bebía su refresco, ignorando los aullidos de Tyson cuando Suki le echó encima la sopa, y luego cuando fue Max el que le arrojó un pichel lleno de refresco helado.
Cuando al fin llegó el mayordomo Ota, a averiguar preocupado que era lo que pasaba, porque los ruidos y gritos podían ser usuales en la casa cuando Suki visitaba, pero nunca tanto y casi nunca tan extendidos; abrió las puertas del comedor y se quedó frió en su sitio; el amo Akira, la señorita Asuka y todos sus invitados, estaban llenos de pies a cabeza de todo lo que se había servido en la cena, la mesa era un asqueroso desastre y todas las alfombras, tapices y muebles que habían en la habitación estaban llenos de tantos tipos de comida que sería imposible sacar todas las manchas.
- El amo Voltaire se va a volver loco - murmuró.
- No te preocupes - le dijo Kai que se acababa de parar de la mesa, y para asombro del mayordomo, no parecía ser víctima de la batalla campal que aún se desataba - Si él llega a preguntar, no tienes más que apuntar a los perpetradores, Asuka y mi hermano.
- ¿QUÉ? - exclamó Aki, que se acaba de detener, cosa que no hizo Tyson, que arrojó una tarta de frutas que pegó justo en la solapa del traje de Ota.
- Lo que quiero decir - continuó Kai, dirigiéndose al grupo, que ya se había detenido - es que cuando nuestro abuelo llegue mañana temprano y vea el desastre que ustedes hicieron aquí, los únicos que van a recibir la culpa son ustedes dos.
- Oppsss. Sabes Aki, creo que deberíamos hacer una tregua - dijo nerviosa Suki.
- Estoy de acuerdo. Saben - dijo esta vez Aki - creo que deberíamos irnos a dormir ya.
- No podías tener mejor idea hermano - le dijo Kai con sarcasmo.
- No crees que deberíamos ayudar a limpiar - Kenny trató de arreglar un poco las cosas.
-Si, después de todo, la mayor parte lo arrojamos nosotros - dijo algo avergonzado Tyson.
- No tiene sentido chicos - les trató de calmar Aki - Dejemos que Ota y las sirvientas traten de limpiar, ellos saben como hay que tratar a los muebles para quitar las manchas.
- Si tú lo dices - le dijo Rei.
- Vamos, ya dejen esas tonterías y vayan a dormir, así se irán más rápido - dijo Kai con un tono de aburrimiento.
Entendiendo que no había nada más que hacer, los demás se quitaron de encima todos los restos de comida que pudieron, y se quitaron los zapatos para no manchar más las alfombras en su camino a las habitaciones.
©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©
Lady Dark: Este capítulo fue inspiración súbita, ¿saben?.
Lady Evil: Y eso que no tenemos inspiración *empieza a llorar sobre Dark*
Lady Dark: Eso se nota, considerando que este debe de ser el capítulo más corto que jamás hemos escrito.
Lady Evil: El próximo debe ser más interesante.
Lady Dark: Eso está raro, yo no tengo ni idea de los que vamos escribir después.
Lady Evil: Ya deja de quejarte. Envíen sus críticas.
Lady Evil: Yo, yo, yo...
Lady Dark: Saben, este capítulo es para reventar los últimos cartuchos de mi inspiración, si el FOX Kids no empieza a pasar pronto capítulos nuevos, creo que me voy a volver loca.
Lady Evil: Tengo que hacer un anuncio. Primero: ¡Ahhhhhh! ¿Por qué no ponen más capítulos? ¿Por quéeee?. Segundo: Para aquellos que se pregunten cuál es la sorpresa del final, ¡ES SORPREEEESA!; lo único que les puedo decir es que tiene que ver con Suki. Y, por último: para el que pidió (¿Clow?) que alejáramos un poco a Suki de Kai, aquí está tu pedido; honestamente yo también me estoy cansando de pegarlos tanto. Hoy si dije bastante, ¿no?.
Lady Dark: Dijiste tanto que apagaste mis quejas, así que para reiterar: YO QUIERO NUEVOS CAPÍTULOS.
Lady Evil: Ya deja eso. *la golpea con un cojín* Empecemos con el fic.
©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©© Capítulo 12: ¡Cuidado con los platillos voladores!
Luego de la exhibición de lucha libre que realizó Suki con las tres porristas en media calle, decidieron que era bastante paseo y regresaron a la mansión; Aki estaba visiblemente enojado con Suki y se había negado a dirigirle la palabra en todo el camino de regreso, no es que ella lo notara, estaba demasiado orgullosa de la lección que acababa de dar como para prestar atención a algo más; pero los demás si lo notaron.
Llegó la hora de la cena, y como manada se dirigieron todos al comedor; y por una vez, desde la llegada de los "invitados", Kai podía ir tranquilo a comer sin tener a Suki pegada a él como una guacamaya del hombro (N/A: Nos tomamos la libertad de tomar prestado esa analogía), ya que ella al fin se percató de que Aki estaba enojado con ella por lo de Mina, Tina y Nina o como diantres sea, por lo que se había entablado con él en una batalla de miradas.
Se sirvió un enorme festín en la mesa (N/A: Extraño, ¿no?) y Tyson estaba en el cielo ante la oportunidad de comer tanto, no bien hubieron dado las gracias, comenzó a comer como loco.
- Esto está delicioso - se le medio logró entender a Max, que trató de hablar con la boca llena de comida. Suki hizo una cara de exasperación ante esa falta de modales y preparó la retahíla habitual de sermones respecto a los buenos modales.
- Max, o como te llames, las personas educadas no hablan con la boca llena de comida, eso solo lo hacen los caballos.
- Tú no eres mucho para hablar de buenos modales - le dijo irónicamente Tyson, mostrándole la lengua llena de puré.
- ¿Quieres decir.? - le respondió Suki, muy política, pero claramente enojada y asqueada con Tyson, porque, ahora no solo eran los malos modales, sino el obvio insulto.
- Pues - comenzó Aki, que estaba claramente de mal humor - una jovencita que le rompa los dientes a otra dama con una patada voladora, sin tener la menor provocación, no puede sermonear respecto a malos modales.
- Sin ningún motivo, ¿ehh? - le regresó Suki - ¿Qué tal si yo te muelo los dientes sin ningún motivo?
Los demás ya estaban empezando a ponerse muy nerviosos ante la posibilidad de tener que llamar una ambulancia para Aki, bueno, todos menos Kai, que parecía tan fresco como una lechuga pese a las amenazas que volaban alrededor.
- Ves - continuó Aki - eso es lo que quiero decir, no bien te digo una frase y ya me amenazas. Suki, tienes que encontrar métodos menos violentos para resolver tus diferencias con las personas.
- ¿Menos violentos? Bien, y que te parece esto - y con esa frase, Suki agarró uno de los pastelitos del carrito de postres que acaba de llegar, y lo arrojó, con tal tino que pegó justo en la cara de Aki y lo hizo ver como un payaso de circo.
Después de eso, se desató el pandemonium. Los Bladebreakers aún no se recuperaban de la impresión que les causó el ataque de Suki, cuando Aki cogió el plato de pasta que tenía ante él y lo arrojó con todas sus fuerzas, pero con tan mala puntería que en lugar de darle a Suki, le dio a Rei de plano en la cara. Y eso fue, Rei le lanzó la carne a Aki, pero le dio a Tyson, que, después de dejar de sollozar por la comida desperdiciada, cogió el puré de Max y se lo arrojó a Suki; ella será agil, pero no es Flash, y se le embarró todo el pelo. Suki enloqueció con eso, cogió una tarta de chocolate, pero esta vez le pegó tanto a Kenny como a Tyson.
Por el aire iban volando pasteles, sopas, carnes de pollo, cerdo, res, pescado; ensaladas, refrescos, lasagna, salsas, etc, etc, etc. En otras palabras, una lista tan innumerable como el menú de un restaurante; y entre toda esta comida voladora, Kai estaba de lo más tranquilo, masticaba sin prisa su bistec, esquivando de tanto en tanto un pedazo de pastel que casi le rozaba la oreja o algo así; bebía su refresco, ignorando los aullidos de Tyson cuando Suki le echó encima la sopa, y luego cuando fue Max el que le arrojó un pichel lleno de refresco helado.
Cuando al fin llegó el mayordomo Ota, a averiguar preocupado que era lo que pasaba, porque los ruidos y gritos podían ser usuales en la casa cuando Suki visitaba, pero nunca tanto y casi nunca tan extendidos; abrió las puertas del comedor y se quedó frió en su sitio; el amo Akira, la señorita Asuka y todos sus invitados, estaban llenos de pies a cabeza de todo lo que se había servido en la cena, la mesa era un asqueroso desastre y todas las alfombras, tapices y muebles que habían en la habitación estaban llenos de tantos tipos de comida que sería imposible sacar todas las manchas.
- El amo Voltaire se va a volver loco - murmuró.
- No te preocupes - le dijo Kai que se acababa de parar de la mesa, y para asombro del mayordomo, no parecía ser víctima de la batalla campal que aún se desataba - Si él llega a preguntar, no tienes más que apuntar a los perpetradores, Asuka y mi hermano.
- ¿QUÉ? - exclamó Aki, que se acaba de detener, cosa que no hizo Tyson, que arrojó una tarta de frutas que pegó justo en la solapa del traje de Ota.
- Lo que quiero decir - continuó Kai, dirigiéndose al grupo, que ya se había detenido - es que cuando nuestro abuelo llegue mañana temprano y vea el desastre que ustedes hicieron aquí, los únicos que van a recibir la culpa son ustedes dos.
- Oppsss. Sabes Aki, creo que deberíamos hacer una tregua - dijo nerviosa Suki.
- Estoy de acuerdo. Saben - dijo esta vez Aki - creo que deberíamos irnos a dormir ya.
- No podías tener mejor idea hermano - le dijo Kai con sarcasmo.
- No crees que deberíamos ayudar a limpiar - Kenny trató de arreglar un poco las cosas.
-Si, después de todo, la mayor parte lo arrojamos nosotros - dijo algo avergonzado Tyson.
- No tiene sentido chicos - les trató de calmar Aki - Dejemos que Ota y las sirvientas traten de limpiar, ellos saben como hay que tratar a los muebles para quitar las manchas.
- Si tú lo dices - le dijo Rei.
- Vamos, ya dejen esas tonterías y vayan a dormir, así se irán más rápido - dijo Kai con un tono de aburrimiento.
Entendiendo que no había nada más que hacer, los demás se quitaron de encima todos los restos de comida que pudieron, y se quitaron los zapatos para no manchar más las alfombras en su camino a las habitaciones.
©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©©
Lady Dark: Este capítulo fue inspiración súbita, ¿saben?.
Lady Evil: Y eso que no tenemos inspiración *empieza a llorar sobre Dark*
Lady Dark: Eso se nota, considerando que este debe de ser el capítulo más corto que jamás hemos escrito.
Lady Evil: El próximo debe ser más interesante.
Lady Dark: Eso está raro, yo no tengo ni idea de los que vamos escribir después.
Lady Evil: Ya deja de quejarte. Envíen sus críticas.
