Konnichi wa minna-san. Este es el primer fic de Inuyasha que hago la verdad hubiese querido escribir de otro tema pero algo me impulsó a sacar este primero si me matan u otra cosa creo que lo entenderé y dejaré de escribirlo. Sin embargo, yo creo que este fic promete aunque sea algo un poco triste

Esta es una re-edición y he corregido unas cuantas cositas por ahí. Muchas gracias a todos los que me han escrito y tendré en cuenta sus opiniones para lo que siga de la historia y otras que empiezo a maquinar(jaja Akari-chan empieza a reír como mala)...eh creo que me exalté. Hasta la próxima.

HALF BREED: CONSECUENCIAS DE SER MESTIZO

By Akari-chan

Capítulo 1: La  frialdad de la noche

Era una noche fría y mientras todos dormían un joven vestido de rojo bajó del árbol donde había estado todo el tiempo vigilando a sus compañeros de viaje.

Inuyasha se acercó lentamente a la fogata, que aún emanaba un fuerte calor. Miró hacia donde estaba Kagome, ella estaba dentro de su bolsa de dormir...descansando del largo viaje que ella, Miroku, Sango, Shippo y él habían emprendido para conseguir los fragmentos de la perla de Shikon. Inuyasha se quedó un buen rato mirándola y luego pasó a mirar al pequeño kitsune que dormía cálidamente entre sus brazos, como si ella fuera su madre. El joven hanyou desvió ligeramente la mirada para mirar fijamente al fuego  y luego se quedó pensativo.

- Ofukuro... – murmuré, aún mirando fijamente al fuego.

- ¿Inuyasha? – me preguntó una voz femenina.

- ¿Estabas despierta? -  le pregunté un tanto sorprendido por su inesperada intervención en mis pensamientos – pensé que todos ya se habían dormido.

- ¿Qué haces? – dijo Kagome mientras se sentaba sobre su bolsa de dormir, por supuesto cuidando de no despertar a Shippo ya que el solía dormir casi todas las noches a su lado.

- Nada – respondí aún pensativo, lo cual le pareció raro a Kagome...creo, por eso tal vez sin querer le dije más cosas  – sólo pensaba un poco...en ofukuro.

- Es cierto – respondió ella mientras cruzaba sus brazos alrededor de sus rodillas – tú no hablas mucho de ella.

- ...- no le pude decir nada sólo atiné a asentir ligeramente con la cabeza.

- ¿Odias a los humanos por ser débiles, verdad? – me preguntó mirando al suelo como si en alguna forma esa pregunta le doliese. A mí me sorprendió que la hiciera.

- Si crees que alguna vez la odié por ser humana estás equivocada – le respondí sin dudar un segundo.

- Pero a ti no te gusta tu mitad humana – comentó – por eso odias ser un hanyou y quieres convertirte en un poderoso youkai. – no sé porqué pero me pareció que Kagome sintió cierta tristeza que no comprendí, después de todo ser un demonio de pura sangre no es tan malo si es que uno quiere ser más fuerte.

- Kagome no me digas hanyou – le dije con el ceño fruncido y ella sólo me miró sorprendida por mi reacción, seguro pensando que era porque odiaba esa palabra que para muchos era sinónimo de debilidad, la verdad detestaba esa palabra no sólo porque fuera una debilidad  la odiaba porque me acompañó desde mi niñez en situaciones que yo no comprendía y que hizo sufrir a ofukuro y a mí.

- Pero siendo un hanyou...

- Feh... – gruñí en señal de disconformidad – no sé porqué dices esas cosas... – exclamé para que les restara importancia, pero ella sólo se quedó callada mientras me veía – es mejor que duermas porque no me importa cómo estés mañana de cansada de todas maneras te sacaré  de esa bolsa de dormir apenas amanezca – pronuncié señalándola en tono amenazador.

- Grosero – me dijo –  y yo que me molesto en preguntarte qué es lo que tienes para que me contestes así – respondió molesta, la verdad no sé qué le molestó, después de todo esta es mi forma de hablar. Luego bruscamente se dio vuelta y se acostó para poder dormir nuevamente y mientras abrazaba a Shippo algunas escenas de mi infancia volvieron a mi memoria como cuando ofukuro con el mismo cariño me abrazaba entre sus brazos...

Yo era aún pequeño, apenas tenía ocho años, para entender lo que pasaba a mi alrededor, sólo sabía que ofukuro me amaba mucho. Ella era una mujer muy hermosa y tierna pero yo sabía, aunque tratara ocultarlo cuando me encontraba cerca de ella, que también estaba triste.

Un día  yo caminaba  tomado de su mano por la villa. Ella mirando al frente y yo feliz que saliéramos a pasear, ya que no acostumbrábamos salir mucho. Mientras pasábamos por algunas chozas pude distinguir algunos murmullos de los aldeanos, mis orejas se movieron ligeramente,  palabras como "mestizo" "hanyou" "youkai" "impuros" y otras más que ahora no recuerdo con exactitud. Algunos padres obligaban a sus hijos a entrar en sus viviendas y sentí que me miraban de manera extraña, eso me molestó.

Volteé mi mirada  "O...ofukuro..."le dije.

Quería preguntarle que eran esas palabras extrañas que había escuchado. Ella giró su mirada hacia abajo y vi en sus ojos tristeza, acarició mi cara con sus cálidas manos.

"Inuyasha ¿no querías ir a jugar al lago?" yo asentí a su pregunta "Entonces no hay que demorarnos mucho o se hará muy tarde" me dijo de manera tierna y le sonreí animado. No me importaba qué pasara a mi alrededor mientras ella estuviera conmigo...o por lo menos no en esos momentos.

Mis orejas temblaron un poco y me solté de ofukuro para correr hacia el puente que cruzaba el río e iba hacia el bosque. Yo no entendía muy bien pero estar allí me hacia sentir bien y sentía como la sangre que corría por mis venas empezaba a hervir cada vez que intentaba treparme a un árbol o atrapar algún insecto o a pequeños animales.

Pasaron algunas horas y mientras clavaba mis garras en la corteza de los árboles me di cuenta que ofukuro miraba fijamente al cielo, que se tornaba obscuro ya por la noche, ella siempre solía mirar al cielo como esperando que sucediera algo o que viniera alguien, gruñí en disconformidad. Quise llamar su atención así que subí al árbol "¡¡Mírame!!" exclamé con una frágil sonrisa que dejaba entrever mis colmillos. Salté y me arrojé hacia el lago.

El agua estaba fría y empecé a moverme difícilmente en ella "No puedo nadar" exclamé. En realidad estaba jugando porque quería llamar su atención, pero ella lo tomó muy en serio y pude distinguir a pesar de la oscuridad sus horrorizados ojos que hicieron que mi cuerpo se estremeciera.

"¡¡Inuyasha!!" gritó corriendo hacia el lago "¡¡Sal del agua!!" rápidamente llegaron algunos hombres que seguramente regresaban a la aldea después de haber cazado por los alrededores.

"¿Qué es lo que sucede?" preguntó uno en respuesta a los gritos de mi madre. Me di cuenta que eran dos cazadores de la villa donde vivíamos.

"Douzo, ayuden a mi hijo" suplicó volviéndose hacia ellos con lágrimas en los ojos,

"Pero si es el hanyou que vive en la aldea" murmuró el segundo.

"Mujer, deja que se ahogue así por lo menos te aliviaras de la desgracia de cargar con el cachorro de un youkai" "Además, si lo dejamos vivir cuando crezca será una amenaza para todos" Yo me empezaba a enfurecer no me gustaba el tono que estaban usando con ella. Creo que mi ofukuro se dio cuenta que no la iban a ayudar así que quiso meterse ella misma al lago y sacarme de allí. Ella seguía derramando amargas lágrimas por sus blancas mejillas, me di cuenta que esto para ella no era un juego así que decidí salir del agua y no preocuparla más.

"¡Detente mujer!" gritó el primero mientras la jalaba bruscamente del brazo "el agua está helada y no vale la pena mojarse por salvar a ese hanyou" el otro cazador la jaló del otro brazo...La estaban lastimando "después de todo no le esperaba una vida digna"

"¡¡Déjenme!!" sollozaba "es mi hijo...". Salí lo más rápido que pude del agua y clave mis pequeñas pero afiladas garras en los brazos de ambos hombres...No iba a permitir que la siguieran tratando de esa forma. Me puse delante de ella tratando de defenderla.

"¡No la toquen!" gruñí y mostré con furia mis colmillos. Aunque era un niño no iba a permitir que pusieran sus sucias manos sobre ella ni que le hablaran en ese tono aunque no supiese con exactitud que es lo que habían querido decir con esas palabras "youkai" o "hanyou" , las cuales retumbaban en mi cabeza.

"El cachorro salió del agua" comentó el segundo cazador frunciendo el ceño "No importa si no se ahogó, porque ambos de todas formas acabaremos con él ahora" Yo me preparé para recibir lo que viniera y extendí aún más las garras de mis manos, preparándolas a ellas también para cualquier movimientos de esos sujetos. La verdad por un lado sentí la sangre hervir de emoción como si hubiese estado esperando largo tiempo para que se me presentara una oportunidad así y demostrar mis fuerzas, pero por otro sentí miedo...Miedo de perder, de perder a ofukuro y perder la vida.

"o...ofukuro..."murmuré "quédate detrás de mí, yo te protegeré" sentí que ella me quería decir algo y sentí su angustia, yo sabía que no quería que yo saliera lastimado.

"...Mocoso...tú no debiste nacer" me dijo uno de los tipos en tono amenazador para después lanzar su puño contra mí. Yo lo esquive y estaba listo para acertarle mis garras una vez más; sin embargo, sin darme cuenta el otro hombre me sorprendió por atrás cogiéndome con ambos brazos e inmovilizándome.

"¡Suéltame!" le exigí, pero sólo se rieron.

"Ya sabía, a pesar de ser mestizo tiene esa arrogancia característica..." Ofukuro empezó a golpear al hombre que me sostenía y por más enérgicos que fueron sus golpes no logró nada más que enfurecerlo lo cual produjo que este la lanzara abruptamente al duro suelo. No sé cómo, pero me desesperé  tanto que me liberé de la prisión del abrazo ese; sin embargo, apenas salté al suelo me recibió un golpe en el estómago. Caí adolorido, pero no me iba a rendir así que salté y mordí en el cuello al hombre que me había golpeado este gritó y yo lo solté antes de que me pudiera golpear otra vez.

"Soy pequeño, pero no permitiré que nos lastimen" exclamé para después escupir los restos de sangre de aquel sujeto.

"No podemos permitir que un hanyou viva con nuestros propios hijos...Es un riesgo para todos" exclamó el otro sujeto mirando a ofukuro como si la estuviera reprochando. Me distraje por un momento, sólo fue un momento lo juro, pero fue suficiente para ellos como para agarrarme y sin ningún tipo de medimiento someterme y golpearme unas cuantas veces para luego acercarme al lago...creo que ofukuro  ya veía sus intenciones y se paró en medio de ellos...Siempre luchando.

"No pueden hacer esto..."dijo con la voz resquebrajada tratando de apartarme de ellos "Es sólo un niño...no ha hecho nada".

"Lo único que sabemos es que es un hanyou, eso es suficiente, y no puede estar..." no llegué a escuchar lo último porque sentí la fría agua en mi cabeza, cubriéndomela toda. Respiré un poco de agua y cuando me sacaron, que fue sólo por un momento, empecé a toser. Pero me volvieron a sumergir. Yo luchaba por zafarme de sus toscos brazos, pero tenía que aceptarlo a pesar de mis desesperados movimiento ellos eran un poco más fuertes que yo.

No me di cuenta en qué momento, pero unos delicados brazos me cobijaron calurosamente en un abrazo y no me soltaron. Me di cuenta de que aquellos hombres habían parado de sumergirme y luego sentí el aire de la noche en mi cabeza y el delicado aroma de  ofukuro.

"Sólo te digo que ese mestizo traerá problemas a la aldea...y seguramente a ti también mujer si es que no te los ha causado ya" escuché decir a uno de los cazadores pues yo estaba casi desfalleciendo.

"Deberíamos acabar con él ahora" sugirió el otro a su compañero.

"La mujer no nos dejará" murmuró mientras miraba a ofukuro "y a pesar de que ha sido corrompida al estar con un youkai no estaría bien hacerle daño un  ser humano"

Ofukuro sólo miraba fijamente a esos hombres, escudriñando sus movimientos pero aún acariciándome tiernamente el rostro.

"¡Váyanse!" les exigió ella. Luego sentí que el olor de aquellos hombres se disipaba obviamente se estaban alejando y yo me pude tranquilizar. "Inuyasha" me susurró en mis pequeñas orejas. Me di cuenta que estaba llorando y sus lágrimas se deslizaban por sus mejillas y caían en mi cara empapándola toda y me sentí muy mal.

Pensé que me reprocharía por haberme metido al lago o querer pelear con aquellos hombres "...ofukuro..."le respondí abrazándola fuertemente "no me gustó que te hablaran así...¿por qué? ¿por qué nos sucede esto si no hemos hecho nada mal?" le pregunté débilmente. Yo no entendía porqué tanta crueldad ni ensañamiento con nosotros ni tampoco entendía que era lo que querían decir con "youkai" o "hanyou"; a pesar de que siempre le preguntaba a ella que significaban yo sabía que evitaba decírmelo.

"Nunca vuelvas a hacer eso" murmuró "Si te pasara algo a ti, yo no sabría que hacer" Me abrazó fuerte mientras yo apoyaba mi cabeza contra su pecho, como ella solía hacerlo para dormirme.

"Tenía que defenderte" le dije con una voz cansada.

"Te pareces tanto a tu otou-san..." balbuceo mientras apoyaba su mejilla en mi cabeza. No le dije nada, la verdad es que no hablaba  mucho de oyaji y cuando lo hacia se ponía triste así que yo evitaba preguntar por él.

"Ofukuro...¿te causo muchos problemas? ¿estás enojada conmigo? ¿es mejor ,como dijo ese hombre que no hubiese nacido?" pregunté casi cerrando los ojos, estaba muy cansado.

"Nunca pienses eso, estoy feliz de que hayas nacido y estés conmigo" respondió con un suave tono de voz  y acariciando mi cabeza plateada "ahora no pienses en eso sólo duerme". Es cierto, estaba cansado y  casi no sentía los golpes era como si mi cuerpo estuviera entumido lo único que podía sentir en ese momento eran su  abrazo, sus lágrimas y la cruel frialdad de aquella noche. 

Vocabulario Japonés:

Douzo: por favor

Hanyou: "han-" significa medio o mitad mientras que "you-" viene de "youkai". Así que tendríamos "medio youkai" o "mitad youkai"

Ofukuro: es una forma ruda de hablar y su equivalente sería "madre", Inuyasha utiliza esta forma para referirse a su madre(por alguna duda lo saqué del manga)

Okaa-san: pues ya saben es "madre" pero de una forma más respetuosa.

Otou-san: "padre" con cierto respeto.

Oyaji: Su equivalente sería padre y  tb es una forma ruda de hablar y dirigirse a su progenitor.

Youkai: podría ser traducido como "demonio"

Bueno, hice estas correcciones en especial porque Marineneko me preguntó si haha-ue no sería la forma adecuada en que Inuyasha se refiera a su madre así que me dio curiosidad y empecé a investigar. En el manga, por lo menos, Inuyasha se refiere a su madre como "ofukuro"...en japonés hay varias formas de referirse a "madre" y una de ellas tb es "haha-ue" y leyendo el manga un personaje llamado Shiori se refiere a su madre como "ka-chan"(la verdad no estoy segura si la palabra existía en esa época o Rumiko Takahashi lo quiso poner así). De todas formas espero haber aclarado algunas dudas y si tienen más dudas o preguntas o hasta para corregirme mándenme reviews que estaré gustosa de leerlos.