Capítulo 2: Las Intenciones de Zeros

Pronto llegaron a un lago donde decidieron descansar. Rina iba junto a Zelgadis y Amelia, mientras que Gaudi escuchaba cómo hablaban animadamente Sylphiel y Filia.

("Filia y Sylphiel se conocieron en la tienda de porcelana y de mazas de combate que montó Filia tras la batalla final. Sylphiel estaba buscando a Rina y a Gaudi y entró en la tienda con el objetivo de comprarle a Gaudi un detalle.

-Buenos días, quisiera comprar algo para regalar-dijo Sylphiel. -¿Va a ser para un chico, verdad?-de preguntó Filia -Sí, pero ¿cómo lo sabes?-dijo Sylphiel totalmente asombrada. -Lo veo en tus ojos-respondió Filia.- Y ¿bien? ¿Qué es lo que buscabas? -Pues la verdad es que no lo sé...-dijo Sylphiel. -¿Cómo es el chico?- preguntó Filia -Pues la verdad....es alto...-comenzó a decir Sylphiel mientras Filia empezaba a tener una horrible sospecha- rubio....muy inteligente....-Filia respiró aliviada-...y tiene una espada de luz muy parecida a esta por cierto- terminó de decir Sylphiel cogiendo una empuñadura de encima del mostrador.

Crash, a Filia se le había caído la vasija que tenían en sus manos.

-Es él...-dijo sin más Filia derrotada. -Oye Filia, ¿has visto mi espada de luz?- dijo Gaudi entrando sin darse cuenta de la visitante. -Sí, la tiene ella- dijo señalando a Sylphiel, que estaba tan emocionada que no podía ni moverse. -Perdona...- dijo Gaudi mirando a Sylphiel que no la había reconocido- esa espada es mía. -Sí, toma-dijo Sylphiel sonriendo, mientras Gaudi se empezaba a salir de la tienda. Pero justo antes de salir, Gaudi se dio la vuelta. -Oye...¿nos conocemos?, tu cara me suena mucho....-dijo Gaudi poniéndose cara a cara con Sylphiel mientras esta no dejaba de sonreír. -Vamos a ver Gaudi...encima que Sirios te devolvió la espada de luz como la hayas perdido te voy....-dijo Rina al entrar, callándose de pronto al ver a Sylphiel.-... ¡Pero bueno!, ¡qué sorpresa Sylphiel! ¿¡Que haces tu por aquí!? -¿¿¿Syl.... Sylphiel???- dijo Gaudi- ¡Anda pero si es verdad!. ¿Cómo estás?, ¡Cuánto tiempo! No... no te había reconocido- dijo Gaudi avergonzado. -Os estaba buscado. Pensé que salir un poco de mi ciudad me vendría bien.- dijo Sylphiel. -Bueno, pues ya nos has encontrado. Filia ven, esta es Sylphiel Nels Rada. Sylphiel esta es Filia Ul Copt.-dijo Rina -Mucho gusto-dijo Sylphiel. -Igualmente-dijo Filia -Por cierto Filia, nos acabamos de encontrar con Zelgadis y Amelia y vamos a acompañarlos para encontrar una cura para Zel, ¿quieres acompañarnos?-le preguntó Rina. -No, gracias. Estoy muy ocupada...-se excusó Filia. -¡Venga ya!, Filia pero si no vendes nada...-dijo Gaudi Plonc!!!! Filia ya le había sacudido un castañazo antes de que pudiese terminar -Te lo mereces Gaudi...pero eso no quita de que tenga razón. Vente con nosotros. -Vosotros ganáis-cedió por fin Filia. -¿Y que hay de ti Sylphiel?, ¿te vienes?-dijo Rina mientras Sylphiel asentía con la cabeza. -Bueno pues ya estamos todos-dijo Rina saliendo al encuentro con Amelia y Zelgadis")

En ocasiones, Filia se detenía como esperando algo pero agachaba la cabeza y continuaba andando.

-Filia, ¿esperas que aparezca alguien?- preguntó Sylphiel- lo digo porque cada vez que te paras y no sucede nada, siento como te entristeces. -Tal vez sea así Sylphiel- respondió Filia pero es que en ocasiones siento la presencia de Val. -Oye Filia, ¿quién es ese Val o Valgarv?-dijo Sylphiel. -Val es un dragón antiguo-dijo Filia -¡¿¡¿Qué?!?!, Creía que ya no quedaba ningún dragón antiguo. -De hecho, Val es el último de ellos. -Desde luego los dragones dorados cometieron un gravísimo error. ¿Cómo pueden llegar a exterminar a otros seres semejantes a ellos hasta el exterminio? Deben ser criaturas terribles, espero no encontrarme con ninguno.-dijo Sylphiel -Eso creo que no va a poder ser...-dijo Filia-yo soy uno de ellos. Soy una dragona dorada. -Es verdad, ya se lo oí decir a Zeros, pero tan solo permíteme preguntarte algo... ¿qué es lo que os impulsó a cometer tal genocidio?. -La verdad es que en un principio creí que los dragones dorados eran seres buenos y amables, pero poco a poco fui descubriendo que eso no era así. Fue el miedo lo que nos impulsó a atacar... y por eso me culpo.-dijo Filia con la mirada clavada en el suelo. -Pero tú no fuiste la que atacaste...-intentó consolar Sylphiel. -No, pero no fui capaz de saber la verdad hasta hace poco...vivía una ilusión y eso me hace sentir que todo lo que he vivido es falso. -No seas tan dura contigo misma.-le dijo Sylphiel- Oye Filia, hablando de dragones... qué es lo que sientes por Valgarv?, ¿es amor, pena amistad o compasión? No respondas si no quieres. -Bueno...la verdad...-entredijo Filia sintiendo como sus mejillas tomaban color- Val es como un hermano para mí, es algo muy especial. -Filia, si me aceptas un consejo, antes de decir que es lo que sientes, deberías meditar y sincerarte contigo misma.-le aconsejó Sylphiel tiernamente. -¡Je!, es decir, ¿para cuando la boda?- dijo Gaudi.

En aquel momento, la cola de Filia saltó por debajo de su falda rosa, a la vez que llevaba su mago a la pierna izquierda echando mano a su maza. La maza silbó en el aire provocando que Gaudi se convirtiese en un hombre-bala que salió disparado hacia arriba. -¡Quietos! Gritó Zelgadis-he oído algo. -Voy a ver-dijo Rina-¡Levitación!

Rina ascendió por encima del nivel de los árboles seguida de Amelia.

-Hay explosiones-les comunicó Amelia- ¡Vamos a ver!-dijo Gaudi.

Zelgadis y Sylphiel elevaron a Gaudi alcanzando a Rina y a Amelia.

-¿Y Filia?-preguntó Amelia. -Tranquila Amelia, Filia sabe cuidarse sola-respondió Rina.

Pronto se situaron por encima del centro de las explosiones.

-Descendamos-sugirió Rina. -Espera Rina, observa, puede ser peligroso- dijo Zelgadis. -¡Que va!, Zelgadis deberías saber que soy una gran hechicera....

Una tremenda explosión provocó que Rina saliese volando por los aires al igual que el grupo. Zelgadis, Amelia y Sylphiel controlaron la caída, pero Rina y Gaudi fueron a parar al duro suelo. Lo que vieron les dejó helados. Zeros y Valgarv se encontraban inmersos en una terrible batalla.

-¿Qué te pasa Valgarv? Veo que has perdido mucho poder... ¿Por qué no te unes a nosotros, evitando así tu agonía y tu total destrucción?-dijo Zeros- Ya no eres ni la sombra de quien eras, no eres nadie, ni siquiera tú sabes quien eres... -¡Nooooooooo! ¡Cállate demonio!- dijo furioso Valgarv- Jamás me uniré a vosotros.

Valgarv estaba en muy mal estado, tanto física como mentalmente. Zeros en verdad se había empleado a fondo y sin medida. Tenía un brazo recogido y se apoyaba pesadamente en su bastón.

-¡Zeros!-gritó Rina-¿Qué se supone que estás haciendo? -¡Ah!, hola Rina, ¿qué tal?-respondió Zeros tranquilamente. -¡Eres un monstruo!-gritó Sylphiel al ver a Val en tan mal estado. -No te equivoques, el monstruo es él, además yo tan solo cumplo órdenes- dijo Zeros.

De pronto una gran bola de fuego impactó de lleno en Zeros haciéndole perder el equilibrio. Valgarv había aprovechado la interrupción para lanzar un ataque desesperado contra Zeros, pero tras el primer impacto Zeros había reaccionado para propinarle un puntapié a Valgarv y cuando se disponía a rematarlo, otro proyectil hizo que Zeros se separase de Val.

-Vaya, vaya, vaya....que sorpresa-dijo Zeros-mira quién viene en tu ayuda Valgarv...¿Qué tal Filia? -Zeros apártate de Val. ¡Ahora!-dijo furiosa Filia.-¡Y no se te ocurra probarme!

Zeros tras pensar un momento volvió a dirigir la mirada hacia Val. -Bueno, me parece que te has librado esta vez gracias a Filia. Ya hablaremos otro día...-le dijo Zeros a Val.

-Uff, creí que tendríamos que enfrentarnos a Zeros.-dijo Amelia respirando tranquila. -Esto aún no ha terminado-dijo Rina mientras miraba a Valgarv.

Valgarv estaba de rodillas e intentaba ponerse en pie sin éxito. -Val, déjame ayudarte...-dijo Filia desesperada. -¡Nooo! ¡Dejadme en Paz!-grito Valgarv-¡Sois todos unos traidores! ¡No os necesito...sobre todo tú, eres una de ellos! Nos teníais miedo y preferisteis un genocidio...-le gritó Valgarv a Filia haciendo que ella rompiese a llorar marchándose de inmediato.

Todos estaban inmóviles, cayados sin saber que hacer o decir... -Tal vez Zeros tenía razón... eres un...un... pero ¿cómo has podido decirle eso a Filia? Ella te ha salvado-le gritó Sylphiel saliendo detrás de Filia. -¡¿Qué me ha salvado?!, yo soy el último de mi raza gracias a los de su especie.-dijo Valgarv intentando levantarse y desplomándose inconsciente en el suelo.

Para la mente de Val todo era muy complicado. Tenía todos los recuerdos desde que Garv acabase con él y también tenía reciente tanto su unión y posterior liberación de DarkGav como la destrucción de su raza, pero también sentía agradecimiento hacia Filia por recogerlo tras su liberación. No sabía en quién confiar, que sentir, tan solo sabía que Filia había estado siempre dispuesta a ayudarlo y era la única que había creído en él, y ahora le tocaba a él creer en ella.