Hola este es mi primer fic. Yo creo que la idea es bastante original por
que en todos los fics que he leÃdo no he visto en ninguno en el cual se
cambiara de director y además algunas amigas mÃas me han dicho que es
bastante original: May, Paula, Necocha... Bueno no me enrollo más, espero
que os guste y que me dejéis review please.
5º LIBRO: EL NUEVO DIRECTOR
By: Lora chang
El encuentro
Eran las cinco de la madrugada y Harry Potter no podÃa dormir. Estaba muy nervioso por que no habÃa recibido noticias de ningún ataque de Voldemort o de sus mortÃfagos. Pensó que quizás Voldemort ya no matarÃa a más gente, pero enseguida se le fue esa idea de la cabeza por que era prácticamente imposible y pensó que seguramente estarÃa ideando un nuevo plan en todo este tiempo. Se asomó por la ventana y vio que habÃa la misma tranquilidad de siempre en Privet Dribe, excepto por la casa de la calle de la otra manzana deshabitada que ahora tenÃa luz en su interior. Dejó de mirar el paisaje y entró de nuevo en su despreciable habitación. Como no podÃa dormir se puso a jugar al quiditch electrónico que le habÃa regalado Ron por su cumpleaños y que estaba hecho por el señor Weasley especialmente para Harry. Y cómo no, se alumbró con la lámpara en forma de 2002 que le habÃa regalado Hermione también por su cumpleaños.
Se hicieron las 8 de la mañana y empezaron a sonar por la casa los pesados pasos de su primo Dudley. Harry decidió bajar a desayunar. Y le recibieron con el mismo saludo de todas las mañanas:
- Haz el desayuno-.
Harry se puso a hacerlo refunfuñando. Después de desayunar decidió subir a su habitación y seguir jugando al quiditch electrónico , pues habÃa dejado una partida sin terminar. Pero la voz de su tÃa resonó en toda la casa:
-¡¡ Vete a comprar el pan!!.
A Harry le sorprendió mucho pues casi nunca le dejaban salir de casa, pero claro ellos estaban demasiado ocupados como para ir a la panaderÃa de la otra manzana, ya que su tÃa habÃa agarrado el teléfono y eso querÃa decir que su conversación durarÃa toda la mañana. Asà que Harry no tenÃa más remedio que ir.
Fue a la panaderÃa y a la vuelta estaba tan ensimismado en sus pensamientos de lo largo que se le estaba haciendo el verano que no se dio cuenta de que chocaba contra alguien. Cuando se dio cuenta, miró a la persona contra la que habÃa chocado que estaba agachada en el suelo recogiendo los libros. Era una chica bastante guapa: pelo moreno, ojos marrón verdoso, piel morena...
Le ayudó a recoger los libros que se le habÃa caÃdo y le dijo:
- Discúlpame no me di cuenta.
Y la chica respondió:
- No pasa nada yo también estaba pensando en otras cosas mientras que caminaba.
Y él dijo:
- ¿ Cómo te llamas?
-Silvia RÃos. ¿ Y tú?- respondió ella.
-Harry Potter.
Por un momento Harry creyó que ver que los ojos de Silvia se dirigÃan hacia su frente, pero no, solo era una simple muggle. Y le dijo:
-¿ Dónde vives?
-En Tirty Duy- respondió.
-¡Pero si eso está a una manzana de mi casa! Te acompaño- respondió Harry entusiasmado.
-Vale si no es ninguna molestia.
Por el camino hacÃa la casa de Silvia ella le contó que se acababa de instalar en Tirdy Duy, que era española pero que su madre era inglesa y ella y su padre estaban instalados en la casa de su madre que murió hace cinco años. Y Harry le contó lo mal que le trataban sus tÃos y que vivÃa con ellos por que sus padres habÃan muerto cuando él era aun muy pequeño y sus parientes más cercanos eran ellos.
Por fin llegaron a la casa de Silvia. Era una casa preciosa toda hecha de madera, debÃa tener unas cinco habitaciones,tenÃa unas ventanas grandÃsimas, tres balcones y aunque parecÃa moderna Silvia le habÃa contado que fue hecha antes de nacer su madre ,asà que ya tendrÃa muchos años. Y entonces Silvia le sacó de sus pensamientos:
- Bueno ya hemos llegado. ¿ Quieres que quedemos mañana?
-Vale mi casa está nada más girar esta manzana en Privet Drive-respondió- ven a las siete que entonces ni mis tÃos ni mi primo estarán en casa.
- Bueno pues hasta mañana a las siete.
- Adiós.
Harry se fue muy contento hacÃa su casa y pensando que seguramente este verano se le iba a pasar más corto.
5º LIBRO: EL NUEVO DIRECTOR
By: Lora chang
El encuentro
Eran las cinco de la madrugada y Harry Potter no podÃa dormir. Estaba muy nervioso por que no habÃa recibido noticias de ningún ataque de Voldemort o de sus mortÃfagos. Pensó que quizás Voldemort ya no matarÃa a más gente, pero enseguida se le fue esa idea de la cabeza por que era prácticamente imposible y pensó que seguramente estarÃa ideando un nuevo plan en todo este tiempo. Se asomó por la ventana y vio que habÃa la misma tranquilidad de siempre en Privet Dribe, excepto por la casa de la calle de la otra manzana deshabitada que ahora tenÃa luz en su interior. Dejó de mirar el paisaje y entró de nuevo en su despreciable habitación. Como no podÃa dormir se puso a jugar al quiditch electrónico que le habÃa regalado Ron por su cumpleaños y que estaba hecho por el señor Weasley especialmente para Harry. Y cómo no, se alumbró con la lámpara en forma de 2002 que le habÃa regalado Hermione también por su cumpleaños.
Se hicieron las 8 de la mañana y empezaron a sonar por la casa los pesados pasos de su primo Dudley. Harry decidió bajar a desayunar. Y le recibieron con el mismo saludo de todas las mañanas:
- Haz el desayuno-.
Harry se puso a hacerlo refunfuñando. Después de desayunar decidió subir a su habitación y seguir jugando al quiditch electrónico , pues habÃa dejado una partida sin terminar. Pero la voz de su tÃa resonó en toda la casa:
-¡¡ Vete a comprar el pan!!.
A Harry le sorprendió mucho pues casi nunca le dejaban salir de casa, pero claro ellos estaban demasiado ocupados como para ir a la panaderÃa de la otra manzana, ya que su tÃa habÃa agarrado el teléfono y eso querÃa decir que su conversación durarÃa toda la mañana. Asà que Harry no tenÃa más remedio que ir.
Fue a la panaderÃa y a la vuelta estaba tan ensimismado en sus pensamientos de lo largo que se le estaba haciendo el verano que no se dio cuenta de que chocaba contra alguien. Cuando se dio cuenta, miró a la persona contra la que habÃa chocado que estaba agachada en el suelo recogiendo los libros. Era una chica bastante guapa: pelo moreno, ojos marrón verdoso, piel morena...
Le ayudó a recoger los libros que se le habÃa caÃdo y le dijo:
- Discúlpame no me di cuenta.
Y la chica respondió:
- No pasa nada yo también estaba pensando en otras cosas mientras que caminaba.
Y él dijo:
- ¿ Cómo te llamas?
-Silvia RÃos. ¿ Y tú?- respondió ella.
-Harry Potter.
Por un momento Harry creyó que ver que los ojos de Silvia se dirigÃan hacia su frente, pero no, solo era una simple muggle. Y le dijo:
-¿ Dónde vives?
-En Tirty Duy- respondió.
-¡Pero si eso está a una manzana de mi casa! Te acompaño- respondió Harry entusiasmado.
-Vale si no es ninguna molestia.
Por el camino hacÃa la casa de Silvia ella le contó que se acababa de instalar en Tirdy Duy, que era española pero que su madre era inglesa y ella y su padre estaban instalados en la casa de su madre que murió hace cinco años. Y Harry le contó lo mal que le trataban sus tÃos y que vivÃa con ellos por que sus padres habÃan muerto cuando él era aun muy pequeño y sus parientes más cercanos eran ellos.
Por fin llegaron a la casa de Silvia. Era una casa preciosa toda hecha de madera, debÃa tener unas cinco habitaciones,tenÃa unas ventanas grandÃsimas, tres balcones y aunque parecÃa moderna Silvia le habÃa contado que fue hecha antes de nacer su madre ,asà que ya tendrÃa muchos años. Y entonces Silvia le sacó de sus pensamientos:
- Bueno ya hemos llegado. ¿ Quieres que quedemos mañana?
-Vale mi casa está nada más girar esta manzana en Privet Drive-respondió- ven a las siete que entonces ni mis tÃos ni mi primo estarán en casa.
- Bueno pues hasta mañana a las siete.
- Adiós.
Harry se fue muy contento hacÃa su casa y pensando que seguramente este verano se le iba a pasar más corto.
