1 Muchas más sorpresas
Antes de todo querÃa daros gracias a las personas que me han dejado review y que espero que por ahora les este gustando. Voy a contestar a los review que me habéis dejado, que en el anterior capÃtulo se me olvidó, ahora en vez de al final a si que ahà van las contestaciones:
Malgenio: he tratado de poner en este capÃtulo más descripciones y no tanta conversación. Espero que te guste.
Chu-lin: espero que no me hayan salido tantas faltas de ortografÃa y que te siga gustando.
Nekocha: gracias por dejarme review y espero que este capitulo no te parezca tan corto como el anterior.
Chu-cheng: lo siento por la intriga pero me parece que en este capÃtulo no se resuelven muchas dudas y he creado más. Gracias por ser la primera en leer mi fic.
May potter: haber si me dejas más review que solo me dejaste en el primero y aunque ya te he contestado lo de la lámpara no importa.
Bueno y ahora con el fic:
2 Muchas más sorpresas
Pasaron los dÃas y solo faltaba una semana para volver a Hogwarts. Todos los dÃas, Silvia, iba a visitar a Harry a las siete de la tarde y se habÃan hecho muy amigos ya que ahora ya no tenÃan que guardase ningún secreto el uno al otro.
Como todos los dÃas, Harry, a eso de las siete menos cinco, cuando sus tÃos ya se habÃan marchado, esperó ha Silvia impacientemente. Esta vez Silvia se estaba retrasando, pues ya hacÃa más de media hora que habÃan pasado de las siete. Como Harry no tenÃa nada que hacer se puso ha cotillear las revistas de su tÃa pero todas eran de cocina o de cotilleos y al poco tiempo se hartó de ellas.
Justo cuando dejaba la tercera revista sonó el timbre de la puerta.
¡¡ por fin!!- pensó Harry.
Abrió la puerta y Silvia en vez de entrar rápidamente como hacÃa siempre, se quedó parada en la puerta con las manos en la espalda y le dijo:
Lo siento Harry, me he retrasado por que he ido a un sitio- dijo ella- subamos a tu habitación que te he traÃdo una sorpresa.
Harry subió las escaleras muy inquieto. Antes de que entrara Silvia en su habitación ordenó lo más que pudo la habitación y le hizo pasar. No habÃa Silvia casi dos pasos dentro de su habitación cuando dijo:
Harry, es que cuando estuvimos en el callejón Diagon Ron me dijo que habÃa sido tu cumpleaños y yo como no lo sabÃa no te habÃa comprado nada- dijo.
No pasa nada, entonces tu y yo no nos conocÃamos â€"respondió Harry.
Ya pero como ahora somos tan buenos amigos no podÃa dejarte sin regalo de cumpleaños y te he comprado esto â€" dijo Silvia tendiéndole la mano.
Encima de la mano Harry pudo observar una cajita de color verde y dijo:
Oh! No deberÃas haberlo comprado- dijo Harry
No digas tonterÃas y ábrelo- dijo impaciente.
Ya voy, ya voy- dijo Harry disponiéndose a abrir la cajita.
Después de estar un rato intentando abrir la cajita, al fin la abrió y pudo observar dentro una especie de collar de plata con forma de cangrejo.
Gracias Silvia-dijo excitado- que collar tan bonito.
De nada- respondió- pero no es un simple collar. Se le llama detectamal y como bien indica su nombre detecta el mal cuando está cerca de ti. Te da un pellizco con las pinzas cuando pasa eso y si lo quieres parar solo tienes que tocarlo.
Oh! Es muy acertado porque seguro que alguien intentará matarme otra vez como dirÃa la profesora Trelawney- respondió riéndose a carcajadas
Y asà paso la tarde sin ningún incidente.
Por fin llegó el dÃa de volver a hogwarts. El tÃo de Harry la noche anterior le habÃa dicho que le llevarÃa a la estación. A Harry al principio le sorprendió un poco pero luego pensó que lo harÃa para librarse de él lo más pronto posible.
Asà que a altas horas de la madrugada Harry ya estaba despierto y con su mochila preparada.
Cuando faltaba hora y media para que saliera el tren , su tÃo decidió llevarle.
Cuando llegaron Harry observó que ahora la estación estaba más vacÃa que de costumbre, seguramente serÃa porque después de la aparición de Voldemort muchos padres habrÃan decidido no dejar que sus hijos siguieran en el colegio. La estación estaba mucho más bonita: la habÃan pintado toda de rojo y habÃan arreglado las papeleras y los bancos rotos.
Harry se dirigió hacia en andén nueve y tres cuartos y nada Más pasar un montón de pelirrojos aparecieron ante sus ojos y entre la multitud de pelirrojos habÃa una chica con el pelo menos alborotado que de costumbre.
Hola Harry- dijo Hermione.
Hola â€" respondió.
Ah! Pero si estás aquÃ. Te estábamos esperando-dijo Ron cuando supo de la presencia de su amigo- ¿ y Silvia?
Como no sabÃa a que hora vendrÃa le dije que siempre nos sentábamos en los asientos de detrás y ella dijo que acudirÃa allÃ- respondió.
Bueno pues entonces vamos dentro- dijo Hermione.
Entraron en el tren, donde habÃa el mismo bullicio de siempre: niños gritando, peleándose, corriendo...
Cuando estaban llegando a los últimos asientos Harry sintió que caÃa de bruces al suelo y después oyó una carcajada inconfundible; la de Draco Malfoy.
Lo siento, es que me estaba estirando, ha dado la casualidad de que pasabas por aquà y te has tropezado- dijo sin poder parar de reÃr.
Harry sacó su varita del bolsillo pero antes de que pudiera hacer algo sus dos amigos le detuvieron.
Harry tranquilo, que este niño sea un mimado de papá no significa que te tengas que rebajar a su altura- Dijo Hermione.
Sin hacer caso a las carcajadas de Malfoy se dirigieron a su asiento de siempre.
Pasaban los minutos y Silvia no aparecÃa. Después de media hora de espera el tren se puso en marcha.
Que raro. No sé dónde estará Silvia- dijo preocupado.
Tranquilo que seguro que le habrá surgido algo importante y vendrá por otro medio- dijo Ron.
Pero si nadie sabe donde está el colegio- dijo Herminio e preocupando aun más a Harry.
Ron le pegó un codazo para que se callara y siguieron hablando de otra cosa diferente para que Harry no estuviera todo el rato preocupado por Silvia, pero Harry estuvo todo el camino pensado donde se deberÃa haber metido Silvia.
Por fin llegaron a hogwarts. Harry se dirigió a saludar a Hagrid pero no estaba, seguramente aún no habrÃa vuelto del encargo que le habÃa hecho Albus Dumbledore.
Entraron al castillo y Dumbledore les dio la misma bienvenida de siempre con la diferencia de que este tenÃa la cara muy triste y cansada.
Luego pasaron al comedor. Como todos los años, estaba adornado por los escudos de todas las casas.
Se sentaron a la mesa y Harry observó que toda la cuberterÃa estaba hecha de plata y oro excepto los vasos que eran de cristal y tenÃa como adornos a cada uno de sus lados una cabeza de un tejón, un halcón, un león y una serpiente Después de diez minutos Dumbledore habló de nuevo:
Bienvenidos a este nuevo año en Hogwarts. Habréis observado que muchos sitios del comedor están libres. Eso es por que después del levantamiento de voldemort- hubo un estremecimiento en todo el comedor y Harry aprovechó para mirar si estaba cho- chang y vió que no estaba pero tampoco le importó mucho- Muchos padres no se han atrevido a traer a sus hijos al colegio por si era peligroso .Como todos los años os repito que está terminantemente prohibido ir al bosque prohibido si no se va acompañado de un profesor. Bueno ahora vamos a pasar a la ceremonia de elección.
Se abrió la puerta y apareció acompañando a los alumnos un señor alto y delgado, con los ojos verde oscuro y el cabello negro. A Harry le resultaba familiar pero no sabÃa de que y no le dio mucha importancia porque vio apareces detrás de él los nuevos alumnos y entre ellos estaba Silvia.
Fueron llamando uno a uno y por fin le tocó el turno a Silvia ya que estaba de los últimos por su apellidos.
Silvia RÃos- dijo McGonagall.
Silvia se acercó al sombrero seleccionador y se lo puso
Oh! Ya me enfrentado a varias persona como tú y todas han ido a la misma casa y pertenecen al mismo grupo. Asà que tu casa es:
¡¡¡¡¡ Gyffindor !!!-gritó el sombreo seleccionador.
Toda la mesa de Gryffindor se puso en pie y aplaudió y Silvia se sentó entre Ron y Harry.
Silvia ¿qué te ha pasado que has venido tan tarde?-preguntó Harry.
Es que mi padre tenÃa un asunto de negocios y no podÃa llevarme a la estación- respondió
¿ Y cómo has llegado si nadie sabe donde esta situado Hogwarts?- preguntó Hermione
Es que mi padre es amigo del director y él es el que nos a traÃdo hasta aquÃ- respondió Silvia.
Siguieron hablando sin prestar atención a la selección y Harry se dio cuenta del collar que llevaba Silvia: TenÃa forma de fénix y era de diferente color según como la pegara la luz. Le pareció bastante bonito pero no le dio ninguna importancia porque seguramente era un collar normal y corriente que se habrÃa comprado por España.
En ese momento el director se levantó y habló:
Bueno seguro que todos estáis ansiosos de empezar las clases y saber quien ocupará el puesto de profesor contra las artes oscuras y ese es Robert RÃos.
En ese momento se abrieron las puertas del comedor y apareció el padre de Silvia. Era de estatura normal y un poco gordo. TenÃa el cabello totalmente negro y sus ojos eran como los de Silvia. ParecÃa que no la afectaban las miradas que se dirigÃan hacia él porque saludó a todos los profesores y se sentó al lado de Dumbledore sin inmutarse.
Dumbledore continuó hablando:
Este año Hagrid no va a estar con nosotros- se sintieron varias risitas provinentes de la mesa de Slytherin- por eso va a estar con nosotros el profesor Bob Stoney que se encargará de sus clases. Todas las miradas se dirigieron hacia el chico que habÃa acompañado a los nuevos. Entonces Harry supo de que le resultaba tan familiar, era el jardinero de la casa de sus tÃos.
Una cosa que no afectará a muchos de vosotros es que este año la profesora de adivinación no estará con nosotros- se sintieron algunos sonidos de satisfacción-y su suplente algunos de vosotros la conocéis es Fleur Decalour.
Todas las miradas se posaron en ella ( una palangana por favor para todos los chicos) Llevaba el polo recogido en una trenza y lucÃa un traje azul oscuro con la pierna al aire.
Y mi última noticia es que los que vallan a hacer 5 curso tendrán una asignatura nueva muy útil: Medicinas contra hechizos que será dada por Mary Rune.
Mary Rune era una señora mayor, tenÃa el pelo plateado y unos ojos grises muy profundos.
-Bueno y ahora a comer- acabó Dumbledore.
Seguidamente aparecieron en los platos llenos de comida y se pusieron a cenar. En la cena Harry les contó de que conocÃa a Bob y todos se sorprendieron excepto Silvia y les dijo que le iba a preguntar que porque se habÃa hecho pasar por jardinero.
Cuando acabaron la cena se dirigieron a la sala común y estuvieron charlando hasta que uno de los prefectos les mandó a dormir.
Cuando apagaron la luz de la habitación Ron se durmió enseguida pero a Harry le costó dormirse porque estaba muy excitado por tantas sorpresas y porque mañana empezaban las clases de nuevo.
Bueno y asà acaba este capÃtulo. La verdad es que me ha salido más largo que el anterior y espero que os haya gustado. Por favor dejarme review que me gusta mucho leerlos y contestarlos. Gracias a todas las personas que me han dejado review una vez más y hasta el próximo capÃtulo.
Antes de todo querÃa daros gracias a las personas que me han dejado review y que espero que por ahora les este gustando. Voy a contestar a los review que me habéis dejado, que en el anterior capÃtulo se me olvidó, ahora en vez de al final a si que ahà van las contestaciones:
Malgenio: he tratado de poner en este capÃtulo más descripciones y no tanta conversación. Espero que te guste.
Chu-lin: espero que no me hayan salido tantas faltas de ortografÃa y que te siga gustando.
Nekocha: gracias por dejarme review y espero que este capitulo no te parezca tan corto como el anterior.
Chu-cheng: lo siento por la intriga pero me parece que en este capÃtulo no se resuelven muchas dudas y he creado más. Gracias por ser la primera en leer mi fic.
May potter: haber si me dejas más review que solo me dejaste en el primero y aunque ya te he contestado lo de la lámpara no importa.
Bueno y ahora con el fic:
2 Muchas más sorpresas
Pasaron los dÃas y solo faltaba una semana para volver a Hogwarts. Todos los dÃas, Silvia, iba a visitar a Harry a las siete de la tarde y se habÃan hecho muy amigos ya que ahora ya no tenÃan que guardase ningún secreto el uno al otro.
Como todos los dÃas, Harry, a eso de las siete menos cinco, cuando sus tÃos ya se habÃan marchado, esperó ha Silvia impacientemente. Esta vez Silvia se estaba retrasando, pues ya hacÃa más de media hora que habÃan pasado de las siete. Como Harry no tenÃa nada que hacer se puso ha cotillear las revistas de su tÃa pero todas eran de cocina o de cotilleos y al poco tiempo se hartó de ellas.
Justo cuando dejaba la tercera revista sonó el timbre de la puerta.
¡¡ por fin!!- pensó Harry.
Abrió la puerta y Silvia en vez de entrar rápidamente como hacÃa siempre, se quedó parada en la puerta con las manos en la espalda y le dijo:
Lo siento Harry, me he retrasado por que he ido a un sitio- dijo ella- subamos a tu habitación que te he traÃdo una sorpresa.
Harry subió las escaleras muy inquieto. Antes de que entrara Silvia en su habitación ordenó lo más que pudo la habitación y le hizo pasar. No habÃa Silvia casi dos pasos dentro de su habitación cuando dijo:
Harry, es que cuando estuvimos en el callejón Diagon Ron me dijo que habÃa sido tu cumpleaños y yo como no lo sabÃa no te habÃa comprado nada- dijo.
No pasa nada, entonces tu y yo no nos conocÃamos â€"respondió Harry.
Ya pero como ahora somos tan buenos amigos no podÃa dejarte sin regalo de cumpleaños y te he comprado esto â€" dijo Silvia tendiéndole la mano.
Encima de la mano Harry pudo observar una cajita de color verde y dijo:
Oh! No deberÃas haberlo comprado- dijo Harry
No digas tonterÃas y ábrelo- dijo impaciente.
Ya voy, ya voy- dijo Harry disponiéndose a abrir la cajita.
Después de estar un rato intentando abrir la cajita, al fin la abrió y pudo observar dentro una especie de collar de plata con forma de cangrejo.
Gracias Silvia-dijo excitado- que collar tan bonito.
De nada- respondió- pero no es un simple collar. Se le llama detectamal y como bien indica su nombre detecta el mal cuando está cerca de ti. Te da un pellizco con las pinzas cuando pasa eso y si lo quieres parar solo tienes que tocarlo.
Oh! Es muy acertado porque seguro que alguien intentará matarme otra vez como dirÃa la profesora Trelawney- respondió riéndose a carcajadas
Y asà paso la tarde sin ningún incidente.
Por fin llegó el dÃa de volver a hogwarts. El tÃo de Harry la noche anterior le habÃa dicho que le llevarÃa a la estación. A Harry al principio le sorprendió un poco pero luego pensó que lo harÃa para librarse de él lo más pronto posible.
Asà que a altas horas de la madrugada Harry ya estaba despierto y con su mochila preparada.
Cuando faltaba hora y media para que saliera el tren , su tÃo decidió llevarle.
Cuando llegaron Harry observó que ahora la estación estaba más vacÃa que de costumbre, seguramente serÃa porque después de la aparición de Voldemort muchos padres habrÃan decidido no dejar que sus hijos siguieran en el colegio. La estación estaba mucho más bonita: la habÃan pintado toda de rojo y habÃan arreglado las papeleras y los bancos rotos.
Harry se dirigió hacia en andén nueve y tres cuartos y nada Más pasar un montón de pelirrojos aparecieron ante sus ojos y entre la multitud de pelirrojos habÃa una chica con el pelo menos alborotado que de costumbre.
Hola Harry- dijo Hermione.
Hola â€" respondió.
Ah! Pero si estás aquÃ. Te estábamos esperando-dijo Ron cuando supo de la presencia de su amigo- ¿ y Silvia?
Como no sabÃa a que hora vendrÃa le dije que siempre nos sentábamos en los asientos de detrás y ella dijo que acudirÃa allÃ- respondió.
Bueno pues entonces vamos dentro- dijo Hermione.
Entraron en el tren, donde habÃa el mismo bullicio de siempre: niños gritando, peleándose, corriendo...
Cuando estaban llegando a los últimos asientos Harry sintió que caÃa de bruces al suelo y después oyó una carcajada inconfundible; la de Draco Malfoy.
Lo siento, es que me estaba estirando, ha dado la casualidad de que pasabas por aquà y te has tropezado- dijo sin poder parar de reÃr.
Harry sacó su varita del bolsillo pero antes de que pudiera hacer algo sus dos amigos le detuvieron.
Harry tranquilo, que este niño sea un mimado de papá no significa que te tengas que rebajar a su altura- Dijo Hermione.
Sin hacer caso a las carcajadas de Malfoy se dirigieron a su asiento de siempre.
Pasaban los minutos y Silvia no aparecÃa. Después de media hora de espera el tren se puso en marcha.
Que raro. No sé dónde estará Silvia- dijo preocupado.
Tranquilo que seguro que le habrá surgido algo importante y vendrá por otro medio- dijo Ron.
Pero si nadie sabe donde está el colegio- dijo Herminio e preocupando aun más a Harry.
Ron le pegó un codazo para que se callara y siguieron hablando de otra cosa diferente para que Harry no estuviera todo el rato preocupado por Silvia, pero Harry estuvo todo el camino pensado donde se deberÃa haber metido Silvia.
Por fin llegaron a hogwarts. Harry se dirigió a saludar a Hagrid pero no estaba, seguramente aún no habrÃa vuelto del encargo que le habÃa hecho Albus Dumbledore.
Entraron al castillo y Dumbledore les dio la misma bienvenida de siempre con la diferencia de que este tenÃa la cara muy triste y cansada.
Luego pasaron al comedor. Como todos los años, estaba adornado por los escudos de todas las casas.
Se sentaron a la mesa y Harry observó que toda la cuberterÃa estaba hecha de plata y oro excepto los vasos que eran de cristal y tenÃa como adornos a cada uno de sus lados una cabeza de un tejón, un halcón, un león y una serpiente Después de diez minutos Dumbledore habló de nuevo:
Bienvenidos a este nuevo año en Hogwarts. Habréis observado que muchos sitios del comedor están libres. Eso es por que después del levantamiento de voldemort- hubo un estremecimiento en todo el comedor y Harry aprovechó para mirar si estaba cho- chang y vió que no estaba pero tampoco le importó mucho- Muchos padres no se han atrevido a traer a sus hijos al colegio por si era peligroso .Como todos los años os repito que está terminantemente prohibido ir al bosque prohibido si no se va acompañado de un profesor. Bueno ahora vamos a pasar a la ceremonia de elección.
Se abrió la puerta y apareció acompañando a los alumnos un señor alto y delgado, con los ojos verde oscuro y el cabello negro. A Harry le resultaba familiar pero no sabÃa de que y no le dio mucha importancia porque vio apareces detrás de él los nuevos alumnos y entre ellos estaba Silvia.
Fueron llamando uno a uno y por fin le tocó el turno a Silvia ya que estaba de los últimos por su apellidos.
Silvia RÃos- dijo McGonagall.
Silvia se acercó al sombrero seleccionador y se lo puso
Oh! Ya me enfrentado a varias persona como tú y todas han ido a la misma casa y pertenecen al mismo grupo. Asà que tu casa es:
¡¡¡¡¡ Gyffindor !!!-gritó el sombreo seleccionador.
Toda la mesa de Gryffindor se puso en pie y aplaudió y Silvia se sentó entre Ron y Harry.
Silvia ¿qué te ha pasado que has venido tan tarde?-preguntó Harry.
Es que mi padre tenÃa un asunto de negocios y no podÃa llevarme a la estación- respondió
¿ Y cómo has llegado si nadie sabe donde esta situado Hogwarts?- preguntó Hermione
Es que mi padre es amigo del director y él es el que nos a traÃdo hasta aquÃ- respondió Silvia.
Siguieron hablando sin prestar atención a la selección y Harry se dio cuenta del collar que llevaba Silvia: TenÃa forma de fénix y era de diferente color según como la pegara la luz. Le pareció bastante bonito pero no le dio ninguna importancia porque seguramente era un collar normal y corriente que se habrÃa comprado por España.
En ese momento el director se levantó y habló:
Bueno seguro que todos estáis ansiosos de empezar las clases y saber quien ocupará el puesto de profesor contra las artes oscuras y ese es Robert RÃos.
En ese momento se abrieron las puertas del comedor y apareció el padre de Silvia. Era de estatura normal y un poco gordo. TenÃa el cabello totalmente negro y sus ojos eran como los de Silvia. ParecÃa que no la afectaban las miradas que se dirigÃan hacia él porque saludó a todos los profesores y se sentó al lado de Dumbledore sin inmutarse.
Dumbledore continuó hablando:
Este año Hagrid no va a estar con nosotros- se sintieron varias risitas provinentes de la mesa de Slytherin- por eso va a estar con nosotros el profesor Bob Stoney que se encargará de sus clases. Todas las miradas se dirigieron hacia el chico que habÃa acompañado a los nuevos. Entonces Harry supo de que le resultaba tan familiar, era el jardinero de la casa de sus tÃos.
Una cosa que no afectará a muchos de vosotros es que este año la profesora de adivinación no estará con nosotros- se sintieron algunos sonidos de satisfacción-y su suplente algunos de vosotros la conocéis es Fleur Decalour.
Todas las miradas se posaron en ella ( una palangana por favor para todos los chicos) Llevaba el polo recogido en una trenza y lucÃa un traje azul oscuro con la pierna al aire.
Y mi última noticia es que los que vallan a hacer 5 curso tendrán una asignatura nueva muy útil: Medicinas contra hechizos que será dada por Mary Rune.
Mary Rune era una señora mayor, tenÃa el pelo plateado y unos ojos grises muy profundos.
-Bueno y ahora a comer- acabó Dumbledore.
Seguidamente aparecieron en los platos llenos de comida y se pusieron a cenar. En la cena Harry les contó de que conocÃa a Bob y todos se sorprendieron excepto Silvia y les dijo que le iba a preguntar que porque se habÃa hecho pasar por jardinero.
Cuando acabaron la cena se dirigieron a la sala común y estuvieron charlando hasta que uno de los prefectos les mandó a dormir.
Cuando apagaron la luz de la habitación Ron se durmió enseguida pero a Harry le costó dormirse porque estaba muy excitado por tantas sorpresas y porque mañana empezaban las clases de nuevo.
Bueno y asà acaba este capÃtulo. La verdad es que me ha salido más largo que el anterior y espero que os haya gustado. Por favor dejarme review que me gusta mucho leerlos y contestarlos. Gracias a todas las personas que me han dejado review una vez más y hasta el próximo capÃtulo.
