CAPÍTULO 7:
AMARGA DESPEDIDA.
Su primer beso. No sabía lo que estaba pasando. Sólo rozaron sus labios un momento, pero en ese instante Hermione se puso lívida y la mano con la que había parado el rayo comenzó a sangrar. Empezó a sudar.
- Sirius, tengo frío, llévame a la cama, tengo mucho frío.- dijo Hermione entre sus dientes ya que tiritaba sin poder evitarlo.
Sirius se asustó mucho, y con razón. La llevó a la cama y la arropó con la sábana sólo. No era conveniente que estuviera muy arropada por la fiebre. Se convirtió en perro saliendo de la habitación y empezó a ladrar sonoramente despertando a los padres de Hermione. El padre de Hermione se levantó para regañar al perro, pero éste le cogió la bata con los dientes y le llevó hasta la habitación de Hermione. En sólo unos minutos llevaban a Hermione al hospital.
Fue la noche más larga de la vida de Sirius, esperando. A las 3:00 de la mañana se la habían llevado al hospital, ahora eran las 9:00 y no habían vuelto. Tubo que esperar una hora más dando vueltas en el salón hasta que oyó el ruido de las llaves en la puerta de la casa. Se convirtió en perro. El señor Granger llevaba a Hermione en brazos. Eso no era bueno. La tumbaron en la cama de su habitación. Sirius entró, no se dieron cuenta de ello. Hermione quedó tendida en la cama y dijo:
- Mamá ¿puede quedarse Hocicos conmigo?
La madre de Hermione miró al perro, si no hubiera sido por él jamás habrían encontrado a Hermione, asintió con la cabeza, pasó una mano por la cabeza del perro, como dándole las gracias. Se marcharon de la habitación. Antes de cerrar la puerta su padre dijo:
- Hermione, duerme un rato, te vendrá bien.
- Sí.- respondió Hermione.
Una vez sus padres cerraron la puerta y Sirius oyó como los pasos se alejaban hasta el piso de abajo se transformó de nuevo en persona. Se sentó al lado de Hermione. -"Fue todo culpa mía"- pensaba -"Tenía que protegerla y me dejé vencer a la primera de cambio, no sirvo para esto, si la hubiera pasado algo habría sido culpa mía..."- algo interrumpió los negativos pensamientos de Sirius. Hermione había alargado su mano y había agarrado la suya.
- ¿Qué te hicieron en el hospital?- preguntó-
- Con medicinas me bajaron la fiebre- hizo una pausa - la mano la curaron y dejó de sangrar rápidamente. Dicen que fue una...- miró a Sirius a los ojos- una gripe extraña. Que guarde cama unos días y ya. La herida ya la curaron, no volverá a abrirse.
- Me alegro de que sólo fuera eso.- Contestó Sirius.- Pero yo no creo que fuera eso que dicen... yo no te vi la herida cuando me despertaste. ¿Te hirieron "ellos"?
- Sí, pero no pasó nada más. No fue nada, en serio. ¿Tú estás bien?.
- Ahora que sé que no te pasó nada, sí.
Acarició el pelo de Hermione, verla en la cama por su culpa le hacía sentirse angustiado.
- Deberías dormir. No has pegado ojo en toda la noche.
- Sí, pero no te vayas- dijo mirándole a los ojos- quédate a mi lado, por favor, no me dejes sola.
- No me moveré de aquí.- respondió con voz dulce.
Hermione cerró los ojos y se tumbó de lado, Sirius se tumbó al lado de ella, acariciándola el pelo, para ayudarla a dormir. Hermione se hacía la dormida, pero estaba bien despierta, pensaba. Los médicos no habían dicho nada de gripe, claro que no, habían dicho que lo que le había ocurrido era una reacción alérgica, y la herida era otra cosa aparte, una simple herida. Sus padres le habían echado la culpa al perro, pero ella les había disuadido, el perro llevaba mucho tiempo en casa como para que hubiera ocurrido justo ese día. Hermione no permitiría que apartaran a Sirius de su lado, -"¿Y si volvían?"-. Acabaron echando la culpa a la cena, a su madre le encantaba hacer cosas exóticas y habían cenado una de sus famosas nuevas recetas. Su madre se sentía culpable de lo que había pasado. Hermione la había tranquilizado, además ya se encontraba mucho mejor, cuando las fiebres terminaron ella se encontró estupendamente. Tan sólo un poco cansada, pero eso era normal, después de todo había vivido demasiadas emociones en una noche y no había descansado ni siquiera un rato. El hospital no era su lugar preferido para dormirse así que se había mantenido despierta todo el rato. Además las sombras de las esquinas del hospital no la dejaban de mirar, o por lo menos eso creía.
Hermione se despertó, al final aunque solo la apetecía pensar se había dormido. Abrió los ojos. Se llevó una gran sorpresa al ver a Sirius sentado a su lado mirándola. Miró el reloj, habían pasado tres horas. Miró a Sirius, seguía en la misma postura que cuando ella se había dormido.
- ¿Has estado aquí todo el rato?- preguntó.
- Te dije que no me movería.- acercó sus labios a su frente y la dio un beso.
Hermione sintió un escalofrío. No sabía si por que aún continuaban los efectos de la fiebre o si era por sentirle tan cerca.
- Sirius, ¿puedes hacerme un favor?
- Sí, dime.
- Mmmm hay un CD en esa estantería, pone Tess en la carátula. Cógelo.
Sirius se levantó de la cama y se dirigió a la estantería, buscando el CD. Hermione le miró. Era tan alto, tan guapo, tan sexy... tenía que decirle algo, tenía que darle a entender que ella sentía algo especial por él. Finalmente Sirius encontró el CD.
- ¿Este?- preguntó ensañándoselo a Hermione.
- Sí, ponlo.- le pidió Hermione.
En el tiempo que Sirius había estado en su casa había aprendido a utilizar el aparato de música y algunas cosas más (como la máquina de afeitar...).
Lo puso y empezó a sonar la música. Se iba a sentar de nuevo al lado de Hermione cuando ella dijo:
- No, no. Pon la canción número 6.
Se mostró un tanto indeciso con respecto a qué botón tenía que tocar, pero acertó y puso la canción. Se sentó al lado de Hermione.
- ¿Por qué la canción número 6?- preguntó.
- Es que... es mi favorita.- dijo ella.
Cuando comenzó a sonar esta parte:
o/~ o/~ o/~ o/~ o/ o/~ o/~ o/~ o/~ o/~ o/ o/~ o/~ o/~ o/~ o/~ o/~ o/~
No me dejes sola...
quiero aferrarme a tu piel...
o/~ o/~ o/~ o/~ o/ o/~ o/~ o/~ o/~ o/~ o/ o/~ o/~ o/~ o/~ o/~ o/~ o/~
Cogió la mano de Sirius. Él la apretó.
- No te dejaré sola Hermione. Nunca.
Ella se incorporó en la cama y le abrazó. Él, devolvió el abrazo, cada vez se sentía más atraído por Hermione. La canción seguía y la escucharon abrazados.
o/~ o/~ o/~ o/~ o/ o/~ o/~ o/~ o/~ o/~ o/ o/~ o/~ o/~ o/~ o/~ o/~ o/~
Darte cada gota de un corazón de mujer...
no me dejes sola quiero sentir, quiero ser...
la luz de tu sombra aunque te pierda después...
o/~ o/~ o/~ o/~ o/ o/~ o/~ o/~ o/~ o/~ o/ o/~ o/~ o/~ o/~ o/~ o/~ o/~
Acabó la canción, los dos se separaron y cuando algo iba a suceder sonó la voz de la madre de Hermione:
- Hermione, ¿quieres que te suba algo de merienda?
Fue como si un hechizo se rompiera, sonaron los pasos de su madre subiendo y Sirius con una mirada de: "lo siento" se convirtió en perro.
Cuando llegó la tarde Hermione se encontraba perfectamente, el cansancio se había marchado podía andar, correr... en fin, hacer vida normal.
Sus padres se alegraron mucho de la rápida recuperación de Hermione. No se lo dijeron, pero había llegado a los 42º de fiebre, y había dicho muchas incoherencias, había estado llamando a un tal Sirius para que la ayudara.
Cayó la noche y Hermione y Sirius estaban en la cama. Habían cerrado la ventana aunque hiciera muchísimo calor.
Dormían abrazados, como siempre. Sirius preguntó a Hermione una duda que había tenido en la mente todo el día... el beso.
- ¿Hermione?.
- ¿Sí?
- ¿Por qué... cuando estabamos los dos abrazados, y te cogí la cara tú.. es decir...?- quería terminar la frase pero no sabía cómo. Hermione le cortó.
- ¿Por qué te besé?
- Sí.- La verdad es que aquél beso había significado mucho para él.
Él sentía algo por ella pero no sabía el qué, y el beso le había confundido más si eso era posible. A lo mejor se había enamorado de ella, a lo mejor había aprendido a amar de nuevo. Quizás ella le amara. Quizás podrían tener algo los dos, aunque sólo fuera un corto romance, quizás ella era la persona que él buscaba.
- Te besé por que tenía miedo de perderte. Fue inconscientemente. Tenía fiebre. - dijo Hermione tratando de disimular que lo había hecho por que le amaba. -"Él nunca lo entendería. Él nunca sería capaz de querer a una niña empollona como yo."-.
Parecía que una piedra había caído sobre el estómago de Sirius, se había quedado mudo. -"¿Cómo había podido ser tan imbécil? Ella nunca podría amarle, nunca sentiría nada por un viejo cuarentón que había salido de la cárcel. Aunque... fue después del beso cuando le dio la fiebre... quizás..."-
Hermione se giró, dando por terminada la conversación y se durmieron. Si hubieran podido leer los pensamientos del otro seguramente la noche no hubiera transcurrido de igual manera.
Tan sólo quedaban dos días para que Hermione se fuera al colegio. Pasaron los últimos días juntos, hablando. Y aún así por mas que hablaban no conseguían decirse lo que sentían.
Él la acompañó al andén junto a sus padres, iría a Hogwarts como perro mascota. Luego se marcharía, así que la última noche la tomaron como despedida. Se hicieron mimos, caricias. Nada más allá de los que se podría confundir con cosas de amigos. Los dos querían una noche inolvidable, pero no la tuvieron por que sus bocas no querían decir lo que sentían sus corazones.
Luego en el tren sería demasiado tarde, con Harry y Ron delante no podrían decir nada.
AGRADEZCO MUCHO A TODAS LAS PERSONAS QUE HAN DEJADO REVIEWS Y TAN SOLO DECIR A SNUFFINA UNA COSA:
Entiendo que pueda no gustarte mi fanfic, entiendo que quizás te parezca mal escrito, sin buenas descripciones, y con malos personajes, entiendo que mi ortografía no sea buena. Estás en el derecho de emitir tu opinión y por eso no borraré tu review, me parece algo bueno para mí recibir malas criticas. PERO las últimas frases estuvieron fuera de tono, no creo que tuvieras que insultar. Si antes que tú, hubo 35 reviews que dijeron que mi fanfic era bueno y que lo siguiera, tienen más peso para mí ellos que tú. Si recibiera más reviews de gente a la que no le gusta mi fic, entonces lo borraría, pero de momento no lo voy a borrar por UNA SOLA mala crítica.
