Capitulo VIII
La verdad
Relena se encontraba hablando con sus cuatro acompañantes en una habitación privada en el edificio donde se llevaría a cabo la conferencia.
"¿Qué pasaría si vuelven aparecer los caballeros oscuros?" preguntó Hilde observando a los demás.
"esperemos que la otra unidad se encargue de acabarlos en la base" dijo Zechc de brazos cruzados.
"el problema sería si uno de ellos se presentara en este lugar" dijo Duo.
"lo único que tenemos que tener presente es no dudar al atacarlos por que ellos no tendrán ni una gota de piedad con nosotros" dijo Noin ceñuda.
Relena se encontraba absorta de la conversación, en su mente y en sus pensamientos solo había lugar para una cosa.
"Heero tienes que recordar, recuerda quien eres y los momentos que pasamos juntos, yo confío plenamente en que lo lograras" pensó ella mirando el cielo por una ventana.
Todos se quedaron viendo a Relena, la cual les devolvió la mirada distraídamente.
"será mejor que nos apresuremos a llegar al auditorio, mientras más rápido salgamos de esto mejor" dijo Noin abriendo la puerta para que Relena pasara.
"muy bien" dijo Relena con determinación cruzando la puerta seguida del resto.
Mientras en la base de los caballeros oscuros, ya los preparativos estaban listos para el ataque.
"¡ustedes cumplirán la misión, sin importar los obstáculos que se les enfrenten, ustedes son solo armas utilizadas en la guerra, solo están hechas para destruir el blanco así que vayan y cumplan con su cometido!" dijo Kodashi caminando frente a la unidad.
"pero señor, deberíamos enviarles refuerzos" dijo Arthur observando a la unidad que se disponía a partir.
"¿Qué te dije sobre estar opinando? No te metas en los asuntos que no te conciernen" dijo Kodashi mirándolo fijamente.
"lo se señor, pero pienso que no debería mandarlos solos, podría repetirse lo de la ultima misión" respondió Arthur evitando su mirada.
"cuando quiera su opinión se la pediré, ahora ordénales que aborden la nave" dijo Kodashi con una mirada de furia.
"yo no quiero formar parte de esto" dijo Arthur dándose la vuelta y dispuesto a irse.
"lo siento, pero no puede irse" dijo la doctora saliendo repentinamente de la nada y golpeándolo fuertemente en la cabeza con una silla, dejándolo tirado en el suelo "Nº1, encargarte de él" dijo arrojando la silla.
"¡si señor!" dijo Heero tomando a Arthur por un pie y arrastrándolo lejos de los demás.
Heero había llegado a una especie de hangar, tiró a Arthur el cual seguía inconsciente, lo apuntó con el arma dispuesto a eliminarlo, pero una voz en su cabeza lo hizo detenerse, Heero sacudió la cabeza confundido, al final se decidió a meterlo en una cápsula de escape.
"no se si esto sea lo mejor, pero creo que es así" pensó Heero viendo a la cápsula alejarse rumbo a la tierra. Luego volvió hacia la unidad, la cual ya estaba esperándolo en la nave.
"no escuché ningún disparo" dijo Nº6 mirándolo de reojo.
"eso a ti no te importa" dijo Heero también mirándolo de reojo, dicho esto la nave despegó rumbo a la tierra. Mientras en otra parte de la luna, unos cuantos tauros blancos investigaban sin éxito el lugar.
"no creo que se encuentre en este lugar" dijo Sally.
"tiene que estar, no hay otro lugar" dijo Quatre en eso vislumbraron una nave que salía de uno de los cráteres más profundos y que se dirigía hacia la tierra.
"¡de seguro están en ese lugar!" dijo Sally.
"entonces ¿Qué esperamos? Andando" dijo Wufei seguido por Trowa.
En la sala de conferencias, Relena se encontraba dando su discurso sobre el nuevo proyecto Terra, todos los líderes mundiales estaban presentes esperando llegar a un acuerdo, alrededor del complejo estaba la policía rodeándolo con muchos carros y en el cielo una brigada de helicópteros sobrevolaban el perímetro.
"¿con esto será suficiente?" preguntó Hilde mirando los helicópteros.
"eso espero" respondió Duo también mirándolos.
Frente al edificio se erguía un pequeño bosque donde ya se encontraban Heero y los demás.
"¡debemos entrar a cualquier precio, preparen las armas entraremos a la fuerza!" ordenó Heero a su unidad y comenzaron su misión.
"¿tu crees que Relena se encuentre bien?" dijo Zechc preocupado por la seguridad de Relena.
"no tienes de que preocuparte, tu sabes que ella es una chica muy fuerte" dijo Noin sonriendo.
De repente se escucharon dentro del auditorio explosiones y disparos, las personas se alarmaron y salieron corriendo hacia la salida más próxima, un gran error por que uno de los soldados esperaba allí con su arma, Relena trató de calmar a la muchedumbre y como vio que no daba resultado entró a su habitación y la cerró rápidamente detrás de ella.
"Ahora que se supone que voy a hacer…" pensó Relena asustada tomando una arma que le había dado Zechc por si la necesitaba
"¡debemos proteger a la señorita Relena!" dijo Noin tratando de avanzar entre el río de gente que trataba de escapar.
"¡a este paso no podremos llegar a tiempo!" dijo Zechc empujando a unas personas que lo estaban arrastrando.
"¡Duo no debemos permitir que entren!" gritó Hilde disparando a uno de la unidad, al cual hirió en una pierna.
"¡le di, que bien!" dijo Hilde.
"¡Hilde, no te distraigas!" gritó Duo que estaba disparando del otro lado de la calle.
"¡ya lo se!" dijo Hilde tirandose al suelo para protegerse.
"¡¡unidad, encárguense del resto, yo iré por el blanco!!" gritó Heero rompiendo una ventana y entrando.
"esta vez no…" murmuró uno de los soldados, dirigiéndose sigilosamente detrás de Heero.
Relena estaba esperando como le había indicado su hermano, a que todo pasara cuando escuchó uno extraños ruidos.
"¿eres tu hermano?" preguntó Relena un poco nerviosa caminado lentamente hacia la puerta. Esta se abrió de golpe revelando a Heero.
"Heero" dijo Relena observándolo.
"objetivo localizado, prosiguiendo a eliminarla" dijo Heero sacando un arma.
"Heero, no lo hagas, recuerda por favor" dijo Relena mirándolo a los ojos.
Heero simplemente se la quedó viendo fijamente a los ojos, esos ojos le recordaban algo, otra vez sentía dudas sobre lo que debía hacer, tendría que acabar con ella de una buena vez para salir de todo eso pero una fuerza mayor se lo impedía.
"por favor Heero, recuerda quien eres…" dijo Relena comenzando a caminar hacia él.
"….." Heero no respondió y sujetó mas firme su arma apuntando justamente a su corazón.
Heero no podía decir nada ante aquellas palabras que resonaban lentamente en su cabeza. No sabia que hacer ante una situación como esta, nada en su entrenamiento le había enseñado a responder ante este tipo se situación totalmente desconocida para él.
"Rel…" comenzó a decir Heero pero algo lo interrumpió súbitamente.
"con que aquí estabas Nº 1" dijo una voz detrás de él.
Heero se dio rápidamente la vuelta para encontrarse cara a cara con Nº 6.
"¿Qué es lo que quieres?" preguntó Heero mirándolo a los ojos.
"quería saber por que no acababas de una buena vez con ella" dijo señalando a Relena "y me doy cuenta, lo que pasa es que ella formó parte de tu pasado que aun no has podido olvidar ¿no es así?, aun no puedo entender como es que alguien como tu pudo llegar a formar parte de nuestra organización"
"…." Heero no respondió, se limitó a mirarlo a la cara tratando de interpretar su expresión.
"si tu no pretendes terminar con la misión, entonces tendré que tomar cartas en el asunto" dijo Nº 6 con una extraña sonrisa. Seguidamente sacó un arma y apuntó a Relena, Heero reacciono inconscientemente interponiéndose en el ataque.
"No te lo permitiré" dijo Heero mirándolo a los ojos. Relena pudo notar que algo en su mirada había cambiado.
"¿te estas revelando Nº 1?" preguntó Nº 6 sin dejar de sonreír "a eso se le conoce como traición y tu sabes bien con que se paga eso" dijo apuntando ahora a Heero el cual no daba muestras de moverse.
"Heero…" pensó Relena sujetando su arma entre sus manos"muévete..sal de allí".
De repente se escuchó un fuerte disparo. El arma de Nº 6 cayó al suelo hecha añicos.
"¿Relena?" Heero se dio vuelta para ver a Relena de pie sosteniendo firmemente un arma entre sus manos.
"¡niña estupida! ¿cómo te atreves a intervenir en mis asuntos?" exclamó Nº 6 molesto dirigiéndose a ella con intención de lastimarla.
Pero Heero lo arrojó fuertemente contra una pared, luego de algunos segundos este levantó lentamente.
"ya veo, si eso es lo que quieres definitivamente entonces no me dejas otra opción" dijo Nº6 propinando un golpe dirigido a la cara de Heero el cual lo esquivó fácilmente.
"no dejare que la lastimes" dijo Heero golpeando con su pierna a los tobillos de Nº 6 haciéndolo caer al suelo.
"¿desde cuando te volviste tan débil Nº1?, hace un tiempo he notado un comportamiento extraño en tu manera de ser" dijo el levantándose ágilmente del suelo y golpeando en las costillas a Heero arrojándolo contra un espejo haciendo que se rompiera en mil pedazos.
"……" Heero simplemente se lanzó contra él y comenzando a dar vueltas por el suelo tratando de dañar lo más posible a su contrincante.
"me lo imaginaba, fue esa mocosa la que te hizo cambiar, lástima, fue un desperdicio" dijo Nº 6 atacando con todas sus fuerzas "despídete Heero Yui"
"¡no te lo permitiré!" gritó Heero atacando él también.
En ese momento ambos tomaron un trozo de los cristales del espejo y rápidamente se atacaron el uno al otro, Heero logró herir a Nº 6 en el hombro, pero a cambió recibió una fea cortada en su abdomen. Ambos se detuvieron un momento agotados, Heero empezaba a ver borroso, se sacó el trozo de cristal de la herida y se propuso a atacar otra vez.
"no… te permitiré que…" comenzó a decir Heero pero fue interrumpido por el repentino ataque que lo arrojó fuertemente contra la pared. Agotando sus ultimas fuerzas quedó tendido inconsciente.
"sabía que no eras el indicado desde la primera ves que te vi" dijo Nº 6 arrodillado en el suelo, estaba jadeando por la tremenda pelea y se sujetaba el hombro el cual sangraba.
Relena no creía lo que sus ojos veían, no sabia que podía hacer en esa situación, lo único que sabia con certeza es que él quería matarla así que podía usar eso como una distracción para que se alejarlo de Heero.
"no permitiré que lastimes más a Heero" pensó Relena mirándolo y luego salió corriendo de la habitación.
"no escaparas" dijo Nº 6 levantándose lentamente y caminando torpemente siguiendo a Relena.
Relena corría rápidamente por los solitarios pasillos, empezó a subir las escaleras sin mirar atrás hasta que llegó a la azotea y se escondió detrás de un ducto de ventilación. Ella se quedó inmóvil escuchando los pasos de Nº 6, aun aferraba el arma en sus manos. Relena cerró los ojos fuertemente "no podré huir por más tiempo, lo mejor será hacerle frente…" pensó y luego de unos segundos salió de su escondite para encarar a su enemigo, pero para su sorpresa no se encontraba allí.
"pero que…." Dijo Relena bajando el arma y acercándose sigilosamente a la puerta de la escalera, cuando esta se cerró revelando a Nº 6 con un arma en la mano.
"te dije que no escaparías" dijo él apuntándola "nadie nunca lo ha logrado"
"si lo que quieres es matarme pues hazlo de una buena vez" dijo ella mirándolo a los ojos.
"no te apresures, la parte divertida de mi trabajo es ver como el terror domina poco a poco a las personas cuando saben que van a morir" dijo él sonriendo.
"son unos seres despreciables, únicamente quieren acabar con todo lo que se oponga a su régimen bélico" dijo Relena y su voz comenzó a temblar por la furia que sentía en su interior.
"no me hagas reír, tu crees que yo hice todo esto por seguir las ordenes de ese incompetente de Kodashi" dijo él y su sonrisa se marcó más en su rostro "solamente lo hago por mi honor como soldado, después de terminar contigo acabare con todo aquel que se me oponga, y mi ejército de soldados encabezados por mi emprenderemos una nueva era"
Relena sujetó fuertemente el arma y apuntó con ella a la cabeza de Nº6 el cual ni siquiera se inmutó.
"¿de verdad crees que me vas a disparar?" preguntó Nº 6 caminado hacia ella "la paz solo hace débiles a las personas, pierden el verdadero sentido de vivir y se vuelven vulnerables"
"no te acerques más" dijo Relena retrocediendo hasta que tocó el borde del edificio, sostenía firmemente el arma pero las manos le temblaban incontroladamente.
"es tu fin Peacecraft, después de acabar contigo este débil periodo pacífico caerá como una torre de naipes y me dejara el paso libre" murmuró Nº 6 apuntándola directamente al corazón "despídete, muy pronto te unirás con tu débil amigo en el infierno"
Relena cerró los ojos sin dejar de apuntar a Nº 6, no estaba segura que hacer, pero no podía permitir que él se saliera con la suya, era su vida o la de él, ya era el momento de decidirse. Escuchó sus pasos aproximándose hacia ella cuando se detuvo, estaban frente a frente… ¿Qué hago ahora, Heero? Fue su ultimo pensamiento.
Se escucho un fuerte disparo. Inmediatamente Relena sintió el intenso calor del arma en sus manos, abrió los ojos y lo primero que vio fue el cuerpo de Nº 6 a sus pies con una herida en el pecho y otra en la cabeza, un charco de sangre se había empezado a formar en torno a él. Levantó la mirada aterrorizada y pudo ver a Heero de pie con un arma entre sus manos. Por lo visto también había disparado pero el sonido de ambas armas se confundió en uno solo. Lo único que Relena pudo hacer en ese momento fue correr hacia Heero y lanzarse en sus brazos, lo abrazó como nunca antes lo había hecho y lentamente él la rodeo entre sus brazos. Se sentía tan bien, era una nueva sensación que lo embargaba, como un sueño, del cual no quería que nunca lo despertaran. En ese momento Relena sintió algo tibio en su piel, se tocó con una mano y descubrió el rojo color de la sangre que cubría sus ropas, rápidamente miró a Heero el cual se desplomó inconsciente en sus brazos.
La verdad
Relena se encontraba hablando con sus cuatro acompañantes en una habitación privada en el edificio donde se llevaría a cabo la conferencia.
"¿Qué pasaría si vuelven aparecer los caballeros oscuros?" preguntó Hilde observando a los demás.
"esperemos que la otra unidad se encargue de acabarlos en la base" dijo Zechc de brazos cruzados.
"el problema sería si uno de ellos se presentara en este lugar" dijo Duo.
"lo único que tenemos que tener presente es no dudar al atacarlos por que ellos no tendrán ni una gota de piedad con nosotros" dijo Noin ceñuda.
Relena se encontraba absorta de la conversación, en su mente y en sus pensamientos solo había lugar para una cosa.
"Heero tienes que recordar, recuerda quien eres y los momentos que pasamos juntos, yo confío plenamente en que lo lograras" pensó ella mirando el cielo por una ventana.
Todos se quedaron viendo a Relena, la cual les devolvió la mirada distraídamente.
"será mejor que nos apresuremos a llegar al auditorio, mientras más rápido salgamos de esto mejor" dijo Noin abriendo la puerta para que Relena pasara.
"muy bien" dijo Relena con determinación cruzando la puerta seguida del resto.
Mientras en la base de los caballeros oscuros, ya los preparativos estaban listos para el ataque.
"¡ustedes cumplirán la misión, sin importar los obstáculos que se les enfrenten, ustedes son solo armas utilizadas en la guerra, solo están hechas para destruir el blanco así que vayan y cumplan con su cometido!" dijo Kodashi caminando frente a la unidad.
"pero señor, deberíamos enviarles refuerzos" dijo Arthur observando a la unidad que se disponía a partir.
"¿Qué te dije sobre estar opinando? No te metas en los asuntos que no te conciernen" dijo Kodashi mirándolo fijamente.
"lo se señor, pero pienso que no debería mandarlos solos, podría repetirse lo de la ultima misión" respondió Arthur evitando su mirada.
"cuando quiera su opinión se la pediré, ahora ordénales que aborden la nave" dijo Kodashi con una mirada de furia.
"yo no quiero formar parte de esto" dijo Arthur dándose la vuelta y dispuesto a irse.
"lo siento, pero no puede irse" dijo la doctora saliendo repentinamente de la nada y golpeándolo fuertemente en la cabeza con una silla, dejándolo tirado en el suelo "Nº1, encargarte de él" dijo arrojando la silla.
"¡si señor!" dijo Heero tomando a Arthur por un pie y arrastrándolo lejos de los demás.
Heero había llegado a una especie de hangar, tiró a Arthur el cual seguía inconsciente, lo apuntó con el arma dispuesto a eliminarlo, pero una voz en su cabeza lo hizo detenerse, Heero sacudió la cabeza confundido, al final se decidió a meterlo en una cápsula de escape.
"no se si esto sea lo mejor, pero creo que es así" pensó Heero viendo a la cápsula alejarse rumbo a la tierra. Luego volvió hacia la unidad, la cual ya estaba esperándolo en la nave.
"no escuché ningún disparo" dijo Nº6 mirándolo de reojo.
"eso a ti no te importa" dijo Heero también mirándolo de reojo, dicho esto la nave despegó rumbo a la tierra. Mientras en otra parte de la luna, unos cuantos tauros blancos investigaban sin éxito el lugar.
"no creo que se encuentre en este lugar" dijo Sally.
"tiene que estar, no hay otro lugar" dijo Quatre en eso vislumbraron una nave que salía de uno de los cráteres más profundos y que se dirigía hacia la tierra.
"¡de seguro están en ese lugar!" dijo Sally.
"entonces ¿Qué esperamos? Andando" dijo Wufei seguido por Trowa.
En la sala de conferencias, Relena se encontraba dando su discurso sobre el nuevo proyecto Terra, todos los líderes mundiales estaban presentes esperando llegar a un acuerdo, alrededor del complejo estaba la policía rodeándolo con muchos carros y en el cielo una brigada de helicópteros sobrevolaban el perímetro.
"¿con esto será suficiente?" preguntó Hilde mirando los helicópteros.
"eso espero" respondió Duo también mirándolos.
Frente al edificio se erguía un pequeño bosque donde ya se encontraban Heero y los demás.
"¡debemos entrar a cualquier precio, preparen las armas entraremos a la fuerza!" ordenó Heero a su unidad y comenzaron su misión.
"¿tu crees que Relena se encuentre bien?" dijo Zechc preocupado por la seguridad de Relena.
"no tienes de que preocuparte, tu sabes que ella es una chica muy fuerte" dijo Noin sonriendo.
De repente se escucharon dentro del auditorio explosiones y disparos, las personas se alarmaron y salieron corriendo hacia la salida más próxima, un gran error por que uno de los soldados esperaba allí con su arma, Relena trató de calmar a la muchedumbre y como vio que no daba resultado entró a su habitación y la cerró rápidamente detrás de ella.
"Ahora que se supone que voy a hacer…" pensó Relena asustada tomando una arma que le había dado Zechc por si la necesitaba
"¡debemos proteger a la señorita Relena!" dijo Noin tratando de avanzar entre el río de gente que trataba de escapar.
"¡a este paso no podremos llegar a tiempo!" dijo Zechc empujando a unas personas que lo estaban arrastrando.
"¡Duo no debemos permitir que entren!" gritó Hilde disparando a uno de la unidad, al cual hirió en una pierna.
"¡le di, que bien!" dijo Hilde.
"¡Hilde, no te distraigas!" gritó Duo que estaba disparando del otro lado de la calle.
"¡ya lo se!" dijo Hilde tirandose al suelo para protegerse.
"¡¡unidad, encárguense del resto, yo iré por el blanco!!" gritó Heero rompiendo una ventana y entrando.
"esta vez no…" murmuró uno de los soldados, dirigiéndose sigilosamente detrás de Heero.
Relena estaba esperando como le había indicado su hermano, a que todo pasara cuando escuchó uno extraños ruidos.
"¿eres tu hermano?" preguntó Relena un poco nerviosa caminado lentamente hacia la puerta. Esta se abrió de golpe revelando a Heero.
"Heero" dijo Relena observándolo.
"objetivo localizado, prosiguiendo a eliminarla" dijo Heero sacando un arma.
"Heero, no lo hagas, recuerda por favor" dijo Relena mirándolo a los ojos.
Heero simplemente se la quedó viendo fijamente a los ojos, esos ojos le recordaban algo, otra vez sentía dudas sobre lo que debía hacer, tendría que acabar con ella de una buena vez para salir de todo eso pero una fuerza mayor se lo impedía.
"por favor Heero, recuerda quien eres…" dijo Relena comenzando a caminar hacia él.
"….." Heero no respondió y sujetó mas firme su arma apuntando justamente a su corazón.
Heero no podía decir nada ante aquellas palabras que resonaban lentamente en su cabeza. No sabia que hacer ante una situación como esta, nada en su entrenamiento le había enseñado a responder ante este tipo se situación totalmente desconocida para él.
"Rel…" comenzó a decir Heero pero algo lo interrumpió súbitamente.
"con que aquí estabas Nº 1" dijo una voz detrás de él.
Heero se dio rápidamente la vuelta para encontrarse cara a cara con Nº 6.
"¿Qué es lo que quieres?" preguntó Heero mirándolo a los ojos.
"quería saber por que no acababas de una buena vez con ella" dijo señalando a Relena "y me doy cuenta, lo que pasa es que ella formó parte de tu pasado que aun no has podido olvidar ¿no es así?, aun no puedo entender como es que alguien como tu pudo llegar a formar parte de nuestra organización"
"…." Heero no respondió, se limitó a mirarlo a la cara tratando de interpretar su expresión.
"si tu no pretendes terminar con la misión, entonces tendré que tomar cartas en el asunto" dijo Nº 6 con una extraña sonrisa. Seguidamente sacó un arma y apuntó a Relena, Heero reacciono inconscientemente interponiéndose en el ataque.
"No te lo permitiré" dijo Heero mirándolo a los ojos. Relena pudo notar que algo en su mirada había cambiado.
"¿te estas revelando Nº 1?" preguntó Nº 6 sin dejar de sonreír "a eso se le conoce como traición y tu sabes bien con que se paga eso" dijo apuntando ahora a Heero el cual no daba muestras de moverse.
"Heero…" pensó Relena sujetando su arma entre sus manos"muévete..sal de allí".
De repente se escuchó un fuerte disparo. El arma de Nº 6 cayó al suelo hecha añicos.
"¿Relena?" Heero se dio vuelta para ver a Relena de pie sosteniendo firmemente un arma entre sus manos.
"¡niña estupida! ¿cómo te atreves a intervenir en mis asuntos?" exclamó Nº 6 molesto dirigiéndose a ella con intención de lastimarla.
Pero Heero lo arrojó fuertemente contra una pared, luego de algunos segundos este levantó lentamente.
"ya veo, si eso es lo que quieres definitivamente entonces no me dejas otra opción" dijo Nº6 propinando un golpe dirigido a la cara de Heero el cual lo esquivó fácilmente.
"no dejare que la lastimes" dijo Heero golpeando con su pierna a los tobillos de Nº 6 haciéndolo caer al suelo.
"¿desde cuando te volviste tan débil Nº1?, hace un tiempo he notado un comportamiento extraño en tu manera de ser" dijo el levantándose ágilmente del suelo y golpeando en las costillas a Heero arrojándolo contra un espejo haciendo que se rompiera en mil pedazos.
"……" Heero simplemente se lanzó contra él y comenzando a dar vueltas por el suelo tratando de dañar lo más posible a su contrincante.
"me lo imaginaba, fue esa mocosa la que te hizo cambiar, lástima, fue un desperdicio" dijo Nº 6 atacando con todas sus fuerzas "despídete Heero Yui"
"¡no te lo permitiré!" gritó Heero atacando él también.
En ese momento ambos tomaron un trozo de los cristales del espejo y rápidamente se atacaron el uno al otro, Heero logró herir a Nº 6 en el hombro, pero a cambió recibió una fea cortada en su abdomen. Ambos se detuvieron un momento agotados, Heero empezaba a ver borroso, se sacó el trozo de cristal de la herida y se propuso a atacar otra vez.
"no… te permitiré que…" comenzó a decir Heero pero fue interrumpido por el repentino ataque que lo arrojó fuertemente contra la pared. Agotando sus ultimas fuerzas quedó tendido inconsciente.
"sabía que no eras el indicado desde la primera ves que te vi" dijo Nº 6 arrodillado en el suelo, estaba jadeando por la tremenda pelea y se sujetaba el hombro el cual sangraba.
Relena no creía lo que sus ojos veían, no sabia que podía hacer en esa situación, lo único que sabia con certeza es que él quería matarla así que podía usar eso como una distracción para que se alejarlo de Heero.
"no permitiré que lastimes más a Heero" pensó Relena mirándolo y luego salió corriendo de la habitación.
"no escaparas" dijo Nº 6 levantándose lentamente y caminando torpemente siguiendo a Relena.
Relena corría rápidamente por los solitarios pasillos, empezó a subir las escaleras sin mirar atrás hasta que llegó a la azotea y se escondió detrás de un ducto de ventilación. Ella se quedó inmóvil escuchando los pasos de Nº 6, aun aferraba el arma en sus manos. Relena cerró los ojos fuertemente "no podré huir por más tiempo, lo mejor será hacerle frente…" pensó y luego de unos segundos salió de su escondite para encarar a su enemigo, pero para su sorpresa no se encontraba allí.
"pero que…." Dijo Relena bajando el arma y acercándose sigilosamente a la puerta de la escalera, cuando esta se cerró revelando a Nº 6 con un arma en la mano.
"te dije que no escaparías" dijo él apuntándola "nadie nunca lo ha logrado"
"si lo que quieres es matarme pues hazlo de una buena vez" dijo ella mirándolo a los ojos.
"no te apresures, la parte divertida de mi trabajo es ver como el terror domina poco a poco a las personas cuando saben que van a morir" dijo él sonriendo.
"son unos seres despreciables, únicamente quieren acabar con todo lo que se oponga a su régimen bélico" dijo Relena y su voz comenzó a temblar por la furia que sentía en su interior.
"no me hagas reír, tu crees que yo hice todo esto por seguir las ordenes de ese incompetente de Kodashi" dijo él y su sonrisa se marcó más en su rostro "solamente lo hago por mi honor como soldado, después de terminar contigo acabare con todo aquel que se me oponga, y mi ejército de soldados encabezados por mi emprenderemos una nueva era"
Relena sujetó fuertemente el arma y apuntó con ella a la cabeza de Nº6 el cual ni siquiera se inmutó.
"¿de verdad crees que me vas a disparar?" preguntó Nº 6 caminado hacia ella "la paz solo hace débiles a las personas, pierden el verdadero sentido de vivir y se vuelven vulnerables"
"no te acerques más" dijo Relena retrocediendo hasta que tocó el borde del edificio, sostenía firmemente el arma pero las manos le temblaban incontroladamente.
"es tu fin Peacecraft, después de acabar contigo este débil periodo pacífico caerá como una torre de naipes y me dejara el paso libre" murmuró Nº 6 apuntándola directamente al corazón "despídete, muy pronto te unirás con tu débil amigo en el infierno"
Relena cerró los ojos sin dejar de apuntar a Nº 6, no estaba segura que hacer, pero no podía permitir que él se saliera con la suya, era su vida o la de él, ya era el momento de decidirse. Escuchó sus pasos aproximándose hacia ella cuando se detuvo, estaban frente a frente… ¿Qué hago ahora, Heero? Fue su ultimo pensamiento.
Se escucho un fuerte disparo. Inmediatamente Relena sintió el intenso calor del arma en sus manos, abrió los ojos y lo primero que vio fue el cuerpo de Nº 6 a sus pies con una herida en el pecho y otra en la cabeza, un charco de sangre se había empezado a formar en torno a él. Levantó la mirada aterrorizada y pudo ver a Heero de pie con un arma entre sus manos. Por lo visto también había disparado pero el sonido de ambas armas se confundió en uno solo. Lo único que Relena pudo hacer en ese momento fue correr hacia Heero y lanzarse en sus brazos, lo abrazó como nunca antes lo había hecho y lentamente él la rodeo entre sus brazos. Se sentía tan bien, era una nueva sensación que lo embargaba, como un sueño, del cual no quería que nunca lo despertaran. En ese momento Relena sintió algo tibio en su piel, se tocó con una mano y descubrió el rojo color de la sangre que cubría sus ropas, rápidamente miró a Heero el cual se desplomó inconsciente en sus brazos.
