Bueno, hola a todos, este es mi primer fic que publico , y vaya que si me
siento nerviosa je n///n. Espero que les guste y tengan un poquito de
paciencia, por que lo bueno, aparecerá, no se preocupen. No se que más
decir je ... bueno, mejor, lean y me dicen como esta n_-.
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Se podían escuchar muy levemente los ruidos que provenían de la ciudad central, todo a su alrededor parecía detenido. Heero se encontraba postrado en su cama , con una mano bajo su cabeza, la mirada perdida y cuerpo inmóvil. Estaba con los pies descalzos, vestía sus jeans y su singular polera verde oscura. La habitación se encontraba un tanto desordenada, los papeles estaban dispersos por todo el lugar, la computadora cerrada y una taza de café a medio beber ubicada en una pequeña mesa junto a su cama.
Todo indicaba que Heero llevaba una vida solitaria, igual que antes, lo único que lo mantenía ocupado era su querida colonia, donde se encontraba viviendo.
Pensaba en sus días como piloto Gundam y como él, junto con sus cuatro compañeros lograron la paz a través de muchas batallas y sacrificios de gente inocente. Solo había algo que extrañaba, y se encontraba en el pacífico reino Zanck, cumpliendo un sueño que produce esperanzas en el corazón de las personas.
Ya era hora de ir a su trabajo temporal, como mecánico de los pocos mobil suit que quedaban, ese era su aporte para la colonia. Empezó por leventarse desganadamente, y terminó de beber su taza de café, se estaba poniendo un jockey de color azul y ... Antes de que pudiera terminar de arreglarce, se escucharon tres golpes en la puerta principal, llamando la atención del joven. Se aproximó muy extrañado hacia ella, ya que nunca ha recibido visita alguna.
Al abrirla, se dio cuenta de que una figura familiar era quien le buscaba. - Noin ¡¿qué haces aquí?! - dijo Heero con su firme y profunda voz. - Hace mucho tiempo que no te veía Heero, ¿cómo haz estado?- dice con un tono serio fingiendo su alegría, sin recibir ninguna respuesta por parte del joven- He venido a buscarte para que regreses al reino Zanck-
- ¡¿Al reino Zanck?!... yo no tengo que hacer nada ahí- dijo el joven con indiferencia. - Han estado ocurriendo nuevos disturbios en el espacio, nuevas organizaciones rebeldes han surgido y desean tomar represarias contra la Tierra, y más aún contra las propias colonias. Quieren atacar al núcleo de ambas potencias, el cual es el reino Zanck, aniquilando a la señorita Relena y a Miliardo, ya que son los principales expansores de la paz- - Y quieres que proteja a Relena y Zechs ¿no es así?. Ese asunto no me concierne- le responde a Noin con un tono frío, mientras cierra la puerta, dándole un significado final a al conversación.
Noin, en un segundo intento detiene la acción de Heero y sostiene la puerta con su mano. - Escucha, si no quieres hacerlo por Miliardo, bien, pero por lo menos hazlo por la señorita Relena, ella es aún joven para perder la vida... debe aprender los significados de una paz duradera, encontrar las soluciones para detener las guerras sin sentido y salvar a las personas que forjarán un nuevo futuro- le dice con un tono de angustia- esos son los ideales de ustedes, los pilotos Gundam, es por eso que pido tu ayuda Heero, eres uno de los pocos que podría mantener segura a Relena-
Los ojos de Heero se cerraron, haciéndolo pensar sobre la situación, quería recordar a Relena, pero algo se lo impedía, no solo era su corazón de soldado, había algo más, pero no sabía que era, deseaba pelear otra vez, aún sabiendo lo desatrozo que sería, pero así era él, y nada ni nadie lo podría cambiar.
- Esta bien Noin, te acompañaré a Zanck. ¿Relena sabe de esto?- pregunta con expresión seria. - Si, está enterada sobre el asunto, al igual que Miliardo- - ¿Y sabe que haz venido hasta aquí en mi búsqueda?- dice con un tono sarcástico. - No, no le quise decir, ya que si lo hubiera sabido me habría detenido para no molestarte con sus asuntos y no perturbara la paz que tienes ahora- - Eso pensé- después de haber dicho eso, una leve, pero significativa sonrisa apareció en el rostro de Heero, como un recuerdo grato, lejano y pasajero. Esa misma tarde, Noin y Heero se fueron del conjunto de colonias L1 en un vuelo comercial con destino a la Tierra, sin levantar ninguna sospecha. Se dirigían a su destino sin saber que sus historias tomarían un giro inesperado.
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Año 197 después de la colonia, las guerras y discusiones políticas han terminado completamente. Los líderes de las colonias y de las naciones del mundo han formado un acuerdo que prohibe los instrumentos bélicos en cualquiera de las potencias. Algunos han tomado esta medida como fomentación a la paz duradera, pero otros, no han estado de acuerdo, decidiendo formar una nueva organización secreta, basada en la ideología de la Fundación Romefeler, y tomando el nombre de su organización conjunta Oz.
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En un remoto lugar, dentro de China, un combate se está dando inicio, reviviendo antiguos momentos, e involucrando a antiguos guerreros dolidos a causa de su corazón y espíritu.
- ¿Habré hecho lo correcto?, ¿a caso solo puedo demostrar lo que siento en un campo de batalla?. Volvió nuevamente esa inquietud, pensé que ya la había apartado de mi , que había descubierto mi verdadero objetivo, las palabras de Heero cobraron sentido mientras peleábamos, pero ahora , estoy totalmente confundido, ¿por qué?...-
Caminaba solo, sin rumbo fijo, había decido forjar nuevamente el clan del dragón y explorar el mundo que desconocía, por eso se fue, dejando a al preventora Sally.
- La paz no dura para siempre, al igual que la felicidad, eso lo se muy bien, la guerra arrasa con el alma de aquellos que creen que su ideología puede ayudar a las personas, pensamiento que emblandece las batallas y provoca más muertes. Esa es la enseñanza que me dejo Nataku , que siempre me ha acompañado, incluso ahora que no tengo mi Gundam. Regresó ese deseo que tenía de luchar contra alguien más fuerte que yo, tal vez, solo eso pueda calmar mi mente y mi alma de soldado, Trize tenía razón, seré un eterno esclavo de las guerras.-
Al cabo de un instante, el pensamiento de Wu fei se vio interrumpido a causa de una gran explosión, llamando repentinamente su atención. Pero, antes de que pudiera reaccionar, una persona salió sin previo aviso de los espesos arbustos, tropezándose con el joven. Ambas figuras se veían en el suelo, hasta que el extraño reaccionó primero, abriendo los ojos y levantándose fugazmente, poniéndose en una posición de alerta total.
Al notar eso, Wu fei le siguió , poniéndose de pie tranquilamente, pero, al instante, y con una gran rapidez, atacó al extraño. Demostraba habilidades enseñadas por su maestra Long, tenía una gran ventaja sobre la batalla, el extraño estaba totalmente acorralado, no podía atacar, y a penas podía defenderse.
- Deberías atacarme, ya que si no lo haces...- dijo con seriedad mientras veía el cansado rostro de su contrincante. El extraño trataba de adivinar alguno de los movimientos de Wu fei, cada vez que daba un golpe, más dificultades tenía. - ¡No me daré por vencido tan fácilmente!- gritó el extraño, mientras su respiración se hacia cada vez más agitada. - Date cuenta, ¡eres débil, no podrás ganarme!- dice con un tono desafiante, propinando una especie de patada en sus piernas, haciéndole caer - Ríndete, ya no tienes oportunidad- amenazando al extraño con el puño muy cerca de su cara. Durante un momento no reaccionó, sus ojos demostraban miedo y asombro- Lo reconozco, perdí. Si quieres puedes llevarme con tu superior, pero, aún así no te diré ni entregaré los planos- dijo muy decidido y con resignación.
Wu fei se sorprendió ante la respuesta del joven, retirando el amenazante puño, lentamente, mientras él extraño lo seguía con la mirada. - ¿Acaso eres un soldado?- preguntó en el momento que el joven extraño se ponía de pie. - Yo...- pero, antes de que pudiera responder, se escucharon unas múltiples pisadas que se dirigían al lugar. Eso infundió temor en el extraño, haciéndolo escapar furtivamente , dejando a Wu fei sin una respuesta. Se perdió entre los arbustos que se encontraban al otro lado del camino. No sabía si se volverían a encontrar, pero si sabía que ese muchacho le inquietaba por algún extraño motivo.
Siguió caminando, hasta que anocheció. Se encontró en los alrededores de un campamento, pero, tal fue su sorpresa al notar que era un campamento militar. - ¿Cómo es posible?, si decretaron la prohibición de armas en el mundo... vaya, veo que hay gente que aún gusta de la guerra- dijo sarcásticamente, escondido, analizando cada detalle, tal como lo hacía antes, cuando era el piloto del Gundam Shen Long.
- ¡Levanta las manos y no te muevas!- le gritó una voz que provenía de detrás de él - No hagas ningún movimiento o si no te dispararé- Era un mercenario que estaba de guardia esa noche, lo único que le respondió Wu fei fue una mirada fría, siguiendo las ordenes.
Lo encaminó hasta el campamento, siempre amenazado por el arma y con las manos arriba. La mayoría de los mercenarios se encontraban fuera de sus tiendas, puliendo armas, haciendo cálculos, en fin, lo que hacen los hombres de guerra. El comandante se encontraba entre ellos, tenía puesto un uniforme de la organización de Oz, eso era lo que le distinguía de los demás.
- Un joven espía. No sabía que el mundo se estaba enterando tan rápidamente - dijo el comandante. - Yo no soy ningún espía, solo soy un viajero que pasaba por estos lugares- le respondió Wu fei con los ojos cerrados sin importarle la reacción de los presentes. - No te creo, se que eres un espía, confiesa!!!!!!- grito el molesto comandante amenazando a Wu fei . De pronto, se escuchan simultáneas explosiones, todas en torno al campamento . - ¡Señor!, hemos sufrido rápidamente grandes pérdidas , casi la mayoría de nuestros hombres están heridos, y el equipo médico ha desaparecido- grita uno de los mercenarios, alarmado y desesperado. - ¡ Busquen al causante, y no lo dejen con vida!- ordena imponente a los soldados que le quedan.
Pero, justo antes de que pudieran cumplir lo encomendado , un mobil suit taurus salió de entre las llamas ,destruyendo todo a su paso. Los hombres corrían para salvar sus vidas, otros decidían perecer en ese lugar, solo por honor. Wu fei no retrocedió, el se quedó observando todo, hasta que decidió tomar cartas en el asunto. Se dirigió hacia los hangares destruidos, buscando algún mobil suit que haya quedado intacto, y así fue, la suerte estuvo con él, encontró un taurus. Se subió en el, y empezó a pilotearlo, trayéndole viejos recuerdos de su antigua vida. Primero, empezó a imitar al primer taurus, apoyándolo en la destrucción de la base enemiga.
- Que débiles son, no son capaces de detener algo tan insignificante como este mobil suit- dijo muy satisfecho. La destrucción cesó al cabo de unos pocos minutos, no quedó nada, solo devastación. - No tenías por que darme apoyo, yo mismo podía hacer el trabajo- se comunicó el piloto a través del monitor, pero... se trataba del mismo joven con que se había topado en el camino. - Nos volvemos a encontrar. Quien diría que eras piloto, con lo débil que eres, nadie lo hubiera adivinado- dijo Wu fei molestando al joven. - Que te parece si tenemos la revancha ahora, con los mobil suit ¿aceptas el desafío?- le propuso el extraño con una sonrisa. - ¡ Con mucho gusto!- y con ese grito, empezó la segunda parte de la obra. Ambos pilotos hacían su máximo esfuerzo, los taurus se movían con agilidad gracias a sus manipuladores. Nadie era espectador, solo había participantes. - Eres mejor con los suits que en la batalla cuerpo a cuerpo - dijo Wu fei mientras se defendía. - No eres el primero que me lo dice- respondió el joven, aún sonriendo y atacando el taurus del piloto Gundam.
Era una batalla que solo se podía comparar con la enfrentada por Heero y Wu fei, los dos pilotos daban lo mejor de si. - Ya basta, es hora de que terminemos con esto- dijo el joven decididamente. - Que!...- solo eso pudo decir Wu fei, ya que, sin darse cuenta, su contrincante realizó una brillante táctica, ubicándose en su retaguardia. Para terminar el combate, cortó las piernas del taurus, dejándolo sin posibilidad de reincorporarse a la pelea. - He ganado, peleaste muy bien, se nota que eres un piloto experimentado- dijo el joven muy cansado. Wu fei no reaccionaba, nunca nadie le había ganado, solo Trize. Su rostro mostraba un gran asombro, mientras recuperaba se normal respiración, aún con sus manos en los controles del suit.
- Mi trabajo aquí termino, espero que nos volvamos a ver- respondió el joven mientras volteaba el taurus. - Espera.... cual es tu nombre?- preguntó Wu fei aun conmocionado. - Ein, Ein Illynois, y el suyo?- - Wu fei Chang- respondió el decepcionado piloto mientras levantaba su cabeza para observar el monitor.
No hubo ni respuesta ni pregunta, ya que en ese mismo instante, el piloto y el suit se fueron a su siguiente destino, dejando este encuentro como algo pasajero. Se alejaron muy rápidamente, a los pocos instantes no se veían, eso no le importó a Wu fei, ya que estaba ocupado, aún dentro del suit. De pronto, una sonrisa se hizo notar en su rostro
- Con que ahí te diriges, bien, entonces, en ese lugar te daré a conocer como es mi justicia-
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Quien será aquel joven misterioso?..... A caso la relela será como la pintan? ( ¬¬ de donde salió esa pregunta)...., todo próximamente. Las partes de los otros niños estarán en el próximo capitulo, no se preocupen. Y como les dije antes, no soy muy buena escritora, así que cualquier incoherencia y palabra mal escrita, lo siento desde ahora. Les agradezco a mis Rika Shinigami, Hilde, Dorothy por apoyarme en este fic , y a algunas de las autoras de esta página, como las señoritas merle chan e izumi frontier que me inspiraron, DEJEN REVIEWS!!!!!!!!! ^_^ PORFIS!!!!!!!!
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Se podían escuchar muy levemente los ruidos que provenían de la ciudad central, todo a su alrededor parecía detenido. Heero se encontraba postrado en su cama , con una mano bajo su cabeza, la mirada perdida y cuerpo inmóvil. Estaba con los pies descalzos, vestía sus jeans y su singular polera verde oscura. La habitación se encontraba un tanto desordenada, los papeles estaban dispersos por todo el lugar, la computadora cerrada y una taza de café a medio beber ubicada en una pequeña mesa junto a su cama.
Todo indicaba que Heero llevaba una vida solitaria, igual que antes, lo único que lo mantenía ocupado era su querida colonia, donde se encontraba viviendo.
Pensaba en sus días como piloto Gundam y como él, junto con sus cuatro compañeros lograron la paz a través de muchas batallas y sacrificios de gente inocente. Solo había algo que extrañaba, y se encontraba en el pacífico reino Zanck, cumpliendo un sueño que produce esperanzas en el corazón de las personas.
Ya era hora de ir a su trabajo temporal, como mecánico de los pocos mobil suit que quedaban, ese era su aporte para la colonia. Empezó por leventarse desganadamente, y terminó de beber su taza de café, se estaba poniendo un jockey de color azul y ... Antes de que pudiera terminar de arreglarce, se escucharon tres golpes en la puerta principal, llamando la atención del joven. Se aproximó muy extrañado hacia ella, ya que nunca ha recibido visita alguna.
Al abrirla, se dio cuenta de que una figura familiar era quien le buscaba. - Noin ¡¿qué haces aquí?! - dijo Heero con su firme y profunda voz. - Hace mucho tiempo que no te veía Heero, ¿cómo haz estado?- dice con un tono serio fingiendo su alegría, sin recibir ninguna respuesta por parte del joven- He venido a buscarte para que regreses al reino Zanck-
- ¡¿Al reino Zanck?!... yo no tengo que hacer nada ahí- dijo el joven con indiferencia. - Han estado ocurriendo nuevos disturbios en el espacio, nuevas organizaciones rebeldes han surgido y desean tomar represarias contra la Tierra, y más aún contra las propias colonias. Quieren atacar al núcleo de ambas potencias, el cual es el reino Zanck, aniquilando a la señorita Relena y a Miliardo, ya que son los principales expansores de la paz- - Y quieres que proteja a Relena y Zechs ¿no es así?. Ese asunto no me concierne- le responde a Noin con un tono frío, mientras cierra la puerta, dándole un significado final a al conversación.
Noin, en un segundo intento detiene la acción de Heero y sostiene la puerta con su mano. - Escucha, si no quieres hacerlo por Miliardo, bien, pero por lo menos hazlo por la señorita Relena, ella es aún joven para perder la vida... debe aprender los significados de una paz duradera, encontrar las soluciones para detener las guerras sin sentido y salvar a las personas que forjarán un nuevo futuro- le dice con un tono de angustia- esos son los ideales de ustedes, los pilotos Gundam, es por eso que pido tu ayuda Heero, eres uno de los pocos que podría mantener segura a Relena-
Los ojos de Heero se cerraron, haciéndolo pensar sobre la situación, quería recordar a Relena, pero algo se lo impedía, no solo era su corazón de soldado, había algo más, pero no sabía que era, deseaba pelear otra vez, aún sabiendo lo desatrozo que sería, pero así era él, y nada ni nadie lo podría cambiar.
- Esta bien Noin, te acompañaré a Zanck. ¿Relena sabe de esto?- pregunta con expresión seria. - Si, está enterada sobre el asunto, al igual que Miliardo- - ¿Y sabe que haz venido hasta aquí en mi búsqueda?- dice con un tono sarcástico. - No, no le quise decir, ya que si lo hubiera sabido me habría detenido para no molestarte con sus asuntos y no perturbara la paz que tienes ahora- - Eso pensé- después de haber dicho eso, una leve, pero significativa sonrisa apareció en el rostro de Heero, como un recuerdo grato, lejano y pasajero. Esa misma tarde, Noin y Heero se fueron del conjunto de colonias L1 en un vuelo comercial con destino a la Tierra, sin levantar ninguna sospecha. Se dirigían a su destino sin saber que sus historias tomarían un giro inesperado.
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Año 197 después de la colonia, las guerras y discusiones políticas han terminado completamente. Los líderes de las colonias y de las naciones del mundo han formado un acuerdo que prohibe los instrumentos bélicos en cualquiera de las potencias. Algunos han tomado esta medida como fomentación a la paz duradera, pero otros, no han estado de acuerdo, decidiendo formar una nueva organización secreta, basada en la ideología de la Fundación Romefeler, y tomando el nombre de su organización conjunta Oz.
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En un remoto lugar, dentro de China, un combate se está dando inicio, reviviendo antiguos momentos, e involucrando a antiguos guerreros dolidos a causa de su corazón y espíritu.
- ¿Habré hecho lo correcto?, ¿a caso solo puedo demostrar lo que siento en un campo de batalla?. Volvió nuevamente esa inquietud, pensé que ya la había apartado de mi , que había descubierto mi verdadero objetivo, las palabras de Heero cobraron sentido mientras peleábamos, pero ahora , estoy totalmente confundido, ¿por qué?...-
Caminaba solo, sin rumbo fijo, había decido forjar nuevamente el clan del dragón y explorar el mundo que desconocía, por eso se fue, dejando a al preventora Sally.
- La paz no dura para siempre, al igual que la felicidad, eso lo se muy bien, la guerra arrasa con el alma de aquellos que creen que su ideología puede ayudar a las personas, pensamiento que emblandece las batallas y provoca más muertes. Esa es la enseñanza que me dejo Nataku , que siempre me ha acompañado, incluso ahora que no tengo mi Gundam. Regresó ese deseo que tenía de luchar contra alguien más fuerte que yo, tal vez, solo eso pueda calmar mi mente y mi alma de soldado, Trize tenía razón, seré un eterno esclavo de las guerras.-
Al cabo de un instante, el pensamiento de Wu fei se vio interrumpido a causa de una gran explosión, llamando repentinamente su atención. Pero, antes de que pudiera reaccionar, una persona salió sin previo aviso de los espesos arbustos, tropezándose con el joven. Ambas figuras se veían en el suelo, hasta que el extraño reaccionó primero, abriendo los ojos y levantándose fugazmente, poniéndose en una posición de alerta total.
Al notar eso, Wu fei le siguió , poniéndose de pie tranquilamente, pero, al instante, y con una gran rapidez, atacó al extraño. Demostraba habilidades enseñadas por su maestra Long, tenía una gran ventaja sobre la batalla, el extraño estaba totalmente acorralado, no podía atacar, y a penas podía defenderse.
- Deberías atacarme, ya que si no lo haces...- dijo con seriedad mientras veía el cansado rostro de su contrincante. El extraño trataba de adivinar alguno de los movimientos de Wu fei, cada vez que daba un golpe, más dificultades tenía. - ¡No me daré por vencido tan fácilmente!- gritó el extraño, mientras su respiración se hacia cada vez más agitada. - Date cuenta, ¡eres débil, no podrás ganarme!- dice con un tono desafiante, propinando una especie de patada en sus piernas, haciéndole caer - Ríndete, ya no tienes oportunidad- amenazando al extraño con el puño muy cerca de su cara. Durante un momento no reaccionó, sus ojos demostraban miedo y asombro- Lo reconozco, perdí. Si quieres puedes llevarme con tu superior, pero, aún así no te diré ni entregaré los planos- dijo muy decidido y con resignación.
Wu fei se sorprendió ante la respuesta del joven, retirando el amenazante puño, lentamente, mientras él extraño lo seguía con la mirada. - ¿Acaso eres un soldado?- preguntó en el momento que el joven extraño se ponía de pie. - Yo...- pero, antes de que pudiera responder, se escucharon unas múltiples pisadas que se dirigían al lugar. Eso infundió temor en el extraño, haciéndolo escapar furtivamente , dejando a Wu fei sin una respuesta. Se perdió entre los arbustos que se encontraban al otro lado del camino. No sabía si se volverían a encontrar, pero si sabía que ese muchacho le inquietaba por algún extraño motivo.
Siguió caminando, hasta que anocheció. Se encontró en los alrededores de un campamento, pero, tal fue su sorpresa al notar que era un campamento militar. - ¿Cómo es posible?, si decretaron la prohibición de armas en el mundo... vaya, veo que hay gente que aún gusta de la guerra- dijo sarcásticamente, escondido, analizando cada detalle, tal como lo hacía antes, cuando era el piloto del Gundam Shen Long.
- ¡Levanta las manos y no te muevas!- le gritó una voz que provenía de detrás de él - No hagas ningún movimiento o si no te dispararé- Era un mercenario que estaba de guardia esa noche, lo único que le respondió Wu fei fue una mirada fría, siguiendo las ordenes.
Lo encaminó hasta el campamento, siempre amenazado por el arma y con las manos arriba. La mayoría de los mercenarios se encontraban fuera de sus tiendas, puliendo armas, haciendo cálculos, en fin, lo que hacen los hombres de guerra. El comandante se encontraba entre ellos, tenía puesto un uniforme de la organización de Oz, eso era lo que le distinguía de los demás.
- Un joven espía. No sabía que el mundo se estaba enterando tan rápidamente - dijo el comandante. - Yo no soy ningún espía, solo soy un viajero que pasaba por estos lugares- le respondió Wu fei con los ojos cerrados sin importarle la reacción de los presentes. - No te creo, se que eres un espía, confiesa!!!!!!- grito el molesto comandante amenazando a Wu fei . De pronto, se escuchan simultáneas explosiones, todas en torno al campamento . - ¡Señor!, hemos sufrido rápidamente grandes pérdidas , casi la mayoría de nuestros hombres están heridos, y el equipo médico ha desaparecido- grita uno de los mercenarios, alarmado y desesperado. - ¡ Busquen al causante, y no lo dejen con vida!- ordena imponente a los soldados que le quedan.
Pero, justo antes de que pudieran cumplir lo encomendado , un mobil suit taurus salió de entre las llamas ,destruyendo todo a su paso. Los hombres corrían para salvar sus vidas, otros decidían perecer en ese lugar, solo por honor. Wu fei no retrocedió, el se quedó observando todo, hasta que decidió tomar cartas en el asunto. Se dirigió hacia los hangares destruidos, buscando algún mobil suit que haya quedado intacto, y así fue, la suerte estuvo con él, encontró un taurus. Se subió en el, y empezó a pilotearlo, trayéndole viejos recuerdos de su antigua vida. Primero, empezó a imitar al primer taurus, apoyándolo en la destrucción de la base enemiga.
- Que débiles son, no son capaces de detener algo tan insignificante como este mobil suit- dijo muy satisfecho. La destrucción cesó al cabo de unos pocos minutos, no quedó nada, solo devastación. - No tenías por que darme apoyo, yo mismo podía hacer el trabajo- se comunicó el piloto a través del monitor, pero... se trataba del mismo joven con que se había topado en el camino. - Nos volvemos a encontrar. Quien diría que eras piloto, con lo débil que eres, nadie lo hubiera adivinado- dijo Wu fei molestando al joven. - Que te parece si tenemos la revancha ahora, con los mobil suit ¿aceptas el desafío?- le propuso el extraño con una sonrisa. - ¡ Con mucho gusto!- y con ese grito, empezó la segunda parte de la obra. Ambos pilotos hacían su máximo esfuerzo, los taurus se movían con agilidad gracias a sus manipuladores. Nadie era espectador, solo había participantes. - Eres mejor con los suits que en la batalla cuerpo a cuerpo - dijo Wu fei mientras se defendía. - No eres el primero que me lo dice- respondió el joven, aún sonriendo y atacando el taurus del piloto Gundam.
Era una batalla que solo se podía comparar con la enfrentada por Heero y Wu fei, los dos pilotos daban lo mejor de si. - Ya basta, es hora de que terminemos con esto- dijo el joven decididamente. - Que!...- solo eso pudo decir Wu fei, ya que, sin darse cuenta, su contrincante realizó una brillante táctica, ubicándose en su retaguardia. Para terminar el combate, cortó las piernas del taurus, dejándolo sin posibilidad de reincorporarse a la pelea. - He ganado, peleaste muy bien, se nota que eres un piloto experimentado- dijo el joven muy cansado. Wu fei no reaccionaba, nunca nadie le había ganado, solo Trize. Su rostro mostraba un gran asombro, mientras recuperaba se normal respiración, aún con sus manos en los controles del suit.
- Mi trabajo aquí termino, espero que nos volvamos a ver- respondió el joven mientras volteaba el taurus. - Espera.... cual es tu nombre?- preguntó Wu fei aun conmocionado. - Ein, Ein Illynois, y el suyo?- - Wu fei Chang- respondió el decepcionado piloto mientras levantaba su cabeza para observar el monitor.
No hubo ni respuesta ni pregunta, ya que en ese mismo instante, el piloto y el suit se fueron a su siguiente destino, dejando este encuentro como algo pasajero. Se alejaron muy rápidamente, a los pocos instantes no se veían, eso no le importó a Wu fei, ya que estaba ocupado, aún dentro del suit. De pronto, una sonrisa se hizo notar en su rostro
- Con que ahí te diriges, bien, entonces, en ese lugar te daré a conocer como es mi justicia-
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Quien será aquel joven misterioso?..... A caso la relela será como la pintan? ( ¬¬ de donde salió esa pregunta)...., todo próximamente. Las partes de los otros niños estarán en el próximo capitulo, no se preocupen. Y como les dije antes, no soy muy buena escritora, así que cualquier incoherencia y palabra mal escrita, lo siento desde ahora. Les agradezco a mis Rika Shinigami, Hilde, Dorothy por apoyarme en este fic , y a algunas de las autoras de esta página, como las señoritas merle chan e izumi frontier que me inspiraron, DEJEN REVIEWS!!!!!!!!! ^_^ PORFIS!!!!!!!!