Capitulo 2: Una Triste Hechicera
En la entrada a un bosque muy espeso en medio de dos montañas, se encontraba Lina Inverse, aquella hechicera que había dejado la posada de Joe hacia unas dos horas. Lina, caracterizada por su espíritu siempre alocado y emprendedor, era ahora una persona muy tranquila, y mas que tranquila, tenia la mirada perdida en la tristeza. Una tristeza que venia desde lo mas profundo de su ser. Cansada de caminar tanto tiempo sin parar, se tumbó al pie de un árbol de los alrededores y se durmió placida y profundamente...
Es horrible!! Mi pobre hija...! - gritaba desconsolada una mujer de mediana estatura y que no debería tener mas de unos 30 años. Tranquilícese señora, todo va a salir bien... - dijeron algunas personas de entre la multitud de un pueblecito de montaña.
La mujer tenia en sus manos un escrito, algo como una carta, pero mas que eso parecía una amenaza. "tengo a vuestra niña. Si la queréis de vuelta y viva, entregadme vuestro oro." Así de sencilla pero así de cruel sonaba el significado de esa amenaza y chantaje.
Lina y Naga, la Serpiente, que se encontraban allí no pudieron resistir la curiosidad de preguntar que es lo que pasaba. Cuando lo supieron, decidieron hacerse cargo de la situación, como de costumbre, sin preocupaciones. A cambio, pidieron alojamiento gratis durante una semana en el pueblo. Los habitantes accedieron encantados si conseguían traer de vuelta a la pequeña.
Las dos hechiceras partieron de inmediato hacia el lugar donde se suponía que debía estar el culpable. Supusieron que habían llegado al lugar correcto, no solo por el refugio casi en ruinas que se presento frente a ellas, nada raro por esos lados, excepto que estaba en medio de un precipicio, pero lo que mas les llamo la atención fue la criatura que estaba sentada en una roca delante de la cueva. Era una especie de cruce entre troll y orco, muy extraña, con los ojos rojos, sin pupilas, llenos de maldad. Su tez pálida, de color verde oliváceo, Sus grandes y amorfas manos resaltaban por sus tres dedos que terminaban en grandes zarpas.
¿Sois las que me traen el oro que pedí amablemente a aquel pueblo? - preguntó cínicamente el monstruo. Oooohohoho! Eso es todo? La verdad me esperaba un bicho mucho menos feo que tu...! - dijo burlonamente la hechicera de cabellos negros. ¿Donde tienes la niña, seas lo que seas...? - preguntó Lina, con un tono en leve enfado. Calma, calma, señoritas. ¿Donde esa vuestra educación? Me presentare: me llamo - haciendo una reverencia burlona - Lobster y como podéis observar soy medio orco y medio troll... y ahora podríais deleitarme con vuestros nombres? Esta es Naga, mi mano derecha ¿¿Como?? ¿¿Por qué me dices algo así?? - protestó Naga No es momento de discutir ahora! - exclamó la pelirroja. Y entonces ¿tu, quien eres, bajita pelirroja? - continuó burlándose la criatura Yo soy Lina, Lina Inverse... Donde esta la niña? ¿Lina? ¿La gran Lina Inverse? ¿La que todo el mundo conoce y que los mismos dragones le tienen miedo, es esta pequeña mocosa que tengo ante mis narices? - pregunto entre sorprendido y contento. Eso es... - Lina intento aguantarse la rabia de alguna forma ante aquella humillación. Entonces, si Lina Inverse esta aquí, supongo que no es por negociar, sino por otra cosa...
La maniobra fue tan rápida que las hechiceras casi no tuvieron tiempo de esquivar los cuchillos que la vil criatura les lanzó. Lina consiguió esquivarlos y uno pasó rozando su rostro, cortándole algunos de sus rojizos cabellos. Naga en cambio no tuvo tanta suerte y no pudo esquivar el que se le clavo en la parte superior de la pierna derecha, y cayo al suelo sin poder moverse. Naga! Estas bien?? - preguntó al percatarse Lina Acaba con el o nos matara sin contemplación! - le ordeno la hechicera morena. Bien! - y Lina se encaró hacia Lobster.
Lina preparo entre sus manos el conjuro de bola de fuego, lo lanzó hacia la despreciable criatura. La explosión retumbó por los alrededores de donde se encontraban las hechiceras. Al disiparse el humo, la pelirroja contempló horrorizada como en el lugar de la horrible criatura había el cuerpo de una persona de muy poca edad, junto a una especie de jaula de madera, con la puerta arrancada... Lina, al comprobar que esa persona no debía superar los 4 años de edad, se desplomó, desconsolada y destrozada, al ver que había cometido un error con la magia, con su apreciada magia...
Al parecer si había herido al monstruo, pero este consiguió poner la niña de escudo y logro escapar...
NO!!! - La pelirroja se levanto otra vez del suelo donde se había dormido, aun estaba toda nerviosa y sudorosa, con los ojos medio en lagrimas. - Después de aquello se atreve a volver a atacar a las personas... Nunca se lo perdonare...! -
La pelirroja se dirigió hacia el pueblecito de Menor que se encontraba justo detrás del bosque que tenia en frente. Tenia claro que se volvería a enfrentar con Lobster, y que esta vez, ganaría...
En la entrada a un bosque muy espeso en medio de dos montañas, se encontraba Lina Inverse, aquella hechicera que había dejado la posada de Joe hacia unas dos horas. Lina, caracterizada por su espíritu siempre alocado y emprendedor, era ahora una persona muy tranquila, y mas que tranquila, tenia la mirada perdida en la tristeza. Una tristeza que venia desde lo mas profundo de su ser. Cansada de caminar tanto tiempo sin parar, se tumbó al pie de un árbol de los alrededores y se durmió placida y profundamente...
Es horrible!! Mi pobre hija...! - gritaba desconsolada una mujer de mediana estatura y que no debería tener mas de unos 30 años. Tranquilícese señora, todo va a salir bien... - dijeron algunas personas de entre la multitud de un pueblecito de montaña.
La mujer tenia en sus manos un escrito, algo como una carta, pero mas que eso parecía una amenaza. "tengo a vuestra niña. Si la queréis de vuelta y viva, entregadme vuestro oro." Así de sencilla pero así de cruel sonaba el significado de esa amenaza y chantaje.
Lina y Naga, la Serpiente, que se encontraban allí no pudieron resistir la curiosidad de preguntar que es lo que pasaba. Cuando lo supieron, decidieron hacerse cargo de la situación, como de costumbre, sin preocupaciones. A cambio, pidieron alojamiento gratis durante una semana en el pueblo. Los habitantes accedieron encantados si conseguían traer de vuelta a la pequeña.
Las dos hechiceras partieron de inmediato hacia el lugar donde se suponía que debía estar el culpable. Supusieron que habían llegado al lugar correcto, no solo por el refugio casi en ruinas que se presento frente a ellas, nada raro por esos lados, excepto que estaba en medio de un precipicio, pero lo que mas les llamo la atención fue la criatura que estaba sentada en una roca delante de la cueva. Era una especie de cruce entre troll y orco, muy extraña, con los ojos rojos, sin pupilas, llenos de maldad. Su tez pálida, de color verde oliváceo, Sus grandes y amorfas manos resaltaban por sus tres dedos que terminaban en grandes zarpas.
¿Sois las que me traen el oro que pedí amablemente a aquel pueblo? - preguntó cínicamente el monstruo. Oooohohoho! Eso es todo? La verdad me esperaba un bicho mucho menos feo que tu...! - dijo burlonamente la hechicera de cabellos negros. ¿Donde tienes la niña, seas lo que seas...? - preguntó Lina, con un tono en leve enfado. Calma, calma, señoritas. ¿Donde esa vuestra educación? Me presentare: me llamo - haciendo una reverencia burlona - Lobster y como podéis observar soy medio orco y medio troll... y ahora podríais deleitarme con vuestros nombres? Esta es Naga, mi mano derecha ¿¿Como?? ¿¿Por qué me dices algo así?? - protestó Naga No es momento de discutir ahora! - exclamó la pelirroja. Y entonces ¿tu, quien eres, bajita pelirroja? - continuó burlándose la criatura Yo soy Lina, Lina Inverse... Donde esta la niña? ¿Lina? ¿La gran Lina Inverse? ¿La que todo el mundo conoce y que los mismos dragones le tienen miedo, es esta pequeña mocosa que tengo ante mis narices? - pregunto entre sorprendido y contento. Eso es... - Lina intento aguantarse la rabia de alguna forma ante aquella humillación. Entonces, si Lina Inverse esta aquí, supongo que no es por negociar, sino por otra cosa...
La maniobra fue tan rápida que las hechiceras casi no tuvieron tiempo de esquivar los cuchillos que la vil criatura les lanzó. Lina consiguió esquivarlos y uno pasó rozando su rostro, cortándole algunos de sus rojizos cabellos. Naga en cambio no tuvo tanta suerte y no pudo esquivar el que se le clavo en la parte superior de la pierna derecha, y cayo al suelo sin poder moverse. Naga! Estas bien?? - preguntó al percatarse Lina Acaba con el o nos matara sin contemplación! - le ordeno la hechicera morena. Bien! - y Lina se encaró hacia Lobster.
Lina preparo entre sus manos el conjuro de bola de fuego, lo lanzó hacia la despreciable criatura. La explosión retumbó por los alrededores de donde se encontraban las hechiceras. Al disiparse el humo, la pelirroja contempló horrorizada como en el lugar de la horrible criatura había el cuerpo de una persona de muy poca edad, junto a una especie de jaula de madera, con la puerta arrancada... Lina, al comprobar que esa persona no debía superar los 4 años de edad, se desplomó, desconsolada y destrozada, al ver que había cometido un error con la magia, con su apreciada magia...
Al parecer si había herido al monstruo, pero este consiguió poner la niña de escudo y logro escapar...
NO!!! - La pelirroja se levanto otra vez del suelo donde se había dormido, aun estaba toda nerviosa y sudorosa, con los ojos medio en lagrimas. - Después de aquello se atreve a volver a atacar a las personas... Nunca se lo perdonare...! -
La pelirroja se dirigió hacia el pueblecito de Menor que se encontraba justo detrás del bosque que tenia en frente. Tenia claro que se volvería a enfrentar con Lobster, y que esta vez, ganaría...
